Enfermedad del Virus Necrosis Pancreática Infecciosa (IPN) Nombre de Enfermedad: Enfermedad del Virus Necrosis Pancreática Infecciosa (IPN) sinónimos: enteritis catarral aguda Causa de la Enfermedad: La necrosis Pancreática infecciosa es una de las primeras enfermedades de peces descrita y la más estudiada. Hay clases y subclases del virus IPN que se pueden diferenciar por medios serológicos, bioquímicos y genéticos. La clase VR-299 (tipo 1) originalmente se aisló en Norteamérica y desde entonces se ha encontrado casi por todo el mundo. Las clases Ab (tipo 2) y Sp (tipo 3) originalmente se aislaron en Europa, se ha diseminado ampliamente pero aún no se ha aislado en Norteamérica. La virulencia relativa y la especificidad huésped puede variar entre una aislada o clase a otra. Rango de Huésped, Distribución y Ocurrencia: La IPN es una enfermedad altamente contagiosa de la trucha y el salmón. Típicamente se hallan mortalidades altas, especialmente en los juveniles y alevines de la trucha arco iris, alpino y fario. No existe una especie de pez salmónido que esté completamente resistente al virus. El virus IPN, además, causa mortalidad en la lobina rayada, percha, menhaden, hipoglosa, serviola y anguila. Los virus IPN y similares se han aislado en más de 65 especies de vertebrados e invertebrados acuáticos en tanto agua dulce como en los ambientes marinos. El virus IPN aparece en muchas partes del mundo incluyendo Norte, Centro y Sudamérica, Europa (incluyendo el Reino Unido), Escandinava, Japón y el Sureste de Asia. Aún no se ha descrito en la África, Australia y Nueva Zelanda. El virus tiende a hacerse endémico a la mayoría de las divisorias de aguas en las cuales se encuentra. El virus IPN puede infectar a los peces en todas las etapas del ciclo de vida. Los peces más pequeños tienden a estar más susceptibles al virus y rara vez se ven mortalidades en los peces de más de 5 gramos (90 peces por libra). La única excepción es el salmón Atlántico donde el virus IPN puede causar mortalidad crónica significante en los peces grandes, particularmente en el estrés de la transformación a esguín y la introducción al agua salada. La enfermedad puede ocurrir en un rango amplio de temperaturas pero tiende a ser más aguda de 10 a 15°C. Típicamente la mortalidad empieza a los 3 a 10 días después de infección y culmina en 10 a 20 días. La mortalidad total de una infección aguda puede alcanzar un 70% o más en 2 a 4 semanas. Bajo ciertas condiciones el curso de la enfermedad puede hacerse más crónico con menos mortalidad. Hasta un 90% de los sobrevivientes llevan el virus y lo derraman en el excremento por el resto de la vida. Señas Clínicas, Diagnósticos e Identificación Confirmada: Las señas clínicas de la IPN pueden variar con el tamaño del pez. Los peces pequeños tienden a dejar de alimentarse, su color se obscurece y se aceleran fácilmente. Frecuentemente, cuando se asustan persigan su cola en un movimiento circular y giratorio o nadan retornándose lateralmente. Frecuentemente exhiben exo ftalmia (ojos salientes) y un abdomen groseramente distendido. Los peces agudamente infectados, muchas veces, arrastran una larga tira blanca del ano. Por lo general los peces tienen hemorragias en la superficie abdominal ventral y en las aletas. Típicamente, las agallas son pálidas y punteadas con lesiones hemorrágicas. El estómago e intestino están vacíos de alimento pero groseramente distendidos con mucosidad o líquidos. Las caecas pilóricas son hemorrágicas. Antes de la muerte, los peces tienden a ser letárgicos y congregan en el fondo de los estanques o mallas. En los peces grandes, el curso de la enfermedad puede ser más crónico y las señas clínicas menos aparentes o hasta ausentes. Los peces enfermos deben someterse a un laboratorio competente para un diagnóstico. Por lo general se hace un diagnóstico presuntivo basado en el aislamiento del virus y el efecto característico citopático en las culturas de los tejidos. Las pruebas pueden tardar entre tres a cinco días para su diagnóstico. Por lo general, la identidad del virus se confirma por medio de la neutralización de su actividad con un antisuero diagnóstico específico para el virus IPN. Pruebas de ELIZA, FAT, IFAT DNA y varias otras también pueden usarse para el diagnóstico presuntivo y confirmado y muchas veces toma menos tiempo que la cultura de tejidos. El aislamiento e identificación, normalmente, es sensible y fiel y rara vez se confunde el virus IPN con otros patógenos. Sin embargo, se puede encontrar concurrentemente con otras enfermedades por lo que siempre debe conducir un diagnóstico completo y diferencial. Depósitos de Infección y Transmisión: Se deposita el virus IPN tanto en los peces clínicamente enfermos como en los portadores asintomáticos los cuales derraman altos niveles del virus vía excremento infectado. El virus puede sobrevivir por varios días, particularmente en agua dulce y es relativamente tolerante a la congelación, temperaturas calientes y sequía. Puede mantenerse infectivo por periodos de tiempo extendidos en pescado congelado, vísceras, excremento o lodo. El sitio primario de la infección parece ser en las tripas después de ingerir excremento infectado, tiras fecales o peces muertos. Los virus libres derramados al agua también pueden infectar los peces a través de la epitelial expuesta de las agallas o aletas. Se puede transmitir verticalmente el virus IPN de padres infectados a sus progenies. El virus IPN es susceptible a los desinfectantes de yodopsina (iodiphore) pero estos no son efectivos en la prevención de la transmisión vertical de la enfermedad cuando el virus está dentro de la ova y el solo uso no elimina el riesgo de la transmisión vertical. Para evitar por completo la introducción del virus IPN es esencial que las ovas embrionadas vengan únicamente de reproductores inspeccionados y certificados de ser libres del virus IPN y que tengan una historia larga certificada de ser libre del virus IPN por varias generaciones tales como los de todas las instalaciones de Troutlodge. Se conocen una variedad de aves y mamíferos que comen peces sirven como vectores, diseminando el virus IPN en su excremento, particularmente cuando se van de una granja o estanque infectado a otra. Ya que los virus IPN y similares se han aislado desde los huéspedes invertebrados incluyendo insectos, langostino y otros invertebrados acuáticos, estos organismos también pueden ser depósitos del virus. Adicionalmente se ha mostrado que algunas materias biológicas, tales como las glándulas pituitarias de pescados liofilizados, pueden transmitir el virus IPN si no se desinfectan. Prevención, Tratamiento y Control: Si nunca se ha encontrado el virus IPN en su granja, se deba tomar toda precaución para prevenir su entrada. Surta su granja únicamente de reproductores inspeccionados y certificados de ser libres del virus IPN, preferentemente como ovas embrionadas obtenidas de operadores de reproductores de buena reputación como Troutlodge. Ya que el virus de la IPN se puede transmitir a través de aves y mamíferos, se recomienda rigurosamente que las granjas libres del virus construyan cercados de exclusión completa alrededor de sus instalaciones de juveniles y alevines. Para limitar el contagio de la enfermedad, siempre se deben mantener los peces jóvenes arriba de los mayores en los sistemas de reuso en serie. Fácilmente se hace inactiva el virus IPN por desinfectantes químicas tales como el cloro, yodo, formalina y ozono. Sin embargo, parece ser más resistente a la luz UV, luz del sol y sequía, comparado con otros virus de peces. Puede que no desinfecta adecuadamente los filtros de UV el agua ni protege los sistemas recirculatorios contra el virus IPN. La desinfección por Ozono o clorinación/desclorinación pueden ser métodos más efectivos. Otra alternativa para la prevención del virus IPN es la vacunación. Hay varias vacunas experimentales en desarrollo contra el virus IPN para los juveniles y alevines, pero aún no tiene licencia ni disponibilidad comercial. Las únicas vacunas contra la IPN con licencia y disponibles comercialmente son productos inyectables apropiados para los peces más grandes y valuables como los esguines del salmón Atlántico. Actualmente no hay tratamientos registrados para las enfermedades virales. La prevención es el mejor método de control. Una vez que se encuentra el virus IPN en una granja es muy difícil eliminarlo, particularmente si hay peces infectados en el agua arriba de la granja. Se puede re-infectar una granja si es frecuentado por aves o mamíferos que se han alimentado con peces infectados con el virus IPN de granjas cercanas. Por eso. Muchas granjas infectadas o de alto riesgo debe aprender a manejarse alrededor de la enfermedad. Ya que el virus es más virulento para los juveniles y alevines, por lo general, se puede evitar la mortandad al adquirir ovas certificadas de ser libres del virus IPN y levantar el inventario los primeros tres a seis meses (8 a 13 cm o 3 a 5 pulgadas) en agua libre del virus. Ciertas especies selectas de peces se han mostrado de ser algo resistentes a la infección del virus IPN. Troutlodge ha hecho como su prioridad mayoritaria a su programa de crianza de línea la selección genética resistente al virus IPN. Si perdidas debidas al virus IPN son un problema crónico en sus operaciones, asegúrese de discutir esta oportunidad con su representante de Troutlodge. Estado Regulatorio: Se ha registrado el virus IPN como una enfermedad certificable por la mayoría de las autoridades regulatorias. Por el momento no se diferencian la reglas entre las clases del virus. Se inspeccionan todos los reproductores por el virus IPN por lo menos cinco a seis veces antes de que se desoven y todas las operaciones de Troutlodge han establecido una larga historia de ser inspeccionadas y certificadas libres del virus IPN. Se hacen todas las inspecciones por un laboratorio independiente aprobado por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos usando los últimos métodos aprobados y más sensibles de detección disponibles. Todas las ovas producidas por Troutlodge se certifican de ser libres del virus IPN y cumplen con todos los estándares y requisitos internacionales. Importancia de Salud Pública : El virus IPN no posee ningún riesgo conocido a la salud de los humanos ni a cualquier animal salvo peces e invertebrados. No hay restricciones en procesar o vender peces infectados para el consumo humano y no hay ningún cuidado particular necesario que llevarse a cabo desde la perspectiva de salud pública. Referencias: Wolf, K. 1988 Los Virus de los peces y enfermedades virales de peces, Cornell University Press, Ithaca, NY. 476 p. Thoesen, J. (Ed). 1994. Procedimientos sugeridos para la detección e identificación de ciertos patógenos de peces de aleta y mariscos. 4a ed., Sección Sanitaria de Peces, Sociedad de Pesca Americana, Bethesda, MD, USA Para más información comuníquese con su representante de Troutlodge o al Departamento de Servicio al Cliente a (253) 863-0446 o por correo electrónico a través de nuestra dirección del internet http://www.troutlodge.com