El recuerdo de la represión franquista Cuando Ana miró dentro de la fosa EL PAÍS - España - 24-09-2007 - JAVIER LAFUENTE - Villanueva del Rosario Mientras se exhuman los cuerpos, dos mujeres recuerdan cómo marcó su niñez el fusilamiento de sus familiares durante la guerra civil. 5 10 15 20 25 San Valentín es desde hace 70 años una fecha de infausto 1 recuerdo en Villanueva del Rosario (Málaga). La madrugada del 14 de febrero de 1937, en una cuneta 2, un hombre llamado José, o Lucas, tal vez Antonio, recibió al menos cuatro impactos de bala. Uno le fracturó el fémur; otro la tibia. Dos se quedaron alojados en la espalda. Su cuerpo rodó desde una altura de tres metros hasta que cayó en una fosa. Apenas había espacio para tres personas, pero los verdugos 3 depositaron allí 11 cadáveres. La exhumación de sus restos ha mostrado el ensañamiento4 de aquellos falangistas5 que ametrallaron a diez militantes de UGT y al dueño de una cooperativa del pueblo vecino. La aparición de huesos en posiciones imposibles hizo pensar a los arqueólogos que había más de 11 cuerpos. "Creemos que después de que cayesen los empujaron6 hasta que cupiesen todos en la fosa; hay huesos con síntomas de haber sido aplastados7", explica uno de los arqueólogos del equipo de la Federación Estatal de Foros por la Memoria8. Todos coinciden en que de la exhumación se puede deducir la actitud de desprecio hacia aquellas personas: "Lo importante era meterlos, daba igual cómo". Imaginar esta sangrienta escena es duro. Pero más lo es recordarla. Ana González, de 78 años, pasó a la mañana siguiente por el camino que separa su pueblo de la localidad de Villanueva del Trabuco. Sabía que algo malo se iba a encontrar pues había oído cómo su madre advertía a su abuela: "Ni se te ocurra llevar por el puente a la niña". Pero algo le decía a la anciana que en aquella fosa estaba su hijo Francisco, que, como los otros diez muertos, llevaban una semana encerrados en el Ayuntamiento a la espera de un supuesto juicio9. Cuando llegaron al viejo puente, la abuela se quedó parada. Necesitaba la confirmación de su presagio pero tenía miedo a que alguien del pueblo la viese husmeando 10. Así que se vio obligada a echar mano de11 su nieta. -"Anda, hija, acércate y mira a ver qué hay ahí". -"No quiero, tengo miedo", recuerda Ana que le respondió. La abuela le prometió que al llegar al Trabuco le compraría unas alpargatas 12. Lo que para muchos puede ser un detalle insignificante para Ana fue un estímulo. "Iba a ser mi primer calzado", rememora con una sonrisa entrañable13 de oreja a oreja. Su gesto cambia cuando se le pregunta por lo que vio al asomarse a14 la cuneta. 1 Infausto: malheureux Una cuneta: un fossé 3 Los verdugos: les bourreaux 4 El ensañamiento: l’acharnement 5 Falange Española es un partido político español de inspiración fascista e ideología nacional-sindicalista (con fuertes analogías con otros movimientos similares tales como el fascismo o nacional-sindicalismo italiano, y el nacionalsocialismo alemán), fundado el 29 de octubre de 1933 por José Antonio Primo de Rivera. 6 Empujar: pousser 7 Aplastado: écrasé 8 La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica es una asociación española constituida en diciembre de 2000. Su objetivo principal ha sido la búsqueda de las víctimas de la represión durante la Guerra Civil, personas que fueron asesinadas, generalmente por pistoleros de Falange, y cuyos cuerpos no pudieron ser recuperados por sus familiares. 9 El juicio: le procès 10 Husmear: fouiner, farfouiller 11 Echar mano de : avoir recours à, faire appel à 12 Las alpargatas : les espadrilles 13 Entrañable: touchant, attendrissant 14 Asomarse: se pencher 2 30 35 40 45 50 Agacha la cabeza15 y con voz baja, relata: "Un montón de piedras puestas de cualquier manera de la que sobresalían brazos, piernas, un cinturón..., algo terrible para cualquier persona, pero más para una niña". Ana, aturdida por la escena, se apartó16 y empezó a vomitar. "Vente, vente que nos vamos", recuerda que le gritó su abuela. Al volver, por la tarde, a Villanueva del Rosario, la abuela llevó a Ana a distintas casas para que contase lo que había visto. "Con el tiempo me he dado cuenta de que me utilizó para que confirmase los peores presagios porque ella tenía miedo; no le guardo rencor, ella sabía que a una niña no le iban a hacer nada". Ana repitió la cantinela17 en unas cuantas casas hasta que en una dio en el clavo18. "¿Dices que has visto una camisa azul? Ay, tiene que ser la de mi hijo José". Es lo único que le pudo decir aquella vecina antes de romper a llorar. Aquella señora a la que Ana había desvelado19 la fatal noticia era la abuela de Josefa Ortiz, una mujer que rebosa energía20 a sus 73 años. Su padre, el hombre de la camisa azul, y su tío, yacen en la fosa de Villanueva del Rosario. Josefa sólo tenía dos años cuando empezó a palpar el dolor en su casa. Habían pasado pocos días del fusilamiento cuando empezó una triste rutina nocturna: "Le pedía a mi familia que no cerrasen la puerta de la casa ni del corral 21 porque mi padre tenía que volver y yo quería verlo". La confusión le acompañó toda su niñez, especialmente aquel año 1937. Su padre no volvía y a ella le cambiaban los hábitos. Los vestidos floridos, que tanto le gustaban a su padre, se los tiñeron de negro. Hasta que cayó enferma y el médico exigió que volviesen a su colorido original. Como si fuese posible orillar22 la muerte por un tiempo, a Josefa le cuesta asimilar que su padre, al que apenas llegó a conocer, falleció hace 70 años. "Hasta que no me entreguen sus huesos, hasta que no pueda enterrarlo en un lugar a donde pueda llevarle flores no me haré a la idea por completo". Hay otro elemento además que mantiene viva esa utopía. Hace sólo tres años que Josefa aprendió a leer y a escribir. Desde entonces, cuenta con lágrimas en los ojos, no para de mandar cartas a su padre, "cartas al aire". No contenta con eso, pretende escribir un libro sobre su niñez en la posguerra para regalárselo a sus nietos. Familiares de algunas de las víctimas rezan ante las fosas comunes donde se enterró a los asesinados. 15 Agachar la cabeza: baisser la tête Apartarse: s’écarter 17 La cantinela: la rengaine, le refrain 18 Dar en el clavo: taper dans le mille 19 Desvelar: dévoiler, révéler 20 Rebosar energía: déborder d’énergie 21 El corral: ici, la cour de la ferme 22 Orillar: ici, éviter 16