ACTUACIÓN DE ENFERMERÍA EN QUEMADURAS DE SEGUNDO GRADO CON HIDROCOLOIDES E.A.P. ELOY GONZALO Autores: Carolina Ramón Frontelo; Sonia Luna Ramírez; Ruth Cristobal Saez de Manjarres; Gema García Jiménez; Fernando de Castro Mañas. Introducción Dentro de la Atención Primaria, un elevado porcentaje de las lesiones traumáticas lo constituyen las quemaduras, heridas que debido a su frecuencia, gravedad y por la incapacidad que implica en el afectado, representan uno de los retos más importantes para el personal de enfermería Objetivos Evitar la infección Desbridamiento Favorecer tejido de granulación Epitelización Restablecimiento funcional y estético Descripción de casos Mujer de 75 años, que acude a consulta tras derramarse en la mano líquido caliente, lo que la provoca quemaduras de segundo grado en varios dedos. Método y tratamiento Los primeros 5 días se realiza cura con sulfuadiazina argéntica, apósito vaselinado y vendaje. Al cabo de 10 días, cuando el exudado era leve y se apreciaba mejoría de la integridad cutánea, se cambió tratamiento a hidrocoloide. Tras una semana la reepitalización de la zona fue total. Hombre de 62 años que viene a consulta 3 días después de haber sufrido una quemadura con líquidos calientes en cuarto dedo mano izquierda. En la primera inspección, apreciamos: inflamación, enrojecimiento, calor local, edema, engrosamiento de bordes y placa necrótica, por lo que la clasificamos como quemadura de segundo grado profunda. Método y tratamiento •Limpieza con suero fisiológico y aplicación de colagenasa en medio húmedo, hasta conseguir la eliminación de la placa necrótica. (11 días) •A continuación curamos cada 48 horas con apósito hidrocoloide. (12 días) •A los 23 días de la pauta de curas establecida, obtenemos la recuperación de la integridad cutánea y funcional. Mujer de 30 años, con quemaduras por accidente con moto. Presenta diferentes lesiones, siendo la peor la del pie derecho, que presenta quemadura de segundo grado profunda. Método y tratamiento •Realización de la cura durante un periodo de un mes. •Posteriormente la paciente continua el tratamiento en su casa, mediante el uso de parches. •Durante el proceso se desbrida la placa necrótica con colagenasa y se lleva a cabo el proceso de cicatrización con parche hidrocelular adhesivo, lo que permitió regeneración completa, ausencia de cicatrices, movilización de la articulación y autonomía de la paciente. Conclusiones En los 3 casos presentados, podemos destacar que los apósitos hidrocoloides nos han permitido acortar el tiempo de curación, y la disminución del gasto. Mejorando la autonomía del paciente y su implicación en el autocuidado de sus lesiones gracias al fácil uso de estos apósitos , que repercute positivamente en la percepción del paciente. Los profesionales de enfermería de atención primaria, somos responsables del cuidado de las heridas de nuestra población, y buscamos la máxima eficacia, rentabilidad e independencia , consiguiéndola con los hidrocoloides.