PROYECTO PARA LA EXTENSIÓN CÁTEDRA BOLIVARIANA PROYECTO PARA LA EXTENSIÓN CATEDRA BOLIVARIANA RAMÓN PALACIO BETTER Presidente Sociedad Bolivariana del Magdalena Registro fundamentado de las declaraciones y artículos efectuados por la Sociedad Bolivariana del Magdalena y relacionados con las actividades para la implementación de la Cátedra Bolivariana obligatoria e inexcusable en las comunidades educativas del Distrito de Santa Marta y el Departamento del Magdalena. FUNDAMENTACIÓN IDEOLÓGICA DE LA CÁTEDRA BOLIVARIANA OBLIGATORIA, PERMANENTE. I PARTE INSTRUCCIONES GENERALES. I. CAPITULO. La Cátedra Bolivariana Obligatoria debe articularse y emitirse desde las labores de la docencia, la investigación y la extensión. En tal sentido la Cátedra Bolivariana Permanente nace como un renovado proyecto educativo, cultural y científico para un mayor conocimiento, ampliación y generalización de la vida y obra del Libertador Simón Bolívar; proyecto adscrito a la historia e investigaciones, exploraciones educativas y pedagógicas asumidas por la Sociedad Bolivariana del Magdalena en la ultima década de finales del siglo XX y albores del XXI. II. CAPITULO. La Cátedra Bolivariana Obligatoria como proyecto educativo, cultural y científico de extensión, presenta una programación que incluye, una asignatura obligatoria, conferencias, 1 foros, talleres, jornadas, exposiciones, publicaciones, conciertos, veladas y otras actividades, como cine y video bolivariano, de cooperación interinstitucional, que además busca intercambiar aportes y expectativas con las autoridades educativas de los poderes públicos, e instituciones gubernamentales y no gubernamentales. En un marco de cooperación y mancomunidad interinstitucional con alianzas estratégicas con otras organizaciones de la ciudad, el departamento y la Nación. III. CAPITULO. En la Cátedra Bolivariana Obligatoria podrán participar todos los miembros de la comunidad estudiantil, escuelas, colegios, universidades, sin distingo de condición académica o laboral. Sin apropiación, de los resultados a desarrollar, sistemáticamente los ideales hay tres categorías de miembros: Docentes de Ciencias Sociales, estudiantes, y Miembros de la Sociedad Bolivariana del Magdalena e Instituciones que participaran en el proyecto que no son de la comunidades antes mencionadas, pero que soliciten formalmente su adhesión para participar regularmente en los programas que desarrolla la Cátedra Bolivariana Permanente. IV. CAPITULO. La Cátedra Bolivariana Obligatoria encausa sus actividades en un todo de acuerdo con el Estatuto del Personal Docente y de Investigación de la Universidad de los Andes potenciando la integración de las labores de docencia, investigación y extensión. V. CAPITULO. La Cátedra Bolivariana Obligatoria centra sus principios en el ideal bolivariano, entre los que destacamos: El principio de la Libertad expresado en la práctica de la virtud: “Renovemos en el mundo la idea de un Pueblo que no se contenta con ser libre y fuerte, sino que quiere ser virtuoso.” El principio del sistema de gobierno democrático: “Un gobierno republicano ha sido, es, y debe ser el de Colombia; sus bases deben ser la Soberanía del Pueblo: la división de los poderes y la Libertad civil”. El principio del amor a la Patria: “El amor a la Patria, el amor a las Leyes, el amor a los Gobernantes, Magistrados, a los Tribunales 2 son las nobles pasiones que deben absorber exclusivamente el alma de un Republicano. Los Colombianos amamos a la Patria, pero no aman sus Leyes (...) Si no hay respeto sagrado por la Patria, por las Leyes, y por las autoridades, la Sociedad es una anarquía, un desorden, una confusión, un abismo: es un conflicto singular de hombre a hombre, de cuerpo a cuerpo”. El principio de la educación bolivariana: “La educación popular debe ser el cuidado primogénito del amor paternal del Congreso. Moral y Luces son los polos de una República, moral y luces son nuestras primeras necesidades” (S.B). Renovemos entonces en Colombia, la idea de un Pueblo que no se contenta con ser libre y fuerte, sino que quiere ser virtuoso. El principio de civilismo, de la sensatez, de la urbanidad, fundamentado en el título máximo de la república: el Ciudadano: “Yo quiero ser ciudadano para ser libre y para que todos los sean. Prefiero el título de ciudadano al de Libertador, porque éste emana de la guerra, aquél emana de las Leyes. Cambiadme, Señor, en todos mis dictados por el de buen ciudadano.” (S.B). VI. CAPITULO. La Cátedra Bolivariana Obligatoria se define en cada uno de sus calificativos de la siguiente manera: Cátedra, porque guarda la filosofía expresada en los diseños curriculares de la universidad. Permanente, porque expresa el sentido de la formación permanente de los egresados, al mismo tiempo que vela por su actualización. Simón Bolívar, porque se inspira en la concepción bolivariana. VII. CAPITULO. El emblema de Simón Bolívar que identificara la Cátedra Bolivariana Obligatoria es una creación a lápiz en papel blanco creada en Bogota por el artista Francés Roulin Francois Desiré que representa al Bolívar intelectual. (1828). VIII. CAPITULO. La Cátedra Bolivariana Obligatoria e inexcusable tiene como misión fomentar el ideal bolivariano a través de la investigación que desarrolla la educación Colombiana. Con el objeto primordial de reforzar el conocimiento y la formación bolivariana en las Escuelas, Colegios y Universidades, específicamente en las 3 siguientes cátedras y ejes transversales: La Cátedra Bolivariana; La Identidad Regional y Nacional, La Cultura Colombiana; Valores que obligatoriamente se deben contemplar en el Diseño Curricular de la Educación Colombiana. PROYECTO PARA LA EXTENSIÓN CATEDRA BOLIVARIANA RAMÓN PALACIO BETTER Presidente Sociedad Bolivariana del Magdalena Registro fundamentado de las declaraciones y artículos efectuados por la Sociedad Bolivariana del Magdalena y relacionados con las actividades para la implementación de la Cátedra Bolivariana obligatoria e inexcusable en las comunidades educativas del Distrito de Santa Marta y el Departamento del Magdalena. FUNDAMENTACIÓN IDEOLÓGICA DE LA CÁTEDRA BOLIVARIANA OBLIGATORIA, PERMANENTE. II PARTE INSTRUCCIONES GENERALES. IX. CAPITULO. La Cátedra Bolivariana Obligatoria tiene como objetivos los siguientes aspectos: a) Analizar el pensamiento educativo bolivariano con las categorías que exige la Historia de la Educación actual. b) Confrontar las tendencias y predisposiciones historiográficas del pensamiento bolivariano, en el sentido de construir una historia más crítica que erudita. c) Establecer relaciones con otras organizaciones educativas e interactuar en un todo de acuerdo con el ideal integracionista de Bolívar. 4 d) Desarrollar programas de formación académica: Diplomados, Maestrías, y Doctorados que contribuyan y ayuden a la formación en el pensamiento bolivariano. e) Organizar en las Instituciones educativas del Distrito cursos de talleres y conferencias, conversatorios, simposios, foros y jubileos sobre el pensamiento bolivariano. f) Asistir y concurrir académicamente a las organizaciones que difunden el pensamiento bolivariano, por ejemplo: La Sociedad Bolivariana del Magdalena. g) Difundir a través de la cultura mediática y telemática los planteamientos, proyectos, planes y trazados de la Cátedra Bolivariana Obligatoria e inexcusable. Disposiciones transitorias. Acerca de lo no previsto se considerará en plenaria de la Junta Directiva de la Sociedad Bolivariana del Magdalena y el Gobierno Distrital, Alcalde, Secretario de Educación, Coordinador de Cultura, Fondo de Cultura. EL PROBLEMA DE LOS SIMBOLOS DE LA NACIÓN Y SU TRADICIÓN. A partir de una nueva Ley reafirmar mucho mas el conocimiento de nuestra historia, de los Símbolos del Distrito de Santa Marta y del Departamento del Magdalena y de Colombia, la bandera, el escudo, es necesario ratificar sus contenidos y algunos puntos claves para la reflexión. Para ello, es necesario en primer lugar, qué participen los historiadores de oficio, y los centros de investigación, las academias, las universidades, la Academia de Historia y la Sociedad Bolivariana del Magdalena en la consulta. En segundo lugar, las implicaciones reales que traen consigo estas reafirmaciones de nuestra historia y de nuestros valores patrios locales regionales y nacionales ante nuestras comunidades, con el objeto de ratificar nuestra cultura, identidad y la dignidad como base de nuestra tradición. Y en tercer lugar, preguntarnos acaso ¿estamos en presencia de un nuevo tiempo histórico local, regional 5 o nacional? Es necesario deslindar el actual desconocimiento generalizado, que han ocasionado entre los apócrifos y quiméricos problemas ante la verdadera tradición de nuestros principales valores y la historia en la que día a día se efectúa su desconocimiento. Comencemos por la primera pregunta: La primera respuesta es, que hay que confesar que los historiadores locales, regionales y nacionales, en la actualidad se han olvidado de estudiar y reafirmar la tradición en los diferentes tiempos y épocas históricas de la nación. Quizás, anclados en la vieja Historia Patria, que si bien tuvo un fin, como fue consolidar la memoria histórica, local, regional y nacional, también es verdad que no dejó tener su ingrediente ideológico manipulador de transculturalidad. Y en ese sentido, la Historia Patria sirvió servilmente, sumisamente a muchos y en esa misma dirección a otros, quienes han detentado el poder durante el siglo XX y lo que llevamos del XXI, para legitimarse. La transformación del patriotismo y del nacionalismo Colombiano, como consecuencia de las versiones altruistas neoliberales de la actualidad, y últimamente muy caracterizada o determinada por un neonacionalismo de izquierda y un socialismo que sigue sin estudiarse cabalmente, como debe ser, en nuestros medios locales, regionales y aun nacionales. Es indudable que sorprende el silencio continuo de las Academias y Centros de Historia, de la Maestría y Docencia en Historia, de los Doctorados en Historia, junto a ellas, el silencio de los Centros y Grupos de Investigación Histórica. No dicen nada con densidad, con peso, con solidez, porque el problema no es dar una respuesta ajustada y sometida por la polarización política actual o existente, que en suma es un hecho coyuntural y circunstancial. Sorprende igualmente que algunos historiadores, de reconocida trayectoria local, regional y a nivel nacional, cuando opinan, simplemente responden con el lenguaje del comunicador social, del periodista, y no con el lenguaje del analista, del escritor, del historiador. El historiador más que un estudioso del acontecimiento, 6 del tiempo, estudia la época estructural, el período de larga duración, es decir, el espacio de la lentitud y duración en la historia. Ante este vacío evidentemente que se impone una nueva escenificación del tiempo histórico nacional, diferente a la forma como tradicionalmente se compuso. Históricamente las elites y la inteligencia fueron los ejes protagónicos en su dimensión operativa al gobierno, funcionaron como aparatos ideológicos del Estado, y sirvieron de base en el diseño del tiempo histórico nacional; organizaron los ritos y conmemoraciones cívicas, la historiografía y la ensayística, incluso las obras literarias. De esa manera, la escenificación del tiempo nacional diseñada desde las elites se convirtió por suerte en esqueleto del imaginario nacional, y a la postre como una gran maquinaria persuasiva, categórica, concluyente. Principalmente en nuestra Ciudad desde su fundación y en los Municipios durante los siglos XVI, XVII, XVIII, XIX, XX y lo que va trascurrido del XXI, vale decir, los intelectuales, los académicos y los políticos de nuestra localidad y en las regiones, fueron los principales responsables de la elaboración simbólica y el perfilamiento de las ideas fuerzas para la creación de la nación. Y este aporte a la historia se convirtió a la larga en el gran pecado, para nuestras regiones como génesis de la conciencia nacional precursora, que ha servido para retardar los cambios a los grandes atrasos actuales. Indudablemente, también se han dado momentos de osmosis, conflictos, durante todos estos tiempos especialmente entre la inteligencia y la consciencia popular. 7