Reglas de oro para cumplir tus propósitos Comienzas un nuevo ciclo. Puede ser el primer día del año, del mes, de la semana… O quizás es la primera hora del día o el primer minuto. Lo importante es que se te ha metido en la cabeza que es momento de… ¡Cambiar tu vida! Todo empieza con un ‘propósito’. Esa evocadora magia que corre por nuestro cerebro hasta llegar a nuestros labios, los cuales articulan una a una las palabras de una frase que puede llevar hasta el cielo nuestra autoestima, transformándonos en verdaderos campeones. Pero… y siempre hay un ‘pero’. Ese diminuto sortilegio que arrojamos sobre nosotros nos puede condenar al ‘círculo vicioso’ de proponernos cosas una y otra vez, pero nunca cumplirlas. ‘Voy a dejar de fumar’, ‘Bajaré esos kilitos de más’, ‘Correré un maratón’, ‘Estrenaré auto’, ‘Encontraré el amor’, ‘Ahorraré para mi viaje’ o ‘Esta vez sí me caso’. Seguro has escuchado estas frases muchas veces, quizás hasta tú las has dicho, no una vez, sino muchas, tantas que has perdido la cuenta… Pero… ¿Por qué no se han realizado? Tal vez factores externos jugaron en contra o nadie nos ha explicado cuál es el camino para lograr algo. Y es que nadie lo sabe todo. Aunque en este ebook nos enfocaremos mucho en las metas financieras, este método puedes aplicarlo para lograr todo tipo de objetivos. No olvides imprimir el formato que incluiremos y que te servirá de guía en tu viaje al éxito. Antes de empezar un pequeño cuento… Una de mis mejores amigas me contó la historia de su hermano. Un fumador empedernido que consumía cigarro tras cigarro sin parar. Hasta que un día ‘inexplicablemente’ para el mundo dejó de hacerlo. Pero el relato no acaba ahí, al día siguiente empezó a correr. A correr tanto que nadie lo creía. Tanto que hoy corre maratones alrededor del mundo por el puro gusto de hacerlo. ¿Qué tiene de especial esta historia? Piénsalo unos segundos. Utiliza una hoja en blanco para escribir qué hace especial esta historia o si imprimiste este ebook usa este espacio para hacerlo. Cuando termines pasa la hoja. Tres reglas de oro 1. Plantearse una meta posible: Cuando nos proponemos lograr algo debemos ser realistas y honestos al 100 por ciento con nosotros mismos. Si nunca has escalado en tu vida, no trates de subir al Kilimanjaro Metas pequeñas sí hacen la diferencia al igual que pequeñas cantidades hacen realidad un gran ahorro. 2. Planeación: Tener una buena planeación se vuelve clave para conseguir lo que buscamos. Desear algo no es suficiente, para lograrlo se necesita poner en movimiento una serie de acciones y estrategias que allanen nuestro camino. 3. Ejecución: En este punto es donde casi todos fallamos. Tenemos un propósito, hicimos un plan infalible pero algo pasa. En la historia anterior se conjugan estos tres elementos. “Dejar de fumar” es una meta 100% posible. Plan: sustitución de un hábito por otro. Ejecución: Empezar a correr. Pero ¿Cómo no fallar? El éxito es la repetición constante de los buenos hábitos Muchos de nuestros propósitos están firmemente relacionados con la creación de hábitos ‘buenos’. Muchos de nosotros hemos oído hablar de ese experimento donde se pone una rata en un laberinto. A la salida, al roedor le espera una recompensa o en este caso un chocolate. Al principio, la rata empieza a buscar el camino sin mucho ánimo y le toma algún tiempo encontrar la salida. En este punto podrías pensar que es una rata no muy brillante, porque le tomó tanto tiempo salir del calabozo. Rutina Disparador ESTÍMULO Recompensa Sin embargo, la siguiente vez lo hace más rápido y la tercera todavía más rápido. Durante sus primeros intentos por salir del laberinto, la rata inicia un proceso de aprendizaje y es cuando su cerebro tiene mayor actividad. Conforme entiende el laberinto, su cerebro deja de dedicarle tiempo de reflexión al proceso. Se vuelve algo automático: un hábito. Como el de levantarse al escuchar el despertador, ahorrar cierta cantidad de dinero cada mes o dejar las llaves de la casa en la cubetita del estante. No lo pensamos ni un segundo o ¿sí? Daniela cada día, entre 12:00 y 12:30, se pone de pie y camina hasta el Starbucks para comprar un ventti latte descafeinado frío con leche de soya. Rutina Estímulo click Daniela necesita un café para sentirse bien Recompensa Dany activa este proceso porque ‘necesita un break’ a la mitad de su jornada de trabajo. Al consumir su café se siente lista para seguir. Una vez que has desarrollado un hábito. El cerebro recuerda una sensación agradable de satisfacción o de triunfo, la cual nos impulsa a repetir un actividad una y otra vez. El hábito de ahorrar ¿Qué hábitos positivos y negativos tienes en relación con tu dinero? ¿Has pensando alguna vez en ello? El dinero es algo muy importante en nuestras vidas, tanto que nos hace felices. Sin embargo, nos es siempre complicado manejarlo de forma eficiente y en nuestro beneficio. Tanto, que igual que vino se va. Desarrollar el hábito de ahorrar tiene dos principales obstáculos. 1.- Decidir cuánto podemos ahorrar: Usualmente pensamos que podemos ahorrar grandes cantidades porque así llegaremos a una suma mayor muy rápido, pero a la larga ese esfuerzo puede hacer que ‘guardar dinero se vuelva un sacrificio doloroso’. Establecer un monto de ahorro requiere que evalúes tus gastos, tus ingresos y lo que deseas reunir. A partir de esto, podrás definir un monto y un plazo. Quizás puedas levantar una pesa de ocho kilos fácilmente una vez, la siguiente te costará un poco más de esfuerzo y la tercera más. Así hasta que ya no puedas. Pero si levantas una de dos kilos no sentirás tanto esfuerzo y podrás hacerlo varias veces sin agotarte ni lastimarte. ¿Con cuál te quedas con la de ocho o la de dos? 2. Queremos resultados inmediatos: Estamos acostumbrados a menospreciar lo que podemos lograr en un año y valoramos en exceso lo que podemos hacer en un día. Ahorrar e invertir requiere tiempo y los resultados se ven con los meses no con las horas. Cien pesos a la semana (Dos cajetillas de cigarros) pueden ser poco pero en un año serán 5,200 pesos en 10, 52,000… Construyendo ganadores Para empezar, baja e imprime nuestro formato: “Yo puedo” en su versión de 30 días. La idea es que consigas cristalizar un objetivo en un mes. ¿Empezamos? En la parte superior del formato debes establecer claramente qué es lo que quieres lograr. Mi objetivo: Ahorrar 1,000 pesos Revisa tu progreso Día 1 2 3 4 Tus acciones 5 6 7 Depositar $250 Me acaban de pagar Voy bien feliz Debes considerar siempre dos cosas al fijar un objetivo: 1.- El tiempo: Esto lo hemos resuelto esta vez por ti, la siguiente va por tu cuenta. Para este ejercicio tienes 30 días. ¡Metas sin plazo son sólo sueños! Así que antes de empezar siempre considera un horizonte o un plazo. #ponlefecha 2.- Cualquier cosa que desees ¡Debe poderse medir!: Hablar de cosas indefinidas hace que lograrlas sea más difícil. Por ejemplo: “Bajar esos kilitos de más” (¿Qué significa? ¡10, 20, 30 o hasta que te veas bien!). Mejor piensa: • En tres meses bajaré 10 kilos • En 8 meses reuniré 24,000 pesos • En un año daré el enganche de mi auto modelo tal… Recuerda debes poner una meta ‘posible’ no importa si es pequeña. El éxito en la vida no es una enorme victoria sino varias pequeñas victorias. Un paso a la vez Ahorrar lo debes entender como un hábito. Así que hay que desarrollarlo. Pero si nunca lo has hecho, parecerá una misión imposible y saldrás tan molesto que borrarás este ebook. Por eso empieza con poco. Imagina que quieres arrancar con 3,000 pesos al mes. Puede parecer una excelente cantidad pero ¿Qué tanto afectará tus finanzas? ¿Qué tal si antes de que te vuelvas un ahorrador experto empiezas con 500 pesos a la quincena? El impacto de estos 1,000 pesos al mes será casi imperceptible. Tu siguiente nivel será 800 a la quincena y así sucesivamente. Hasta que llegues a los 3,000 o a un nuevo tope que puede ser mayor o menor. Algo seguro es que al recorrer este camino te darás cuenta qué cosas has hecho bien para conseguirlo ( igual que un laberinto, ¿no crees? ). Por ahora, pensemos que te has propuesto ahorrar 1,000 pesos al mes. Para lograrlo tienes varias opciones: • Un pago único de 1,000 pesos • Dos pagos de 500, uno cada quincena • Cuatro de 250, uno cada semana • 30 de 33.33 ¿Cuál es la que se acomoda más a ti? La que elijas, colócala dentro de alguna las cajas marcadas como “Tus acciones”. Selecciona el día exacto en el que tendrás que realizarla. Mi objetivo: Ahorrar 1,000 pesos Revisa tu progreso Día 1 Tus acciones 2 3 4 5 6 7 Depositar $250 Si quieres definir cuánto puedes ahorrar al mes, lo primero que debes hacer es revisar tus ingresos y tus gastos. Una vez que los hiciste asigna un porcentaje a tu ahorro. Para saber más de esto te invitamos a bajar nuestro ebook: ¿Cómo hacer un presupuesto? Quizás no te has dado cuenta, pero sin querer ya has establecido una meta, un plazo y un plan de acción. Muchos opinan que compartir con sus amigos y familiares lo que se han propuesto puede ayudarles a hacerlo realidad más fácilmente. Sin embargo, estudios psicológicos apuntan a que puede tener el efecto contrario. La razón se debe a que la persona que lo cuenta experimenta la misma sensación que si lo hubiera logrado, ¡Increíble! ¿No? Ahora viene una parte esencial. Coloca el formato “Yo puedo” en un lugar donde diariamente lo veas, un espacio donde no pueda escapar de tu vista. Se convertirá en el disparador del hábito que estás desarrollando. Es como cuando pones los tenis en la puerta para recordarte que debes salir a correr o cuando le quitas las pilas al control remoto para no ver la tele. Registrar es ganar Tener un plan de acción no garantiza que se llegue a la tierra prometida, por eso es necesario tener un seguimiento. En tu formato “Yo puedo” encontrarás varias casillas donde tendrás que describir, en este caso diariamente, qué haces y qué no para lograr tu objetivo o qué problemas se aparecen en el camino. Es muy importante que pase lo que pase lo documentes Llevar un registro del proceso de consecución de tu objetivo, te permitirá detectar exactamente qué te está haciendo tropezar, retroceder o fallar. Mi objetivo: Ahorrar 1,000 pesos Revisa tu progreso Día 1 2 3 4 5 6 Tus acciones 7 Depositar $250 Me acaban de pagar Voy bien feliz duda me faltan fuerzas Se descompuso el auto. Tome uber Mi mamá me pidió dinero Comida con amigos, me gaste una fortuna Programé mi transferencia no era tan difícil Pasó mi depósito lo logré Trata de vincular cada entrada de dinero, con uno de los estados que se encuentran en el listado del lado izquierdo. Así podrás vincular tu estado emocional con tu actuar y al mismo tiempo entenderte un poquito más. Fuerza de voluntad La fuerza de voluntad es un increíble poder que tenemos todos. Los psicólogos la definen como: “La habilidad de resistir satisfacciones inmediatas, con el fin de conseguir metas mayores a largo plazo” o de manera más sencilla es “la habilidad de contener una gratificación”. Ahorrar implica una enorme fuerza de voluntad, al igual que hacer una dieta. Vivimos sumergidos en un mundo donde comprar y gastar es muy sencillo. Tanto, que a veces no tenemos que levantarnos de nuestro sillón para hacerlo. Una llamada, un clic, son suficientes para que una pizza o una sofisticada lámpara aparezcan en nuestra puerta. O si necesitamos efectivo, sólo vamos a cualquier cajero, tecleamos unos números y listo. Esto hace que mantener a salvo nuestro dinero sea una tarea difícil. Además, gastar se siente bien. Lo malo es que si se convierte en una rutina jamás podrás ahorrar, porque la satisfacción de comprar es inmediata y fácil de repetir. Lo compro Veo algo Me siento feliz El ahorro está directamente relacionado con una meta mayor o de largo plazo: un viaje, un auto, una casa, en fin muchas cosas que no podemos hacer diariamente y por las que tenemos que aprender a esperar. Es por eso que la fuerza de voluntad o ‘willpower’ juega un papel tan importante en el proceso de ahorrar. Sin embargo, este poder no es ilimitado, requiere enormes cantidades de energía de nuestro cerebro. Cuando ésta se agota, es cuando fallamos. Ante eso, es vital concentrarse en una cosa. Si vas por mucho te cansarás y abandonarás tu meta. Además, si todo el tiempo te la pasas pensando en tu propósito, te rendirás más pronto de lo que crees. Deja que fluya de manera natural. Toma como ejemplo a los deportistas de alto rendimiento. Ellos piensan en el siguiente paso, la siguiente brazada, la siguiente bocanada. La meta no se moverá de lugar, tú eres el que tiene que llegar a ella, enfócate en tus acciones diarias y sigue tu plan. Consigue un Coach Tener aliados nos ayuda a no desviarnos del camino y a evitar darnos concesiones. Busca uno, alguien que no se le vaya olvidar y que se sienta corresponsable contigo. Si le pides a un amigo que te ayude a llevar el control de tu avance, invítale la cena para que platiquen de tus avances. piggo es un excelente coach cuando se trata de metas financieras. Sólo tienes que establecer una meta, fijar un plazo y programar tus depósitos. Además optimizamos tu ahorro para que llegues más pronto a tu objetivo. Si quieres comprobarlo por ti mismo te dejamos este cupón vf1sup = 100 pesos Ingresa aquí el código cuando te registres Por último… Sin importar cual sea tu meta, ¡Por favor tómatelo en serio! Esto no es una idea subjetiva, está directamente relacionado al tiempo y la energía que le dedicamos a algo. Motívate, escucha a tu coach, revisa nuestro blog -tenemos muchas estrategias para lograrlo-, baja nuestro ebook de cómo hacer un presupuesto o pregúntanos en Facebook o en Twitter. Una vez que has dado el pimer paso, ponle fecha al segundo. Si este mes ahorraste 500, el que sigue ve por más hasta que lo hagas de manera natural y seas un ahorrador experto. Gracias por leer este ebook. Si tienes sugerencias, reclamos y hasta… ya sabes donde encontrarnos @piggomx . ¡Ah! No olvides descargar tu fotmato “Yo puedo”, a Aramis* le quedó increíble. *Aramis es nuestro diseñador. Esperamos que hayas disfrutado de este e-Book. 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