Gibraltar, Textos Básicos Datos generales de Gibraltar Textos de la ONU OSCE Declaraciones y acuerdos entre el Estado español y Gran Bretaña Datos Generales sobre Gibraltar Gibraltar es una angosta península que sobresale longitudinalmente de la costa sudoccidental de Andalucía, a la que está unida por un istmo de aproximadamente 1,6 kilómetros de longitud. El puerto andaluz de Algeciras está 8 kilómetros al oeste, en el extremo opuesto de la bahía; al otro lado del Estrecho de Gibraltar, a 32 kilómetros de distancia, se encuentra el continente africano. La superficie de Gibraltar es de 4,8 kilómetros cuadrados. Con arreglo al último censo de Gibraltar, realizado el 14 de octubre de 1991, la población civil ascendía a 28.074 personas en 1991, de las que 20.022 eran gibraltareños, 5.182 súbditos británicos de otro origen, incluidos los familiares de los militares británicos destinados en Gibraltar, pero excluidos éstos, y 2.870 extranjeros. Gibraltar carece de recursos naturales y de tierras agrícolas. La industria, el comercio y los servicios del Territorio se centran sobre todo en atender a las necesidades de la población y del gran número de visitantes. La economía de Gibraltar depende en gran medida del turismo y de los servicios financieros, tales como los que prestan las entidades bancarias, de seguros, de transporte marítimo y de gestión de carteras de inversiones. Según la Potencia Administradora, en 1993/1994 el producto interno bruto per cápita y el producto nacional bruto del Territorio ascendían a alrededor de 10.881 y 11.331 libras, respectivamente. En 1996 había en Gibraltar 13.000 personas empleadas y 1.800 desempleadas; las cifras correspondientes a 1995 fueron 12.702 y 352, respectivamente. El ingreso medio semanal en el Territorio era de 233,32 libras en 1995 y de 220,78 libras en 1994. En 1996 las importaciones y exportaciones ascendieron a 500 millones y 200 millones de libras, respectivamente. Del Reino Unido procede más de la tercera parte de las importaciones de Gibraltar, excluidos los combustibles. También se importan productos de los Países Bajos, el Japón, Andalucía y España. Son insignificantes las exportaciones de productos de origen local. Las exportaciones consisten principalmente en la reexportación de petróleo y de productos petrolíferos a empresas de transporte marítimo. El número de turistas que llegaron al Territorio fue de 5,5 millones en 1995 y de 4,2 millones en 1994. En 1995 las estancias en establecimientos hoteleros aumentaron un 21% respecto de 1994. El 16 de mayo de 1996 se celebraron elecciones generales en Gibraltar. Según la Potencia Administradora, participó el 88% de los votantes censados. Según esa misma fuente, los votos se distribuyeron de la manera siguiente: 52,2% para el Partido Socialdemócrata de Gibraltar, 43% para el Partido Laboral Socialista de Gibraltar y 4,7% para el Partido Nacional de Gibraltar. Por consiguiente, el Partido Socialdemócrata de Gibraltar obtuvo ocho escaños en la Asamblea Legislativa del Territorio, en tanto que el Partido Laboral Socialista de Gibraltar obtuvo siete escaños. El Sr. Peter Caruana, que encabezaba el Partido Socialdemócrata de Gibraltar, obtuvo 8.561 votos y fue nombrado Ministro Principal de Gibraltar. Tratado de Utrecht ARTICULO X DEL TRATADO DE UTRECHT (13 DE JULIO DE 1713) El Rey Católico, por si y por sus herederos y sucesores, cede por este Tratado a la Corona de la Gran Bretaña la plena y entera propiedad de la ciudad y castillo de Gibraltar, juntamente con su puerto, defensas y fortaleza que le pertenecen, dando la dicha propiedad absolutamente para que la tenga y goce con entero derecho y para siempre, sin excepción ni impedimento alguno. Pero, para evitar cualesquiera abusos y fraudes en la introducción de las mercaderías. quiere el Rey Católico, y supone que así se ha de entender, que la dicha propiedad se ceda a la Gran Bretaña sin jurisdicción alguna territorial y sin comunicación alguna abierta con el país circunvecino por parte de tierra. Y como la comunicación por mar con la costa de España no puede estar abierta y segura en todos los tiempos, y de aquí puede resultar que los soldados de la guarnición de Gibraltar y los vecinos de aquella ciudad se vean reducidos a grandes angustias, siendo la mente del Rey Católico sólo impedir, como queda dicho arriba, la introducción fraudulenta de mercaderías por la vía de tierra. se ha acordado que en estos casos se pueda comprar a dinero de contado en tierra de España circunvecina la provisión y demás cosas necesarias para el uso de las tropas del presidio, de los vecinos y de las naves surtas en el puerto. Pero si se aprehendieran algunas mercaderías introducidas por Gibraltar, ya para permuta de víveres o ya para otro fin, se adjudicarían al fisco, y presentada queja de esta contravención del presente Tratado serán castigados severamente los culpados. Y Su Majestad Británica. a instancia del Rey Católico consiente y conviene en que no se permita por motivo alguno que judíos ni moros habiten ni tengan domicilio en la dicha ciudad de Gibraltar, ni se de entrada ni acogida a las naves de guerra moras en el puerto de aquella Ciudad, con lo que se puede cortar la comunicación de España a Ceuta, o ser infestadas las costas españolas por el corso de los moros. Y como hay tratados de amistad. libertad y frecuencia de comercio entre los ingleses y algunas regiones de la costa de Africa. ha de entenderse siempre que no se puede negar la entrada en el puerto de Gibraltar a los moros y sus naves, que sólo vienen a comerciar. Promete también Su Majestad la Reina de Gran Bretaña que a los habitantes de la dicha Ciudad de Gibraltar se les concederá el uso libre de la Religión Católica Romana. Si en algún tiempo a la Corona de la Gran Bretaña le pareciere conveniente dar, vender o enajenar, de cualquier modo la propiedad de la dicha Ciudad de Gibraltar, se ha convenido y concordado por este Tratado que se dará a la Corona de España la primera acción antes que a otros para redimirla. Textos de las Naciones Unidas Resolución 1514 (XV) de la Asamblea General de 14 de diciembre de 1960 La Asamblea General Teniendo presente que los pueblos del mundo han proclamado en la Carta de las Naciones Unidas que están resueltos a reafirmar la fe en los derechos fundamentales del hombre, en la dignidad y el valor de la persona humana, en la igualdad de derechos de hombres y mujeres y de las naciones grandes y pequeñas, y a promover el progreso social y a elevar el nivel de vida dentro de un concepto más amplio de la libertad. Consciente de la necesidad de crear condiciones de estabilidad y bienestar y relaciones pacíficas y amistosas basadas en el respeto de los principios de la igualdad de derechos y de la libre determinación de todos los pueblos, y de asegurar el respeto universal de los derechos humanos y las libertades fundamentales para todos, sin hacer distinciones de raza, sexo, idioma o religión, y la efectividad de tales derechos y libertades. Reconociendo el apasionado deseo de libertad que abrigan todos los pueblos dependientes y el papel decisivo de dichos pueblos en el logro de su independencia. Consciente de los crecientes conflictos que origina el hecho de negar la libertad a esos pueblos o de impedirla, lo cual constituye una grave amenaza a la paz mundial. Considerando el importante papel que corresponde alas Naciones Unidas como medio de favorecer el movimiento en pro de la independencia de los territorios en fideicomiso y en los territorios no autónomos. Reconociendo que los pueblos del mundo desean ardientemente el fin del colonialismo en todas sus manifestaciones. Convencida de que la continuación del colonialismo impide el desarrollo de la cooperación económica internacional, entorpece el desarrollo social, cultural y económico de lo pueblos dependientes y milita en contra del ideal de paz universal de las Naciones Unidas. Afirmando que los pueblos pueden, para sus propios fines, disponer libremente de sus riquezas y recursos naturales, sin perjuicio de las obligaciones resultantes de la cooperación económica internacional, basada en el principio del provecho mutuo, y del Derecho Internacional. Creyendo que el proceso de liberalización irresistible e irreversible y que, a fin de evitar crisis graves, es preciso poner fin al colonialismo y a todas las prácticas de segregación y discriminación que lo acompañan. Celebrando que en los últimos años muchos territorios dependientes hayan alcanzado la libertad y la independencia, y reconociendo las tendencias cada vez más poderosas hacia la libertadque se manifiestan en los terrirorios que no han obtenido aún la independencia. Convencida de que todos los pueblos tienen un derecho inalienable a la libertad absoluta, al ejercicio de su soberanía y a la integridad de su territorio nacional. Proclama solemnemente la necesidad de poner fin rápida e incondicionalmente al colonialismo en todas sus formas y manifestaciones. Y a dicho efecto Declara que: La sujeción de pueblos a una subyagación, y explotación extranjeras constituye una denegación de los derechos humanos fundamentales es contraria a la Carta de las Naciones Unidas y compromete la causa de la paz y de la cooperación mundiales. Todos los pueblos el derecho de libre determinación; en virtud de este derecho, determinan libremente su condición política y persiguen libremente su desarrollo económico, social y cultural. La falta de preparación en el orden político, económico, social o educativo, no deberá de servir nunca de pretexto para retrasar la independencia. A fin de que los pueblos dependientes puedan pacífica y libremente su derecho a la independencia completa, deberá cesar toda la acción armada o toda la medida represiva de cualquier índole dirigida contra ellos, y deberá respetarse la integridad de su territorio nacional. En los territorios en fideicomiso y no autónomos y en todos los demás territorios que no han logrado aún su independencia, deberán tomarse inmediatamente medidas para traspasar todos los poderes a los pueblos de esos territorios, sin condiciones ni reservas, en conformidad con su voluntad y sus deseos libremente expresados, y sin distinción de raza, credo ni color, para permitirles gozar de una libertad y una independiencia absolutas. Todo intento encaminado a quebrantar total o parcialmente la unidad nacional y la integridad territorial de un país es incompatible con los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas. Todos los Estados deberán fiel y estrictamente las disposiciones de la Carta de las Naciones Unidas, de la Declaración Universal de Derechos Humanos y de la presente Declaración sobre la base de la igualdad, de la no intervención en los asuntos internos de los demás Estados y del respeto de los derechos soberanos de todos los pueblos y de su integración territorial. Resolucíón 1.654 (Creación del Comité especial de los 17) (XVI) La situación respecto de la aplicación de la Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales La Asamblea General, Recordando la Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales, contenida en su resolución 1514 (XV) de 14 de diciembre de 1960, Teniendo presentes los propósitos y principios de. dicha Declaración, Recordando en particular el párrafo 5 de la Declaración, que dice: "En los territorios en fideicomiso y no autónomos y en todos los demás territorios que no han logrado aún su independencia deberán tomarse inmediatamente medidas para traspasar todos los poderes a los pueblos de esos territorios, sin condiciones ni reserva, en conformidad con su voluntad y sus deseos libremente expresados, y sin distinción de raza, credo ni color, para permitirles gozar de una libertad y una independencia absolutas". Advirtiendo con pesar que, salvo contadas excepciones, las disposiciones del citado párrafo de la Declaración no se han llevado a la práctica, Advirtiendo que, contrariamente a lo dispuesto en el párrafo 4 de la Declaración, en algunas regiones se sigue recurriendo en forma cada vez más despiadada a la acción armada y a medidas represivas contra los pueblos dependientes, privándolos así de su prerrogativa de ejercer pacífica y libremente el derecho a la independencia absoluta, Profundamente preocupada porque, contrariamente a lo dispuesto en el párrafo 6 de la Declaración, se siguen realizando actos encaminados a quebrantar total o parcialmente la unidad nacional y la integridad territorial en algunos países donde se está verificando la liquidación del régimen colonial. Convencida de que todo nuevo retraso en la aplicación de la Declaración representa una causa constante de conflicto y desacuerdo internacionales, entorpece gravemente la cooperación internacional y está creando en muchas partes del mundo una situación cada vez más peligrosa, que puede constituir una amenaza para la paz y la seguridad internacionales, Insistiendo en que la insuficiencia de la preparación política, económica, social o educativa nunca debería pretexto para retardar la independencia, 1. Reitera y reafirma solemnemente los objetivos y principios incorporados a la Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales, contenida en su resolución 1514 (XV) de 14 de diciembre de 1960; 2. Invita a los Estados interesados a que tomen sin demora medidas con objeto de aplicar y cumplir estrictamente la Declaración; 3. , Decide crear un Comité Especial de diecisiete miembros que serán designados por el Presidente de la Asamblea General en el actual período de sesiones; 4. Pide al Comité Especial que examine la cuestión de la aplicación de la Declaración, formule sugestiones y recomendaciones sobre los progresos realizados y el alcance de la aplicación de dicha Declaración, e informe al respecto a la Asamblea General en su decimoséptimo período de sesiones; 5. Encarga al Comité Especial que, para llevar a cabo su labor, utilice todos los medios que tenga a su disposición, con arreglo a los procedimientos y normas que determine para el buen desempeño de sus funciones; 6. Autoriza al Comité Especial para que celebre reuniones fuera de la Sede de las Naciones Unidas, siempre y cuando esas reuniones sean necesarias para el eficaz desempeño de sus funciones, en consulta con las, autoridades competentes; 7. Invita a las autoridades interesadas a que presten al Comité Especial la más completa colaboración en el cumplimiento de su tarea; 8. Pide al Consejo de Administración Fiduciaria, a la Comisión para la Información sobre Territorios noAutónomos y a los organismos especializados interesados que ayuden al Comité Especial en su labor, dentro de sus respectivas esferas de actividad; 9. Pide al Secretario General que facilite al Comité Especial todos los servicios y el personal necesarios para el cumplimiento de la presente resolución. 1066a. Sesión Plenaria, 27 de noviembre de 19ól. El Presidente de la Asamblea General, en cumplimiento de la resolución que precede, designó a los miembros del Comité especial creado en virtud del párrafo 3 de esta resolución. En su 1094ª sesión plenaria, celebrada el 23 de enero de 1962, la Asamblea General tomó nota de esa designación. El Comité Especial se compone de los Estados miembros siguientes: AUSTRALIA, CAMBOYA, EE.UU. DE AMÉRICA, ETIOPÍA, INDIA, ITALIA, MADAGASCAR, MALÍ, POLONIA, REINO UNIDO DE GRAN BRETAÑA E IRLANDA DEL NORTE, SIRIA, TANGAYICA, TÚNEZ, UNIÓN DE REPÚBLICAS SOCIALISTAS SOVIÉTICAS, URUGUAY, VENEZUELA Y YUGOSLAVIA Comité de los 24: Consenso de 16-10-64. Consenso del "Comité de los Veinticuatro". El 16 de Octubre de 1964, el Presidente del «Comité de los Veinticuatro», Embajador Coulibaly, proclamó solemnemente la decisión final del mismo en el siguiente Consenso: "El Comité Especial, después de haber examinado la situación en el territorio no autónomo de Gibraltar y de haber escuchado las declaraciones hechas por el representante de la Potencia Administradora y por el Representante de España, afirma que las disposiciones de la Declaración sobre la concesión de independencia a los países y a los pueblos coloniales se aplican íntegramente al territorio de Gibraltar. El exámen de estas declaraciones ha permitido al Comité Especial comprobar la existencia de un desacuerdo, incluso de una disputa entre el Reino Unido y España en lo que se refiere al "status" y a la situación del territorio de Gibraltar. En estas condiciones, EL COMITÉ ESPECIAL INVITA AL REINO UNIDO Y A ESPAÑA A INICIAR SIN DEMORA CONVERSACIONES A FIN DE ENCONTRAR, CONFORME A LOS PRINCIPIOS DE LA CARTA DE LA ORGANIZACIÓN DE LAS NACIONES UNIDAS, UNA SOLUCION NEGOCIADA, DE ACUERDO CON LAS DISPOSICIONES DE LA RESOLUCION l.514 (XV) TENIENDO EN CUENTA DEBIDAMENTE LAS OPINIONES EXPRESADAS POR LOS MIEMBROS DEL COMITÉ, ASI COMO LOS INTERESES DE LOS HABITANTES DEL TERRITORIO. Dentro del cuadro del mandato que le fue conferido por la Resolución 1.654 (XVI), el Comité Especial pide al Reino Unido y a España que informen al Comité Especial y a la Asamblea General del resultado de sus negociaciones". Resolucíón 2.070(XX) de 16 de Diciembre de 1965 La Asamblea General, Habiendo examinado la cuestión de Gibraltar. Habiendo estudiado los capítulos de los informes presentados por el Comité especial encargado de examinar la situación con respecto a la aplicación de la Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales relativos a Gibraltar. Habiendo escuchado las declaraciones hechas en la "IV Comisión", 1. Invita a los Gobiernos de España y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte a iniciar sin demora las conversaciones previstas según los términos del Consenso aprobado el 16 de Octubre de 1964 por el Comité Especial encargado de examinar la situación con respecto a la aplicación d la Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales". 2. Pide a ambos Gobiernos que informen sobre el resultado de sus negociaciones al "Comité Especial" y a la Asamblea General en su vigésimo primer periodo de sesiones. Resolucíón 2.231 (XXI) de 20 de diciembre de 1966 La Asamblea General, Habiendo examinado la cuestión de Gibraltar, habiendo oído las declaraciones de la Potencia administradora y del representante de España, y habiendo oído a los peticionarios, recordando su Resolución 2.070 de 16 de diciembre de 1965, y el Consenso, aprobado el 16 de octubre de 1964 por el "Comité Especial encargado de examinar la situación con respecto a la aplicación de la Declaración sobre la concesión de independencia a los países y pueblos coloniales", recordando así mismo su resolución 1.514, de 14 de diciembre de 1960, teniendo en cuenta la manifiesta disposición de la Potencia administradora y del Gobierno español para continuar las actuales negociaciones, lamentando que hayan ocurrido ciertos actos que han perjudicado la buena marcha de esas negociaciones: 1. Lamenta la demora en el proceso de descolonización y en la aplicación de la Resolución 1.514 (XV) de la Asamblea General a Gibraltar. 2. Invita a las partes a que continúen, sus negociaciones, teniendo en cuenta los intereses de la población del territorio y pide a la Potencia administradora que acciere sin ningún obstáculo, y en consulta con el Gobierno de España, la descolonización de Gibraltar, y que presente al "Comité Especial encargado de examinar la situación con respecto a la aplicación de la Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales", un informe lo antes posible y, en cualquier caso, antes del vigésimo segundo periodo de sesiones de la Asamblea General 3. Pido al Secretario General qua preste ayuda para la aplicación de la presente Resolución. Resolucíón 2.353 (XXII) de 8 de enero de 1968 La Asamblea General, Habiendo examinado la cuestión de Gibraltar, Habiendo oído las declaraciones de la Potencia administradora y del representante de España, Recordando su resolución 1514 (XV) de 14 de diciembre de 1960, Recordando además, la resolución adoptada por el Comité Especial encargado de examinar la situación con respecto a la aplicación de la Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales el lº de septiembre de 1967 (1), las resoluciones 2070 (XX) de 16 de diciembre de 1965 y 2231 (XXI) de 20 de diciembre de 1966 de la Asamblea General y el consenso aprobado el 16 de octubre de 1564 por el Comité Especial (2). Considerando que toda situación colonial que destruya parcial o totalmente la unidad nacional y la integridad territorial de un país es incompatible con los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas y específicamente con el párrafo 6 de la resolución 1514 (XV) de la Asamblea General, 1. Lamenta la interrupción de las negociaciones recomendadas en las resoluciones 2070 (XX) y 2231 (XXI) de la Asamblea General; 2. Declara que la celebración por la Potencia administradora del referendum de 10 de septiembre de 1967 contraviene las disposiciones de la resolución 2231 (XXI) de la Asamblea General y las de la resolución aprobada el 1º de septiembre de 1967 por el Comité Especial encargado de examinar la situación con respecto a la aplicación de la Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales; 3. Invita a los Gobiernos de España y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte a reanudar sin demora las negociaciones previstas en las resoluciones 2070 (XX) y 2231(XXI)de la Asamblea General, con miras a poner fin a la situación colonial en Gibraltar y a salvaguardar los intereses de la población al término de esa situación colonial; 4. Pide al Secretario General que preste ayuda a los Gobiernos de España y del Reino Unido en el cumplimiento de la presente resolución y que informe al respecto a la Asamblea General en su vigésimo tercer período de sesiones. (1) A/6700/Add.9 párr. 215. (2) Documentos Oficiales de la Asamblea Genertal, decimonoveno período de sesiones, Anexos No. 8 (parteI) (A/5800/Rev.1), Cap. X, parr.209 Resolucíón 2.429 (XXIII) de 1 de diciembre de 1968 La Asamblea General, Habiendo examinado la cuestión de Gibraltar; Habiendo oído las declaraciones de la Potencia administradora y del representante de España (1). Recordando su resolución 1514 (XV) de 14 de diciembre de 19609 Recordando igualmente su resolución 2353 (XXII) de 19 de diciembre de 1967, 1. Lamenta el incumplimiento por la Potencia administradora de la resolución 2353 (XXII) de la Asamblea General; 2. Declara que el mantenimiento de la situación colonial de Gibraltar es contrario a los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas y a los contenidos en la resolución 1514 (XV) de la Asamblea General; 3. Pide a la Potencia administradora que ponga término a la situación colonial de Gibraltar antes del 1º de octubre de 1969; 4. Requiere al Gobierno del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte para que inicie sin demora las negociaciones previstas en la resolución 2353,` (XXII) con el Gobierno de España; 5. Pide al Secretario General que preste toda la ayuda que los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte puedan requerir para el mejor cumplimiento de la presente resolución y que informe al respecto a la Asamblea General en su vigésimo cuarto período de sesiones. 1747a. sesión plenaria (1) Véase A/C.4/SR.1799. Resolucíón 3.163 (XXVIII) de 14 de diciembre de 1973 La Asamblea General después de haber considerado el Capítulo, del Informe del Comité Especial encargado de examinar la situación con respecto a la aplicación de la Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales referente a Gibraltar. Después de haber tomado nota de las declaraciones formuladas en la Cuarta Comisión por los representantes del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte y de España con respecto a la cuestión de Gibraltar., y teniendo en cuenta las resoluciones 1514 (XV) de 14 de diciembre de 1960 y 2429 (XXIII) de 18 de diciembre de 1968 de la Asamblea General, reitera la esperanza de que se reanudarán en breve, las negociaciones entre el Reino Unido y España con miras a lograr la solución definitiva de este problema teniendo en cuenta las resoluciones antes mencionadas y dentro del espíritu de la Carta de las Naciones Unidas. La Asamblea General profundamente preocupada de los efectos, potencialmente perjudiciales, de la persistencia de este problema en las relaciones entre dos Estados Miembros y plenamente consciente de la necesidad de poner fin a la causa de desacuerdo entre ellos, insta a ambos Estados a no escatimar ningún esfuerzo para llegar a una solución acorde con los principios de la Carta y a informar sobre el resultado de esas negociaciones al Secretario General y a la Asamblea General en su vigésimo noveno periodo de sesiones. 2202a. sesión plenaria Resolucíón 3.286 (XXIX) de 21 de enero de 1975 La Asamblea General, Habiendo examinado la cuestión de Gibraltar, Habiendo examinado el capitulo pertinente del informe del Comité Especial encargado de examinar la situación con respecto a la aplicación de la Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales (1), Habiendo escuchado las declaraciones pertinentes hechas en la Cuarta Comisión (2) 1. Lamenta que las negociaciones a que se hace referencia en el párrafo 2 infra no hayan sido todavía efectivamente iniciadas; 2. Urge a los Gobiernos del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte y de España a iniciar sin demora las negociaciones previstas según los términos del consenso aprobado por la Asamblea General el 14 de diciembre de 1973 (3) 3. Pide a ambos Gobiernos que informen sobre el resultado de sus negociaciones al Comité Especial encargado de examinar la situación con respecto a la aplicación de la -Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales y a la Asamblea General en su trigésimo período de sesiones. (1) A/9623/Add.4 (parte 1I), cap. XIII. (2) Véanse A/C.4/SR.2117 y 2124. (3) Docunentos Oficiales de la Asamblea General, vigésimo octavo período de sesiones, Suplemento No. 30 (A/9030), pág. 120. Asamblea General: Consenso de 10 de noviembre de 1981. La Asamblea General, tomando nota de que los Gobiernos de España y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte han firmado una declaración el 10 de abril de 1980 en Lisboa (1) proponiéndose resolver el problema de Gibraltar de acuerdo con las resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas, acordando con este objeto iniciar negociaciones a fin de solucionar todas las diferencias sobre Gibraltar, acordando asimismo el restablecimiento de comunicaciones directas en la región, habiendo decidido el Gobierno español suspender la aplicación de las medidas actualmente en vigor, acordando ambos Gobiernos basar su futura cooperación en la reciprocidad y plena igualdad de derechos, insta a ambos Gobiernos a que hagan posible el inicio de estas negociaciones previstas en el consenso aprobado por la Asamblea General el 14 de diciembre de 1973(2), con objeto de llegar a una solución permanente del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la Asamblea General y en el espíritu de la Carta de las Naciones Unidas. (1) Véase el documento A/AC.109/603 y Corr.l, párr. 13. (2) Documentos Oficiales de la Asamblea General, vigésimo octavo período de sesiones, Suplemento No. 30 (A/9030), pág. 120, tema 23. Asamblea General: Consenso de 23 de noviembre de 1982. 37/412 En su 77a. sesión plenaria, celebrada el 23 de noviembre de 1982, la Asamblea General, por recomendación de la Cuarta Comisión tomando nota de que los Gobiernos de España y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte firmaron en Lisboa. el 10 de abril de 1980. una declaración en la que se proponían resolver el problema de Gibraltar de acuerdo con las resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas, acordando con este objeto iniciar negociaciones a fin de solucionar todas sus diferencias sobre Gibraltar, acordando asimismo el restablecimiento de comunicaciones directas en la región, habiendo decidido el Gobierno español suspender la aplicación de las medidas actualmente en vigor, y acordando ambos Gobiernos basar su futura cooperación en la reciprocidad y plena igualdad de derechos, tomando nota de que ambos Gobiernos acordaron en Londres, el 8 de entro de 1982. fijar la fecha de 20 de abril de 1982 para el pleno cumplimiento de la Declaración de Lisboa, incluidas la iniciación de las negociaciones y. Simultáneamente el restablecimiento de las comunicaciones directas en la región. y tomando nota de que, cuando posteriormente se acordó aplazar estos arreglos, los dos Gobiernos manifestaron que estaban decididos a mantener abierto el proceso iniciado por la Declaración de Lisboa, en el espíritu de las cartas canjeadas en Londres el 8 de enero de 1982. y que se proponían fijar una nueva fecha para su cumplimiento, decidió instar a ambos Gobiernos a que hicieran posible la iniciación de las negociaciones previstas en el consenso aprobado por la Asamblea el 14 de diciembre de 1973 79, con objeto de llegar a un solución duradera del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la Asamblea y conforme al espíritu de la Carta de las Naciones Unidas. Asamblea General: Consenso de 5 de diciembre de 1984. 39/410 En su 87a. sesión plenaria, celebrada el 5 de diciembre de 1984, la Asamblea General, por recomendación de la Cuarta Comisión , aprobó el texto siguiente. que expresaba el consenso de los miembros de la Asamblea: "La Asamblea General, tomando nota de que los Gobiernos de España y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte firmaron en Lisboa, el 10 de abril de 1980 una declaración , en la que se proponía resolver el problema de Gibraltar de acuerdo con las resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas, acordaban con ese objeto iniciar negociaciones a fin de solucionar todas sus diferencias sobre Gibraltar, acordaban asimismo el restablecimiento de comunicaciones directas en la región, habiendo decidido el Gobierno español suspender la aplicación de las medidas actualmente en vigor y convenían, ambos Gobiernos, en basar su futura cooperación en la reciprocidad y plena igualdad de derechos, tomando nota de que ambos Gobiernos acordaron en Londres, el 8 de enero de 1982, fijar la fecha de 20 de abril de 1982 para el pleno cumplimiento de la Declaración de Lisboa, inclusive la iniciación de las negociaciones y, simultáneamente, el restablecimiento de las comunicaciones directas en la región, tomando nota de que, cuando posteriormente se acordó aplazar estos arreglos, los dos Gobiernos manifestaron que estaban decididos a mantener abierto el proceso iniciado por la Declaración de Lisboa de abril de 1980 y que se proponían fijar una nueva fecha para su cumplimiento, se felicita de que ambos Gobiernos hayan acordado en una declaración conjunta firmada el 27 de noviembre de 1984 en Bruselas que comenzarán a aplicar todas la partes de la Declaración de Lisboa a más tardar el 15 de febrero de 1985 e insta a ambos Gobiernos a que hagan posible la iniciación de las negociaciones previstas en el consenso aprobado por la Asamblea el 14 de diciembre de 1973110, con objeto de llegar a una solución duradera del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la Asamblea y conforme al espíritu de la Carta de las Naciones Unidas." Asamblea General: Consenso de 2 de diciembre de 1985. 40/413 En su 99a. sesión plenaria, celebrada el 2 de diciembre de 1985, la Asamblea General, por recomendación de la Cuarta Comisión, aprobó el texto siguiente, que representaba el consenso de los miembros de la Asamblea: "La Asamblea General, tomando nota de que los Gobiernos de España y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte acordaron en Bruselas, el 27 de noviembre de 1984 una Declaración por la que decidieron poner en práctica, antes del 15 de febrero de 1985, la Declaración de Lisboa de 10 de abril de 1980, en todos sus aspectos; tomando nota de que ello suponía, de manera simultánea, el establecimiento de la igualdad y reciprocidad de derechos de los españoles en Gibraltar y de los gibraltareños en España, el establecimiento del libre tránsito de personas, vehículos y mercancías entre Gibraltar y el territorio circunvecino, y el establecimiento de un proceso negociador, y tomando nota de que, por lo que se refiere a este último punto, la declaración de Bruselas dice así: 'c) El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación en materia económica, cultural, turística, aérea, militar y medio ambiental. Ambas Partes acuerdan que, en el marco de este proceso, serán tratadas las cuestiones de soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar los deseos de los gibraltareños tal y como establece el preámbulo de la Constitución de 1969’, acoge con satisfacción el hecho de que el 5 de febrero de 1985 quedara establecida la igualdad y reciprocidad de derechos de los españoles en Gibraltar y de los gibraltareños en España, así como el libre tránsito de personas, vehículos y mercancías entre Gibraltar y el territorio circunvecino; acoge con satisfacción también el hecho de que ambos Gobiernos iniciaran en Ginebra, el mismo día 5 de febrero de 1985136, el proceso negociador previsto en la declaración de Bruselas, igualmente previsto en el consenso aprobado por la Asamblea el 14 de diciembre de 1973; e insta a ambos Gobiernos a proseguir dichas negociaciones con objeto de llegar a una solución definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la Asamblea y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones Unidas." Asamblea General: Consenso de 31 de octubre de 1986. En su 52a. sesión plenaria, celebrada el 31 de octubre de 1986, la Asamblea General, por recomendación de la Cuarta Comisión, aprobó el siguiente texto que representaba el consenso de los miembros de la Asamblea: "La Asamblea General tomando nota de que los Gobiernos de España y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte acordaron en Bruselas, el 27 de noviembre de 1984, una Declaración 132 por la que decidieron poner en práctica, antes del 15 de febrero de 1985, la Declaración de Lisboa de 10 de abril de 1980, en todos sus aspectos; tomando nota de que ello suponía, de manera simultánea, el establecimiento de la igualdad y reciprocidad de derechos de los españoles en Gibraltar y de los gibraltareños en España, el establecimiento del libre tránsito de personas, vehículos y mercancías entre Gibraltar y el territorio circunvecino, y el establecimiento de un proceso negociador; y tomando nota de que por lo que se refiere a este último punto, la Declaración de Bruselas dispone lo siguiente: 'c) El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación en materia económica, cultural, turística, aérea, militar y medio ambiental. Ambas partes acuerdan que, en el marco de este proceso, serán tratadas las cuestiones de soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar los deseos de los gibraltareños tal y como establece el preámbulo de la Constitución de 1969;" "Acoge con satisfacción el hecho de que el 5 de febrero de 1985 quedara establecida la igualdad y reciprocidad de derechos de los españoles en Gibraltar y de los gibraltareños en España, así como el libre tránsito de personas, vehículos y mercancías entre Gibraltar y el territorio circunvecino 134; acoge también con satisfacción el hecho de que ambos Gobiernos iniciaran en Ginebra, el mismo día 5 de febrero de 1985, el proceso negociador previsto en la Declaración de Bruselas, igualmente previsto en el consenso aprobado por la Asamblea el 14 de diciembre de 1973; toma nota de que los Ministros de Asuntos Exteriores se reunieron en Madrid los días 5 y 6 de diciembre de 1985 como parte de este proceso; e insta a ambos Gobiernos a proseguir dichas negociaciones con objeto de llegar a una solución definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la Asamblea y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones Unidas." Asamblea General: Consenso de 4 de diciembre de 1987. 42/418 En su 92a. sesión plenaria, celebrada el 4 de diciembre de 1987, la Asamblea General, por recomendación de La Cuarta Comisión aprobó el siguiente texto que representa el consenso de los miembros de la Asamblea: "La Asamblea General recordando su decisión 41/407, de 31 de octubre de 1986, y recordando así mismo, que la declaración de Bruselas acordada el 27 de noviembre de 1994 por los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, declara lo siguiente: "c) El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus diferencias sobre Gibraltar así como promover en beneficio mutuo la cooperación en materia económica cultural turística, aérea, militar y medioambiental. Ambas partes acuerdan que en el marco de este proceso serán tratadas las cuestiones de soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar los deseos de los gibraltareños tal y como establece el preámbulo de la Constitución de 1969.' toma nota de que los Ministros de Asuntos Exteriores se reunieron en Madrid los días 5 y 6 de diciembre de 1985 y en Londres los días 13 y 14 de enero de 1987 como parte de este proceso e insta a ambos Gobiernos a proseguir dichas negociaciones, con objeto de llegar a una solución definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la Asamblea General y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones Unidas".Asamblea General: Consenso de 22 de noviembre de 1988. 43/411. Cuestión de Gibraltar En su 59a. sesión plenaria, celebrada el 22 de noviembre de 1988, la Asamblea General, por recomendación de la Cuarta Comisión, aprobó el siguiente texto, que representa el consenso de los Miembros de la Asamblea: "La Asamblea General, recordando su decisión 42/418, de 4 de diciembre de 1987, recordando asimismo que la declaración de Brusclas, acordada el 27 de noviembre de 1984 por los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, dispone, entre otras cosas, lo siguiente: "El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación en materia económica, cultural, turística, aérea, militar y medioambiental. Ambas partes acuerdan que, en el marco de este proceso, serán tratadas las cuestiones de soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respeta los deseos de los gibraltareños tal y como establece el preámbulo de la Constitución de 1969;' "toma nota de que, en el marco de este proceso, los Ministros de Asuntos Exteriores se reunieron en Madrid los días 5 y 6 de diciembre de 1985, en Londres los días 13 y 14 de enero de 1987, en Madrid los días 27 y 28 de noviembre de 1987 y en Londres el 2 de diciembre de 1987, alcanzando en esta última ocasión un acuerdo sobre medidas para la cooperación sobre el uso del aeropuerto de Gibraltar reanudación del servicio de transbordador entre Gibraltar y Algeciras, y mejora del flujo del tráfico terrestre entre España y Gibraltar; lamenta que estas medidas no hayan sido puestas en práctica todavía e insta a ambos Gobiernos a proseguir sus negocia- ciones con objeto de llegar a una solución definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la Asamblea y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones Unidas." Asamblea General: Consenso de 11 de diciembre de 1989. 44/426 En su 80ª sesión plenaria celebrada el 11 de diciembre de 1989, la Asamblea General, por recomendación de la Cuarta Comisión, aprobó el texto siguiente que representa el consenso de los miembros de la Asamblea: "La Asamblea General, recordando su decisión 43/411, de 22 de noviembre de 1988, y recordando asimismo que la declaración, acordada el 27 de noviembre de 1984 por los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, dispone, entre otras cosas, lo siguiente: "El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación en materia económica, cultural, turística, aérea, militar y medioambiental. Ambas Partes acuerdan que, en el marco de este proceso, serán tratadas las cuestiones de soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar los deseos de los gibraltareños tal y como establece el preámbulo de la Constitución de 1969", "torna nota de que, en el marco de este proceso, los Ministros de Asuntos Exteriores han celebrado reuniones anuales alternativamente en ambas capitales; e insta a ambos Gobiernos a proseguir sus negociaciones con objeto de llegar a una solución definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la Asamblea General y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones Unidas". Asamblea General: Consenso de 20 de noviembre de 1990. 45/407 La Asamblea General, recordando su decisión 441426, de 11 de diciembre de 1989, y recordando asimismo que la declaración de Bruselas, acordada el 27 de noviembre de 1984 por los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte 1/, dispone, entre otras cosas, lo siguiente: "El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación en materia económica, cultura¡, turística, aérea, militar y medioambiental. Ambas Partes acuerdan que, en el marco de este proceso, serán tratadas las cuestiones de soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar los deseos de los gibraltareños tal, como establece el preámbulo de la Constitución de 1969". Toma nota de que, en el marco de este proceso, los Ministros de Asuntos Exteriores han celebrado reuniones anuales alternativamente en ambas capitales; e insta a ambos Gobiernos a proseguir sus negociaciones con objeto de llegar a una solución definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la Asamblea General y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones Unidas. Asamblea General: Consenso de 11 de diciembre de 1991. La Asamblea General, recordando su decisión 45/407, de 20 de noviembre de 1990, y recordando asimismo que la Declaración de Bruselas, acordada el 27 de noviembre de 1984 por los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte 11, dispone, entre otras cosas, lo siguiente: "El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación en materia económica, cultural, turística, aérea, militar y medioambiental. Ambas Partes acuerdan que, en el marco de este proceso, serán tratadas las cuestiones de soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar los deseos de los gibraltareños tal, como establece el preámbulo de la Constitución de 1969". Toma nota de que, en el marco de este proceso, los Ministros de Asuntos Exteriores han celebrado reuniones anuales alternativamente en ambas capitales; e insta a ambos Gobiernos a proseguir sus negociaciones con objeto de llegar a una solución definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la Asamblea General y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones Unidas. Asamblea General: Consenso de 25 de noviembre de 1992. La Asamblea General, recordando su decisión 46/420, de 11 de diciembre de 1991, y recordando asimismo que la Declaración de Bruselas, acordada el 27 de noviembre de 1984 por los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte 1/, dispone, entre otras cosas, lo siguiente: "El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación en materia económica, cultural, turística, aérea, militar y medioambiental. Ambas Partes acuerdan que, en el marco de este proceso, serán tratadas las cuestiones de soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar los deseos de los gibraltareños tal, como establece el preámbulo de la Constitución de 1969". Toma nota de que, en el marco de este proceso, los Ministros de Asuntos Exteriores han celebrado reuniones anuales alternativamente en ambas capitales; e insta a ambos Gobiernos a proseguir sus negociaciones con objeto de llegar a una solución definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la Asamblea General y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones Unidas. Asamblea General: Consenso de 10 de diciembre de 1993. (48/422) La Asamblea General, recordando su decisión 47/411, de 25 de noviembre de 1992, y recordando asimismo que la declaración de Bruselas, acordada el 27 de noviembre de 1984 por los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte¡ dispone, entre otras cosas, lo siguiente: "El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación en materia económica, cultural, turística, aérea, militar medio ambiental. Ambas partes acuerdan que, en el marco de este proceso serán tratadas las cuestiones de soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar los deseos de los gibraltareños tal y como establece el preámbulo de la constitución de 1969," toma nota de que, en el marco de este proceso, los Ministros de Asuntos Exteriores de España y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte celebran reuniones anuales alternativamente en ambas capitales, la más reciente de las cuales ha tenido lugar en Madrid el día 12 de marzo de 1993, e insta a ambos Gobiernos a proseguir con sus negociaciones con objeto de llegar a una solución definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la Asamblea General y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones Unidas. Asamblea General: Consenso de 9 de diciembre de 1994. 49/420 La Asamblea General, recordando su decisión 48/422, de 10 de diciembre de 1993. y recordando asimismo que la Declaración de Bruselas, acordada el 27 de noviembre de 1984 por los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte 1] dispone, entre cosas, lo siguiente: "El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo. la cooperación en materia económica, cultural, turística, aérea, militar y medioambiental. Ambas Partes acuerdan que, en el marco de este proceso, serán tratadas las cuestiones de soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar los deseos de los gibraltareños tal y como establece el preámbulo de la Constitución de 1969", toma nota de que en el marco de este proceso, los Ministros de Asuntos Exteriores de España y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte celebran reuniones anuales alternativamente en ambas capitales, la más reciente de las cuales ha tenido lugar en Madrid el día 1 de marzo de 1993, e insta a ambos Gobiernos a proseguir con sus negociaciones con objeto de llegar a una solución definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la Asamblea General y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones Unidas. Asamblea General: Consenso de 1995. La Asamblea General, recordando su decisión 49/420, de 9 de diciembre de 1994, y recordando asimismo que la Declaración de Bruselas, acordada el 27 de noviembre de 19841 por los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte dispone, entre otras cosas, lo siguiente: "El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación en materia económica, cultural, turística, aérea, militar y medio ambiental. Ambas partes acuerdan que, en el marco de este proceso, serán tratadas las cuestiones de soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar los deseos de los gibraltareños tal y como establece el preámbulo de la Constitución de 1969," toma nota de que, en el marco de ese proceso, los Ministros de Asuntos Exteriores de España y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte celebran reuniones anuales alternativamente en ambas capitales, la más reciente de las cuales tuvo lugar en Londres el día 20 de diciembre de 1994, e ¡nota a ambos Gobiernos a proseguir con sus negociaciones con objeto de llegar a una solución definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la Asamblea General y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones Unidas. Organización para La Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) DECLARACION INTERPRETATIVA FORMULADA POR ESPAÑA TRAS LA ADOPCION DE LA CARTA DE PARIS EN VIENA (33.ª sesión plenaria de la Comisión encargada de preparar la reunión de París. Viena, 17- de noviembre de 1990) La delegación de España hizo la siguiente declaración: "El Reino de España considera que en el espíritu de la nueva Europa que anima esta Carta de París, debe inscribirse la superación de situaciones coloniales periclitadas y que, de manera concreta, es necesario poner fin a la situación colonial de Gibraltar. El modo más adecuado para alcanzar este objetivo es la prosecución del proceso negociador establecido entre el Reino de España y el Reino Unido por la Declaración de Bruselas de 27 de noviembre de 1984." La delegación del Reino Unido hizo la siguiente declaración: "Me veo obligado a responder a la declaración del representante de España.Rechazó su descripción de la situación de Gibraltar como una situación colonial periclitada. El Gobierno del Reino Unido ha expresado claramente muchas veces que los deseos del pueblo de Gibraltar son primordiales para determinar su futuro. Esto es, por supuesto, conforme con el principio de la autodeterminación que se reafirma, junto con todos los demás principios del Acta Final de Helsinki en nuestra Carta para una Nueva Europa. Sin embargo, estoy enteramente de acuerdo en que el medio adecuado de tratar las controversias sobre Gibraltar entre mi país y España es mediante la continuación de las discusiones bilaterales entre ellos." Derecho de réplica: Se acordó que las declaraciones formuladas por España y el Reino Unido figuraran en el Diario, de la manera siguiente: España: "Mi delegación lamenta profundamente la extemporánea declaración del delegado británico. En relación con ella quiere señalar a su atención tres puntos: 1- Mi delegación no puede sino mostrar su enorme sorpresa por el rechazo de la calificación de Gibraltar como situación colonial periclitada. Estamos en 1990. El proceso histórico de la descolonización está casi terminado en todo el mundo. Y subrayo el casi, por que en Europa todavía se mantiene una situación colonial: Gibraltar. La última colonia de Europa. Teniendo esto presente, convendrán conmigo en que esta situación colonial no puede sino ser calificada de periclitada, obsoleta, anacrónica. 2.- En cuanto a la cuestión de la autodeterminación, suscitada por el delegado británico, mi delegación quiere recordar algo perfectamente conocido por todos, pero que la delegación del Reino Unido parece haber olvidado momentáneamente: que Gibraltar no es un problema de autodeterminación, sino de integridad territorial. No ya el Acta Final, sino esta Carta de París para una nueva Europa, que acabamos de adoptar señalan que la autodeterminación debe ejercitarse de acuerdo con las normas relevantes del Derecho Internacional. En este sentido, la doctrina de Naciones Unidas ha establecido reiteradamente que la cuestión de Gibraltar lo es de integridad territorial, en ningún caso de autodeterminación. 3.- Finalmente, quiero llamar la atención sobre las últimas palabras del delegado británico. En ellas, se ha mostrado de acuerdo con algo que, francamente, me deja perplejo. Cito "I entirely agree that the appropriate way to handle disputes over Gibraltar between my country and Spain is through continuation of bilateral discussions between them". Sr. Presidente, yo no he dicho eso. Lo que he dicho es "proceso negociador". Sólo así se puede resolver esta cuestión colonial que, insisto, sólo puede ser calificada de periclitada. Reino Unido: "En respuesta a la respuesta de la delegación de España declaro que no veo la necesidad de exponer dicho tema en este foro. Mi rechazo se refiere al empleo de la palabra periclitada, no al de la palabra colonial. Con respecto al segundo punto de la delegación española, sólo puedo repetir que los deseos de los habitantes de Gibraltar son primordiales. Con respecto al tercero, lo que yo quería decir era que la cuestión de Gibraltar podría tratarse mejor bilateralmente entre nosotros." Proceso de Conversaciones entre el Estado español y Gran Bretaña DECLARACION DE LISBOA (10 abril 1980) El texto de la declaración firmada hoy en Lisboa por Marcelino Oreja y lord Carrington es el siguiente: 1. Los Gobiernos británicos y español, en su deseo de reforzar sus relaciones bilaterales y contribuir de esta manera a la solidaridad europea y occidental, se proponen resolver el problema de Gibraltar en un espíritu de amistad y de acuerdo con las resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas. 2. Los dos Gobiernos han acordado, en consecuencia, iniciar negociaciones a fin de solucionar todas las diferencias sobre Gibraltar. 3. Los dos Gobiernos han acordado el restablecimiento de comunicaciones directas en la región. El Gobierno español actualmente en vigor. ha decidido suspender la aplicación de las medidas Ambos Gobiernos han acordado que la futura cooperación estará basada en la reciprocidad y la plena igualdad de derechos. Valoran y contemplan con interés los pasos que se irán adoptando por una y otra parte y que, a su juicio, abrirán el camino hacia un entendimiento más estrecho entre aquéllos directamente afectados en el área. 4. A estos efectos, los dos Gobiernos, que reconocen la necesidad de desarrollar una cooperación práctica mutuamente beneficiosa, tomarán en consideración las propuestas que formula cada uno de ellos. 5. El Gobierno español, al reafirmar su posición respecto al restablecimiento de la integridad territorial de España, reitera su intención de que al término de las negociaciones queden plenamente salvaguardados los intereses de los gibraltareños. Por su parte, el Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar los deseos libre y democráticamente expresados de la población de Gibraltar, tal y como se hallan recogidos en el preámbulo de la Constitución de Gibraltar. 6. Funcionarios de ambas partes se reunirán tan pronto como sea posible para preparar las medidas prácticas necesarias que permitan el cumplimiento de los propósitos acordados en esta declaración. Se prevé que estos preparativos queden ultimados antes del 1 de junio.. COMUNICADO CONJUNTO HISPANO-BRITANICO (08-01-82) El presidente del Gobierno español, Sr. Don Leopoldo Calvo-Sotelo, ha mantenido conversaciones hoy en 10 Downing Street con la primer ministro británica, Margaret Thatcher. La Sra. Thatcher estuvo acompañada por el secretario de Estado para Asuntos Exteriores y de la Commonwealth Lord Carrigton. El Sr. CalvoSotelo estuvo acompañado por el ministro español de Asuntos Exteriores, don José Pedro Pérez-Llorca. Este ha sido el primer encuentro de ambos presidentes del Gobierno. Las conversaciones abarcaron un amplio espectro de temas internacionales, incluidos los de la OTAN, la Comunidad Económica Europea y las Relaciones EsteOeste. La primer ministro británica acogió calurosamente la perspectiva de la entrada de España en la OTAN y su integración en la CEE. También se pasó revista a las Relaciones 'Bilaterales incluido el tema de Gibraltar. Ambos Gobiernos han acordado comenzar el 20 de abril de 1982 las negociaciones previstas en la declaración de Lisboa, con el propósito de superar todas sus diferencias sobre Gibraltar. En la misma fecha se restablecerán las comunicaciones directas, de acuerdo con lo previsto en la declaración de Lisboa. TEXTO DE LAS CARTAS CANJEADAS ENTRE ESPAÑA Y GRAN BRETAÑA SOBRE LAS NEGOCIACIONES DEL PEÑON DE GIBRALTAR 8-1-82 El texto de la carta dirigida por el representante español, dice: "Señor embajador: Le expongo en relación con nuestras recientes conversaciones, lo que sigue: El Gobierno español y el británico, decididos a llevar a la práctica, en todos sus aspectos, la declaración de Lisboa mediante una política de aplicación concreta de lo allí estipulado, han acordado lo que sigue: 1.- Iniciar el 20 de abril de 1982 las negociaciones previstas en dicha declaración a fin de solucionar todas sus diferencias existentes sobre Gibraltar. 2.- En ese mismo día se restablecerán las comunicaciones, de acuerdo con lo previsto igualmente en la declaración de Lisboa. 3.- El Gobierno español toma nota de que el nuevo régimen aplicable en Gibraltar, que estará vigente en la fecha arriba indicada, modifica la situación existente antes de 1969 al eliminar factores que a juicio de] Gobierno español eran discriminatorios y que considera fundamentales. Concretamente queda asegurada la igualdad para los españoles en Gibraltar en cuanto al derecho a pernoctar y en materia de empleo, seguridad social, salarios y derecho a formar parte de sindicatos. Paralelamente a la fase inicial de las negociaciones previstas en el punto 1, ambas partes tratarán el resto de las cuestiones referentes a la situación de los españoles en Gibraltar a efectos de determinar la aplicación concreta de los principios de reciprocidad e igualdad de derechos establecidos en Lisboa. Las dos partes reconocen que los acuerdos a los que se llegue deberán surtir efecto cuantos antes mediante la adopción de las medidas necesarias incluyendo la introducción de nueva legislación, si fuera preciso. Carta de respuesta Por su parte, la carta del representante británico manifiesta: "Señor director general: Agradezco su carta de 8 de enero que se refiere a la aplicación de la declaración de Lisboa y que dice lo siguiente: Señor embajador: Le expongo, en relación con nuestras recientes conversaciones, lo que sigue: El Gobierno español y el británico decididos a llevar a la práctica, en todos sus aspectos, la declaración de Lisboa mediante una política de aplicación concreta de lo allí estipulado han acordado lo que sigue: 1.- Iniciar el 20 de abril de 1982 las negociaciones previstas en dicha declaración a fin de solucionar todas sus diferencias existentes sobre Gibraltar. 2.- En ese mismo día se restablecerán las comunicaciones, de acuerdo con lo previsto igualmente en la declaración de Lisboa. 3.- El Gobierno español toma nota de que el nuevo régimen aplicable en Gibraltar, que estará vigente en la fecha arriba indicada, modifica la situación existente antes de 1969 al eliminar factores que a juicio del Gobierno español eran discriminatorios y que considera fundamentales. Concretamente, queda asegurada la igualdad para los españoles en Gibraltar en cuanto a derecho a pernoctar y en materia de empleo, seguridad social, salarios y derecho a formar parte de sindicatos. Paralelamente a la fase inicial de las negociaciones previstas en el punco 1 , ambas partes tratarán el resto de las cuestiones referentes a la situación de los españoles en Gibraltar a efectos de determinar la aplicación concreta de los principios de reciprocidad e igualdad de derechos establecidos en Lisboa. Las dos partes reconocen que los acuerdos a los que se llegue deberán surtir efecto cuanto antes mediante la adopción de las medidas necesarias incluyendo la introducción de nueva legislación, si fuera preciso". Confirmo que mi Gobierno acepta lo anteriormente expuesto corno versión correcta de los entendimientos alcanzados entre nosotros sobre los temas planteados por el Gobierno español". DECLARACIÓN DE BRUSELAS (27-11-84) "Los Ministros de Asuntos Exteriores del Reino Unido y España, Sir Geoffrey Howe y Fernando Morán, han celebrado los días 26 y 27 de noviembre conversaciones en Bruselas sobre la cuestión de Gibraltar. Dichas conversaciones han culminado el proceso iniciado hace más de un año. En el día de hoy han llegado a un acuerdo, en la forma de una declaración común. Por este texto: 1º.- Se equilibran los derechos de españoles y gibraltareños. Sobre este punto la Declaración de Lisboa de abril de 1980 había dado lugar a una interpretación desequilibrada a favor de los segundos; 2º.- Ambos Gobiernos han decidido restablecer la libre circulación de personas, vehículos y mercancías entre Gibraltar y el territorio circunvecino, así como favorecer el tráfico aéreo; 3º.- Se establece un sistema para abordar y resolver todas las cuestiones respecto a Gibraltar; 4º.- Por primera vez en la historia del contencioso, la partte británica admite expresamente que se abordarán en este proceso las cuestiones de soberanía. La expresión plural cubre los temas de la soberanía sobre el territorio al que se refiere el Tratado de Utrecht, así como la soberanía sobre el istmo, nunca cedido a Gran Bretaña. El Gobierno español tiene la firme y fundada esperanza de que esta declaración sea el pórtico de unas relaciones muy amistosas y cooperadoras con la Gran Bretaña". (Comunicado hecho público por la Oficina de Información Diplomática el 27-11-84) Intercambio de notas sobre Gibraltar (13-06-85) Nota de prensa Con motivo de la firma del Tratado de adhesión de España a las Comunidades Europeas, el ministro de Asuntos Exteriores de España, don Fernando Morán, y el secretario de Estado de Asuntos Exteriores y de la Commonwealth del Reino Unido, Sir Geoffrey Howe, han intercambiado hoy, día 13, las siguientes notas sobre Gibraltar: Nota dirigida por Su Excelencia don Fernando Morán al Excmo. Sir Geoffrey Howe Excelencia: Siguiendo las instrucciones de mi Gobierno, tengo la honra de hacer constar, en relación con la firma y posterior ratificación del Tratado relativo a la adhesión del Reino de España a las Comunidades Europeas y la aplicación de la normativa comunitaria al territorio de Gibraltar, en los términos convenidos en el Acta relativa a las condiciones de adhesión, que dicha adhesión no implica por parte del Reino de España ninguna modificación en su posición con respecto a Gibraltar y no afecta al proceso negociador bilateral establecido de conformidad con lo dispuesto en el comunicado conjunto acordado con Vuestra Excelencia en Bruselas el 27 de noviembre de 1984. Tengo la honra de proponerle que la presente nota y la respuesta de Vuestra Excelencia dejen constancia de las posiciones de ambos Gobiernos. Aprovecho esta oportunidad para reiterar a Vuestra Excelencia el testimonio de mi más alta consideración. Nota dirigida por Su Excelencia Sir Geoffrey Howe al Excmo. Sr. don Fernando Morán Excelencia: Tengo el honor de acusar recibo de su nota de fecha de hoy cuya traducción dice lo siguiente: "Siguiendo las instrucciones de mi Gobierno, tengo la honra de hacer constar, en relación con la firma y posterior ratificación del Tratado relativo a la adhesión del Reino de España a las Comunidades Europeas y la aplicación de la normativa comunitaria al territorio de Gibraltar, en los términos convenidos en el Acta relativa a las condiciones de adhesión, que dicha adhesión no implica por parte del Reino de España ninguna modificación en su posición con respecto a Gibraltar y no afecta al proceso negociador bilateral establecido de conformidad con lo dispuesto en el comunicado conjunto acordado con Vuestra Excelencia en Bruselas el 27 de noviembre de 1984. Tengo la honra de proponerle que la presente nota y la respuesta de Vuestra Excelencia dejen constancia de las posiciones de ambos Gobiernos". Tengo el honor de confirmar a Vuestra Excelencia que el Gobierno del Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del Norte, en relación con la firma y posterior ratificación del Tratado relativo a la adhesión del Reino de España a las Comunidades Europeas y la aplicación de la normativa comunitaria al territorio de Gibraltar, en los términos convenidos en el Acta relativa a las condiciones de adhesión, hace constar que la adhesión del Reino de España no implica ninguna modificación de la posición del Reino Unido de Gran Bretaña con respecto a Gibraltar y no afecta al proceso negociador bilateral establecido de conformidad con lo dispuesto en el comunicado conjunto acordado con Vuestra Excelencia en Bruselas el 27 de noviembre de 1984. Aprovecho esta oportunidad para reiterar a Vuestra Excelencia el testimonio de mi más alta consideración. 13 de junio de 1985 Comunicado conjunto hispano-británico. (06-12-85) La Oficina de información Diplomática del Ministerio de Asuntos Exteriores, hizo público el siguiente comunicado conjunto hispano-británico: Los ministros de Asuntos Exteriores español y británico se han reunido en Madrid el 5 y 6 de diciembre, y han mantenido un útil intercambio de puntos de vista sobre una serie de cuestiones internacionales y bilaterales, incluido Gibraltar. Esta reunión forma parte del proceso negociador previsto en el acuerdo de Bruselas. Los ministros han pasado revista a los avances realizados en diversas áreas en relación con Gibraltar desde la reunión ministerial de Ginebra el 5 de febrero de 1985 y, en particular, han tomado nota con satisfacción del desarrollo de contactos en beneficio mutuo en materias tales como el turismo. Han acordado como objetivo común el desarrollo de la utilización civil del aeródromo de Gibraltar sobre la base del beneficio mutuo, y han dispuesto que continúen los trabajos sobre los aspectos prácticos para alcanzar ese objetivo. En materias laborales y sociales, Sir Geoffrey Howe ha confirmado que los pensionistas españoles, con reclamaciones que provienen de su anterior trabajo en Gibraltar, serían pagados al mismo nivel que los gibraltareños, a partir del 1 de enero de 1986. Tal y como dispone el acuerdo de Bruselas, los ministros han tratado a fondo las cuestiones de soberanía. Han examinado las propuestas hechas por el Gobierno español, en febrero de 1985, y han convenido que el estudio de las cuestiones de soberanía debe proseguir por vía diplomática, teniendo en cuenta su común objetivo de solucionar todas las diferencias entre los dos Gobiernos. Sir Geoffrey Howe ha subrayado que el Gobierno británico mantendría plenamente su compromiso de respetar los deseos de los gibraltareños tal y como establece el preámbulo de la Constitución de 1969. En lo tocante a cuestiones internacionales, los ministros han mantenido un útil intercambio de puntos de vista sobre las relaciones Este-Oeste, Africa del Sur, Oriente Medio y América Latina, así como sobre sus mutuos intereses dentro de las Comunidades Europeas. Los ministros han expresado su satisfacción por el hecho de que estarán en estrecho y permanente contacto como miembros de las Comunidades Europeas, y han acordado celebrar una nueva reunión bilateral en Londres en el curso de 1986. DECLARACIÓN CONJUNTA SOBRE EL AEROPUERTO DE GIBRALTAR "El ministro de Asuntos Exteriores del Reino de España, Excmo. Sr. don Francisco Fernández Ordóñez, y el secretario para Relaciones Exteriores y la Commonwealth del Reino Unido, honorable Sir Geoffrey Howe, reunidos en Londres el 2 de diciembre de 1987. Teniendo en cuenta el Comunicado Conjunto de Bruselas de 27 de noviembre de 1984 que estableció entre ambos países un proceso negociador a fin de solucionar todas sus diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación en una serie de materias, incluyendo la aviación. Teniendo en cuenta asimismo las deliberaciones en el seno del Consejo de las Comunidades Europeas sobre las propuestas de la Comisión Europea para la Liberalización del Transporte Aéreo. Entendiendo, por las conversaciones que han tenido lugar entre los dos ministros, que ambos Gobiernos consideran que una mayor cooperación sobre el uso del aeropuerto de Gibraltar será beneficiosa para ambos países y para la población de Gibraltar y del Campo de Gibraltar. Y en vista de que la aplicación de la política de transporte aéreo de la Comunidad Europea al aeropuerto de Gibraltar se traducirá en una ampliación de su utilización civil. Han acordado el siguiente régimen: 1.-Las autoridades aeronáuticas de las dos partes mantendrán consultas regulares acerca de todas las cuestiones relativas al desarrollo del uso civil del aeropuerto, incluidas las relativas al establecimiento de nuevos servicios con terceros países. Los permisos a las compañías aéreas españolas para efectuar servicios entre aeropuertos del Reino de España y Gibraltar, a que se refiere el apartado -1. del artículo 6 del Proyecto de Decisión de la CEE, sobre capacidad y acceso al mercado, serán otorgados por las autoridades españolas. 2.-Las autoridades españolas construirán una nueva terminal en La Línea de la Concepción, adyacente al lado norte de la verja existente. Los pasajeros que utilicen esta terminal tendrán acceso directo al aeropuerto a través de una puerta en la fachada sur de la terminal. 3.1 .-La terminal española será utilizada por las siguientes categorías de pasajeros: - Pasajeros de cualquier país, volando en aviones de cualquier compañía y de cualquier nacionalidad, que se dirijan al desembarcar, a cualquier punto del territorio situado al norte de la verja. - Pasajeros que, procedentes de cualquier punto del territorio situado al norte de la verja, embarquen en aviones de cualquier compañía y de cualquier nacionalidad, con destino a cualquier país del mundo. 3.2.-La terminal británica será utilizada por todos los demás pasajeros. 3.3.-Los pasajeros estarán sujetos, en su caso, a los controles de aduanas y de inmigración en la correspondiente terminal. 4. 1-Se establecerá un comité para coordinar las actividades de transporte aéreo civil de las terminales británica y española y su relación con los demás servicios del aeropuerto. El comité se compondrá de un número igual de miembros designados por cada Gobierno. Su mandato figura en el Anejo A. 4.2.-Lo establecido en el párrafo 4.1. será supervisado por el grupo de trabajo sobre cuestiones de Aviación Civil establecido en 1985 bajo los auspicios de los coordinadores hispano-británicos. El grupo de trabajo informará con regularidad a los coordinadores. Los informes incluirán toda recomendación para ampliación de la cooperación en el uso del aeropuerto de Gibraltar. . 5.-Los Gobiernos británico y español asegurarán que se adopten medidas eficaces en la terminal existente y en la nueva para controlar a los pasajeros y su equipaje de mano, y para realizar comprobaciones adecuadas sobre las tripulaciones, carga y bodegas de las aeronaves antes de y durante el embarque. Habrá una estrecha colaboración de las dos terminales y entre ellas las autoridades responsables de esas cuestiones en el resto del aeropuerto, con objeto de asegurar el mantenimiento de los más altos niveles de seguridad. 6.-Continuarán las discusiones entre las dos partes con vistas al ulterior fortalecimiento de las medidas de seguridad aérea y control de tráfico en la zona. 7.-El presente régimen y cualquier actividad o medida tomada en aplicación o como consecuencia del mismo, se entienden sin perjuicio de las respectivas posiciones jurídicas de España y del Reino Unido acerca de la controversia respecto de la soberanía sobre el territorio en el que el aeropuerto se encuentra situado. 8.-El presente régimen comenzará a aplicarse cuando las autoridades británicas hayan notificado a las autoridades españolas la entrada en vigor de la legislación necesaria para llevar a efecto el punto 3.3. o cuando se haya terminado la construcción de la terminal española, cualquiera que sea lo último en producirse, y en todo caso no más tarde de un año desde la notificación arriba mencionada. Londres, a 2 de diciembre de 1987 ANEJO A. MANDATO DEL COMITE DE COORDINACION "Se establecerá un comité para coordinar las actividades de transporte aéreo civil de las terminales británica y española y para servir de enlace con las autoridades competentes respecto de los requerimientos que las dos terminales impongan en los otros servicios del aeropuerto. Sus funciones serán: - Coordinar las disposiciones de reserva y facturación en las dos terminales. - Asegurar la coordinación entre las dos terminales para las medidas relativas al movimiento de los pasajeros hacia los aviones y desde ellos. - Adoptar las medidas apropiadas respecto a los pasajeros retrasados y los pasajeros en tránsito. - Asegurar medidas coordinadas para manejo de los equipajes en las dos terminales incluyendo la entrega en los aviones y su recogida de los mismos. - Asegurar medidas coordinadas para maneje, despacho y almacenamiento de correspondencia y carga. - Servir de enlace con las líneas aéreas respecto a facilidades y servicios que puedan serles suministrados comercialmente, en el momento presente o en el futuro, tanto dentro de las terminales (por ejemplo, mostradores de información, oficinas de billetes) como para las aeronaves (por ejemplo, limpieza y suministro de alimentación). - Coordinar las medidas de seguridad en las dos terminales respecto a pasajeros y carga. - Asegurar que no haya conflicto entre los requerimientos que impongan las dos terminales en otros servicios del aeropuerto. - Considerar las posibilidades de servicios compartidos (por ejemplo, servicios de limpieza de la terminal, de primeros auxilios, etc.). - Servir como foro para la consideración de cualquier problema que plantee la ejecución de los servicios de transporte aéreo civil de las dos terminales." DECLARACION CONJUNTA SOBRE SERVICIOS MARITIMOS Y COMUNICACIONES TERRESTRES Y DE APARTADOS ADICIONALES DEL ARTICULO PRIMERO DEL PROYECTO DE DECISION (CEE) DEL CONSEJO SOBRE REPARTO DE CAPACIDAD Y ACCESO AL MERCADO. DECLARACION CONJUNTA "El ministro de Asuntos Exteriores del Reino de España, excelentísimo señor don Francisco Fernández Ordóñez:, y el secretario para Relaciones Exteriores y la Commonwealth del Reino Unido, honorable sir Geoffrey Howe, reunidos en Londres el 2 de diciembre de 1987. Teniendo en cuenta el Comunicado Conjunto de Bruselas de 27 de noviembre de 19S4 que estableció entre ambos países un proceso negociador a fin de solucionar todas sus diferencias sobre Gibraltar, así como promover la cooperación en beneficio mutuo. Observando que empresas en España y Gibraltar han manifestado interés en restablecer el servicio de transbordadores entre Algeciras y Gibraltar. Han acordado lo siguiente: El servicio de transbordador entre Algeciras y Gibraltar se restablecerá tan pronto como sea posible para beneficio mutuo de España y de la población de Gibraltar y del Campo de Gibraltar. Se adoptarán medidas urgentes para mejora del flujo del tráfico terrestre (por ejemplo, mediante la introducción de canales aduaneros rojo y verde). Ambas partes cooperarán en un estudio a plazo más largo de otras posibles mejoras. APARTADOS ADICIONALES AL ARTICULO 1 DEL PROYECTO DE DECISION (CEE) DEL CONSEJO SOBRE REPARTO DE CAPACIDAD Y ACCESO AL MERCADO. - 4 - La aplicación al aeropuerto de Gibraltar de la presente decisión se entiende sin perjuicio de las respectivas posiciones jurídicas del Reino de España y del Reino Unido acerca de la controversia respecto de la soberanía sobre el territorio en el que el aeropuerto se encuentra situado. - 5 - La aplicación de las disposiciones de esta decisión al aeropuerto de Gibraltar quedará suspendida hasta que comience la aplicación del régimen contenido en la Declaración Conjunta de los ministros de Asuntos Exteriores del Reino de España y del Reino Unido de 2 de diciembre de 1987. Los Gobiernos del Reino de España y del Reino Unido informarán en este sentido al Consejo en esa fecha." Declaración efectuada por el ministro de Asuntos Exteriores, don Francisco Fernández Ordóñez al término de las conversaciones mantenidas sobre Gibraltar con el Secretario del Foreign Office, Douglas Hurd (Madrid, 26-02-90) Hoy es la primera vez que el señor Hurd viene a Madrid con objeto de mantener las conversaciones periódicas entre los dos Gobiernos previstas en el marco del proceso negociador de Bruselas. El programa ha incluido una audiencia con S.M. el Rey y una entrevista con el Presidente del Gobierno. El Sr. Hurd y yo hemos tenido una extensa conversación esta mañana sobre Gibraltar y otros temas de actualidad internacional. . Esta tarde las dos delegaciones se han reunido en sesión plenaria. Los dos hemos expresado nuestras bien conocidas posturas sobre las cuestiones de soberanía. El cuanto al Acuerdo de 1987 sobre el aeropuerto, he reiterado nuestro deseo de verlo puesto en práctica cuanto antes. El señor Hurd ha subrayado que el gobierno británico sigue apoyando este Acuerdo con firmeza, y ha dicho que él seguirá instando a que se 'ponga en práctica lo más pronto posible. Ambas partes estamos de acuerdo en que será muy beneficioso para la cooperación en la zona. En la reunión de esta tarde hemos examinado diversos aspectos de la cooperación de ámbito local. Se acordó que es susceptible de mejora en una serie de aspectos. También hemos acordado que, teniendo en cuenta nuestras respectivas responsabilidades en materia de aduanas y orden público en la zona reafirmamos nuestro compromiso de combatir todas las formas de contrabando. A este fin se extenderán a Gibraltar el Tratado bilateral de 1985 sobre Extradición y el Acuerdo bilateral de 1989 sobre prevención y represión del tráfico ilícito y el uso indebido de drogas. El gobierno británico incluirá además a Gibraltar en el ámbito del Convenio de Nápoles de 1967 sobre Asistencia mutua entre Administraciones Aduaneras, para proporcionar el marco necesario para la supresión efectiva del contrabando en la zona. Los dos Gobiernos desean fomentar una cooperación local más estrecha a este respecto y han tomado nota de las medidas recientemente adoptadas en Gibraltar como prueba de su compromiso. CANJE de Notas constitutivo de acuerdo entre España 3, el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte para extender a Gibraltar el Tratado Bilateral de Extradición de 22 de julio de 1985, realizado en Madrid el 1 de febrero de 1991. Excelencia: Tengo el honor de hacer referencia a las conversaciones que mantuve con el Secretario de Estado de Asuntos Exteriores y de la Commonwealth del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte en Madrid el día 26 de febrero de 1990, en las que se adoptó la decisión de extender a Gibraltar el Tratado de Extradición entre nuestros dos países. Este régimen y cualquier actividad o medida tomada en aplicación o como consecuencia del mismo se entienden sin perjuicio de la posición jurídica del Reino de España respecto de la controversia acerca de la soberanía sobre el Istmo. Tengo el honor de proponer que la presente Nota acompañada de la respuesta de vuestra excelencia constituyan un acuerdo entre nuestros dos Gobiernos para que se extienda a Gibraltar el Tratado de Extradición entre nuestros dos países, firmado en Londres el día 22 de julio de 1985. en conformidad con su articulo 21 (1) (a) (ii). El presente acuerdo entrará en vigor en la fecha en que cada uno de los Gobiernos haya notificado al otro que se han cumplido los trámites internos para hacerlo efectivo. Aprovecho esta oportunidad para reiterar a vuestra excelencia, el testimonio de mi consideración más distinguida. Madrid, 1 de febrero de 1991.-El Ministro de Asuntos Exteriores, Sir Patrick F. Fearn KCMG, Embajador de Su Majestad Británica. Madrid. EMBAJADA BRITÁNICA (Traducción.) Madrid, 1 de febrero de 1991 Excelentísimo señor don Francisco Fernández Ordóñez, Ministro de Asuntos Exteriores. Ministerio de Asuntos Exteriores, plaza de la Provincia, 1, 28012 Madrid. Excelencia: Tengo el honor de acusar recibo de su Nota (de fecha de hoy) que traducida dice lo siguiente: «Tengo el honor de hacer referencia a las conversaciones que mantuve con el Secretario de Estado de Asuntos Exteriores y de la Commonwealth del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte en Madrid el día 26 de febrero de 1990, en las que se adoptó la decisión de extender a Gibraltar el Tratado de Extradición entre nuestros dos países Este régimen y cualquier actividad o medida tomada en aplicación o como consecuencia del mismo se entienden sin perjuicio de la posición jurídica del Reino de España respecto de la controversia acerca de la soberanía sobre el Istmo. Tengo el honor de proponer que la presente Nota acompañada de la respuesta de vuestra excelencia constituyan un acuerdo entre nuestros dos Gobiernos para que se extienda a Gibraltar el Tratado de Extradición entre nuestros dos países firmado en Londres el día 22 de julio de. 1985. en conformidad con su articulo 21 (1) (a) (ii). El presente acuerdo entrará en vigor en la fecha en que cada uno de los Gobiernos haya notificado al otro que se han cumplido los trámites internos para hacerlo efectivo. Aprovecho esta oportunidad para reiterar a vuestra excelencia el testimonio de mi consideración más distinguida.» En respuesta tengo el honor de confirmar que los términos y condiciones expuestos en su Nota cuentan con la conformidad del Gobierno del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, y que su nota, acompañada de la presente respuesta, constituirán un acuerdo entre nuestros dos Gobiernos. que entrará en vigor en la fecha en que cada uno de los Gobiernos haya notificado al otro que han sido cumplidos los trámites internos para hacerlo efectivo. Aprovecho esta oportunidad para reiterarle a su excelencia el testimonio de mi consideración más distinguida. Firmado: Sir Robin Fearn. El presente canje de Notas constitutivo de acuerdo entró en vigor el 3 de mayo de 1991, fecha en que ambos Gobiernos se han notificado el cumplimiento de los respectivos trámites internos necesarios, según se establece en el texto de las notas. Lo que se hace público para conocimiento general. Madrid,- 17 de junio de 1991.-El Secretario general técnico en funciones, Aquilino González Hernando. (BOE, 27-6-91) Comunicado Conjunto Hispano-Británico (20-12-94) En los términos del Acuerdo de Bruselas de 1984, el Ministro de Asuntos Exteriores español Javier Solana, se reunió en Londres el 20 de Diciembre de 1994 con el Secretario de Asuntos Exteriores británico, Douglas Hurd. Ambos reafirmaron su compromiso con el Proceso de Bruselas. Se mostraron de acuerdo en la importancia que para Gibraltar tiene el desarrollo de una economía viable. Reconocieron la existencia de un problema de tráficos ilícitos, en particular drogas, en la zona de Gibraltar y coincidieron en la necesidad de establecer un mecanismo efectivo, que incluya a las autoridades locales competentes, para mejorar las consultas y la cooperación. En el marco de la circulación normal y regular entre Gibraltar y el territorio circunvecino, y con espíritu de cooperación, examinarán los progresos realizados para la puesta en práctica de dicho mecanismo los primeros días del año. XIª- SESION DEL PROCESO DE BRUSELAS Londres, 10 de Diciembre de 1997 COMUNICADO CONJUNTO Los Ministros de Asuntos Exteriores de España y el Reino Unido se reunieron en Londres el 10 de Diciembre en la XIª Sesión formal del Proceso de Bruselas para tratar de Gibraltar. Las conversaciones se desarrollaron en una atmósfera cordial y constructiva. La delegación española expuso sus ideas en torno al esbozo general de un marco jurídico, político y económico para Gibraltar incluyendo en ello aspectos relativos a la soberanía. La delegación británica escuchó con atención y recordó su compromiso de respetar los deseos de los gibraltareños tal y como quedan recogidos en el preámbulo de la Constitución de Gibraltar de 1969. Se acordó que los coordinadores del Proceso de Bruselas se volvieran a encontrar para avanzar en esta línea. Además de las ideas españolas, los coordinadores discutirán cualquier otra propuesta procedente de los gibraltareños, junto con propuestas británicas para una mayor cooperación en el campo económico. Comunicados de la O.I.D. Madrid, 11 de abril de 1983 Con motivo de la anunciada visita de una flota británica a Gibraltar, la Oficina de Información Diplomática, del Ministerio de Asuntos Exteriores, hace público el siguiente comunicado: "La televisión de Gibraltar ha anunciado que una flota de grandes dimensiones visitará la Roca en los próximos días. Dicha información ha sido confirmada por la vía diplomática. Ante esta situación el Gobierno desea puntualizar: 1.- Que está dispuesto, como se ha hecho reiteradamente saber a la parte británica, a cumplir la Declaración de Lisboa en su totalidad y con una lectura inequívoca, que, evidentemente, comprende el tema de la soberanía y la igualdad de derechos entre españoles y gibraltareños, así como la plena reciprocidad. 2.- Que reitera su atención a los legítimos intereses de la población de la Roca. 3.- Que ante la visita de la flota británica expresa su profunda preocupación y disgusto por sus efectos sobre la opinión pública española en las circunstancias actuales y actuando los precedentes que se dan a conocer. El Gobierno cuidará en cualquier caso de que los derechos nacionales respecto a las aguas no sean menoscabados y tomará a este efecto las medidas diplomáticas y políticas oportunas. Previene a la parte británica de que tal acción no puede menos de colocar el tema en una dimensión que el Gobierno español no desea y de cuyos efectos sobre la opinión nacional española y la general es solamente responsable quien ha planeado y decidido esta acción. En efecto 1.- El 10 de abril de 1980 los ministros de Asuntos Exteriores británico y español firmaron en Lisboa una declaración que preveía negociaciones entre el Reino Unido y España sobre la cuestión de Gibraltar. La Declaración comprende seis párrafos y su texto y alcance debe, naturalmente, ser interpretado y aplicado como un todo. Desde aquella fecha y hasta el conflicto anglo-argentino en el Atlántico sur en abril de 1982, la parte española tropezó con la dificultad para aplicar dicha declaración de que las autoridades británicas interpretaban el texto parcial y unilateralmente, centrándose, casi exclusivamente, en el tema de las medidas sobre las comunicaciones entre Gibraltar y el territorio circunvecino. En concreto, la parte española no obtuvo previsiones sobre el establecimiento de la igualdad de derechos para los españoles en Gibraltar y respecto a la reciprocidad plena que la declaración establece. El conflicto de las Malvinas creó en Gran Bretaña un clima de nacionalismo, bien conocido, que no ha favorecido las conversaciones. 2.- El Gobierno español formado el 4 de diciembre ha mantenido como punto esencial de su acción exterior la reincorporación de Gibraltar al territorio nacional. A la vez, ha pretendido no penalizar a la población cuyos intereses y cultura reconoce y estima. En este sentido, el 15 de diciembre de 1982 restableció el paso peatonal por el puesto de La Línea, medida que ha tenido efectos beneficiosos para la zona del Campo de Gibraltar y para la misma población de la Roca. 3.- El día 9 de diciembre se entrevistaron en Bruselas los ministros de Asuntos Exteriores de España y Gran Bretaña, señores Morán y Pym y decidieron hablar en la primavera del tema de Gibraltar. Posteriormente, por la vía diplomática, la par te británica intentó centrar el tema de futuras conversaciones en el levantamiento de las medidas relativas al tránsito. Por parte española, se hizo saber que la aplicación de la Declaración de Lisboa deber ser de todo el texto y principios, incluido el tema de la soberanía y de la igualdad de derechos entre españoles y gibraltareños. 4) Los días 16 y 17 de marzo, el ministro de Asuntos Exteriores español realizó una visita a Londres, de alcance y sentido semejante a las realizadas a otras capitales europeas. Visita que se había convenido de antemano no tenía por tema el cumplimiento de la Declaración de Lisboa, puesto que el alcance de la misma por ambas partes no era aún coincidente. El señor Morán se entrevistó con el señor Pym y con la primer ministro señora Thatcher, a los que expresó claramente la posición española. La primer ministro propuso al señor Morán nuevas entrevistas con su colega británico en un plazo de uno a dos meses. 5) El embajador británico en Madrid ha sido convocado al Ministerio de Asuntos Exteriores a estos efectos. El Gobierno reitera su voluntad de resolver el tema de Gibraltar por la vía de la negociación, de acuerdo con las resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas, de manera de que al fin del proceso se alcance la integridad territorial española, con respeto a los intereses de la población, y expresa una vez mas, junto con su grave preocupación por los síntomas de tal actitud británica, el deseo de mantener las mejores relaciones con el Reino Unido. Madrid, 11 de junio de 1985 La Oficina de Información Diplomática hace público el siguiente comunicado: La información relativa a una hipotética cesión de soberanía sobre el istmo de Gibraltar a cambio de la utilización conjunta por España y el Reino Unido del aeródromo de la referida colonia, que da pie a un comentario editorial del diario "ABC" hoy, 11 de junio, es falsa. España y el Reino Unido están manteniendo, de acuerdo con la Declaración de Bruselas, conversaciones sobre aviación civil en relación con Gibraltar. En dichas conversaciones, España ha hecho siempre una reserva formal, aceptada por la parte británica, en el sentido de que, cualquiera que sea la futura organización de las comunicaciones aéreas con Gibraltar, España mantiene su posición tradicional sobre el istmo: es decir, considerar que el istmo no ha sido ni será objeto de cesión al Reino Unido. "La recuperación de la soberanía de Gibraltar es irrenunciable para España. Nuestra reclamación se refiere tanto al Peñón cedido por el Tratado de Utrecht como al istmo, ocupado ilegalmente por el Reino Unido y cuya ocupación España nunca ha reconocido". Nueva York, 19 de Junio de 2001 Intervención de la Representante de España, Ana Menéndez, ante el Comité encargado de examinar la situación con respecto a la aplicación de la declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales.(Comité de los 24) Señor Presidente, En nombre de mis autoridades le agradezco a usted y a los miembros de este Comité‚ el haber permitido a mi delegación intervenir ante ustedes. Como bien saben los miembros de este Comité, España sigue con gran interés sus deliberaciones. Creemos que la labor de este Comité ha sido y sigue siendo esencial para terminar con el colonialismo de acuerdo con lo dispuesto en la Resolución 1514 (XV) de esta Organización. No puedo dejar de expresar, sin embargo, la frustración del Gobierno español por el hecho de que cuando acabamos de entrar en la Segunda Década para la erradicación del colonialismo sigan existiendo situaciones coloniales entre otras, Gibraltar. La recuperación de la soberanía de Gibraltar es irrenunciable para España. Nuestra reclamación se refiere tanto al Peñón cedido por el Tratado de Utrecht como al istmo, ocupado ilegalmente por el Reino Unido y cuya ocupación España nunca ha reconocido. Señor Presidente, Las circunstancias de cada situación colonial han sido y continúan siendo distintas, no existiendo una receta única para ponerlas fin. En el caso de Gibraltar se trata de una colonia establecida en el territorio de otro Estado, por lo que al contrario de lo que sucede en la mayoría de los supuestos de Descolonización existe un conflicto de soberanía entre dos Estados: el Reino Unido, como potencia colonial, y España al estar establecida la colonia sobre territorio Español. Sobre el contencioso de soberanía de Gibraltar existe desde hace tiempo una doctrina clara, asentada e inequívoca basada en tres principios: 1. El Reino Unido debe poner fin a la presencia colonial en Gibraltar. La Resolución 2429 (XXIII) de 18.12.66. declaró que el mantenimiento de dicha situación era contrario a la Carta e instó al Reino Unido a poner término a la misma. 2. La descolonización de Gibraltar debe realizarse siguiendo el principio de integridad territorial y no el de autodeterminación. - El párrafo sexto de la Resolución 1514 (XV) de 14.12.60 señala que “Todo intento encaminado a quebrantar total o parcialmente la unidad nacional y la integridad territorial de un país es incompatible con los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas”. La mención a la integridad territorial es especialmente relevante en los casos de Gibraltar o de las Malvinas. - Para la Resolución 2353 (XXII) de 19.12.67, la situación colonial de Gibraltar destruye la unidad y la integridad territorial de España. - En este mismo sentido también son de mencionar las Resoluciones 2625 (XXV) de 24.10.70 y 2429 (XXIII). - De aquí que las Naciones Unidas condenaran sin paliativos el referéndum organizado por la potencia administradora de la Colonia en 1967. Así, el párrafo segundo de la citada Resolución 2353 (XXII) declara que la celebración por la potencia administradora del referéndum de 10 de septiembre de 1967 contraviene las disposiciones de la Resolución 2231 (XXI) de la Asamblea General y las de la Resolución aprobada el 1 de Septiembre de 1967 por el Comité Especial de Descolonización. 3. La cuestión de Gibraltar debe ser resuelta mediante negociaciones entre España y el Reino Unido, recomendadas por la ONU ininterrumpidamente desde 1964.Por cierto que los gibraltareños han participado en el pasado en el proceso bilateral,como parte de la delegaciòn britànica ,hasta que decidieron abandonarlo,automarginádose de esta manera. A la luz de esta doctrina, la Asamblea General invita año tras año desde 1973 a los gobiernos del Reino Unido y España a que celebren negociaciones bilaterales para poner fin a esta situación colonial.Por cierto que los representantes de Gibraltar han participado en el pasado en el proceso bilateral como oparte de la delegaciòn británica hasta que decidieron abandonarlo,automarginandose de esta manera. En este sentido, ambos países nos comprometimos, por la Declaración conjunta firmada en Bruselas en 1984, a iniciar un proceso negociador acerca del futuro de Gibraltar en el marco del cual serían tratadas las cuestiones de soberanía y cooperación en beneficio mutuo. Lamentablemente el Proceso no ha ofrecido resultados hasta la fecha, a pesar de la buena disposición y el Espíritu constructivo que España ha demostrado en todo momento. Señor Presidente, El Gobierno de España sigue dispuesto a seguir trabajando con este Comité para lograr el objetivo de conseguir un mundo libre de colonialismo. Esperamos y confiamos asimismo que se dé cumplimiento a las resoluciones y decisiones de la Asamblea General de esta Organización. Y. en el caso concreto de Gibraltar, seguimos dispuestos a seguir haciendo del diálogo y la negociación con el Reino Unido los medios para terminar con la situación colonial de Gibraltar, que rompe la integridad territorial de España y su unidad nacional. Muchas gracias. Fuente: Misión de España en la ONU