miércoles, 14 de mayo del 2008 | la voz de la escuela ciencias >> Cómo aguantar la respiración durante más de 17 minutos > ACTIVIDADES El mago David Blaine usó trucos científicos para batir el récord Guinness de apnea estática Transcurrieron 17 minutos y 4 segundos y David Blaine volvió a respirar. Salió de la enorme pecera y, tras unas pocas inspiraciones profundas y sofocadas, sonrió a los millones de telespectadores que el pasado 30 de abril vieron cómo batía el récord Guinness de apnea estática, en horario de máxima audiencia, durante El programa de Oprah Winfrey. Blaine, que cuenta entre sus hazañas haber estado enterrado durante una semana, dice que «todo está en la mente: hay que relajarse y ralentizarlo todo». Pero eso no son poderes mentales mágicos. David Blaine simplemente recurrió a unos trucos con mucho fundamento científico. Son la base del deporte de apnea (o buceo a pulmón) y, con esos trucos que hoy conocemos bien, cualquier novato apneísta puede batir el récord del gran mago Houdini, que a principios del siglo XX asombró al mundo al aguantar la respiración durante tres minutos y medio. Sin entrenamiento, una persona puede hacer una apnea (estar sin respirar) de apenas un minuto. No es que no tenga oxígeno para más, es que salta la alarma antiasfixia del cuerpo humano: durante una apnea, a medida que se va consumiendo oxígeno, el dióxido de carbono (CO2) que se produce se va acumulando en la sangre; y cuando el CO2 llega a un nivel determinado sentimos dolor y un impulso para respirar, natural e incontrolable. Fin del intento. TRUCOS El primer truco es sumergirse en el agua. Para algunas personas eso es aún más angustioso que aguantar la respiración fuera. Pero no todo está en la mente. Resulta que, cuando estamos sumergidos, en nuestro cuerpo se activa un mecanismo llamado reflejo mamífero de inmersión, similar al de delfines, focas y ballenas, que automáticamente nos permite hacer apneas más largas. David Blaine usó también otro truco más sofisticado. Justo antes de la inmersión se pasó media hora respirando oxígeno puro. Más que conseguir llenarse de oxígeno, se trataba de vaciarse todo lo posible de CO2. Así, se retrasa el momento en que la acumulación de CO2 en la sangre hace insoportable el seguir sin respirar y por «Be a dolphin, my friend» Sin los riesgos de la apnea deportiva, puedes probar en clase cómo al sumergir la cara en agua fría bajan tus constantes vitales. Material ■ barreño con agua fría ■ tensiómetro ■ pulsómetro Primero medimos la tensión arterial y las pulsaciones en reposo de la persona voluntaria para someterse a la prueba. A continuación, repetimos las medidas mientras la misma persona mantiene la cara (no hace falta toda la cabeza) sumergida en el barreño con agua fría. Comparamos los resultados y volvemos a realizar el experimento entero con al menos dos voluntarios más. ¿Confirman los resultados que existe el reflejo de inmersión? ¿Qué sucede si realizamos el experimento con agua templada? PETER FOLEY El mago estadounidense David Blaine batiendo el récord de apnea estática en Nueva York el 30 de abril eso el mago superó los 17 minutos sumergido en una piscina sin moverse (apnea estática). Nunca nadie había aguantado tanto tiempo sin respirar. En el deporte de apnea no está permitido el oxígeno antes de la prueba, se usan otras técnicas de respiración natural para eliminar CO2 que permiten llegar hasta 9 minutos. Pero al retrasar la alarma antiasfixia del cuerpo humano, los apneístas corren el riesgo de que su cerebro se quede sin oxígeno antes de que sientan la necesidad de respirar: entonces se produce un síncope y, si no reciben ayuda, mueren ahogados. Por eso no vamos a entrar en detalles sobre esas técnicas que solo se enseñan en las escuelas de apnea, bajo control de especialistas, y que nadie debe probar a solas en una piscina. [email protected] PELÍCULA «El gran azul» (1988). Rodada por Luc Besson (que recientemente dirigió «Arthur y los Minimoys»), esta película narra la rivalidad entre dos estrellas de la apnea deportiva. Sus espectaculares imágenes y su cautivadora banda sonora ayudaron a popularizar este deporte. Reflejo mamífero de inmersión nismo es mucho más débil y se dispara al sumergir la cara, especialmente si el agua está fría. Inmediatamente bajan las pulsaciones y el corazón consume menos oxígeno, lo que ayuda a aguantar más tiempo sin respirar. Si buceamos a más profundidad, también sucede que la sangre se retira de las extremidades y se reserva para llevar oxígeno a los órganos vitales, como el cerebro. Los deportistas de apnea entrenan esta habilidad natural, forzando sus límites. Son expertos en ahorrar oxígeno y en retrasar la alarma antiasfixia. Los mejores son capaces de aguantar hasta 9 minutos bajo el agua, en reposo. En movimiento se gasta más oxígeno y solo resisten unos 4 minutos, tiempo suficiente para bajar a 244 metros (récord mundial) y volver a la superficie. DEBATE La apnea es un deporte de riesgo, que solo debe practicarse en las escuelas especializadas. Sin embargo, ¿crees que sería bueno que todo el mundo hiciese un cursillo de apnea para afrontar emergencias? ¿Para qué profesionales o deportistas podría ser más útil? > Fran Doménech > INSTINTO ANIMAL Aunque la ciencia lo haya redescubierto hace poco, el reflejo mamífero de inmersión es una habilidad ancestral que compartimos con nuestros parientes los mamíferos marinos, que son grandes buceadores. Los cachalotes tienen el récord: se cree que pueden bajar hasta 3.000 metros de profundidad y aguantar hasta dos horas sin subir a respirar. En los humanos este meca- 7 S. K. Un cachalote puede estar hasta dos horas sin respirar