Celebración de Santa Juana en el CMU

SANTA JuANA DE LESTONNAC 2015
COLEGIO MAYOR LESTONNAC, BARCELONA
El 14 de Mayo celebramos la
festividad de Santa Juana de
Lestonnac, patrona del Colegio
Mayor.
Una semana antes, comenzamos
a sentir su presencia. La
ambientación de la portería y unas
viñetas del cómic de Carles
Alberdi nos ayudaron a ir
descubriendo, día a día, quién era
esta mujer tan importante que
había dado nombre a nuestro
Colegio Mayor.
.
El ascensor, paso obligado para casi todas,
fue el mejor escenario para entrar en su
historia, introducirnos en el Burdeos del
siglo XVI y XVII e ir conociendo, porque
ella nos lo iba contando, datos
cronológicos de su vida, recuerdos
importante de su historia y de su
trayectoria como joven, mujer, casada,
madre, viuda y monja, y cómo había ido
respondiendo a los acontecimientos de la
vida y a los deseos de Dios sobre ella.
El último día se invitó a nuestra fiesta!!
Al terminar cada día nos preguntábamos:
¿qué nos contará mañana?
En esta semana también preparamos las cintas
de colores que íbamos a regalar a los tunos…
Al final, nosotras y el Colegio Mayor estábamos
preparados… Y llegó el día! Desde por la mañana,
la capilla y el jardín central del CM quedaron
engalanados y preparados para la fiesta de la
noche. Comenzó a las 21,00h.
Para las veteranas, por la experiencia de años anteriores, la fiesta era esperada como la mejor fiesta, la
FIESTA GRANDE del año! y las de primero, poco a poco, se fueron contagiando. Privilegio especial: las
veteranas podían invitar a un amigo/a. Con estas invitaciones, el Colegio Mayor se llenó de rostros amigos,
de antiguas colegialas y nuestra fiesta se hizo más grande.
Para iniciar la Eucaristía, hicimos un recorrido por el curso y recordamos los motivos de la celebración:
Agradecer el camino recorrido en este curso
Celebrar a Juana de Lestonnac, fundadora de la Compañía de María
Despedir a Felicidad Asangono, finalista después de 6 años en el CMU Lestonnac
Unos símbolos nos ayudaron a recordar algunos momentos significativos del curso e hicimos memoria de
Juana de Lestonnac con un doble mensaje:
Mantener la llama
Tender la mano
Han pasado 408 años, y aquel primer proyecto de educación para niñas en Burdeos ha llegado vivo y
actualizado hasta nosotras: Jóvenes universitarias del siglo XXI
A la luz del Evangelio de Juan: “Como el Padre me ama a mí, así os amo
yo a vosotros. Permaneced en mi amor. A vosotros os llamo amigos y os
he destinado para que os pongáis en camino y deis fruto abundante. Lo
que yo os mando es que os améis unos a otros” vivimos, en el
momento del ofertorio, una experiencia de interioridad y de
expresión corporal orientada por Mª Luz López.
Nos invitó a escuchar nuestro interior, a recoger nuestros
sentimientos más hondos, a sentirnos grupo joven en torno a Jesús,
y a expresar, con un abrazo verdadero y una palabra sincera, a la
compañera que estaba más próxima, nuestro afecto, nuestro
mensaje de amistad y nuestro compromiso de entrega, porque…
Un duo del Coro Lestonnac, formado por María Bagur y
Felicidad Asangono, con mucha maestría, fue animando
distintas partes de la celebración.
La canción final, con las voces de todas, fue un homenaje
vibrante a Juana de Lestonnac
OH, JOANA T’ESTIMO...
M’estimes
sí, jo ho sé, vas estimar-me a l’alba
i em vas encendre el cor i em vas donar esperança.
OH, OH, JOANA
I sé que tu m’estimes, Joana de Lestonnac,
m’ho ha dit el vent i el temps i ho canten els estels.
OH, OH, JOANA
I HO VISC AIXÍ, AIXÍ, TAN CLAR I TAN SENZILL HO VISC AIXÍ, AMB
TU, OH JOANA
Volem estimar el món com tu ens vas ensenyar
Portant Crist en el cor donant-lo a cada instant. OH, OH, JOANA…
Despedimos con cariño a Felicidad
Asangono: seis años en el Lestonnac en
los que hemos tenido la oportunidad de
vivir con ella y de ser su segunda familia
en España.
Vuelve a Guinea Ecuatorial con un título
universitario, pero sobre todo, con una
formación grande; muchos saberes,
valores, experiencias, amistades; años
vividos en España que ya forman parte de
su propia historia.
Nos compartió su experiencia y nos regaló
palabras agradecidas y emocionadas que nos tocaron el corazón. Como es tradición, terminamos la
despedida con esta bendición irlandesa
Que los caminos se abran a tu encuentro
Que el sol brille cada día sobre tu rostro
Que la lluvia caiga suave sobre tus campos
Que el viento sople siempre a tu espalda
Que tus ojos reflejen un brillo de amistad como el sol, que surge entre las
nubes y calienta el mar tranquilo
Y hasta que volvamos a vernos…
que Dios te sostenga en la palma de su mano.
Pasamos al comedor que estaba instalado en el jardín del CM. El marco ambiental fue muy bonito; creó un
buen ambiente para gozar de una cena festiva. El equipo de cocina nos preparó un menú muy rico, ¡Gracias!
En los postres, como estaba previsto, llegaron los tunos.
Un grupo muy numerosos de chicos majos y alegres que
nos hicieron pasar una velada muy agradable. Las cintas
de colores con mensajes de amistad, repartidas como
regalo sorpresa al finalizar su actuación, expresaron
nuestro agradecimiento.
Y con el corazón lleno de alegría, pasada la media
noche, nos fuimos despidiendo…