Los sabios perdieron al salvador

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TRIGO Y MIEL A. C.
Arena Norte #403, Col. San Miguel
León. Gto. México
Tel: 01 (477) 7 07 13 05
LOS SABIOS PERDIERON AL SALVADOR
Hoy hablaremos de los sabios que vieron la estrella, que les anunciaba o
que entendieron que les anunciaba el nacimiento de una persona muy
especial.
En esta ocasión reflexionaremos en algo que se encuentra en la escritura,
alrededor del nacimiento de Jesús. Nos enfocaremos en Mateo 2:1
Mateo 2:1-23
1Después que Jesús nació en Belén de Judea en tiempos del rey Herodes,
llegaron a Jerusalén unos sabios* procedentes del Oriente.
2--¿Dónde está el que ha nacido rey de los judíos? --preguntaron--. Vimos
levantarse* su estrella y hemos venido a adorarlo.
3Cuando lo oyó el rey Herodes, se turbó, y toda Jerusalén con él.
4Así que convocó de entre el pueblo a todos los jefes de los sacerdotes y
maestros de la ley, y les preguntó dónde había de nacer el Cristo.
5--En Belén de Judea --le respondieron--, porque esto es lo que ha escrito
el profeta:
6"'Pero tú, Belén, en la tierra de Judá, de ninguna manera eres la menor
entre los principales de Judá; porque de ti saldrá un príncipe que será el
pastor de mi pueblo Israel.'*
7Luego Herodes llamó en secreto a los sabios y se enteró por ellos del
tiempo exacto en que había aparecido la estrella.
8Los envió a Belén y les dijo: --Vayan e infórmense bien de ese niño y, tan
pronto como lo encuentren, avísenme para que yo también vaya y lo adore.
9Después de oír al rey, siguieron su camino, y sucedió que la estrella que
habían visto levantarse iba delante de ellos hasta que se detuvo sobre el
lugar donde estaba el niño.
10Al ver la estrella, se llenaron de alegría.
11Cuando llegaron a la casa, vieron al niño con María, su madre; y
postrándose lo adoraron. Abrieron sus cofres y le presentaron como regalos
oro, incienso y mirra.
12Entonces, advertidos en sueños de que no volvieran a Herodes,
regresaron a su tierra por otro camino.
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13Cuando ya se habían ido, un ángel del Señor se le apareció en sueños a
José y le dijo: "Levántate, toma al niño y a su madre, y huye a Egipto.
Quédate allí hasta que yo te avise, porque Herodes va a buscar al niño para
matarlo."
14Así que se levantó cuando todavía era de noche, tomó al niño y a su
madre, y partió para Egipto,
15donde permaneció hasta la muerte de Herodes. De este modo se
cumplió lo que el Señor había dicho por medio del profeta: "De Egipto llamé
a mi hijo."*
16Cuando Herodes se dio cuenta de que los sabios se habían burlado de él,
se enfureció y mandó matar a todos los niños menores de dos años en
Belén y en sus alrededores, de acuerdo con el tiempo que había averiguado
de los sabios.
17Entonces se cumplió lo dicho por el profeta Jeremías:
18"Se oye un grito en Ramá, llanto y gran lamentación; es Raquel que llora
por sus hijos y rechaza el consuelo, porque ya no viven."*
19Después que murió Herodes, un ángel del Señor se le apareció en
sueños a José en Egipto
20y le dijo: "Levántate, toma al niño y a su madre, y vete a la tierra de
Israel, que ya murieron los que amenazaban con quitarle la vida al niño."
21Así que se levantó José, tomó al niño y a su madre, y regresó a la tierra
de Israel.
22Pero al oír que Arquelao reinaba en Judea en lugar de su padre Herodes,
tuvo miedo de ir allá. Advertido por Dios en sueños, se retiró al distrito de
Galilea,
23y fue a vivir en un pueblo llamado Nazaret. Con esto se cumplió lo dicho
por los profetas: "Lo llamarán nazareno."
1. Acerca de los sabios
Solamente al leer este pasaje, se arruinan varias tradiciones. Por ejemplo,
la tradición de “el nacimiento” donde se colocan a los magos viniendo a
adorar a Jesús en un pesebre, pero por el contrario La Biblia nos dice que
estaba en una casa, tampoco dice que fueron tres, solo dice unos sabios, lo
que nos indica que eran dos o mas por que está en plural, y tampoco
menciona los nombres de los sabios o que fueran de un color de piel en
especial. No dice que sus nombres eran Melchor, Gaspar y Baltasar,
simplemente dice que eran sabios que venían con presentes. La Biblia
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menciona en este pasaje una frase en diferentes ocasiones: PARA QUE SE
CUMPLIESE LO QUE DIOS HABIA DICHO POR UN PROFETA. En estos
versículos que leímos citamos a cuatro profetas: Óseas, Jeremías, Isaías y
Miqueas. Nada mas el nacimiento de Jesús fue una conclusión de muchas de
las profecías que los hombres que Dios había usado antes de que Jesús
viniera, habían hablado sobre Él. Recordemos que hay mas profecías de que
Jesús vendrá a la tierra por segunda vez; y si las primeras profecías que
hablaron de su primera venida, de este nacimiento que esta registrado en
los evangelios y que en esta temporada del año mucha gente recuerda,
también La Biblia menciona profecías de su segunda venida. Pero él ya no
va a venir como un niño, temiendo que un rey lo quiera matar, ahora viene
como Rey de Reyes y Señor de Señores, viene a instaurar en la tierra un
reino, y si las primeras profecías se cumplieron las profecías de la segunda
venida de Cristo también se cumplirán.
Hay profecías pendientes por cumplirse, por eso uno encuentra que La
Biblia no es un libro común y corriente, no es un libro de sabiduría judía, de
moral, o de buenos consejos, aunque si los tiene, pero más que eso, habla
de la moral que de verdad agrada a Dios. La Biblia es mas que cualquiera
de estas cosas, es la palabra viva de Dios que puede cambiar las vidas de
aquellos que la creen y la reciben para hacerla su estilo de vida.
Es un libro que ha sido atacado desde que se formó, es el primer libro que
se ha impreso mas numero de veces, en diferentes idiomas, tamaños, es el
libro que ha sido perseguido en otras naciones, en diferentes épocas se ha
quemado, se ha prohibido leer, es un libro tan especial que aquel que lo
cree, cambia su vida.
En esta historia del nacimiento de Jesús nos habla de unos sabios,
posiblemente eran personas que conocían las estaciones y los eventos que
las estrellas anunciaban. Podemos tomar referencia del libro de Génesis
donde Dios creo las estrellas y dijo que haya una lumbrera mayor (el sol) y
una menor (la luna), dice La Biblia para que marquen los tiempos, esta es
la razón de las estrellas.
Estos sabios, estudiosos de las estrellas, mas que astrólogos y que
astrónomos, sin tantos aparatos tecnológicos como hoy día, vieron la
aparición de una estrella. No entendemos como se enteraron, como
supieron, tal vez había profecías antiguas (en otros libros que no fueron
registrados en La Biblia) que hablaban de este nacimiento especial, de una
estrella que anunciaba que un hombre iba a nacer en esta tierra y que iba a
cambiar el destino del ser humano. Y estos sabios siendo guiados por la
estrella llegaron hasta Jerusalén, y llegando a este lugar se confundieron. Si
leemos La Biblia, podemos ver que se les “perdió la estrella”, por que en
vez de estar viendo al cielo vieron a la tierra y a un rey humano dejando de
ver la señal de Dios que los guiaba a un rey divino, en cambio vieron a
Herodes. Dice La Biblia que Herodes se turbó, ¿y como no se iba a turbar?,
si llegaron aquellos sabios con tremenda comitiva. Imagínate, es como si
en nuestros días, aterrizaran aviones de varias naciones, y que de los
mismos bajaran personalidades de diferentes países del mundo, y llegaran a
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Los Pinos y preguntaran: “¿Dónde está el nuevo presidente de México que
acaba de nacer?” ¿Cómo reaccionaria nuestro actual presidente?, diría: Hoy
no hay otro presidente más que YO. Yo soy el presidente. Herodes se turbó
por que llegaron preguntado por un rey y él era el rey.
Preguntan los sabios ¿Donde está el rey de los judíos que ha nacido? por
que su estrella hemos visto en el oriente y venimos adorarle. Diría Herodes
¿ y yo que soy?. Pero al platicar con lo sabios se dio cuenta, La Biblia no
registra que hablo con los sabios, pero los sabios le hablaron de lo que esa
estrella significaba, y Herodes entendió de inmediato que hablaban del
Mesías, y mando a llamar a los sacerdotes, a los escribas, y les preguntó
¿Dónde había de nacer el Cristo?. Pero ¿Por qué lo hacia?, por que la
historia que le comentaron los sabios de la estrella, de la aparición, de las
profecías, la cual anunciaba el nacimiento de una persona muy especial, le
hablaba a Herodes del Mesías, del Cristo.
A pesar de todo estos sabios del oriente encontraron a Jesús. Salieron de
Jerusalén y la estrella los volvió a guiar a la casa. Salieron de la casa y ya
no encontraron al niño envuelto en pañales, (así fue como lo encontraron
los pastores, pero no lo sabios), y lo adoraron. Inmediatamente ellos
tomaron otro camino por que un aviso de Dios les protegió de comunicarle a
Herodes, por que este ultimo tenia malas intenciones con el niño. Y esa
misma noche tal vez un ángel le habló a José, y no a Maria. Le hablo a José
por que el es el varón, la cabeza, para guiar a la familia. Primero Dios le va
hablar al varón, la mujer es preciosa, ayuda idónea, pero cuando va Dios a
dirigir a la familia Dios le habla al varón. En ocasiones el hombre no
escucha, ¿eres un varón sensible a Dios como José el Padre de Jesús?, ¿es
usted un varón sensible a Dios, a quien Dios le puede hablar? ¿Usted hace
lo que Dios dice? Dice que le mandó un ángel y le habló en sueños
diciéndole: “toma al niño y vete a Egipto”. ¿Con que dinero? Pero ya los
sabios le habían dejado de algún modo el medio. Dios es previsor. Se
entiende que José en esa misma noche tomo a Maria y al niño y se fue.
Herodes, en cuanto se dio cuenta que los sabios no habían regresado para
informarle donde estaba, empezó a hacer cuentas. En base a lo que los
sabios le habían dicho, ya habían pasado dos años, quizás uno, pensaría.
Mando a matar a todos los niños de dos años hacia abajo, queriendo matar
a Jesús. Dios es poderoso para guardarnos y cuidarnos en tiempos de
peligro. La Biblia dice que todos los cristianos tienen ángeles que les
guardan y les protegen, claro que, cuando vas viajando a 160 Km/hr. En la
carretera maxipista de aquí León a Guadalajara, eso no es correr rápido es
volar bajo pero los ángeles van ahí bien apurados para cuidarlo. ¿Cuántas
veces has estado en peligro y has sido cuidado por ángeles y ni siquiera te
das cuenta?. La Biblia dice que el ángel del Señor acampa alrededor de los
que le temen, si usted teme a Dios hay ángeles a su alrededor, aunque no
se de cuenta.
2. No creyeron…
Estos sabios del oriente encontraron a Jesús, pero hubo otros sabios que lo
perdieron. Hay otros sabios en este pasaje que perdieron al Salvador, a
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Jesús y me refiero a los escribas, sacerdotes a quien Herodes consultó para
preguntarles dónde había de nacer el Mesías, el Cristo. Resulta que estos
sabios conocían la ubicación, pero no creyeron que el Mesías había llegado
allí. Le dijeron a los sabios que vinieron de oriente y a Herodes donde había
de nacer, citaron con exactitud el lugar, pero no creyeron que Jesús había
venido. Hay gente que lee La Biblia, hay carreras en ciertas escuelas que se
obliga al estudiante a leer La Biblia, mucha gente culta en México lee La
Biblia y conoce cosas de La Biblia, pero sabemos las cosas y nos las
creemos. Uno lee en La Biblia que Jesús sana, que le dio vista al ciego, tocó
a los leprosos, que sanó a los paralíticos. Cuando uno lee la Biblia, uno dice
“Jesús sanó” (en tiempo pasado) y no es así TODAVIA EL MISMO JESUS
QUE SANO HACE 1900 AÑOS, QUE ANDUVO POR ESTA TIERRA HACIENDO
BIEN, Y SANANDO A LOS ENFERMOS, ES EL MISMO QUE ESTA VIVO HOY
PORQUE MURIÓ, PERO NO SE QUEDÓ MUERTO, NO SE QUEDÓ EN LA
TUMBA, RESUCITÓ AL TERCER DIA, Y EL ESTA VIVO Y HOY PUEDE SANAR A
CUALQUIERA QUE PONGA SU FE EN EL, NO SOLO DE SU CUERPO, PERO DE
SU CORAZON. DIOS PUEDE SANAR TODAVIA, HAY PODER EN EL NOMBRE
DE JESUS.
La gente lee La Biblia pero no lo cree, otros la escuchan y pueden decir es
palabra de Dios, y aun así no creer. ¿Crees en lo que dice La Biblia o te lo
sabes nada mas? No vaya a ser que seas como los sabios, estos escribas,
sacerdotes que conocen las cosas de Dios pero no las creen. “En Belén de
Judea”, citaron estos sabios. Conocían el lugar, pero desconocieron la
encarnación, dudarían de la deidad de Jesucristo, serian espinas en el
costado de Jesús en sus años de ministerio y contribuirían a poner espinas
sobre su cabeza.
3. No le reconocieron
Hay muchos como estos sabios que el día de hoy, reconocen que Jesús es
un hombre especial, lo aclaman como un gran maestro, hablan de Jesús
como de un gran filósofo, como un gran profeta, pero no creen en lo que Él
es, en lo que Él dijo. Dice la escritura “cree en el Señor Jesucristo y
serás salvo tu y tu casa”, es creer en el corazón, cree en el corazón en
Jesús.
Hay gente que cree en Dios pero no le cree a Dios, hay diferencia, dice
la escritura que cuando crees con el corazón y confiesas con la boca eres
salvo, tienes una relación con Jesús diferente a la religión. La religión
cualquiera que sea, protestante, evangélica, mormona, testigo de Jehová,
cualquier religión que una persona profesa no es suficiente para acercarse a
Dios. Las religiones, los musulmanes, el budismo, son los esfuerzos
humanos para acercarse a Dios. Las religiones son como escaleras que el
hombre hace para llegar al cielo y acercarse a Dios. Dios no ha venido a
establecer una religión por medio de la cual los hombres se acerquen a Él,
ha mandado a su hijo al mundo para que creyendo en Jesucristo en tu
corazón tengas una relación, una relación viva con Él, que te haga una
persona diferente y que te haga vivir en esta tierra como un hombre o
mujer que le da gloria y honra a Dios.
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Puedes caer en una religión si no te cuidas. Está bien que te congregues, lo
malo seria que estuvieras en una cantina emborrachándote, porque
ciertamente hay lugares donde no conviene que estés.
Dios no está limitado a un edificio, Dios está donde cualquier persona
humilla su corazón para invocar su nombre. Allí la presencia de Dios se hace
manifiesta, donde tu inclinas tu corazón y haces un alto en tus actividades
buscando tener comunión con Dios; allí la presencia de Dios puede estar.
Él habita en las alabanzas de su pueblo pero no está limitado. Hay lugares
donde la gente cree estar mas cerca de Dios pero la verdad es que no
puedes estar mas cerca de Dios en lugar que en otro. El ser humano cree
que Dios va a estar en un templo, en un edificio de ladrillos, cemento,
piedra. Ya Dios no habita en esos templos hechos de mano de hombre,
ahora Dios a través del nuevo nacimiento, del hecho de que tu aprendes a
tener una relación con Él, habita en templos humanos, en el cuerpo en el
ser de cada hombre y cada mujer que le ha rendido su vida. Dice el apóstol
Pablo: “no saben que ustedes son templo del Espíritu Santo, y que el
Espíritu Santo el cual tiene de Dios esta en ustedes.” Ahora tu y yo somos
templo del Espíritu Santo.
4. Conoces la palabra pero, ¿la aplicas?
¿Crees esto que está en la palabra de Dios o solo crees algunas partes? En
algunas partes batallamos para creer. Estos sabios sabían, pero no creían,
sabían las porciones de la escritura, pero no creían en ellas. Sabían las
escrituras pero no encontraron a Jesús.
Enseguida se fueron a la ley a los profetas, para contestar la pregunta de
Herodes, ellos de inmediato sabían Miqueas 5:2, que fue la porción bíblica
que citaron
Miqueas 5:2 Pero de ti, Belén Efrata,
pequeña entre los clanes de Judá,
saldrá el que gobernará a Israel;
sus orígenes se remontan hasta la antigüedad,
hasta tiempos inmemoriales.
Citaron de inmediato, hallaron una respuesta bíblica, pero no la aplicaron.
Esa es la diferencia de religión y relación: PUEDES CONOCER LA
RESPUESTA PERO NO APLICARLA. Un religioso conoce la respuesta y no la
aplica, un cristiano la conoce y la aplica. En estos días, las familias se
reúnen, y es bueno hacerlo no solo ahora sino en cualquier época del año.
Es un buen tiempo para aplicar la palabra que tu conoces, para perdonarse
para amarse a pesar de lo que le han hecho. Tomemos ejemplo de Jesús,
en la cruz dijo: “Padre perdónalos por que no saben lo que hacen”, tu sabes
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la oración del Padre nuestro que Jesús nos enseñó como un modelo, no lo
enseñó para que lo repitiéramos, es un modelo, una estructura base, como
un modelo guía. Jesús nos enseñó a decir “y perdona nuestras ofensas
como nosotros perdonamos a los que nos ofenden” y ¿si no perdonas al que
te ofende? Cuánta gente solo repite el Padre nuestro, y si no perdona, le
esta diciendo a Dios “no me perdones”. Eso le decimos cuando en nuestra
vida no perdonamos a las personas.
Cuando los sabios que si encontraron a Jesús llegaron a la casa y
encontraron a su María, posiblemente no estaba José, quizás estaba
trabajando, ya que era un hombre trabajador. Por cierto, el esposo pierde
su liderazgo cuando no trabaja, un esposo que no provee para su casa no
es un hombre verdadero. Después llegaría, y el ángel le hablaría. Jesús
nació en familia, con Madre y Padre. Es importante la familia, es lo mas
importante que tienes después de Dios. Cuida a tu familia, aplica La Biblia
con la ayuda del Espíritu Santo. Por eso Jesús dijo les enviaré al Espíritu
Santo a quien el Padre enviara en mi nombre, él les ayudará, les recordará
todo lo que les he dicho y recibiréis poder cuando haya venido sobre ti el
Espíritu Santo para ser alguien que testifica con su vida de Jesús. No solo
que habla, que testifica con su vida. El poder del Espíritu Santo es lo que
nos ayuda a no vivir nosotros sino a que Jesús viva a través de nosotros.
Muchos de nosotros sabemos La Biblia pero no la aplicamos, ¿Cuánta gente
sabe y no hace lo que sabe?
Tienes la oportunidad de estar con tu familia y aplicar la palabra, muchas
veces podemos saber las cosas pero no las hacemos, ¿aplicarás la palabra
en tu vida o solo tendrás el conocimiento? No importa lo que te hayan
hecho, ¿ya sufriste hasta la sangre como Jesucristo, ye te crucificaron, te
escupieron, te dieron una corona, te traspasaron con una lanza? Jesucristo
dijo en la escritura: “perdónalos”, y quizás usted responda: -pero ese fue
Jesús-. Sabes, Jesús está en cada uno de nosotros, está dentro de ti, de tu
corazón. Si le has rendido tu vida, déjalo que salga, si Jesús está dentro de
tu corazón, lo que es imposible para el hombre a Dios le es posible.
Los sabios conocían lo que La Biblia hablaba de Cristo, pero no lo
encontraron. Tu no puedes tener una relación con Dios solo por conocer la
historia de la navidad, tu puedes saber mucho de La Biblia y no obstante
estar perdido. Como estos escribas y sacerdotes que no encontraron al
Salvador, a pesar de que nació a unos kilómetros de Jerusalén. Belén
estaba a unos kilómetros de Jerusalén y no lo hallaron; del que vino a partir
la historia en dos, el que es el hijo de Dios. Los que vivieron en su tiempo,
los eruditos bíblicos, los religiosos no lo hallaron, se quedaron envueltos en
su religión y no fueron a encontrar al Salvador. Sabían que Cristo
gobernaría, pero no le permitieron que fuera Señor de ellos. ¿Sabe qué le
contestaron a Herodes? Le contestaron con la profecía de Miqueas: “de ti
saldrá un guiador que apacentará a mi pueblo Israel.” Aunque estaban
declarando que Jesús seria el guiador, no le permitieron ser su guiador. El
plan de Dios se estaba desarrollando frente a sus ojos, era un tiempo
emocionante de cumplimiento profético. Había ángeles moviéndose en toda
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la tierra, un censo imperial que había movido a José y a María desde
Nazaret hasta Belén para que naciera y cumpliera la profecía. Aquellos
sabios y hombres importantes en la historia y la estrella anunciando, pero
no tuvieron el discernimiento de lo que sucedía. Estos sabios citaron La
Biblia pero no actuaron según su mensaje, perdieron al Salvador.
5. ¿Por qué lo perdieron?
¿Por qué no fueron a Belén a encontrar al Cristo? Tal vez tuvieron temor de
perder el favor de Herodes. Hay personas que tienen un encuentro con
Cristo, que sienten que lo que Dios está haciendo es su vidas es real,
verdadero, pero tienen temor.
Hay gente que cuando va a recibir a Cristo, no da el paso por lo que van a
decir otros. No da el paso de ir adorar a Jesús, de abrirle su corazón,
entregarle sus tesoros y honrarle, no da el paso de ir a donde está la
manifestación sobrenatural, no va ahí donde está la estrella porque tiene
temor de lo que otros digan. NO TENGAS TEMOR.
Seis veces los ángeles dijeron “no temas”. Cuando nace Jesús, una palabra
clave es “no temas”. El ángel se lo dijo a María, a José. Vence el temor, por
que te paraliza y destruye tu fe. Vence tu temor y ve a donde está Jesús y
adórale.
Si no estás con Jesús con ¿quién estarás? No podemos decir que éramos
buenos desde niños, ¿buenos para qué?, el que no es con Dios es contra él.
¿A quién obedecías antes de conocer a Jesús? Al pecado, y ¿Quién es el
padre del pecado? Satanás.
Dios llega a tu vida y te empieza a liberar, quizás lloras o gritas, (y no
debemos juzgar cómo Dios limpia el ser interior de la persona), pero que no
te pase lo que a estos sabios, que sabían mucho pero no hicieron aunque
sea un poco de lo que sabían. No tengas temor de hablar de Jesucristo, él
dijo que si le negamos delante de los hombres, él nos negará delante del
Padre.
El Espíritu Santo te ayuda, pídele que te ayude. Necesitas leer La Biblia para
que el Espíritu Santo tome de ahí palabra y la saque en el momento de
dificultad. Recuerda, debemos conocer la palabra pero también debemos
ponerla en práctica.
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