Efecto de Lactobacillus bulgaricus y Streptococcus thermophylus en la prevención de enterocolitis en terneros Mg. Rosario Elera Ojeda RESUMEN La presente investigación tuvo como objetivo determinar el efecto de Lactobacillus bulgaricus y Streptococcus thermophylus en la prevención de enterocolitis en terneros. Para ello se reactivaron los cultivos microbianos en leche fresca estéril. Se organizaron diez terneros recién nacidos en grupos problema y testigo; ambos grupos fueron alimentados con leche materna, alfalfa y concentrado; adicionalmente los terneros del grupo problema recibieron a las 6 horas del nacimiento y luego dosis semanales, 30 ml de probióticos hasta el mes de edad. Se midieron durante cuatro semanas parámetros productivos como peso vivo, ganancia de peso y altura; y a los 50 días se realizaron mediciones de calcio, fósforo, hemoglobina, hematocrito, recuentos de leucocitos, neutrófilos, linfocitos y segmentados. El peso, la altura y ganancia de peso fueron mayores en los terneros tratados con L. bulgaricus y S. thermophylus desde la cuarta semana y se presentaron diferencias significativas entre ambos grupos con los otros parámetros evaluados. Los resultados permitieron concluir que L. bulgaricus y S. thermophylus previenen la enterocolitis en terneros contribuyendo a instalar una flora beneficiosa en el tracto intestinal, cuyo uso en la crianza de terneros permite incrementos en peso vivo y altura. Palabras claves: Probiótico, thermophylus, terneros. Lactobacillus bulgaricus, Streptococcus ABSTRACT Objective of this research was to determine the effect of Lactobacillus bulgaricus and Streptococcus thermophylus in preventing enterocolitis in calves. To do so were reactivated microbial cultivation in sterile fresh milk. Problem and witness organized 10 newborns in groups calves; both groups were breastfed, alfalfa and concentrated; Additionally the problem group calves received 6 hours of birth and then weekly dose 30 ml of probiotics until age. Productive as live weight, gain weight and height; parameters were measured for four weeks and 50 days completed measurements of calcium, phosphorus, hemoglobin, hematocrit, leukocytes, neutrophils, lymphocyte counts and segmented. The weight, height, and weight gain were higher in calves treated with L. bulgaricus and S. thermophylus from the fourth week, and had significant differences between the two groups with other parameters evaluated. The results allowed to conclude L. bulgaricus and S. thermophylus to prevent enterocolitis in calves contributing to install a beneficial flora in the intestinal tract, whose use in the rearing of calves can increases in live weight and height. Keywords: Probiotic, Lactobacillus bulgaricus, Streptococcus thermophylus, calves. 2 INTRODUCCIÓN En la actualidad la Unión Europea prohíbe el uso de antibióticos como preventivos y terapéuticos en los animales domésticos utilizados en la alimentación humana, debido a que podrían causar resistencia antibacteriana por el consumo de carnes con restos de estos antimicrobianos. Por lo que existe la necesidad de disminuir o eliminar los problemas gastrointestinales que se producen durante los primeros meses de vida de los terneros, utilizando productos diferentes a los antibióticos que no afecten su normal desarrollo (Chongo et al., 1985: 23). Datos obtenidos en Cuba plantean que las mayores incidencias de muertes en terneros son debido a las enfermedades entéricas Chongo et al, (1985: 56). Según Schaasfma (2001:38) la ingesta de bacterias lácticas, como Lactobacillus bulgaricus, Streptococcus thermophylus y otros probióticos mejoran la tolerancia a la lactosa y limitan las colonizaciones de microorganismos patógenos, en el intestino de quienes lo consumen; este hecho puede disminuir el riesgo a desarrollar infecciones intestinales como las diarreas. Esto debido a que estimulan el sistema inmunológico, la producción de vitaminas del complejo B y reduce las actividades enzimáticas implicadas en el desarrollo de lesiones malignas a nivel del colon. Otros estudios, realizados por los mismos autores, sugieren que la ingesta de bacterias lácticas como L. bulgaricus y S. thermophylus en la alimentación animal constituye una alternativa para evitar enfermedades infecciosas gastrointestinales. 3 Los terneros del “Centro Productivo Granja FAZ” de la Facultad de Zootecnia de la Universidad Nacional de Piura, atraviesan por problemas intestinales durante los primeros meses de vida los cuales son rutinariamente tratados con antibióticos; los cuales podrían ser reemplazados con el uso de bacterias lácticas, obteniendo los beneficios anteriormente indicados. La presente investigación tuvo como objetivo determinar el efecto de Lactobacillus bulgaricus y Streptococcus thermophylus en la prevención de enterocolitis en terneros y evaluar la acción benéfica de estos microorganismos durante el primer mes de edad permitiendo prevenir enfermedades entéricas y alcanzar una mejor productividad de los animales. MATERIAL Y MÉTODOS 2.1 MATERIALES MATERIAL BIOLÓGICO 10 terneros recién nacidos en el “Centro Productivo Granja FAZ” de la Facultad de Zootecnia de la Universidad Nacional de Piura Granja Cultivos liofilizados de Lactobacillus bulgaricus y Streptococcus thermophylus. 2.2 MÉTODOS Y TÉCNICAS 2.2.1 Organización de los terneros en grupos problema y testigo Después de cada nacimiento, los terneros fueron organizados en dos grupos experimentales: problema y testigo, con cinco terneros cada uno. 4 Ambos grupos fueron alimentados con una dieta base constituida por leche materna, alfalfa y concentrado. El concentrado se elaboró con 14% de maíz, 3.9% de torta de soya, 44.4% de polvillo, 10% de pasta y pepa de algodón, 12% de gallianaza, 2.9% de aceite de pescado, 0.4% de sal común, 0.2% de suplamín, 1% de conchuela y 1% de bicarbonato de sodio Adicionalmente sólo a los terneros del grupo problema se les suministró probióticos. A cada ternero se le asignó un nombre y fue marcado adecuadamente para facilitar su alimentación y el monitoreo durante la fase experimental. 2.2.2 Reactivación y conservación de los probióticos Los probióticos constituidos por cultivos de L. bulgaricus y S. thermophylus fueron reactivados a partir de cultivos liofilizados. Para la reactivación se utilizó leche seleccionada proveniente de vacas sanas de buena calidad microbiológica; libre de sustancias inhibidoras; acidez de 0.14 a 0.15% en ácido láctico; grasa no menor de 3% y densidad no menor de 1.029. Así mismo, grado refractómetro de suero no menor de 36.5, prueba de reductasa mayor de 5 horas, tiempo de coagulación menor a 3 horas, contenido de sólidos no grasos de 9.0 a 9.4 y sólidos totales no menor de 11.7. La carga microbiana se evaluó en agar extracto de malta y agar violeta rojo bilis; los resultados obtenidos se compararon con la Norma Cubana 38-02-07 (1987:87) que establece los límites máximos de contaminantes microbiológicos en yogurt. 5 Una vez reactivados los cultivos lácticos se colocaron en recipientes estériles, tapados y rotulados adecuadamente, luego fueron conservados en refrigeración entre 3 ± 1 ºC. Los cultivos reactivados se utilizaron sólo hasta 15 días después de la fecha de su preparación (Pujato, 2002: 1). 2.2.3 Formulación de la dieta base La dieta de los terneros de ambos grupos experimentales estuvo constituido por leche materna, alfalfa y concentrado para terneros. La leche materna se les proporcionó desde el nacimiento, 04 litros diarios en dos tomas; alfalfa ad libitum a partir de los 8 días de edad y con concentrado para terneros a partir de los 8 días de edad, 1 kg diario. 2.2.4 Dosis y suministro de los probióticos A cada ternero del grupo problema, se le proporcionó 30 ml de los probióticos a una concentración de 8 x 108 unidades formadoras de colonia por mL (UFC/ml) de cada cultivo. Las primeras dosis de los probióticos fueron suministradas a las 06 horas después del nacimiento y las siguientes, cada semana hasta cumplir el mes de edad. Se utilizaron jeringas descartables de 50 ml. 2.2.5 Control de parámetros productivos En los 10 terneros de los grupos problema y testigo se realizaron controles semanales de peso vivo, ganancia de peso y altura. 6 El peso vivo se determinó utilizando una balanza de piso y los valores obtenidos en libras fueron convertidos a kilos; la ganancia de peso se calculó cada semana por diferencia de pesos entre dos semanas consecutivas y la altura se midió desde la “cruz” del ternero hasta el nivel del suelo, utilizando una cinta métrica. 2.2.6 Control del estado de salud En los terneros de los grupos problema y testigo que presentaron síntomas de enfermedad se realizaron controles semanales de pulso, frecuencia respiratoria, frecuencia cardiaca y temperatura. El pulso se midió mediante un tensiómetro digital, en la arteria caudal. La frecuencia respiratoria se determinó cuando el animal se encontraba en reposo, contando el número de respiraciones por minuto. La frecuencia cardiaca se determinó utilizando un estetoscopio y contando el número de latidos por minuto entre la cara interna del brazo y el tercer espacio intercostal. La temperatura se tomó en la mucosa del recto mediante un termómetro veterinario. 2.2.7 Control de valores hemoquímicos y hematológicos. A los 50 días de edad se realizaron mediciones de valores hemoquímicos y hematológicos a los 10 terneros de los grupos problema y testigo. Se extrajeron de la vena yugular 4 ml de sangre, sin anticoagulante, para los valores hemoquímicos anticoagulante EDTA para los valores hematológicos. 7 y 3 ml con Los valores hemoquímicos se determinaron en sueros sanguíneos, en los cuales se cuantificó la concentración de calcio mediante el método de Cresolfataleína Complexona y la concentración de fósforo por el método de Fiske Subbarow (Wittwer y Bohmwald,1988:151 ). Entre los valores hematológicos se realizaron mediciones de hemoglobina y hematocrito. Además, se hicieron recuentos de leucocitos en cámara de Neubauer; y los recuentos de neutrófilos, linfocitos y segmentados se hicieron en un frotis sanguíneo teñido con la técnica de Romanowski (Wittwer y Bohmwald, 1988:130). 2.2.8 Análisis de datos Los datos de los indicadores, los valores hemoquímicos y los hematológicos correspondientes a los grupos problemas y testigos, fueron organizados en Tablas y Figuras; posteriormente fueron sometidos a la prueba “t” de student para comparación de promedios de los dos grupos para cada indicador, con una probabilidad de error del 5%. Con los valores obtenidos se determinó el efecto que L. bulgaricus y S. thermophylus tienen en la prevención de enterocolitis que presentan los terneros del “Centro Productivo Granja FAZ” de la Universidad Nacional de Piura. 8 RESULTADOS Las ganancias de peso y altura de los terneros de los grupos problema y testigo varían durante las cuatro semanas después del nacimiento (Figuras 1 y 2). Cuando se analiza la ganancia de peso de los terneros de ambos grupos se observa en la Figura 1, que la ganancia de peso fue mayor en el grupo que ha sido alimentado con la dieta base más probióticos. Los valores hemoquímicos de calcio y fósforo séricos (Tabla 1) muestran que sólo un ternero del grupo problema sobrepasó el valor referencial de calcio sérico; sin embrago, el fósforo sérico sobrepasó al valor referencial en todos los terneros del grupo problema tratados con L. bulgaricus y S. thermophilus y los del grupo testigo se encontraron en el rango referencial. En la Tabla 2, se observa que los valores hematológicos de hematíes, hemoglobina, hematocrito, neutrófilos, linfocitos, leucocitos y segmentados en los terneros de ambos grupos varían, siendo mayores en el grupo problema. 9 G a n a n c i a d e p e s o Semanas p<0.05 Figura 1. Ganancia de peso (kg) de terneros alimentados con dieta base más probióticos (problema); y alimentados sólo con dieta base (testigo) durante cuatro semanas después del nacimiento. 10 G a n a n c i a a a b a d e a l t u r a Semanas (a) : p<0.05 ; (b) : p>0.05 Figura 2. Ganancia de altura (cm) de terneros alimentados con dieta base más probióticos (problema); y alimentados sólo con dieta base (testigo) durante cuatro semanas después del nacimiento. 11 Tabla 1. Valores hemoquímicos de calcio y fósforo séricos en terneros alimentados con dieta base más probióticos (problema); y alimentados sólo con dieta base (testigo) después de 50 postnacimiento. Grupo* Nombre del ternero P Payaso mg/dL Rango referencial Fósforo mg/dL 9.08 9.68 Puka 10.42 8.75 Negro 9.70 Consentida 8.40–11.00 8.68 12.48 8.72 8.50 4.9 10.04 8.15 Bambi 9.69 5.90 Manolo 10.49 6.80 Browni 10.20 Noelia 9.30 7.40 Flaca 10.80 7.80 Promedio 10.10 7.12 Cholazo Promedio T Calcio 8.40 – 11.00 p>0,05 7.70 p<0,05 12 Rango referencial 4.3–7.8 4.3 – 7.8 Tabla 2. Valores hematológicos de hematíes, hemoglobina (Hb), hematocrito (Ht), neutrófilos (Neu), linfocitos (Lin), leucocitos (Leu) y segmentados (Seg) terneros de los grupos problema (P) y testigo (T) a los 50 días después del nacimiento. Grupo* P T Nombre del ternero Hematíes (Mmc*103) Hb (g%) Ht (%) Neu (%) Lin (%) Leu (mmc) Seg (%) Payaso 7 550 13.65 43 23 77 7 050 23 Puka 7 350 13.05 41 62 38 9 500 62 Negro 6 450 10.35 32 5 95 12000 5 Consentida 6 250 9.75 30 31 69 10 200 31 Cholazo 7 200 13.20 40 21 64 6 900 21 Promedio 6 960 12.0 37.2 28.4 68.6 9 130 28.4 Bambi 6 750 11.25 35 16 84 6 400 16 Manolo 6 650 10.95 34 42 57 7 000 40 Browni 6 450 10.35 32 43 57 9 500 43 Noelia 7 450 13.35 42 33 67 8 300 33 Flaca 6 850 11.55 36 34 66 8 600 34 Promedio 6 830 11.5 35.8 33.6 66.2 7 960 33.2 p>0,05 13 DISCUSIÓN En los Gráficos 1 y 2, se aprecian que los animales del grupo problema superan en ganancia de peso vivo y tamaño a los del grupo testigo; es necesario referir que un ternero que no recibió los cultivos probióticos de L. bulgaricus y S. thermophylus presentó diarrea verdosa y fiebre de 41ºC durante 2 días, por lo que tuvo recibir tratamiento con antibióticos. Los terneros del grupo problema, que recibieron el probiótico, no presentaron ningún malestar, y por el contrario se observó un aumento del consumo de alimento. “Browni” ternero del grupo testigo presentó diarrea y fiebre durante la tercera semana de vida, lo cual se ve reflejado en la pérdida de peso (Gráfico 1); este resultado corrobora lo planteado por Owen y Larson (1987: 44) y Fuller y Gibsen (1997: 19), los cuales exponen que el consumo de probióticos disminuyen la incidencia de diarreas y desórdenes inmunológicos y que juega un papel fundamental en la flora intestinal, y también con Coconier et al. (1993: 26) que plantean que los probióticos provocan la disminución de la frecuencia y duración de las diarreas asociadas al uso de antibióticos, infección por rotavirus y quimioterapias. Fuller y Gibsen (1997: 19) informan que la aplicación de bacterias lácticas benéficas a terneros al nacer y mantenidas en los primeros días de vida permiten reducir la aparición de molestias gastrointestinales, hecho que influye positivamente en el desarrollo de los terneros; de igual forma Owen y Larson (1987: 44) plantean que se ha manifestado disminución de las incidencias de diarreas en terneros que han recibido tratamientos con Lactobacillus. 14 Los resultados obtenidos en los pesos de los terneros del grupo problema tratados con 30 mL de los cultivos de L. bulgaricus y S. thermophylus, y los terneros del grupo testigo a quienes no se le suministró los probióticos, a las 6 horas de nacido, no presentaron diferencias significativas. Sin embargo, pasado los 15 días se aprecia que los animales tratados con probióticos van presentando diferencias superiores en los pesos en comparación con los animales que no lo recibieron. Estos resultados demuestran que los cultivos probióticos proporcionan beneficios como: mejora del estado de salud y bienestar del animal, mejora de la digestibilidad de la lactosa, haciéndola más asimilable lo que repercute en un mayor incremento del peso. En general los animales bien nutridos son más resistentes a las infecciones bacterianas, parasitarias y virales, en comparación a aquellas que no lo están. Esto es atribuido a una mejor integración de los tejidos corporales, una mayor inmunidad, a un incremento de la regeneración de la sangre y a otros factores (Saarela et al., 2000: 197). En el Gráfico 2 se observa también que en los animales tratados con los probióticos la altura es superior con respecto a los testigos. Knudsen (2000: 23) plantea que la administración de probióticos en terneros promueve el crecimiento como también reduce las muertes y debilidades causadas por situaciones estresantes. Como se observa en la Tabla 2 se presenta la ganancia promedio semanal de los grupos tratados con probióticos y los que sólo recibieron la dieta basal sin probióticos, observando que desde el principio de la aplicación de los cultivos probióticos de L. bulgaricus y S. thermophylus, los terneros que fueron 15 tratados, estos le proporcionaron una mayor ganancia de peso con respecto a los terneros testigos; lo que confirma lo planteado por varios autores relacionado con la ganancia por el animal, traducido por la estimulación de los microorganismos en la síntesis de vitaminas y otros nutrientes, proporcionando como consecuencia un estado de buena salud lo que se traduce en un factor rentable para la ganadería. (CAC.1997: 1; Brizuela et al., 1998: 53). La ganancia de peso se hace más visible en el grupo problema, en la tercera y cuarta semana. En la Tabla 1 se presenta los resultados hemoquímicos de calcio y fósforo séricos de los terneros de los grupos problema (P) y testigo (T) después de 50 días después del nacimiento. Los resultados encontrados en ambos grupos presentan diferencias no significativas, pues los valores se encuentran dentro del rango referencial; esto no corrobora lo planteado por Maxine (1984: 325) que señala que las anormalidades del suero sanguíneo con calcio bajo y fósforo superior, se presenta en el raquitismo, síndrome de mala absorción y deficiencias alimentarias. Aunque los terneros muestran resultados hemoquímicos de calcio dentro de los parámetros fisiológicos (8.4-11.0 mg/100ml), se observa que los tratados con L. bulgaricus y S. thermophylus, se acerca más a los valores de los parámetros, lo que coincide con lo planteado por Salminen et al., (1998: 30) quienes han observado que la absorción del calcio y magnesio en el intestino se ven incrementadas después de consumir probióticos. Tartar y Vargas, (1997: 7) expresaron que el uso de probióticos en la ganadería ha demostrado ventajas innumerables, ya que disminuye el costo de alimentación, aumentando la capacidad de asimilación de proteínas, energía y minerales, los resultados obtenidos en esta investigación confirman que la 16 ganancia de peso y talla se ve favorecida por el consumo de L. bulgaricus y S. thermophylus. En la Tabla 2 se presentan los análisis hematológicos realizados a los 50 días de edad, a los terneros del grupo problema que recibieron además de la dieta base L. bulgaricus y S. thermophylus, y los terneros del grupo testigos a quienes se les proporcionó únicamente la dieta base, los resultado muestran que el hematocrito, en los testigos, se encuentra por debajo de los parámetros normales y los linfocitos están incrementados. Estos resultados pueden presentarse cuando un animal se encuentra en recuperación después de una enfermedad infecciosa. Coles (1968: 54) expresa que un aumento de los linfocitos indica disminución de la gravedad del animal. CONCLUSIONES 1. Lactobacillus bulgaricus y Streptococcus thermophylus previenen la enterocolitis en terneros contribuyendo a instalar una flora beneficiosa en el tracto intestinal, 2. El uso de Lactobacillus bulgaricus y Streptococcus thermophylus en la crianza de terneros permite lograr un incremento del peso vivo, altura y ganancia de peso. 17 RECOMENDACIÓN Capacitar a los profesionales de las empresas pecuarias en las técnicas de preparación y conservación de cultivos lácticos, así como en su aplicación a neonatos bovinos. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 1. BRIZUELA, M. A. PÉRES; YOVANKA. 1998. Mecanismo de acción de los probióticos. ACPA.2, Vol.17. p: 53-55. 2. CAC. 1997. General requiremens (Food Hygiene). Supplment to vol. 1. B. Joint FAO/WHO Food Standartds Programe, FAO, Rome. 3. CHONGO, B. MARRERO, D. ZAMORA A Y R . GARCIA. 1985. Avances en la crianza de terneros y novillas. 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