A tres bandas COMENTARIOS A LA CAMPAÑA ‘RELACIONES’, DE SCPF PARA EL BANCO SABADELL Un cierto tono de voz ¿Saben a quién visualizo? Me gusta chocarme con las campañas. Me gusta estar desprevenido leyendo el periódico, viendo la tele o navegando por internet y que una campaña caiga sobre mí como un depredador que ha esperado pacientemente a su presa. En ese momento, en el que mi parte publicitaria anda despistada, es cuando puedo disfrutar de una campaña como consumidor. Esa Pero afortunadamente me encontré con la campaña de Sabadell así, de sopetón. En el metro, leyendo ‘El País?, al doblar la hoja del periódico y ver un anuncio lleno de palabras que rodeaban una foto de un pie y de una mano. primera impresión dura muy pocos segundos. No está todavía contaminada por el análisis publicitario. Cada vez me resulta más difícil disfrutar de estas primeras impresiones. La mayoría de las veces descubres las campañas en algún foro del sector, lugares en los que ya se está predispuesto a ver publicidad. Pero afortunadamente me encontré con la campaña de Sabadell así, de sopetón. En el metro, leyendo El País, al doblar la hoja del periódico y ver un anuncio lleno de palabras que rodeaban una foto de un pie y de una mano. El titular funcionó. Me generó curiosidad y caí en la trampa de empezar a leer el tocho de texto. Según voy leyendo, empiezo a visualizar a esa voz cordial, un poco irónica, cuidadosamente apasionada e inteligente que me está contando una historia. ¿Y a que no saben a quién visualizo? A Guardiola. Sí, lo sé, Guardiola es de la otra campaña, la del año pasado, pero no puedo evitarlo, me imagino a Guardiola o a un tipo muy parecido, vestido con un traje a la última, contándome, con una sincera pasión, que en el Sabadell sabemos hacer las cosas, que somos distintos de los demás, que no somos la banca rancia y que ante todo somos muy eficientes. Y me convenció. En estos tiempos en los que no sabes si tu banco un día va a desaparecer, un banco catalán que me resultaba muy lejano o que al menos poco tenía que ver conmigo, se convirtió en una opción a tener en cuenta donde guardar mis ahorros. Señores de SCPF, todo esto sólo con una página de prensa leída en el metro; muy bien, ¿no? Punto reflexivo A lo largo de los siguientes días descubrí el resto de piezas. Creo que para un banco es tremendamente difícil combinar la seriedad con la modernidad. Sabadell sabe hacerlo. La idea de las conversaciones le otorga un punto reflexivo, como si de un observatorio social se tratase. Pero lo que lo hace moderno es la puesta en escena: un sofá precioso en donde gente como Boris Izaguirre habla en blanco y negro, la dirección de arte de las gráficas, la sinceridad de la voz que recorre los textos. Esta propuesta estética hace que el Banco Sabadell se aleje todavía más de la imagen que tiene la mayoría de la banca. ‘Walk the talk’ (o el reto de ser coherente con la voz de marca) Dan Wieden decía que “Nike no descubrió el poder de su buena publicidad. Descubrió el poder de su propia voz”. Para mí, ese es el mayor reto de cualquier profesional de la comunicación, descubrir la voz de las marcas para las que trabaja. La verdadera voz de marca tiene que nacer desde las entrañas de la compañía porque así, una vez definida, la marca puede hablar de lo que quiera porque la gente siempre la reconocerá. Nike encontró su voz en la relación de atleta con atleta, permitiendo a los demás escuchar esas conversaciones e inspirándoles a sentirse tan atletas como ellos, por el simple hecho de poseer un cuerpo. Descubrir la voz de una marca no es tarea fácil, pero una vez hecho el hallazgo, el reto es conseguir que el comportamiento de la marca sea coherente con su voz. En mi opinión, Banco Sabadell ha empezado a descubrir su voz. Es una voz creada a partir de valores compartidos: empatía, respeto, pero sobre Saber escuchar, un valor que otros bancos han todo de una escucha sabia. intentado contar, pero que no han conseguido Saber escuchar, un valor que transmitir. Es la diferencia entre decir que eres otros bancos han intentado muy gracioso o hacer reír. contar, pero que no han conseguido transmitir. Es la diferencia entre decir que eres muy gracioso o hacer reír. Esta marca no dice Hablemos, sino que habla. Con esta campaña la marca te hace cómplice de unas conversaciones en las que te sientes un selecto voyeur. Están hablando de escucha de una manera que inspira a escuchar. Esto se debe mucho más al cómo que al qué. En mi opinión, las buenas voces de marca son 90% tono y 10%, mensaje. Aquí se ha cuidado muy bien el tono, basado en una semiótica impecable en la estética de toda la campaña. En televisión, primero fueron las conversaciones, siempre frente a frente, de sillón a sillón. Ahora son las relaciones, que por naturaleza no deben ser de frente, sino desde un mismo lugar, compartiendo sofá, pero con el espacio suficiente para preservar la identidad personal de cada individuo. En gráfica, las conversaciones se dibujaron. Ahora las relaciones se fotografían. Y la expresión más pura de la voz se muestra con manos curtidas y sabias que te hablan. Todo un ejemplo de cómo transmitir una buena idea, que desafortunadamente, no tenemos el placer de ver muy a menudo. Pero como a veces sucede con las grandes ideas tan bien planteadas, si éstas no han nacido desde lo más profundo del ADN de la compañía, corren el riesgo de acabar superando a su propia realidad. Esto fue lo que le sucedió a Citibank en Estados Unidos cuando reposicionó su marca de la mano de Fallon (cuando Fallon era Fallon). Una voz de marca cálida y humana que celebraba que en la vida hay cosas más importantes que el dinero, sellando con Live richly. Pero la experiencia en su sucursal no tenía nada que ver con esa voz. Era como la de cualquier otro banco de Estados Unidos, donde se iba a hablar solo de dinero, de la manera más directa y fría posible. Pura contradicción. Pura destrucción de marca. Claro ejemplo del famoso dicho: “No hay nada más peligroso que una buena publicidad para una mala experiencia”. Esta idea es de esas que necesita contagiarse por dentro antes de compartirse por fuera. Desde el tipo del cajero hasta el mismo CEO. Mirar a los ojos La experiencia de marca tiene que estar al mismo nivel de la conversación que ha empezado. El día que entre en una sucursal del Sabadell esperaré que el personal se tome su tiempo para escuchar y entender todo antes de proponer o vender nada. Que demuestren empatía y respeto, mirando a los ojos. Exagerando un poco el test, me esperaría ver una oficina con más sillones que sillas con ruedas. Más mesas bajas que mesas altas de escritorio. No sé si es así, pero siento que debería serlo. De hecho, creo que había una oportunidad para buscar otro nombre a su cuenta que no fuera Cuenta Expansión porque no es tan coherente con su discurso. Ese era un lugar para dejar claro que van en serio con su nueva voz, demostrando que esta marca walks the talk. Banco Sabadell ha empezado a compartir una voz muy clara y contundente. Ojalá consiga integrarla en lo más profundo de su cultura empresarial, y no quedarse solo en la superficie de su discurso comercial, porque eso se acaba pagando. Sería injusto no aprovechar al máximo este hallazgo tan valioso y con tanto recorrido. Álex Pallete Director de planificacion estrategica internacional, JWT Global Task Force Carlos Jorge Director general creativo de Contrapunto BBDO Anuncios 1418 / 14 al 20 Mayo 2012 18 Accede a la campaña y a la ficha técnica en: De Pep a las relaciones Hace ya un porrón de años, en la primera época de Contrapunto, presentamos una campaña para un banco o caja de ahorros cuyo nombre no recuerdo y que nunca se llegó a publicar. Lo que sí recuerdo es el titular de uno de los anuncios: “Nuestro cajero automático se llama Antonio”. Obviamente, al margen de la boutade, el objetivo era simple: Como dice Daniel Solana: “La publicidad conversada está todavía por inventar”. Y se refiere a la publicidad interactiva cuyo cauce es internet. En el caso de la publicidad ordinaria, toda pretendida ‘conversación’ entre emisor y receptor es simplemente un simulacro. humanizar la imagen de un género de entidades que no siempre destacan por su humanidad. Y si no, que se lo digan a todos esos pequeños ahorradores que ven hoy sus dineros inmovilizados, vía participaciones preferentes, por confiar en el director de la sucursal de turno… Pues bien, una consideración de este tipo parece inspirar, salvando todas las distancias, la línea que sigue Banco Sabadell de la mano de SCPF. Primero, Pep Guardiola: una personalidad absolutamente coherente con la imagen que pretende construir y transmitir el banco (esfuerzo, honestidad, modestia, éxito comenzando desde la base…). Luego, una serie de personajes contrastados conversando a cámara abierta acerca de algo tan incierto como el futuro en estos tiempos que corren. Ahora, tres parejas populares y un trío unidos por una larga relación hablando, según la misma técnica, de los pormenores que han presidido todos los años transcurridos juntos. Es probable que el éxito de la primera campaña haya animado a los responsables del banco y de la agencia a perseverar en la misma línea. Ahora bien, lo que estaba claro en la primera tendía a diluirse en la segunda. ¿Qué contribución a la imagen del banco podía aportar una conversación entre dos personajes tan contrastados como Inocencio Arias y Loquillo? Es cierto que el lema de la campaña incluía una palabra de moda —Conversaciones— en un contexto donde el tratamiento impositivo está cada vez más desprestigiado. Pero, como dice Daniel Solana: “La publicidad conversada está todavía por inventar”. Y se refiere a la publicidad interactiva cuyo cauce es internet. En el caso de la publicidad ordinaria, toda pretendida conversación entre emisor y receptor es simplemente un simulacro. De ahí que es bastante probable que las conversaciones escenificadas en la citada campaña no hayan sido interiorizadas por una mayoría de sus destinatarios como remedio de la conversación que el banco pretende establecer con ellos. Símil La nueva campaña, Relaciones, parece hilar más fino. Ahora son unos personajes, todos muy próximos al receptor, los que tratan de que las excelentes relaciones que exhiben entre ellos sean interpretadas por aquéllos como símil de la relación que el banco se propone entablar con ellos. ¿Presunción tal vez demasiado arriesgada? En todo caso, el experimento merece un aplauso. Aunque tal vez, en mi opinión, lo más flojo sean los anuncios de prensa. ¿Alguien ha pensado en la decepción del posible y esforzado lector cuando compruebe que las ventajas que contienen no son tan distintas de las que ofrecen otros bancos? ¿Y qué decir de las ilustraciones… al margen de lo que parecen tener de autohomenaje de la agencia al famoso brazo de BMW? Antonio Caro Profesor y autor del libro ‘Comprender la publicidad’ 19 Anuncios 1418 / 14 al 20 Mayo 2012