CORPORACIÓN SERVICIO PAZ Y JUSTICIA SERPAJ CHILE RESUMEN EJECUTIVO: Estudio Exploratorio – Descriptivo: “Situación psicosocial actual de los niños y niñas y sus madres que fueron atendidas en el Subprograma de Apoyo y Orientación a la Familia de Origen, durante los años 2001 y 2006”. Valparaíso, Noviembre 2008. 1 Tomando en cuenta que la mayor parte de las investigaciones sobre el tema de la adopción, existentes tanto en el ámbito nacional como latinoamericano, se encuentran relacionadas a los padres adoptantes y las y los niños adoptados, se invisibiliza y por lo tanto se niega el problema de la mujer que decide ceder a un hijo o hija en adopción, quien además de asumir la complejidad de su propia trayectoria vital, se enfrenta al conflicto de un embarazo no deseado y al estigma social que implica negar la maternidad como una opción, lo cual en nuestro contexto cultural aparece como fundante para la construcción de la identidad de la mujer. En esta investigación, nos preguntamos respecto a la relación afectiva o vincular que estas mujeres logran establecer con su hijo o hija, partiendo de este conflicto inicial de asumir su maternidad, formulándose las siguientes preguntas: ¿Qué factores llevan a una mujer a considerar la opción de la adopción?, ¿Qué procesos inciden en la toma de decisión de no ceder finalmente a este niño o niña?, ¿Qué tipo de relación vincular tienen los niños y niñas no cedidos en adopción con sus madres biológicas?, ¿Tiene este conflicto inicial con la maternidad alguna incidencia en la posterior relación vincular entre madre e hijo/a? y ¿Afecta de alguna manera el desarrollo posterior del niño/a? El Subprograma de Apoyo y Orientación a la Familia de Origen, perteneciente al Servicio Nacional de Menores (SENAME), atendió entre los años 2001 y 2006 a un total de 1723 casos de personas en conflicto con su parentalidad, de las cuales se estima que el 99,5% son mujeres1. Según el estudio “Caracterización y Perfil de Madres que consultan/ceden a sus hijos para adopción” entre los años 2002 y 2005, el 73,8% de las mujeres afirman haber consultado con el fin de ceder a sus hijos en adopción y el 26,2% sólo para recibir orientación; sin embargo, esta cifra se invierte al considerar el porcentaje de consultantes que finalmente cede a sus hijos en adopción, que alcanza sólo al 26,8% del total; en tanto que el 73,2% decide asumir al niño o niña, esta cifra a su vez es coherente con los datos de la Fundación San José para la Adopción, que define que el 79,2% de las mujeres en conflicto con su maternalidad, atendidas en el Hogar San José durante los años 2004 y 2005, terminan al finalizar su embarazo decidiendo no ceder a sus hijos o hijas en adopción2 . A nivel nacional, existe escasa información acerca de cuáles son los factores que inciden en esta decisión y la influencia que en ella tiene la intervención de las instituciones encargadas de brindar apoyo en el proceso de toma de decisión. Por otra parte, no existe información respecto a la actual situación psicosocial y de vinculación parental, de los niños y niñas no cedidos en adopción, cuyas madres consideraron esa opción, acercándose a consultar y recibiendo orientación al respecto. Esta carencia de información es una importante dificultad, si se observa el perfil de las mujeres que consideran la opción de ceder en adopción, que corresponde a un segmento con un alto grado de vulnerabilidad social, y se enfrentan a la maternidad con condiciones precarias, en relación con sus redes de apoyo y condiciones socioeconómicas, esta situación de vulnerabilidad de las madres, necesariamente afecta a sus hijos que nacen. Conocer los factores que inciden en la decisión de no ceder en adopción, las dificultades que enfrenta la madre una vez que decide quedarse con el niño o niña, las condiciones del actual desarrollo psicosocial de estos niños y niñas y la vinculación que hoy tienen con sus familias biológicas; resulta especialmente importante al momento de decidir estrategias de acción pertinentes desde la perspectiva de los derechos de la mujer y de los niños y niñas. SENAME. “Caracterización y Perfil de Madres que consultan/ceden a sus hijos para adopción”. Santiago, 2007, donde se señala que entre los años 2002 y 2005 sólo se atendieron 4 hombres en este programa. 1 Anguita, P. “Hacia la decisión de entregar un hijo en adopción...Una mirada desde las interacciones simbólicas”. Tesis de pre-grado para optar al título de Trabajo Social y grado de licenciado en Trabajo Social. Pontifica Universidad Católica de Valparaíso, Valparaíso 2007. 2 2 Así, el objetivo general se definió como “Estudiar comprensivamente la actual situación psicosocial y de vinculación parental de una submuestra de niños y niñas no cedidos en adopción, hijos de madres en conflicto inicial con su maternidad que fueron atendidas por el Subprograma de Apoyo a la familia de origen de SENAME, entre los años 2001 – 2006 a nivel nacional en tres zonas geográficas previamente definidas, indagando en los factores que pudieron favorecer u obstaculizar su proceso de desarrollo.” Enfoque Metodológico Este estudio desarrolla estrategias de aproximación tanto cualitativas, como cuantitativas, sin embargo, el enfoque asumido, dado el paradigma que guía el estudio es un enfoque cualitativo, pues esta es la única mirada que nos permite aproximarnos a la complejidad del fenómeno desde sus propias estructuras de sentido. El enfoque cualitativo, permite analizar con profundidad ciertos fenómenos y adentrarse en la complejidad de los significados subjetivos, las historias personales y los procesos particulares, que dan cuenta de la realidad de la mujer que consulta por la posibilidad de otorgar en adopción y el niño o niña, que finalmente no es cedido por ella. Pero esta realidad que aparece como particular es a su vez una representación del contexto social, un reflejo de estructuras de significados complejas, que como sociedad construimos, según lo señala Van Dijk se puede afirmar que “Los modelos mentales permiten que ocurra (y explican) el enlace entre lo general y lo específico, entre lo social y personal, y en consecuencia entre el grupo por una parte y los integrantes sociales individuales por la otra” (Van Dijk 1999). Estos modelos mentales se encuentran presentes en los discursos que construimos socialmente y que se expresan en nuestros actos de habla, por ello es posible afirmar que a través del discurso de cada mujer estamos accediendo al discurso de “las mujeres” y a la representación de su realidad. Estrategias y Técnicas de Recolección de Información Técnicas Cualitativas Entrevista semiestructurada, Revisión de material documental, Estudio de Caso, Entrevista Focalizada, Evaluación Psicológica, Técnicas Cuantitativas La mirada cuantitativa nos permite acceder a datos objetivos, que permitan realizar estimaciones, respecto del comportamiento de una población en relación con determinadas variables en estudio. En este sentido el método de encuesta, es una de las técnicas clásicas para el logro de este propósito. En este estudio, la encuesta corresponde al instrumento que permitiió desarrollar un sondeo exploratorio, una primera aproximación a la realidad de estas mujeres y sus hijos/as. CONCLUSIONES RESPECTO A LAS OPINIONES ENTREGADAS POR LOS Y LAS PROFESIONALES DE LAS UNIDADES REGIONALES DE ADOPCIÓN Objetivos del Subprograma de Orientación y Apoyo a la Familia de Origen. Este subprograma pretende abarcar amplios radios de intervención que van desde el apoyo directo a las mujeres en conflicto con la maternidad en diferentes momentos: acogida, contención, orientación, apoyo terapéutico, vivencia del duelo de quienes deciden ceder a sus hijos/as para adopción y acompañamiento a las familias que han decidido asumir al niño/a; 3 pasando además por coordinación de redes y labores de difusión y sensibilización en la comunidad. En la práctica se visualiza la complejidad de llevar a cabo todas estas acciones, por tanto, una buena parte del trabajo con la madre biológica depende de la decisión de ella de continuar o no el proceso. Por otra parte, la dotación de recurso humano en las Unidades Regionales es absolutamente insuficiente para el cumplimiento de estos objetivos. No se observa en ninguna Unidad Regional la existencia de al menos un o una (1) profesional con dedicación exclusiva a este programa. Esto dificulta a su vez el trabajo interdisciplinario que se plantea en sus objetivos. El cumplimiento de los objetivos propuestos debería traducirse necesariamente en una profundización de la comprensión de la adopción, como fenómeno multidimensional y complejo, que cuestiona elementos relevantes de nuestras representaciones y construcciones culturales. Por otra parte, en términos concretos se visualiza la necesidad de aumentar el recurso humano que lleve a cabo esta tarea. Ingreso de la Mujeres al Subprograma de Orientación y Apoyo a la Familia de Origen. Tras los relatos de los y las profesionales se evidencia la dificultad de que las mujeres acudan a las sesiones o entrevistas pactadas en las Unidades Regionales, lo que conlleva a una discontinuidad en el proceso de intervención del Subprograma. Las limitaciones en la dotación de recursos humanos, probablemente tiene un grado de relevancia en este hecho. A ello se suma las limitaciones presentes en el proceso de acogida y primera entrevista, donde en la mayoría de los casos tiende a ser una instancia de “entrega de información” principalmente jurídica, dejando relegado en un segundo plano la co-construcción de un vínculo con la mujer conflictuada con su embarazo. Es importante señalar que al acercarse a las Unidades Regionales, la mujer acude con un primer nivel de elaboración de su decisión, de otro modo no se acercaría. Si bien, hay sentimientos de ambivalencia presentes en ella, estos pueden dar cuenta del enjuiciamiento social que está presente frente a este accionar. A pesar de ello, llama la atención que el proceso seguido por los y las profesionales va orientado a reelaborar y evaluar esas motivaciones iniciales. Este proceso de discernimiento es un elemento presente, tanto en las intervenciones y el discurso de los y las profesionales de las Unidades Regionales de Adopción de SENAME, como en los organismos colaboradores que ejecutan el Subprograma. Empero, como se destaca anteriormente, la decisión que elabora la mujer sobre la posible cesión del niño/a, se encuentra empapada por las construcciones sociales presentes en nuestra sociedad sobre la maternidad y sobre la familia. “…es un programa que no solo se refiere a mujeres con guagua, sino que hace todo un proceso de discernimiento, que es en el fondo apoyar a las mujeres con el objeto de que ellas asuman, si las mujeres pueden asumir, el objeto es ese, se trata de visualizar que la familia pueda apoyar y que su progenitor las poye, de que ellas salgan adelante.” Esto permite afirmar que el acompañamiento profesional es fundamental en la toma de decisión de la mujer, que en la práctica se ve limitado por las intervenciones directas de los y las profesionales SENAME. A ello, se suma las limitaciones en recursos humanos, donde los y las profesionales no pueden dedicar el tiempo que se necesita para realizar adecuadamente este proceso de discernimiento con las mujeres. 4 Proceso de Intervención con las madres biológicas (mujeres). Si bien, el proceso de intervención se programa y ejecuta dependiendo de caso atendido, considerando las dificultades de acceso que puede tener la mujer a cada Unidad, es difícil entender el porqué se centra la responsabilidad en ella de darle continuidad del proceso, es decir el desarrollo favorable del proceso de intervención va a depender si ella acude o no a la Unidad respectiva. Por otra parte, no hay un o una profesional que se encargue específicamente de la programación y ejecución de este Subprograma, sino que lamentablemente los y las profesionales deben dividir sus horas de atención entre los diversos programas presentes. Si bien, se realiza un proceso de diagnóstico, por el hecho connotado anteriormente, este primer paso en la intervención puede no realizarse desde la integralidad que se espera. Así también, se evidencian dificultades en el registro de las sesiones de intervención; siendo la fase diagnóstica un pilar importantísimo para el discernimiento y posterior decisión, es necesario revisar la ejecución de dicho proceso, que se observa muy dispar y con distintos niveles de rigurosidad en cada contexto regional. En concreto, es muy difícil acceder a datos claros y confiables acerca de las madres biológicas. Bajo el contexto de estas dificultades, se confirma en la práctica la invisibilización de la mujer y/o de la familia de origen del niño/a como un actor necesario para el proceso de adopción, pero que socialmente es necesario ocultar. La mujer en conflicto con su embarazo aparece como una imagen disociada con su representación de madre, su idealización más potente y emblemática se cae y rompe con el papel establecido en la dinámica teatral de la cotidianeidad. Lo anterior, dice relación con lo planteado por Chavanneau de Gore (1991), los y las niños/as que son ubicados para fines de adopción suplen las necesidades de por una parte “los padres biológicos que no pueden conservar a sus hijos y las parejas infértiles que no pueden tener los propios.” Así también, “se ejercita la responsabilidad social proveyendo de padres a aquellos niños que carecen de ellos o quienes funcionen como tales”. Pese a ello, la autora destaca que dentro de los enfoques y prácticas que se ejecutan en los programas de Adopción, prepondera principalmente la satisfacción de las necesidades de los padres adoptantes, dejando totalmente relegados a los padres biológicos, lo cual permitiría comprender su invisibilización “No hay menciones a los efectos a corto o a largo plazo que provoca en los padres de sangre la entrega de sus hijos con fines de adopción. Esta falta de consideración como “sujetos” participantes lleva pensar en el otro significado del término, como “sometidos” a fuerzas superiores a ellos (la de la ley en primer término) que los marginan de su calidad de tales”. (Giberti y Chavanneau, 1991) Proceso de Seguimiento. Como se señaló anteriormente existen importantes dificultades para llevar a cabo este proceso, tanto desde las Unidades Regionales, como en los organismos colaboradores. Desde lo visualizado, el proceso de seguimiento no está siendo ejecutado por las Unidades Regionales, a pesar que se especifica la relevancia que este tiene, especialmente en los casos en que la mujer decide quedarse con el niño/a. Si la información acerca de quienes ceden en adopción es de difícil acceso, es aun más complejo acceder a quienes no ceden. La falta de instrumentos de registro únicos, dificulta aún más este proceso. 5 Vinculación con las Redes Sociales. La necesidad de trabajar con las redes sociales, puede visualizarse en dos ámbitos: En primer lugar la necesidad de sensibilizar a las redes sociales y de salud, en miras de evitar la estigmatización y malos tratos que reciben las mujeres que deciden ceder a sus hijos/as, comprendiendo que esta violencia se enmarca en creencias sociales y culturales arraigadas en nuestro país. La adopción es vista como un acto de amor desde la lógica de los adoptantes, en tanto una mujer que cede a su niño/a en adopción es sancionada socialmente por ello, sin que se vincule una mirada comprensiva del contexto que origina dicha decisión. En segundo lugar los profesionales tienden a visualizar que en el caso de las mujeres no cedentes se hace necesario “generar estrategias de control social, tendientes a evitar la posible vulneración de derechos del niño o niña”, por tanto se visualiza que aquella mujer que duda de su maternidad, es potencialmente vulneradora. Sin embargo, es evidente el precario contexto de apoyo social con que ellas cuentan, pues se reconoce como un rasgo transversal a estas mujeres la falta de redes de apoyo tanto el ámbito familiar, como institucional. Esto hace aun más relevante el proceso de seguimiento y vinculación con las redes sociales que el mismo SENAME posee dentro de sus organismos colaboradores, orientados a la protección de la infancia. Sin embargo, no ha sido posible acceder a instrumentos claros que hablen de un procedimiento en este sentido, instalado como política institucional respecto a las madres no cedentes. Lecturas críticas respecto al rol de las instituciones en el trabajo con la madre biológica. En cuanto al proceso de instauración de la ley de adopción, de inmediato surge la pregunta: ¿Es posible realizar intervención objetiva y comprensiva de parte de profesionales que están viendo asuntos a partir del niño/a como sujetos de derechos, evaluando a sus posibles padres adoptivos y atendiendo a las madres biológicas consultantes? Estando todo el proceso centrado en un único servicio, se observa la relevancia de posicionar con mayor fuerza la mirada a la problemática desde las mujeres en conflicto con su maternidad, en tanto sea el Servicio Nacional de Menores responsable de velar por los derechos de la infancia en vulnerabilidad, quien debe atender también a las madres, se observa la necesidad de articular su accionar con otros organismos del Estado, que pueden aportar otros elementos desde la mirada de los derechos de la mujer, que cumple múltiples roles además del de madre. Quizás sea necesaria una articulación de los servicios del Estado que velan tanto por los derechos de la mujer, como por los del niño/a. Por tanto, se habla de dos momentos, de situaciones diferentes: cuando la mujer embarazada manifiesta claramente sus conflictos con ser madre, y cuando la hija/o ya ha nacido, siendo entregado al cuidado de otros parientes o judicializado e ingresado a red SENAME. Se trataría, por tanto, de formas diferentes de abordaje. Se considera en este punto relevante el diferenciar funciones de las instituciones: un servicio como el SERNAM, podría abordar a las mujeres en conflicto con su maternidad de manera integral; y SENAME intervenir al momento que niño/as son ingresados a organismos de protección. Por otra parte desde el ámbito legal, son los tribunales de familia quienes están llamados a pronunciarse frente a la temática, sin embargo, se observan limitaciones en cuanto a la factibilidad de que una mujer en conflicto con su maternidad se dirija en un momento de crisis vital, como es el proceso de embarazo, a consultar directamente a dicho tribunal, el cual al 6 mismo tiempo atiende otras problemáticas, llámese protección, pensiones, divorcios, entre otras. Nuevamente se cristaliza en este punto la necesidad de contar con lugares de atención para estas mujeres que permitan dar respuestas a sus dudas y de ser orientadas, más allá del subprograma elaborado e implementado por SENAME. Respecto a la visión de la mujer, la maternidad y la adopción. Por último en este punto, al acceder a la comprensión del rol materno, se observa una mirada tradicional de acercarse al tema, ya que se releva que en nuestra cultura, la maternidad sigue presentando una gran relevancia a nivel social, la cual es idealizada. Por ello, arraiga creencias que llevan implícita la identificación entre mujer y madre, siendo comprendida como el objetivo central de la vida de las mujeres y de la naturaleza femenina es la maternidad. Las mujeres son consideradas con una capacidad natural de amor, de estar conectadas y empatizar con otros, constituyéndose para la mayoría de éstas, en un eje central de su propia identidad. De esta forma, la disociación de la madre con el hijo/a resulta como no natural, como algo que escapa a lo correcto y se le opone, se contradice. Frente a esto, la mujer que presenta un conflicto con su embarazo y con asumir su maternidad, se convierte en la negación de la naturalización de la maternidad como referente fundamental a la hora de definir y representar a la mujer y al niño/a. Su mandato natural, idealizado y divino, es quebrantado. Este quebrantamiento es el gatillante legítimo del poder de sancionar a la mujer. En su relación aparece la figura del infante como sujeto abandonado, dejado y desprotegido, donde su derecho natural de conformase como miembro de una familia, se vulnera. Esta imagen del niño/a abandonado es una de las representaciones más dolorosas y repudiadas en nuestra sociedad, la inocencia que se constituye en cuerpo desprotegido, solo y flagelado de un niño, nos conmueve. Por tanto, las causas que originan este abandono, son impugnadas y sancionadas. Además, se encuentra presente en el fenómeno de la adopción la familia, la representación de lo primero, de lo fundamental, del origen, se constituye en la fuente de socialización primaria, que entrega la constitución valórica, normativa, de significaciones y patrones vinculares, lo que hace constituirnos como sujetos (as). Bajo este contexto, se presenta la figura de la familia disfuncional, monoparental, en condiciones de precariedad tanto de capital económico como cultural, y por otro, la imagen de una familia bien constituida, con una cierta estabilidad económica y capital cultural y que además se presenta como una familia que quiere recibir, acoger, cuidar y proteger a este niño/a que se encuentra en una condición de abandono. Frente a lo anterior podemos señalar que en la tensión de estos elementos, en los discursos de los profesionales se presenta el fenómeno de la adopción como una práctica positiva, visualizada como otra forma de hacer familia, además de ser una oportunidad para este niño/a en condición de des-amparo, de incorporarse a una familia que le quieran y protejan. Sin embargo en esta lectura positiva, la figura de la madre, no cobra sentido, es negada, invisibilizada del proceso de la adopción, centrando su interés en el niño/a y en la familia adoptante. Esto da cuenta del castigo valórico, sancionador que se realiza con la madre, oscureciendo sus motivos y desconociendo sus historias. Sin embargo, podemos dar cuenta de cómo el imaginario materno opera fuertemente en el discurso y representaciones de los y las profesionales, que a pesar de que se signifique la adopción como una oportunidad para estos padres de constituir una familia y para el niño/a - que está en una situación de abandono -, la des-vinculación de la madre con el hijo/a resulta ser un 7 acto des-naturalizado, intentando (consciente o inconscientemente) que esta situación no ocurra. Esto tiene una correlación directa con los discursos de los expertos de los programas de adopción…“es un programa que no solo refiere a mujeres con guagua, sino que hace todo un proceso de discernimiento, que es en el fondo apoyar a las mujeres con el objeto de que ellas asuman, si las mujeres pueden asumir el objetivo es ese, se trata de visualizar que la familia pueda apoyar y que su progenitor las apoye, de que ellas salgan adelante.” Frente a esto, podemos señalar como la adopción a partir de la interpretación de los discurso de los y las profesionales, no se constituyen en ningún momento como una opción legítima de la mujer, que se encuentra en conflicto con su embarazo, el no asumir el rol materno. Esto hace aun más necesario, instalar una discusión tanto al interior del SENAME, como de otros servicios del Estado, que problematice las tradicionales visiones en torno al tema de la Adopción, protegiendo los derechos de todos los actores involucrados en el proceso; niños y niñas, madres y padres biológicos y padres adoptivos; y sus particulares situaciones, contextos e historias. CONCLUSIONES RESPECTO A LA APROXIMACIÓN A LAS SUJETAS Y SUS HIJOS(AS). En relación al análisis de las entrevistas, podemos señalar, que en el fenómeno de investigación, la diversidad y particularidad de las sujetas de investigación, es un factor relevante. Por un lado, podemos señalar que las historias de vida de las sujetas, se va configurando a partir de experiencias relacionales vinculares distintas, que van desde una dimensión en donde la relación afectiva se configura a partir de patrones relacionales basados en el afecto y el reconocimiento, hasta por otro lado, desde experiencias vinculares de des apego y abandono. Además, podemos manifestar, que el factor económico y cultural, también resulta ser una situación diversa en la mujeres de la investigación, ya que atraviesa las clases sociales desde estados de pobreza, donde las expectativas sociales se proyectan a la concretización de los estudios de enseñanza media, hasta mujeres que ocupan una posición más acomodada en la escala social, donde su capital cultural y expectativas de vida, se vinculan principalmente al poder finalizar una carrera de estudios superiores en la universidad. De esta forma, podemos concluir en este punto, que el embarazo no planificado ni deseado, resulta ser conflictivo en todas las mujeres, justamente por su carácter de inesperado provoca un conflicto y ambivalencia frente a la decisión de entregar su hijo/a en adopción. Otro punto relente de destacar a partir del análisis de las entrevistas, dice relación con las imágenes y construcciones sociales que en éstas mujeres operan, las que dicen relación con los imaginarios sociales en cuanto al sujeto mujer homologable como madre y la construcción en cuanto a la familia desde una mirada tradicional, las cuales se manifiestan y de manera transversal en estas mujeres. En este sentido, podemos señalar que la imagen de mujer se desplaza y se constituye en cuanto tal a partir del hecho de ser madre. De esta forma, la maternidad resulta ser idealizada, pues es en está donde las mujeres encuentran reconocimiento y posición social. Así las sujetas de estudio, visualizan en la actualidad su condición de madre como lo más significativo y trascendental en sus experiencias de vida. Por otro lado, la imagen de familia también resulta transversal en el imaginario de las mujeres de estudio, el cual dice relación con la imagen de familia tradicional, donde la figura materna y paterna es lo esperado para el cuidado y crianza de los hijos e hijas. 8 A partir de lo anterior, es que podemos comprender el papel que cobra la familia en la decisión de estas mujeres de entregar a sus hijos/as en adopción, en el sentido que todas las mujeres visualizan como factor determinante el apoyo y aceptación de su familia, en su decisión. Por otro lado, otro aspecto que llama la atención, dice relación con la figura masculina, la cual a partir de los discursos de las mujeres, no resulta ser un actor relevante en su decisión, esto se puede analizar a partir que la mayoría de las mujeres cuando supo de su estado de embarazo, sus parejas que en su mayoría se constituían en relaciones estables, las abandonaron. Sin embargo, éstas optan por asumir y “apechugar” solas su labor de cuidado y crianza de sus hijos/as. Esto se puede leer a partir de la lógica patriarcal que impera en nuestra sociedad, donde la figura masculina paterna, se naturaliza el hecho de que no se haga cargo de los hijos/as. Esto queda totalmente de manifiesto en las políticas públicas y de Estado, donde no existe una exigencia que el padre asuma su papel y responsabilidad en cuanto a un hijo/a, sino más bien se le invisibiliza recayendo la responsabilidad en la madre, la cual será cuestionada y sancionada si es que sus prácticas se separan del ideal materno. En relación con la dinámica vincular entre madre – hija/o A partir del análisis realizado a los discursos de la sujetas en torno a las pautas relacionales afectivas con otros significativos, podemos señalar la importancia de las relaciones primarias que establecen los infantes con un adulto afectivo, ya que es a partir de ahí, donde se va constituyendo el yo de los sujetos, a partir de las evaluaciones que realiza el infante de las respuestas de sus necesidades y deseos. Si el infante percibe que sus deseos y necesidades son satisfechos de forma oportuna y en forma eficaz, éste adquiere la confianza necesaria para poder explorar su entorno. En este punto, es importante mencionar la dialéctica que se produce en las relaciones vinculares primarias, ya que la sujeta niña/o, necesita diferenciarse de su adulto significativo como una forma de poder alcanzar cierta autonomía y desenvolverse con seguridad en su habitar en los espacios, pero por otro lado, para producir estos procesos de diferenciación precisa de otro, este otro es fundamental en su constitución como sujetas, ya que es él quien valida, re- afirma sus prácticas, percepciones y emociones, otorgándole así una existencia en el escenario social. De esta forma, en las sujetas investigadas, podemos afirmar que a partir de sus relaciones afectivas basadas en el abandono, al no producirse un reconocimiento, protección y contención de otro significativo, su capacidad de configurarse como un sujeto validado no se potencia, por tanto sus actos, emociones y percepciones no son retroalimentadas como prácticas válidas. Por otro lado, en aquella sujetas donde su relación vincular se basa en los afectos, donde la madre o un adulto significativo, puede leer y responder a las necesidades del niño/a, se van configurando un apego seguro, fundamentado en la confianza y cercanía que percibe el niño/a en relación a esta figura protectora y de afecto. De esta forma, se van configurando como Pautas Internas Activas, que dice relación a la forma en que establece vínculos significativos con los otros en el desarrollo de sus experiencias particulares, que se van constituyendo en la incorporación de una percepción de sí mismo y del entorno, es decir, estas pautas se conforman como un conocimiento cognitivo y emocional, que media en las relaciones que el infante en su desarrollo establecerá con los otros. Así, las pautas relacionales, resultarían ser la base que posibilitaría su entrada en la creación y constitución de sus estructuras mentales, y por ende mediarían en la incorporación efectiva en la vida social. 9 En este sentido, la Teoría del apego, resultaría ser una perspectiva estructural y determinista, en cuanto a la constitución de las sujetas, ya que ésta, afirma que estas pautas relacionales establecidas en los vínculos primarios, se mantendrán y mediarán en sus relaciones afectivas durante toda la vida de los sujetos. Esto daría cabida a nuestra hipótesis de investigación, respecto a lo transgeneracional del vínculo, que si bien en algunos casos investigados, el abandono es un realidad que se manifiesta, no obstante, no podemos negar el hecho de que estas mujeres/ madres, no han contado con una intervención que les permita romper con la circularidad de la problemática. De esta forma, es necesario reflexionar en torno a la pertinencia de la Teoría del interaccionismo simbólico en el fenómeno de investigación, ya que a partir de su incorporación en el análisis, posibilita comprender la tensión y el conflicto que genera el mandato materno y la constitución en cuanto familia en estas sujetas, ya que al operar éste como una imagen idealizada en su psiquis, se instaura como un deber ser en cuanto sujeto madre, pero que se contradice en sus prácticas maternas percibidas en cuanto hijas en su contexto familiar. De esta manera, cuando la sujeta niña se convierte en madre, actualiza sus experiencias maternas con su madre, configurándose ésta en su modelo in – corporado, el cual se activa y actúa en oposición con la imagen sublimada de madre y de familia. Asimismo, al percibir esta incongruencia entre ideal y prácticas, las sujetas se descubren así mismas incapacitadas para maternizar en su relación madre-hija. De este modo y de acuerdo con la teoría, si las sujetas no han sido maternizadas, éstas tampoco podrán maternizar, ya que no incorporan en ellas esta capacidad. Sin embargo, esta teoría nos permite generar una fractura en cuanto a los postulados de Bowlby respecto al determinismo establecido a partir de los Modelos Internos Activos, ya que si concebimos a las sujetas investigadas como individuas con capacidades intrínsecamente creativas, en cuanto productoras de sociedad, también son capaces de generar nuevas formas de vinculación con los otros. De esta forma, una intervención que apunte a fortalecer su potencial capacidad creativa, dirigida a la integralidad de las sujetas, posibilitaría una amplitud de sí misma respecto a los otros, ya que al producirse en las sujetas una comprensión de su situación de maternidad en tanto hija y madre, despierta en su mirar (se) la capacidad de ponerse en el lugar del otro, esclareciendo y sobrellevando aquellas situaciones que les pudieran resultar indeseables o traumáticas, en efecto, en esta capacidad mentalizadora se desarrolla una comprensión hacia su madre, y asimismo, a ella en cuanto tal. Además, al desplegar en ella procesos de reflexión y abstracción, emerge la imaginación como una búsqueda de formas posibles de establecer relaciones afectivas con otros. Así el trabajo investigativo, cobra relevancia, ya que nos pone en contacto y conocimiento con las historias de vida de éstas sujetas, lo que nos permite comprender la complejidad del fenómeno de investigación, lo cual debiese ser tomado como punto de referencia en el abordaje e intervención de éste. En relación a la comprensión e intervención del fenómeno desde la Unidades Regionales de Adopción. En relación a lo anterior, es necesario dar cuenta de consideraciones, las cuales nos permitirán comprender la “realidad” en que nos situamos, donde construimos nuestro fenómeno de estudio. Es así, que la concebimos como un montaje de diversos elementos que la van constituyendo. Frente a lo anterior, y desde una necesidad analítica, para poder comprender, 10 explicar y clasificar los fenómenos que se constituyen en esta madeja - la realidad - es que se divide en múltiples dimensiones, ya sean sociológicas, psicológicas, económicas, biofisiológicas, políticas, culturales e históricas, por ende, compleja. En este sentido, se van articulando dichos elementos, pero no de manera uniforme, sino más bien, en un movimiento que genera tensiones, contradicciones, coyunturas, bisagras; las cuales otorgan dinamicidad a esta construcción social. Es así, que frente a la complejidad que nos presenta la realidad al ser multidimensional, emerge una necesidad analítica, la cual ha generado por una parte, una profundización en el conocimiento del ser humano y de la “realidad”, que construye y lo constituye, pero por otro, en el afán de comprender la realidad cae en una simplificación de ésta, lo que se traduce en un cúmulo de lógicas fragmentarias. Asimismo, este fraccionamiento ha ido estableciendo discursos fragmentados de y desde la “realidad”, los cuales no logran dar cuenta de su complejidad, ni de los sujetos que la construyen. De esta forma, este estudio nos desafía a comprender los fenómenos desde y en una perspectiva holística, buscando la generación de discursos que apunten a la transversalidad de los conocimientos. Estas lógicas fragmentarias, operan también en la política social, en torno al fenómeno de la Adopción, convirtiéndola de este modo en políticas sociales que transitan desde la infancia, la familia, la mujer, la educación, el trabajo y la vivienda. Es así como nuestro objeto de estudio, se encuentra enmarcado dentro de la institucionalidad del SENAME, el cual en su forma de ver, comprender e intervenir la realidad social, realiza procesos de descomposición y simplificación de ésta, ya que por un lado y dentro de las lógicas fragmentarias, éste se ocupa e interviene a partir y con el sujeto niño/a, desvinculándolo de su contexto más inmediato y que corresponde a la vinculación con su madre. Así aplican una forma de operacionalizar las maneras de actuar bajo estas lógicas, disgregando y acotando la intervención hacia ellos /as, invisibilizando el carácter totalizador de la realidad en la cual se están desarrollando. Aún cuando el SENAME desarrolla intervenciones psicosociales en las que consideran el contexto familiar y las relaciones que allí se establecen, la encapsulan como hechos aislados de un contexto más amplio, esto potenciado también por el imaginario hegemónico que se tiene de la maternidad y la familia. De esta forma, en la generalidad de los casos, se asume que el niño /a es una “víctima” de su madre, puesto que ha sido ella quien lo abandona y no cumple con su papel socialmente asignado de cuidado, protección, guía, etc. Y / o es ella quien los ha vulnerado. El problema es que habitualmente, se enfoca a la familia a partir de sus miembros y no como institución; esto es aún más problemático si se considera que familia y mujer son vistas de manera casi análoga. No obstante, cuando los temas de familia se vinculan a las imágenes de lo masculino / femenino, surgen enfoques más actualizados desde la perspectiva de los derechos y con énfasis en la introducción de modificaciones legales. Frente a todo lo anterior, es que planteamos (di)vertir la lógica fragmentaria de aprehender e intervenir en y desde la realidad social, particularmente en el fenómeno de la adopción, el cual esta íntimamente relacionado con la Maternidad, puesto que ésta no se puede comprender sino es en relación dialéctica entre la madre, el hijo /a, y de ambos con el contexto en el cual se desarrollan. En este sentido, se hace manifiesta la necesidad de generar un conocimiento que posibilite el despliegue de estrategias de intervención con estas mujeres en conflicto con su maternidad, desde una perspectiva holística que apunten a desarrollar procesos reparatorios tanto psíquicos como sociales con ellas y sus hijas e hijos, para lo cual, se tiene que 11 primeramente, relativizar las concepciones que se tienen de éstas – como “malas madres”– y reconocer sus experiencias e historias de vida, de comprenderlas dentro de su integridad y complejidad. Además, se precisa otorgarle densidad al trabajo interdisciplinario que se lleva a cabo por Trabajadoras /es Sociales y Psicólogos /as fundamentalmente, haciendo hincapié en la articulación de las distintas dimensiones que constituyen el fenómeno, considerando las particularidades, singularidades que conforman cada caso, realizando así una intervención contextualizada y situada. En síntesis, es necesario recalcar el tránsito de las políticas, desde una sobrevaloración de las mujeres como "encargadas" de la familia en la visión cultural más tradicional, hacia una visión de mujer más posicionada desde el espacio público, que sin embargo, cuya materialización o concretización dentro de las prácticas cotidianas en los diversos escenarios encargados desde el SENAME, no han podido desarrollarse, ya que, se sigue perpetuando la lógica fragmentadora del escenario social, puesto que, por un lado, no existe un trabajo coordinado e interinstitucional respecto a la temática de la familia y la infancia. 12