I PREMIO INTERNACIONAL DE NOVELA NEGRA RBA 6 de septiembre 2007 Una novela de barrio, de Francisco González Ledesma, presentada a concurso bajo el pseudónimo de Paco Miralles. Sinopsis Una novela de barrio es, en síntesis, una historia de venganza. Dos ladrones atracan un banco en los años setenta y, en su huida, matan a un rehén, un niño de corta edad. La novela empieza cuando, en la actualidad, y con Barcelona como escenario, uno de los atracadores muere asesinado (Omedes). El otro atracador (Erasmus/Leónidas Pérez), sabiéndose el siguiente, tratará de adelantarse y matar a quien, sin duda, debe ser el vengador: David Miralles, el padre del niño muerto durante el atraco al banco. De manera inexorable, se desata una espiral de violencia y un singular policía (Méndez), medio jubilado y de métodos poco ortodoxos, intervendrá de manera decisiva para resolver el caso. Narrada con un estilo muy depurado, ágil y fluido, y con gran despliegue de recursos, entre los que destaca un humor cauterizador, nos encontramos ante una novela negra de excelente factura y con todos los ingredientes del género. Por medio de frases cortas, de fugaces puntos y aparte, de diálogos eficaces y de unas descripciones muy acertadas, el autor nos sumerge, pincelada a pincelada, en una trama sólida, redonda, que engancha desde la primera página y no decae en ningún momento, creando una atmósfera donde conviven de forma magistral la sordidez más extrema, la ternura detrás de los gestos, la miseria humana descarnada, la generosidad, la tragedia y el humor, la amargura… en definitiva, el gran abanico de las pasiones humanas. De lectura fácil, se lee de un tirón. Tiene ritmo, pulso, alternando momentos de acción con lúcidas reflexiones. Los perfiles de los personajes están trazados con la destreza y precisión de un cirujano: apenas con una frase o una línea de diálogo ya están perfectamente dibujados. La narración tiene fuerza, y rezuma ingenio y sensibilidad. La Barcelona que nos describe es un personaje más de la novela, una ciudad alejada de la postal turística y cultural, donde vibra la nostalgia por los tiempos en que los barrios eran barrios, y la contrasta con una urbe destruida por la especulación del suelo, invadida por inmigrantes, una ciudad en vías de perder sus señas de identidad con la desaparición de su memoria: los barrios. Y es en esta ciudad fría y oscura donde la figura del protagonista, Méndez —un gato callejero, sabio, experto, de vuelta de todo, irónico y descreído—, con un pie en el pasado y otro en el presente, adquiere los rasgos del héroe a su pesar, del filósofo que sabe que no tiene futuro, y que su mundo, el único mundo que él conoce, está condenado, quizá por fortuna, a desaparecer. En un brillante tramo final, la novela nos conduce hasta su desenlace, donde nos aguarda una última sorpresa, un giro inesperado. Y tras este guiño del autor, y pasar la última página, sabemos dos cosas: la primera, que Una novela de barrio es una historia sencilla, como todas las grandes historias; y la segunda, que acabamos de leer un clásico del género. Francisco González Ledesma nace en Barcelona, en 1927, en el Pueblo Seco, barrio proletario en la falda de la montaña de Montjuic. Empieza a escribir a los doce años, y a los quince a malvivir de la escritura gracias a su tío, Rafael González Martínez, que no sólo comparte con el joven Francisco su biblioteca y su interés por la literatura, sino que pronto acaba encargándole guiones de cómics. Con el dinero que obtiene de esta labor se paga los estudios de derecho, carrera que acaba en 1950, cuando entra como pasante en un conocido despacho barcelonés. Sigue escribiendo y comienza a estudiar periodismo. Y aunque como joven jurista llegará a recibir el reconocimiento del “Premio Roda Ventura", al abogado con mayor crédito moral de Cataluña, sus desavenencias con el régimen franquista acabarán en parte minando su vocación de jurista. En 1948, con apenas 21 años e innumeras obligaciones, se presenta al Premio Internacional de Novela, fundado por el editor José Janés. Resulta ganador del premio, otorgado por un jurado entre el que se cuentan Somerset Maugham y Walter Starkie. Sin embargo, la novela no se publica en España por cortesía de la censura franquista, que tacha al autor de ‘pornógrafo’ y ‘rojo’. Ledesma pasa a trabajar en la editorial Bruguera donde, como muchos escritores de su generación, colabora a destajo y en condiciones poco felices, pero donde también dice haber aprendido el oficio novelístico. Bruguera publica novelas populares de acción, del Oeste, policíacas. Y Ledesma las escribirá durante quince años, en los que se convierte en Silver Kane, pseudónimo con el que publica una obra del Oeste a la semana. Como ‘negro’, será el autor de unas cuatrocientas obras. Su segunda novela, Los Napoleones, del año 1964, obtiene la misma apreciación por parte de la censura que la primera, aunque se publica en 1977, acabada la dictadura. Cuando entra en vigor la Nueva Ley de prensa, González Ledesma abandona definitivamente la práctica del derecho para dedicarse al periodismo con la esperanza de que esta nueva legislación le permita lleva a cabo una labor digna. Se inicia en El correo catalán, y acabará siendo redactor jefe de La Vanguardia. En 1983 resulta finalista del Premio Blasco Ibáñez con Expediente Barcelona, la primera de sus novelas en las que aparece el Inspector Méndez, un sujeto que actúa a contracorriente, que descree de la ley y de la bondad de todos los seres, pero cree en la justicia y no deja de ser un humanista. Méndez, junto con la ciudad de Barcelona y los cambios que ésta irá sufriendo a lo largo de la carrera del policía, vistos a través de su propia memoria y la de los personajes que irá encontrando a lo largo de la serie, conforman el centro de lo que podría considerarse una poética y no sólo una temática. En 1984, el autor, incesante, publica no sólo otra entrega de la serie de Méndez, Las calles de nuestros padres, con la que se consagra el personaje, sino que obtiene el Premio Planeta con Crónica sentimental en rojo, una historia de amor, sangre y dinero. La dama de cachemira, Historia de Dios en una esquina, El pecado o algo parecido y Una novela de barrio, ganadora de la primera convocatoria del Premio Internacional de Novela Negra RBA, son por el momento los demás títulos de la serie Méndez. Pero en el mismo género cabe incluir 42 Kilómetros de compasión, Cine Soledad y Tiempo de venganza. Su novela Expediente Barcelona fue traducida y publicada por la prestigiosa editorial francesa Gallimard, lo cual le proporcionó un prestigio y éxito editorial en Francia muy superior del que goza en España, y hasta ahora sus novelas han aparecido publicadas en el país vecino antes que en el propio. Bajo pseudónimo (Enrique Moriel) ha escrito recientemente La ciudad sin tiempo. Francisco González Ledesma no sólo ha obtenido premios literarios como los mencionados y, en dos ocasiones, el premio Mystère a la mejor novela extranjera publicada en Francia por La Dama de Cachemira (1989) y Cinco mujeres y media (2007), además de los que pueden hallarse más abajo en la relación de su obra, sino también numerosos reconocimientos por su labor como abogado y periodista. Sobre él ha escrito un colega, Paco Ignacio Taibo II (…) sigue escribiendo como si fuera un joven rabioso. Continúa apaleando los molinos. Ha pescado un segundo aire que da miedo. Sus historias cada vez cruzan mejor ese sutil puente entre el pasado y sus heridas y el presente y sus descaros. No pudieron doblarlo en el pasado, no han podido integrarlo en el presente. Es uno de los grandes. Es entrañable. Amigo, compañero, colega, justiciero camarada, Paco. Obras La ciudad sin tiempo, 2007 (Publicado con el pseudónimo de ‘Enrique Moriel’) Historia de mis calles, 2006 Tiempo de venganza, 2003 El adoquín azul, 2002 Cine Soledad, 1993 Los símbolos, 1987 42 Kilómetros de compasión, 1986 Soldados, 1985 Los Napoleones, 1977 Sombras viejas, 1948 Serie Méndez Una novela de barrio, 2007 Primer Premio Internacional de Novela Negra RBA El pecado o algo parecido, 2002 Premio Hammett Historia de Dios en una esquina, 1991 La Dama de Cachemira, 1986 Crónica sentimental en rojo, Premio Planeta de Novela, 1984 Las calles de nuestros padres, 1984 Expediente Barcelona, 1983 Obras en colaboración Negra y Criminal, 2003 Negro como la noche, 2002 LA CONVOCATORIA, EL JURADO Y LA DOTACIÓN DEL PREMIO El pasado 15 de marzo de 2007, en la ciudad de Barcelona, Joaquin Palau, Director General de RBA Libros y Anik Lapointe, directora editorial, anunciaron la convocatoria del Primer Premio Internacional de Novela Negra RBA como una de las iniciativas que tiene previsto poner en marcha el Grupo con el objetivo de consolidarse como especialista y líder del género negro, pues ya posee uno de los catálogos de novela negra más importantes en lengua española. Según Joaquim Palau «todo grupo editorial de prestigio posee un premio de novela, y nosotros hemos elegido aquella temática en la que tenemos más experiencia y una trayectoria reconocida». El premio, que se convocará de forma anual, tiene clara vocación internacional. Podrán participar obras originales e inéditas de escritores de cualquier nacionalidad y escritas en cualquier idioma siempre y cuando se presenten en castellano o en inglés. También el jurado estará formado, cada año, por cinco especialistas internacionales del género negro. Este año, el jurado ha estado formado por Soledad Puértolas, Suso de Toro, Lorenzo Silva, Antonio Lozano y Anik Lapointe, y la obra ganadora, Una novela de barrio, de Francisco González Ledesma, se ha elegido entre un total de 180 manuscritos presentados, provenientes de España, Argentina, Estados Unidos, el Reino Unido, México, Puerto Rico, Colombia, y otros países de América Latina. El premio tiene un único ganador que además de la publicación de la novela obtendrá 125.000 €, lo que convierten a este premio en el mejor dotado del mundo en este género. De este modo, RBA cumple con el objetivo de normalizar y prestigiar la novela negra que pese a tener una gran cantidad de lectores siempre se ha visto menos valorada por la crítica. El Premio Internacional de Novela Negra RBA ha nacido, pues, con la ambición de convertirse en un clásico de prestigio y cuya novela ganadora sea uno de los libros más esperado del otoño. A PROPÓSITO DEL JURADO Soledad Puértolas: (Zaragoza, 1947). Estudió Periodismo y Ciencias Políticas. En 1979 empieza a darse a conocer como escritora cuando obtiene el Premio Sésamo con El Bandido doblemente armado. En 1989, ganó el premio Planeta con TQueda la nocheT y en 1993, el premio Anagrama de Ensayo con La vida oculta. En 2000, fue galardonada con el premio NH al mejor libro de relatos con Adiós a las novias. En el 2001, obtuvo el premio Glauka 2001 en reconocimiento a su obra literaria y a su trayectoria intelectual y personal en el ámbito de la cultura. En 2003, recibió el Premio de las Letras Aragonesas. Forma parte del Patronato del Instituto Cervantes. Suso de Toro: (Santiago de Compostela, 1956) este escritor gallego, licenciado en Arte Moderno y Contemporáneo, lleva veintidós años dedicándose a la literatura. Tiene en su haber novelas, cuentos y ensayos literarios, además de frecuentes colaboraciones con la prensa, la televisión y el mundo del teatro. En 1987 recibió el Premio de la Crítica Gallega por Polaroid. El Premio de la Crítica Española le fue concedido en 1993 por Tic-Tac y en 2001 por No vuelvas. En 2003 fue galardonado con el Premio Nacional de Narrativa por Trece campanadas. Sus libros han sido traducidos a varias lenguas y ha sido objeto de estudio en diversas universidades europeas. Lorenzo Silva: (Madrid, 1966). Estudió Derecho en la Universidad Complutense de Madrid y ejerció como abogado de empresa. Ha escrito relatos, artículos y ensayos literarios, pero es conocido principalmente por sus novelas. Con El alquimista impaciente, obtuvo el Premio Nadal en 2000. Esta novela es la segunda en la que aparecen los que quizá sean sus personajes más conocidos: la pareja de la Guardia Civil formada por el Sargento Bevilacqua y la cabo Chamorro. Otra de sus obras, La flaqueza del bolchevique, fue finalista del Premio Nadal en 1997 y ha sido adaptada al cine por el director Manuel Martín Cuenca. Antonio Lozano: (Barcelona, 1974). Es licenciado en Ciencias de la Información por la Universitat Autònoma de Barcelona. Cursó un doctorado en Literatura Comparada en la Universitat Pompeu Fabra y realizó prácticas en la revista Quimera y en el diario La Vanguardia. Desde 1997 es responsable de secciones de la revista Qué Leer, donde además realiza entrevistas, escribe reportajes y ejerce la crítica literaria. Tiene un apartado de recomendaciones literarias en el Magazine de La Vanguardia y colabora esporádicamente con los suplementos Èxit y Cultura/s. Asimismo, es autor de tres libros infantiles. Anik Lapointe: (Montreal, Canadá, 1964). Licenciada y mágister en Literatura Francesa por la Universidad de Montreal. Inició su carrera como editora en Éditions Québec/Amérique. En 1992 se trasladó a Barcelona para llevar a cabo una investigación sobre literatura catalana y se quedó en la ciudad, trabajando como periodista y traductora, antes de retomar la labor editorial en Quaderns Crema, donde estuvo dos años. En 1995 se fue al Grup 62 como editora de Edicions 62, además de dirigir una serie de narrativa de viajes y de no ficción para la editorial Península. Al fundarse la división literaria del grupo RBA en el año 2000, Anik aceptó el reto de crear nuevas colecciones de ficción y no ficción en español, entre ellas la serie negra. Desde el año 2004 es Directora Editorial de RBA y sigue siendo una lectora voraz de novela negra. A PROPÓSITO DE LA SERIE NEGRA La buena salud de la novela negra es un fenómeno global, felizmente inevitable. No ha hecho falta que España buscara sumarse a la tendencia: hay cosas que no se pueden evitar, como el gusto por la serie noir. Y así lo demuestran no sólo la consolidación de dos citas ineludibles para cualquier amante del género, como la Semana Negra de Gijón y BCNegra, sino la reciente proliferación de colecciones dedicadas a él en buena parte de los sellos editoriales del país. España parece haber superado el trauma del ojo que la observa, el recelo hacia el investigador, eso que para algunos le había impedido acercarse antes al género policial aunque, en cualquier caso, el investigador, en la novela negra, suela campear al margen de la ley. El auge de la novela de detectives también da cuenta de la madurez de nuestros escritores, de los herederos de Vázquez Montalbán y de maestros vivos como Francisco González Ledesma, toda una casta de autores como Lorenzo Silva o Alicia Giménez Bartlett y de escritores por conocer, como ha demostrado el éxito de esta convocatoria. Y si hay sitio para ellos, y si cada vez habrá más lugar, se debe a que esa madurez la comparten los lectores. A un fenómeno global, RBA sólo puede responder con otra vuelta de tuerca a su apuesta, dándole cada vez más cabida al género, como viene haciendo desde hace tiempo, con su Serie Negra. Razón por la cual convoca un premio internacional que responde a la necesidad de dar un espacio al relevo nacional, que otorga carácter local y el contrapunto necesario a un asunto que, de cualquier forma, no entiende de fronteras. Y si hay fronteras, si la patria es el idioma, España y América Latina sólo necesitan un último espaldarazo como el que propone RBA, junto a otras editoriales que han tomado el testigo, para que sus más oscuros detectives novelescos se den a conocer, como ya ha ocurrido con la nueva generación de escritores en lengua inglesa —encabezada por Michael Connolly, Dennis Lehane, Harlan Coben, James Ellroy, Val MacDermid o Ian Rankin—, en Francia, en Italia, en Alemania o en los países nórdicos, que han sabido entregar buena parte de sus ratos de evasión (en su mejor sentido, en el que, en palabras de un crítico, esa evasión no es más que un ‘paso dialéctico’, no se agota en sí misma) a autores de novela negra, nacionales y extranjeros por igual. RBA ha convocado así un premio de espíritu local y al mismo tiempo global, como piden los tiempos, sin dar la espalda a sus vecinos, cercanos o lejanos. Con el Premio Internacional de Novela Negra RBA se quiere seguir el ejemplo anglosajón, que vela por mantener el equilibrio entre el olfato comercial y la exigencia de calidad y fidelidad a una tradición que tiene sus reglas y que, heredera del realismo crítico, debe ajustar cuentas con un mundo cada vez más complejo y, en opinión de algunos, despreocupado. Si, como ha dicho Ricardo Piglia, sólo se puede narrar un viaje o un crimen, y si la investigación es de alguna manera un viaje (y puede que también un crimen), sin duda vale la pena buscar, premiar y publicar novelas que narren ambas cosas. La novela de González Ledessma, en este sentido, resulta ejemplar, aunque la palabra tenga un relente de imposición, porque la investigación y la rememoración en ella son paralelas a la evolución (la transformación, la destrucción) de una ciudad, Barcelona, y de sus recorridos espaciales y temporales. AUTORES MÁS REPRESENTATIVOS DE LA COLECCIÓN SERIE NEGRA DE RBA Robert Wilson nació en 1957. Se graduó en la Universidad de Oxford, ha trabajado en empresas navieras y publicitarias en Londres y se ha dedicado al comercio en Africa Occidental. Está casado y vive entre Inglaterra, España y Portugal. Fue galardonado con el CWA Gold Dagger Award para Ficción por su quinta novela, Sólo una muerte en Lisboa. Harlan Coben ha creado a uno de los héroes más fascinantes y complejos de la ficción de suspense —Myron Bolitar— un agente deportivo impulsivo, de gran corazón, que cada vez nos resulta más simpático e imprevisible a medida que pasamos las páginas. RBA ha publicado Por siempre jamás, El inocente, Sólo una mirada, No se lo digas a nadie, adaptada al cine por Guillaume Canet y La promesa. Dennis Lehane, master en Bellas Artes especializado en talleres de escritura, compagina la redacción de guiones con la de sus novelas. En 1994, ganó el premio Shamus por su primera novela A Drink Before the War. Es además autor de Desapareció una noche, Plegarias en la noche, Shutter Island y Mystic River (novela llevada a la gran pantalla y galardonada con dos Oscars) publicadas todas ellas por esta editorial. Vive en Boston, su ciudad natal. Jerome Charyn nació en el Bronx en 1937. Es autor de una veintena de novelas y ensayos sobre Nueva York y Hollywood y de libros e historietas para niños en colaboración con François Boucq y Loustal. Su primera serie policíaca pone en escena al comisario Isaac Sidel. A la serie pertenecen La educación de Patrick Silver, Marilyn la Fiera, Ojos Azules y Misterioso Isaac, publicadas por esta editorial. Vive entre París y Nueva York. Ian Rankin nació en Escocia, en 1960. Graduado en la Universidad de Edimburgo, publica su primera novela sobre el inspector Rebus, Knots & Crosses, en 1987. A partir de esta fecha su personaje se hace cada vez más popular y se lleva incluso a la televisión, donde lo interpreta John Hannah. Todas sus novelas, Knots & Crosses, Hide & Seek, Tooth & Nail... o El jardín de las sombras y En la oscuridad (publicadas tmbién por esta editorial) han sido recibidas con especial entusiasmo por la crítica y sus fieles lectores. Black and Blue, primera novela publicada por RBA Libros, obtuvo, además, el premio Gold Dagger en 1997. Resurrección obtuvo el Edgar en 2004. Val McDermid (1955) nació en Escocia y reside actualmente en Manchester. Fue periodista durante quince años antes de dedicarse de manera exclusiva a escribir novela negra. Es autora de Asesino de sombras, Lugar de ejecución, y Un Eco lejano, todos ellos publicados por RBA, y su obra ha merecido premios tan prestigiosos como el Gold Dagger Award o el Los Angeles Book Prize. Maj Swöwall y Per Wahlöo. La crítica especializada mundial ha calificado las diez novelas de Martin Beck de Sjöwall/Wahlöö como las mejores novelas negras de ficción escritas. Traducida a treinta y cinco lenguas, la serie ha vendido diez millones de ejemplares. El equipo Sjöwall/Wahlöö tuvo un objetivo ambicioso: inmortalizar el devenir de una sociedad durante una década. A partir en 1965, marido y mujer escribieron una novela por año (treinta capítulos exactos cada una) durante diez años. Los diez libros deben leerse como una gran novela de trescientos capítulos que conforma una disección de Suecia. RBA publicará toda la serie de Martin Beck. Philip Kerr (1956) nació en Edimburgo. A pesar de haber estudiado Derecho, pronto decidió abandonar el mundo de las leyes para dedicarse, primero, a la publicidad, y más tarde, al periodismo y la literatura. Ha publicado doce novelas, tres de las cuales cuentan con Bernie Gunther como protagonista. Su peculiar estilo ha recibido alabanzas de la crítica y ha cautivado a miles de lectores. Peter Robinson nació en Yorshire, Inglaterra, tras licenciarse con honores en Literatura Inglesa en la Universidad de Leeds, se trasladó a Canadá para hacer un Máster en escritura creativa. Allí conocío a Joyce Carol Oates, su tutora. Ha trabajado como profesor en la Universidad de Windsor (Ontario, Canadá) y reside en la playa de Toronto son su mujer, Sheila Halladay. De vez en cuando imparte cursos de literatura criminal en la Universidad de dicha ciudad, y sobre todo es el creadro de la aclamada serie del Inspector Banks, por las que ha sido nominado al prestigioso premio Edgar y ha ganado el Anthony Award.