Articulación En primer término es casi inexcusable comenzar acotando el concepto de articulación para que nos permita a los docentes reflexionar a partir de un único lenguaje, evitando caer en desencuentros. Tomemos la definición planteada en el Pre-Diseño Curricular para la Educación Inicial del GCBA: "El concepto de articulación se refiere a la unión o enlace entre partes. Esto supone reconocer que las partes son distintas entre sí y a la vez forman parte de un todo". Continúa diciendo ese documento: "Este primer nivel de reconocimiento de las diferencias conlleva un necesario trabajo en conjunto."1 Esta definición implica que la articulación es (o debe ser) mucho, muchísimo más que una sumatoria de hechos aislados, por más buena voluntad que se ponga en su concreción: "es una cuestión de gestión institucional, de funcionamiento institucional, en relación con (…) el proyecto educativo institucional"2 ¿Por qué articular? La articulación es uno de los requisitos de la tan mentada (y meneada) calidad educativa, ya que los chicos articulados aprenden más y mejor, pues se eliminan (o atenúan) los quiebres. Es decir que la articulación es una estrategia para favorecer la continuidad de los aprendizajes, la gradualidad y el pasaje feliz, mórbido, fluido y no traumático interaño o interniveles. Esa articulación responde a una concepción ecológica del desarrollo (ecología social) que supera la idea de sucesión de fases rigurosamente definidas y netamente diferentes, evitando roturas en los puntos neurálgicos de la escolaridad.3 ¿Por qué es necesaria? Porque "supone un cambio cualitativo con respecto a la contigüdad" (el simple pasaje de un año a otro). Fundamenta Miguel Angel Zabalza afirmando que en la contigüidad "no hay interacción entre las partes, sino 1 1999. Marco general. Pág. 32. (El destacado es nuestro). 2 Ratto, J. Aportes y desafíos para la articulación. XI Curso para directivos. Consudec. Julio de 2001. 3ver: Bronfenbrenner, U. L'ecologia dello sviluppo umano. Bologna. Il Mulino. 1986. 1 simple inmediación". Mientras que "en la continuidad se produce un intercambio entre las partes conectadas; ambas se comunican, interactúan, se modifican y se condicionan mutuamente". Esto que es una fortaleza, puede constituirse también en un riesgo, si esas partes llegan a supeditarse una a la otra, a subordinarse, a perder la identidad formativa que les es propia. Todo consiste en no franquear el límite, en ser cuidadosos y cautos y en asumir a la par la riqueza y la dificultad de la tarea, logrando unidad en la diversidad y cohesión a partir de las diferencias, para desembocar en un tránsito que no implique sobresaltos innecesarios. ¿En qué se fundamenta? En la idea de la escolaridad "como proceso global y continuo, a lo largo del cual los sujetos van creciendo y educándose con un sentido unitario"4. Para garantizar esa globalidad y continuidad es imprescindible generar una "trama articular"5. Es la única manera de no perjudicar a los chicos y de evitar el fracaso escolar. Otro fundamento de la articulación lo constituye el que las instituciones que articulan gozan, por ello, de un éthos pedagógico superior, entendiendo éthos como "tono, carácter, estilo que caracteriza una institución", sentido que le da Peter Mc Laren6. Tipos de articulación Hay dos tipos o vectores de articulación: * horizontal * vertical La articulación horizontal o de extraescuela es el "conjunto de procesos de coordinación a desarrollar entre diferentes agentes y contextos educativos (familia, instituciones, otros centros escolares) y estaría en íntima relación con el concepto de «escuela abierta» (…) entendiendo que ésta no puede 4 Zabalza, M. Calidad educativa. España. Narcea. 1996. Cap. 1. 5 Expresión acuñada por Ruth Harf. Ver: La articualción interniveles. Novedades educativas (82): 25 - 29. Octubre de 1997. 6 La escuela como perfomance ritual. México. Siglo XXI. 1995. 2 limitarse a ser un reducto inviolable e infranqueable en el que se aprendan cosas desvinculadas de las experiencias y contextos vitales de los alumnos".7 Su finalidad es evitar a toda costa que la institución sea cerrada y autorreferida. La articulación vertical o de intraescuela es el conjunto de procesos de coordinación a desarrollar entre grupos de distintos niveles de escolaridad. Puede ser inter o intraciclos. Parte del supuesto que el desarrollo de la persona no es un proceso con etapas claramente delimitadas ni meramente yuxtapuestas, sino que es un continuum. También supone leer el curriculo como una propuesta sin solución de continuidad. ¿Por qué es necesaria la articulación vertical? Porque dos docentes distintos se responsabilizarán sucesivamente del mismo grupo, que no debe perjudicarse con el cambio. ¿Por qué no siempre se articula? Suele haber focos o problemas de discrepancia y desencuentro. Entre las causas que los provocan mencionamos: • • la concepción errónea que la coordinación implica una subordinación de un año a otro y que conduce a la pérdida de identidad de los dos, cuando, en realidad, la coordinación no conlleva supeditación sino necesidad de asegurar los mecanismos de enlace de modo que la transición tenga elementos de continuidad junto con los imprescindibles elementos de cambio y diferenciación. la falta de toma de decisiones organizativas por parte del personal de conducción, que hagan factibles las actividades de articulación: horarios, calendario de reuniones, propuestas concretas a realizar… Es necesario encontrar cauces que potencien la continuidad entre años y que no se queden en una declaración de intenciones. 7 Argos, Javier. Escuela infantil y escuela primaria, entre la continuidad y el descontento. España. Narcea. 3 ¿Cómo lograr la articulación? Para construir un "puente" de articulación es necesario un conocimiento mutuo de los contenidos y las formas de trabajo de "ambas orillas". Eso "requiere la constitución de espacios de discusión e integración epistemológica, ideológica y psico-socio-pedagógica".8 Implica una comunicación de doble vía, sin prejuicios, que permita vincular productivamente ambos años centrándose en un "hacer" compartido, cuidando, por supuesto, de no infantilizar a los alumnos mayores ni de endurecer las estrategias de enseñanza en los más chicos. Hay que establecer espacios de diálogo y coordinación efectivos que desemboquen en proyectos concretos. La posibilidad de construir un trayecto educativo continuado se basa en la ampliación de las perspectivas que constituyen el horizonte de cada fase parcial. Se trata de conectar los aprendizajes (las fases subsiguientes del proceso) como se conectan las etapas de construcción de una casa, por ejemplo. No se olvida ni se difumina la identidad formativa de cada año ni se pierde de vista la diversidad aunque se atienda a la continuidad de las dos estructuras. Esto requiere la ampliación de las competencias psicopedagógicas de los docentes convocados, más allá de los límites cronológicos correspondientes al nivel escolar en el cual se trabaja, y la búsqueda de un lenguaje común, que "no es cosa simple"9. pues se asienta sobre diversos planos: por una parte, hay que lograr acuerdos acerca de los procedimientos didácticos; por la otra, respecto de cómo y de qué manera se interviene frente a un inconveniente cognitivo del niño. Lograr la coordinación abarca también aspectos aparentemente más triviales, como la distribución de tareas y el respeto a la hora pactada para iniciar y concluir los encuentros preparatorios. Se descuenta que todos los integrantes del equipo asumirán la responsabilidad de que fructifique la articulación, aunando esfuerzos en una función común, organizando "sistemática y armónicamente las colaboraciones para conseguir un mismo producto sin peligro de que se contrarresten"10. Estamos viendo que la articulación puede abordarse a distintos niveles y desde diversas perspectivas, de acuerdo con el criterio de cada institución. Lo indiscutible es que "pertenece al corazón mismo del discurso 8 González Cuberes, Ma. T. Articulación. B. A. Aique. 1995. 9 Pontecorvo, C. Continuità educativa. Firenze. La Nuova Italia. 1990. 10 Cerdán, Isabel. Coordinación. Aula de Innovación educativa (46): 33 - 37. Enero de 1996. 4 didáctico"11, por eso es insoslayable y no debe encararse superficialmente, solo por cumplir un mandato, como un trámite que hay que despachar rapidito. Proceder así sería restarle calidad a la educación. Y buscamos lo contrario. ¿O me equivoco? Evaluar el proceso de articulación ¿Por qué hacerlo? Porque "la evaluación constituye una herramienta y una práctica imprescindible en toda actividad planificada"12 y, como el proceso de articulación lo es, requiere ineludiblemente de esa instancia. ¿Para qué evaluar? Fundamentalmente, para aprender. Y no solamente de los errores sino también de los aciertos, mediante la reflexión acerca de lo realizado, creando modos de solución y haciendo propuestas superadoras para el futuro (el próximo ciclo lectivo) —cambios: supresiones, agregados, reemplazos—. "La evaluación producirá diálogo, comprensión, mejora".13 ¿Cuándo evaluar? - Permanente y continuamente, a todo lo largo del proceso, de manera formativa, para reorientar las acciones y modificar "estrategias didácticas con presentación de alternativas"14. Se trata, por supuesto, de una evaluación de tipo informal, mediante la observación simple. - Al cierre del proceso, de manera sumativa y final, más formalizada, sin desdeñar la simple observación (que sigue siendo muy valiosa). ¿Cómo evaluar? Salteando la evaluación formativa, continua o de trayecto (in itinere) que actúa como "elemento de ajuste a lo largo del proceso"15, como una reflexión crítica que facilita la retroalimentación y la reorientación de la práctica, y, al decir de T. Lawson, proporciona datos descriptivos que incrementan el nivel de racionalidad en las decisiones del "mientras tanto", nos centraremos en la sumativa, recopiladora o global, que no aspira a introducir modificaciones en la estrategia didáctica presente sino futura. Este es un momento más estructurado. 11 Argos, Javier. Op. cit 12 P.B.A. Direc. de Educ. Sup. 4ª Jornada de Reflexión Institucional. 13 Santos Guerra, M. A. La evaluación. Málaga. Aljibe.1998. 14 Carlos Rosales. Evaluar es reflexionar sobre la enseñanza. España. Narcea. 15 Consejería de Educación. España. Diseño curricular base. 1992. 5 1° - Reúnanse los docentes implicados y, si es posible, también el personal de conducción. 2° -. Atiendan a las actividades realizadas. • ¿Resultaron incentivadoras? Todas - Algunas - Ninguna. • De parte de los docentes, ¿hubo intenso conocimiento de los contenidos del otro año como para elegir o idear las actividades más ricas y provechosas para ambos grupos? Sí - Medianamente - No. En caso de las dos respuestas últimas, ¿Qué podrían hacer para intensificarlo, con miras a la articulación que venga luego? 3° - Revisen los recursos. Recursos materiales (calidad y cantidad): ¿Fueron los adecuados? Sí - Parcialmente - No. Si las respuestas son alguna de las dos menos favorables, preguntarse: ¿Por qué? ¿No se previeron con tiempo? ¿Cuáles les parece necesario reemplazar, cuáles omitir y cuáles agregar para otro período de articulación? 4° - Focalicen en el tiempo. • ¿Permitió realizar holgadamente todas las actividades planificadas? Sí - No. 5° - Finalmente, evalúen su desempeño. Si las respuestas no son unánimes coincidiendo en MB, pensar: ¿Por qué? ¿Qué propuestas superadoras formulan para el futuro ciclo lectivo? (Diseño de estrategias) 6 Esta instancia sigue la idea de Myriam Fuentes: "La autoevaluación del profesor (…) es el único medio de fundamentar un desarrollo profesional"16 —y eso es lo que queremos, ¿no? Lo importante en este momento es no caer en el peligro que psicopedagógicamente se presenta al identificar erróneamente un enjuiciamiento sobre los logros con un enjuiciamiento sobre las personas. 6° - Restaría la "evaluación amateur" (Dr. Michael Scriven, 1968), más conocida como "autoevaluación de los alumnos". Puede ser oral y muy, muy sencilla. Alcanza con unas pocas preguntas para saber cómo se sintieron, si les gustó en general, etc. 7° - ¿Fueron suficientes los encuentros de planificación del proceso o alguna de las cosas a mejorar pudieron haberse previsto? Bibliografía Aldesora, Ma. T. Articulación interniveles. En "Mensajes educativos" (5): 12 - 13, febrero de 1999. MEyC, Prov. de Córdoba. • Harf, R. La articulación interniveles: un asunto institucional. Novedades educativas (82): 25 - 29. Octubre de 1997. • Marabotto, Ma. I. Articulación: ¿mito o tarea? XI Curso para directivos. Consudec. Julio de 2001. • MCyE. Escuelas en transformación. 1998. • Prov. de Salta. Diseño curricular. 1997. • Ratto, J. Aportes y desafíos para la articulación. XI Curso para directivos. Consudec. Julio de 2001. -------------Articulación, transición e integración: aportes y desafíos. Seminario n°3, 41° Curso de Rectores, 3 al 6 de febrero de 2004. • Lic. Elena Luchetti 16La evaluación del profesor, revista Aula abierta (85): 2 - 13, noviembre de 1999. 7