biografia puccini pdf.

Anuncio
1
Autor: Ricardo Moreno Rodríguez
Colección: Mi Pajarito
Correo: [email protected]
Página web: http://www.mipajarito.org
Depósito legal: GR-4215-2011 y GR-2115-2013
Gestión técnica: Francisco José Moreno Llorca
Obra licenciada bajo: Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 3.0
Unported
puede ver información sobre esta licencia en: http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/3.0/
2
Querido amigo o amiga:
Éste que ves al comienzo del relato soy yo, Giacomo Puccini, músico
italiano que viví a caballo entre los siglos XIX y XX en un época de
asentamiento tras la luchas del Imperio Austriaco con los Estados
Pontificios y la unificación de Italia con el rey Víctor Manuel II; esta
reunificación fue promovida por Giuseppe Garibaldi y a la vez se produjo
la creación del Estado Vaticano tal como es hoy; en este mapa puedes ver
la situación donde está enclavada la zona de Lucca.
MI INFANCIA
Nací en la ciudad de Lucca -en la región de la Toscana cuya capital era
Florencia- el día 22 de Diciembre de 1858; también había nacido en Lucca
Alfredo Catalani, compositor italiano de las óperas Loreley y La Valli;
también Luigi Bocherini que luego pasó a España trabajando en la corte
española y con el Duque de Benavente dejando una magnífica huella en el
mundo musical español del s. XVIII; ésta es la suntuosa catedral de mi
ciudad al estilo florentino ¿verdad que es una joya?
MI CALLE
LA CATEDRAL DE LUCCA
Mi padre, Michele, formaba parte de una ancestral familia de
músicos de la capilla de la catedral de Lucca viniendo la afición a la
3
música de mi tatarabuelo Giacomo y de mi tío Fortunato Magi que vivían
de su dedicación a la música en iglesias y teatros.
Mi madre se llamaba Albina y era ama de casa; me bautizaron con
los nombres de: Giacomo, Antonio, Domingo, Miguel, Segundo, María y
mi apellido Puccini. ¿Qué te parece la retahíla? Aquí tienes al tatarabuelo
y a mis padres.
Los primeros estudios lo realicé en Lucca y el director del Instituto de
Música Carlo Angeloni supo despertar mi afición a la música hasta tal
punto que pronto los salones y las iglesias me disputaban como pianista y
organista con lo que obtenía un dinerillo para los gastos diarios. En una
ocasión tuve la oportunidad de asistir a la representación de la ópera
“Aida” de G. Verdi que me impactó muchísimo y en mi interior decidí
que mi destino en adelante era componer óperas, como así fue según verás
más adelante; para acabar mi formación musical en Lucca escribí una
pieza de música sacra que fue muy bien recibida por mis compañeros,
profesores y por el público.
MI JUVENTUD
Tres años estuve en el Conservatorio de Milán, donde fui alumno
del maestro A. Ponchielli -el autor de la célebre “Danza de la horas” de la
ópera “La Gioconda”- y de A. Bazzini; como alumno participé en un
concurso de óperas cortas a la que presenté la mía de título “Le Villi”
(espíritus de doncellas que habían muerto abandonadas por sus amantes)
4
que poco más tarde fue representada en el teatro Dal Verme de Milán con
la suerte de que en esa representación estaba presente el más famoso
editor de música de Italia Giulio Ricordi al que le gustó mucho y me
encargó una nueva ópera que debía llamar “Elgar”; más tarde se
representó en Madrid a donde acudí a ver la representación.
Para tener un sitio tranquilo donde componer y huir del fragor de la
ciudad me compré una casa a
orillas del lago Massaciuccoli a
la que llamé “Torre del Lago”
y donde practicaba dos de mis
deportes favoritos: cazar y
navegar en barca; éste era el
embarcadero de mi casa en el
lago.
Seguro que conoces que la afición de los italianos a la ópera venía
a través de Rossini, Donizetti, Bellini y Verdi de los que yo bebía en mi
formación y de los cuales aprendí toda la técnica operística con algunos
toques de otro gran operista Wagner; pero no fui seguidor estricto de
ninguno ni tuve ningún alumno seguidor como otros músicos ¡Yo fui yo!
Pues siguiendo mis pasos por la ópera me
puse a componer otra de título “Manon Lescaut”
cuya elaboración fue larga y penosa hasta dar con
el argumento adecuado: la historia de una bella
joven “Manon” que se enamora de un joven de la
clase alta pero sin dinero mientras ella mantiene
una relación con un señor rico empujada por su
necesidad; ella termina su vida en el desierto de N.
Orleáns (EE.UU) en brazos de su amado. Se
estrenó en el Teatro Regio de Turín en 1893; aquí
tienes una escena de la ópera.
5
MI MADUREZ
La tradición operística reinante se basaba en temas mitológicos y
fantásticos pero iba apareciendo otra nueva moda de poner personajes de
la vida real a lo que se llamaba “verismo” y yo me fui introduciendo en
ella con mis personajes alejados de la fantasía y que no se comportaban
como héroes sino como personas corrientes de la vida de la ciudad. A este
estilo de hacer ópera correspondió la siguiente que compuse “La
Bohème” sobre el tema de la vida bohemia: cuatro amigos vivían con
mucha penuria: un poeta, un pinto, un músico y un filósofo y en su misma
escalera vivía también una muchacha “Mimí” que vivía de las venta de
flores que ella misma hacía, se enamora de uno de ellos pero ella enferma
de gravedad y nadie puede ayudarle en la compra de los medicamentos; al
final ella muere en brazos de su amante en una escena muy romántica.
Esta ópera, que se estrenó en 1893
causó un gran asombro precisamente
por la figura de la protagonista y su
trágico final; aquí tienes una escena
cuando los protagonistas están tomando
alegremente algo en una terraza en la
calle.
La siguiente ópera se estrenó en Roma en 1990 y se trataba de la
historia de Tosca, una bella cantante que se enamora de un pintor pero
su relación se ve turbada porque éste había ocultado a un político
evadido de la cárcel; por otra parte el jefe de policía, que pretende el
amor de Tosca, le presiona y ella accede con la promesa de que harían
un simulacro de fusilamiento y que daría un salvoconducto para salir de
Italia; pero el pintor muere al ser disparado con fuego real; en esta
escena de dicha ópera aparece el gran
tenor Enrico Caruso.
Otra de mis grandes óperas, la
que siempre fue “Madame Butterfly”
(Señora Mariposa); habla de una geisa
japonesa Cio-Cio-San que se enamora
de un militar americano, Pinkerton,
6
con la que acuerda un matrimonio temporal mientras él esté en Japón;
cuando él se marcha se ha quedado embarazada sin perder el amor del que
fue su marido; éste vuelve más tarde con su esposa americana y le
proponen adoptar al hijo de Butterfly a lo que ella accede pero a
continuación se suicida; esta ópera tenía como rasgo original la
introducción de música de estilo oriental y el ambiente exótico de los
palacios japoneses con sus árboles, pájaros y colores; aquí tienes el cartel
y una escena de la ópera.
Conviví muchos años con Elvira Gemigniani, mujer casada con la
que me casé al morir su marido; estábamos muy enamorados y tuvimos
dos hijos: Fosca y Tonio (Antonio) con los que tuve siempre una buen
relación sobre todo con el chico pero la convivencia no fue fácil con ella
porque Elvira era muy celosa y
creía que yo la engañaba con la
doncella de la casa, Doria; hasta
tal extremo llegó el acoso a la
muchacha que ella acabó
suicidándose.
Mis
propios
amigos me reprochaban que
viviera con ella y me decían que
no se explicaban como podía
vivir así; aquí me tienes en la
playa con Tonio.
7
En la infancia y la época de estudiante en el conservatorio pasé
muchas necesidades económicas y había que hacerle a la casera algunas
triquiñuelas para poder guisar en la habitación (que estaba prohibido) para
lo cual yo tocaba fuerte el piano de manera que ella no oyera el ruido de
la lumbre en la chimenea o cuando salía con la maleta diciendo que me
iba de viaje y volvía al poco rato con la maleta llena de leña para cocinar
a lo cual decía yo que eran libros de música para estudiar.
Entre los que compartieron esta
vida alegre de la juventud estaba Pietro
Mascagni, algo menor que yo; fuimos
siempre muy buenos amigos aunque, ya
famosos, nos picábamos con nuestros
respectivos éxitos pero nos ayudábamos
siempre. El fue el compositor de la
célebre ópera “Cavalleria rusticana”; aquí
tienes la foto de mi querido amigo Pietro.
Más tarde cuando ya ganaba dinero me gustaba ir siempre bien
vestido, peinado y arreglado como dice la gente “hecho un dandy” y me
paseaba en mi coche nuevo con mi chofer.
Tuve otro gran amigo –aunque mayor que yo- dentro del mundo
musical: el director de orquesta parmesano Arturo Toscanini considerado
por todos como el mejor director de orquesta de su tiempo; él me estrenó
algunas de mis óperas de lo cual siempre me sentía muy orgulloso; en
esta foto estamos los dos en una magnífica pose de cine ¿no te parece?
Para hacer mi siguiente
ópera “La fanciulla del West”
me informé ampliamente de las
costumbres del Oeste americano
y obtuvo un gran éxito en su
estreno de N. York –al que yo
asistí- admirándose los amantes
de la ópera de que hubiera
captado tan bien con mi música
8
el espíritu de la conquista americana; este ópera se representó en otras
muchas ciudades del país.
Como ves, todos los personajes importantes de mis óperas eran
femeninos; para ellas construía mis mejores melodías perfeccionando
hasta el extremo los detalles en los ensayos, en los vestidos, en la
orquestación y en todo. Así Mimí era el prototipo de la muchacha
sencilla y alegre que después de conseguir a su hombre, muere
implacablemente por la enfermedad en brazos de su amor; Butterfly es
la mujer juguete en manos del hombre que con su desprecio provoca
que ella misma se quite la vida, y Tosca era la mujer de temperamento,
apasionada y celosa. ¡Así las veía yo!
Dicen que era demasiado rígido con las cantantes y en algunas
ocasiones así fue; por ejemplo: una vez me presenté en el camerino de
la soprano que interpretaba Manon y quería salir con un vestido
reluciente a morir en el desierto; con
genio le tiré al café al vestido dándole a
entender que así su vestido iría más
acorde con la escena. Tampoco me
gustaba que se achicaran ante un papel y
les hacía repetir hasta la saciedad y
conseguir lo que yo entendía perfecto; a
una le dije “Tú tienes que caminar sobre
las nubes de la melodía” para que me
entendiera; ésta era la bella María Callas
que interpretaba maravillosamente los
personajes de mis óperas.
Mis melodías eran muy hermosas; además con mi fina intuición
teatral escogía los mejores escenarios y les ponía una orquestación que
parecían unas auténticas sinfonías; si como decía la gente de entonces
las óperas de Verdi eran de “Combate” las mías eran óperas de “Amor”.
Tanto me gustaba ir en mi coche que llegó lo que tenía que
pasar: tuve un accidente que fue un auténtico desastre, teniendo en
cuenta que en aquellos tiempos éramos pocos los que gozábamos de ese
privilegio; cuando me estaban sacando de debajo del vehículo, me
9
acordé de una de la protagonista de la ópera que estaba escribiendo y
exclamé:¡Pobre Butterfly! –el coche era uno de mis amores y él mismo
me aplastaba hasta herirme-. Como ves tuve que pasar mucho tiempo
sin poder subirme a él y usar una camilla de ruedas para moverme por
mi casa de la Torre.
Mi última ópera quedó inacabada a
falta del final: se llamaba “Turandot” y
hablaba del triunfo del amor sobre la
crueldad humana; ésta ópera la completó
mi alumno y amigo F. Alfano en cuyo
estreno fue dirigida por mi amigo
Toscanini que al llegar en la
representación al momento en que se
acababa la partitura que yo había
compuesto, paró la orquesta y dijo: “Hasta
aquí la música de Giacomo Puccini”; aquí me tienes al piano, mi amigo
inseparable en la composición musical.
A finales del año 1924 se me fueron agravando las molestias que
padecía en la garganta,
seguro que por ser un
empedernido fumador: tenía
cáncer y en Bruselas me
pusieron un tratamiento
nuevo de radiación que se
ensayaba entonces pero mi
cuerpo no lo resistió, mi vida
se acababa el día 29 de
Noviembre de ese mismo
año cumpliendo los sesenta y
seis. Según me cuenta mi pajarito, a la misma hora de mi muerte se
estaba interpretando en un teatro de Bruselas “La Bohème”; cuando en
la mitad de la representación comunicaron al director mi muerte, paró la
orquesta y tocaron en mi recuerdo la célebre pieza de Chopin conocida
como la “Marcha Fúnebre”; al día siguiente un gran cortejo me llevó
hasta el cementerio de Milán y más tarde mi hijo Tonio se encargó de
llevar mis restos para inhumarlos en la Torre del Lago ¡ya sabes por
10
qué! Allí irían luego los
restos de Elvira y de
Tonio; éste era el aspecto
de las calles de Milán al
paso del féretro.
Mis admiradores
han hecho monumentos
como el que ves en la
foto como recuerdo de mi
persona y de las melodías que llevaban en su cabeza por las calles
aquellas noches largas e intensas de ópera en los mejores teatros del
mundo; es para mí un orgullo haber dejado este recuerdo tan bonito en
mis paisanos y en tantas personas de todo
el mundo.
Aunque esto de la ópera te suene a
ti un poco raro y sesudo yo te
recomiendo que oigas algunas melodías
de mis arias y algunos coros que son lo
que más suele gustar a la gente profana
en la ópera; con ello quedaremos amigos
para siempre lo cual sería para mí un
gran placer.
Siempre tuyo
11
Después del relato de mi vida, te añado algunas cosas más que
completen lo dicho y lo hagan permanecer más tiempo en tu memoria.
Lo primero un mapa con mis correrías que no fueron muchas
fuera de Italia como recordarás.
Luego un esquema comparativo de varios de mis compañeros
coetáneos para que sepas situarnos en el tiempo entre los s. XIX y XX.
12
Y en tercer lugar algunas melodías de mis obras para que las
sigas con las vista mientas las oyes o las toques en algún instrumento
¡eso sería magnífico!
13
Lo que queda para terminar son unos pasatiempos que yo mismo
he elaborado para ti que puedes hacerlos solo y con quien te encuentres
a gusto en forma de competición: será divertido.
PASATIEMPOS
1.- En este crucigrama aparecen verticalmente ocho nombres de
mis óperas. Si las encuentras, en las línea horizontal aparecerá otro
nombre ¿Qué representa?
2.- Estos dos jeroglíficos corresponden al nombre de una de mis
óperas y el otro al nombre de un músico que sale en el texto. ¿Cuál es
cada cual?
14
3.- En este pergamino se han borrado las vocales; al ponerlas
leerás una frase que dije yo en EE. UU. al ver a aquellos músicos con
tipo de vagabundos. A ver si estás de acuerdo conmigo.
4.- Entre estas dos fotos mías, montado en mi coche, encontrarás
ocho diferencias: localízalas
15
5.- Las palabras que tienes a continuación son nombres propios
del texto pero que tienen sus sílabas cambiadas. ¿Podrás adivinarlos?
Ninicatos, nirichebo. nicipuc, mocogia, tonatufor, nacatos, soruca,
garel, lassebru
SOLUCIONES A LOS PASATIEMPOS
1.- Tosca, Boheme, Turandot, Manon, Elgar, Butterfly, Villi, Tabarro.
2.- 1º= MANO-N
2ª =ANGEL-ONI (objeto no identificado)
3.- “Algunos creen que hay que tener caspa sobre la ropa para ser
genios”
4.- Diferencias:
5.- Toscanini, Bocherini, Puccini, Giacomo, Fortunato, Toscana,
Caruso, Elgar, Bruselas
En la contraportada te pongo esta plumilla de mi cara con
sombrero para que te acuerdes de mí y la conserves si es tu deseo: el
mío por supuesto que lo es.
16
17
Descargar