Mala consejera - Juventud Rebelde

Anuncio
02
OPINIÓN
JUEVES
juventud rebelde
30 DE MAYO DE 2013
LA TECLA
DEL DUENDE
[email protected]
Flores y refranes
EN la villa del Espíritu Santo, que anda ya al
borde sus 500 años, se reunieron poetas,
investigadores y otros amantes de la décima, esa vasija sonora de auténtica cubanidad, para dar vida al Primer Festival Internacional Toda luz y toda mía. Desde allá nos
llegan los versos del tunero Argel Fernández
Granado y del espirituano Noelio Ramos
Rodríguez. Pertenecen a sus respectivos
libros inéditos Flores azules y Quien no oye
consejo...
Exorcismo. De versos se me llenan los pulmones/ y me siento a escribir porque presumo/ que son pétalos leves como el humo/
elevándose al sol —premoniciones—./ Por un
limpio papel corren legiones/ de Pegasos civiles, y es lo mismo/ que si fuera un milagro, un
exorcismo,/ si le doy libertad a unas palabras/
insólitas, amor, como esas cabras/ que pastan siempre al borde del abismo.
Invierno. El invierno no son los abedules/
desnudos en la nieve, ni los vientos/ quejándose al pasar, ni los asientos/ vacíos en los
parques, con azules/ navajas de silencio. No
me anules/ el sol y la razón, porque me pierdes./ No me niegues tu risa, ni los verdes/
destellos de tu rostro —mi alborada—./ El
invierno es la escarcha en tu mirada./ El
invierno es que ya no me recuerdes. (A.F.G.)
por YAHILY HERNÁNDEZ PORTO
[email protected]
NO hablaré de la naturalidad inherente al
concepto de lo espontáneo, ni de la sencillez con que el espontáneo —casi siempre— asume su proyección, bien recibida y
agradecida por muchos.
Quisiera concentrarme en enfoques de
una cualidad que no siempre puede ser la
condición que inicia el camino y sustenta las
acciones hacia el feliz desenlace de metas,
aspiraciones individuales y colectivas.
Admitámoslo: aún arrastramos en muchos lugares un modo de hacer cosas en
que el trabajo cotidiano se deja al azar, a la
voluntad de unos pocos o de una mayoría
sin rumbo ni concierto, y que lamentablemente deriva en la espontaneidad de todos
o de nadie, proporcionando muy escasos
frutos allí donde se manifieste.
Si el voluntarismo fuese una línea de ferrocarril, podría aseverarse que no hay tren
que marche por ella o por lo menos ninguno lo haría bien.
La imagen utilizada podría parecer extraída de un relato de ficción, pero se oculta
detrás de experiencias reales de numerosos compatriotas.
Mala consejera
En nuestra cotidianidad esos trazos insisten en encontrar espacio. Afloran, por
ejemplo, en esos balances laborales o de
organizaciones en que problemas planteados hasta el cansancio retornan al centro
del debate una y otra vez.
En uno de ellos me sentí atrapada hace
solo unos días. Los presentes en la reunión
no imaginaban que entre ellos, como invitada, se hallaba esta reportera quien, coincidentemente, estaba en el mismo lugar y ante
las mismas caras… seis meses atrás.
Del escenario anterior regresaban no solo
los mismos problemas, sino también un ambiente de inactividad en que los protagonistas procuraban respuestas al margen de su
espacio, obligación o intereses comunes.
Después que el esférico de la discordia
saltó de mano en mano, uno de los presentes asumió el trabajo de ese colectivo, carente hasta el momento de un líder en que sobresalieran la disciplina y organización. Ahora
parecen haberlas hallado, con lo cual podrán
dejar muy poca brecha a que la inercia, el
descuido o la indiferencia se alíen al «quizá,
tal vez, a lo mejor».
Y es que ni el más sencillo planteamiento propuesto por un colectivo puede quedar
a la espontaneidad, al hecho de que alguien
suponga que las cosas marcharán invariablemente bien, con lo cual no habrá hecho
otra cosa que improvisar.
El trabajo de un grupo de personas puede enriquecerse a partir de actos espontáneos que se integren a un ejercicio creativo
individual y colectivo. Esos pueden contribuir al logro de ambientes más participativos, socializadores y de comunicación.
Pero habrá de existir un liderazgo, una
guía o ¿quién cohesionará a todos para gestionar o exigir soluciones? De no ocurrir ello,
¿quién o quiénes serán, a la larga, los responsables, sino el mismo colectivo que no
logró enmendar su mayor vulnerabilidad, su
espontaneidad magnificada, razón por la
que nadie se responsabilizó con acuerdos o
dio seguimiento a las inquietudes?
El tema da para más, pero una idea martillea las sienes: si la espontaneidad es la vía de
proyección hacia el futuro, ¡cuidado!, porque a
ella —mala consejera— pueden arrimarse sus
hermanos la improvisación y el conformismo.
ACUSE DE RECIBO
PROVERBIANDO
23. Resulta grato tener/ el pan caliente y
seguro/ del presente y el futuro/ sin ningún
esfuerzo hacer./ Poder vestir y comer/ a
fuerza de mendigar,/ más no se debe olvidar/ la regla de este decir:/ contra el vicio de
pedir/ hay la virtud de no dar.
30. No te duermas, no confíes,/ no te
enredes, ten cautela,/ siempre ten un ojo en
vela,/ ni te amarres, ni te líes./ Contra razón
no porfíes/ y evita cualquier desvío/ pues
puede el destino impío/ tenderte un lazo
traidor/ porque al mejor nadador/ lo puede
arrastrar el río.
76. No seas intransigente/ con quien
comete un error,/ resulta mucho mejor/ ser
humano y consecuente./ El sastre muy eminente/ echa a perder una ropa./ Puede romper una copa/ el más ducho cantinero./ Y
hasta al mejor cocinero/ le cae un pelo en la
sopa. (N.R.R.)
ENCUENTRO ESPIRITUANO
Este domingo, a las 10:00 a.m., en la
galería de arte Oscar Fernández Morera, los
tecleros del Yayabo se encontrarán. Tema:
fiesta de papás y aniversario.
GRAFITI
Cortés: Conocerte fue el mejor regalo de
la vida, pero amarte es más que la dicha de
seguir viviendo. Nataly Lamour
Mi genio: Solo espero que hagas realidad mis sueños. Tu Vivi
Javi: Lo k c kiere, c straña. Elayne
J: Por un lado me gustas... y por el otro
¡también! G
SEMILLA
Engáñame bien, chaleco, que te conocí
sin mangas.
JOSÉ ALEJANDRO RODRÍGUEZ
[email protected]
LOS principios de la participación ciudadana deben afianzarse más con hechos que
con palabras, desde edades tempranas. En
un país que cambia y se descentraliza, qué
bueno que nuestros niños en sus escuelas
comiencen desde temprano a ejercitarse
en decidir y seleccionar colectivamente, con
transparencia y honestidad. De ello dependerá que cada vez nuestro socialismo sea
más democrático, y que muchas decisiones
puedan ser avaladas y consensuadas por
las bases de nuestra sociedad.
Algunos casos, empero, quieren negar
ese acierto. Lo digo por la carta que me envía María del Carmen Barnat, desde Calle
10 No. 127, entre 1 y 3, Bejucal, provincia
de Mayabeque. Una carta que relata el
amargo sabor que dejó un proceso de selección «no suficientemente transparente»
de pioneros para un estímulo, en alumnos
de la escuela Primaria Matilde Varona, de
ese municipio.
Relata ella que llegaron a esa escuela
cinco plazas para asistir un fin de semana
al Campamento de Pioneros de Varadero,
como estímulo al esfuerzo, participación e
integralidad de los alumnos en el presente
curso escolar. Y la selección se hizo sin la
participación del colectivo pioneril, además
de que no todos los maestros de la escuela conocieron del otorgamiento con la anticipación requerida. Hubo casos que desconocían totalmente el hecho.
Según la lectora, se otorgó una plaza directa, sin análisis de la escuela y por indicación superior de la Organización de Pioneros
DIRECTOR:
Pelayo Terry Cuervo
SUBDIRECTORES EDITORIALES:
DIARIO DE LA JUVENTUD CUBANA
Fundado por Fidel el 21 de octubre de 1965
Herminio Camacho Eiranova, Ricardo
Ronquillo Bello y Marina Menéndez
Elegir, desde niños
José Martí (OPJM) —la carta no precisa a
qué nivel— a una alumna con suficientes
méritos e integralidad, que fue galardonada
en conmemoración de los aniversarios de
la UJC y la OPJM.
Prosigue María del Carmen que «lo peor
es que la selección de los otros cuatro no
tomó en cuenta la integralidad de los mejores alumnos y, en cambio, se tomaron decisiones en un reducidísimo grupo de dirección de la escuela, sin la participación de
todos los maestros, que hubieran dado criterios que enriquecerían la selección».
Afirma no saber qué parámetros se tuvieron en cuenta para la selección, pues no
hubo explicaciones al respecto. Los nombres
de los escogidos fueron informados con
premura sin que fueran llevados a la asamblea de pioneros.
Refiere que los padres comenzaron a
enterarse de la selección a los pocos días,
por medio de los propios niños, quienes no
entendían por qué no estaban incluidos
algunos compañeritos, que eran superiores
en resultados a los elegidos.
Al personarse María del Carmen en la
escuela, sin tiempo ya para que se modificaran las decisiones, se dirigió a la Directora para conocer los pormenores. De
acuerdo con la carta, esta última argumentó que del aula a la cual pertenece la pionera elegida centralmente no se incluyeron
más pioneros. Reconoció que era cierto
que en la misma había alumnos muy buenos, pero no podían concentrar los estímulos en ese grupo.
SUBDIRECTOR ADMINISTRATIVO:
Enrique Saínz Alonso
REDACCIÓN: Territorial y General Suárez, Plaza
de la Revolución, La Habana, Cuba.
APARTADO: 6344
«Los alumnos con posibilidades —refiere— no entendían por qué ellos siempre son
los escogidos para poner en alto el nombre
de la escuela, no solo por sacar buenas
notas, y ahora no eran estimulados».
Tales decisiones, «poco transparentes» según María del Carmen, no contribuyen a la
mejor formación de los niños, a quienes no
se debe exponer desde edades tempranas a
contradicciones ajenas a los valores con que
han de egresar de la escuela.
María del Carmen señala el peso que
tuvieron en ese procedimiento la Directora de
la escuela y la Jefa de Enseñanza Primaria de
la Dirección Municipal de Educación. Según
detalla la carta, esta última, ante el reclamo
hecho por la lectora, alegó que para ella era
muy fácil resolver el problema: trasladaba las
plazas para otra escuela, y se acababa el asunto, pues esa situación se había propiciado
por ser en Varadero el campamento. «Es una
respuesta poco ética e irrespetuosa, viniendo
de un dirigente de Educación», señala.
Aclara que tampoco pretendía que se
despojara a los alumnos ya seleccionados
de su derecho, pues son niños al fin. «Pero
duele saber que pioneros esforzados, que
luchan por poner en alto el nombre de su
escuela, apoyan cuanta convocatoria se programe, tratan de alcanzar los mejores resultados académicos y participan en concursos, no fueron premiados, porque sentimientos ajenos o incapacidades para el análisis
no lo permitieron».
Sería saludable que las autoridades de
Educación esclarecieran este asunto.
ZONA POSTAL: La Habana 6, CP: 10600
PIZARRA: 882-0155, 882-0346, 882-0789
TELÉFONO ATENCIÓN A LECTORES: 881-8265
FAX: 883-8959
CORREO ELECTRÓNICO: [email protected]
INTERNET: www.juventudrebelde.cu
ISSN: 0864-1412
Impreso en el Combinado
de Periódicos Granma.
Descargar