ASUNTOS EXTERIORES

BORRADOR DE LA SESIÓN DE LA COMISIÓN DE ASUNTOS EXTERIORES
CELEBRADA EL LUNES, 4 DE NOVIEMBRE DE 2013
Se abre la sesión a las doce horas y treinta y cinco minutos.
El señor PRESIDENTE: Se abre la sesión.
Buenos días, señorías.
Vamos a dar comienzo a la sesión de la Comisión de Asuntos Exteriores
del Senado.
Antes de pasar al primer punto del orden del día, vamos a aprobar el
acta de la sesión anterior, que obra en poder de sus señorías.
¿Alguna objeción al acta? (Pausa.)
¿Puede entenderse aprobada por asentimiento? (Pausa.)
Queda aprobada por asentimiento.
ELECCIÓN DEL SECRETARIO SEGUNDO DE LA MESA DE LA COMISIÓN.
(Núm. exp. 541/000009)
El señor PRESIDENTE: El siguiente punto del orden del día es la
elección para cubrir la vacante existente en la Secretaría Segunda de la
Comisión.
Conforme a la práctica de la Cámara, si existiera una única candidatura
para cubrir el puesto, la elección se llevaría a cabo directamente por
asentimiento.
Se ha formulado una propuesta a favor de doña Paula María Fernández
Pena. Solicito a la comisión si se procede a la elección por asentimiento de la
senadora citada. (Asentimiento.)
Entiendo que la comisión da su asentimiento. Ruego a la senadora
Fernández Pena que ocupe el puesto en la Mesa. (Pausa.)
COMPARECENCIA DEL DIRECTOR GENERAL DE CASA ASIA, D. RAMÓN
MARÍA MORENO GONZÁLEZ, ANTE LA COMISIÓN DE ASUNTOS
EXTERIORES, PARA INFORMAR SOBRE EL FUNCIONAMIENTO Y
ACTIVIDADES DE DICHA INSTITUCIÓN.
(Núm. exp. 713/000534)
AUTOR: COMISIÓN DE ASUNTOS EXTERIORES
El señor PRESIDENTE: El siguiente punto del orden del día es la
comparecencia del director general de la Casa Asia, don Ramón María Moreno
González, para informar sobre el funcionamiento y actividades de dicha
institución.
Yo agradezco mucho al director su presencia en la comisión. Vamos a
tener hoy una sesión muy centrada en Asia, porque por la mañana tenemos al
director de la Casa Asia, a quien vuelvo a reiterar nuestro agradecimiento, y por
la tarde al secretario de Estado, don Gonzalo de Benito, que va a tener una
intervención sobre la política española también con relación a Asia y las últimas
iniciativas en ese contexto. Por lo tanto, vamos a ocuparnos de Asia −que no
está tan lejos en esta época globalizada en la que las comunicaciones son
mucho más fáciles−, y toda esa zona llamada Asia−Pacífico tiene la
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importancia de ser en estos momentos la región −se suele afirmar− con más
futuro de nuestro planeta.
Reitero el interés y la importancia que tiene la presencia de don Ramón
María Moreno, y le doy la palabra.
El señor DIRECTOR GENERAL DE CASA ASIA (Moreno González):
Muchas gracias, presidente.
Buenos días, señorías.
Es un honor y una satisfacción tener la oportunidad de explicarles hoy la
labor que realiza Casa Asia, describir la función social que esta institución
desempeña y poner de manifiesto su utilidad pública.
Tal y como establecen los Estatutos de la Casa, fui nombrado director
general por su consejo rector, reunido el 30 de marzo de 2012, a propuesta de
ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación.
Como diplomático de carrera desde 1987, he podido trabajar en varios
países y en diferentes ámbitos del ministerio, siendo mis tres últimos destinos
anteriores a Casa Asia los de subdirector general de Protocolo y Ceremonial
del Estado en Presidencia de Gobierno −de 2005 a 2009−; Segunda
Jefatura−Ministro Consejero en la Embajada de España en India, de 2009 a
2011; y Segundo Introductor de Embajadores en el Ministerio de Asuntos
Exteriores y de Cooperación en Madrid, de 2011 hasta marzo de 2012.
La creación de Casa Asia, en noviembre de 2001, fue una de las
acciones más destacadas del Plan Marco Asia y Pacífico 2000−2002, conocido
coloquialmente como el Primer Plan Asia, situándose la sede central en
Barcelona, si bien fue en 2003 cuando la institución consolidó su programa de
actividades y se alojo en el Palau Baró de Quadras de la Ciudad Condal, que
ha acogido la institución hasta el pasado mes de julio.
Casa Asia, como sus señorías saben, forma parte de la red de
diferentes casas, proyecto liderado por el Ministerio de Asuntos Exteriores y de
Cooperación y en el que están Casa América, Casa Asia, Casa África, Casa
Árabe, el Centro Sefarad−Israel y Casa del Mediterráneo.
Señorías, para ser plenamente conscientes de la misión e importancia
de Casa Asia y, sobre todo, para no perder el hilo argumental, sería esencial
recordar las razones que motivaron en aquel momento la creación de una
institución de diplomacia pública como instrumento para fomentar un mayor
conocimiento de Asia y Pacífico en nuestro país y promover relaciones con los
países de Asia y el Pacífico y una mayor presencia de España en esa zona.
La única Casa que funcionaba hasta 2001 en España era Casa América.
Su creación y permanencia no eran difíciles de entender y justificar dados los
vínculos históricos, culturales, lingüísticos y migratorios que unen a España con
los países iberoamericanos. Además, la magnífica labor realizada por esta
institución hermana desde su origen obtuvo el reconocimiento y el aprecio
social que merecen.
Pero ¿por qué crear Casa Asia? ¿Con qué propósito? ¿Para qué crear
otra Casa?
Si la puesta en marcha de Casa América estuvo marcada por los
grandes vínculos que unen a nuestro país con la otra “ribera” del Atlántico, la
creación de Casa Asia se debía a todo lo contrario: básicamente a la urgente
necesidad de hacer frente a una serie de carencias −escasísimos vínculos,
falta de conocimiento y falta de vías para formar expertos y académicos en
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Asia, falta de nexos culturales, falta de presencia empresarial, falta de
formación empresarial orientada a Asia, escasez de contactos, ausencia de
una imagen−país en Asia− y, sobre todo, la constatación de una enorme
diferencia en lo que respecta a la presencia en Asia en casi todos los ámbitos
en comparación con los países de referencia de nuestro entorno europeo como
pueden ser Francia, Reino Unido, Alemania o Italia. Diferencia lógica teniendo
en cuenta la preeminencia que América, Europa y el Mediterráneo han tenido y
tienen en la política exterior española y la poca atención prestada a Asia y al
Pacífico (área esta última, por cierto, que en un tiempo fue considerada “El lago
español”).
Casa Asia, por tanto, nació como una institución de diplomacia pública,
con la misión de impulsar en nuestro país el interés por Asia, favorecer el
conocimiento y la difusión de las culturas asiáticas en nuestro país, promover
relaciones entre España y los países de Asia y el Pacífico y propiciar una
mayor presencia de España en esa zona, que son los objetivos generales de la
institución.
Señorías, se trataba de una apuesta interesante pero al mismo tiempo
arriesgada, dada la lejanía no solo geográfica sino de todo tipo que separaban
a nuestro país de Asia o más bien de la zona atribuida a la Casa. El tiempo,
como muy bien ha dicho el presidente, ha cambiado y en cierta medida puedo
decir que parece haber dado la razón a quienes tomaron esta iniciativa. En
efecto, hoy la zona Asía-Pacífico ha adquirido y está adquiriendo una creciente
importancia y relevancia en la economía y en la geoestrategia mundial. En este
sentido, el ámbito geográfico asignado para la tarea de Casa Asia fue el de
Asia, a excepción del mundo árabe, y además la zona del Pacífico. El mapa
incluye, por tanto, a Asia −desde Irán hacia el este-, incluyendo los países del
Asia Central conocidos coloquialmente como tanes (las cinco antiguas
repúblicas soviéticas de esa zona), así como Australia, Nueva Zelanda y las
islas del Pacífico.
El Consorcio público Casa Asia está formado por el Ministerio de
Asuntos Exteriores y de Cooperación, la Generalitat de Cataluña, el
Ayuntamiento de Barcelona y el de Madrid, que se sumó al Consorcio en 2007.
La sede central de Casa Asia, como he mencionado anteriormente, está en
Barcelona y la institución cuenta también con un centro en Madrid. El tener en
el Consorcio instituciones clave de Madrid y Barcelona permite a Casa Asia
desempeñar una gran parte de sus actividades en estas dos ciudades, como es
lógico. Además de ser las dos ciudades más importantes de España, es
preciso mencionar el quantum asiático y el interés empresarial, académico y
cultural por Asia que existe en Barcelona, así como el papel clave de Madrid
como capital, sede de grandes empresas y ciudad en la que residen las
embajadas de estos países, embajadas con las que colaboramos asiduamente.
No obstante, me parece necesario resaltar también la labor que Casa
Asia lleva a cabo en otras ciudades españolas. Recientemente, el
Ayuntamiento de Valencia se ha incorporado al Alto Patronato de Casa Asia y
se ha logrado definir una programación para el próximo año que permitirá
incrementar sustancialmente el número y el tipo de actividades que Casa Asia
organizará en esa ciudad. Casa Asia ha venido realizando actividades también
en casi todas las comunidades autónomas españolas y sería excesivo
enumerar todo lo que se ha hecho, pero, como muestra, y a modo de ejemplo,
permítanme comentarles que la VIII Tribuna España−Corea se celebrará en
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Málaga desde mañana, 5 de noviembre, por la tarde, hasta el día 7 de
noviembre, al final de la mañana, gracias al interés mostrado y a la
colaboración prestada por el Ayuntamiento de Málaga y su universidad y otros
agentes económicos, educativos y culturales de Málaga y de Andalucía. Las
gestiones para la organización en otra comunidad autónoma, distinta de
Cataluña y Madrid, de la VII Tribuna España−Filipinas, prevista para 2014,
están muy avanzadas y esperamos cerrar un acuerdo en breve. Hace solo
unos meses, en verano, también Casa Asia organizó en Palma de Mallorca una
exposición y un ciclo de cine asiático en colaboración con el Casal Sollerich del
ayuntamiento de esa ciudad. Además, los cursos, conferencias y seminarios de
carácter económico, organizados en la mayoría de los casos con la
colaboración de cámaras de comercio y agencias de promoción económica de
las comunidades autónomas, se han realizado en numerosas ciudades
españolas.
Casa Asia actúa en todo momento como agente dinamizador en España
respecto al asiático. Además de organizar actividades por propia iniciativa, una
de las funciones esenciales de la institución que tengo el honor de dirigir es
hacer que otros hagan programas relacionados con Asia o que incorporen a
sus actividades el componente asiático. Así Casa Asia mantiene desde hace
tres años una magnífica relación con la Fundación Ramón Areces, organizando
conjuntamente ciclos de conferencias, y comparte proyectos y acciones con las
principales instituciones y centros que cuentan con foros, programas de becas
y actividades relacionadas con Asia y el Pacífico, entre otras, con las
fundaciones Consejo España-Japón, España-China, España-India y EspañaAustralia, del Ministerio de Asuntos Exteriores; con Casa de la India, con la
Fundación Carolina, con la Fundación ICO, con la Fundación Telefónica, con la
Fundación La Caixa, con la “universidad.es”, con el CSIC, con el CDTI, y con
centros y departamentos asiáticos de las distintas universidades españolas;
con think tanks como el Real Instituto Elcano y CIDOB, con la Secretaría
General Iberoamericana, con centros culturales y museos como el Matadero o
el Reina Sofía, con el ICEX, con las cámaras de comercio, con la CEOE, con el
Foro de Marcas Renombradas Españolas, con Turespaña y con las agencias
autonómicas de promoción económica en el exterior y también con las de
atracción de inversiones.
Cito todas estas entidades con el propósito de poner de manifiesto el
papel impulsor y dinamizador respecto a lo asiático que Casa Asia trata de
ejercer en España.
Hoy en día, como vuestras señorías saben, resulta fundamental para
cualquier organismo de diplomacia pública generar nexos y concitar apoyos en
el sector privado. Casa Asia ha realizado un gran esfuerzo de acercamiento al
mundo empresarial y, aunque sus aportaciones económicas y sus iniciativas
condicionen de algún modo la programación de la Casa, al mismo tiempo la
dotan de sentido y otorgan a muchas de nuestras actividades una finalidad y un
sentido práctico. Nos anima mucho tener como empresas del Alto Patronato o
empresas colaboradoras a La Caixa, a Telefónica, a la Fundación ACS, a
Técnicas Reunidas, al Puerto de Barcelona, a Meliá Hoteles Internacional, a
Hyundai, a Sony, al BBVA, a Garrigues, a Roca Junyent, a Cuatrecasas o a la
Fundación Ramón Areces, además de otras. Casa Asia también colabora con
numerosas instituciones asiáticas y, entre ellas, cabe mencionar a HANBAN,
que es la institución central de los institutos Confucio, al Centro Cultural Chino
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de Madrid, al Centro Cultural Coreano de Madrid, a la Fundación Japón
−también en Madrid− y a las consejerías de Cultura, de Educación y de
Promoción Económica de las Embajadas de los países de Asia y el Pacífico
acreditados en España.
En el exterior, la colaboración de instituciones como Acción Cultural
Española, el Instituto Cervantes (con centros en Pequín, Nueva Delhi, Manila,
Sidney, Tokio y otras antenas en otras ciudades asiáticas) y el ICEX (a través
de las numerosas oficinas comerciales en Asia y también en España) son
instituciones esenciales para nuestra labor. Por supuesto, se trabaja en
sintonía y con la colaboración de las embajadas de España acreditadas en los
países asiáticos, así como en Australia y Nueva Zelanda, y, por tanto, con el
MAEC, especialmente a través de la Secretaría de Estado de Asuntos
Exteriores y la Agencia Española de Cooperación Internacional y para el
Desarrollo.
Sería tedioso enumerar aquí todas las instituciones asiáticas con las que
tenemos contacto. En la mayoría de los países que caen en el ámbito
geográfico de trabajo de la Casa −no en todos− contamos con la colaboración
de las instituciones gubernamentales dedicadas a la promoción cultural, la
promoción económica y con sus principales asociaciones empresariales y
universidades. Tomando como ejemplo el caso de India, podríamos citar al
Indian Council of World Affairs, al Indian Council for Cultural Relations, a
Federation of Indian Chambers of Commerce and Industry, a Confederation of
Indian Industry, al Indian School of Business of Hyderabab, entre otras
instituciones.
Con el fin de que sus señorías puedan hacerse una idea de la labor que
Casa Asia realiza a lo largo del año, permítanme mencionar brevemente los
principales programas que se llevan a cabo y los servicios que se ofrecen. Los
voy a clasificar por grandes áreas, pero antes de abordarlos, quiero señalar
que estamos trabajando para tener una programación de la mayor calidad, con
financiación y patrocinio externo en la mayoría de las actividades y optimizando
los recursos y reduciendo los costes lo más posible.
En materia económica, señorías, a la que la Casa ha prestado y presta
una enorme atención desde su creación, y más en estos difíciles momentos de
la economía, y siendo el turismo un sector crucial en nuestro país, Casa Asia
ha organizado en este año 2013 su Tercer Congreso Internacional de Turismo
Asiático, que contó con la presencia del secretario general de la Organización
Mundial del Turismo y del ministro de Industria, Energía y Turismo de España.
Este congreso se celebra cada dos años en Barcelona, por lo que la siguiente
edición está prevista para 2015. Y al igual que en el caso del turismo, Casa
Asia organiza numerosas actividades relacionadas con sectores de la
economía en los que Asia presenta oportunidades importantes para nuestro
país: infraestructuras, energías renovables, transporte y logística o
alimentación, entre otros sectores. También son importantes los numerosos
cursos y presentaciones que se realizan sobre el marco legal de inversiones y
seguridad jurídica en los diferentes países asiáticos, así como los cursos sobre
protocolo de negocios para fomentar y facilitar el acercamiento a Asia. Con
todo ello pretendemos ayudar y promover la internacionalización de la pequeña
y la mediana empresa para que conozca las oportunidades que esta parte del
mundo de la que se ocupa Casa Asia ofrece y se animen así a dar el salto pero
con un cierto grado de conocimiento de la lejana y diferente Asia.
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A través del Observatorio Iberoamericano de Asia y Pacífico hacemos un
seguimiento de las relaciones de comercio e inversión entre los países
asiáticos y los iberoamericanos, con especial atención a los sectores en los que
las grandes empresas españolas están presentes en Iberoamérica, dado que
se ve un gran potencial para alianzas en determinados proyectos entre
nuestras empresas y las asiáticas en relación con Iberoamérica.
El Observatorio de Asia Central de Casa Asia permite conocer la
evolución política y económica de Kazajistán, Uzbekistán, Kirguistán,
Tayikistán, y Turkmenistán. Se trata de un área política y socialmente en
evolución en general, si bien hay diferencias considerables entre los países que
lo componen. Pero hay que destacar que algunas empresas españolas ya han
entrado con fuerza en Kazajstán.
En el área sociopolítica Casa Asia organiza las tribunas que he
mencionado anteriormente, que son foros de diálogo que se mantienen con
tres países asiáticos −Corea, Filipinas e India−, complementando así la labor
que el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación realiza con los foros
España-China y España-Japón. Se trata de encuentros anuales que abordan
temas económicos, de comercio e inversiones, de política, educación y cultura,
que interesen a ambas partes y que sirvan para dinamizar y potenciar las
relaciones de España con esos países y sus sociedades civiles. Las tribunas
cuentan en los tres casos con el respaldo de los ministerios de Asuntos
Exteriores de España y del país asiático correspondiente y con el apoyo de las
embajadas asiáticas en Madrid y de las españolas en Seúl, Manila y Nueva
Delhi. Casa Asia actúa como organizadora por parte española, siendo la Corea
Foundation, la Fundación Santiago de Manila y la Indian Council of World
Affairs de Delhi las instituciones que actúan como contraparte en los países
mencionados. Las tribunas se celebran de manera alternativa en España y en
los países asiáticos correspondientes.
Casa Asia también como miembro de las fundaciones Consejo España−
Japón y España-China colabora con sus proyectos más relevantes, como son
los foros España-Japón y España-China, así como en la recepción y
organización de actividades para los grupos de futuros líderes de ambos países
que anualmente traen a España. Del mismo modo, colabora con la Fundación
Consejo España-India a través de jornadas, seminarios y conferencias de
carácter económico, sociopolítico o cultural, así como con su programa de
“Futuros Líderes” indios. También colabora con la recientemente creada
Fundación Consejo España-Australia.
Las embajadas de los países de Asia y el Pacífico acreditadas en
España suelen requerir la colaboración de Casa Asia para la recepción de
autoridades y delegaciones de sus países, así como para la organización de
jornadas, con el objetivo de dar a conocer su cultura, situación política y social,
oportunidades de comercio e inversión, y todos aquellos aspectos que
consideren de interés. Casa Asia es, en cierto sentido y en cierto modo, su
casa en España.
Asimismo, a través de una línea de trabajo que denominamos Política y
Sociedad, organizamos de manera continua conferencias y seminarios sobre el
acontecer político y social de los países que abarca la Casa y también sobre
temáticas transversales que atañen a determinados grupos de naciones
asiáticas.
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Señorías, si los grandes países de Asia y el Pacífico y los que son
económicamente más potentes −China, India, Japón, Corea del Sur y
Australia− están presentes en una gran parte de la programación y de las
iniciativas de la casa, debo decir que nuestra institución está prestando cada
vez una mayor atención al sudeste asiático, a los países que forman parte del
grupo Asean. Es una zona en la que España debería realizar un gran esfuerzo
por tener una mayor presencia, dadas las oportunidades, según los datos
económicos recientes, que parecen poder ofrecer a nuestras empresas. Me
consta el interés de nuestras autoridades, especialmente del MAEC y de
Comercio, por contribuir a incrementar y crear nuestros vínculos políticos y
comerciales con los países de esa zona y a favorecer además nuestra imagen
país.
En el área educativa, una de las prioridades de Casa Asia es la
promoción de los estudios asiáticos en las universidades españolas. El apoyo a
las universidades de Barcelona y de Madrid fue esencial para crear las
primeras licenciaturas de grado y lo fue también para incluir el componente
asiático en sus programas de “Master”. Actualmente, Casa Asia trata de
coordinar las iniciativas de las universidades españolas a través de una reunión
de estudios asiáticos que se convoca anualmente.
Por otra parte, es importante subrayar la colaboración de Casa Asia en
proyectos que tienen una vertiente asiática con las escuelas de negocios más
prestigiosas de nuestro país: IESE, Instituto de Empresa y Esade. Casa Asia
ofrece también numerosos cursos de lenguas y culturas, abiertos a la
ciudadanía en general. En estos momentos, se están impartiendo cursos de
chino, japonés, hindi, indonesio, tailandés y birmano, además de una serie de
cursos sobre culturas asiáticas. En el caso del chino, se realizan en
colaboración con los institutos Confucio de Barcelona y de Madrid, de los que
Casa Asia forma parte, y, en el caso de japonés, con un plan conjunto
acordado con la Fundación Japón.
Respecto al área cultural de Casa Asia, señorías, debo decirles
francamente que el número de actividades que a menudo se organizan con la
colaboración de las embajadas asiáticas, con sus centros culturales y otras
instituciones españolas es muy alto. Quisiera destacar el Festival Asia, que se
celebra en el marco de las Fiestas de La Merced de Barcelona, que es un
festival de música y artes escénicas, y citar que la programación cultural
ordinaria de la Casa se nutre de ciclos de cine, exposiciones y de
colaboraciones con los principales centros culturales, así como con museos y
espacios culturales tanto de nuestro país como asiáticos.
Señorías, otra de las áreas más dinámicas de Casa Asia es la que
dedicamos a las relaciones y a la colaboración con las comunidades asiáticas
residentes en España, tratando de contribuir en la medida de lo posible a que la
sociedad española “receptora” conozca mejor las diferentes culturas y
esquemas sociales con los que funcionan los chinos, filipinos, paquistaníes,
indios, bangladesí, etcétera, que constituyen la mayoría de las comunidades
inmigrantes de procedencia asiática en nuestro país. Por otra parte, nuestra
relación con sus principales asociaciones nos permite hacerles partícipes de
programas planteados para propiciar su integración en la sociedad española y
el aprecio por la cultura local.
Debemos ser conscientes de la gran oportunidad que presenta para el
acercamiento de España a Asia en los próximos años el hecho de contar con
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una generación de jóvenes españoles, hijos de padres de origen asiático, que
conocen las lenguas y culturas de procedencia de sus familias y al mismo
tiempo se han formado y se van sintiendo parte −cada vez más, como es
lógico− de la sociedad española. Una formación y educación apropiadas haría,
sin duda alguna, que su aportación pudiera ser clave en la mejora de la
recepción de turistas, en la promoción de exportaciones o en la
internacionalización de las empresas españolas en Asia, entre otros posibles
campos de actuación.
Su valor, su potencial como nexo de España con una serie de países
asiáticos es incalculable. Podríamos tener españoles, por tanto, bien formados,
que, además del español, hablasen perfectamente como lengua materna chino,
japonés, hindi, coreano, tagalog, urdu, bengalí o farsi, entre otras lenguas
asiáticas.
En el sector de género, la Secretaría de Estado de Cooperación
Internacional, del Ministerio de Asuntos Exteriores, a través de la Agencia
Española de Cooperación Internacional y para el Desarrollo, encargó a Casa
Asia la realización de un Encuentro de mujeres asiáticas y españolas con el fin
de tratar asuntos de género que fueran de interés común y favorecer la
creación de redes de colaboración entre mujeres españolas y asiáticas. A
finales de este mes Barcelona acogerá su cuarta edición.
Señorías, toda esta labor en todas estas áreas se ha venido realizando y
se realiza en sintonía con las directrices establecidas en cada momento por el
Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación. Como recordarán, el
ministro García-Margallo señaló como prioridad la diplomacia económica,
teniendo en cuenta la urgente necesidad de incrementar las exportaciones, y,
sobre todo, de acceder a nuevos mercados y la promoción de la llamada marca
España. Obviamente, ambas directrices tienen su reflejo en la programación
actual de la casa.
Los objetivos señalados y tareas asignadas a Casa Asia por los
sucesivos Planes Asia −el Plan Marco Asia-Pacífico 2002, el Plan de Acción
para Asia y Pacífico 2005 y 2008, y el Plan Asia 3 2008-2012− fueron siempre
incorporadas a la programación y actividades de la institución.
La programación de Casa Asia tiene en cuenta también, y de manera
muy especial, las propuestas y recomendaciones de la Generalitat de Cataluña,
del Ayuntamiento de Barcelona y del Ayuntamiento de Madrid, instituciones
que, como saben, forman parte del máximo órgano de Gobierno de esta
institución, que, junto con el MAEC, integran, por tanto, el consorcio de la casa.
Señorías, no quiero dejar de referirme a las difíciles y duras decisiones
que la situación de la Casa me ha obligado a adoptar como director general de
la misma ni a su situación económica.
Mi llegada, en abril de 2012, se produjo en un momento muy delicado
para la institución. Los miembros del Consorcio, que habían venido aplicando
una serie de recortes en sus aportaciones económicas en los dos años
anteriores, redujeron sus aportaciones para el año 2012 de una manera
drástica −un 33,22%-, de forma que las aportaciones del Consorcio para el año
2012 fueron casi las mismas que las del año 2002, cuando aún el
Ayuntamiento de Madrid no formaba parte del mismo. Esto, unido a la deuda
acumulada, ponía en peligro la viabilidad futura de la institución. En 2013 la
reducción total de los cuatro miembros del Consorcio respecto a 2012 ha
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supuesto un 16,89% menos, reducciones, en algún caso, comunicadas cuando
ya estaba el ejercicio en marcha.
Gracias a un plan radical de contención de gasto −no renovación de
contrataciones temporales, no sustitución de algunos puestos de trabajo,
eliminación de partidas presupuestarias relacionadas con servicios
profesionales de gestión externa de actividades o eliminación de servicios
profesionales de asesoramiento legal, entre otras− y a una fuerte reducción de
personal que afectó a casi al 50% del equipo −de hecho, en estos casi dos
años se ha pasado de una plantilla de 51 personas a 26−, junto con el traslado
a una nueva sede central en Barcelona el pasado mes de julio −que permite un
ahorro de unos 425 000 euros anuales en concepto de alquiler, además de una
disminución de gastos derivados de mantenimiento y conservación de
infraestructuras, servicios de vigilancia, limpieza, etcétera−, Casa Asia ha
logrado establecer un riguroso plan con vistas a estabilizar las cuentas en un
período de tres años y seguir desempeñando de manera eficaz sus tareas de
diplomacia pública respecto a Asia y el Pacífico.
Al mismo tiempo, como he señalado anteriormente, se están
intensificando los esfuerzos por buscar y aumentar el número de miembros del
alto patronato y entidades colaboradoras, de manera que el porcentaje de
aportaciones privadas sea mayor que el actual y se consiga financiar, como
estamos haciendo, gran parte de la programación de la institución con
instituciones privadas.
Señorías, el centro del mundo económico, y no solo, cada vez parece
desplazarse más hacia el Pacífico y el Índico. Siendo España un país con
escasa presencia y visibilidad en la zona Asia-Pacífico y, habiéndose
convertido Asia en el principal foco de crecimiento económico mundial en los
últimos años, tanto debido a la liberalización e ingreso en el sistema económico
mundial de países como China, India y algunos de Asean, por ejemplo
Indonesia, Malasia, Tailandia, Vietnam, Filipinas, etcétera, como a la
considerable inversión en educación, investigación y desarrollo que se está
llevando a cabo en algunos de estos países como Japón o Corea pero también
China, nuestro país se tiene que ubicar de alguna manera en el área, ya que su
relevancia es escasa.
Casa Asia, desde hace más de diez años, es uno de los principales, si
no el principal, instrumentos para dinamizar las relaciones con el subcontinente
Asia-Pacífico. Su papel hoy en día es cada vez más importante, pues Asia
representa aproximadamente dos tercios del crecimiento económico mundial
en la actualidad y la mayoría de las multinacionales de nueva creación tiene su
origen en esta zona. España debe ser conocida en esta parte del mundo, como
lo está siendo poco a poco, que está llamada a desarrollar un papel, si no
clave, sí muy importante en este siglo XXI, y ha de ser conocida como lo que
es: un país moderno, dinámico, eficiente, con empresas de primer nivel en
muchos campos, superando viejos tópicos y el gran desconocimiento que en
Asia-Pacífico se tiene de España y su realidad. A ello, en la medida de sus
posibilidades, como mecanismo de diplomacia pública pero con un fuerte
componente económico, contribuye la casa, que ha probado y sigue probando,
incluso en estos momentos difíciles de crisis, que la apuesta hecha en su
momento fue acertada. Y España, gracias sobre todo a la tarea del Ministerio
de Asuntos Exteriores y de otros agentes, cada vez está más presente en Asia.
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Antes de concluir, quiero dejar constancia de mi agradecimiento al
equipo humano de Casa Asia por su dedicación y profesionalidad durante una
etapa que está siendo muy dura. Su preparación, su conocimiento de Asia y su
excelencia en el trabajo son una garantía del futuro de la institución. También
quiero dejar constancia de mi agradecimiento también al Ayuntamiento de
Barcelona y a la Generalitat de Cataluña por su firme apoyo al situar la sede
central de Casa Asia en uno de los pabellones del recinto histórico de Sant
Pau, que es patrimonio de la humanidad. Al Ayuntamiento de Madrid, por el
esfuerzo que está realizando con el fin de encontrar una ubicación apropiada
para las necesidades y tareas de Casa Asia en la capital de España. Estoy
seguro de que en Madrid Casa Asia contará con un espacio idóneo en breve.
Y, cómo no, quiero agradecer también al Ministerio de Asuntos Exteriores y de
Cooperación su constante, firme y reiterado apoyo y por ser el pilar
fundamental de la estructura y funcionamiento de Casa Asia. Y también,
agradezco a esta Comisión de Asuntos Exteriores del Senado el haberme
invitado y permitirme presentar hoy el papel, la función y las actividades que
desarrolla Casa Asia y el futuro que se presenta ante nosotros, que considero
que es enormemente positivo teniendo en cuenta la importancia que tiene la
zona Asia-Pacífico en el siglo XXI.
Muchas gracias, señorías.
El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señor director general de la
Casa Asia por su intervención, en la que nos ha facilitado una información que
seguramente muchos de los miembros de esta comisión, como yo mismo,
desconocíamos. Se lo agradecemos mucho.
A continuación, voy a dar la palabra a los portavoces de la comisión.
En primer lugar, en nombre del Grupo Parlamentario Socialista, tiene la
palabra el senador Sañudo Aja.
El señor SAÑUDO AJA: Muchas gracias, señor presidente.
Gracias, señor director general de la Casa Asia, por sus prolijas
explicaciones y porque nos ha dado una visión de la labor que se hace en la
Casa Asia que probablemente muchos de nosotros no teníamos. También
quiero darle las gracias porque creo que hoy está haciendo un esfuerzo, ya que
creo que empezaba hoy y continúa mañana en Barcelona el encuentro China at
Barcelona Summit, que seguramente tiene mucho interés para Casa Asia y le
gustaría estar presente.
Quiero transmitirle mi reconocimiento en nombre del Grupo
Parlamentario Socialista porque realmente tiene que ser muy difícil trabajar
condicionado, y de qué manera, por la falta y escasez de presupuesto. Es
difícilmente entendible que en un momento como el actual, en el momento
global en el que vivimos respecto a Asia, que debe ser unos de los referentes
esenciales en la acción exterior de nuestro país, se coarten las pocas
iniciativas serias que existen, como es Casa Asia. Me atengo a las últimas
palabras que usted nos ha transmitido sobre la escasez en el presupuesto, los
enormes recortes que han tenido cuando debe ser precisamente Casa Asia el
motor y el referente para que entendamos que ese es un lugar de encuentro en
el futuro.
En un momento en que la apuesta española por Asia debe ser más
decidida e incisiva precisamente el Gobierno lo que hace es reducir
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sistemáticamente sus apoyos estratégicos en diversas materias. Antes había
planes Asia, ahora no. Se ha eliminado la ayuda al desarrollo y se reducen las
políticas encaminadas a establecer lazos que permitan afianzar nuestras
relaciones. Y ahí es donde creemos que Casa Asia debe tener un papel
fundamental e importante, y esto pasa inevitablemente por dotarla de los
medios económicos necesarios. En fin, esto se lo haremos saber a los
responsables, vía propuestas y vía presupuestos con las enmiendas que
presentaremos a los Presupuestos Generales del Estado de 2014,
evidentemente, y ya sé que usted nada tiene que ver con esto.
En cualquier caso, sí me gustaría plantearle una serie de cuestiones
para que nos facilitara una impresión sobre diversos asuntos desde su
experiencia al respecto. Se está viviendo en los últimos años un incremento de
la inmigración asiática, especialmente de la china, y yo le pregunto: ¿Cómo
cree que afectará este asunto en los próximos años? ¿No cree que será
necesario incrementar las medidas que permitan una integración adecuada
para que se puedan romper esos estereotipos que probablemente tiene la
ciudadanía española, que además pueden acabar en brotes de racismo? ¿No
cree que nos debemos anticipar, aplicando políticas en ese sentido?
¿No cree también que la cooperación es un medio que, además de
ayudar a los países en dificultades, ayuda a mejorar sustancialmente las
relaciones entre los mismos? ¿No cree que sería necesario un incremento de
la misma? ¿No cree que sería necesario incorporar la dimensión inmigratoria a
las políticas de cooperación? Yo creo que Casa Asia puede ordenar
perfectamente todos estos asuntos.
¿Cómo cree que sería necesario potenciar la promoción lingüística y
cultural de una manera realmente eficiente y visible? Yo creo que uno de los
problemas que tenemos es la escasa visibilidad que se ofrece de todo este tipo
de actividades que usted nos ha enumerado y que son importantísimas. Y sé la
dificultad que conlleva. Hoy la atención mediática está puesta en otros sitios,
pero probablemente lo que no consigamos ahora no lo recuperaremos más
tarde, a pesar de su importancia.
¿Existen planes que profundicen en aspectos como la transición política
en los países, la modernización del Estado en los países donde tienen
dificultades, la defensa de los derechos humanos, la lucha por la igualdad de
las mujeres, aunque ya ha planteado que han desarrollado alguna iniciativa en
ese sentido?
También me gustaría saber cómo se complementa la actividad de Casa
Asia con el resto de las comunidades autónomas, cómo se colabora
decididamente. Como todos sabemos, las comunidades autónomas también
tienen sus iniciativas y estrategias, en lo económico fundamentalmente, de
acercamiento a esos países. ¿Qué tipo de coordinación hay o cuál puede
haber?
Seguramente podríamos hablar de ello durante un montón de tiempo.
Esta tarde tendremos la oportunidad de interpelar al secretario de Estado sobre
estos asuntos, respecto a la posibilidad o certeza –que tenemos abandonadade que España pueda ser un puente entre América Latina y Asia, o en cuanto a
la colaboración o participación más directa de España en ASEM –con todo lo
que tiene que ver con la Comunidad Económica Europea-.
11
En el futuro Asia ha de ser un referente de actuación evidente. Como
usted decía, al contario de reducirla, es necesaria más diplomacia en los
países que están emergiendo en la actualidad.
Nosotros creemos en la diplomacia pública y Casa Asia lo es. Por ello
estamos dispuestos a colaborar en lo que sea necesario para contribuir a que
una herramienta como la que usted representa -que consideramos fundamental
para el desarrollo de iniciativas que permitan acercar a España y Asia en lo
político, lo económico y lo cultural- no solo se consolide sino que aumente sus
recursos, porque eso es bueno para el país y sus ciudadanos.
Desde aquí le ofrecemos la colaboración del Grupo Parlamentario
Socialista para lo que estime oportuno.
Muchas gracias.
El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, senador Sañudo.
Por el Grupo Parlamentario Popular, tiene la palabra el senador Chiquillo
Barber.
El señor CHIQUILLO BARBER: Muchas gracias, señor presidente.
Señor director general de Casa Asia, don Ramón María, le doy las
gracias por su presencia en esta comisión y por su información. Sea usted
bienvenido al Senado.
En nombre del Grupo Parlamentario Popular, y en el mío propio, quiero
agradecerle su comparecencia, sus explicaciones, sus informaciones, así como
su tarjeta de presentación: objetivos, trabajo realizado y lo que queda por
hacer, que es mucho.
Comenzaré mi intervención haciendo referencia a algunas de las
cuestiones que usted mencionaba. En primer lugar, querría recoger la noticia
del día de su nombramiento, allá por abril de 2012, donde, haciendo referencia
al nuevo inquilino de la Dirección General de Casa Asia, se decía: el perfil del
nuevo director se adapta al objetivo del Ministerio de Asuntos Exteriores y de
Cooperación de potenciar la imagen de nuestro país a través de la marca
España, desde una mayor coordinación entre la red de casas y el resto de
administraciones públicas. Esta nueva etapa de impulso a la diplomacia pública
en la que entraba la institución tenía en usted a un gran representante por su
trayectoria diplomática, su experiencia y su buen hacer en el campo
diplomático; recordando que fue número dos de la embajada de España en la
India, lo que dejó un poso en usted y en su manera de entender la carrera
diplomática que se traduciría en uno de sus principales objetivos al frente de la
institución: potenciar la diplomacia comercial y económica.
Usted destacó en su toma de posesión –y hoy lo ha puesto de
manifiesto- el papel que tiene que jugar Casa Asia como mecanismo
dinamizador en la zona de mayor crecimiento económico y demográfico del
planeta y la que mayores oportunidades económicas representa: Asia-Pacífico.
Casa cuyo faro y leitmotiv a lo largo de estos diez años de diplomacia pública
se ha centrado sobre todo en la vertiente económica: programas de apoyo a la
captación de inversiones, infraestructuras, presencia de empresas españolas y
de todo lo español en la vertiente económica, social y cultural en ese nuevo
escenario económico Asia-Pacífico que, sin ninguna duda, será en 2020 y 2030
un eje a tener muy en cuenta en todas sus facetas. Por otra parte, ha
desarrollado programas relacionados con la innovación en Asia y, sobre todo,
12
ha servido de brazo a las pymes españolas para que, a través del papel
protagonista de Casa Asia, cuenten con los mecanismos necesarios para
acercar la realidad de las economías asiáticas.
El ministro de Asuntos Exteriores –y creo que usted tiene muy bien
aprendida la lección- describió el eje Asia-Pacífico como el Dorado del siglo
XXI. En esa región -según el diagnóstico que usted muy bien ha hecho- se
encuentran los países más prometedores y los que más oportunidades
esconden. Asia-Pacífico es probablemente una de las áreas de mayor
crecimiento y mayores oportunidades del mundo de hoy y de las próximas
décadas. En este sentido, la presencia actual de España en dicha zona, por el
devenir de la historia, es incipiente y manifiestamente mejorable. Por lo tanto,
como usted tiene la lección bien aprendida, sabe muy bien lo que hay que
hacer y qué pasos hay que dar.
En la zona se encuentran seis de los miembros del G-20, la mitad de la
población mundial y el 80% de las reservas mundiales de divisas. En 2013 y
2014 Asia-Pacífico continuará creciendo y ejerciendo de principal motor
económico mundial, según los datos del Banco Mundial. China crecerá más del
8% e India algo más del 5%. Japón, a pesar de sus problemas, es un país a
tener en cuenta, y la iniciativa del Gobierno de España –en la que Casa Asia
está jugando un papel muy importante con la celebración del año dual- pone de
manifiesto que es un objetivo a tener muy en cuenta; así como la dinámica
Corea del Sur y un largo etcétera de países donde Casa Asia y el Ministerio de
Asuntos Exteriores están sentando las bases para que durante los próximos
años recojamos frutos importantes en cuanto al objetivo de aumentar la
presencia de España en la región de Asia-Pacífico. Asia como objetivo a pesar
de las dificultades; que no provienen de 2012, aunque algunos digan que las
dificultades y restricciones económicas surgieron ese año. Usted bien sabe que
ha recibido de herencia algunos problemas a los que ha tenido que poner
remedio y tomar algunas decisiones que le habría gustado no adoptar. Ha
usted le habría gustado disponer de cien servidores en Casa Asia y no de
veintiséis. Repito que la situación heredada no era la más agradable para
poder cumplir con los objetivos que durante estos diez años se han ido
cumpliendo, aunque de forma poco significativa. En los próximos años se
tendrán que redoblar los esfuerzos y hacer más con menos.
Desde la llegada al Ministerio de Asuntos Exteriores de José Manuel
García-Margallo y de usted a Casa Asia, se ha insistido una y otra vez en la
importancia de esta área y en no escatimar esfuerzos; aunque la situación
económica de nuestro país es la que es. No obstante, el ministerio se ha
marcado objetivos respecto a Japón con el año dual España-Japón, y también
con Singapur y Laos, además de volver la mirada hacia China y al nuevo
Gobierno de Pekín.
Usted ha citado el Plan Asia 1 y el Plan Asia 3, de 2009 a 2012. En la
memoria del Plan Asia 2009-2012 ya se especificaba que se contaría con
recursos modestos y prudentes -el anterior Gobierno ya reconocía esas
restricciones económicas- y que solo podría abrirse embajada en Camboya.
Ese tercer plan ya hablaba de los menores recursos económicos, así como de
la prudencia en los objetivos, porque las restricciones económicas habían
llegado también a la diplomacia pública. El anterior secretario de Estado ya
habló de las dificultades como consecuencia de la crisis y de la menor
asignación económica para 2009-2012.
13
Por lo tanto, es necesaria la amplitud de miras para analizar estos diez
años al día de hoy. Asimismo, es necesario que se pongan de manifiesto sus
objetivos. No sé si verá la luz un cuarto Plan Asia, pero sí me gustaría que
señalara o ahondara en los objetivos de ese Plan estratégico 2013-2015, pues
además del establecimiento de nuevas sedes en España y nuevos partners,
creo que China, Japón, India, Corea del Sur, Pakistán, Filipinas, Australia o
Nueva Zelanda merecen un esfuerzo dentro de ese gran eje que es AsiaPacífico y que desde Casa Asia se pusieran las bases del mismo.
Me gustaría que pusiera de manifiesto si tiene previsto algún plan, algún
programa específico para estos países y que nos explicara alguna de esas
cuestiones.
Le agradezco su exposición, el esfuerzo que está haciendo desde el
minuto uno al frente de la responsabilidad de Casa Asia y ese compromiso
para que España, la marca España y el Gobierno de España tengan mucho
que decir en los próximos años en la zona de Asia-Pacífico.
No tenga ninguna duda de que el Senado y el Grupo Parlamentario
Popular estarán a su lado para intentar corregir los errores o carencias de los
últimos años, de manera que de cara a 2015-2020 España esté presente, a
España se la oiga y que la marca España tenga mucho que decir en AsiaPacífico en los próximos años.
Muchas gracias.
El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, senador Chiquillo.
Para contestar a los portavoces, tiene la palabra el señor director
general de la Casa Asia.
El señor DIRECTOR GENERAL DE CASA ASIA (Moreno González):
Muchas gracias, senador Sañudo, por sus palabras de apoyo.
Evidentemente, hay escasez de recursos, pero determinadas
instituciones, como es el caso del Ministerio de Asuntos Exteriores y de
Cooperación, desde el momento de mi llegada a la Dirección General de Casa
Asia ha mantenido, a lo largo de estos dos años, la misma cantidad, aunque se
produjo una bajada considerable en el año 2012. A lo largo de 2012-2013, la
cantidad ha sido la misma y en el proyecto de presupuestos para 2014 sigue
constando esa cifra. Sin duda, estamos en un momento de crisis y es lógico
que determinadas instituciones no puedan mantener las contribuciones; en
cualquier caso, como he señalado en mi exposición, intentamos mantener o
buscar patrocinios privados para las actividades, de forma que con un
presupuesto inferior -como señalaba en la exposición inicial-, un presupuesto
semejante al del año 2002, con todas las reducciones que ha sido necesario
realizar, podamos llevar a cabo una programación de calidad y con unos costes
bastante limitados.
Agradezco también muchísimo las palabras de apoyo del Grupo
Parlamentario Socialista a Casa Asia y el interés de sus explicaciones y sus
palabras previas. Evidentemente, hoy comenzaba el China at Barcelona
Summit, en Barcelona, y aunque todavía ninguno tenemos el don de la
ubicuidad, Casa Asia estará muy bien representada por la secretaria general.
Centrándome en las cuestiones que ha planteado, le diré que la
inmigración es un aspecto que preocupa enormemente en Casa Asia, de ahí la
tarea que estamos realizando con las comunidades asiáticas. Tenemos un
14
observatorio, un programa de integración de las comunidades asiáticas que ha
funcionado muy bien, sobre todo en Barcelona, con la idea de procurar la
inclusión y la adecuación a la cultura española de los inmigrantes.
En el caso de China, que es el que su señoría ha señalado, la
emigración va aumentando pero, a pesar de ello, se encuentra en una tercera
fase. Ha habido un primer momento, una primera fase de emigración china, en
la que venían familias, existía el efecto atracción y se dedicaban básicamente
al comercio, un comercio completamente familiar. Ya hay una segunda
generación china que ha nacido en España, que se ha integrado todavía con
alguna dificultad, pero ya ha acudido a colegios y universidades españolas y se
defiende o se puede expresar en nuestro idioma común. Y la tercera
generación es la que ya está completamente integrada, va abandonando la
empresa familiar y permite lo que decía en mi exposición, contar con una
comunidad que ya ha nacido en España, que se considera por una parte china
y, por otra, española, que cuenta con el gran atractivo de la posibilidad de
hablar un idioma que es enormemente complicado, como es el caso del chino,
que son bilingües, tanto en español como en chino, y pueden trabajar en
distintos ámbitos de la actividad, en el sector privado, en banca, en
universidades, etcétera.
Por supuesto, este tipo de actividades nos preocupan en Casa Asia y
estamos intentando fomentar la integración de las distintas comunidades
asiáticas, no solamente la china. Evidentemente, la china es la más numerosa
en cuanto a la procedencia de Asia pero, por ejemplo, en Barcelona ciudad, la
comunidad más importante no es la china sino la paquistaní. Con todas ellas, a
través de este programa de comunidades asiáticas, pretendemos su
integración y realizamos distintas actividades para que su inserción en la
sociedad española se produzca de manera completamente natural y fácil, a
través de distintos programas y actividades: ya sean culturales, deportivas, a
través de cursos. Sin duda, a nosotros también nos preocupa la inmigración y,
como usted ha señalado anteriormente, lo que se pretende es que la
inmigración esté controlada y que no sea ilegal. En este sentido, Casa Asia,
siguiendo las directrices del propio ministro y del Ministerio de Asuntos
Exteriores y de Cooperación ha realizado distintas sesiones en relación con la
integración y el acogimiento de inmigrantes en España, con la expedición de
visados, tanto en la propia embajada como visados de residencia. De hecho, a
finales de este mismo mes se llevará a cabo una actividad con el consorcio de
la zona franca destinada a explicar al mundo empresarial y al diplomático las
ventajas y oportunidades que ofrece la nueva Ley de emprendedores para
acoger a esta inmigración y facilitar la llegada de inmigrantes asiáticos de una
manera regulada, puesto que consideramos que las medidas que establece la
nueva Ley de emprendedores afectarán, en el área asiática, sobre todo a la
comunidad china, que es la más presente.
Por supuesto, estamos intentando evitar los tópicos que muchas veces
se difunden cuando se producen casos como los ocurridos recientemente, que
sus señorías conocen, con la comunidad china. En este sentido, se suele
repetir el típico tópico de que toda la inmigración es mala y, por ello, Casa Asia
ha hecho una labor para difundir que no se puede generalizar, que no hay que
meter a toda la inmigración dentro del mismo saco -y pido perdón por la
expresión- sino que, como todo en la viña del señor, hay una parte buena y hay
una parte mala y, precisamente, hay que potenciar la parte positiva. Así,
15
cuando se produjeron estos casos, a través de Casa Asia se emitieron
determinados comunicados que intentaban separar la parte dañina de las
actividades delictivas de lo que es la comunidad asiática o la comunidad china,
que realiza sus actividades y se va insertando poco a poco en la realidad social
española.
Por otro lado, colaboramos con los ayuntamientos, básicamente de
Madrid y Barcelona, con la idea de favorecer y ayudar en la integración de
estas comunidades, incluso favoreciendo las celebraciones propias de estas
comunidades. El año nuevo chino se celebró por primera vez con el apoyo de
Casa Asia en Madrid y también colaboramos en la celebración del año nuevo
chino en Barcelona.
Asimismo, intentamos colaborar con otras comunidades, como es el
caso de la india, participando en celebraciones como Diwali, que es la fiesta de
las luces, o Holi, que es la celebración de la primavera, para que estas
comunidades se sientan absolutamente cómodas en nuestro país y que, sin
olvidar sus tradiciones, se vayan adecuando al funcionamiento normal de
nuestro país.
Por supuesto que estos temas de inmigración los contemplamos porque
no dejan de tener un grandísimo interés y una grandísima preocupación en
Casa Asia y, sobre todo, como decía en mi exposición, tenemos que ser
conscientes de que en unos años, si realmente queremos que España juegue
un papel primordial importante en esta parte del mundo, será una ventaja
contar con una comunidad hispano-china, hispano-india, hispano-japonesa que
nos permita ayudar a empresas y a bancos participando con una presencia
mayor de España en esta parte del mundo.
En cuanto al tema de la lengua, evidentemente España es una potencia
lingüística y cultural enormemente importante, y también es un tema en el que
Casa Asia siempre ha colaborado. Evidentemente, somos conscientes de que
el español es un instrumento muy importante de política exterior, la prueba es
la creación del Instituto Cervantes en el año 1992, si no recuerdo mal. En estos
momentos existen Institutos Cervantes en Pequín, en Tokio, en Manila −el más
importante de Asia−, en Nueva Delhi y en Sidney, al margen de otras antenas
de Cervantes, tanto en Seul como en Kuala Lumpur, en Yakarta o Bangkok y
Hanoi. Evidentemente, dificultades presupuestarias evitan que estas antenas
se transformen en Cervantes en general, pero desde Casa Asia siempre hemos
sido conscientes de la importancia y la potencia lingüística que tenemos, y
hemos realizado numerosas actividades con los Institutos Cervantes en estos
países.
Otra de las tareas que he mencionado que realizamos en Casa Asia es
una reunión de estudios asiáticos, en los que participan básicamente las
universidades españolas, pero también otra serie de instituciones de carácter
público o privado, sin ser universidades, con la idea de coordinarse en relación
con la potencialidad que tienen estos idiomas y también con la potencialidad
que tiene el español. Es cierto que la visibilidad del español es escasa en Asia,
pero también hay que señalar, por ejemplo, que en las tribunas que realiza
Casa Asia con estos tres países que he mencionado, India, Corea y Filipinas, el
elemento cultural, el lingüístico, siempre está presente, puesto que lo
consideramos absolutamente primordial como un elemento de la imagen país y
de la marca España, de forma que contribuya a la difusión del español. Por
ejemplo, en el caso de Filipinas, tenemos que aprovechar los lazos y las
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tradiciones históricas de un idioma que en un momento determinado, cuando
pertenecía a España, nunca llegó a desarrollarse, puesto que se realizó la
tarea de difusión del español opuesta a la que se hizo en Iberoamérica, ya que
fue más bien una colonización llevada a cabo por sacerdotes y por el clero que,
en vez de difundir el español, utilizaban las lenguas indígenas. Pero en estos
momentos una de las tareas fundamentales de Casa Asia es ayudar en todo lo
posible a que el español vuelva a tener un papel más importante en Filipinas.
De hecho, ya está incorporado nuevamente en la enseñanza secundaria y hay
numerosas universidades que recogen el español.
En cuanto a los otros países que mencionaba, Corea e India, el caso de
Corea es muy curioso; en la próxima tribuna habrá también una mesa dedicada
a la cultura y a la lengua. Es muy importante señalar el enorme interés de
Corea del Sur por el idioma español. Hay más de dieciséis universidades con
departamento de español en un país donde no existe un Instituto Cervantes
propiamente dicho, sino una antena de Cervantes, y esto va en crecimiento.
Además, Corea, aún así, es el país de Asia en el que más estudiantes hacen el
DELE, el Diploma Español de Lengua Extranjera, por delante de otros países
asiáticos. En esto no es ajena la tarea que realiza Casa Asia con las tribunas.
En cuanto a India, también estamos intentando difundir todo lo posible nuestro
idioma y nuestra lengua. A veces nos ayudan determinados acontecimientos de
carácter externo a la propia actividad de la Casa. Como muy bien ha
mencionado el portavoz del Grupo Popular, yo estuve destinado en India en mi
último destino en el extranjero justamente cuando España ganó el campeonato
mundial de fútbol, y precisamente el fútbol y el deporte no dejan de ser un
elemento importante también de la marca España en Asia. Yo recuerdo, a
modo de anécdota, que el hecho de que España ganase el mundial de fútbol
sirvió para aumentar el número de alumnos que empezaron a interesarse por el
español y, por el hecho de ganar el mundial de fútbol, no solamente en el
Instituto Cervantes, sino en determinadas universidades aumentó el interés por
el español.
Al margen de esto, quiero señalar también que hay numerosísimas −son
ya más de treinta− universidades españolas con distintas licenciaturas o con
distintas modalidades de grado, de máster, en relación con los estudios
asiáticos. En este sentido, es importante mencionar que una de las tareas que
tiene el Observatorio de Asia-América Latina, además de la parte económica y
comercial, que es la principal, es la de prestar especial atención a la posibilidad
de difundir el español en Asia a través de este Observatorio o ayudar a que las
universidades españolas sirvan de puente a las universidades asiáticas para su
desembarco en Iberoamérica aprovechando el conocimiento, por lazos
históricos y vínculos tradicionales, que tiene España de Iberoamérica. De
hecho, este punto, por ejemplo, se planteó en la última tribuna España-Corea, y
ahora, en la próxima edición que tendremos en Málaga, se presentará lo
realizado para utilizar el puente entre América Latina y Asia.
Usted ha mencionado antes las distintas actividades que realizamos con
el resto de comunidades autónomas. Casa Asia tiene su sede principal en
Barcelona y otra sede aquí, en Madrid, pero intentamos descentralizar las
actividades y realizamos actividades en otras comunidades autónomas. En
este sentido, yo he mencionado el reciente acuerdo que hemos firmado con el
Ayuntamiento de Valencia para desarrollar programas de Casa Asia en esta
ciudad. Tenemos una programación que va dirigida en gran parte a la
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innovación como, por ejemplo, situar a Valencia como una sede permanente de
actividades relacionadas con un programa que llamamos “Asia innova”;
colaborar en la organización de emisiones que la ciudad de Valencia organice
en países asiáticos; de la misma manera que yo mencionaba anteriormente
que estamos realizando acciones o sesiones sobre oportunidades de negocio
en países asiáticos, también queremos realizarlas en Valencia, o hacer cursos
de formación, protocolo asiático y negociación intercultural, o alguna ponencia
con personajes destacados asiáticos que vayan a esta ciudad; o, ya en el área
cultural, ciclos de cine, acoger exposiciones que organiza Casa Asia en
Barcelona o en Madrid, o ceder o prestar fondos bibliográficos para su uso en
determinados centros municipales. Pero esta no es la única actividad; en el
pasado se ha colaborado con otras comunidades autónomas. De hecho, por
ejemplo, la Comunidad Autónoma de Galicia en un momento determinado
formó parte del alto patronato. Se han realizado y se siguen realizando
actividades fuera de las ciudades sede de Casa Asia con el fin de incorporar
este acervo o este intento de conocimiento de Asia en España, y también
promocionar y ayudar a que las pequeñas y medinas empresas de otras
comunidades autónomas, no solamente de los dos centros principales, vayan a
Asia.
Un esfuerzo en este sentido, por ejemplo, es la realización de la tribuna
España-Corea que empieza mañana y que se realiza en Málaga, en la que
están implicadas las autoridades principales no solamente de Málaga, sino de
la Comunidad Autónoma de Andalucía. Pretendemos también realizar
actividades en otras capitales apoyándonos básicamente tanto en las cámaras
de comercio como en las sedes de la CEOE, sobre todo, porque en Casa Asia,
como he expresado, estamos intentando en este momento de dificultades
incrementar la parte económica y ayudar a que la pequeña y la mediana
empresa española se acerque a Asia de una manera más fácil, puesto que no
es Iberoamérica. No es una zona del mundo particularmente accesible, ya no
solamente desde el punto de vista del idioma, sino porque se trata de áreas
con una cultura, una manera de actuar, completamente distintas de las
normales, y este tipo de actividades son las que estamos realizando.
Por supuesto, volviendo al tema de servir de puente o de nexo entre
América Latina y Asia, es algo que la institución no ha abandonado en ningún
momento, y para eso se puso en marcha el Observatorio de Asia-América
Latina. Ahora, en breve, presentaremos el balance de las actividades de este
año, que se hará junto con la Secretaría General Iberoamericana a finales de
este mes. Y en estos momentos en que hay una mayor sinergia entre las
casas, colaboramos también activamente, dentro de las actividades que se
realizan en relación con el Pacífico, con Casa América, con nuestra casa
hermana. De hecho estamos colaborando en estas sesiones que está
realizando en estos momentos Casa América sobre el aniversario del
descubrimiento del Pacífico, y esperamos poder contar tal vez con la
exposición que inauguró Casa América.
Evidentemente, estamos intentando aprovechar todo este acervo no
solamente, como yo mencionaba, en el área cultural, porque existe un gran
interés por parte de determinados países en utilizar las universidades
españolas de vía de aterrizaje o de desembarco de estas universidades
asiáticas en Iberoamérica, sino también en la parte comercial y en la parte
económica, aunque en este ámbito quienes necesitan más apoyo y más
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estímulos son las pequeñas y medianas empresas. En general las grandes
empresas españolas que yo he mencionado −España cuenta con unas
empresas de primer orden en una serie de ámbitos− no necesitan tanto apoyo
para desembarcar en una zona u otra, pero la pequeña y mediana empresa
siempre contará con el apoyo de Casa Asia. Y en esta labor desde el primer
momento siempre hemos contado con el apoyo del ICEX, del Instituto de
Comercio Exterior Español, que fue el primer miembro del Alto Patronato de la
Casa Asia, y en cualquier actividad económica o comercial que realizamos
contamos con su apoyo y colaboración. En estos momentos no es como en
épocas pasadas, en que contábamos con una contribución económica. Ahora
si se realiza una actividad, se puede contar con contribuciones económicas
puntuales para la realización de esa actividad, pero cualquier actividad de
índole económica siempre cuenta con el visto bueno y el apoyo del ICEX de
forma que haya unas sinergias, y utilizamos los recursos, que lamentablemente
son escasos, en estos momentos.
Básicamente agradezco a su señoría el apoyo a Casa Asia, el apoyo
manifestado para que se incrementen los recursos, aunque entiendo que en
estos momentos, dada la situación económica, va a ser difícil. Yo, desde la
tarea que me ocupa, estoy bastante satisfecho con lo realizado, a pesar de que
ha sido un momento duro y difícil, con todos los recortes y la situación en que
nos encontramos, pero contamos, como decía en mi exposición, con un equipo
que conoce perfectamente Asia, mucho más experto en ocasiones que yo, muy
activo y muy optimista. Estamos realizando una programación de calidad y con
un número de actividades ingente, a pesar de la limitación de recursos, de
forma que permita acercar España, desde un punto de vista económico,
cultural, político, educativo y lingüístico, a Asia y viceversa. Y esta es la tarea
en la que no vamos a cejar mientras esté al frente de esta institución. Muchas
gracias, señoría.
Senador Chiquillo, muchísimas gracias también por toda su exposición y,
evidentemente, por la mención que ha hecho a mis palabras cuando fui elegido
director general de Casa Asia. Entendemos que Casa Asia es un mecanismo
dinamizador para todo lo que está relacionado con Asia. Evidentemente, Casa
Asia no puede estar presente en todas las actividades relacionadas con la
zona, pero sí ha servido a lo largo de estos más de diez años como un agente
dinamizador para dar a conocer Asia en España y viceversa, que es una de las
tareas fundamentales que desde que yo llegué a la dirección general nos
hemos propuesto, porque si en un primer momento lo que se pretendía era dar
a conocer lo que era Asia en España, su papel, su dinamismo y su desarrollo,
en estos momentos en que ya se conoce un poco más Asia, también estamos
incidiendo más en lo que es España, de modo que tenga la imagen que
realmente debe tener en esta parte del mundo, que está llamada a desempeñar
un papel clave en este siglo, probablemente, como su señoría decía, en la
década 2020-2030.
Evidentemente, se trata de un área, como su señoría decía, donde
encontramos seis de los países miembros del G20, con más de la mitad de la
población del mundo, con el 80% de las reservas de divisas. Aunque los
índices de crecimiento han bajado moderadamente en los dos últimos años,
China sigue creciendo del orden de un 8%, India en torno al 5%; Japón no deja
de ser un país a tener en cuenta, y más con el nuevo slogan del primer
ministro, “Japón ha vuelto”, y es patente; Corea es un país que tiene unos
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índices económicos muy parecidos a los nuestros y una estructura de país muy
cercano, en el que el interés por España es muy considerable; y hay otra serie
de países que son los países del Asean, que también tienen un importante
desarrollo y crecimiento y que no podemos dejar de tener en cuenta.
Por supuesto, nos gustaría que continuasen los planes Asia realizados y
que tuvieran presentes todas estas ideas. Desde Casa Asia y respecto a la
programación, no existe un plan Asia específicamente hablando, lo que
hacemos todos los años es una programación que se presenta en diciembre al
consejo rector, que es el máximo organismo de Casa Asia, en la que, por
supuesto, los países mencionados tienen un papel fundamental en las
actividades de la casa. También se planifica un poco en función de lo que vaya
a ser el año sucesivo. Este año, por ejemplo, aparte del año dual EspañaJapón, en el que Casa Asia está inmerso en una serie notoria de actividades,
otras de las actividades que hemos pretendido fomentar están relacionadas
con todo el área del Pacífico, incidiendo también en la importancia que
deberían tener para España no solamente los cuatro países grandes que he
mencionado, China, Japón, India o Corea, sino todas estas posibilidades que
ofrecen estos miembros de Asean, con tasas de crecimiento entre el 3 y el 5%,
y donde la presencia española puede y debe fomentarse. En este sentido me
consta que tanto el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación como el
Ministerio de Economía y Competitividad y el ICEX están haciendo un ingente
esfuerzo por incrementar nuestra presencia y nuestras actividades, de forma
que España se vaya conociendo, vaya teniendo mayores oportunidades, y que
nuestras empresas consigan captar, atraer recursos y participar en los
numerosos proyectos que están en marcha. Son oportunidades que no hay que
dejar de tener en cuenta. De hecho, otra de las actividades que desarrollamos
el año pasado −dado que esta parte del mundo no estaba muy contemplada−
fue un Día de Asean, con la idea de difundir y dar a conocer al menos los cinco
países que cuentan con embajada residente en Madrid, que son Indonesia,
Malasia, Tailandia, Vietnam y Filipinas. Con Filipinas, evidentemente, los lazos
históricos hacen que la tarea a desarrollar sea bastante intensa. De hecho, son
numerosas las actividades que estamos desarrollando con Filipinas, puesto
que no solamente nos unen vínculos culturales, sino que es otro país con un
importante potencial económico en distintos ámbitos. En la última tribuna
España-Filipinas, que tuvo lugar a finales de enero en Manila, el componente
económico fue el principal con vistas a incrementar y ayudar a que la presencia
española fuera más fuerte de lo que ha sido hasta la fecha, así como ayudar a
consolidar la presencia española en Filipinas y que no solamente sea un
referente histórico, como ha venido siendo con anterioridad.
Todas estas tareas se enmarcan un poco en la idea, como su señoría
decía, de que España vaya teniendo una imagen país y una marca España, y
de esta forma nos incorporamos a las directrices del Ministerio de Asuntos
Exteriores y de Cooperación. De hecho en las tribunas incorporamos también
la venta −entre comillas−, y hay una conferencia sobre lo que es la marca
España para dar a conocer en estos países España, su potencial, y todo lo que
podemos vender no solamente en el ámbito cultural, sino también en el ámbito
económico y comercial. Esto nos va permitir que España, poco a poco, vaya
teniendo una presencia mayor en esta parte del mundo, esperemos que acorde
a un país moderno, dinámico, con empresas de primer orden en muchos de los
sectores, lo que con un pequeño empujón por parte de la Administración, que
20
es lo que Exteriores y el Ministerio de Economía y Competitividad están
realizando, se logrará.
Se me había pasado el tema de las posibilidades de la transición en el
área política. También en Casa Asia realizamos un esfuerzo, a veces con ciclos
de conferencias, para dar a conocer la situación política de los distintos países
en España y viceversa, aunque las experiencias de transición no son
equiparables directamente con un país y con otro. Es cierto que, por ejemplo,
Corea, que, repito, es uno de los países que más interés tiene por España, sí
tiene experiencias muy parecidas en cuanto a una crisis económica que ha
superado, una transición política relativamente reciente como la nuestra y unos
datos y unas cifras económicas también bastante parecidas. Incidiendo en esta
parte, tenemos numerosos contactos con think tanks y con distintas
instituciones de índole sociopolítico asiáticas, y aprovechamos muchas veces
visitas de importantes exponentes de estas instituciones para dar a conocer la
realidad asiática en España, pero también presentarles a ellos la realidad de
nuestro país, como lo que somos, una democracia importante y puntera que
está llamada a desarrollar y a tener un papel más importante del que ha tenido
hasta la fecha en Asia.
Aunque sería un desiderátum, como muy bien dijo mi ministro, el señor
García-Margallo, Asia es el Dorado del siglo XXI, y a pesar de que sea muy
difícil, y lo será, repetir que el Pacífico y el Índico sean un lago español como lo
fueron en la época del gran imperio español, sí sería deseable tener una mayor
presencia española en toda esta parte del mundo, y para ello desde Casa Asia
no vamos a cejar en nuestro empeño, siempre apoyándonos en las directrices
de la Administración española y también en los deseos de nuestros miembros
del consorcio que son nuestro punto de apoyo, y dentro de ellos,
especialmente, el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación, tanto a
través de la Secretaría de Estado de Asuntos Exteriores como a través de la
Agencia Española de Cooperación Internacional y para el Desarrollo, que es
nuestro principal donante y de donde salen nuestros fondos.
También hacemos determinadas actividades en el campo de los
derechos humanos, no solamente en el campo de los derechos de la mujer,
porque esta red de mujeres asiáticas suele incidir en estos aspectos pero
relacionados con la mujer, sino que también de vez en cuando realizamos
determinadas conferencias en los ámbitos de derechos humanos,
apoyándonos, repito, en think tanks e instituciones de carácter socio político
tanto españolas como asiáticas.
Muchísimas gracias, nuevamente, a todos los miembros de la Comisión
de Exteriores, a sus señorías por las preguntas y espero que esta explicación
les haya servido. Gracias por todo el apoyo, y ojalá se consiguieran más
recursos, pero aún así el optimismo, el empeño y el esfuerzo de todo el equipo
humano con el que cuenta la Casa, del que me encuentro enormemente
satisfecho, hará posible que Casa siga cumpliendo su función y pueda cumplir
muchos más años en el desarrollo de esta diplomacia pública con un
importante contenido económico, de forma que nuestro granito de arena sirva
para que de aquí a lo mejor a 2020-2030 España ya cuente con la presencia
que se merece en esta parte del mundo tan importante en este siglo XXI.
Muchas gracias.
El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señor director general.
21
¿Alguno de los portavoces quiere hacer uso de un turno de réplica?
(Denegaciones.)
¿Algún otro senador o senadora quiere formular alguna pregunta sobre
el tema de la comparecencia? (Denegaciones.)
En ese caso, muchas gracias de nuevo, señor director general. Tenga la
seguridad de que su intervención y su comparecencia ante esta comisión han
sido muy útiles para nosotros, y deseo expresarle el apoyo del Senado y
específicamente de esta comisión en la tarea que está llevando a cabo. Espero
que podamos establecer más contactos en el futuro que nos den a nosotros
información y que ratifiquen ese apoyo del que le estoy hablando. Muchas
gracias de nuevo.
Se suspende la sesión hasta las dieciséis horas y treinta minutos.
Eran las catorce horas.
Se reanuda la sesión a las dieciséis horas y treinta y cinco minutos.
El señor PRESIDENTE: Señorías, buenas tardes.
Reanudamos la sesión con la presencia del secretario de Estado de
Asuntos Exteriores, que comparece a petición propia para informar sobre la
próxima reunión Asia-Europa y las iniciativas recientes de la política exterior
española en Asia.
Aprovecho para agradecerle el envío de los libros sobre el año dual
España-Japón. Hoy tenemos un día asiático porque por la mañana ha
comparecido el director general de la Casa Asia, don Ramón María Moreno, y
ahora tenemos al secretario de Estado de Asuntos Exteriores, que nos va a
hablar sobre Asia.
Por tanto, señor secretario, cuya presencia siempre agradecemos,
bienvenido de nuevo a esta comisión, y, sin más, tiene la palabra.
El señor SECRETARIO DE ESTADO DE ASUNTOS EXTERIORES (De
Benito Secades): Muchas gracias, señor presidente.
Quiero congratularme de que el día de hoy se dedique a esa gran región
de Asia-Pacífico, de la que hablaré a continuación con algo más de detalle. Y,
también quiero decirles que, aunque estaba fuera de España, indiqué a mis
colaboradores que hicieran llegar a sus señorías este catálogo del año dual,
que va a costar muy poco porque lo van a financiar sobre todo las empresas, y,
por tanto, es un ejemplo de cómo con pocos medios se puede representar lo
que queremos transmitir: la imagen de modernidad que se ha producido en
España en las últimas décadas y que en Japón no es suficientemente
conocida.
Señorías, en primer lugar quiero agradecer la oportunidad que me
ofrecen de comparecer ante esta Comisión de Asuntos Exteriores del Senado y
poder explicar varios aspectos de nuestras relaciones con la región de AsiaPacífico y con algunos de los países más importantes que forman parte de ella.
Como sus señorías conocen, desde el principio de esta legislatura el Gobierno
viene señalando como una de las prioridades de la política exterior de España
la región de Asia-Pacífico, que es a su vez una constante de nuestra política
exterior de los últimos quince años.
22
En segundo lugar, permítanme que les señale algunos datos que dan
idea de la importancia y el peso actual de esta región. En los últimos veinte
años China y la India han triplicado su participación en la economía global y
han multiplicado por seis el tamaño de sus economías. En 2013, Asia en su
conjunto crecerá un 5%, acercándose en el caso de China y de varias de las
economías emergentes a tasas de crecimiento en torno al 7%. Japón, por su
parte, está empezando a salir de su deflación crónica y se estima que crecerá
hacia final de este año un 3,8%. En 2025 la región representará casi la mitad
de la producción mundial y seis países asiáticos figurarán entre las veinte
mayores economías del mundo; además de China, India y Japón habremos de
incluir también a Corea del Sur, Indonesia y Malasia.
En tercer lugar, en torno al 60% de la población mundial vive en AsiaPacífico, unos 4200 millones de personas. Se trata de la región del mundo que
ha experimentado una urbanización más rápida: en 1990 el 33% de la
población vivía en zonas urbanas y en 2011, el 43%. Finalmente, cabe
destacar los esfuerzos en la lucha contra la pobreza. En veinte años el número
de personas viviendo en la pobreza en esta región ha disminuido a la mitad, de
1700 millones a 800 millones.
En definitiva, el centro de gravedad geoestratégico se ha desplazado en
los últimos años del Atlántico hacia el Pacífico, de modo que muchos
consideramos que en estos años estamos inaugurando el siglo asiático. El
mantenimiento de la posición de España como potencia media con intereses
globales depende en gran medida de que sepamos adaptarnos a esta
redistribución del poder a escala global y subsanemos el déficit de presencia y
penetración comercial en Asia.
Sin embargo, el discurso habitual sobre la pujanza de Asia olvida con
demasiada frecuencia algunas de las tendencias más relevantes que se están
desarrollando actualmente en esta región, una de ellas es la dimensión
multilateral, y más concretamente la arquitectura regional asiática. En el marco
de su firme apuesta por el multilateralismo, España apoya la cooperación
regional como mejor medio para hacer frente a las tensiones geopolíticas que
podrían desestabilizar la región y para participar en su respuesta a los desafíos
globales.
Desde una perspectiva bilateral y dentro de las iniciativas recientes de
nuestra política exterior en Asia, quisiera destacar los recientes encuentros
celebrados con las dos principales potencias económicas de la región y
segunda y tercera economías mundiales, China y Japón, respectivamente, a
través, por un lado, de visitas de alto nivel, y por otro, de los foros bilaterales,
como instrumentos innovadores de diplomacia pública que fomentan la
participación conjunta de la Administración y la sociedad civil en nuestra acción
exterior con países de especial relevancia estratégica.
Señorías, la región Asia-Pacífico se está dotando de instrumentos con
los que afrontar conjuntamente los grandes desafíos económicos, políticos y de
seguridad que le conciernen. En lo económico, la cooperación económica AsiaPacífico (APEC) agrupa a veintiuna economías de ambas orillas del Pacífico y
varios de sus miembros están negociando la constitución de una asociación
transpacífica que se quiere que sea el modelo para los tratados de libre
comercio del siglo XXI.
Respecto de los asuntos políticos y de seguridad, hay toda una serie de
foros que tienen a la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean)
23
como elemento central: el foro regional de Asean, la Cumbre de Asia Oriental y
la reunión de ministros de Defensa de Asean. España se engarza con esos
procesos mediante su participación, por un lado, en ASEM, la Reunión AsiaEuropa, y por otro, a través de su imbricación como miembro de la Unión
Europea en las relaciones que la Unión mantiene con Asean.
Permítanme que me refiera, en primer lugar, a ASEM, la Reunión AsiaEuropa, diálogo que nació en 1996, cuando se constató que hacía falta un
lugar de encuentro entre APEC, que pone en relación a las dos orillas del
Pacífico, y la Unión Europea. En la actualidad ASEM la componen cuarenta y
nueve Estados miembros más los representantes de la Comisión y Consejo de
la Unión Europea y del secretariado general de la propia Asean. Con carácter
bienal se celebra la cumbre de jefes de Estado de ASEM, estando previsto que
la próxima tenga lugar en octubre del próximo año 2014 en Milán. Los años en
que no tiene lugar la cumbre, se celebra la reunión de los ministros de Asuntos
Exteriores de ASEM.
La 11ª reunión de los ministros de Asuntos Exteriores de ASEM, en la
que tendré el honor de representar a España, se celebrará precisamente los
próximos 11 y 12 de noviembre en Nueva Delhi. Será una reunión importante,
porque ASEM está en pleno proceso de reforma de sus métodos de trabajo.
Queremos, sobre todo, que el diálogo entre Asia y Europa sea sustantivo,
contribuya a la agenda global y produzca resultados tangibles. A estos efectos,
por primera vez se ha introducido el formato retiro para las discusiones sobre
los grandes temas internacionales, por entender que es la mejor manera de
favorecer un diálogo ágil y sincero. En esta reunión se ha previsto que España
intervenga en el apartado dedicado a los nuevos desafíos a la seguridad y, en
concreto, abordaremos la cuestión del acceso al agua. Es uno de los grandes
desafíos a los que se enfrenta la región de Asia-Pacífico y es también una de
las áreas donde España cuenta con el nivel tecnológico y de experiencia
suficientes como para poder hacer aportaciones significativas. Asimismo,
aprovecharé la presencia en ASEM para entrevistarme con varios de mis
homólogos en la región. Estamos gestionando la celebración de encuentros
bilaterales con Australia, Bangladesh, Corea, Indonesia, Laos, Myanmar,
Pakistán, Singapur y Tailandia −en varios de ellos hay asuntos pendientes de
empresas españolas−, y estamos, como ustedes saben, en plena campaña de
presentación de la candidatura de España al Consejo de Seguridad. Son
países con los que nos interesa tener un contacto directo y hacer gestiones
personales en ese sentido.
Señorías, la segunda vía de engarce con los procesos de arquitectura
regional en Asia-Pacífico es por medio de las relaciones entre la Unión
Europea y Asean, relaciones que se remontan a los años setenta. Asean
representa para el sudeste asiático lo que la Unión Europea representa para el
continente europeo, un espacio de paz y desarrollo, que reúne a países muy
diversos pero a los que une una cultura común. Desde 2008, en que Asean se
dotó de una carta y reforzó su secretariado, ha emprendido un proceso de
institucionalización que no deja de recordar al seguido por la Unión Europea.
Este proceso culminará en 2015 con el establecimiento de la Comunidad
Asean. La Unión Europea, y España con ella, ha mostrado su disposición a
colaborar en este proceso sobre la base de nuestra experiencia. La principal
plasmación de las relaciones entre la Unión Europea y Asean es el plan de
acción que firmamos durante la Conferencia ministerial Unión Europea-Asean
24
en Brunei en abril del pasado año y que fija las áreas de cooperación entre las
dos asociaciones para el período 2013-2017. Deseo subrayar a este respecto
que la elaboración de este Plan de acción conjunto Unión Europea-Asean
respondió a una decisión que los ministros de Asuntos Exteriores de los dos
bloques adoptaron en Madrid en 2010 durante la reunión ministerial que se
celebró bajo la Presidencia española de la Unión Europea.
En tercer lugar y dentro de los procesos de arquitectura regional en
curso, deseo también mencionar al representado por el Foro de las Islas del
Pacífico. Desde hace varios años España quiere incrementar su presencia en
un océano descubierto hace quinientos años y que los españoles fueron los
primeros europeos en surcar. Varias de las preocupaciones que aquejan a sus
miembros responden también a algunas de nuestras principales inquietudes,
entre otras, el cambio climático, el acceso al agua o a las energías renovables.
Estos últimos años hemos venido asistiendo con regularidad a las reuniones de
los socios de desarrollo de los Estados insulares del Pacífico y a las Cumbres
del Foro de las Islas del Pacífico y hemos emprendido acciones puntuales de
cooperación con estos países, a pesar de las restricciones presupuestarias por
las que atraviesa el ministerio. Nuestros esfuerzos se han visto recompensados
con la consideración de socios de desarrollo, y en estos momentos estamos
trabajando para convertirnos en socios del Foro de las Islas del Pacífico, que
esperamos poder tener el próximo año.
Señorías, la firme apuesta del Gobierno por el multilateralismo tiene, por
tanto, su reflejo en la región de Asia-Pacífico, donde España se consolida como
un socio constructivo y con dimensión propia en el seno de la Unión Europea.
Esta dimensión obedece al peso de nuestra presencia bilateral en la región, no
solo a través de las relaciones entre Gobierno y administraciones, sino también
mediante los intercambios crecientes entre las respectivas sociedades civiles.
Me refiero en este sentido al apoyo que en la secretaría de Estado damos a la
participación conjunta de Administración y sociedad civil en la acción exterior
con países de especial relevancia estratégica, a través de varios instrumentos
entre los que quiero destacar los foros bilaterales, que cuentan con una
secretaría permanente en forma de fundación consejo. Se trata de instituciones
privadas que colaboran estrechamente con el Ministerio de Asuntos Exteriores
y de Cooperación a través de su secretario general, un cargo que recae
tradicionalmente en un funcionario diplomático designado por el ministerio. El
principal activo de estos foros de diálogo entre sociedades civiles reside en
haber sido capaces de institucionalizar un diálogo bilateral con un horizonte
temporal de largo plazo, elemento imprescindible para aspirar a la construcción
de una relación bilateral rica, sólida y madura en la región Asia-Pacífico, en
este caso con China y Japón.
Señorías, este año conmemoramos el 40 aniversario del establecimiento
de relaciones diplomáticas entre España y la República Popular China. Estas
relaciones bilaterales se enmarcan en la Asociación Estratégica Integral
establecida con ocasión de la visita oficial del presidente Hu Jintao a España
en noviembre de 2005, asociación que fue renovada con motivo de la visita del
primer ministro Wen Jiabao en enero de 2009. Como sus señorías conocen, el
viaje a China el pasado mes de junio del ministro de Asuntos Exteriores y de
Cooperación sirvió de toma de contacto tras el relevo en la cúpula del poder
acordado en el XVIII Congreso del Partido Comunista Chino en noviembre de
2012 y la sesión de marzo de 2013 de la Asamblea Nacional Popular.
25
En este mismo marco, en julio del presente año tuvo lugar la visita de
una delegación parlamentaria encabezada por el presidente del Congreso, que
mantuvo encuentros con el presidente de la Asamblea Nacional Popular y el
presidente de la República, Xi Jinping. Por mi parte, el pasado mes de
septiembre he mantenido en Pekín una sesión de consultas bilaterales con el
viceministro de Asuntos Exteriores, Song Tao, en la que hemos hecho una
revisión del estado de nuestras relaciones y sobre la visión de distintos
aspectos de la situación internacional.
Estamos trabajando, por último, en un viaje del presidente del Gobierno
a China, que estaba previsto para el inicio del pasado mes de septiembre, pero
que por razones de la agenda del presidente del Gobierno y del presidente Xi
Jinping no se pudo realizar. Confiamos en poder acordar unas fechas
convenientes para ambas partes en los próximos meses, activando una
relación bilateral en un momento importante y de grandes cambios, tanto para
España como para China.
Señorías, la VII Edición del Foro España-China, celebrado en Pekín el
pasado día 12 de septiembre, ha tenido lugar en el contexto de las
celebraciones del mencionado cuarenta aniversario del establecimiento de
relaciones diplomáticas entre los dos países y ha representado una de las
principales actividades en el marco de este aniversario. Quiero destacar la muy
elevada participación y el alto nivel de representación por parte del Gobierno y
la Administración en los diversos ámbitos que han centrado la agenda de esta
edición. Concretamente, la delegación española ha sido presidida por el
ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, al que
acompañaban cuatro secretarios de Estado: el secretario de Estado de
Comercio, la secretaria de Estado de Turismo, el secretario de Estado de
Servicios Sociales e Igualdad y yo mismo, además de dos secretarios
generales: la secretaria general de Agricultura y Alimentación y el secretario
general de Universidades, y cuatro directores generales. Esta presencia de
autoridades españolas constituye un mensaje muy significativo de compromiso
e interés por nuestra parte, muy bien valorado por la Administración china.
Como prueba de ello, puedo añadir que entre las autoridades chinas que
participaron en los diferentes actos de este Foro España-China destacan el
vicepresidente de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino y el
vicepresidente del Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional de
China, ambos con rango de viceprimer ministro, además del ministro de
Industria y Tecnología de la Información y el viceministro de Comercio.
Este foro celebrado el pasado mes de septiembre ha servido para
confirmar y consolidar fundamentalmente dos tendencias positivas: la primera,
su capacidad para cubrir en cada edición los ámbitos de mayor interés para
nuestra relación, gracias a su estructura flexible. Desde el fomento del turismo
hasta la seguridad alimentaria, pasando por la atracción de estudiantes chinos
o la cooperación empresarial en terceros mercados, entre otros asuntos, han
protagonizado esta última edición, en la que las ocho mesas redondas
temáticas que han confirmado la agenda han tenido una clara derivada
económico-empresarial.
En segundo lugar, se ha demostrado que los foros cuentan con gran
capacidad de convocatoria en nuestra sociedad civil. Todas las mesas
redondas han contado con destacadas personalidades como panelistas y el
foro ha contado con más de doscientos participantes invitados por cada parte.
26
Señorías, Japón es un país con el que en el presente año 2013, y en
particular a partir del viaje realizado en febrero por el ministro de Asuntos
Exteriores y de Cooperación, estamos desarrollando un intenso programa de
contactos que tienen como objetivo la profundización de nuestras relaciones
bilaterales. Quiero resaltar una vez más la relevancia de la diplomacia
parlamentaria, tal y como atestiguan los viajes del presidente del Senado a
finales de febrero y de una delegación de la Comisión de Asuntos Exteriores
del Congreso en mayo, y agradecer de nuevo el esfuerzo que hacen ambas
Cámaras y sus señorías, tanto los diputados como los senadores, en
acompañar las acciones de política exterior del Gobierno y reforzar lo que
nosotros podamos hacer desde la Administración con la diplomacia
parlamentaria, tan fundamental en nuestros días.
El énfasis en nuestras relaciones se ve impulsado con la celebración
entre junio de 2013 y julio del próximo año del año dual España-Japón, que
cuenta con el alto patrocinio de su alteza imperial el príncipe heredero de
Japón y de su alteza real el príncipe de Asturias y fue inaugurado en Madrid
con ocasión de la visita del príncipe heredero Naruhito en junio pasado. El
programa de actividades persigue tres grandes objetivos: proyectar una imagen
moderna y actualizada de España, promover nuevas oportunidades
económicas para los dos países y fomentar un diálogo más intenso y amplio
entre las dos sociedades civiles, como se desprende de ese catálogo que les
he hecho llegar. Uno de los mayores logros del año dual ha sido ya el
relanzamiento del Comité Bilateral de Cooperación Empresarial, con una
participación muy importante de las empresas más relevantes japonesas y
españolas, que llevaba diez años sin reunirse.
En lo relativo a visitas e intercambios de alto nivel, hay que resaltar la
visita oficial del presidente del Gobierno a Japón los días 1 a 3 de octubre
pasado, durante la cual fue recibida por su majestad el emperador, mantuvo un
encuentro con el primer ministro, Shinzo Abe, y completó una agenda de
amplio contenido económico, comercial, cultural y de promoción de nuestra
presencia en ese país.
En el ámbito político, la visita ha ofrecido resultados muy importantes. Se
ha concluido, sobre todo, un documento llamado Asociación para la paz, el
crecimiento y la innovación, que será el que defina el marco de nuestras
relaciones bilaterales con Japón en el plazo de los próximos cinco años y eleva
el nivel de relación política con este país con un diálogo reforzado
institucionalmente y ampliado en cuanto a las materias que en el futuro serán
objeto de consultas bilaterales.
En el ámbito económico, la visita ha servido para dar un importante
impulso a las áreas de trabajo económico y comercial, con diversos acuerdos y
seminarios especializados, particularmente en el Foro España-Japón −al que
me referiré más adelante− en el mencionado Comité Bilateral de Cooperación
Empresarial.
La visita del presidente ha marcado también el inicio de una serie de
actividades culturales en el marco del año dual con la inauguración de dos
importantes exposiciones en Tokio y Fukushima, esta última marco de
expresión de la solidaridad española con la región de Tohoku, la más afectada
por el maremoto de 2011 y que ha tenido un gran impacto en la opinión pública
japonesa y en medios oficiales.
27
Desde el punto de vista de la imagen de España en Japón la visita ha
perseguido proyectar una imagen de España como país socio de Japón, con
cuyo Gobierno existe una importante sintonía en asuntos económicos e
internacionales, además de en numerosos ámbitos de interés común en los
que desarrollar la relación bilateral.
Finalmente y tal y como se señala en el comunicado conjunto en el que
se plasma la nueva asociación entre Japón y España, estamos trabajando ya
para dar continuidad a estos contactos con las visitas de su alteza real el
príncipe de Asturias y del presidente del Congreso de los Diputados a Japón en
el año 2014.
Señorías, la XVI edición del Foro España-Japón ha tenido lugar, por
tanto, en un contexto de muy especial significado dentro de la programación del
año dual España-Japón, con la participación del presidente del Gobierno, así
como del ministro de asuntos exteriores japonés, Fumio Kishida. El foro ha
tenido como tema principal el análisis de nuestras respectivas estrategias de
crecimiento, en particular en torno a cómo la cooperación entre Japón y
España en ámbitos como el desarrollo tecnológico e innovación o la
colaboración empresarial en mercados emergentes puede contribuir de forma
eficaz a la consecución de ese objetivo común, y en esta ocasión el foro
también ha contado con una importante representación de la Administración
acompañando al presidente del Gobierno mediante el secretario de Estado de
Comercio, la secretaria de Estado de Investigación, Desarrollo e Innovación, la
directora general del CDTI y yo mismo. A este respecto puedo señalar que esta
XVI edición del foro ha recibido un importante respaldo a su ya larga trayectoria
al incluirse en la declaración conjunta de ambos primeros ministros un mensaje
de apoyo a la continuidad de sus trabajos.
Destacaré también, como reflejo de la importancia y el peso que tiene la
sociedad civil en la preparación y trabajo de estos foros, el liderazgo de los
actuales copresidentes del foro, Josep Piqué, por parte española, y Shinichi
Yokoyama, copresidente del Comité de Europa de la patronal japonesa Nippon
Keidanren.
Señorías, he subrayado en mi intervención la importancia de los dos
foros que tenemos en Asia, con China y Japón, organizados por las
fundaciones Consejo España-China y España-Japón respectivamente, ambas
con una trayectoria bien acreditada y con unos foros consolidados desde hace
años. Quisiera asimismo resaltar que además de las mencionadas fundaciones
contamos con la importante labor de la Fundación Consejo España-India y la
Fundación Consejo España-Australia, está última presentada el pasado mes de
febrero en Melbourne y con la presencia del ministro de Defensa.
La primera de ellas, la Fundación Consejo España-India tiene previsto
organizar el próximo mes de diciembre un encuentro de alto nivel sectorial
España-India en infraestructuras y desarrollo urbano. El encuentro se está
coordinando con el Ministerio de Fomento y con el Ministerio de Economía y
Competitividad a través del ICEX. Este encuentro sectorial pretende afirmar la
condición estratégica de los sectores de infraestructuras y desarrollo urbano
para las necesidades de India y sus planes de inversión y, por otra parte, la
experiencia, tecnología y capacidades de las empresas españolas en estos
sectores en las que son punteras. El objetivo es dar continuidad al marco
institucional de colaboración, firmado mediante sendos memorandos de
28
entendimiento durante la visita a India de su majestad el rey el pasado mes de
octubre de 2012.
Por su parte, la Fundación Consejo España-Australia está organizando
un seminario en colaboración con Fride, en este caso sobre “Australia, España
y la Unión Europea, Un partenariado en un mundo incierto”, que permitirá
compartir experiencias y visiones con un país clave desde el punto de vista
económico y comercial, un país clave para entender los desafíos de la región
Asia-Pacífico y que en 2014 asumirá la Presidencia del G-20.
Esta mañana han podido escuchar al director general de Casa Asia, que
ha comparecido ante sus señorías. Casa Asia es un instrumento clave de
diplomacia pública y a través también de las tribunas establecidas con Filipinas,
India y Corea del Sur contribuye de forma muy relevante a nuestra política
exterior como el instrumento de diplomacia pública que es. Precisamente,
mañana, día 5, se inaugura la VIII Tribuna España-Corea en la ciudad de
Málaga bajo el título “Avanzando juntos”, que tendré el honor de clausurar este
próximo jueves, día 7.
Las sesiones versarán sobre la complementariedad de nuestras
economías, ciudades y desarrollo sostenible, así como sobre innovación,
cultura y turismo, con el propósito de buscar, como siempre, nuevas
oportunidades y nuevas posibilidades para nuestras empresas, con el objetivo
último y fundamental, que el ministro García−Margallo y el Gobierno han
señalado al Ministerio de Asuntos Exteriores, que es el de que la política
exterior contribuya a la salida de la crisis.
Señorías, concluyo con ello mi intervención, en la que he querido
presentarles la relevancia que tiene la región de Asia-Pacífico para nuestra
política exterior, como área de mayor vitalidad económica del planeta. He
querido destacar asimismo cómo España responde a esta nueva realidad a
nivel multilateral, participando en el marco de la Unión Europea en los diversos
foros regionales de diálogo y cooperación, y a nivel bilateral mediante un
intenso programa de viajes y visitas, empleando además los diversos
instrumentos con los que contamos para fomentar las relaciones, tanto entre
gobiernos y administraciones como entre las respectivas sociedades civiles.
Quedo a su disposición para cuantas preguntas deseen formularme.
Muchas gracias.
El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señor secretario de Estado, por
su interesante y completa información sobre la política exterior española con
relación a Asia.
Vamos a pasar al turno de portavoces. Por el Grupo Parlamentario
Socialista, tiene la palabra el senador Sañudo Aja.
El señor SAÑUDO AJA: Muchas gracias, señor presidente.
En primer lugar, quiero dar la bienvenida a esta comisión al señor
secretario de Estado y agradecerle, además de su presencia, las explicaciones
que nos ha dado.
Esta mañana, como decía, teníamos la oportunidad de conocer la
actividad de Casa Asia a través de su director general, y ha quedado de
manifiesto no solo la importancia de la misma sino la importancia que debe
tener en la política exterior de España todo lo que concierne a la región AsiaPacífico, como usted ha desbrozado en su intervención. Está bien todo este
29
cúmulo de circunstancias que nos ha contado, y está bien nuestra participación
a través de la ASEM en la reunión Asia-Europa, y la necesidad de plantear en
Europa nuestra posición política, tanto en política cultural como en política de
seguridad internacional y en el resto de las políticas en las que sea necesario
hacer hincapié. Por cierto, yo creo que una de ellas −lo comentaba esta
mañana− es la necesidad de crear una verdadera posición estratégica entre
España, Asia y América Latina, que mantiene un escaso apoyo institucional,
tanto de España como de América Latina y que, evidentemente, debe verse
reforzada.
Hay multitud de escenarios donde tenemos posibilidades de establecer
esa estrategia, y ya se ha hecho con la presencia del presidente del Gobierno
en la última Cumbre Alianza del Pacífico, en la que existen unos lazos
evidentes con Asia y Pacífico.
Creo que es el momento de equiparar nuestra acción exterior a la de
Europa, a la de África o a la de América Latina, y debería ponerse en el mismo
plano de igualdad. Decía esta mañana, y repito ahora, que es difícilmente
entendible que en un momento como el actual, en el mundo global en el que
vivimos, en el que Asia debe ser uno de los referentes esenciales de nuestra
política exterior, se coarten las pocas iniciativas serias que existen. Todos
sabemos que los presupuestos del Ministerio de Asuntos Exteriores han sido
los más castigados en este periodo de tiempo de Gobierno del Partido Popular
-tendremos oportunidad de hablar de ello-, pero en un momento en que la
apuesta española por Asia y por el Pacífico debiera ser más decidida, más
incisiva y apoyada, si creemos en ello, con un plus por su importancia,
contrariamente se reducen sistemáticamente los apoyos estratégicos en
diversas materias: eliminación de los planes, eliminación de ayuda al
desarrollo, reducción de políticas encaminadas a establecer lazos que permitan
afianzar nuestras relaciones… Ejemplo de ello son las dificultades por las que
atraviesa Casa Asia, a pesar de su importancia y de su voluntad de incidir en
esta materia, que creemos que debe tener un papel importante en este
desarrollo.
Yo diría después de escucharle que el discurso va por un lado, pero la
actitud va por otro, porque esto se refleja en las medidas que tienen que
tomarse y los presupuestos son una de ellas. Por ejemplo, por qué no continuar
con los planes Asia-Pacífico que nos han permitido marcar unas líneas de
actuación importantes hasta ahora, que creo han sido indiscutibles. Y no lo digo
solo en términos económicos, sino porque, debido a la importancia que tiene la
región, como usted ha resaltado, ha de servirnos para tener un modelo, un
patrón −llámelo como quiera− para orientar a los diferentes actores políticos,
económicos, sociales y culturales, que han de ser sobre quienes recaiga el
desarrollo de este asunto. Un plan que recoja todas esas actuaciones que
usted está diciendo y algunas otras, que las desarrolle y que después podamos
evaluar, porque si no es muy difícil hacer una evaluación de las políticas en
materia exterior.
Los retos que tiene por delante la política exterior de España con AsiaPacífico exigen que se establezcan objetivos prioritarios con medios
adecuados. Pueden ser muchos, yo enumeraré unos cuantos, pero seguro que
hay muchísimos más. No obstante, es evidente que es necesario aumentar la
presencia comercial y el número de empresas implantadas en Asia. No en vano
30
se comentaba esta mañana −creo que lo ha hecho usted mismo− que las dos
terceras partes del crecimiento económico mundial se encuentran en esa zona.
Por tanto, es preciso potenciar, pese a las dificultades económicas, las
inversiones asiáticas en España, para aprovechar esas sinergias. Es primordial
la captación del turismo asiático. Es fundamental que se incremente la
cooperación para el desarrollo en Asia, que debe racionalizarse, tanto
geográficamente como por sectores −usted anunciaba ahora algo respecto al
tema del agua, pero creo que tiene que ser mucho más profundo el desarrollo
de la ayuda oficial al desarrollo−. Debe contemplarse como una política
evidente la dimensión de la inmigración y sus efectos. En fin, podríamos seguir
con muchos otros asuntos. España puede y debe ofrecer a algunos países de
Asia-Pacífico su experiencia en aspectos como la transición política, la
modernización del Estado, la defensa de los derechos humanos, etcétera −es
necesario incidir en ello porque hay países que lo necesitan−.
Como digo, podríamos seguir con multitud de asuntos que no dudo de
que el ministerio tiene en su agenda, pero es necesario colocar negro sobre
blanco para posibilitar una estrategia en la que puedan participar todos los
actores implicados, porque eso redundaría en beneficio de los intereses de
nuestro país.
Que conste, señor secretario de Estado, que la política exterior española
es más que todo eso. No me iré hoy de aquí sin decirle que nos hubiera
gustado preguntarle sobre la actuación de su ministerio respecto a otros
asuntos y el estado en el que se encuentran. No tenemos la fortuna de contar
aquí con la presencia del ministro de Asuntos Exteriores, a pesar de nuestras
reiteradas reclamaciones para que venga. Usted sí lo ha hecho. Pero hay
muchos asuntos sobre los que hablar: los seguimientos de la Agencia de los
Estados Unidos y nuestra participación o no en ello, el conflicto de Gibraltar, el
conflicto sirio, nuestra posición sobre el reasentamiento de refugiados −asunto
en el que creo que estamos a la cola de Europa−, cuál es nuestra aportación
en Europa para que no vuelvan a ocurrir hechos tan lamentables como el de
Lampedusa y cuál es nuestra aportación en Europa, así como nuestro criterio
al respecto.
Espero y confío, señor secretario de Estado, en que tanto usted como el
ministro nos den una próxima oportunidad para poder hablar de todos estos
asuntos. Le agradezco, de verdad, enormemente su comparecencia, porque
nos ha ilustrado con las políticas que quiere llevar adelante el ministerio sobre
los asuntos de Asia-Pacífico. Pero reclamo que es necesario que se
establezcan sobre un plan en el que puedan participar el resto de los grupos
políticos a fin de que podamos evaluar en un futuro su cumplimiento.
Muchísimas gracias.
El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, senador Sañudo Aja.
En nombre del Grupo Parlamentario Popular, tiene la palabra la
senadora Sanín Naranjo.
La señora SANÍN NARANJO: Gracias, señor presidente.
Bienvenido, señor secretario de Estado, a esta comisión. Le agradezco,
en nombre del Grupo Parlamentario Popular, y en el mío propio, su excelente e
interesante exposición sobre la política exterior de España en Asia-Pacífico.
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Qué duda cabe que la relación de España con los países de AsiaPacífico ha ido evolucionando de forma positiva y ascendente con el correr de
los tiempos. La región Asia-Pacífico, con la excepción de Filipinas y Japón, y el
África Subsahariana, con la excepción de Guinea Ecuatorial, había estado
durante muchos años muy alejada de la política exterior del Gobierno de
España. Sin embargo, ante el espectacular desarrollo económico y político de
la zona y la irrupción del terrorismo global a partir del año 2001, con incidencia,
muy importante en España, en el año 2004, unido al mayor peso político y
cultural de España en el mundo, así como a la incipiente presencia
internacional de las empresas españolas, se hacía necesario plantear en
términos más ambiciosos la presencia de España en aquella zona AsiaPacífico.
Esa revalorización económica y geopolítica de la zona fue la que puso
en el punto de mira la política exterior de España durante el Gobierno del
Partido Popular. Así, tras la aprobación de la Ley de Cooperación Internacional
para el Desarrollo en 1998, se diseñó el I Plan Marco 2000−2004, que iba,
precisamente, a permitir una mayor presencia basada como punto de partida
en el ámbito económico.
El Gobierno socialista, sobre la base del anterior plan, diseñó el II Plan
Marco 2004-2008, lo que supuso una mayor presencia de España en términos
políticos, de seguridad, económicos y culturales.
Ya con el III Plan Marco 2008-2012, actualmente en desarrollo ―al
contrario de lo que algunos afirman― se ha venido reforzando la política
exterior de España, incardinándose en la estrategia Unión Europea-AsiaPacífico, aprovechando la importante dimensión iberoamericana de la política
exterior española. Ese tercer plan 2008-2012 prioriza, como decía el señor
secretario de Estado, el mantenimiento de contactos al más alto nivel, la
consolidación del diálogo político y el establecimiento de relaciones
diplomáticas con los países de la región con los que aún no existía. En esos
planes ya se ponía en valor la dimensión asiática como clave para reforzar la
posición internacional del país, como potencia media en intereses globales.
En Asia-Pacífico se está desarrollando una política exterior cada vez
más sólida, con el objetivo de extender y asentar la marca España en todo el
continente asiático mediante la cooperación y el diálogo al más alto nivel, como
instrumento más eficaz para el desarrollo de la política exterior de España; una
política exterior que requiere la presencia de España en las cumbres, como
decía, al más alto nivel, como las celebradas recientemente en Panamá y en
Santiago de Chile, y la presencia del presidente del Gobierno en Kazajistán y
Japón, exportando precisamente la marca España con el objetivo de asegurar
la estabilidad internacional y de mantener la presencia en un continente del que
han de salir las grandes decisiones.
Por supuesto, no fueron desacertadas las premoniciones del señor
ministro de Asuntos Exteriores cuando dijo que Asia es “El Dorado” del siglo
XXI. Precisamente, señor secretario de Estado, ahí es donde debemos estar;
de ahí la importancia de incrementar y fortalecer nuestra presencia en un
continente que ofrece un potencial económico sin precedentes. En este
sentido, es necesario destacar la política de cooperación desarrollada por los
distintos Gobiernos de España, prestando apoyo material y humano ante los
desastres naturales como por ejemplo, tras el terremoto que tuvo lugar en
Cachemira en 2005, la reconstrucción de la zona devastada por el tsunami en
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Tailandia, la reconstrucción en Afganistán, la inauguración del Instituto
Cervantes en Beijing, Tokio y Nueva Delhi, la creación de los planes integrales
de mercado para reforzar las relaciones con Japón, India y China y, como no
podía ser de otra forma, en la lucha contra los nuevos retos a la seguridad, con
especial atención a la lucha contra el terrorismo, el crimen organizado y las
migraciones ilegales. Si esto no es cooperación internacional, que venga Dios y
lo vea, porque cooperación hay y se sigue desarrollando precisamente con el
Gobierno actual.
Esta cooperación internacional es la que viene a consolidar nuestra
presencia y nuestra credibilidad ante la comunidad internacional y, sobre todo
―o especialmente―, en aquella zona Asia-Pacífico.
La colaboración de España ha sido muy eficaz con los centros
regionales de la lucha antiterrorista en Indonesia, Malasia y Singapur, y la
cooperación con Tailandia y Filipinas son exponentes muy claros de la política
exterior del Estado. El actual Gobierno sigue apostando por un multilateralismo
eficaz, por la integración económica y por la cooperación internacional como
vías para el progreso de ambos bloques, señorías, de ahí la importancia de
mantener en el marco ASEM, y en el diálogo abierto con Asean, ese proceso
de diálogo político y económico entre Asia y Europa, en el que por supuesto no
hemos de estar ausentes para potenciar la inversión extranjera en este país y
fortalecer nuestra presencia en aquella región como la mejor forma de exportar
la marca España.
Menos aún podemos obviar y dejar de analizar, señorías, el desequilibrio
demográfico ―y en eso sí creo que tenemos que poner un poquito más de
atención― entre los dos bloques, Europa y Asia; un desequilibrio que conlleva
paralelamente un desequilibrio económico. Europa, como ya decíamos esta
mañana, cuenta con el 10% de la población mundial, mientras que Asia, el
60%, y representa las dos terceras partes del crecimiento económico del
mundo.
Como decía Manuel Montobbio, no cabe duda que poseer vocación
global conllevará hacerse presente en todas las regiones, tanto más en un
mundo globalizado y, desde luego, no estar ausente en aquellas que
concentran más de la mitad de la población mundial y es que todas aquellas
potencias demográficas se convertirán necesariamente en potencias
económicas, y esas potencias económicas, en potencias políticas y militares;
de ahí la importancia de poder establecer, consolidar y reforzar las relaciones
España-Asia-Pacífico y, por supuesto, dentro de la Unión Europea y mediante
los diálogos bilaterales entre España y aquella región. En este sentido, la
defensa de los derechos humanos, el fomento del multilateralismo, las políticas
de igualdad y el diálogo interreligioso y de civilizaciones sigue siendo el eje
principal de la política exterior de España en el continente asiático.
El desarrollo del plan Asia-Pacífico ha venido propiciando una mayor
interacción con los países del nordeste asiático, como China, Japón y la
República de Corea, con los países del Asia meridional y sudeste asiático y,
por supuesto, con Australia y Nueva Zelanda, en el Pacífico.
No es cierto que se hayan eliminado los planes; los planes siguen
vigentes y entre los objetivos de España figura, precisamente, el de fomentar
una mayor presencia. Eso es precisamente lo que está haciendo España:
propiciar una mayor presencia en aquellos países que conforman el continente
asiático y el Pacífico. En este sentido, se están potenciando las inversiones, y
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de ahí precisamente los viajes de nuestro presidente a las distintas zonas, las
cumbres en Panamá, en Santiago de Chile y, por supuesto, en Japón, para
fomentar las inversiones de aquellos países en España y las nuestras en
aquella zona.
La inmigración, evidentemente, también es un asunto por el que el
Gobierno de España ha de mostrar mayor preocupación porque entiendo que,
como decía el señor secretario de Estado, se debe establecer una migración
regulada mediante contratos de origen o incentivando la inversión de aquellos
países en España.
Para terminar, señor secretario de Estado, le quiero hacer dos preguntas
que considero de interés de cara al tema que hoy nos ocupa. En primer lugar,
¿cómo se viene desarrollando la política exterior de cooperación en temas de
migraciones con los países del Asia-Pacífico? Y, en segundo lugar, ¿qué
posición adoptará España en el marco de su política exterior ante el problema
nuclear con Corea del Norte, al anunciar su intención de enriquecer uranio o
ante la situación política de Birmania?
Gracias, señor presidente y, gracias, señor secretario de Estado.
El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, senadora Sanín.
Para contestar a los portavoces, tiene la palabra el señor secretario de
Estado.
El señor SECRETARIO DE ESTADO DE ASUNTOS EXTERIORES (De
Benito Secades): Muchas gracias, señor presidente.
Trataré de responder a las preguntas y a los planteamientos de los
señores senadores, empezando por el representante del Grupo Parlamentario
Socialista.
Ha hecho referencia fundamentalmente a dos asuntos, que son también
dos cuestiones que nos preocupan: una es el aspecto presupuestario y las
consecuencias que pueda tener sobre la acción exterior y la política que
llevamos a cabo, y otra los instrumentos que tenemos de planificación y por
qué hemos dejado de tener planes regionales. En cuanto al primer punto, le
diré que en el ministerio, como es lógico, compartimos la preocupación por el
descenso en los presupuestos en estos dos últimos años. La verdad es que
tratamos de hacer más con menos, y el máximo de lo que podemos con los
recursos que tenemos. La cierto es que lo fundamental está garantizado,
aunque tenemos mucho menos en todo el capítulo de contribuciones
voluntarias, subvenciones, etcétera. El otro día, cuando comparecí en la
Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso para hablar de los presupuestos
de la Secretaría de Estado, decía que realmente se tiene que notar cuando en
el capítulo de subvenciones había más de 5 millones de presupuesto hasta
2010 −ya en 2011 hubo una bajada importante−, y en los años 2012 y 2013
tenemos 400 000 euros. Es decir, cuando te quedas al 8% de la disponibilidad,
realmente es difícil poder cumplir con los objetivos. Pero creo que, dentro de
esa austeridad, estamos tratando de hacer las cosas lo mejor posible y con
unos resultados razonables. Lo que estamos teniendo es presencia, no
podemos ir a los países, sobre todo a los menos desarrollados como
mencionaba anteriormente, ofreciendo cooperación, porque esto es más bien el
sector de la Secretaría de Estado de Cooperación Internacional, pero lo que
tenemos es una presencia física.
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Estaba repasando un poco de memoria los viajes del último año. El Rey,
aunque es verdad que en los últimos tiempos, por razones bien conocidas, no
ha podido hacer tantos desplazamientos, cuando fue a Moscú en el verano de
2012, y a la India en octubre de 2012, fue acompañado de cuatro ministros del
Gobierno. El presidente del Gobierno estuvo en Corea y en Japón; y había una
fecha cerrada en septiembre para visitar China, que no pudo ser, pero que se
realizará en los próximos meses. El ministro de Asuntos Exteriores ha estado
en China, en Japón, en Laos y en Singapur, que yo recuerde. Y yo he estado
en China, en Japón, en Malasia, en Brunei, en India una vez y voy otra vez la
semana que viene. Es decir, estamos teniendo presencia y bastante presencia
en foros multilaterales, donde podemos atender entrevistas, como he dicho
antes, con diez o doce ministros o viceministros en un solo lugar porque, entre
otras cosas, ya sabe que en la Secretaría de Estado que yo dirijo había una
Dirección General de Asuntos Multilaterales que ya no hay. Yo cubro ahora lo
que antes hacía también el director general de Asuntos Multilaterales. De
manera que los presupuestos son escasos, pero realmente tengan ustedes
confianza en que estamos teniendo el máximo de presencia, razonablemente
bien administrada. Y ahora citaré un par de ejemplos de cómo llegamos un
poco prácticamente a todas partes.
En cuanto a los instrumentos, yo sé a lo que se refiere el señor senador.
Hace doce años yo era director de Gabinete del ministro Piqué, que fue quien
puso en marcha el primer Plan Asia, el Plan África, etcétera. Nosotros en el
análisis que hicimos cuando llegamos con el ministro García−Margallo, vimos
que los planes habían cubierto su objetivo. Pongámonos en la situación del año
2000: no teníamos articulado un discurso sobre Asia. Asia era todavía la
cenicienta de nuestra política exterior, y el ministro traía una idea muy fuerte,
muy consolidada, de la importancia de Asia. Por eso se lanzó ese Plan Asia
que llevó, entre otras cosas, a que se estableciera una Casa Asia en
Barcelona, y un Plan África. Se trataba de articular un discurso que no había
habido hasta entonces respecto de zonas geográficas como eran Asia y África.
Nosotros creemos que ese objetivo de puesta en valor y de articulación de
discurso ya se ha agotado con los tres planes sucesivos.
En cambio, tenemos otros instrumentos de planificación: primero, la Ley
de Acción Exterior, donde va a haber una estrategia de acción exterior para la
legislatura, con una rendición de un informe anual sobre la acción exterior, y se
va a comparecer en el Parlamento para dar cuenta de cómo se ha cumplido
esa estrategia en cada ejercicio. Y luego una estrategia de política exterior, que
está en una primera versión a disposición del ministro, para la que se ha
recabado el informe del Real Instituto Elcano entre otros organismos. Será una
estrategia de política exterior que hará un nuevo análisis de cuáles son los
prioridades de nuestra política exterior, si realmente podemos llegar a todas
partes en nuestra calidad de potencia media. Esa estrategia de política exterior
también prevé un informe de política exterior anual, que se presentará al
Consejo de Política Exterior y se llevará también al Parlamento. Es decir, se irá
dos veces al año, una para rendir cuenta de la acción exterior que desarrolla no
solo el Gobierno, sino todas las instituciones y la sociedad civil, que es un poco
lo que prevé la Ley de Acción Exterior, y otra, para dar cuenta también del
desarrollo de la política exterior del Gobierno. De manera que son instrumentos
distintos, pero que igualmente contienen una planificación y una rendición de
cuentas anual sobre lo que se esté haciendo.
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Prueba de que estamos un poco en todas partes − y a continuación voy
a contestar específicamente a la pregunta de la señora senadora sobre el
programa nuclear de Corea del Norte−, yo he estado hace diez días, el 26 de
octubre, con el viceministro de Asuntos Exteriores de la República Popular
Democrática de Corea. Hemos mantenido conversaciones y van a abrir una
embajada en Madrid -ahora mismo tienen embajadas en la Unión Europea en
Roma, en Londres y en Berlín-, de manera que, aunque no lo hayamos
mencionado tanto, hemos estado trabajando con ellos, han venido aquí, les
hemos dicho claramente lo que pensamos sobre la política que desarrollan en
el ámbito nuclear y en materia de derechos humanos y, repito, van a abrir una
embajada. De forma que de verdad estamos en todas partes, con más
presencia física y menos respaldo presupuestario, pero estamos cubriendo los
distintos objetivos.
Creo que con esto he cubierto lo esencial de lo que me planteaba el
senador. En cuanto a los otros temas relativos a Siria y Gibraltar, yo estaría
encantado de tratarlos, pero creo que si hay un ministro dispuesto a explicar lo
que es la política exterior es el ministro de Asuntos Exteriores, el ministro
García-Margallo. Y sepan que nosotros, tanto en sede parlamentaria como
desde la Secretaría de Estado, estamos también dispuestos a dar cualquier
explicación, cualquier aclaración sobre lo que estamos haciendo, sobre todo si
son temas tan importantes como los que mencionaba.
No sé si he contestado en buena medida a las preguntas que me
planteaba.
A la señora senadora le quiero agradecer también su intervención. Como
ha puesto de manifiesto, hay una continuidad en lo que han hecho gobiernos
anteriores respecto de Asia. Creo, y tengo el gusto de decirlo, que la política
exterior es una política de Estado, y lo que hacemos es una continuidad de lo
que han hecho gobiernos anteriores. Además, queremos poner de relieve, el
otro día lo decía también en el Congreso, que seremos más eficaces y seremos
más efectivos en nuestros planteamientos si nuestros interlocutores perciben
que hay una continuidad en lo que estamos haciendo. Si nuestros
interlocutores llegaran a pensar que lo que hace un Gobierno va a ser desdicho
por el siguiente, o que nosotros estamos haciendo algo sensiblemente distinto
de los anteriores, pensarán que lo que digamos va a durar cuatro años y, por lo
tanto, no servirá al interés general del país. De manera que la política exterior
del país es esencialmente continuidad, como es lógico con énfasis en unos
puntos o en otros. Yo creo que nadie puede pensar razonablemente que
estemos haciendo lo contrario o haciendo mucho menos en algunas zonas de
lo que hacían gobiernos anteriores. Y si tenemos alguna presencia inferior en
algún punto concreto, es fundamentalmente por razones presupuestarias.
En cuanto a los dos asuntos que me planteaba la señora senadora,
tengo que decirle que los temas de inmigración no son competencia de la
Secretaría de Estado, pero la filosofía general y lo que explicamos cuando
hablamos con países de procedencia de inmigración hacia España, es que en
España hemos recibido en una década aproximadamente cinco millones de
inmigrantes. Esa inmigración se ha integrado no ya razonablemente, sino muy
bien en general en nuestro país y, como es lógico, cuando ese fenómeno de
inmigración tiene el volumen que ha tenido en un espacio corto de tiempo,
siempre puede haber un incidente con un grupo o con algún colectivo.
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Pero, realmente, España -y creo que es un timbre de orgullo- es un país
donde, a pesar de esa inmigración tan repentina y tan fuerte en poco tiempo,
no hay rechazo a los inmigrantes. Si pasamos revista -no quiero citar a nadie- a
los países europeos más importantes, también a los del norte, que siempre han
sido muy favorables a la integración, etcétera, observamos que hay
determinadas fuerzas políticas con un 10, un 15, un 18, un 20% de intención de
voto, y eso, afortunadamente, no existe en España. Puede haber un problema
puntual de integración de un colectivo, de un grupo, en un lugar concreto, pero,
en general, la inmigración se ha integrado muy bien y en condiciones
satisfactorias en nuestro país.
En cuanto al programa nuclear de Corea, como he manifestado
anteriormente, el 26 de octubre, en una reunión con el viceministro, tuvimos
ocasión de exponerle muy claramente que queremos que Corea cumpla con la
normativa internacional en el ámbito de la Agencia Internacional de Energía
Atómica, que no desarrolle un programa nuclear de carácter militar, sin
perjuicio de que abra una embajada y así tenerlos más cerca para transmitirles
ese mensaje de rechazo a los programas nucleares de carácter militar.
Espero haber dado respuesta a sus preguntas.
Muchas gracias.
El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señor secretario de Estado.
Con relación a la comparecencia del ministro en esta comisión a la que
ha aludido el portavoz del Grupo Parlamentario Socialista y el propio secretario
de Estado, debo decir que estoy trabajando con los funcionarios
correspondientes del ministerio para encontrar una fecha que se adecue a la
agenda del ministro –muy compleja, como todos sabemos o imaginamos- y a
las propias actividades de la Cámara. Estamos en ello, me consta, y quiero
manifestar la voluntad del ministro para comparecer cuanto antes y dar una
información completa de la política exterior.
¿Algún portavoz quiere hacer alguna puntualización más?
(Denegaciones.)
¿Algún otro senador o senadora desea formular alguna pregunta
concreta sobre los temas de esta comparecencia? (Denegaciones.)
Muchas gracias, señor secretario de Estado por su comparecencia y por
su información.
Se levanta la sesión.
Eran las diecisiete horas y treinta y cinco minutos.
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