http://www.tsj.gob.ve/decisiones/scs/julio/167114-0956-23714-2014-14-522.HTML Ponencia de la Magistrada CARMEN ESTHER GÓMEZ CABRERA. El Juzgado Segundo Superior del Trabajo de la Circunscripción Judicial del estado Carabobo, remitió a esta Sala de Casación Social, el expediente contentivo de recurso de nulidad conjuntamente con solicitud de medida cautelar de suspensión de efectos del acto administrativo el cual fue propuesto por la sociedad mercantil CONSTRUCCIONES JUNCAL, C.A., representada judicialmente por los abogados Luis Eduardo Pulido Canino, Carolina Daza Consuegra, Geraldine Delima Jordán, Victoria Alejandra Oliveros Vargas, Luis Fernando Aldana Jiménez, Lissette Carolina Pérez Chacón y María Eugenia Kattar, contra los actos administrativos contenidos en certificación Nro. 120508 e informe pericial Nro. 002575, el primero del 25 de julio del año 2012 y el segundo del 29 de agosto del año 2012, emanados de la DIRECCIÓN ESTADAL DE SALUD DE LOS TRABAJADORES CARABOBO “Dra. OLGA MONTILLA”, PREVENCIÓN, SALUD Y adscrita al INSTITUTO SEGURIDAD NACIONAL DE LABORALES (INPSASEL), sin representación judicial acreditada en autos; en la cual calificó como accidente de trabajo el padecimiento sufrido por el ciudadano Darwin José Hernández Escobar, que produce una discapacidad parcial permanente, con limitación para desarrollar actividades que impliquen levantar, halar, empujar cargas pesadas, bipedestación prolongada, subir y bajar escaleras a repetición, mantenerse en superficies que vibren y adoptar posiciones forzadas de articulación de cadera izquierda; y mediante el informe pericial se determinó el monto mínimo a pagar por la prenombrada sociedad mercantil al trabajador, por concepto de indemnización, de conformidad con lo establecido en el artículo 130 de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo. La remisión se efectuó en razón del recurso de apelación que interpusiera la parte accionante, contra el fallo emanado del Juzgado Segundo Superior del Trabajo de la Circunscripción Judicial del estado Carabobo, en fecha 06 de marzo del año 2014, conforme al cual se declaró sin lugar el recurso contencioso administrativo de nulidad del acto recurrido. Recibido el expediente en fecha 13 de mayo del año 2014, se dio cuenta en Sala, designándose la ponencia de la presente causa, a la Magistrada Dra. Carmen Esther Gómez Cabrera, en fecha 26 de febrero del año 2013. La parte actora consignó ante la Secretaría de esta Sala de Casación Social, en fecha 27 de mayo del año 2014, escrito contentivo de fundamentos del mecanismo procesal de impugnación. Mediante auto de fecha 06 de junio del año 2014, el Juzgado de Sustanciación de esta Sala declaró concluida la sustanciación del presente asunto, por cuanto había transcurrido el lapso previsto en el artículo 92 de la Ley Orgánica de la Jurisdicción Contencioso Administrativa. Siendo la oportunidad, se pasa a decidir en los siguientes términos: DE LA COMPETENCIA La Disposición Transitoria Séptima de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo, prevé que la competencia para conocer los recursos de nulidad contra los actos administrativos dictados por el Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales (INPSASEL), corresponde a los Tribunales del Trabajo, en tal sentido, establece: Disposición séptima. Mientras se crea la Jurisdicción Especial del Sistema de Seguridad Social, son competentes para decidir los recursos contenciosos administrativos contenidos en la presente Ley, los Tribunales Superiores con competencia en materia de trabajo de la circunscripción judicial en donde se encuentre el ente que haya dictado el acto administrativo que dio origen al recurso inicial. De estas decisiones se oirá recurso ante la Sala de Casación Social del Tribunal Supremo de Justicia. (Negrillas de la Sala). Esta competencia fue ratificada, tal como lo manifestó en su sentencia el Juez de Primera Instancia, por la Sala Plena del Tribunal Supremo de Justicia, mediante sentencia N° 27 del 26 de julio del año 2011, que señaló: En este mismo orden de ideas, debe acotarse que la Ley Orgánica de la Jurisdicción Contencioso Administrativa no incluyó dentro de los asuntos que deben conocer los órganos de la jurisdicción contencioso administrativa, las acciones de nulidad contra los actos administrativos emanados del Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales (INPSASEL) o de los órganos adscritos al mismo, con ocasión de la aplicación de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo. No hay duda pues de que la voluntad del legislador, en absoluta concordancia con las disposiciones constitucionales sobre la protección del hecho social trabajo y el entramado de relaciones jurídicas que del mismo deriva, tal como el régimen de seguridad y salud en el trabajo y las condiciones físicas y mentales del trabajador, atribuyen –de forma expresa y exclusiva- a los órganos que integran la jurisdicción laboral, la competencia relativa al conocimiento de las acciones de nulidad ejercidas contra las decisiones administrativas dictadas por el Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales (INPSASEL), pues lo relevante para determinar cuál es el juez natural que ha de conocer este tipo de pretensiones no es la naturaleza del órgano del cual emana sino la naturaleza jurídica de la relación. Así las cosas, atendiendo la reciente doctrina vinculante emanada de la Sala Constitucional, en la que destaca la importancia de que la jurisdicción laboral conozca de las controversias que se deriven del hecho social trabajo y el entramado de relaciones jurídicas que del mismo derivan, por la relevancia que tiene el Estado Social de Derecho y de Justicia, así como la propia Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo que establece los criterios atributivos de competencia en esta materia, debe determinarse que los órganos jurisdiccionales competentes para conocer y decidir situaciones como la de autos, son los de la jurisdicción laboral. Así se decide. (Destacado de la Sala). Del criterio jurisprudencial supra citado, se colige que para determinar el juez natural debe atenderse a la materia objeto de la controversia o naturaleza jurídica de la relación, y no al órgano que dicta el acto administrativo, por lo que la competencia para el conocimiento de los recursos contenciosos administrativos interpuestos contra las actuaciones provenientes del Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales (INPSASEL), con ocasión de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo, por tratarse de controversias que surgen del hecho social trabajo, corresponderá en primera instancia a los Tribunales Superiores del Trabajo, recurribles en apelación ante esta Sala de Casación Social del Tribunal Supremo de Justicia. En consecuencia, esta Sala asume la competencia para resolver la apelación ejercida en el caso bajo estudio. ANTECEDENTES Mediante escrito de fecha 01/02/2013, la representación judicial de la sociedad mercantil CONSTRUCCIONES JUNCAL, C.A., interpuso recurso contencioso administrativo de nulidad conjuntamente con solicitud de medida cautelar de suspensión de efectos del acto administrativo, ante la Unidad de Recepción y Distribución de Documentos (URDD) de los Tribunales Superiores del Trabajo de la Circunscripción Judicial del estado Carabobo, contra los actos administrativos contenidos en certificación Nro. 120508 e informe pericial Nro. 002575, el primero del 25 de julio del año 2012 y el segundo del 29 de agosto del año 2012, emanados de la DIRECCIÓN ESTADAL DE SALUD DE LOS TRABAJADORES CARABOBO “Dra. OLGA MONTILLA”, adscrita al INSTITUTO NACIONAL DE PREVENCIÓN, SALUD Y SEGURIDAD LABORALES (INPSASEL), mediante la certificación, en la cual calificó como accidente de trabajo el padecimiento sufrido por el ciudadano Darwin José Hernández Escobar, que produce una discapacidad parcial permanente, con limitación para desarrollar actividades que impliquen levantar, halar, empujar cargas pesadas, bipedestación prolongada, subir y bajar escaleras a repetición, mantenerse en superficies que vibren y adoptar posiciones forzadas de articulación de cadera izquierda; y mediante el informe pericial se determinó el monto mínimo a pagar por la prenombrada sociedad mercantil al trabajador, por concepto de indemnización, de conformidad con lo establecido en el artículo 130 de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo; alegando lo siguiente: 1. Nulidad absoluta del acto administrativo contenido en la certificación Nro. 120508 de fecha 25 de julio del año 2012, por estar emitido por un funcionario manifiestamente incompetente, en extralimitación de sus funciones. 2. Nulidad absoluta del acto administrativo contenido en el informe pericial Nro. 002575 de fecha 29 de agosto del año 2012, por incompetencia manifiesta en usurpación de funciones del funcionario que lo emite. 3. Nulidad absoluta por violación del debido proceso y del derecho a la defensa como consecuencia a la falta grave y omisión de fases esenciales dentro del procedimiento administrativo para la formación del acto Nro. 120508 de fecha 25 de julio del año 2012, y una prescindencia manifiesta, total y absoluta de un procedimiento administrativo lo cual derivó en el acto Nro. 002575 de fecha 29 de agosto del año 2012. 4. Falta de relación de causalidad entre el accidente laboral y la discapacidad que padece el ciudadano Darwin José Hernández Escobar. Falso supuesto de hecho. 5. Solicitud de medida cautelar innominada de suspensión de efectos del acto administrativo recurrido. DECISIÓN APELADA El Juzgado Segundo Superior del Trabajo de la Circunscripción Judicial del estado Carabobo, mediante decisión de fecha 06 de marzo del año 2014, declaró sin lugar el recurso contencioso administrativo de nulidad, expresando textualmente lo siguiente: El articulo (sic) 18 de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo, preceptúa las competencias del referido Instituto y establece lo siguiente: Cito parcialmente: “(…) 14. Investigar los accidentes y las enfermedades ocupacionales, estableciendo las metodologías necesarias para ser aplicadas y realizando los ordenamientos correspondientes. 15. Calificar el origen ocupacional de la enfermedad o del accidente. 16. Elaborar los criterios de evaluación de discapacidad consecuencia de los accidentes de trabajo y las enfermedades ocupacionales. 17. Dictaminar el grado de discapacidad del trabajador o de la trabajadora. (Omissis). El articulo (Sic) 76, ejusdem prevé que el Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales, previa investigación, mediante informe calificará el origen del accidente de trabajo o de la enfermedad ocupacional. Dicho informe tendrá el carácter de documento público. Todo trabajador o trabajadora al que se haya diagnosticado una enfermedad ocupacional o haya sufrido un accidente, deberá acudir al Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales para que se realicen las evaluaciones necesarias para la comprobación, calificación y certificación de la misma. Del Folio 267 al 268, riela copia certificada de la certificación Nro. 120508, objeto del presente recurso de nulidad; en su contenido (Ver Folio 267) el Funcionario (Sic) “América Milagros Jiménez Herrera”, titular de la cédula de identidad Nro. 7.023.303, destaca que fue nombrada según la Providencia Administrativa Nro. 01, de fecha 02/01/2012, emitida por la Presidencia del Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales. Es oportuno destacar que, las Direcciones Estadales de Salud de los Trabajadores (en adelante identificadas DIRESAT), son creadas por el Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales, con el objetivo de materializar el propósito del Instituto Nacional, orientado a optimizar la capacidad de asistir, asesorar, orientar, atender, prevenir y garantizar condiciones seguras y saludables en el entorno laboral. Todo esto ha sido entendido para organizar la atribución territorial de competencia entre las Oficinas de las Direcciones Estadales, de acuerdo a los principios de simplicidad, transparencia y cercanía organizativa a los particulares, en cumplimiento a lo establecido en el artículo 31 de la Ley Orgánica de la Administración Publica (Sic). En consecuencia de lo anterior, las competencias atribuidas al Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales, han sido desconcentradas territorial y funcionalmente a las Direcciones Estadales de Salud de los Trabajadores. (Omissis). En conclusión, dichas Direcciones han sido provistas de competencia por la materia y por el territorio conforme a los términos establecidos en el Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley Orgánica de la Administración Publica (Sic), por lo que se colige que sus funcionarios están calificados para dictar el acto recurrido, en consecuencia no hay o no existe la configuración de la extralimitación y la usurpación de funciones como vicios delatados en la producción del acto administrativo. Y Así se Decide. Respecto a la competencia para el cálculo de la Indemnización a la cual se hace acreedor el trabajador; es oportuno destacar que, este es un derecho en la esfera subjetiva de los derechos del trabajador titular del acto administrativo “Certificación de Origen de Enfermedad”. (Omissis). Pues, el “informe pericial” al que se contrae el articulo (Sic) 130 ejusdem, es a efectos de celebrar transacciones laborales en sede administrativa, informe pericial que por imperio de la norma debe ser formado por el Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales; todo lo cual recae en cabeza de las Diresat conforme a la desconcentración funcional y territorial antes referida en esta sentencia. Siendo que, el criterio del querellante implicaría incluso desconocer en primera instancia la fase de mediación en la jurisdicción laboral, porque debería –según las palabras del recurrente en nulidad- ser tramitada las pretensiones de Cobro de Indemnizaciones, derivadas de Infortunios Laborales, conocidas únicamente por el Juez de Juicio en atención a una decisión vinculante de la autoridad administrativa; esto si efectivamente devendría en la violación de principios y garantías constitucionales, desarrolladas en las leyes sustantivas, así como de las normas de procedimiento establecidas legalmente. Y Así se Establece. Finalmente, en este orden de ideas se evidencia que, el Calculo (Sic) o Informe Pericial formado en sujeción del articulo (Sic) 130 de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo, en los términos a los cuales se contrae el articulo (Sic) 9 del Reglamento de la referida Ley, fue suscrito por: el T.S.U. Robert Peraza (Director de la Dirección Estadal de Salud de los Trabajadores Carabobo, Dra. Olga Maria (Sic) Montilla, designado según Providencia Administrativa Nro. ORH2011-030 del 28 de marzo del 2011, emanada de la Presidencia del Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales, por lo que se colige que este funcionario está calificado para dictar el acto recurrido. Y Así se Establece. (Omissis). De lo trascrito tenemos que, el procedimiento de Investigación de Accidentes Ocupacionales, se rige por la Norma Técnica para la Declaración de accidentes Ocupacionales adicionado a la evaluación médica, la cual culminó en el caso de marras, con la Certificación Nro. 120508, de fecha 25/07/2012. Es decir, con el acto administrativo que se recurre de nulidad. Por lo que, colige quien decide que, se encuentra previsto el procedimiento a través del cual se ventila la Declaración de accidente Ocupacional, certificadas dicho origen por la Diresat en ejercicio de la atribución que le fue desconcentrada (funcional y territorialmente) del Instituto Nacional; por lo que mal se configura la ausencia de procedimiento delatada, para proceder a la certificación de la enfermedad, que haga necesaria la aplicación del procedimiento administrativo ordinario; tal y como lo ha dejado establecido la Sala de Casación Social del Tribunal Supremo de Justicia en fecha 1184, del 26/10/2012, con ponencia de la Magistrada Carmen Elvigia Porras de Roa.Por otra parte respecto al vicio de prescindencia total y absoluta del procedimiento, este Juzgador observa que, de lo parcialmente trascrito, así como de las actuaciones administrativas cursante a los autos que, mal pudiere el demandante indicar que, no participó en la formación del procedimiento administrativo –instrucción del mismo- cuando, en la querella de nulidad efectúa una relación de las actuaciones verificadas dentro del expediente administrativo, para mayor especificidad las cursantes del Folio 219 al 270; esto con ocasión a la certificación del accidente ocupacional; máxime cuando es la propia parte recurrente quien invoca a su favor el valor probatorio del expediente administrativo arguyendo los vicios delatados. La Investigación del accidente ocupacional, produjo el conocimiento de dicho procedimiento por parte de la recurrente en nulidad, desde la citación para constatar la declaración del accidente de trabajo ante el órgano administrativo, con comparecencia de la empresa y la consignación del documento demostrativo de haber efectuado la misma, del traslado de los funcionarios competentes a verificar en el lugar del trabajo y a la empresa los hechos relacionados con la investigación de la ocurrencia del accidente con conocimiento y participación de la empresa a través de sus representantes y de los delegados de prevención. Finalmente y cónsono con las consideraciones expuestas, este sentenciador debe advertir que no hubo violación al Derecho a la Defensa o al Debido Proceso de la entidad de trabajo Construcciones Juncal, C.A., habida cuenta de que, los representantes de esta, ciudadanos JOSE MUÑOZ, titulares de las cedulas de identidad C.I. 9.448.103; ARMANDO HERNÁNDEZ, C.I. 7.059.626, aparece (Sic) suscribiendo las actuaciones realizadas por el órgano administrativo en fechas 27/10/2008, 25/08/2010 y 04/08/2010. Y Así se Decide. (Omissis). Los funcionarios de la Dirección Estadal de Salud de los Trabajadores del Estado Carabobo, en virtud de la desconcentración territorial y funcional, de las atribuciones previstas en el Reglamento Parcial de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo, en su articulo (Sic) 16, numeral 14, podrán Investigar los accidentes y las enfermedades ocupacionales, estableciendo las metodologías necesarias para ser aplicadas y realizando los ordenamientos correspondientes, es decir, son autónomos en la aplicación de los criterios que a su decir arrojen información básica para las respectivas conclusiones que conducen a Calificar el origen ocupacional de la enfermedad o del accidente, conforme al numeral 15 del referido articulo (Sic). Por lo que observa este sentenciador, que el funcionario tomando en consideración que el ciudadano DARWIN JOSE HERNÁNDEZ ESCOBAR, titular de la cedula de identidad Nro. 13.889.185, se desempeño (Sic) en el cargo de obrero, (según la información proporcionada por la empresa), procedió a describir las actividades que se ejecutan en dicho cargo. Es de advertir, que de la revisión de las actas que conforman el expediente, no se evidencia que la parte recurrente en nulidad haya aportado documental alguna, a los fines de desvirtuar la información aportada por el funcionario, ni de proporcionar medios de pruebas que permitan concluir que la prestación del trabajador accidentado fuera diferente a los otros trabajadores de su misma categoría para que no pudiera tener como criterio de investigación del accidente el método de referencia, pues de autos no se verifica la existencia de notificación de riesgos específicos, o implementos de seguridad, ni de la investigación del accidente por parte de la empresa, ni cualquier otro medio de prueba que permita individualizar u especializar el accidente sufrido por el ciudadano DARWIN JOSE HERNÁNDEZ ESCOBAR, titular de la cedula de identidad Nro. 13.889.185; por lo que en consecuencia el informe de investigación utilizado como referencia y el informe de investigación que produjo el acto administrativo que hoy se recurre, producen un común denominador y es el conocimiento por parte de la entidad de trabajo en el hecho que tradujo posteriormente el acto administrativo, así como la ausencia de notificación de riesgos específicos. (Omissis). Así las cosas, el Medico (Sic) Especialista en Salud Ocupacional sustento (Sic) su decisión en el Informe de Investigación del accidente de trabajo, en las evaluaciones médicas y en las apreciaciones de hecho sustentadas en el Informe, que hacen plena fe para este Juzgador. En consecuencia es forzoso desestimar el falso supuesto de hecho delatado por el hoy recurrente en nulidad. Y Así se Decide. (…)el procedimiento para la determinación del carácter ocupacional de una enfermedad o un accidente regulado en la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente del Trabajo, es un procedimiento especial para un hecho o circunstancia de protección, que no debe compararse para ser tramitado al regulado como procedimiento ordinario en la Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos; sin que por ello podamos considerar vulnerados el debido proceso y el derecho a la defensa establecidos en el artículo 49 Constitucional, Y ASÍ SE DECIDE.De la transcripción realizada precedentemente, se observa que el sentenciador de la recurrida declaró sin lugar el recurso contencioso administrativo de nulidad, en virtud de que los actos que se impugnan no adolecen de los vicios que se les atribuye, ya que a su decir, las Direcciones Estadales de Salud de los Trabajadores, son creadas por el Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales para organizar la atribución territorial de competencia entre las oficinas de las Direcciones Estadales, de acuerdo a los principios de simplicidad, transparencia y cercanía organizativa a los particulares, en consecuencia, las competencias atribuidas al Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales, han sido desconcentradas territorial y funcionalmente a las Direcciones Estadales de Salud de los Trabajadores, las cuales tienen competencia por la materia y por el territorio, por lo que no existe la configuración de la extralimitación y la usurpación de funciones; de igual forma señala respecto al informe pericial que el mismo debe ser formado por el Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales; todo lo cual recae en cabeza de las Direcciones Estadales de Salud de los Trabajadores, conforme a la desconcentración funcional y territorial antes referida y que el mismo fue suscrito por: el T.S.U. Robert Peraza Director de la Dirección Estadal de Salud de los Trabajadores Carabobo, Dra. Olga María Montilla, designado según Providencia Administrativa Nro. ORH-2011-030 del 28 de marzo del año 2011, emanada de la Presidencia del Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales, por lo que concluye que dicho funcionario está calificado para dictar el acto recurrido. Asimismo, hace mención al procedimiento de investigación de accidentes ocupacionales, manifestando que los mismos se rigen por la Norma Técnica para la Declaración de Accidentes Ocupacionales adicionado a la evaluación médica, aduce que es un procedimiento especial para un hecho o circunstancia de protección, que no debe compararse para ser tramitado como el establecido en el procedimiento ordinario en la Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos, sin que por ello se pueda considerar vulnerado el debido proceso y el derecho a la defensa, en tal sentido arguye que el recurrente en nulidad tuvo conocimiento y participación a través de sus representantes y de los delegados de prevención en la investigación del accidente ocupacional, y que el Médico Especialista en Salud Ocupacional sustentó su decisión en el Informe de Investigación del Accidente de Trabajo, en las evaluaciones médicas y en las apreciaciones de hecho sustentadas en el Informe, por lo que desestimó el falso supuesto de hecho delatado. FUNDAMENTOS DE LA APELACIÓN La parte recurrente, consignó en fecha 27 de mayo del año 2014, ante la Secretaría de esta Sala, escrito de fundamentación de la apelación propuesta, bajo las siguientes consideraciones: Manifiesta que, el tribunal a quo yerra en su fundamentación con relación a la competencia de las Direcciones Estadales en atención a los actos administrativos impugnados, pues atribuye hechos que no corresponden al presente asunto, al concederles unas supuestas facultades que no tienen atribuidas, siendo el caso de darles facultad de dictar actos administrativos de certificación, cuando dicha potestad corresponde única y exclusivamente al Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales. Asimismo arguye que, las investigaciones relacionadas con el estudio, la evaluación del puesto de trabajo y el análisis de las condiciones físicas y mentales llevadas a cabo por la Dirección Estadal de los Trabajadores, no constituyen la decisión definitiva, sino que por el contrario debe ser considerada como un acto de carácter previo o preparatorio, que establecerá una condición específica la cual servirá de fundamento a una decisión posterior emanada del Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales. Del mismo modo, señala la inexistencia plena de un procedimiento administrativo bajo el cual la empresa Construcciones Juncal, C.A., fuese debidamente notificada, a los efectos de sustanciar el procedimiento que derivó en la providencia administrativa Nro. 120508, sino que dicha autoridad administrativa solo se basó en la investigación, que a su decir, no representa en sí misma la vía idónea para declarar un accidente como ocupacional, sino más bien lo que representa es un requisito para dictar la calificación del accidente laboral de acuerdo con lo previsto en el artículo 76 de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo, debiendo en consecuencia el sentenciador de la recurrida motivar y establecer en el fallo impugnado de forma clara y precisa el procedimiento que siguió el Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales, para dictar el acto administrativo que certificó el accidente laboral del ciudadano Darwin José Hernández Escobar, y que el mismo había sido implementado conforme a la normativa legal, garantizando los derechos a la defensa y el debido proceso, alegando que por el contrario el mismo solo mencionó la Norma Técnica que nada indica sobre el procedimiento a seguir para calificación del prenombrado accidente. Finalmente expresa que, se puede evidenciar de la demanda de nulidad incoada así como del expediente administrativo, que el vicio de falso supuesto se encuentra estrechamente relacionado con el “supuesto” procedimiento de investigación llevado a cabo por dicha autoridad administrativa, ya que los hechos sobre los cuales partió la Dirección Estadal de Salud de los Trabajadores del estado Carabobo para elaborar el informe de certificación del accidente ocupacional son falsos, pues dicho informe devino de la investigación realizada a otros trabajadores, por lo tanto, no existe ningún nexo con los hechos suscitados en la presente causa, aunado a que la investigación fue realizada 2 años después de la ocurrencia del citado accidente. MOTIVACIÓN PARA DECIDIR Respecto al vicio de incompetencia, la Sala Político Administrativa de este alto Tribunal, en Sentencia N° 00028, Expediente N° 14466 de fecha 22 de enero del año 2002, estableció lo siguiente: (...) el vicio de incompetencia es aquel que afecta a los actos administrativos cuando han sido dictados por funcionarios no autorizados legalmente para ello, en otras palabras, la competencia designa la medida de la potestad de actuación del funcionario; en tal sentido, éste no puede hacer nada para lo cual no haya sido expresamente autorizado por Ley. De manera que el vicio de incompetencia infringe el orden de asignación y distribución competencial del órgano administrativo; en tal sentido, ha sido criterio pacífico y reiterado de esta Sala que tal incompetencia debe ser manifiesta para que sea considerada como causal de nulidad absoluta de conformidad con lo dispuesto por el ordinal 4° del artículo 19 de la Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos. (Subrayado de la Sala). Con relación al vicio de incompetencia alegado, se evidencia que el Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales (INPSASEL), es un ente autónomo adscrito al Ministerio del Trabajo, según lo establecido en el artículo 12 de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo, asimismo y de conformidad con los artículos 18 numeral 7° y 133 de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo en concordancia con el artículo 16 numeral 7° del Reglamento Parcial, se desprende entre otras cosas que dicho Instituto es el órgano competente para aplicar las sanciones contenidas en la Ley especial in comemto. Ahora bien, con relación al procedimiento sancionador, el mismo se encuentra establecido en el artículo 136eiusdem, que dispone que los funcionarios y funcionarias a cargo de la supervisión e inspección en materia de seguridad y salud en el trabajo, podrán formular propuesta de sanción en los informes de inspección. En el caso concreto, el acto administrativo fue dictado por la Dirección Estadal de Salud de los Trabajadores Carabobo, órgano adscrito al INSTITUTO NACIONAL DE PREVENCIÓN, SALUD Y SEGURIDAD LABORALES (INPSASEL) que es el instituto que tiene asignada legalmente la competencia, de acuerdo a la desconcentración funcional de las competencias sobre condiciones y medio ambiente de trabajo en el área de prevención, salud, seguridad y bienestar, a los fines de organizar la atribución territorial de competencia proporcionada entre las diferentes DIRESAT, de acuerdo a los principios de simplicidad, transparencia y cercanía organizativa a los particulares, razón por la cual la alegada incompetencia no prospera. No obstante, esta Sala analizó el artículo 18 de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo, donde se asigna la competencia para calificar el origen ocupacional de la enfermedad o del accidente al INSTITUTO NACIONAL DE PREVENCIÓN, SALUD Y SEGURIDAD LABORALES (INPSASEL); verificó de la Gaceta Oficial N° 39.243 de fecha 17 de agosto del año 2009, en su artículo 3° se encuentran atribuidas las competencias al INPSASEL según la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo, quedando desconcentradas territorial y funcionalmente en cada una de las entidades territoriales y por ende en la del estado Carabobo, infiriéndose legalmente conferida la facultad con la que actúan los funcionarios adscritos a la Diresat Carabobo y, de igual forma se constató de la Certificación, que en la providencia administrativa publicada en fecha 8 de febrero del año 2011 en Gaceta Oficial N° 39.611, se evidencia el carácter con el cual actúa la Dra. América Milagros Jiménez Herrera, Médica Especialista en salud ocupacional adscrita al mencionado Instituto, según designación de su Presidente, es decir, que la profesional de la medicina que certificó el accidente de trabajo fue designada para el cargo que ocupa de Médico Ocupacional, razón por lo cual, el acto administrativo fue dictado por un órgano competente y funcionario competente para ello. Concluyéndose que, el acto administrativo fue dictado por la Dirección Estadal de Salud de los Trabajadores Carabobo, el cual es un órgano adscrito al Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales (INPSASEL), dichas direcciones son sedes creadas a nivel nacional, entre ellas, la Diresat Carabobo, las cuales gozan de competencia por la materia y por el territorio, conforme a los términos establecidos en el artículo 31 del Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley Orgánica de la Administración Pública, por tanto, los funcionarios, con fundamento en el artículo 136 de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo, están calificados para dictar informes de inspección e informes de propuesta de sanción en los casos de incumplimientos por parte del empleador de la normativa prevista en la Ley especial, asimismo el artículo 22 ejusdem establece que son atribuciones del Presidente o Presidenta de dicho Instituto nombrar y destituir al personal del Instituto, de conformidad con las previsiones de la Ley del Estatuto de la Función Pública y del Estatuto Especial del Funcionario de la Seguridad Social, razón por la cual resulta improcedente la presente delación, teniendo la Dirección Estadal de Salud de los Trabajadores Carabobo competencia por la materia y por el territorio y un Director el cual actuó ajustado a las funciones que le fueron conferidas. Ahora bien, respecto a la prescindencia total y absoluta de procedimiento, se establece que, los artículos 76 y 77 de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo, disponen que el Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales, tiene entre sus funciones calificar y certificar el origen de los accidentes laborales así como las enfermedades ocupacionales que pueden afectar a los trabajadores y esta certificación es impugnable tanto en vía administrativa como judicial. El artículo 7 del Reglamento Parcial de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo, establece un sistema de prelación de fuentes para la sustanciación de procedimientos y actuaciones dirigidos a la protección de la salud y medio ambiente de trabajo, expresado de la siguiente forma: En los procedimientos administrativos dirigidos a la protección de la salud, seguridad, condiciones y medio ambiente de trabajo, las normas deberán observarse en el orden establecido previsto en los siguientes instrumentos: 1. Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo. 2. Ley Orgánica del Trabajo y su Reglamento. 3. Ley Orgánica Procesal del Trabajo. 4. Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos. 5. Código de Procedimiento Civil. Asimismo, es menester traer a colación la Norma Técnica para la Declaración de Enfermedad Ocupacional (NT-02-2008), la cual prevé cómo debe llevarse a cabo la investigación para que el organismo respectivo declare si una enfermedad es de naturaleza ocupacional, estableciendo entre otras cosas: que las enfermedades ocupacionales son de información y declaración obligatoria ante el INPSASEL, la cual se deberá efectuar en las Direcciones Estadales de Salud de los Trabajadores (Diresat), con competencia en la localidad donde se encuentre el centro de trabajo, teniendo las autoridades del INPSASEL en el ejercicio de sus funciones, acceso a información y a los datos personales de salud de los trabajadores. Asimismo señala la obligatoriedad del patrono en declarar formalmente las enfermedades ocupacionales dentro de las veinticuatro 24 horas siguientes al diagnóstico de la patología de presunto origen ocupacional, y en caso de que el empleador no lo realice podrá hacerlo el propio trabajador. El Servicio de Seguridad y Salud en el Trabajo, debe investigar las enfermedades ocupacionales con el fin de explicar lo sucedido, realizar el diagnóstico correspondiente y adoptar los correctivos necesarios, además deberá asegurar la protección de los trabajadores, contra toda condición que perjudique su salud, producto de la actividad laboral y de las condiciones en que ésta se efectúa; dicha investigación se realizará basándose en el análisis de la actividad de trabajo, considerando las tareas, actividades y operaciones que se ejecutan o ejecutaban durante el tiempo de exposición, a fin de identificar los procesos peligrosos (asociados al objeto de trabajo, medio de trabajo y a la organización y división del trabajo), las condiciones inseguras, insalubres o peligrosas que existieron o persisten en dicho puesto de trabajo. Del mismo modo, el informe deberá contener información referida al trabajador, a quien se le diagnosticó la enfermedad ocupacional, información que cabe destacar es suministrada por la empresa investigada, como lo son: identificación completa del trabajador , fecha de ingreso y fecha de egreso (si aplica), dirección de habitación, mano dominante, sexo, condición actual de trabajo y grupo étnico, horas extras laboradas, número de vacaciones disfrutadas, duración de cada una, inscripción del trabajador ante el Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS), y si fueron realizados exámenes médicos, enunciando el tipo de examen, constancia de información dada al trabajador acerca de los principios de la prevención de las condiciones inseguras o insalubres presentes en el ambiente laboral del puesto o los puestos ocupados, educación recibida respecto a la promoción de la seguridad y salud, la prevención de accidentes y enfermedades ocupacionales, así como también en lo que se refiere al uso de equipos de protección personal, usados en aquellos casos donde no existan formas de control en la fuente o en el medio, antecedentes laborales, descripción del cargo ocupado, indicando el puesto habitual de trabajo, también deberá contener dicho informe, los datos de la gestión de seguridad y salud en el trabajo, producto de la evaluación realizada por el funcionario actuante; una vez verificado lo anterior en el informe de investigación de la enfermedad ocupacional deberá contener propuestas a la empresa y al comité de seguridad y salud laboral respecto a los planes de acción o cambios requeridos en los puestos de trabajo existentes o estudiados, así como de manera preventiva al momento de introducir nuevas maquinarias, tecnologías o métodos de organización del trabajo, con la finalidad de lograr que la concepción del puesto de trabajo permita el desarrollo de una relación armoniosa entre el trabajador y su entorno laboral. Como producto de esta investigación, el INPSASEL, mediante informe, calificará el origen de la enfermedad ocupacional. Es por ello que, no se puede hablar de prescindencia absoluta de procedimiento, ya que no se trata de un procedimiento de imposición de sanciones ante una falta o incumplimiento directo al infractor, sino a la verificación de una situación específica y personal en relación al trabajador, la cual se corrobora mediante la existencia de causalidad entre la enfermedad sufrida por un trabajador, como es en el caso de marras y su presunto origen con motivo al servicio que éste presta en su puesto de trabajo, mediante una investigación. Así pues, debe tenerse en cuenta, que la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo, su Reglamento y la Norma Técnica para la Declaración de Enfermedad Ocupacional (NT-02-2008), establecen un procedimiento administrativo, el cual no se encuentra estructurado en base al principio del contradictorio en esta materia, por cuanto no se trata de un procedimiento de imposición de sanciones ante una falta o incumplimiento directo al infractor, sino a la verificación de una situación específica y personal en relación al trabajador, la cual se fundamenta en la comprobación de la existencia de causalidad entre la ocurrencia de un accidente o enfermedad sufrido por un trabajador y su presunto origen con motivo al servicio que éste presta en su puesto de trabajo. En el caso concreto, tal como se ha venido señalando, por no ser un procedimiento contradictorio, el mismo no requiere de la notificación para iniciar su averiguación, aunado al hecho que de las copias certificadas del expediente administrativo se desprende, específicamente del informe levantado en la sede de la compañía, que estuvo presente el ciudadano Armando Hernández en su condición de Gerente de Recursos Humanos como representante de la empresa y un trabajador, así como el Inspector de Seguridad y Salud en el Trabajo adscrito a la DIRESAT Carabobo; llevando a cabo una investigación de origen de enfermedad ocupacional, y posterior a ello, se notificó a la empresa construcciones Juncal, C.A., de la certificación del Instituto, informándole a su vez los recursos a que tenía lugar. Desprendiéndose, que el Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales cumplió con el procedimiento administrativo establecido y respetó las garantías del administrado y su derecho a la defensa, razón por la cual considera esta Sala que el acto administrativo no adolece del vicio de inexistencia de procedimiento denunciado. En relación con el vicio de falso supuesto, la Sala Político Administrativa de este máximo Tribunal en Sentencia N° 01117, Expediente N° 16312 de fecha 19 de septiembre del año 2002, señaló: (...) el vicio de falso supuesto se patentiza de dos maneras, a saber: cuando la Administración, al dictar un acto administrativo, fundamenta su decisión en hechos inexistentes, falsos o no relacionados con el o los asuntos objeto de decisión, incurre en el vicio de falso supuesto de hecho. Ahora, cuando los hechos que dan origen a la decisión administrativa existen, se corresponden con lo acontecido y son verdaderos, pero la Administración al dictar el acto los subsume en una norma errónea o inexistente en el universo normativo para fundamentar su decisión, lo cual incide decisivamente en la esfera de los derechos subjetivos del administrado, se está en presencia de un falso supuesto de derecho que acarrearía la anulabilidad del acto. (Subrayado de esta Sala) Es decir que, el vicio de falso supuesto de hecho se configura cuando la Administración, al dictar un acto administrativo, fundamenta su decisión en hechos inexistentes, falsos o no relacionados con el o los asuntos objeto de decisión. Ahora bien de una revisión exhaustiva de las actas que conforman el presente expediente se observa que si bien es cierto que consta en el expediente administrativo una investigación de accidente por parte de la Diresat-Carabobo a la empresa construcciones Juncal, C.A., respecto a los ciudadanos Roberto Medina, José Bravo y Antonio Iseas, quienes no son parte de las providencias administrativas impugnadas por la accionante, no es menos cierto que también se encuentra un informe de investigación de accidente a la precitada empresa a los fines de realizar la investigación del accidente sufrido por el ciudadano Darwin José Hernández Escobar, bajo la orden de trabajo Nro.CAR-10-0439, por el ciudadano Evelio Guevara, con el carácter de Inspector de Seguridad y Salud en el Trabajo II, quien fue atendido por el ciudadano Armando Hernández, como representante de la empresa en su carácter de Gerente de Recursos Humanos, quien lo acompañó durante la inspección junto con un trabajador de la cita sociedad mercantil, desprendiéndose de la misma que la representación de la empresa consignó un documento denominado “acta de notificación de riesgos a trabajadores”, de fecha 01/03/2008, la cual estaba firmada por el trabajador Darwin José Hernández Escobar, manifestando el funcionario actuante que era generalizada y no estaba dirigida a los riesgos a los que estaba expuesto, así como tampoco describe las medidas preventivas y los equipos de protección personal que debía usar, de igual forma se evidencia que la empresa no suministró la formación por escrito en materia de seguridad y salud en el trabajo, se observa de la misma que la empresa suministró instrumental denominada “asignación de equipos / herramientas”, las cuales fueron recibidas por el trabajador en fechas 12 y 14 de marzo del año 2008 y 15 y 25 de abril del año 2008, concernientes a unas botas de goma, una bata de seguridad y un uniforme; la empresa inscribió al prenombrado ciudadano en el Instituto Venezolano de los Seguros Sociales en fecha 03/03/2008; tampoco la empresa realizó una investigación interna del accidente del trabajador a los fines de tomar las acciones correctivas y preventivas, aunado a que en la declaración realizada ante el INPSASEL colocaron una fecha “falsa o errónea”, así como el hecho de que la misma fue realizada extemporáneamente por cuanto el accidente fue el 06/06/2008 y la declaración se hizo el 11/06/2008. El funcionario competente señaló sus conclusiones respecto al caso y manifestó que el accidente ocurrió en su jornada de trabajo mientras realizaba las labores inherentes a su cargo, sin constatarse un procedimiento seguro de trabajo así como una formación adecuada en cuanto a los riesgos inherentes. De todo lo anterior se colige primeramente que resulta necesario para esta Sala ratificar lo expresado en la denuncia anterior, ya que sí hubo un procedimiento en el cual la empresa accionante tuvo participación activa en el mismo y del cual se desprende el incumplimiento en cuanto a las normas de seguridad y salud en el trabajo, lo que condujo al órgano administrativo competente por la materia y el territorio a certificar el accidente sufrido por el trabajadorDarwin José Hernández Escobar, como ocupacional. Aunado a todo lo anterior, es necesario precisar, como se dijo anteriormente si bien consta en el expediente administrativo una investigación de accidente por parte de la Diresat-Carabobo a la empresa construcciones Juncal, C.A., respecto a los ciudadanos Roberto Medina, José Bravo y Antonio Iseas, quienes no son parte de las providencias administrativas impugnadas por la accionante, esto no implica que el informe de investigación que también cursa en el expediente relativo al ciudadano Darwin José Hernández Escobar, no tenga nexo de causalidad entre la enfermedad y las actividades que él ejecutaba, ya que como se señaló hubo un procedimiento de investigación en donde se verificó el incumplimiento de las normas de seguridad e higiene del trabajo lo que finalizó en su posterior certificación tal como lo prevé el artículo 76 de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo. Desprendiéndose de lo anterior, que la Dirección Estadal de Salud de los Trabajadores de Carabobo del Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales (INPSASEL), no solo realizó el procedimiento administrativo y respetó las garantías del administrado y su derecho a la defensa, sino que actuó ajustado a la investigación realizada por el referido órgano administrativo respecto al accidente sufrido por el ciudadano Darwin José Hernández Escobar,razón por la cual considera esta Sala que el acto administrativo no adolece de los vicios delatados. DECISIÓN Por las razones antes expuestas, este Tribunal Supremo de Justicia, en Sala de Casación Social, administrando justicia en nombre de la República Bolivariana de Venezuela por autoridad de la Ley, declara: PRIMERO: SIN LUGAR el recurso de apelación interpuesto por la sociedad mercantilConstrucciones Juncal C.A., contra la decisión de fecha 06 de marzo del año 2014, emanada del Juzgado Superior Segundo del Trabajo de la Circunscripción Judicial del estado Carabobo; en consecuencia, SEGUNDO: CONFIRMA la sentencia apelada. Publíquese, regístrese y remítase el expediente a la Unidad de Recepción y Distribución de Documentos del Trabajo de la Circunscripción Judicial del estado Carabobo. Dada, firmada y sellada en la Sala de Despacho de la Sala de Casación Social del Tribunal Supremo de Justicia en Caracas a los veintitrés (23) días del mes de julio del año 2014. Años 204° de la Independencia y 155° de la Federación. El Presidente de la Sala, ________________________________ LUIS E. FRANCESCHI GUTIÉRREZ La Vicepresidente, Magistrado, __________________________________ CARMEN ELVIGIA PORRAS DE ROA ___________________________ OCTAVIO SISCO RICCIARDI Magistrada, Magistrada Ponente, ___________________________________ SONIA COROMOTO ARIAS PALACIOS __________________________________ CARMEN ESTHER GÓMEZ CABRERA El Secretario, _____________________________ MARCOS ENRIQUE PAREDES R.C. Nº AA60-S-2014-000522 Nota: Publicado en su fecha El Secretario,