DEFINICION

DEFINICION
Los carbones corrientes, procede^ntes irrdustrialmente de la pirogenación o d^estilación seca d!e
materias orgánicas, paseen unas propi^ed-ades especiales, de que haremos rrtención al estudiar su
poder absorbente, que bastan par sí mismas para
hacerlos aptos para muchas aplicaciones clel arden de las que aquí vamos a considerar: Es más :
estimamos, dentro d'e lo pos'ble, que estos carbones, tales como la industria los coneigue ordinariaivente, con tal quc su fabricación sea ,reciente,
muestran frecuen.emente mayor eficacia para los
ref^eridos ^empleas que los realmente activos, pero
vi^ejos, hasta el punto d^e que ^sería, a nuestro juicio, verd^ade^ramente int^eresante proceder a unra
d^etenida ^omparación de sus potencias retentivas
corre^spon^di^entes, ya que si nuest:ros presen^timientos fueran ciertós podrían adoptarse medidas altamemte ben^efic:^osas para ]a seguridad p^esso^nal y
^
para la ^e ^onomía nacional.
Desde hace más d'e cuatroci^en^tos años, en efecto, se ^éonoce y emplea la propiedad que pos^ee el
carbbn de mad^era d^e d^ecolorar, como asimismo
-ase conocía también ]a de apoderarse de los olores
desagradables, ^eliminándolas del ai^re ambiente.
El poder decolorante del negro animal o carbón
animal, pracedente de la carbonización ^d'e las hue.sos en rccipiente cerrado, fuera del contacto del
aine, es conocidb también desde hace mucho ti^empo; de aquí sc dcriva su aplicacícm más importante, pues indcpendienteme^ate cle otras prop`eclad^es, coma la de reten•er, por ejemplo, algunas sales disueltas (acPtato de plomo, etc.), tien^e la de
absorber, sin destruirlas, mat^erias colorante5 d•e
origen orgánico. En r785 llamó Lowitz la atención
sobne las prapiedad'^es absorberntes del carbórn vegetal, y en F794 fué éste ya utilizado en una refinería d^e azúcar inglesa. En r8ta se observó el
pode^r decolorante del carbón de hu^esos, y en i836
indicó Btittcher que el cok de lignito tenía propiedades decolorantes. Debussy dió en i8z7 diversos
métados para aumentar el pad^r decoloram.te del
carbón vege^tal. Los procedirnientos d^e activa^ción
no alcanzaron importancia hasta que R. V^ Ostreyco (t^i) carbanizó la madera baj^a la acción simultárnea de vapor de agua o C02, a bien activó el carbón veg,etat con éstas sustancias. A partir^ de los
primenos años del siglo actual ha comenzado una
serie de astudias sistemáticos sobre el poder decolorante y absarbente ^de los carbones de origen argánico, cuyas cons^ecuencias han sido el descubrimiento de los llamados "carbones activos", dotados de propieda^des reten,tivas d^e gases y productos disueltos verdaderaménbe extnaordinarias. Lns
^drbonea activaa permitieron durante la guerra
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europea cle 19T4 la construcción de ^efieaces máscaras de protección contra los denominados gases
asfixiamtas, que tan^tas y tantas vidas salvaron.
Hasta 19Ts, aproximad;amen.te, los carbones activas eran, par lo general, sólo emgleados como
decolor^ntes, y algunas veces también para la absorción d^; gases y sustancias alorosas. A consecuencia ^iel empleo de las sustancias químicas
de guerra, durante la guerra mundial, se emprendió en casi tados los países que tomaron parte en ella la fabriración d^e carbón para máscaras
can^tra gas^e^s, al cual impusieran cond'iciones especíales por lo que s^e réfiere a granulación, dureza
y^eficacia. De aquí sali^eron los a^ctuales carbones activos, qu^e, como ve^remos después con detall^e, tienen ^exte.nsa aplica.ción pa.ra la recuperación
de vapares (aloahol, éter, bencina) del aire, para
l;a obbenci^ón d^e benzol del gas del alumbrado,
para la separacion de la gasolina d^el gas natural, etc., e^c.
Se ha d^escubierto y patentaçío una gran can.tidad de prooedimientos para la fabricación de^ los
carbones activos. Ello es d^ebido a qu^e casi todas
las materias de arigen vegetal y algunas de origen animal pueden convertirse en carbon^es activos, más o menos buenos, por l^a acción ^d^el calor
y de las reactivos químicos.
Los carbones a^ctívos, tal coma los produce la
indu5t:ria en la actualid^ad, se presentan bajo dos
aspectos: o bi^en ^en fo,rma d^e polvo fino rvegro,
cuando se los destina al tratarniento de líquidos, o
hien en farma de granitos o trozos, cuando se los
l^a dc eii^t^l^a:^^ l^^u•a <<bsorber ^;as^es o vápores que
han d^e a1ra^^és^Lr cap<is rclati^•am^nte gruesas de
carbón acti^^o. Su reaccirrn ^suelc ser neutra; pcro
a veces es ligerani^nte alca]ina o ^^c;da, d^ebido a
que se han en^l.>leado ;íiralis o ^rirlos, r^esp^e^ctiva-^
mentc^ en su fabr:cación. Las carbones act;vos
c]in^iinail Iz^s cnlores, o'cnes, vapores y divcrsas
iminuczas de ias soluci^.vcs y ga^es, siencío, por
t^tnto, comn vcr^mo^; am^li^iuente, suscep,ibles de
muchás ahlicaciones.
Ia "carbcyn activo", fr^ecu^enteine^ite llamado
ta^Yibién "n:g^ro activo", ,es„ ^con^^o resunl^en, , un
producto cuya sola denouiinación basta para definirlo de un modo bien preciso.
Es un "carbón", como tai^tas otras vari^eda^des
de esta sustancia que conocen^os, 1>ero que, mCrced a la intervención de ciértos procesos es^eciales durante su procíucción o después de é,ta,
muestra manifiestament^ exaltadas sus cualidades
absorbentcs, y pcr ello no es ya un carbón ordinario, sino "activo". Sn poder absorbente es muchas
veces mayor qtte el ordinario.
A título de ejcnlplo insertamos la siguiente tabla que cla el Dr. L. Blas:
Sin
e^tivaclón
Con^
actlvaclón
StIQr311or1t1 ..........................
I,5
Norita .................................
Carbón de coco :.................
Idem de chopo .....................
Idem de orujo .....................
Nollín de gas ........................
5^A
^,5
r^o
0^4
o,R
2.o
38,0
19,5
19,0
c^,3
Tq,o
- ii
Pcl uiisn^o modo cluc un bonibre dc c^i^tliÉiozi^'s
normales es capaz d^ levantar o de'"árrastr„^r 'ún
^leter^uinado peso de una n^ateria, y puéde au^ment,cr e^ti-aordinariamcnte esta ca^aci<la^^ ^si se son^cte a un previc^ J^eríoclo racional t^'^e, E'^^ilrenariiiento y gin^uasia, u^i .•arb<ín cort^e^ite es susce^tible de manifestaa- noiaL'emente ^a^niplíad^^ ^ stts^
tacultades absorbentes al tratarlo op^rtttn^arnente
eu coudiciones adecuadas. Así, pues, existe una difcrencia semejatite^ entre d^o^s hombres, uno fuerte y
otro débil o normal, frente a ca.ntidades de materia que pueden mover, y entre dos carbones, uno
activo y otro corriente o inactivo, frente a cantida^ies de sustancias cfue son capaces de retener.
Así, por ejemplo, la relación que existe entre
la poten^cia decolorante de carbón de huesos no
preparado y la del activa ^lo con potasa es dé i: 45^
y en ^el mismo sentido, atu^que en grado diverso,
se aumenta con tan simp]e tratamiento el efecto
de otros deco}orantes carbo^nosos.
En resumen de cuentas, carbón activo es la denominación que se da a cuerpos que contienen
carbono y que tienen un gran poder absorbénte.
Contienen hasta 97 por ioo de carhono, y, aclemás, hidrógeno, oxíg,eno, cenizas y, eventualmente, también algo de nitrógeno. Sin embargo, paréce ser due la constitución química no es de la
mayor importancia para la eficiencia de ^os carbones, pues carbones activos fabricados según distintos n^étodos, y que tienen igual pader absorbente, pueden tener una composición química distinta.
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Su pc>der absorbente está más bien determinado
por su estructura porosa de gran superficie y, probab'emente, por el contenido de átomos de carbono no ordenados (carbono amorfo), por el grado
de su desordenación y por su situación con respec.to a la superficie.
E1 carbón activo tiene, entre otras, ]a propiedad de absorher acaso la totalidad de los gases
tóxicos conocidns, excepto ei óxido de carbono.
La importancia de los carbones activos o activados, tanto en la ^uerra (en fines siempre altamente humanitarios) como en la paz, es universalmente reconocida, y, sin duda, lo será cada día
más. Buena prueba de estas afirmaciones nos la
da la ereciente actividad de trabajo en los laboratorios especializados d^el mundo entero, encaminada a la resolución del ma^no problema contenido
en las pa^ahras que encahezan este trahajo, problema de difícil resolución eficaz en muchos casos,
máxime cuando sobre é.l ntmca puede decirse la
última pa^abra, frente a las pro^resívas necesidades de la industria moderna y al desarrollo paralelo, y a menudo, más sencillo, de ta preparación
de 1os agresivos, que constituyen el fundamento
de la ^uérra qtrimica.
I.a eficacia de este producto es dehida a su
importantísima propiedad de "absorbe^r" y "adsorber", como ya hemos indicado, ^ases, vapores,
líquidos y las impurezas y gérmenes de los mis- .
mos, siemnre de molécula mavor que ellos. Esta
"adsorción" es, cama veremos, una especie de
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atracción mec^ínica que ejercen los carboncs, gracias a la gran extensión superticial que ofrccen (la
del carbón se l:,a incretnentado extraordiiiariamente con la activasión y, por tanto, el poder absorI^ente del pro^lucto matcr3al) y a su estructura porosa y de iorma laberíntica.
Estos carbones son tatnbién activos desde el
punto d^e vista químico y actúan oxidando y reduciendo, tal vez porque retienen oxígeno e hidrógeno en su superficie y lo liberan luego en estado de finísima división, acaso atomizados, en el
denominado "estada naci^ente". Así, pcr ejemplo,
se sabe que algunos cuerpos sobre los que el hidrógeno en ^corriente gas^osa no ejerce acción,
pueden ser hidrogenados o reducidos cuando interviene sobre ^ellos una mezcla capaz de producir este gas, siendo, no 'obstante, en los dos casos
la misma materia hidrógeno la que actúa; esta materia hidrógeno presenta en uno u otro caso dístinta actividad química, y esto ^es debido a que en
el segundo caso no sólo acciona dicha materia
hidrógeno, sino la energía que se desprende al
ponerse en libertad el gas, hecho que se .expresa
diciendo que el "hidrógeno naciente" (H) producé la redúceión, y el "hidrógeno molecular" (H,)
no verifica ^esa reacción. Y el hidrógeno molecular, como posiblemente sucede también al oxígeno
con idént'vcos resultados, se activa, en efecto, en
preséncia de catalizadores adecuados, que son metales muy divididos (Ni, Cu, Pt, Pd) y también
acaso en presencia del carbón activo, que, co.mo
veren^os, tiene ^recu^ntes aplicacion:^s de orden
cataiítico.
Aunqu^, conio antes hcn^os n^anifestado, ee conocida desde l^ace n^ucl^os afios la propiedad absorLente del carbón, iué ya bi: n señalada por
Fontana y Schee'e en 1^^^ y más tarde por Thenard cn 1827, si bicn su gran importancia data
de Ia guerra de I^I^}, cou^u nicdio clc defcnsa contra fos agresivos químicos empleados por los dos
ejércitos enemigos. Farale!amente creció su elevado ínterés índustríaL
CAR$ONES ACTIVOS Y CARBONES ACTIVADOS
Aunque, por regia general, estas dos exprésiones suelen confun^dir^e por muchas de los autores que se han ocupado de estas cuestiories, usándolas de un modo índistinto, estimamos nosotros
deben corresponder a proditctoS de diversa procedencia, por lo que a stt activacíón atañe, y en esta
inteligencia las hemos de emplear, ccn lo quc, por
otra parte, ganará también la puntualidad de nuestra expresión.
Entenderemos por "carbones activos" aquellos
que nacen, por decirlo asf, ^on esta preciosa eualidad. Se ol^tienen tratando la n^ateria prirna, de
que ^e Produce el carbón, con detenninados reactivos y sometiéndo'a después al proceso de carbonización, con la que los productos logrados resultan, des^le su nacimiento, con potentes facultades
de absorción.
, Son, en definitiva, carbones depositados sobre