El hechizo de la [mala] fama Analizan expertos exaltación hacia

Anuncio
El hechizo de la [mala] fama
Analizan expertos exaltación hacia Diego Santoy
María Luisa Medellín
El crimen se ha convertido en un
fenómeno mediático que recibe una
cobertura nacional de las cadenas
televisoras como no se había visto antes.
Foto: Archivo
Monterrey, México(30 marzo 2006).-El brutal crimen de los pequeños Peña Coss, Érik Azur, de 7 años, y María
Fernanda, de 3, consternó a Monterrey y a todo el País.
Diego Santoy Riveroll, el asesino confeso, fue objeto del repudio e indignación de los ciudadanos, incluso mucho
de ellos lo abuchearon luego de su captura y llegada a la Ciudad y otros hasta pedían su linchamiento en interne
Pero a menos de un mes de estrangular a la niña, acuchillar al pequeño y herir gravemente a Érika, su ex novia y
hermana de las víctimas, Diego se ha vuelto popular.
En la red tiene seguidores, por lo menos un club de fans y también se le compuso un corrido.
Para especialistas en la conducta humana, estas actitudes hablan de insensibilidad y una cultura de la violencia q
permea ciertos sectores de la juventud, que olvidándose de la acción atroz de Diego, exaltan sus rasgos físicos y
clase social, justifican sus celos y hasta culpan a Érika de haber terminado el noviazgo.
"No se identifican porque es un asesino, sino por lo que dice, lo que proyecta, porque es guapo, joven y de clase
media alta", dice el psicólogo clínico Roberto Barajas Martínez.
José Manuel Santoy, padre de Diego; Mauricio, el hermano, y Raquenel Villanueva, su polémica abogada, se
desenvuelven cómodamente ante los reflectores y los micrófonos.
Esto ha llegado a tal punto que, por ejemplo, el papá del asesino confeso parece un representante artístico: no s
tramita entrevistas con sus hijos, sobre todo con Diego, sino que él mismo cita en lugares públicos, donde no
escatima sonrisas y abrazos para quien se le acerque.
El hombre afirma que sus teléfonos son ya públicos, pues le ha dado sus números personales a todo miembro de
los medios, de los que le preocupa sobre todo la televisión nacional.
En más de una ocasión se ha jactado de que en cualquier momento, si él quisiera, los locutores de televisión má
conocidos volarían en pos de la entrevista exclusiva con Diego.
Durante sus encuentros con los reporteros, y a diferencia de su esposa, que no ha dado declaraciones, Santoy
padre habla sobre valores morales y éticos en su familia, al tiempo que insinúa, también públicamente, sospecha
sobre la vida privada de la familia Peña Coss.
No se mide en hablar de la simpatía y las "muestras de apoyo" que según él le brinda la gente en la calle. Incluso
alardea sobre el desenvolvimiento y dominio ante las cámaras y micrófonos de su otro hijo, Mauricio.
Ellos aprovechan la situación para exhibirse y volverse famosos, aunque sea a costa del escándalo, considera
Myrthala Juárez, presidenta de la Asociación de Psiquiatría Infantil y de la Adolescencia del Noreste, A.C.
"Los Santoy y su abogada son protagónicos y hablan del joven que asesinó a dos menores como si fuera lo
máximo. Dicen: 'él quería mucho a Érika', 'lo vamos a defender ante todo porque somos su familia'. Hasta parece
que él es la víctima", explica.
Ésas son características de las personas antisociales, señala, que distorsionan la realidad de tal forma que no
importa si rompen las normas.
"Creo que la estrategia de la familia es tratar de calmar la molestia de la sociedad ofreciendo otra imagen de Dieg
porque hay un principio de Maquiavelo: 'si no convences, confunde', donde se busca influir en la opinión de otros
hacer una estrategia de neblina para que la verdad no salga a la luz si perjudica", menciona el psicólogo social
Jesús Castillo López.
Pero, ¿qué fue lo que transformó el repudio en admiración, si al conocerse de su masacre aquella mañana del 2
marzo, en el segundo sector de la Colonia Cumbres, los mensajes en la red reflejaban sólo irritación, dolor y
reprobación?
"Guardando las proporciones, no perdamos de vista que Hitler cometió crímenes monstruosos y tenía miles de
seguidores porque su perfil era el de un hombre poderoso, con amplia seguridad de lo que decía y hacía, aunque
estoy señalando que fuera correcto", reflexiona el sociólogo Juan Salvador Hernández.
Aunque siempre será complejo descifrarlo, añade, el culto y la exposición a la violencia que experimentan los
jóvenes puede ser un factor para que ciertos desorientados, con vacíos emocionales y espirituales, que buscan
líderes, se identifiquen con el perfil psicosocial de los asesinos que en los últimos años promueve el cine y la
televisión.
"Hablamos de un personaje solvente económicamente, atractivo, preocupado por su apariencia física, competitiv
insensible, que obtiene lo que quiere sin importarle cómo".
Hernández, ex presidente de la Asociación de Sociólogos en el Estado de Nuevo León, considera que la
insensibilidad entre la juventud es una actitud en expansión, en ocasiones fomentada por los padres que en su a
porque sus hijos sean exitosos, los apoyan, incluso, si atropellan los derechos de los demás.
"Aunque lejos de formar seres humanos integrales y con responsabilidad social están creando bombas de tiempo
una muestra preocupante es que se funde un club de fans para Diego porque nos habla de jóvenes con un vacío
existencial".
Fenómeno mediático
Además, el crimen se ha convertido en un fenómeno mediático que recibe una cobertura nacional como no se ha
visto antes, particularmente en las cadenas televisivas.
"Los medios electrónicos se han extralimitado y funcionan como tribunales", asegura José Carlos Lozano, directo
del Centro de Investigación en Comunicación del Tec.
"El caso se está litigando a través de los medios, se están haciendo especulaciones, dando declaraciones que no
proceden por el momento jurídico, y está sirviendo para roles protagónicos de abogados y familiares. No es nada
positivo".
El especialista en medios dice que el caso Santoy le recuerda el filme "Asesinos por Naturaleza", en el que los
medios convierten en celebridades a quienes transgreden las reglas.
Le sorprende sobre todo la "fascinación" de los medios, incluso nacionales.
"La 'fascinación' de los medios se debe a que fue alguien de clase media, en donde parece 'ser como nosotros', n
alguien de clase baja que por otras razones comete esos delitos", señala Lozano.
"De los medios nacionales, quizá una razón sea que hay actores del evento que están dispuestos a seguir
alimentando a los medios, como el padre de Santoy, que en el argot de ustedes (reporteros) 'da la nota'. Habla d
conspiraciones, dichos.
Pero, ¿qué hubiera pasado si las dos familias no hablan públicamente?".
Buscando la fama
Para el psicólogo social Castillo López, las personas que han hecho pública su simpatía por el asesino confeso
pueden estar también en busca de sus 15 minutos de fama.
"Pueden ser personas que en su vida cotidiana no tienen presencia a nivel social, y de alguna manera quieren se
partícipes, aun cuando sea un evento negativo.
"Igual pasa con las mujeres que le proponen casamiento a un condenado a muerte, es una forma distorsionada d
llamar la atención, y de seguir el falso estereotipo de que alguien atractivo tiene que ser bueno".
Mientras el fenómeno social y mediático y el proceso contra Diego Santoy Riveroll continúan, la psiquiatra Juárez
alerta sobre el riesgo de familiarizarse con la violencia y sentirse dentro de un reality show.
"No es posible que los jóvenes estén fijándose en si es guapo, o que justifiquen el coraje que sentía porque la no
lo cortó, como si matar fuese lo mismo que quebrar platos. Más allá de todo, no hay que olvidar que dos pequeño
fueron asesinados".
'aPoYo a dIeGo'
Mensajes que hablan de Diego Santoy como si fuera una estrella o un personaje ejemplar, y fotos de él
acompañado de su ex novia Érika o con su hermano Mauricio son parte de los fotologs que llegaron a la red en
apoyo al asesino confeso de dos niños.
Uno de ellos lo firma el grupo "Muertaz x Santoy" (sic) que convoca a una marcha: "KndA NiÑaZ!! aKi sUbIenDo0
fOtiTo0 eEeEi mAñAnA gRaN mArChA En aPoYo a dIeGo.. PlIz aCoMpAÑeNoZ!!! LlEvEnSeN uNa BlUsA nEgR
AgReGuEnOz!!".
Descifrando el mensaje: "¡Qué onda, niñas! Aquí subiendo fotito. ¡Heeeey! Mañana gran marcha en apoyo a Dieg
Please, acompáñenos! Llevensen (sic) una blusa negra. Agréguenos".
Con cinismo y ánimo provocador, estos jóvenes, en su mayoría mujeres, aseguran apoyarlo incondicionalmente
por lo bien parecido que les resulta.
Pocos son los que pretenden hacer reflexionar a los seguidores de Santoy, al mencionar los asesinatos que se le
imputan, mientras los más exhortan a unirse a un club oficial de fans, a la par que dejan mensajes a favor de éste
"Puede serrr asesino o celoso o lo ke kierann, peroo lo papi chuloo no se le kitaraaa nunkaa!!!" (sic) o "lástima qu
sea asesino, como quiera lo apoyo, la, la, la", son textos de cibernautas.
En total, en internet se crearon 12 fotologs que brindaban apoyo a Santoy, pero éstos fueron dados de baja el
miércoles.
En algunos foros virtuales, hubo quienes criticaron estos mensajes.
Tranquilidad inquietante
Las respuestas de Diego Santoy a un cuestionario de EL NORTE lo muestran como un joven que parece vivir
tranquilamente, a pesar del crimen que confesó. Éstas son sus palabras:
Un día ordinario, eso ya no existe para mí ¿o sí? Últimamente mis días han sido de todo menos eso, pero queda
los recuerdos, eso nadie me los puede arrebatar. Sólo queda la esperanza y el sueño de que un día pueda
recuperar todo aquello de lo que me encuentro privado por el momento".
Las noches se las dedicaba principalmente a Érika, con ella cenaba, convivía con su familia... Me despedía y me
encaminaba a mi casa, donde al llegar sabía que mis padres estarían esperando para desearme las 'buenas
noches' y de ser posible conversar un rato conmigo".
Somos una familia unida, en las buenas y en las malas, siempre procuraron mi bienestar, me han inculcado valor
son una fuente de buenos consejos y sabiduría".
Si tuviera la oportunidad, me agradaría: ir al concierto de Oasis, una cena de despedida con familia y amigos, llev
flores a cierto lugar...".
Con información de Daniel de la Fuente
Copyright © Grupo Reforma Servicio Informativo
ESTA NOTA PUEDES ENCONTRARLA EN:
http://www.elnorte.com/vida/articulo/624877/
Fecha de publicación: 30-Mar-2006
Documentos relacionados
Descargar