Farmaindustria busca pactar in extremis con Moncloa

Farmaindustria busca pactar in extremis con
Moncloa
Llaman a todas las puertas, incluso a las más altas. Farmaindustria
ha solicitado una entrevista formal con el presidente del Gobierno
para explicarle su propuesta de inversión de 300 millones en
enfermedades raras a cambio de endurecer el sistema de patentes.
N. Navas / MADRID (20-06-2007)
El precio de los fármacos, según la patronal, debe fijarse en la
media europeaNo han recibido respuesta de Sanidad así que
acuden a Zapatero. La patronal de los laboratorios
farmacéuticos sigue reivindicando un cambio en el sistema de
patentes español, esgrimiendo su propuesta de inversión de
300 millones de euros en enfermedades raras como
contrapartida. Ante el silencio de los ministerios con los que ha
contactado; Sanidad, Industria y Educación y Ciencia,
Farmaindustria solicitará una entrevista formal con el
presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para
que armonice el sistema de patentes español con el europeo.
Con motivo de la asamblea general de Farmaindustria, su
presidente, Antoni Esteve, aseguró que han acordado acudir al
presidente a explicarle de primera mano su propuesta de
inversión a cambio de que se eliminen las diferencias en
materia de patentes que existen entre la legislación europea y
la española y que permiten 'adelantar la entrada de los
genéricos en España', según los responsables de la patronal.
Esteve reiteró la oferta de la industria farmacéutica para
'dialogar constructivamente' con todos los agentes involucrados
para lograr que esta iniciativa pueda convertirse en realidad. El
director general de Farmaindustria, Humberto Arnés, explicó
que con la oferta, la industria propone revertir sus beneficios
en la investigación de enfermedades raras, multiplicando por 12
las inversiones públicas previstas hasta 2012. Recordó que
hasta ahora estas dolencias no han encontrado suficiente
respuesta ni en los poderes públicos ni en la iniciativa privada.
En cuanto al diálogo, Arnés aludió a una encuesta realizada
entre sus asociados en la que coinciden por unanimidad en
denunciar 'la ruptura del modelo de diálogo entre Sanidad y las
empresas farmacéuticas' para la salida de nuevos
medicamentos al mercado. 'El retraso es manifiesto en la
fijación de precios de los fármacos porque no se están
cumpliendo los plazos', aseguró Arnés.
El director general dijo que tres cuartas partes de los
laboratorios consultados creen que las resoluciones por las que
se deniegan los precios solicitados para vender un
medicamento 'están insuficientemente motivadas'.
La asamblea de ayer reclamó también un desarrollo normativo
de la Ley del Medicamento que reconozca la innovación a
través de una política de precios y reembolsos 'alineada con
Europa'. En este sentido, los laboratorios denuncian, según
explicó Arnés, que no se tiene en cuenta la media de precios
europeos, 'tal y como está recogido en la Ley del
Medicamento', dijo Arnés.
La patronal, tras recordar la desaceleración en la inversión en
I+D experimentada en 2006, reiteró que su intención es generar
'un clima de confianza para las inversiones, que mejoren la
competitividad'.
Sanidad no ve razones para el cambio
Encontronazo de la industria y el Gobierno. El subsecretario de
Sanidad y Consumo, Fernando Puig de la Bellacasa, aseguró
ayer en el Congreso de los Diputados que 'no hay razón alguna'
para cambiar el actual sistema de patentes, tal y como reclama
Farmaindustria con su propuesta de inversión de 300 millones.
Durante su comparecencia en la Comisión de Sanidad y
Consumo del Congreso, Puig afirmó que 'desde luego, este
Gobierno no va a renunciar al derecho de un régimen
transitorio hasta 2012, fecha en que la normativa de patentes
será igual al resto de la UE porque no hay ningún argumento
para ello y porque el objetivo fundamental de la reserva es la
potenciación de los genéricos'.
La diputada del PP, Mercedes Roldós, destacó que las políticas
para el sector farmacéutico está incluyendo una 'actitud
defensiva' ante la industria, lo que puede provocar, a su juicio,
una 'desincentivación' en las empresas.
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