EXPOSICIÓN DE FOTOGRAFÍAS DE YURI KNOROSOV Hora: 9:00 a 21:00 hrs. Fecha: 17 de Octubre de 2014. Tipo de evento: Exposición. Sede: Galería del Pasaje Picheta. Lugar de origen: Rusia. Responsable: Patronato de Unidades de Servicios Culturales y Turísticos del Estado de Yucatán. CULTUR. Exposición de 25 fotografías de una vida académica dedicada a la epigrafía maya. El propósito de esta exposición de carácter visual es, retomando la dedicación del especialista en epigrafía, Yuri Knórosov, mostrar que el interés por la cultura maya es parte de una realidad contemporánea e internacional que trasciende la historia. Biografía de Yuri Knórosov (19.11.1922 - 30.03.1999) Yuri Knórosov nació en 1922 en Járkov, Ucrania en el seno de una familia de intelectuales rusos quienes se vinieron a esta ciudad de la capital de Rusia de aquel entonces San-Petesrburgo en 1914. Su padre era ingeniero de ferrocarriles. Su madre se encargaba de la educación de los cinco hijos. Yuri nació de último. En el año 1937 Y. Knórosov terminó en la escuela secundaria, pero siguió sus estudios en la escuela médica. Tenía esperanzas estudiar siquiatría. No se sabe por qué razón en 1939 ingresó a la facultad de historia de la Universidad de la ciudad de Járkov. En junio de 1941 la Segunda Guerra Mundial llegó a la Unión Soviética. Los alemanes entraron en el territorio del país, bombardeando Ucrania. Por razones de salud Yuri, quien terminó el segundo año justo en los primeros días de la guerra, no pudo ir de soldado a defender la Patria, lo que le dolió mucho. Entonces a él, como a otros estudiantes, enviaron a hacer las trincheras. Sin embargo los alemanes ocuparon rápidamente Ucrania y Yuri regresó a la casa donde quedaba su madre y su hermana, hasta que en el 1943 las tropas soviéticas lograron liberar Jarkov Yuri salió con su mamá del territorio ocupado y se dirigió a Moscú donde siguió sus estudios en la facultad de historia de la Universidad Lomonosov. Un año después lo llamaron a una escuela militar de telefonistas cerca de Moscú, donde él estuvo hasta el final de la guerra en 1945. Entonces siguió sus estudios, terminando la Universidad en 1948, especializándose en etnografía. Desarrolló su tesis de maestría sobre el chamanismo de Asia Central, publicando su primer artículo titulado “Mazar Shamun-nabi” en la revista "Etnografía Soviética". Sin embargo en estos años él había encontrado en la Biblioteca Nacional las ediciones de la obra de Diego de Landa “Relación de las cosas de Yucatán” y tradujo al ruso. También encontró las publicaciones de los Códices mayas e inició el desciframiento. Según su profesor Serguei Tokarev, Yuri para este año 1948 ya había descifrado la escritura maya... La “dramática” historia de la aparición de los libros en las llamas de Berlín inventará 10 años después un periodista. El desciframiento de la escritura maya, lo hizo contra al escepticismo general. Él estaba seguro: “Lo creado por una mente humana, puede ser resuelto por otra mente humana. Desde este punto de vista no existen y no pueden existir problemas no resueltos en ninguna área de la ciencia”. Sin embargo a Yuri Knórosov, quien se había graduado brillantemente en la Universidad, no lo dejaron entrar a hacer el doctorado – no podían perdonar, de acuerdo con el concepto ideológico soviético de aquellos tiempos, el hecho de haberse quedado “en el territorio ocupado por los alemanes”... Entonces el joven Knórosov se va a Leningrado para trabajar como investigador y curador de la colección asiática en el Museo de Etnografía de los pueblos de la Unión Soviética, viviendo allí mismo en un cuarto justo para una cama y una silla, pegado a la escalera. Allí Yuri lleva a fin su trabajo de la elaboración de metodología y de desciframiento de la escritura maya. En 1952 en la revista “Etnografía Soviética” publica su primer artículo dedicado a los resultados del desciframiento. Fue un éxito. Lo comparaban con el francés JeanFrancois Champollion, quien había descifrado la escritura egipcia, pero en realidad el trabajo de Yuri Knórosov tiene un valor mucho más grande. El francés solo comparó una inscripción bilingüe - en cambio el ruso elaboró un método científico de desciframiento de las escrituras antiguas. Aplicó este método a la escritura maya y obtuvo un resultado fantástico: por primera vez leyó lo que habían escrito los antiguos mayas en sus Códices. Comúnmente pocas personas dan importancia a la metodología, sin embargo, sin eso el trabajo científico se transforma en lotería sin resultado programado. Knórosov puso muy claro cuál era la diferencia entre el desciframiento lingüístico científico lo que es la identificación de la correlación entre los signos y la exacta lectura fonética de cada jeroglífico, y la llamada “interpretación” – intentos de adivinar el significado de los signos separados, lo que era común para los investigadores de ese tiempo, iniciando por Eric Thompson. Knorosov sabía que había que separar dos nociones entre sí, absolutamente distintas: el desciframiento de los antiguos sistemas de escrituras (particularmente el maya) del desciframiento de los códigos cifrados especialmente. En los textos antiguos los signos llevan el orden natural, sin alteración, pero su lectura está olvidada y el idioma al mismo tiempo es desconocido (muerto) o antiguo, cambiado considerablemente en el tiempo. En los códigos cifrados los símbolos conocidos están sustituidos por otros, su orden esta alterado, pero el idioma es moderno y vivo. Por consiguiente, lo que tienen en común los dos métodos del desciframiento, es el resultado final: el logro de la comprensión del texto escrito. Todo lo demás también tiene importancia: la preparación necesario para académica del descifrador, el volumen del texto procesar que tiene que ser suficientemente grande, así como el enfoque metodológico. Yuri Knórosov formuló las disposiciones principales del desciframiento de los sistemas de las escrituras antiguas en una introducción de la edición especializada llamada “Textos desconocidos”, para la serie titulada “Sistemas olvidados de la escritura: Materiales de decodificación”, cuya publicación inició en 1982. El método desarrollado por Yuri Knórosov y aplicado en el desciframiento de la escritura maya, fue también utilizado para descifrar la escritura de la Isla de Pascua y los textos Protoindios. El mencionado método de “estadística posicional”, elaborado por Knórosov para el desciframiento de escrituras antiguas, se basaba en los trabajos de Michael Ventris de la primera mitad del siglo XX aplicada para la escritura Lineal B. Knórosov logró desarrollar y generalizar la teoría final y el método de desciframiento, que han sido brillantemente comprobados en la práctica en los años 1940-1950s. Lo esencial del “Método de Estadística Posicional” en breve consiste en lo siguiente: la cantidad de signos en la escritura y la frecuencia de apariciones de nuevos signos en nuevos textos, determina el tipo de escritura. En el mundo existen tres tipos principales básicos de escrituras, lo que se marca con la cantidad de signos empleados simultáneamente en esta escritura: ideográfica (más de 5000-50000 signos), silábica (80-400 signos) y alfabética (30-40 signos). También existen tipos de escritura mixtos, como la japonesa (2000 signos). De acuerdo con eso la escritura maya, que contaba con unos 350 signos, presentaba variante de la escritura silábica que conservaba la correlación mor fémica. A continuación, se hace un análisis de la frecuencia del uso de uno u otro signo y de sus posiciones en la oración, lo que determina el referente gramatical de los jeroglíficos. La comparación de los materiales del idioma lenguaje, permite identificar con otros textos relacionados con el referentes gramaticales, semánticos y morfémicos. Entonces, se revela la lectura fonética de uno u otro signo que establece la lectura básica de la composición de los signos. La certeza de la “lectura convencional” se confirma por las “lecturas cruzadas” del signo en diferentes posiciones y textos, cuando el signo siempre se lee de la misma forma y completa el contenido semántico lógico de la oración. Todavía traduciendo del español antiguo al ruso “La Relación de las Cosas de Yucatán”, famosa obra del franciscano Diego de Landa del siglo XVI, Knórosov logró identificar la lectura de 29 signos “del alfabeto” maya, lo que resultó ser cierta clave para descifrar la escritura. Él logró entender los malentendidos que han surgido en el dictado del alfabeto, cuando el informante registraba no tanto la lectura de los signos mayas, como la denominación de las letras españolas. El desciframiento en sí se llevó a cabo en base a tres Códices jeroglíficos mayas que llevan los nombres de las ciudades europeas, donde se encuentran actualmente: París, Madrid y Dresden. Resultó que en los textos de los tres manuscritos se encuentran cerca de 350 grafemas, los cuales permitieron a Knórosov determinar el tipo de escritura como fonética y silábo-morfémica. Eso significa que cada signo maya se leía como una silaba. Y las sílabas podían coincidir con morfemas. Después el trabajo se centró en la lectura y traducción de los tres Códices mayas. La primera publicación del resultado del desciframiento que apareció en la mencionada “Etnografía Soviética” con el modesto título de “Antigua escritura de América Central” en el año 1952, causó verdadero furor. El descubrimiento genial de Knórosov fue recibido con mucho entusiasmo por la comunidad científica nacional e internacional. Solo tres años después pudo aprobar su tesis doctoral cuyo tema sonaba neutral: “La relación de las cosas de Yucatán de Diego de Landa como la fuente etno-histórica”. Sin embargo, la tarea principal para Yuri Knórosov consistía en hacer evidente la existencia del Estado maya - y solo después la justificación de la presencia de la escritura fonética. La defensa de su tesis tuvo lugar en Moscú el 29 de marzo de 1955 y fue espectacular - por el comportamiento poco común del joven científico quien al inicio no quiso explicar cómo había logrado obtener los increíbles resultados. Pero todo terminó bien y le otorgaron el merecido título de “Doctor”. Fuente: http://cemyk.org/pages/es/yuri-knorosov.php