DIARIO DE UNA COMPAÑERA (por PECECITO ROSA) 8 años: Día 1: hoy ha llegado una nueva chica a clase. El profe la ha presentado, se llama Sara. Es un poco extraña. El profe nos ha hablado un poco de ella, pero ella solo miraba al suelo…Aun así quiero esperar a conocerla. Día 2: Sara, la niña nueva, se salta algunas clases. No sé exactamente por qué. Hoy he estado con Mari Sol dice que parece muy extraña, igual que Dalia. Yo creo que solo es tímida. Por eso, cuando la vimos sola en el patio, decidí acercarme. Susana me acompañó. La chica nueva no hablaba mucho, parecía que teníamos que… ¿Cómo dice mi madre? Ah, sí. Teníamos que sonsacarle las palabras con sacacorchos. Le preguntamos un par de cosas, pero no dejaba de mirar a otro lado. Entonces, Susana le preguntó qué tipo de chuches le gustan. Ella respondió que las nubes. Entonces, mi mejor amiga sacó una bolsa llena de gominolas, y le dio la única nube que tenía. Por un momento pensé que la chica no aceptaría, pero sí. Me gustó mucho que lo hiciera. Día 9: Susana y yo le preguntamos al profe que le pasaba a Sara. Llevábamos varios días hablando con ella pero seguía igual de tímida. Él nos contó que tiene una cosa llamada autismo. No entendí todo exactamente, pero creo que es algo así como que no puede relacionarse como las demás personas. Que piensan de diferente forma, sienten de diferente forma… A mí no me parece que sea un gran problema. Si eso, me gustaría conocerla mejor. Espero que seamos buenas amigas. Mari Sol y Dalia hablan últimamente menos con nosotras. Día 20: odio a Marisol y a Dalia. ¿Es que son tontas? No. Solo son unas bordes, y unas malas personas. Hoy durante el recreo escuché que se reían así que me acerqué para preguntarles de qué. Ellas me miraron como si no me lo quisieran contar, pero Dalia contestó: - De que últimamente pasáis mucho tiempo con la niña nueva. Pues sí. ¿Qué tiene de malo? - Nada, estábamos preocupadas por si a Susana o a ti se os pegaba lo suyo. - ¿Los suyo? – no me gustaba cómo iba la conversación. Si, ya sabes. – dijo Marisol- Es que es un poco tonta. El otro día le dije que se tomaba las cosas demasiado al pie de la letra. ¿Sabes lo que me dijo? ¡Que las letras no tenían pies! Así que no queríamos que se os pegara. Deberíais alejaros de ella. - Entonces vi a Susana y a Sara. Me acerqué a ellas evitando a las otras dos. Me enfadé tanto que hasta Sara (¡Sara!) me preguntó si me pasaba algo. Le respondí que no pero luego se lo conté a Susana. A ella le enfadó igual que a mí, y antes de clase, se lo contamos al profe. El decidió hablar con ellas, y también en clase, sobre la enfermedad de Sara. Pero se habían burlado de mi amiga. No pensaba volver a hablarlas. 12 años: Día 1: hoy empezamos primero de la ESO. Susana, Sara y yo vamos al mismo instituto, uno donde, al igual que en el cole, le darán a Sara un programa especial. Desde que la conocí, hemos avanzado mucho, muchísimo. Ahora la comprendo mejor. Y, aunque no volvimos a hablar con Mari Sol y Dalia expresamente, con el tiempo aprendimos a hablarnos bien de nuevo. Me pregunto cómo afectará este cambio a Sara. Tendremos nuevos compañeros. Espero encontrar algún nuevo amigo. Día 3: Nos han sentado a Sara y a mí juntas, casi al lado de la ventana. Al parecer, hay un agujero por donde se cuela el aire, y hace un ruido muy extraño. He notado que varias veces, cuando se escuchaba el aire, Sara se giraba y parecía algo molesta. Al final, entre clase y clase, lo tapé con chicle. Normalmente no hago esas cosas pero no tenía nada más a mano. ¡Ups! Día 4: ya hemos empezado con los exámenes. Son mucho más difíciles que los de primaria. La madre de Sara nos ha invitado a su casa para que estudiemos con ella. Sus exámenes son más fáciles que los nuestros, y, una vez más, me ha sorprendido su forma de estudiar. Muchos de sus apuntes se basan en los que le dan en sus clases especiales. Lengua, inglés ¡Incluso mates! Tiene imágenes, o como he descubierto por su madre, pictogramas. La ayudan a entender mejor las cosas. Ha sido entretenido estudiar con ellas, en vez de tener que repasarlo todo yo sola de nuevo. Y espero que Sara también de bien sus exámenes. 15 años: Día 2: es la última semana de vacaciones de verano. Simplemente, no me puedo creer que empecemos primero de bachiller. Susana, Sara y yo hemos quedado en mi casa. Primero hemos ido a la piscina, y luego nos hemos quedado en casa viendo unas cuantas películas y comiendo chucherías. Obviamente, no ha faltado el bol lleno de nubes. Ha sido muy divertido. Cuando se fueron, comencé a buscar las fotos de grupo de clase de nuestros años anteriores. Me ha sorprendido ver lo mucho que hemos cambiado. También me ha encantado descubrir cuánto conozco a Sara ahora, y me divirtió pensar que, cuando la conocimos, no sabíamos nada de ella, ni de cómo se sentía a gusto, ni de cómo tratarla. Sin embargo, a mi parecer, creo que hemos conseguido forjar una bonita amistad. Espero no separarme nunca de ellas. Me alegro de haber conocido a Sara.