(COLOR) - Pub: PERIODICO ND Doc: 02995M Red: 60% Ed: Primera EDICION Cb: 00 Enviado por: Dia: 09/07/2006 - Hora: 21:33 Cosas de la vida LUNES 10 DE JULIO DEL 2006 SOCIEDAD Verano sofocante 3 El ‘hobby’ Páginas 28 y 29 LLL ‘Meteolocos’ en línea Cerca de 200 aficionados a la meteorología conectan sus estaciones en una red por internet H Meteoclimatic ofrece información en tiempo real sobre temperaturas y lluvia JOAN PUIG REPORTAJE ANTONIO MADRIDEJOS BARCELONA Garil, Checo, Gale, Egarenc, Roberto, Meteocoll, Javalambre, Sinner y otros muchos aficionados a la meteorología, todos con nicks anónimos para internet, han decidido conectar sus estaciones automáticas en una ambiciosa red que permite consultar en tiempo real y con gran fiabilidad la temperatura, la lluvia y otros parámetros meteorológicos en cerca de 200 localidades de España, muchas más incluso de las que ofrecen los organismos oficiales. Y de forma gratuita. La red, que se llama Meteoclimatic (www.meteoclimatic.com), nació en agosto del 2004 con un puñado de estaciones automáticas, la mayoría de Catalunya, pero ha crecido sin cesar de forma sorprendente y ahora hasta puede presumir de haber llegado a Portugal. Su éxito ha sido el boca a boca o, en versión moderna, los foros de internet dedicados al tiempo. «Recibimos entre 7.000 y 10.000 visitas diarias», presume Joan Carles Pallejà, comercial de 35 años, que aporta la estación que tiene en su casa de Cambrils (Tarragonès). desde pequeño –relata–. Empecé con un termómetro casero y ahora tengo dos estaciones». Uno de sus cometidos en Meteoclimatic, voluntario como todos, es comprobar si las estaciones que quieren entrar a formar parte de la red están emplazadas en un sitio correcto, especialmente que no queden junto a paredes u otros obstáculos que impidan la circulación del aire y la lluvia. «No podemos obligar a nadie a cumplir las recomendaciones de la Organización Meteorológica Mundial –resume Pallejà– porque muchos socios viven en pisos y su única opción es colocar la estación en la azotea del edificio. Sólo les damos consejos». En cualquier caso, según Sánchez, una buena estación aficionada (entre 500 y 2.000 euros), bien calibrada, puede ofrecer datos similares a 3 ORÍGENES La iniciativa nació en agosto del 2004 en Catalunya, pero ahora ya llega hasta Portugal 3 PARTICIPANTES No es necesario tener una superestación, pero sí un sitio adecuado para situarla 33 En Cambrils 8 Joan Carles Pallejà, con la garita meteorològica instalada en su casa. JOSEP GARCÍA Apuesta por el altruismo Meteoclimatic surgió de un grupo aficionados que ya disponían de una estación y querían compartir los datos obtenidos con gente a la que no tenían el gusto de conocer. En unos tiempos en que la información meteorológica tiende a perder su gratuidad, Meteoclimatic apuesta por el altruismo. «No competimos con los organismos oficiales –dice Pallejà–. Lo nuestro es otra cosa: es puro hobby». el Periódico 29 33 En Terrassa 8 Josep Sort, precursor informático de Meteoclimatic. «Nuestra meta es ser humildes», insiste Crispín Parra, carpintero de 29 años y poseedor de una estación top ten en Roda de Barà. Y es que en Meteoclimatic hay auténticos expertos: Parra, por ejemplo, colabora en la revista local como predictor meteorológico. «Supongo que la meteorología la llevas siempre dentro, pero gran parte de la afición se la debo a mi suegro, de La Nou de Gaià –dice–. Él me contagió». Toni Sánchez (33 años) trabaja en el aeropuerto de Eivissa y, al igual que sus colegas, se declara meteoloco, es decir, está dispuesto a mojarse por observar un aguacero hermoso. «Aunque hay gente a la que le asustan las tormentas, a mí me gustan los de los organismos oficiales. «La fiabilidad es buena», repite Parra. El programador informático Josep Sort (39 años, Terrassa) es una pieza esencial en Meteoclimatic: no sólo ha desarrollado el complejo sistema que permite enlazar online las estaciones, sino también la plantilla que permite darse de alta. «Se puede apuntar cualquiera. No hace falta tener una estación RainWise o una Davis especial –pone como ejemplo Sort–. Tampoco hace falta tener conectado el ordenador las 24 horas. No forzamos a nadie. Cada uno hace lo que puede». Si alguna estación falla, el ordenador central la anula automáticamente. ¿Y el futuro? «Nos gustaría tener más gente, por supuesto, pero sobre todo llegar a regiones a las que aún no llegamos, como Aragón», concluye Sort. Pero las cosas están cambiando. H