¿A quien le puede gustar su poesía? A un

Anuncio
«¿A quien le puede gustar su poesía? A un miserable motón de disidentes»
Extrait du Una ventana a Rusia
http://www.ventanarusia.es/A-quien-le-puede-gustar-su-poesia.html
Falleció el poeta ruso Andréi Voznesenski
«¿A quien le puede gustar su
poesía? A un miserable motón
de disidentes»
- El baile de Natasha - Lengua - Literatura -
Date de mise en ligne : Jueves 3 de junio de 2010
Description :
Así se despachaba la prensa soviética en los años 60 con Andréi Voznesenski y su poesía, al tiempo que llenaba estadios con sus recitales poéticos.
Una ventana a Rusia
Copyright © Una ventana a Rusia
Page 1/6
«¿A quien le puede gustar su poesía? A un miserable motón de disidentes»
Uno de los más importantes ídolos de la literatura de los años 60, Andréi Voznesenski, que en los últimos años
estaba gravemente enfermo y sufrió dos operaciones, falleció el martes en su casa, en Peredélkino. En Peredélkino
será enterrado, como así lo decidió su esposa, la escritora Zoia Boguslavskaia El viernes, 4 de junio, en la Casa
Central de los literatos será expuesto el féretro de Voznesenski para su última despedida.
Estandarte de independencia
Voznesenski fue una enorme personalidad poética y política, asegura el escritor Víctor Erofeev, que junto con
Voznesenski hicieron en samisdat [1] la antología literaria Metropol (1979).
"Su presencia nos fortalecía mucho y con su autoridad teníamos como una barricada. Andréi transformó la palabra
rusa, sacándola de las cárceles soviéticas", - recuerda Erofreev.
«Andréi transformó la palabra rusa, sacándola de las cárceles soviéticas».
Según sus palabras, el carácter poético y político de Voznesenski se construyó no sólo de sus mismos textos sino,
también, de cómo recitaba su poesía, transmitiendo su energía al oyente, y cómo reaccionaba la sala.
"No en vano, precisamente Jrushchev apuntó hacia él sus propios puños. Por algo fue un símbolo de la libertad
rusa, que resistía, se atrincheraba en su entusiasmo y siempre estuvo del lado de los independientes", - acentuó
Erofreev.
"En aquellos tiempos, los poetas reunían a miles, decenas de miles de personas. Entonces, la sociedad se
preguntaba hacia dónde iba", - dijo Iuri Liubímov, director artístico del teatro Taganka, que hizo dos espectáculos
legendarios sobre textos de Voznesenski, con la participación de Vladimir Vysotski, Antimundos (1965) y Cuide su
personalidad (1970).
"En aquellos tiempos, los poetas reunían a miles, decenas de miles de personas. Entonces, la sociedad se
preguntaba hacia dónde iba"
Liubímov explicó que Voznesenski, al igual que Bella Ajmadúlina, Evgueni Evtushenko y otros conocidos poetas
de aquellos tiempos - "gente muy inteligente y talentosa" - tenía sus propias ideas, hacía frente a las cosas, pero
esto fue hace mucho tiempo.
El sacerdocio del siglo atómico
El escritor y publicista Dimitri Býkov asegura que la personalidad de Voznesenski tiene menos significado que sus
versos: El poeta vivió, de forma sorprendente, una vida auténtica e íntegra, lo que en nuestro siglo se considera
como un milagro.
"No puedo acordarme de su generación, a la que no hay que echar culpa de absolutamente nada. Incluso en la
tribuna, cuando le gritó Jrushchev, él se las ingenió para hablar con una dignidad extraordinaria, aunque a ojos de
todo el mundo había tenido lugar sobre él un ensañamiento verdaderamente histórico. Esto, y en lo que respecta a
su comportamiento en los años 80 y 90, cuando era mucho más difícil mantener ciertas referencias morales, porque
Copyright © Una ventana a Rusia
Page 2/6
«¿A quien le puede gustar su poesía? A un miserable motón de disidentes»
en general se perdieron. Pero su brújula moral, como siempre, se mantuvo irreprochable", - dijo Bykov.
"Creo que siguió una religiosa, litúrgica tradición, porque en esto estuvo orientado gracias a la religiosidad de su
familia, lo que es el sacerdocio del siglo atómico", - añade.
«Cuando le gritó Jrushchev, él se las ingenió para hablar con una dignidad extraordinaria».
El escritor Andrei Bitov está convencido de que el nombre y el apellido de una persona determinan su destino.
"Andrei, nombre de referencia, y Voznesenski, nombre gentilicio, se unen desde el mismo comienzo con palabras
admirables, con resplandor y rayos de luz. Y ahora su nombre se une definitivamente con un gentilicio, ya que
Voznesenski, sin duda, pertenece al linaje sacerdotal. Y esto es la ascensión", - dijo Bitov
Palabras hechiceras
Andréi Voznesenski enalteció su país, su cultura y su lengua, asegura el director de cine Mark Zajárov, que realizó
el famoso espectáculo musical Juno y Avos (1981) con textos de Voznesenski.
"Sabía relacionarse con las palabras un poco a su manera, como ningún otro: las atornillaba, las batía, las
hechizaba con cierta forma mágica. Sus palabras se convertían en angulosas, o en chamuscadas, o afectuosas,
trayendo la esperanza o la negación", - dijo Zajárov.
"Compuso tales versos, que lo elevaron a una órbita sublime. Pasó por la desgracia, la incomprensión, la
persecución, por todo tipo de dificultades, por las que conviene hacer pasar al verdadero poeta ruso y, así, alzarle a
la cima del pensamiento poético", - añadió el director.
Un ramo de flores que no se marchita
Al mismo tiempo, Voznesenski era conocido no sólo como un sútil poeta, recibiendo la bendición del mismísimo
Pasternak, sino también como autor de populares obras de variedades, como por ejemplo Un millón de rosas rojas,
escrita con Raimon Pauls por encargo de Liubov Dubovtsevoi de radio Maiak.
"Inmortalizó su nombre junto con su obra, y en mi alma a veces no se marchita ese millón de rosas, que él me
regaló", - confesó Alla Pugachova, agregando, que el fallecimiento de Voznesenski significó para ella una gran
pérdida.
«Millón de rosas rojas», cantada por Alla Pugachoeva
También para Raimon Pauls ha sido un gran golpe la muerte de Voznesenski. "Es un golpe para toda la cultura
rusa. Voznesenski fue un gran poeta y un auténtico intelectual, daba gusto relacionarse y trabajar con él y yo lo
respetaba mucho", - dijo Pauls.
El poeta rockero
El compositor Alekséi Rybnikov, que escribió la ópera-rock Juno y Avos a propuesta de Mark Zajárov, afirma que
Copyright © Una ventana a Rusia
Page 3/6
«¿A quien le puede gustar su poesía? A un miserable motón de disidentes»
Voznesenski fue en los años sesenta algo menos que un ídolo, como John Lennon o Paul McCartney.
"Él, como entonces aparecían los Beatles, fue un peculiar poeta-rockero, llenando estadios no menos que los
Beatles", - señaló Ryvnikov, añadiendo que por este motivo Voznesenski se convirtió en una persona tierna,
generosa e intelectual.
"Ahora me gustaría mucho componer música y hacer que tuviera textos de Voznesenski", - confesó el compositor.
Doloridos impulsos
«Nos escribimos uno al otro varias confidencias y en mis confidencias escribía que aventajaba a Andréi. Pero me
equivocaba. La persona no puede saber esto», - se confesaba Bella Ajmadúlina a través de las lágrimas,
añadiendo que compadece a todas las personas que amaban a Andréi Voznesenski y, sobre todo, a su viuda, Zoia
Borisovna Boguslavskaia.
"A todos quienes amaban y aman a Andréi, les envío un saludo de todo corazón, mi consideración y mis fuerzas de
la razón y de mi alma, así como de todos mis doloridos impulsos", - dijo Ajmadúlina.
A Zoia Boguslavskaia le iban llegando a su domicilio muestras de condolencia del presidente de Rusia, Dimitri
Medvédev, del primer ministro Vladimir Putin, de parlamentarios rusos y de diversas personalidades. De todo el
mundo le transmitían palabras de pesar, desde Francia hasta Georgia,
Biografía
Andrei Andreevich Voznesenski nació en Moscú el 12 de mayo de 1933 A los 14 años envió sus versos a Boris
Pasternak, quien le invitó a su casa. Así se determinó el futuro de Vosnesenski. Sin embargo, la verdad es que no
estudió literatura sino arquitectura, cuyo final festejó con estos versos: "¡Adiós arquitectura! Arded ampliamente, los
establos de amoríos, los clubs de paraíso en estilo rococó…"!
Voznesenski empezó a publicar en 1958 y enseguida sufrió una áspera crítica. En 1963 en un encuentro con
intelectuales en el Kremlin, Jrushchev en un arrebaro le gritó: "¡Coja su pasaporte y lárguese de aquí, señor
Voznesenski!" Sin embargo, la desgracia no fue definitiva: al final, Voznesenski tuvo la posibilidad de, no sólo
publicar, sino también de viajar al extranjero, a Francia, Alemania, Italia, EE UU, donde le valoraban con elogios y le
traducían mucho. Durante sus viajes, Voznesenski conoció a Arthur Miller y Marilyn Monroe, Allen Grinsberg,
Jean-Paul Sartre, Pablo Picasso y Martin Heidegger.
En 1964 salió publicada la colección Antimundos que, un año más tarde, se convertiría en una obra de teatro, en el
Taganka; en 1966, El corazón de Aquiles, más adelante, en 1970, La sombra del sonido; en 1972, La mirada; en
1974, ¡Dejad salir al pájaro!; en 1975, La biológica hoja de roble; en 1976, El artesano de los vitrales; en 1979, La
tentación.
En 1979, Voznesenski tomó parte en la antología literaria en forma de samisdat, Metropol.
A principios de los 80 el poeta empezó a escribir prosa. En 1982 publicó la novela O; en 1984, el libro El maestro del
espíritu. Obras en prosa y en poesía, en 1987, el libro Rov. Versos y prosa; en 1990, Axioma de una misma
demanda; en 1991, Rusia, Poesía.
Copyright © Una ventana a Rusia
Page 4/6
«¿A quien le puede gustar su poesía? A un miserable motón de disidentes»
En 1968 apareció la primera obra musical con textos de Voznesenski, Poetoria de Rodion Shchedrin, que el mismo
compositor definió como «concierto para un poeta con acompañamiento de voz femenina, coro y orquesta sinfónica
». En 1981 Aleksei Rýbnikov compuso, con textos de Voznesenski, la ópera-rock, Juno y Avos y Mark Zajárov la
llevó a la escena del teatro Konsomól Lenin.
Andrei Voznesenski experimentaba en cualquier ámbito artístico. Creaba lo que denominaba "videomy", en los que
los versos se simultaneaban con dibujos, fotografías, composiciones tipográficas, el texto se colocaba de una
determinada forma, por ejemplo, en forma de cruz (el ciclo Cruficijo).
Como reconoció Iuri Liubímov, hasta el mismo último momento estuvo cautivo de su interés por la vida. [2] [3]
•
•
•
•
•
•
•
Copyright © Una ventana a Rusia
Page 5/6
«¿A quien le puede gustar su poesía? A un miserable motón de disidentes»
•
•
•
•
•
[1] Publicación y propagación ilegales en la URSS de obras literarias; literalmente autoedición.
[2] Material original en ruso.
[3] Todas la fotografías son de RIA Novosti.
Copyright © Una ventana a Rusia
Page 6/6
Descargar