LA HOJA VOLANDERA RESPONSABLE SERGIO MONTES GARCÍA Correo electrónico [email protected] En Internet www.lahojavolandera.com.mx LA GENERACIÓN DE MEDIO SIGLO (Primera parte) Nelly Farrera González* *Alumna de la carrera de Lengua y Literatura Hispánicas (FES-Acatlán) A mediados del siglo XX se había logrado tener una cierta estabilidad política y económica en México debido a varios factores; el primero de ellos, corresponde a los gobiernos de Manuel Ávila Camacho (1940- 1946) y Miguel Alemán (19461952), los cuales brindaron una relativa seguridad así como un rápido crecimiento y diversificación de la economía, diferencia notable con los que precedieron el conflicto revolucionario; mientras que el estallido de la II Guerra Mundial y las consecuencias que ésta generó en los distintos mercados también colaboró para que México tuviera un notable crecimiento en la demanda externa de productos así como una disminución de la competencia exterior en el mercado interno, por lo que el presupuesto federal destinado a estimular el crecimiento económico rebasaría incluso el 50% con el presidente Miguel Alemán. 1 Todo lo anterior ayudó para que a principios de la década de los cincuenta, la ciudad de México estrenara su radiante modernidad: cafés, teatros, cines, librerías y restaurantes fueron punto de encuentro obligado para aquellos que demoraban su ocio nocturno en las calles del centro de la ciudad; la estabilidad económica y política que se vivió permitió el nacimiento de un nuevo México, el cual, contaba con intereses y preocupaciones propias, uno que se apartaba del sentimiento de culpa por lo que dejaba atrás; el desprendimiento del pasado le permitió figurar un nueVéase PEREIRA, Armando, Narradores mexicanos de medio siglo, 1947-1968, UNAM, México, 2006, pp. 14-15. 1 Enero 25 de 2014 www.lahojavolandera.com.mx LA GENERACIÓN DE MEDIO SIGLO (I) vo proyecto cultural inédito, ese México agrícola y revolucionario de la primera mitad de siglo quedaba atrás para dar cabida a uno moderno y cosmopolita con sofisticaciones y confort de la era técnica industrial. 2 La vocación y deseo por la universalidad, aunque no logró borrar completamente las raíces profundas de la historia y tradiciones mexicanas, si permitió la posibilidad de imaginar tanto escenarios como problemáticas diferentes, así como idear nuevas estrategias discursivas, estructurales o léxicas; por lo que en el ámbito propiamente literario, sobre todo a partir de 1956, un grupo de jóvenes escritores tomarían las riendas de la literatura, para desplegar tanto un nuevo proyecto de arte y literatura así como una concepción innovadora de los mismos, lo que generó que se formulara una idea distinta del mundo así como de las construcciones que en él se forjan. A este grupo de jóvenes escritores se le ha denominado de muy distintas maneras: “Generación de Medio Siglo”, “Generación de la Casa del Lago”, “Generación de la Ruptura”, “Generación de la Revista Mexicana de Literatura”, nombres que resultarían ser marcas distintivas del grupo, el cual se distinguiría por su actividad decisiva en las formas de significar la ficción, así como por experimentar con diversas configuraciones imaginativas; aspectos que se revelarían posteriormente como lo prohibido, lo deseado o lo inocente. 3 Sin embargo, a pesar de las muchas marcas distintivas impuestas a este grupo, se optó por Generación de Medio Siglo, debido a que el término “generación” concuerda con el que Ortega y Gaset alude en su texto El tema de nuestro tiempo 4, puesto que no nos referimos únicamente a un aspecto biológico ni genealógico, sino más bien a un aspecto histórico y cultural, en el que sus miembros participan de cierta sensibilidad colectiva que se refleja en la manera de percibir y reproducir el mundo, en sus ideas y actitudes en común, así como en anhelos e intereses compartidos. Se ha considerado que la designación “de Medio Siglo”, brinda una visión panorámica del grupo considerando la temporalidad del grupo como lo más importante, sin olvidar además que la mayoría de sus integrantes nacieron alrededor de los años treinta y que empezaron a publicar sus obras a mediados de siglo, por lo que dejaremos de lado las denominaciones que atienden más a las organizaciones o publicaciones a las cuales pertenecieron algunos de sus miembros (“La Casa del Lago” o “Revista Mexicana de Literatura”). Una vez expuesta la situación de las distintas designaciones que se le han impuesto a este grupo, podemos concentrarnos en sus características e intereses. Hay que mencionar que un antecedente literario inmediato fue la obra Al filo del agua, de Agustín Yáñez; mientras que los miembros de dicho grupo compartían también otras Ibidem, p. 111. Véase, CASTILLO, García, María Esther, La seducción originaria, México, CONACYT, 2009, 12 p. 4 Apud PEREIRA, Armando, op.cit. p. 114. 2 3 ╣2╠ www.lahojavolandera.com.mx LA GENERACIÓN DE MEDIO SIGLO (I) características en común, por ejemplo, muchos de ellos tenían su origen en la provincia del país, Huberto Batis junto con Carlos Valdés provenían de Guadalajara, Inés Arredondo de Sinaloa, Juan Vicente Melo y Sergio Pitol de Veracruz, Jorge Ibargüengoitia de Guanajuato, Juan García Ponce de Yucatán, los cuales buscaban quizá en la capital de la ciudad, un horizonte más amplio que llenara sus expectativas e inquietudes literarias. 5 Armando Pereira además considera la posible existencia de una red de túneles y pasadizos secretos que comunican la obra de Juan Vicente Melo e Inés Arredondo con la de García Ponce, Pitol y Salvador Elizondo, sólo por mencionar algunos casos; lo anterior no es fortuito, sino más bien, resultado de tener afín lecturas, intereses y anhelos, así como un deseo exacerbado de comunicar libremente, fuera de las normas y convenciones culturales establecidas; además de sentir un rechazo innegable hacia algún tipo de censura que pudiera limitarlos en su expresión y poseer una decidida vocación crítica. Por otra parte, uno de los lugares más importantes que vio reunidos a los integrantes de esta Generación fue el Centro Mexicano de Escritores (CME), fundado en 1951 por iniciativa de Margaret Shedd, escritora norteamericana 6; dicho lugar, tenía como principal función brindar incentivos económicos a los nuevos escritores norteamericanos y mexicanos 7 para que pudieran dedicarse a escribir, con reuniones sabatinas en donde se leían, compartían y brindaban diversas críticas sobre los escritos de cada uno; el CME contaba con el apoyo y financiamiento tanto del gobierno como de algunas Instituciones que permitían su funcionamiento. 8 Algunos de los becarios que este Centro tuvo entre mediados de los años cincuenta y finales de los sesenta fueron: Jorge Ibargüengoitia (1954-1955 y 19551956), Tomás Segovia (1954-1955 y 1955-1956), Juan García Ponce (1957-1958 y 1963-1964)9, Inés Arredondo (1961-1962), Vicente Leñero (1961-1962 y 19631964), Carlos Monsiváis (1962-1963 y 1967-1968), Salvador Elizondo ( 1963-1964 y 1966-1967), Fernando del Paso (1964-1965) y José Emilio Pacheco (1969-1970). Idem. Esta escritora junto con el patrocinio de la Fundación Rockefeller, dieron origen al CME; aunque posteriormente debido a la inversión nacional que logó obtener el Centro pudo prescindir de la Fundación Rockefeller para convertirse en una institución mexicana independiente. 7 Sin embargo, a partir de 1960, las becas para escritores norteamericanos fueron suspendidas, porque según García Beraza, la mezcla de lenguas y nacionalidades había sido un error desde el principio. 8Las principales Instituciones que subsidiaron al CME fueron: Juan Cortina Portilla, Elizabeth De Cou de Beteta, el grupo Somex, Petróleos Mexicanos, Fomento Cultural Banamex, el Departamento del Distrito Federal, los gobiernos de los estados de Guanajuato y Nuevo León, la Secretaría de Educación Pública, la fundación Mary Street Jenkins de Puebla y la Universidad Nacional Autónoma de México. Por desgracia, el 22 de Agosto de 2005, el CME cerró sus puertas definitivamente debido a problemas económicos, puesto que dejó de contar con el apoyo de Instituciones y patrocinadores para seguir apoyando a sus becarios. Véase “Cierran Centro Mexicano de Escritores” en EL UNIVERSAL.mx disponible en www.eluniversal.com.mx/cultura/44485.html [actualizado 2013-12-10] 9 Este autor renunció a la beca la segunda vez que el Centro se la otorgó y mantuvo desde ese momento una actitud crítica hacia el CME. 5 6 ╣3╠