¿Por qué las personas querían matar a Jesús? El plan de las personas era deshacerse de Jesús, pero el plan de Dios fue que Jesús muriera para salvar a los creyentes. Mientras Jesús vivió en la tierra, sus milagros y enseñanzas probaron que él era el Hijo de Dios enviado para buscar y salvar a los pecadores perdidos. Pero no todos los pecadores creyeron en Jesús. ¡Algunas personas lo odiaron! Esas personas querían matar a Jesús porque ellos se negaron a dejar sus pecados y se negaron a creer que Jesús era el Hijo de Dios enviado para salvar a los pecadores que creyera n en él. (Juan 3:19, Juan 8:24). Por qué Dios permitió que las personas lastimaran a Jesús? Actualmente sabemos que el plan de Dios era que Jesús muriera en la cruz. Dios permitió que la gente lo crucificará porque el planeó esa muerte para Jesús para que de esta manera tomara el castigo por el pecado. “Porque la paga del pecado es muerte, pero la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro” Ro. 6:23 Cientos de años antes de que Jesús naciera, Dios dijo en su Palabra, la Biblia, que su Hijo sufriría y moriría para pagar el castigo reservado para los pecadores. En la parte de abajo lee acerca del plan perfecto de Dios en la Biblia. Versículos clave de la Biblia ”Jesús el Nazareno, varón confirmado por Dios entre ustedes con milagros, prodigios y señales que Dios hizo en medio de ustedes a través de él, tal como ustedes mismos saben. Este fue entregado por el plan predeterminado y el previo conocimiento de Dios, y ustedes lo clavaron en una cruz por manos de los impíos y lo mataron. Pero Dios lo resucitó, poniendo fin a la agonía de la muerte...” Hch. 2:22-24 ”Porque él nos libró del dominio de las tinieblas y nos trasladó al reino de su Hijo amado, en quien tenemos redención, el perdón de los pecados. Él es la imagen del Dios invisible... El es también la cabeza del cuero que es la iglesia. Él es el principio, el primogénito de entre los muertos, a fin de que él tenga en todo la primacía. Porque agradó al Padre que en El habitara toda la plenitud (de la deidad) y por medio de El reconciliar las cosas consigo, habiendo hecho la paz por medio de la sangre de su cruz por medio de él, repito, ya sean las que están en la tierra o las que están en los cielos. ” Col. 1:13-20