Boletín de Lecturas Sociales y Económicas • UCA • FCSE • Año 2 • N° 4 La Gestión Empresarial y la Capacitación de cara al Siglo XXI Algunas reflexiones sobre la lectura de cuatro libros por Antonio Lavolpe - "Calidad, productividad y competitividad: la salida de la crisis" W. EDWARD DEMING. Edic. Díaz de Santos (Madrid) - "La guerra del siglo XXI (Head to /wad) LES TER THUROW - Ediciones Vergara (Buenos Aires) - "La sociedad poscapitalista " PETER E. DRUCKER. Editorial Apóstrofe (Madrid) "El trabajo de las naciones. Hacia el capitalismo del siglo XXI" ROBERT B. REICH. Ediciones Vergara (Buenos Aires) La lectura -en algún caso, la relectura- que he hecho de estos cuatro libros en los últimos meses inc ha movido a efectuar algunas consideraciones y reflexiones que quisiera compartir con mis colegas de la comunidad universitaria de la Facultad de Ciencias Sociales y Económicas de la U.C.A. marco general por el que discurren los acontecimientos "( 'r. THUROW es decano de la Sloan Business School del MIT donde también es profesor de Economía. Es un experto en asuntos económicos y su relación con la política. De los cuatro libros, dos -DEMING y DRUCKER- se refieren a temas de gestión empresaria; los otros dos -THUROW y REICHabordan con un enfoque de tipo macro, los desafíos del capitalismo para el siglo XXI. DEMING, como es sabido, fue el consultor estadounidense que en la década del cincuenta introdujo en la industria japonesa nuevos principios de gestión que revolucionaron su calidad y productividad. Fue él quien, ignorado y no escuchado en su país, le dió al Japón las herramientas básicas de lo que luego fue su espectacular crecimiento de la postguerra. REICH, ministro de trabajo de Bill Clinton tiene, amén de los grados académicos obtenidos en las universidades de Hanover, Yale y Oxford, una prolífica producción de libros y artículos acerca de la economía norteamericana y mundial, y es un influyente ideólogo de la gestión demócrata y crítico de la republicana. Dos autores, pues, líderes en cuestiones de gestión para los últimos cincuenta años del próximo a terminar siglo XX. Otros dos,- economistas de reconocido prestigio, que nos hablan del capitalismo y la batalla económica que se avecina en el próximo a iniciarse siglo XXI. DRUCKER es el eterno maestro de nuestros gerentes y administradores. "Es el más importante teórico de la dirección empresarial de nuestro tiempo " (r). "Es un hombre de conceptos, no de formularios; es un hombre de los que establecen el ¿Qué tienen en común estos libros? Hagamos primero una breve reseña de cada uno. (1) Harvard Business Review (2) Alonso Durán Pich - Prólogo del libro 27 1. El libro de DEMING DEMING señala en el prefacio el objetivo del libro: transformar el estilo de la gestión en (las empresas de) América. Hace una dura crítica a la clase empresaria de Estados Unidos, y propone un cambio cultural en cl estilo americano de gestión que se basa en la "reacción en cadena" que estaba en todas las pizarras de las reuniones de los directivos japoneses en julio de 1950 (¡!), y que es la siguiente: Mejora la calidad -+ decrecen los costos por menores reprocesos, menores equivocaciones; menores retrasos; se utilizan los recursos productivos -1 mejora la productividad -+ se conquista el mercado con la ' my/calidad y el precio más bajo ♦ se permanece en el negocio hay más y más trabajo. Para DEMING la forma de implementar la "reacción en cadena" no la dan ni las nuevas maquinarias, ni los ordenadores, ni la venta masiva de Círculos de Calidad; la transformación sólo puede realizarla el hombre, la gente. Propone para ello, catorce puntos que se centran fundamentalmente en la formación de los trabajadores en el trabajo, a través del liderazgo y de la horizontalización y Ilexihilización de las tareas, y con una total involucración de los mismos en la gestión de calidad y en la reducción de costos. El libro desarrolla cada uno de los catorce puntos y critica (y en muchos casos, ridiculiza) ciertas técnicas de gestión, y de evaluación de la gestión, que forman parte de los contenidos de algunas materias que damos en la Facultad' '. A través de innumerables ejemplos resultantes de muchos años de consultor en empresas japonesas y estadounidenses, DEMING transmite al lector evidencias ele las bondades de sus catorce puntos, que, repito tienen como centro a las personas que trabajan en la empresa y al conocimiento que adquieren, ya sea a través de procesos de educación convencionales o como resultado ele su propia gestión en la empresa. Para finalizar es bueno destacar el énfasis que pone DEMING en privilegiar la tecnología ele los procesos por sobre la de los productos, consecuencia lógica de su prédica en la inquisición permanente que las personas que trabajan en la empresa efectúen sobre el COMO más que sobre el QUE. 2. El libro de THUROW Un párrafo extraído de la pág. 19 permite vislumbrar una de las tramas del hilo que conecta este libro con el de DEMING. " (3) Algunos ejemplos: "eliminar la gestión por objetivos : "eliminar los stogans para pedir a la mano de obra cero defectos y nuevos niveles " de productividad " ; "eliminar los estándard de trabajo en planta . En el futuro la ventaja competitiva duradera dependerá más de las nuevas tecnologías de procesos y menos de las nuevas tecnologías de productos. Las nuevas industrias del ftutn-o, por ejemplo, la biotecnología, dependerán de la capacidad cerebral. Las ventajas comparativas del trabajo htuuano remplazan a la ventaja comparativa de r la Madre Naturaleza (la posesión de recursos natu ales) o de la historia (recursos de capital). Pero comencemos desde el principio: ¿De qué trata el libro'? Para TIIUROW, una vez caído el comunismo, el capitalismo se manifestará en la próxima centuria con la formidable competencia "cabeza a cabeza" que se desarrollará -ya se está desarrollando- entre los tres colosos: Estados Unidos, Europa y Japón: Y en esa contienda exactamente al revés de lo que preveía en los '60 Servan Schreiberen "El Desafío Americano"- Estados Unidos está ya en inferioridad de condiciones, o en decadencia. El capitalismo de EEUU -al que THUROW incorpora Gran Bretaña- es denominado por el autor "capitalismo anglosajón"; el de Europa y Japón, "capitalismo comunitario". Y efectúa una serie de definiciones comparativas entre uno y otro. Los trabajadores del sistema anglosajón sin duda tienen que cambiar de empleador cuando se les presenta la oportunidad de ganar sala rios /luís elevados en otro /rigor Nada deben a su empleador En cambio, muchas empresas japonesas todavía califican de "t raición" el retiro voluntario. En el capitalismo comunitario también existen estrategia., individuales y empresarias, pero se las desarrolla sobre bases completamente distintas. El individuo no actúa como individuo. Uno se incorpora a un equipo y tiene éxito corno parte de ese equipo de la competiría. La decisión fundamental en la estrategia personal del individuo es la incorporación al equipo adecuado. A partir de ese Momento, el éxito o el fracaso personal estará estrechamente relacionado con el éxito o el fracaso de la r empresa para la cual el individuo t abaja. En el inundo anglosajón, la fidelidad a lea empresa es un tatuo sospechosa. El individuo tiene éxito como individuo, no como mienbro de un equipo. Al referirse a las nuevas fuentes de ventajas estratégicas, se detiene en la tecnología y afirma: Consideremos lo que en general se cree que serán las siete industrias básicas de las próximas décadas microelectrónica, biotecnología, las industrias de los la aviación civil, las materiales nuevo.,, telecomunicaciones, los robots más las máquinas herramientas, y los ordenadores más el software. Todas son industrias que dependen de la capacidad cerebral. Todas podrán instalarse en cualquier lugar del planeta. Dónde se instalen dependerá de quiénes puedan organizar la capacidad cerebral para aprovecharlas. En el siglo que se avecina la ventaja comparativa será la creación humana. Luego de efectuar un análisis comparativo del modelo de gestión gerencial de cada uno de los dos capitalismos -en los que se advierte claramente cómo la prédica de DEMING de los últimos cincuenta años prendió en Japón y no en EEUU- el autor es drástico en calificar como errónea la del anglosajón. Es interesante destacar que no se salvan de esas críticas ni los sistemas contables ni la productividad en las oficinas. Compara a continuación la situación actual de los EEUU en las siete industrias básicas de las próximas décadas, siendo su balance perdidoso con respecto al capitalismo comunitario. Lo que resta del libro es una propuesta de cambios a realizar en la gestión de gobierno y en la de las empresas. Entre ellos, ocupa un lugar significativo la capacitación de la mano de obra; la mejora en la educación y el cambio en el modo de gerenciamiento de las empresas. 3. El libro de REICH "Los bienes fundamentales de una nación serán la capacidad y dest reza de sus ciudadanos". "En vista de que casi todos los factores de producción -dinero, tecnología, plantas y equipos- se trasladen fácilmente a través de las fronteras .... el verdadero desafío .... es incrementar el valor potencial que sus ciudadanos puedan agregar a la economía global, al promover sus habilidades y capacidades, y perfeccionar los recursos para compatibilizar esas habilidades y capacidades con los requerimientos del mercado mundial" Los párrafos transcriptos encierran una de las dos tesis que desarrolla REICII en este libro: una, que surge nítidamente de ellos va en la línea de DEMING y THUROW; y consiste en enfatizar la importancia que tiene para una nación la capacidad -y por lo tanto, la educación y capacitación- de sus ciudadanos en el capitalismo del siglo XXI. La otra tesis es más original: no existen empresas nacionales ni productos nacionales o extranjeros. Existen redes mundiales de organización empresarial de "alto valor" que están reemplazando a las viejas estructuras piramidales centralizadas de "alto volumen". En estas redes mundiales, los productos son combinaciones internacionales. Lo que se intercambia entre las naciones es con menos frecuencia el producto terminado que la especialización para resolver los problemas (investigación, diseño del producto, fabricación), para identificarlos (marketing, publicidad, encuestas al consumidor), y para coordinar los servicios (financiamiento, búsqueda, contrataciones), así como ciertos servicios y - componentes de rutina, todo lo cual se combina para crear valor. Por ejemplo, cuando un norteamericano compra un Pontiac Le Mans a General Motors, inconscientemente está realizando una transacción internacional. l)e los 10.000 dólares que paga a General Motors, cerca de 3.000 van a Corea del Sur, donde se efectuaron los trabajos de rutina y las operaciones de montaje; 1.750 dólares van a Japón por la fabricación de los componentes de vanguardia (motores, eje de dirección e instrumentos electrónicos); 750 dólares a Alemania por el diseño y el proyecto del prototipo; 400 dólares a Taiwan, Singapur y Japón por los pequeños componentes; 250 dólares a Gran Bretaña por los servicios de marketing y publicidad; y cerca de 4.000 dólares pasan a los intermediarios estratégicos de Detroit, a los abogados y banqueros de Nueva York, a los "lobbistas" en Washington, a las aseguradoras de todo el país, y a los accionistas de General Motors la mayoría de los cuales son norteamericanos, aunque hay un número creciente de extranjeros-. Para REICI 1 están surgiendo tres amplias categorías ele trabajo: los servicios rutinarios de producción; servicios en persona y servicios simbólico-analíticos. Los servicios rutinarios de producción abarcan las actividades de las empresas de alto volumen. Se hacen uno tras otro; son una etapa en una secuencia de fases para fabricar productos terminados que luego se comercian en el mercado mundial. Si bien a menudo se las considera como tareas manuales, también incluyen funciones de supervisión rutinaria desempeñadas por gerentes de bajo y mediano nivel -capataces o encargados, gerentes de línea, jefes de personal y jefes de sección-, y consisten en un control repetitivo del trabajo de los subordinados y en velar por el cumplimiento de los procedimientos operativos estándar Los empleados de los servicios rutina rios habitualmente trabajar junto con una serie de otras personas que cumplen la misma tarea, dentro de amplios y cerrados espacios. Se orientan en su tarea a través de procedimientos estándar y normas codificadas, e incluso sus jefes son supervisados, a su vez, por personas que controlan rutinariamente -a menudo con la ayuda de computadoras- cuánto trabajan y con qué esmero lo hacen. Sus salarios se fijan sobre la base de la cantidad de tiempo que trabajan, o su rendimiento laboral. Estos trabajadores deben saber leer y efectuar cálculos simples. Pero sus virtudes esenciales son la fiabilidad, la lealtad )' la capacidad para cumplir las directivas. Para eso basta normalmente con una educación estándard sobre la base de principios tradicionales. Los servicios en persona también comprenden tareas si mples y repetitivas. Estos trabajadores están en contacto directo con los destinatarios finales de su trabajo; sus objetivos inmediatos son los clientes específicos y no las barras de metal, las telas o la información. Trabajan solos o en grupos reducidos. Están incluídos dentro de esta categoría los vendedores minoristas, los camareros y camareras, los empleados de hoteles, los conserjes o porteros, los cajeros, los enfermeros y asistentes hospitalarios, las niñeras, los servicios de limpieza domiciliaria, los conductores de (avis, las secretarias, los peluqueros, los mecánicos de coches, los vendedores de bienes inmuebles, las azafatas de aerolíneas, los fisioterapeutas y -entre los de más rápida expansión- los guardias de seguridad. Los servicios simbólico-analíticos incluyen las actividades de los expertos en intermediación estratégica, identificación y resolución de problemas. Incluidos dent ro de esta categoría están los individuos que se denominan a sí mismos investigadores científicos, ingenieros proyectistas, ingenieros de sistemas, ingenieros civiles, biotecnólogos, ingenieros de sonido, ejecutivos (le relaciones públicas, banqueros de inversión, abogados, planificadores de bienes raíces e incluso algunos contadores creativos (sic). También abarca gran parte de la tarea que cumplen los consultores de varias especialidades: management, finanzas, impuestos, energía, agrícolas, armamentos, arquitectura; los especialistas en manejo de información y en desarrollo de las organizaciones, los planificadores estratégicos, los buscadores de talentos y cerebro para las empresas (headhunters) y los analistas de sistemas. Además: los publicistas, los estrategas de marketing, los directores de arte, los arquitectos, los cineastas, los guionistas, los editores y escritores, los periodistas, los músicos, los productores de cine y televisión, e incluso los catedráticos universitarios. Los analistas simbólicos hacen de intermediarios; identifican y resuelven problemas valiéndose de símbolos. Simplifican la realidad con imágenes abst ractas que se pueden reordenar, alterar y experimentar con ellas, comunicarlas a otros especialistas y, finalmente, convertirlas nuevamente en una realidad. Para ello se utilizan instrumentos de análisis, obtenidos a través de la experiencia. Los instrumentos pueden ser algoritmos matemáticos, argumentos legales, tácticas financieras, principios científicos, observaciones psicológicas acerca de cómo persuadir o entretener, métodos inductivos o deductivos, o cualquier otro tipo de técnica para resolver problemas. La educación del analista simbólico no finaliza con la graduación. Como lo muestran las encuestas acerca de los ingresos en los Estados Unidos, una educación universitaria o terciaria por lo general es necesaria, pero no suficiente, para tener éxito como analista simbólico. El aprendizaje continúa en el trabajo. 4. El libro de PETER DRUCKER Para DRUCKER en la sociedad que él denomina poscapitalista "el recurso real que controla y es el factor de producción absolutamente decisivo, ha dejado de ser el capital, o el suelo, o la mano de obra; ahora es el saber. En lugar de capitalistas y proletarios, las clases de la sociedad poscapitalista son los trabajadores del_saber y los trabajadores de los servicios". La nueva sociedad no será "anticapitalista" ni "acapitalista": las instituciones del capitalismo sobrevivirán, aunque algunos, como los bancos, con un rol diferente; y utilizará el mercado libre como único mecanismo de integración económica comprobado; pero el centro de gravedad en la sociedad poscapitalista, su estructura, su dinámica social y económica, sus clases y sus problemas sociales serán diferentes de aquellos que dominaron los últimos doscientos cincuenta años y definieron las cuestiones alrededor de las cuales cristalizaron partidos políticos, grupos sociales, sistemas de valores sociales) compromisos personales y políticos. El medio de producción es y será el saber; ahora el valor se crea mediante la productividad y la innovación ambas aplicaciones del saber al trabajo. Los grupos sociales dirigentes de la sociedad del saber serán los "t rabajadores del saber", ejecutivos del saber que saben cómo aplicar el saber a un uso productivo, al igual que los capitalistas sabían aplicar capital a un uso productivo: profesionales del saber, empleados del saber. Prácticamente toda esta gente del saber estará empleada en organizaciones; no obstante, y a diferencia de los empleados bajo el capitalismo, ellos son dueños tanto de los "medios de producción" como de los "útiles de producción "; de los primeros, a través de sus fondos de pensiones, que se van afirmando rápidamente en todos los países desarrollados como únicos propietarios reales; de los segundos, porque los trabajadores del saber poseen su saber y pueden llevárselo con ellos adondequiera que vayan. Por lo tanto, el desafío económico de la sociedad poscapitalista será la productividad del trabajo del saber y del trabajador del saber. No obstante, el reto social en la sociedad capitalista será la dignidad de la segunda clase de esa sociedad: los trabajadores de los servicios. Estos, por regla general, carecen de la educación necesaria para ser trabajadores del saber, y en cualquier país, incluso el más avanzado, constituirán una mayoría. embargo diferente en conceptos, puntos de vista y valores. La mayoría, si no todas, las personas instruidas (como he dicho anteriormente en este libro) practicarán su saber como miembros de una organización. Por lo tanto, la persona instruida tendrá que estar preparada para vivir y trabajar simultáneamente en dos culturas: la del "intelectual" que se concentra en palabras e ideas y la del 'gestor"que se concentra en personas y t rabajo. Los intelectuales necesitan la organización corto herramienta; les permite practicar su techne, su saber especializado. Los gestores ven el saber como un medio para conseguir un fin, el ele los resultados organizacionales. Ambos tienen razón; son polos más que contradicciones; es /luís, se necesitan mutuamente. El científico inrr.sli ,{arlar ne: estío al direcior de investigación y el director ele investigación necesita al científico investigador. Si uno tiene más peso que el otro sólo se consigue el no-funcionamiento y una frustración absoluta. El mundo del intelectual, a menos que esté cont rapesado por el gestor; llega a ser un mundo en el que cada uno "va a lo suyo" pero nadie hace nada. El mundo del gestor, a menos que esté contrapesado por el intelectual llega a ser burocracia y la grisura embrutecedora del "hombre de la organización ". Pero si los dos se equilibran puede haber creatividad y orden, realización y misión. Partiendo de estas definiciones, DRUCKER desarrolla en el libro su visión sobre SOCIEDAD, ORGANIZACION POLITICA y SABER de la sociedad poscapitalista. De los doce capítulos del libro, sólo tres están destinados al tema SABER y cinco y cuatro, respectivamente, a los temas SOCIEDAD y ORGANIZACION POLITICA. No obstante, el primer tema es el que domina la esencia del libro también en los nueve capítulos restantes. Le preocupa a DRUCKER la ORGANIZACION de la SOCIEDAD poscapitalista dominada por el SAi3ER. .. Dado que su función (la de las organizaciones) es hacer trabajar al saber aplicándolo a herramientas, a procesos y productos, a trabajos, al saber mismo, debe estar organizada para el cambio constante; debe estar organizada para la innovación; y la innovación, corto dijo el economista austro-húngaro ,loseph Schumpeter (188 3r 1950), es "destrucción creativa". Debe organizarse pa a un abandono sistemático de lo establecido, lo acostumbrado, lo familiar lo cómodo, sea productos, servicios y procesos, relaciones humanas y sociales, destrezas o las organizaciones mismas. Por naturaleza, el saber cambia rápido y lo que hoy es una cosa cierta, mañana se habrá convertido en algo absurdo. Conclusiones ¿No será destrucción creativa esta realidad'?: " Las empresas cierran fábricas de las que dependen comunidades comarcales o sustituyen canosos creadores de modelos que han pasado años aprendiendo su oficio, por "jóvenes prodigio" de veinticinco años que conocen la simulación por ordenador " ¡Qué tema éste que recién comienza a impactar en la Argentina! No existe ninguna duda de que DEMING en los cincuenta fue un visionario -en realidad, un propulsor- de las para nosotros nuevas técnicas de gestión. El "kaizen"japonés que provoca una motivación casi obsesiva sobre la mejora continua en los procesos, fue exigiendo de los hombres individualmente y en equipo- una utilización cada vez más intensiva de su cerebro. Saber en la terminología de DRUCKER; Servicios simbólico-analíticos en la de REICH; capacidad y destreza de los ciudadanos para agregar valor a la economía global, son la verdadera riqueza de las naciones para el siglo XXI. Me permito recomendar a los profesores colegas de la UCA la lectura detenida de estos libros que considero conveniente cualquiera sea la materia que dicten. Por otra parte lo que estos cuatro autores señalan ya está instalado entre nosotros los argentinos. De alguna manera debemos aprehender esos conceptos; incorporarlos a la cultura pedagógica de nuestra enseñanza, más proclive algunas veces a transmitir información que destrezas; habilidades y técnicas; y que, junto con los hábitos, las actitudes y los ideales que deberán recibir del proceso enseñanza-aprendizaje hagan de nuestros graduados la vanguardia de la revolución del SABER, que tiene en el caso de la UCA un ingrediente que lo potencia aún más: una formación integral con sentido cristiano. En su lúcida y profunda descripción del SABER, rescato este pensamiento que puede sernos muy útil en nuestra función docente: "Una y otra vez, cuando trabajo con ejecutivos, observo que un reto dado -por ejemplo, en estructura de la organización o en tecnología- cede ante el saber que el ejecutivo ya posee y que puede haber adquirido, por ejemplo, en un curso de Economía en la universidad. "Claro que sé eso ", es la respuesta corriente, "pero es Economía, no es Gestión ". Es, por supuesto, una distinción puramente arbitraria, tal vez necesa ria para aprender o enseñar una "materia ", pero irrelevante como definición de lo que es el saber y de lo que puede hacer " Es muy interesante el análisis que hace sobre la educación para el saber y su descripción final del "hombre instruído" de la sociedad poscapitalista: "La sociedad poscapitalista es ambas cosas: una sociedad del saber y una sociedad de organizaciones, cada una dependiendo de la otra y sin 31