Oraciones subordinadas adverbiales Las proposiciones subordinadas adverbiales se clasifican en dos grandes grupos: adverbiales propias y adverbiales impropias. 1) Las Proposiciones Subordinadas Adverbiales Propias: son sustituibles por un adverbio. Funcionan como complemento circunstancial dentro de un predicado. De esta clase tenemos: a) Subordinadas adverbiales de Lugar Responden a la pregunta ¿dónde? Van introducidas por el adverbio relativo donde Estuvimos donde ocurrió el accidente b) Subordinadas adverbiales de Tiempo Responden a la pregunta ¿cuándo? Van introducidas por el adverbio relativo cuando. También pueden ir introducidas por locuciones conjuntivas como en tanto que, después de que, mientras que... : Después de que él se fuera me contó lo que había pasado c) Subordinadas adverbiales de modo Responden a la preguntas ¿cómo? Van introducidos por el adverbio relativo como. También pueden ir introducidas por las conjunciones o locuciones conjuntivas como si, según, conforme... Habló como habla siempre Es importante distinguir entre las subordinadas adjetivas introducidas por adverbio relativo, las cuales llevan antecedente: Han convertido en museo la casa donde nació el poeta y las proposiciones subordinadas adverbiales introducidas por adverbio relativo, que no complementan a ningún nombre: Iremos donde sea preciso 2) Las Proposiciones Subordinadas Adverbiales Impropias no pueden ser sustituidas por un adverbio. Se clasifican en: a) Subordinadas adverbiales de causa Responden a la preguntas ¿por qué? Van introducidas por conjunciones o locuciones como porque, ya que, puesto que, dado que, como, etc. Como no le interesaba la película, no fue al cine b) Subordinadas adverbiales de finalidad Responden a la pregunta ¿para qué? Van introducidas por conjunciones o locuciones como para que, a fin de que, a que, etc. Fue al médico a que le hiciera un certificado c) Subordinadas adverbiales condicionales Plantean una condición que se tiene que cumplir para que la acción principal se realice. Emplean los nexos si, en caso de que, a menos que, como, etc. Como no llegues más temprano, te echarán del trabajo d) Subordinadas adverbiales concesivas Indican un obstáculo que no impide que se cumpla la acción principal. Nexos: aunque, aun cuando, si bien, etc. Aunque hacía mal tiempo, se fueron a la playa e) Subordinadas adverbiales consecutivas Hay que distinguir dos tipos: Consecutivas lógicas: Indican una deducción que se extrae de la oración principal. Los nexos son luego, por consiguiente, por (lo) tanto, así pues, etc. Hacía mal tiempo; por consiguiente, no fueron a la playa Consecutivas intensivas: Expresan un efecto o consecuencia de la intensidad expresada en la oración. El nexo es que: Habla tan poco que nadie sabe sus ideas Tiene tales ideas que todo el mundo lo odia Estas subordinadas se analizan en el mismo sintagma en el que está el cuantificador o intensificador (tan, tanto, tal-es, tanto-a-s) con el que se relacionan. f) Subordinadas adverbiales comparativas En las comparativas el nexo es que o como. Pueden ser de superioridad (más... que), igualdad (igual que; tan /tanto... como) e inferioridad (menos … que). Y pueden aparecer sin cuantificador cuando acompañan a un adjetivo en grado comparativo (adjetivos mejor, peor, mayor, menor). Vosotros sois tan altos como yo Vosotros sois mayores que yo Al igual que las consecutivas intensivas se analizan dentro del mismo sintagma en el que se encuentra el cuantificador que establece la comparación. Muy frecuentemente, se omiten en estas subordinadas términos que han sido expresados con anterioridad: Vosotros sois tan altos como yo (lo soy) Él tenía más libros que su hermano (tenía)