La bella durmiente

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La bella
durmiente
ÍNDICE
Presentación ................................................................................ ...................... 3
1ª Parte: Orientaciones didácticas
- Introducción................................................................................................. 4
- Objetivos...................................................................................................... 4
- Metodología................................................................................................. 5
- Mapa conceptual......................................................................................... 5
- Evaluación.................................................................................................... 5
2ª Parte: Antes de la visita
- 1ª Sesión: ¿Cuánto tiempo ha pasado?....................................................... 7
- 2ª Sesión: ¿Qué me pongo?......................................................................... 8
- 3ª Sesión: Hilando la lana….......................................................................... 9
Anexo
- Cuento........................................................................................................11
- Lámina 1ª sesión: ¿Cuánto tiempo ha pasado?...........................................20
- Lámina 2ª sesión: ¿Qué me pongo?.................................................... ……21
- Lámina 3ª sesión: Hilando la lana….............................................................22
- Láminas con los personajes del cuento...................................................... 23
2
PRESENTACIÓN
El Museo del Traje. CIPE quiere ofrecer a todos los centros escolares una oferta
específica de calidad, adaptada a las distintas áreas de conocimiento.
Dentro de nuestro programa para Educación Infantil "Cuentos con mucha
tela", les presentamos la actividad La bella durmiente, que convertirá la visita al
Museo en una experiencia divertida, que servirá de apoyo a la formación de sus
alumnos.
En La bella durmiente, las vitrinas del área “Afrancesados y burgueses” se
convierten en escenarios que ambienten este cuento. La narración es llevada a
cabo por un monitor, que muestra quiénes son los distintos personajes, a la vez
que saca de su baúl mágico una serie de utensilios que le ayudan a contar la
historia.
Una vez acabada la visita en sala, los niños se dirigen al taller, donde
trabajan algunos de los aspectos vistos en el cuento, como el bien y el mal y los
miembros de la familia.
Para complementar la visita, el Museo del Traje. CIPE ofrece a los centros
un material didáctico con el que, antes de la visita, puedan profundizar en los
objetivos y contenidos marcados para la actividad de La bella durmiente. El
material que se facilita a continuación consta de un ejemplar del cuento
La bella durmiente y de una unidad didáctica estructurada en varias sesiones.
Esperamos que este material sea de su utilidad.
Saludos cordiales,
Dpto. Difusión. Museo del Traje.
3
1ª PARTE: ORIENTACIONES DIDÁCTICAS
Introducción
Los museos son un lugar idóneo y atractivo para trabajar fuera del aula, adquirir
nuevos conocimientos y desarrollar capacidades.
El Departamento de Difusión del Museo del Traje. CIPE quiere propiciar el
acercamiento de los centros escolares a esta Institución y, por ello, propone un
material didáctico cercano y atractivo que puede servir para preparar y
complementar la actividad desarrollada en Museo.
El material didáctico que a continuación le facilitamos está estructurado en
tres sesiones, que el profesor puede adaptar a las necesidades concretas de su
grupo. Para el desarrollo de estas sesiones, que son previas a la visita al Museo,
se propone un material específico que puede encontrarse en el anexo final.
Objetivos
•
Generales
-
Desarrollar en los niños el hábito de visitar museos a partir
de experiencias positivas
•
Aportar un acercamiento novedoso a las disciplinas escolares
Específicos de la actividad
-
Acercar a los más pequeños el mundo del traje con una sesión
de cuentacuentos
-
Trabajar el concepto de tiempo a través de las estaciones del año
-
Desarrollar la habilidad de reconocer personajes en el contexto
oral
-
Reconocer el proceso de hilado de la lana y las propiedades del
tejido
4
Metodología
Para el desarrollo de la actividad La bella durmiente se propone las metodologías
de aprendizaje por descubrimiento y aprendizaje por asociación, en las que el
recurso de la observación adquiere gran importancia.
Mapa conceptual
ÁREA DE IDENTIDAD Y
AUTONOMÍA PERSONAL
VIDA
COTIDIANA
actitudes
ÁREA DEL MEDIO
FÍSICO Y SOCIAL
TIEMPO
ÁREA DE COMUNICACIÓN
Y REPRESENTACIÓN
TEJIDOS E
HILADO
estaciones del año
lana
LENGUAJE
visual
EXPRESIÓN
PLÁSTICA
dimensiones
indumentaria
huso y rueca
identificación visual
de los personajes
oral
cuentacuentos
Evaluación
Le ofrecemos la posibilidad de realizar una evaluación de sus alumnos que le
pueda servir para su trabajo diario. Esta evaluación, que es una herramienta
complementaria que se puede utilizar tanto en las sesiones realizadas en aula
como en la visita al Museo, consiste en una ficha individual en la que se recogen
las destrezas, las habilidades y el interés de los niños ante esta actividad.
Este cuestionario de evaluación no es un material que deba remitirse al
Museo; se facilita, únicamente, para ser trabajado por el profesor/tutor.
5
FICHA INDIVIDUAL DE EVALUACIÓN
NOMBRE ……………………………………………………………………………………………
EVALÚO SI …
CONSEGUIDO
EN
DESARROLLO
□
□
Desarrolla la atención
□
□
Analiza, comprende y memoriza cuentos y canciones
□
□
Ordena temporalmente las secuencias del cuento
□
□
Observa y analiza los vestidos vistos en el Museo
□
□
Asocia cada personaje con su indumentaria
□
□
Reconoce el paso del tiempo
□
□
□
□
Conoce la procedencia de la lana y el algodón
□
□
Disfruta con las visitas extraescolares
□
□
Disfruta con la realización de distintas actividades
(plásticas, de juego, dramatización…)
Distingue la relación entre las estaciones del año y el
cambio en la indumentaria
Observaciones
6
2ª PARTE: ANTES DE LA VISITA
Sesión I: ¿Cuánto tiempo ha pasado?
•
Objetivos:
-
Introducir a los alumnos en la visita al Museo y en la actividad
que desarrollarán
-
Reconocer el paso del tiempo a través del cuento: reloj, 100
años de maldición…
-
Comprender cuáles son los efectos del paso del tiempo a través
de las estaciones del año
•
•
Materiales:
-
Cuento
-
Lámina 1
-
Tijeras
-
Cartulina tamaño A 4
-
Pegamento de barra
-
Láminas con los personajes
Actividad:
- Lectura del cuento.
- Hablamos sobre el cuento (compresión) y resaltamos las partes
en las que se explica el paso del tiempo
- Colgamos en un sitio visible del aula las láminas con los
personajes y comenzamos a reconocer a los protagonistas del
cuento
- Trabajamos con la lámina 1. Tiene un formato de tres cartas que
los alumnos deben pegar en cartulina y recortar. Estas tres
cartas nos sirven para realizar preguntas a partir de las que
podremos reconocer cuándo la princesa es niña o cuándo es
adulta, y cuándo está vestida de otoño o de primavera…
- Reflexionamos sobre el pasado del tiempo a través de lo visto
en el cuento y en el juego de las cartas
7
Sesión II: ¿Qué me pongo?
•
Objetivos:
- Reconocer las estaciones del año a partir de los cambios
climáticos
-
Relacionar las prendas de ropa con la estación del año a la que
pertenecen
-
Enseñar a los alumnos quiénes son los personajes y cuáles son
sus prendas características
•
•
Materiales:
- Cuento
-
Lámina 2
-
Ceras de colores (rojo, verde y azul)
-
Láminas con los personajes del cuento
-
Canción: Tres hojitas
Actividades:
- Trabajamos con la lámina 2. Mediante un código de colores
asociamos las prendas a la estación del año correspondiente.
Las que sean de primavera se rodearán de rojo y las de otoño,
de azul
-
Observamos la ropa que llevan los personajes en las láminas y
reflexionamos sobre si son tipos de prendas para el frío o para el
calor
-
Aprendemos la canción
8
Sesión III: Hilando la lana
•
Objetivos:
-
•
Conocer la procedencia de la lana
Aprender las cualidades y utilidades de la lana
Materiales:
-
Cuento
Lámina 3
Ceras de colores
Algodón / ovillo de lana
Pegamento
• Actividades:
-
-
Lectura del cuento. Se profundiza en el momento del hilado de la lana y
las características de este tipo de material
Aprendemos que la lana es un material que viene de la oveja, por lo
tanto, tiene una procedencia animal… y que también existen otros
materiales como el algodón -del que está hecho el vestido de la bella
durmiente- que tiene procedencia vegetal…
Trabajamos con la lámina 3. Creamos nuestra propia oveja y, para eso,
coloreamos la cara y las patas; el cuerpo lo rellenamos pegando trozos
de algodón o lana
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ANEXO
-
Cuento
Láminas 1ª sesión: ¿Cuánto tiempo ha pasado?
Lámina 2ª sesión: ¿Qué me pongo?
Lámina 3ª sesión: Hilando la lana
Láminas con los personajes del cuento
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La bella durmiente
Había una vez, en un reino muy lejano, un rey y una reina que vivían en un enorme
palacio con grandes jardines y fuentes. Todos los habitantes del reino eran felices,
menos el Rey y la Reina que llevaban mucho tiempo queriendo tener hijos y nunca
lo conseguían… Al fin, después de muchos años, la Reina dio a luz a una niña
preciosa a la que pusieron el nombre de Aurora.
El
Rey
estaba
muy
contento
con
el
nacimiento de la Princesa y organizó una
gran fiesta en el palacio a la que invitó a
todas las hadas, los magos y los duendecillos
del bosque.
Era primavera, todos los jardines de palacio
estaban llenos de flores y mariposas… El sol
había salido y la fiesta iba a empezar.
Poco a poco, fueron llegando todos los invitados y, como era tradición en el reino,
todos traían algún detalle para la Princesa… Cada una de las hadas hizo un
regalo muy especial a la pequeña Aurora: una le dio la belleza; otra, la salud; otra,
la felicidad; y así todas, un hada tras otra. Todos los regalos de las hadas eran
buenos deseos para la Princesa, excepto el regalo de un hada, el Hada mala.
11
El Rey había olvidado invitar a una vieja hada que
llevaba encerrada en su torre más de cien
años… El Hada, muy enfadada, a pesar de que
no estaba invitada a la fiesta se presentó allí y
llevó un regalo para Aurora: el deseo de que la
Princesa muriese al pincharse la mano con un
huso, el día de su 15 cumpleaños.
El deseo del Hada mala era tan terrible que los
magos, las hadas, los duendecillos y el resto de
los invitados comenzaron a llorar; incluso el reloj
del salón, del susto, se paró para siempre.
12
Entonces, un Hada joven que estaba cerca de la
Princesa dijo:
–Tranquilos, aún no he pedido mi deseo…
Yo no puedo deshacer el deseo del Hada
mala, pero sí puedo cambiarlo.
Y, dirigiéndose a los reyes, declaró:
–Deseo que vuestra hija no muera al
pincharse con el huso… La princesa Aurora
no morirá, como ha dicho el Hada mala,
sino que caerá en un sueño muy profundo
que durará cien años. Después de esos
cien
años,
un
príncipe
vendrá
y
la
despertará.
Pero el deseo del Hada joven no tranquilizó al Rey… y, para intentar proteger a su
hija, prohibió hilar y usar ruecas, husos y agujas a todos los habitantes del reino.
Pasaron los años y todos en el reino vivían felices, hasta que llegó el fatal día en
que la princesa Aurora cumplió 15 años. Era una mañana de otoño y la Princesa
tenía ganas de jugar; como empezaba a hacer frío en los jardines del palacio, el
Rey le ordenó que no saliese de la casa.
Mientras jugaba, escuchaba cómo los sirvientes cantaban la canción del otoño,
que hablaba de cómo caían las hojas de los árboles al llegar el frío… La Princesa
estaba jugando en los pasillos del palacio cuando encontró unas escaleras que
subían al torreón. Subió y subió hasta que llegó a una pequeña habitación, en la
que había una anciana que estaba hilando… Parecía una señora adorable, pero
realmente no era una anciana cualquiera, sino el Hada mala disfrazada.
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–¿Qué hacéis aquí, buena mujer?– dijo la Princesa.
–Estoy hilando lana, mi bella niña– le respondió la anciana.
–¿Hilando? ¿Eso qué es?– preguntó la Princesa.
–Mira, estos vellones de lana se van a convertir en bonitos hilos para
hacerte trajes, calcetines y gorros para el invierno.
–Entonces, la lana de las ovejas, cuando las hilas… ¿Sirve para hacer la
ropa que nos ponemos cuando hace mucho frío?– preguntó la Princesa.
–¡Claro! ¿Quieres ver bien cómo lo hago? Pues acércate a mí y fíjate bien:
paso estos trozos de lana por la aguja, que se llama huso, y le doy vueltas
y vueltas hasta hacer el hilo.
La Princesa, que era muy curiosa, hizo caso a la anciana –que realmente era el
Hada mala– y se acercó más y más al huso… Sin querer, apoyó su delicada
mano sobre la aguja y se pinchó. Al instante, cayó desmayada.
14
El Hada mala había conseguido lo que quería, que la Princesa se pinchase con el
huso… Vio a Aurora desmayada en el suelo, pensó que estaba muerta y huyó
rápidamente del torreón riendo a carcajadas.
–¡Ja, ja, ja,…! ¡Lo he conseguido!
El Rey escuchó el alboroto y se puso triste y nervioso, porque se acordó del día
en el que el Hada mala deseó la muerte de la Princesa… Subió deprisa las
escaleras del torreón y cuando llegó a la habitación más alta de la torre se
encontró a su hija dormida, tumbada en el suelo… Entonces recordó que el Hada
buena había dicho que la Princesa, al pincharse con el huso, no moriría sino que
caería en un profundo sueño que duraría cien años.
El Rey ordenó a los criados que acostasen a la Princesa en la cama más hermosa
del palacio para que pudiese dormir cómoda durante tanto tiempo. De pronto,
pensó que cuando la Princesa despertase no iba a encontrar a nadie conocido y
se iba a poner muy triste, así que se le ocurrió un plan para el que mandó llamar
al Hada buena, que llegó rápidamente montada en su unicornio.
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–Querida Hada buena, mi hija no ha muerto gracias a tu hechizo. Dormirá
durante cien años pero cuando despierte, no encontrará a nadie conocido
y se pondrá muy triste.
–¿Qué quieres que haga entonces, mi Rey?– preguntó el Hada.
–Si tocas a todos los habitantes del palacio con tu varita mágica y los
haces dormir otros cien años, cuando la Princesa despierte estará rodeada
de todos sus seres queridos…– dijo el Rey.
–Lo que su majestad ordene –concluyó el Hada.
Y así, el Hada buena, uno tras otro, fue durmiendo con su varita mágica a todos
los habitantes del palacio… Durante cien años todo permaneció en silencio,
completamente dormido; habían crecido árboles grandes y pequeños, hierbas
malas y hierbas aromáticas. Con tanta maleza, lo único que se veía del palacio,
desde muy lejos, era el torreón donde el Hada mala engañó a la Princesa. Nadie
de los reinos vecinos quería acercarse al palacio. Todos decían que era un palacio
maldito en el que sus habitantes dormían por la maldición de una bruja…
Al cabo de cien años, esta historia llegó a oídos de un
Príncipe que vivía en un reino cercano y era un chico valiente
que no temía a las historias de brujas y maldiciones. Un día,
este Príncipe –que se llamaba Enrique– decidió salir de caza,
dar una vuelta por el bosque y visitar aquel palacio dormido.
Mientras se acercaba, el bosque se hacía más y más oscuro;
daba tanto miedo que sus acompañantes, e incluso los
perros de caza, se negaron a seguirle y salieron huyendo.
Pero el Príncipe no tenía miedo y quería llegar al palacio
porque sabía que allí dentro había una Princesa, que
esperaba su beso de amor para poder despertar de un largo
sueño.
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Cuando finalmente el príncipe Enrique llegó al palacio, abrió la puerta y comenzó a
buscar a la Princesa por todas las habitaciones, pero lo único que encontraba a
su paso era gente dormida: unos estaban en la cocina, otros en el comedor, otros
en sus dormitorios...
–¡Todos visten ropas antiguas y llevan peinados que pasaron de moda
hace mucho tiempo!– dijo el Príncipe, sin pensar que toda aquella gente
llevaba cien años durmiendo.
Por fin, después de recorrer todo el palacio, llegó al dormitorio de la Princesa. Se
acercó lentamente a ella y le dio un beso de amor… La Princesa, entonces,
despertó.
–¿Quién eres?– dijo asustada.
–Soy Enrique, el príncipe que te ha librado de la maldición del Hada mala.
–¡Qué raro vas vestido!
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Al Príncipe le hizo mucha gracia el comentario de la Princesa, que no se había
dado cuenta de que llevaba cien años durmiendo, y comenzó a reírse.
Poco tiempo después de que la princesa Aurora despertara, el resto de los
habitantes del palacio también lo hicieron. Todos sabían que la maldición había
pasado y que tenían que ponerse manos a la obra, volverían a trabajar, a
cocinar… Además, la princesa Aurora y el príncipe Enrique se habían enamorado
y querían casarse cuanto antes ¡había que organizarlo todo para la celebración de
la boda!
Así, los que estaban en la cocina empezaron a preparar ricos platos de comida,
los que estaban en el comedor pusieron los mejores platos, cubiertos y vasos
para el banquete, y los que estaban en los dormitorios llenaron los jarrones con
flores y pusieron sábanas limpias para todos los invitados… Todos estaban felices
en el palacio y siguieron cantando la canción que cien años atrás cantaban;
aquella canción de otoño que hablaba sobre las hojas que caían de los árboles
cuando llegaba el frío…
En medio de todos estos preparativos, la Princesa
estaba feliz porque había encontrado a su amado,
pero preocupada porque había crecido, y el traje
rojo y negro que llevaba el día en que cayó dormida,
le quedaba corto. ¡No tenía ningún vestido nuevo
para el día de su boda!... Entonces, el Rey recordó
que la culpable de todo había sido el Hada mala y le
castigó, obligándole a coser un vestido, ¡el vestido
más bonito del mundo!, para el día en que la
Princesa se casase.
18
Finalmente, el Hada mala, obligada
por el Rey, cosió un vestido precioso
que Aurora lució en su boda.
El príncipe Enrique y la princesa
Aurora se casaron un soleado día de
otoño y fueron muy felices y comieron
perdices…
…Y, colorín colorado, este cuento se
ha acabado.
19
1ª SESIÓN: ¿Cuánto tiempo ha pasado?
20
2ª SESIÓN: ¿Qué me pongo?
21
3ª SESIÓN: Hilando la lana
22
La princesa Aurora
recién nacida
23
El Rey
24
La Reina
25
El Hada buena
26
El Hada mala
27
La princesa Aurora
a la edad de 15 años
28
El príncipe Enrique
29
La princesa Aurora
vestida de novia
30
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