LA ZARZUELA I. LOS ORÍGENES DE LA ZARZUELA CONTEXTO HISTÓRICO-SOCIAL EN SU La zarzuela es nuestro teatro lírico por excelencia. Su origen se remonta al S. XVII, donde era un espectáculo cortesano. Pero será en el XIX cuando, restaurado por Barbieri, llegue a su máximo esplendor, convirtiéndose en espectáculo de masas, y dando lugar a la creación del Teatro de la Zarzuela. A lo largo de este siglo se producirán miles de obras que, con diversas variaciones, se enmarcan en este género. La podemos definir así: Género teatral español, de carácter cómico, en uno o varios actos, en el que alternan las escenas habladas y cantadas. Desde el comienzo del género, se diferencia de la ópera precisamente por usar texto hablado y cantado y, por lo tanto, es del mismo tipo que la «ópera cómica francesa» o el singspiel alemán. Orígenes. En España, al igual que en el resto de los países de Europa, la creación de teatro musical comienza en el siglo XVII. Pero aquí se impusieron desde el comienzo más las formas teatrales cantadas y habladas que la ópera, toda cantada. Nuestras dos grandes formas teatrales, la Comedia y la Zarzuela, tenían partes habladas y partes cantadas. La primera, fundamentalmente hablada pero con participación de la música; y la segunda, con similar participación de ambas artes. Elaborado por Paola Oliva El siglo XVII coincide con el reinado de los “Austrias menores” con los que terminará la dinastía. Sus gobiernos se caracterizan por su poco interés y capacidad, dejando las riendas del país en manos de ayudantes. Declina nuestro prestigio militar en Europa, marcando el fin de la España imperial. Una gran crisis económica y de política exterior como interior, caracterizará a este periodo. Curiosamente todo esto coincide con un gran florecimiento artístico, conocido como el “Siglo de Oro”. Destacan en pintura Zurbarán, Murillo y Velázquez y en Literatura, Lope, Quevedo, Góngora y Calderón. El nombre zarzuela proviene del palacete o pabellón de caza del palacio de la Zarzuela (rodeado de zarzas) que servía de escenario para representar historias de carácter mitológico durante el reinado de Felipe IV, en el siglo XVII. Estas representaciones no estaban dirigidas al pueblo, sino a los cortesanos de palacio. El citado monarca, muy aficionado al teatro, para los días en que la Corte no podía salir a cazar mandaba contratar pequeñas compañías de teatro que, en sus funciones, alternaban el canto con pasajes hablados. Allí, estos presentaban a los monarcas sus nuevas obras. Estas fiestas, denominadas "fiestas zarzuela", comenzaron a hacerse célebres. Así surgieron las primeras zarzuelas, que, como todos los géneros en sus estadios primitivos, compartían elementos de diferente procedencia. Se esboza en esos momentos lo que sería el futuro género lírico español: una conjunción de piezas cantadas con diálogos. Aunque la música de estas primitivas zarzuelas se ha perdido, tenemos constancia de quiénes fueron sus autores. Así, sabemos que Pedro Calderón de la Barca escribió muchas, siendo las más Elaborado por Paola Oliva renombradas El laurel de Apolo (1658, estrenada con motivo del nacimiento del príncipe heredero) y Celos aun del aire matan, con música de Juan Hidalgo. Evolución en el Siglo XVIII Después de este feliz comienzo, la zarzuela inició su declive, a causa de la llegada al trono de los Borbones, en el siglo XVIII. La ópera italiana se impuso al teatro español. Felipe V (1683-1746) apenas hablaba castellano, por lo que prefería la música cantada en italiano. Así pues, las representaciones de zarzuela fueron arrinconadas a favor de las óperas que representaban las compañías italianas traídas por el rey a España, casi siempre de temas mitológicos. Posteriormente Carlos III (1759-1788), prefería las obras cortas y las zarzuelas de tema costumbrista; su reinado fue también el de la época de las revueltas contra ministros italianos. Esta situación fue aprovechada por autores españoles que abandonaron la mitología para centrarse en temas más populares, que se acercan más al sainete y a las zarzuelas que hoy nos son familiares. Así, Las segadoras de Vallecas (1768), con música de Rodríguez de Hita y libreto de Ramón de la Cruz, es la primera zarzuela de temática española. Coexisten en este siglo dos tendencias, la italianizante y la costumbrista, que con el tiempo dan como resultado un estilo híbrido y más internacional Destacan autores como Jose de Nebra y Martín y Soler. En el XVIII se producen importantes cambios porque la zarzuela deja de ser un espectáculo para la corte y se extiende hacia los Elaborado por Paola Oliva corrales de comedias y a los teatros municipales de Madrid, comenzando a ser desde entonces, un género popular. II. CARACTERÍSTICAS GENERALES DE UNA ZARZUELA: La zarzuela, al igual que la ópera, es un género musical narrativo que utiliza la representación escénica. Precisa de un escenario, orquesta, coro y solistas. Posee los siguientes elementos: La orquesta suele ser de menores dimensiones que en la ópera. Los solistas suelen interpretar arias (poco frecuentes), romanzas, coplas, dúos, tercetos, etc.: • La romanza suele ser muy lírica, de tema amoroso o histórico y frecuentemente con forma estrófica o ABA • La copla es una música más ligera, graciosa y con elementos populares. También suele ser estrófica. De ella nacerá en el futuro el cuplé. • Predomina más el barítono (ligero), como papel principal masculino, que el tenor. El coro, tiene una presencia más destacada que en la ópera del XIX. A través de él se presentan los temas más vistosos y entendibles para el pueblo. Los concertantes, fragmentos en los que intervienen varios personajes con el coro, generalmente haciendo una especie de diálogo entre ellos y con el conjunto coral. La zarzuela suele constar de partes instrumentales: preludio, al inicio de la obra, interludios, entre los actos. El preludio suele contener y ser una presentación de los temas más importantes de la zarzuela que abre. Elaborado por Paola Oliva La música suele ser más sencilla que en las óperas, y requiere algo menos de especialización técnica de los cantantes Suele tener partes de danza, de carácter popular, castizas o de moda en el momento del estreno de la obra. III. RENACIMIENTO DE LA ZARZUELA EN EL SIGLO XIX: LA ZARZUELA GRANDE Pero la gran época de la zarzuela española aún estaba por llegar, e iba a coincidir con la restauración del género a partir de 1849; es decir, con el Romanticismo. Ante la imposibilidad de competir con los italianos en el terreno de la ópera, nuestros músicos buscan un modo de expresión más propio y nacional. Tras unos intentos de consolidar el género, en 1849 se estrenan dos obras cruciales: El duende y Colegialas y soldados, de Rafael Hernando. Entonces entra en juego la figura de Francisco Barbieri que capitanea a un grupo de libretistas y compositores que dan vida a este género. Ellos intentan crear un nuevo teatro nacional y una “música nacional” siguiendo el modelo de la zarzuela Jugar con fuego, del citado Barbieri (1851). Paralelamente se inaugura el Teatro de la Zarzuela en 1856. Con la colaboración de poetas como A. García Gutiérrez, Luis Mariano de Larra o Carlos Arniches establecen un tipo de género musicalliterario que parte de nuestro pasado lírico, la tonadilla, el folclore español y también la ópera romántica europea desde Rossini a Wagner. Este grupo funda la Sociedad de Artistas, que difundirá la zarzuela por toda España. Así a las zarzuelas de este primer periodo tras la restauración del género, que abarca desde 1849 hasta 1866, y que poseen unas Elaborado por Paola Oliva características diferentes de las obras venideras se las denomina como Zarzuela Grande o Gran Zarzuela. IV. EL GÉNERO CHICO: La denominación de “género chico” procede del teatro no musical y fue promovido por empresarios y creado por un grupo de actores cómicos, para impulsar el teatro por horas en el que, en un mismo día, se representaban varias obras (sesiones de 20:30, 21:30, 22:30 y 23:30). La menor duración de las obras (menos de una hora) abarataba el coste de las localidades, llegando hasta las clases humildes que abarrotaron el teatro. Las recaudaciones aumentaron espectacularmente, así como la producción de obras. Este fue el nacimiento del “género chico teatral”, llamado así no por ser un teatro de menor calidad, sino por ser más breve. También se ha denominado, erróneamente, a la zarzuela en general “género chico” en contraposición a la ópera. Con el tiempo el público se acabó cansando de ellas y entonces, sobre 1880, se les añade música, pensando que así serían más atractivas. Esto origina el nacimiento del género chico zarzuelístico, que probablemente sea el que ha dado las páginas más famosas de nuestra zarzuela y que llegó a ser enormemente popular, componiéndose una gran cantidad de obras. Fue tanto el éxito que había representaciones incluso en verano. Mientras el Teatro de la Zarzuela fue el templo de la zarzuela grande, el Apolo lo fue del género chico. Destacaban las temporadas del Apolo, donde tenían lugar cada noche cuatro funciones seguidas, de modo que el espectador con medios suficientes pudiera ver cuatro piezas distintas, y los que disponían de menos dinero o tiempo pudieran ver tres, dos, o una sola. La última sesión, la llamada “cuarta de Apolo” alcanzó fama especial porque empezaba a una hora tardía y por ello muy adecuada para noctámbulos. Las Zarzuelas de este segundo periodo, del género chico, que abarca desde 1880 a 1905 poseen unas características diferentes de las obras de la zarzuela grande. Elaborado por Paola Oliva V. DIFERENCIAS Y SIMILITUDES ENTRE LA ZARZUELA GRANDE Y EL GÉNERO CHICO ZARZUELA GRANDE GÉNERO CHICO Tres Actos, menos frecuente dos o Un solo Acto cuatro Combinan texto cantado con texto Combinan texto cantado con texto hablado hablado Argumentos sencillos, costumbristas y Temas dramáticos o cómicos de muy frecuentemente localizados en acción complicada ambientes madrileños Aparecen personajes nobles o Personajes tomados de cultos combinados con personajes cotidiana. Muchos plebeyos incorrectamente bailable vida hablan Música enormemente popular, a veces transcrita literalmente a partir de melodías de la calle y por ello muy familiar para el oyente Incluyen algún tema popular Algún número seguidilla) la Siempre aparecen números bailables de moda: vals, polca, tango, mazurca (Jota, habanera y chotis (danza de origen escocés “scotich”, que pasó a ser el símbolo de Madrid) Mucha importancia del coro, casi Números corales, pero en muchas siempre un gran coro ocasiones al unísono Alusiones constantes a personas y cosas del momento (políticos, al naciente cine, a los precios, etc.) __________ Mucha influencia italiana de la ópera ________ Autores y obras de la Zarzuela Grande: • Barbieri (1823-1894): Jugar con fuego / Pan y toros / El barberillo de lavapiés Elaborado por Paola Oliva • Arrieta (1821-1894): Marina (más tarde la convierte en ópera) / El dominó azul • Hernando (1822-1888): Colegialas y soldados / El Duende Barbieri Arrieta Hernando Autores y obras del Género Chico: • Chueca (1846-1908): La Gran Vía / Agua, azucarillos y aguardiente • Bretón (1850-1923): La verbena de la paloma • Chapí (1835-1906): La revoltosa / El tambor de granaderos Chueca Bretón Chapí VI. FINAL DEL GÉNERO EN EL SIGLO XX A comienzos del siglo XX el género Chico entra en decadencia, porque fue sustituido por otras variantes líricas, como las varietés, la revista o el cuplé. Con ello la zarzuela desemboca en su tercer período, que se extiende desde 1905 hasta después de la Guerra Civil, en los años cincuenta. Al resurgir, lo hace volviendo al formato de la antigua Zarzuela Grande, pero recogiendo las experiencias positivas del género chico. La zarzuela grande, que nunca había desaparecido del todo, se recuperó gradualmente a partir de 1910. El público, tal vez cansado ya de los Elaborado por Paola Oliva breves y populares espectáculos del «teatro por horas», empezaba a favorecer de nuevo los argumentos más detallados, de dos o más actos, y con una mayor contenido musical. Así pues, entre 1910 Y 1914 se produjo una transformación destacada que llevó nuevamente a la popularidad un género próximo a la opereta, ahora más de moda la alemana que la francesa. Sin embargo, la mayoría de los compositores españoles, aunque admitieron la presencia y la influencia de estas operetas, mantuvieron casi siempre una independencia de estilo lo suficientemente destacada como para que pudiera percibirse en sus partituras los elementos del folclore y la idiosincrasia española que daban ese sabor tan específico a la zarzuela, introduciendo cantos de tipo patriótico en los que se intentaba incluir elementos musicales de cierta raigambre española. Desde entonces fue condición casi obligada la presencia en las zarzuelas de algún número musical en el que, viniera o no a cuento, los protagonistas hicieran profesión de españolidad a todo trance. Al finalizar la guerra civil no se reavivó el interés por la zarzuela, que acabó prácticamente por desaparecer en los años ochenta, ante la competencia de nuevas formas de entretenimiento. Hoy, la zarzuela ha recuperado el prestigio que merece, y la opinión mayoritaria de la crítica y el público es que se trata de un género que debió evolucionar, y no desaparecer. Autores y obras de la Zarzuela Grande del siglo XX: • Vives (1871-1932): Doña Francisquita / Maruxa • Serrano (1873-1941): Alma de Dios / La canción del olvido • Luna (1879-1942): El niño judío • Sorozábal (1897-1968): Adiós a la bohemia / Black el payaso • Guerrero (1895-1951): El huésped del sevillano / Los gavilanes Elaborado por Paola Oliva • Moreno Torroba (1891-1982): Luisa Fernanda • Alonso (1887-1948): La Calesera y Las Leandras • Guridi (1886-1961): El Caserío Vives Serrano Luna Sorozábal Elaborado por Paola Oliva