COSTA DEL SOL DESTINO: DUBLIN Dublín monumental Dublín, es una ciudad llena de historia, elegante, tranquila y muy acogedora. Dentro de un área pequeña y fácilmente accesible, se pueden encontrar desde restos vikingos, iglesias medievales o espléndidas casas georgianas junto a los más modernos edificios. Fácilmente podemos visitar la ciudad andando, quizá sea una ciudad mas agradable para visitar a pie, paseando tranquilamente a través de sus bonitas calles y descansar a tomar una pinta o un café en alguno de los numerosos pubs y cafés o disfrutar de la tranquilidad y la belleza de sus parques. El río Liffey divide la ciudad en dos. Al sur del Liffey se encuentra la ciudad antigua y se concentran la mayoría de los lugares de interés que debemos visitar. Grafton Street, es la principal calle comercial de Dublín, al final de ella, siempre rodeada de turistas, está la estatua de Molly Malone, la bella joven de la leyenda inmortalizada en la canción “almejas y mejillones” un verdadero himno de Dublín. En frente, Trinity College, la universidad más antigua de Irlanda y una de las más antiguas de Europa (fundada en 1592). En ella han estudiado alumnos tan destacados como Jonathan Swift, Oscar Wilde o Samuel Beckett. Está formada por bellos patios y jardines rodeados de elegantes edificios de diferentes épocas, varios de ellos abiertos al público, entre los que destaca la antigua biblioteca que posee la mayor colección de manuscritos y libros impresos en Irlanda y donde se exhiben los manuscritos de los evangelios medievales irlandeses, principalmente, el Libro de Kelss, el Libro de Armagh y el libro de Durrow. En el extremo sur de Grafton street se extiende St. Stephen Garden, un magnifico jardín victoriano donde disfrutar de la paz de sus avenidas llenas de flores y sus lagos. En verano suelen darse conciertos al medio día. En sus alrededores se pueden contemplar las bellas y elegantes casas georgianas con las emblemáticas puertas de Dublín. Temple Bar, es una animada zona de pubs, cafés, teatros y centros culturales. Un enclave de calles empedradas que se extiende desde la ribera del río hasta Dame street. Se comunica con la orilla norte, a través de dos puentes peatonales, Milenium Bridge y Ha´Peny Bridge. Ha´Peny Bridge es el mas antiguo y debe su nombre a que, en otros tiempos, para cruzarlo era obligatorio pagar medio penique (half penny). Desde aquí, a través de Merchant´s Arch, nos adentramos en Temple Bar, el corazón artístico de la ciudad, para disfrutar de sus animados bares y restaurantes o de las muestras que se exponen en sus numerosos centros culturales, de fotografía, cine o danza. También son famosos los mercados que se celebran los sábados en algunas de sus calles y plazas. La historia de la ciudad, desde los vikingos hasta nuestros días, se puede contemplar en Dublin´s City Hall en una exposición permanente titulada ‘’Historia de la Capital’’. Dublín tomó su nombre de un estanque negro ( Dubh Linn ) que se formaba en la confluencia de los ríos Poddle y Liffey, donde hoy se encuentran los jardines de Dublín Castle, inicialmente construido como fortaleza en un lugar estratégico y elevado de la ciudad. Este histórico edificio actualmente se usa como alojamiento de dignatarios extranjeros en su visita a Dublín y para la celebración de actos solemnes, además, acoge en sus dependencias la biblioteca Chester Beatty, una magnifica colección de manuscritos, ilustraciones y objetos de arte representativos de las grandes culturas y religiones del mundo, que fue donada en beneficio público por sir Alfred Chester Beatty, nacido en Nueva York y que se trasladó a irlanda en 1950, hasta su muerte en 1968. Muy cerca nos encontramos Christ Church Cathedral, la mas antigua de las dos catedrales de Dublín, un magnifico edificio donde se mezclan los estilos románico y gótico. En la catedral se hallan el sepulcro del Caballero normando Richard de Clare, Strongbow, quién mandó construir el edificio actual y también el relicario con el corazón de San Lorenzo O´Toole, patrón de Dublín. Desde el coro se puede observar la pared inclinada que, desde 1562, se encuentra desplazada unos 50 cm. Destaca la cripta por su gran dimensión, extendiéndose bajo la nave y bajo el coro. En ella se guardan importantes manuscritos medievales y objetos de arte. La otra catedral de Dublín, St. Patrick´s Cathedral, se levanta en el lugar donde se dice que San Patricio bautizó a los conversos en un manantial en el año 450 d.C. Jonathan Swift, que fue deán de St. Patrick´s, se encuentra enterrado en ella junto a su amada Estela. Llaman la atención las inmensas proporciones de la nave central y las espadas, estandartes y cascos que cuelgan sobre los bancos del coro, que representan a los caballeros de San patricio. Desde 1742, año en el que se representó por primera vez, en Semana Santa y Navidad, se representa en ella El Mesías de Handel. Fuera de lo que fueron las murallas de la ciudad es imprescindible visitar Kilmainham Hospital, construido como retiro para veteranos e inspirado en Les Invalides de París y que actualmente acoge el Museo Irlandés de Arte Moderno, IMMA. Una avenida arbolada lo une con Kilmainham Gaol, la prisión construida en 1789 y clausurada en los años 20, hoy restaurada como museo. Aquí fueron ejecutados los líderes del alzamiento de de 1916. Pueden visitarse las celdas, la galería y los patios. De camino a esta visita no se puede olvidar una parada en Guinness Storehouse, donde conoceremos la historia de la famosa cerveza y su proceso de fabricación, a la vez que podremos degustar una pinta de Guinness en el Gravity Bar contemplando, desde la 7ª planta del edificio, una magnífica vista panorámica de Dublín. Al norte del río Liffey la calle principal, O´Connell Street es una de las más anchas de Europa. En el centro, se ubica The Spire, la aguja, de 120 metros de altura, justo enfrente de General Post Office, un edificio emblemático que fue cuartel general durante el levantamiento de 1916. Aún pueden observarse agujeros de bala en sus columnas o en las estatuas que se encuentran a lo largo de O, Connel street. Al norte de la calle se ubica Garden of Remembrance, un jardín diseñado en homenaje a los voluntarios del alzamiento de 1916. Muy cerca, se encuentran James Joyce Centre, alojado en una casa Georgiana restaurada, y Dublín Writters Museum, donde se puede contemplar la historia de escritores como Joyce, Swift, Bernard Shaw o Yates a través de sus libros, cartas y objetos personales. No podemos despedirnos de Dublín sin visitar Phoenix Park, al este de la ciudad, el parque urbano más grande de Europa. Creado, en principio, por el duque de Ormond como reserva de ciervos para Carlos II, es un lugar idílico donde disfrutar de la paz de sus bosques, pasear o realizar actividades como el polo o el hurling. En Phoenix Park se encuentran la residencia del presidente irlandés y la del embajador de EEUU. Además, entre los diversos atractivos del parque, podemos disfrutar de la visita a Dublín Zoo o admirar algunos monumentos como el Obelisco o la Cruz erigida en el lugar donde el Papa Juan Pablo II celebró una misa en su visita a Dublín en 1979. Aquí le decimos adiós a Dublín, una bella y apacible ciudad llena de atractivos, y a su gente, amable y educada. Sin duda, nos llevamos un grato recuerdo con el deseo de volver y disfrutar de lo que ya hemos conocido. AGRADECIMIENTOS: TURISMO DE IRLANDA www.turismodeirlanda.com OFICINA DE TURISMO DE DUBLIN www.visitdublin.com AER LINGUS www.aerlingus.com