Peleando por sobrevivir

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LATERCERA Sábado 30 de julio de 2016
Deportes
Fútbol
A tres meses de la desafiliación de Deportes Concepción, nadie quiere
quedarse quieto. Los funcionarios siguen trabajando, los juveniles
entrenando y junto a ellos algunos ex miembros del primer equipo. A
esto, se suma una nueva directiva del reactivado Club Social que tiene
claro su plan de trabajo. Por Daniel Kuschel, Concepción
Peleando por sobrevivir
J
uan Torres tiene
74 años. De ellos,
ha pasado la mayor parte ligado a
Deportes Concepción, primero
como uno de los
socios fundadores, “el 957
recalca orgulloso”, y luego
como uno de los administrativos de la institución por
más de 22 años.
Pese a cualquier dificultad, como la lluvia que cae
fuertemente en algunos días
sobre la capital de la Región
del Bío Bío, Juan es uno de
los ocho trabajadores que, a
tres meses de la desafiliación de Deportes Concepción, concurren a diario a
los Campos Deportivos Ricardo Keller a cumplir sus
funciones de antaño.
Legalmente siguen trabajando para Fuerza, Garra y
Corazón SADP, la concesionaria que tiene sumido al
club penquista en el momento más negro de su historia, y esta situación los
tiene atados de manos.
Por eso, un grupo de profesionales relacionados al
recientemente reactivado
Club Social y Deportivo, les
ayudan actualmente con los
trámites que les permitan
concurrir a la defensoría
pública, y así gestionar su
autodespido.
“Uno creería que esto está
muerto, pero poco a poco se
va revitalizando. Los cadetes
aún vienen a entrenar y se
ven algunos jugadores también practicando con ellos”,
dice Juan sobre la actualidad
del complejo deportivo que
por años ha sido el centro de
operaciones del cuadro lila.
En lo que respecta a lo que
fue el plantel de jugadores,
son muy pocos los que se
mantienen entrenando en
Nonguén. Entre ellos están
Matías Godoy, Angelo Giolito y Felipe Elgueta, quienes
tratan de mantenerse activos
en medio de los ‘cachorros’,
a la espera de alguna oferta
para continuar sus carreras.
“Me mantengo aquí porque estoy con ‘profes’ que
trabajan bien. La idea es estar preparado para cuando
llegue la oportunidad de seguir adelante mi carrera, ya
sea aquí o en otra parte”, comenta Elgueta.
El Negro reconoce también
RR Un entrenamiento en
el complejo deportivo de
Concepción ubicado en
Nonguén.
FOTOS: ESTEBAN PAREDES
RR Algunos de los
juveniles que asisten a
diario a los
entrenamientos del
cuadro lila.
que estos casi 90 días han
sido complejos. “Hace tres
meses que no recibo un sueldo. Había ahorrado y con eso
me he mantenido, pero cada
día se hace más difícil. Aunque nunca tanto como los entrenadores de los juveniles
que llevan cinco meses sin
ver un peso”, explica.
Antonio Zaracho, uno de
los técnicos que no baja los
brazos, intenta que sus jóvenes pupilos no pierdan la
motivación. “Ellos tienen la
ilusión de que esto se va a revertir. Algunos a veces pierden la esperanza y van a
probarse en otros equipos,
pero nadie quiere tener a
un juvenil que no sabe si
podrá liberar”, indicó el ex
arquero de Huachipato.
Los que se fueron de la ciudad hoy intentar aferrarse a
una ilusión. Algunos se entrenan con los jugadores libres en las prácticas que organiza el Sifup. Otros, con
mayor fortuna, ya encontraron club, como el portero Cristián Limenza y Rodrigo Jara en Puerto Montt,
Francisco Ibáñez en San
Marcos de Arica, o Kevin
Martínez y Juan Leiva, últimas contrataciones de Uni-
versidad de Chile.
Panorama gris
A tres meses de la desafiliación de Deportes Concepción del fútbol profesional,
los hinchas son los que han
mantenido activo el club
lila. De los ex dirigentes de
Fuerza, Garra y Corazón,
nada se sabe. Y es que más
allá de los dos recursos de
protección que hay presentados en la justicia ordinaria (uno en Concepción y el
otro en Santiago), y de la
querella del directorio de la
ANFP contra Nibaldo Jaque,
Pablo Tallarico, Adolfo Sabando y Luis Polnoroff, fue
un grupo numeroso de profesionales simpatizantes del
cuadro penquista el que se
ha preocupado de buscar la
forma de revivir al club de
sus amores.
Así, se reactivó el Club Social y Deportivo encabezado
hoy por Víctor Tornería,
quien ha vivido gran parte
de sus 32 años ligado a la institución, primero como barrista y ahora como uno de
sus principales dirigentes.
“Si los hinchas no nos movemos, nos vamos a quedar
sin fútbol”, es una de las prin-
cipales ideas que plantea el
joven directivo, en el marco
también de cómo ha cambiado su campaña, pasando del
concepto que usaron siempre
de “El Conce no se va”, a algo
más concreto, porque para
ellos “El Conce no se fue”.
“Uno entra a un mall y es
sorprendente ver como en
tiendas deportivas la camiseta que está en la vitrina es
la de Deportes Concepción,
un equipo que está desafiliado”, agrega Tornería, con un
entusiasmo que contagia.
Como hinchas y dirigentes,
hoy tienen tres directrices
principales en las que están
trabajando, siendo la primera de ellas la recolección
de recursos para reparar las
instalaciones de los campos
deportivos. En ese sentido,
ya tuvieron un avance, luego de que un hincha les regalara el arriendo de un generador eléctrico, algo que
les permitirá utilizar las canchas del recinto para público general y así autofinanciarse. Todos, de algún
modo, intentan mantener
vivo a una de las instituciones históricas del sur del
país, porque para ellos todavía “el Conce no se fue”.b
OTRA MIRADA
La verdadera
razón de la crisis
H
Por Anibal Silva
ace poco hubo un paro en protesta,
principalmente, a que el formato del
torneo sería la causa de la cesantía de
entre 200 y 450 jugadores, según se
ha dicho. La solución fue agregar un
descenso en 1ª B y medio en 1ª A para
fines de 2017. ¿Disminuirá la cantidad de cesantes? No, porque el formato no es la causa
de la cesantía. El año 2007 la Ley 20.178 que regula la
relación laboral de los deportistas profesionales estableció que cuando éstos terminan su etapa formativa
deben tener contrato de trabajo para seguir en el club.
Así, hay que hacerle profesional al que sale de la juvenil, que antes de esta ley podía mantenerse hasta los 23
como ex cadete. Y ahora los clubes hacen su primer
contrato profesional a los de mayor proyección, incluso
a los que no están preparados, pero que pueden explotar más tarde. Además, por un sueldo bajo se cubren del
bochorno de que un desechado logre nivel en otro lado.
El resultado es que cada año, desde la entrada en vigor
de la ley, muchos futbolistas ingresan al mercado. Si cada
uno de los 32 clubes de 1ª A y B le hace su primer contrato
a dos juveniles, significa que 64 nuevos jugadores ingresan al mercado por año. En los últimos cinco son más de
300 los nuevos profesionales chilenos. Por contra, salen
del mercado local los que se retiran o son transferidos al
extranjero, unos 20 al año. Si la demanda total es de unos
800 jugadores, en los últimos cinco años la oferta aumentó cerca del 40 por ciento. Y según información entregada por la ANFP, actualmente los clubes tienen contratados en promedio 35 jugadores cada uno. ¿Dónde
pretenden darle trabajo a 300 o 400 jugadores más?
Ésta es la principal causa del aumento de jugadores
profesionales sin trabajo, y no el formato de los torneos.
Ni con diez ascensos la cantidad de cesantes caerá. ¿Y
qué pasa si aumenta tanto la oferta de un factor, con demanda constante? Bajan los precios, en este caso, los salarios. ¿Por qué no ha sucedido aún? Porque el mercado
ha demorado en ajustarse y los clubes no han disminuido
sus gastos; los han aumentado. Y mucho. Los sueldos de
jugadores y técnicos se han quintuplicado en estos años.
En promedio los sueldos de los futbolistas que juegan en
Chile han aumentado en un cien por cien anual.
Aquí llegamos a la verdadera razón de la crisis: los clubes gastan más de lo que ingresan. Y no es por falta de ingresos. El problema está en los gastos, en los altos sueldos
de los jugadores. Es más: cada año llegan a los clubes
unos 100 futbolistas desde fuera del país, es decir, cerca
del 90% de los jugadores que juega en Chile son los mismos del año anterior. En resumen, se le paga más, mucho
más, a los mismos jugadores.
Algunos dicen que los mayores ingresos se los llevan
“para la casa” los dirigentes, los dueños de los clubes.
Otros dicen que el problema es que los clubes son S.A.
Absurdo y falso. Los clubes pierden dinero porque gastan más de lo que ingresan. Así de fácil.
La solución, en cambio, no es tan fácil. La presión
competitiva por los títulos o no descender, por el enorme costo económico que representa, hacen que los
dueños sigan gastando de más. Y este círculo vicioso seguirá arrojando sueldos impagos y pérdidas. No tiene
que ver con formatos o tipo de organización ni con los
ingresos, que aumentaron como nunca. El problema
está al otro lado del estado de resultados. Una posible
solución es implementar una estricta regulación que limite los gastos en sueldos. Fórmulas se pueden crear
varias. De hecho existe en Chile el Fair Play Financiero,
que evidentemente no se cumple ni se sanciona duramente. Simplemente porque los clubes no se deciden a
hacerlo, a pesar del beneficio que tendría para el desarrollo del fútbol chileno, incluyendo a los jugadores.
Economista, asesor del Comité Olímpico de Chile y socio de
GMS Marketing Deportivo.
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