AFRICA DEL NORTE Y africa OCCIDENTAL BURKINA FASO Según el 4° Censo General de Población y Vivienda (diciembre de 2006), Burkina Faso tiene una población de 14.017.262 habitantes que comprende unos 60 diferentes grupos étnicos. Los pueblos indígenas son los pastores peul (también llamados fulbe duroobe egga hodaabe, o, más comúnmente, duroobe o egga hodaabe) y los tuareg. No existen estadísticas fiables sobre el número exacto de pastores en Burkina Faso. Se encuentran en todo el país pero se concentran, especialmente, en las regiones del norte de Séno, Soum, Baraboulé, Djibo, Liptaako, Yagha y Oudalan. Los peul y los tuareg viven, generalmente, en áreas geográficamente aisladas, secas y marginadas económicamente y son, a menudo, víctimas de abusos contra los derechos humanos. Los pastores nómadas de Burkina Faso, aunque inocentes de cualquier delito, han sido objeto de numerosos actos de violencia: sus casas quemadas, sus pertenencias robadas, sus animales muertos o desaparecidos, niños y ancianos asesinados, los cuerpos abandonados a la descomposición y sus familias impedidas poder recuperarlos. En algunas regiones de Burkina Faso, los pastores peul se están convirtiendo, gradualmente, en sedentarios. Sin embargo, muchos siguen siendo nómadas debido a las migraciones estacionales y los viajes de cientos de kilómetros a países vecinos, en particular, Togo, Benin y Ghana. A diferencia de otros pueblos de Burkina Faso, los peul son pastores nómadas cuyas vidas se rigen por las actividades necesarias para la supervivencia de sus animales, y muchos de ellos aún rechazan cualquier actividad no relacionada con la cría extensiva de ganado. La Constitución de Burkina Faso no reconoce la existencia de pueblos indígenas. En la práctica, si bien garantiza la educación y salud para todos, las poblaciones nómadas sólo gozan de estos derechos en una medida muy limitada, debido a la falta de recursos e infraestructura adecuada. 391 392 IWGIA – EL MUNDO INDIGENA – 2011 Los pueblos indígenas y la propiedad de la tierra A través de sus desplazamientos, los pastores nómadas egga hodaabe de Burkina Faso han abierto caminos regulares donde pastan sus animales. Sin embargo, su debilidad organizativa, el fuerte aumento demográfico de los productores agrícolas y los crecientes obstáculos a los derechos a la tierra de los pastores,1 les impide establecer rutas trashumantes o tierras de pastoreo estables. La Ley Nº 034-2009/AN del 16 de junio de 2009 sobre el régimen de tierras rurales parece conceder gran importancia a los ganaderos, como puede verse en el artículo 75, que estipula que: El Estado y las autoridades locales pueden organizar programas especiales para asignar, en forma individual o colectiva, tierras rurales para su desarrollo en sus respectivos dominios, en beneficio de grupos de productores rurales marginados, tales como pequeños productores agrícolas, mujeres, jóvenes y ganaderos. Sin embargo, los pastores nómadas no consideran que las posibilidades que ofrece este artículo se refieran a ellos. De hecho, es difícil para los pastores nómadas obtener, individualmente, un área importante sin encontrar oposición, dado que el cuidado de sus animales requiere agua y no son lo suficientemente ricos como para poseer una fuente de agua permanente. Colectivamente, no están lo suficientemente organizados como para beneficiarse de la oportunidad que ofrece el artículo 75. Además, los pastores nómadas sólo pueden acceder a la propiedad de la tierra en el contexto del artículo 36, que establece que: Sin perjuicio de las áreas locales de recursos naturales de uso común que se identifican, y que se encuentran dentro del dominio de la comuna de que se trate, los siguientes casos podrán configurarse como prueba, en particular, de propiedad de la tierra: 1) el reconocimiento unánime por parte de la población local, especialmente de vecinos propietarios de tierras y autoridades locales tradicionales, de la condición de una persona o familia de propietario de facto de tierras rurales; 2) el desarrollo continuo, público, pacífico e inequívoco, como propietario de facto de las tierras rurales con fines de producción rural, por un período no menor a 30 años. De esta manera, el artículo 36 ignora el espíritu de la trashumancia, cuya base es la movilidad, y que ha sido reconocida, ahora, por los académicos internacionales como AFRICA DEL NORTE Y africa OCCIDENTAL 393 clave para la producción pastoral.2 El artículo, en cambio, parece señalar el fin del pastoreo trashumante. En el mejor de los escenarios, a los duroobe egga hodaabe no les quedará nada más por hacer que restringir sus movimientos a las áreas conocidas como zonas de pastoreo. Sin embargo, necesitarán apoyo para garantizar la viabilidad de sus modos de subsistencia en un país donde el agua llega a ser un bien escaso en determinadas épocas del año, y el acceso a ella es prácticamente imposible para pastores con unas pocas docenas de cabezas de ganado. Los pueblos indígenas y el derecho a la vida 2010 fue un año marcado por las represalias contra los pastores nómadas peul. Por ejemplo, en el norte de Benin, uno de los líderes ADCPM3 estuvo involucrado en el entierro de cinco pastores de Burkina Faso que habían sido asesinados. En el norte de Ghana, también, el último trimestre de 2010 se destacó por represalias que provocaron la pérdida de numerosas cabezas de ganado. Tal fue el caso de Moussa Sewngo, quien continúa buscando a sus 52 cabezas de ganado. Menos afortunado, aún, fue otro pastor que fue muerto a tiros. Al ser interrogado por la policía, su asesino declaró que lo había confundido con otra persona. En cuanto a Burkina Faso en sí, un artículo periodístico de Yelkabo Rodrigue Somé es ilustrativo a este respecto: 394 IWGIA – EL MUNDO INDIGENA – 2011 El sábado 23 de octubre de 2010, alrededor de las 11 en punto y en una operación de vigilancia, los agricultores atacaron a los ganaderos-pastores en el pueblo de Indini, comuna de Koti, provincia de Tuy (región de Hauts-Bassins). La razón fue, al parecer, el daño causado a los campos por los rebaños de animales pertenecientes a los ganaderos. La primera víctima fue un joven de 15 años, empleado por estos últimos, quien fue asesinado por sus propios padres, agricultores. Las otras dos víctimas, de 18 y 42 años respectivamente, eran ganaderos-pastores. Fueron asesinados a golpes de machetes y hachas.4 En otras palabras, los pastores nómadas siguen viendo violado su derecho a la vida. Sin importar lo inocente que puedan ser, se encuentran en riesgo debido a las acciones de otros individuos a los que ni siquiera conocen. Las autoridades administrativas y tradicionales continúan ignorando el aumento de la tensión, que representa una señal de las represalias por venir. Algunos artículos periodísticos consignaron, también, que los agricultores habían matado al ganado antes de dar comienzo de la “justicia” popular. Este signo de un inminente ataque debería haber alertado a las autoridades, de manera tal que el simple daño a un campo o la muerte de algunos animales no resultara en la pérdida de vidas humanas. Han tenido lugar, también, otras represalias pero han caído bajo el título de disputas por la tierra en lugar de por el pastoreo. Un ejemplo es el de Lefouba, “un pequeño lugar en la prefectura de Sapcé, provincia de Bam, en Burkina Faso, donde un grupo de productores agrícolas se organizó para arrasar una localidad de ganaderos: quemaron trece chozas y dos personas- una de ellas de edad avanzada- resultaron heridas”.5 Esto no provocó reacción alguna por parte de las fuerzas de la ley y el orden. La construcción de un movimiento de pueblos indígenas Desde su fundación en el año 2005, la ADCPM se ha interesado en los pastores nómadas peul que viven dispersos a lo largo de las fronteras de Burkina Faso con Benin, Togo y Ghana. Desde 2007 ha venido construyendo una red de información y sensibilizando a la opinión pública en relación con las represalias contra estos pueblos. En 2010, la ADCPM aumentó el número de sus reuniones, para este efecto, en forma de foros, especialmente en las provincias del sur de Burkina Faso y también en el centro norte y en el norte de Ghana. Estas reuniones se centraron en los derechos humanos y tenían por objeto permitir que los pastores obtuviesen una mejor com- AFRICA DEL NORTE Y africa OCCIDENTAL 395 prensión de las consecuencias de su marginación, en parte impuesta por los demás y en parte auto-impuesta. El 30 de diciembre de 2010, luego de dos días de recolección de información de los sobrevivientes de las represalias asesinas, se organizó un foro inicial sobre derechos de pueblos indígenas con los representantes de 30 aldeas en la provincia de Nahouri, Burkina Faso, 10 jefes tradicionales, 10 representantes de asociaciones y 20 líderes de los pastores nómadas, todos elegidos localmente. El foro fue inaugurado6 por el alcalde de la comuna Po -centro administrativo de la provincia- con el título “¿Cómo podemos poner fin, de una vez por todas, a las masacres de los pastores nómadas?”. También se organizaron reuniones para ayudar a estos pastores a obtener una mejor comprensión del concepto de pueblos indígenas. Estas reuniones se organizaron en Tambolo, en un asentamiento de pastores situado a 10 km de la frontera de Burkina con Ghana, luego en el centro (Tamalé) y al sur (Buipé) de la región norte de Ghana. En ellas, los líderes de los pastores tuvieron la oportunidad de asimilar el contenido de la versión peul (lengua de los nómadas) del informe de síntesis «Pueblos indígenas en África. ¿Pueblos olvidados?», elaborado por el Grupo de Trabajo de la Comisión Africana sobre Poblaciones / Comunidades Indígenas de África.7 El informe de síntesis explica el concepto de pueblos indígenas, estudia la situación de los derechos humanos de estos pueblos en África, y considera en qué medida la Carta Africana les ofrece protección. También proporciona información sobre el papel de la Comisión Africana en la protección de los derechos indígenas en África. Estas reuniones, organizadas en torno al concepto de pueblos indígenas y a la que asistieron los líderes de los pastores nómadas, podrían servir de base para el nacimiento de un auténtico movimiento indígena, no sólo en Burkina Faso, sino también en países vecinos. Algunas orientaciones futuras para el pastoreo en Burkina Faso El futuro de los pueblos indígenas en Burkina Faso, en particular el de los pastores nómadas peul que migran estacionalmente a través de las fronteras con Benin, Ghana y Togo será, en gran medida, producto de lo que ellos deseen: sus principales preocupaciones, en este momento, deberían ser la de organizarse y aprovechar al máximo las leyes de la tierra en Burkina Faso y otros países miembros de la ECOWAS (Comunidad Económica de Estados de África Occidental). De hecho, aún es posible para los pueblos indígenas vivir como pastores, yendo y viniendo desde Burkina Faso 396 IWGIA – EL MUNDO INDIGENA – 2011 a los países vecinos. Para ello, sin embargo, sus líderes tienen que estar organizados y ser conscientes de los desafíos que enfrenta el pastoreo en esta subregión de África, donde la población, en general, está aumentando rápidamente y pronto representará un obstáculo importante a la forma de vida trashumante de las comunidades de pastores. En conclusión, en 2010, la situación de estos pueblos no fue muy diferente de la de años anteriores en lo relativo a sus derechos humanos. Sin embargo, organizaciones de la sociedad civil convocaron a numerosas reuniones con el objetivo de favorecer el surgimiento de condiciones favorables para una convivencia pacífica entre pastores y agricultores, tanto en Burkina Faso y como en países limítrofes. Notas 1 2 3 4 5 6 7 Por derechos a la tierra de los pastores, nos referimos a un espacio delimitado que se reconoce como perteneciente a ellos, con evidencia respaldatoria escrita. IIED y SOS Sahel, Reino Unido, 2010: Modernidad, movilidad. El futuro de la producción ganadera en las zonas áridas de África, pág. 84. Asociación para la Protección de los Derechos y la Promoción de la Diversidad Cultual de los Grupos Minoritarios. http://www.lefaso.net/spip.php?article39144 http://www.lefaso.net/spip.php?article37190 En 2011, el mismo foro se llevará a cabo, también, en otras tres regiones de Burkina Faso. ACHPR y IWGIA, 2006: «Pueblos indígenas en África. ¿Pueblos olvidados?», por el Grupo de Trabajo de la Comisión Africana sobre Poblaciones / Comunidades Indígenas de África, Copenhague, pág. 31. Issa Diallo es investigador senior en el Centro Nacional de Investigación Científica y Tecnológica en Uagadugú. Es, también, presidente de la Asociación para la Protección de los Derechos y la Promoción de la Diversidad Cultural de los Grupos Minoritarios (ADCPM), reconocida oficialmente, desde 2005, por el Gobierno de Burkina Faso. El objetivo de la ADCPM es promover los derechos humanos y culturales, especialmente de personas pertenecientes a grupos minoritarios. Es, además, autor de artículos periodísticos sobre el conflicto étnico que implicó el asesinato de los peul en Burkina Faso.