ANALI.S DE LA ACADEMIA NACIONAL DE FARMACIA 17 EL DESCUBRIMIENTO DEL CLOROFORMO Y SU PRIMER CENTENARIO Comunicación leída por su autor, el Dr. Rafael Roldán y Guerrero, en la sesión del día 18 de mayo de 1932. Para el gran público, e incluso para muchos hombres de ciencia, ha pasado casi desapercibida en España la fecha de 1931, en que se cumplieron los cien años de uno de los más importantes descubrimientos químicos del pasado siglo, que tanta importancia había de tener para el adelanto de la moderna cirugía, y que ha contribuído de modo palmario al bienestar de la Humanidad, mitigando sus dolores. Nos referimos, fácil es comprenderlo, al descubrimiento del cloroformo, efectuado en Europa casi simultáneamente. como todos sabéis. en 1831, por Liebig en Alemania. por Soubeiran en Francia y, según algún autor (Baldomero Bonet) . por Samuel Gutrie en los Estados Unidos. Mas aunque pasó e'l año 1931 sin que nadie. que sepamos. se ocupara aquí de rememorar la fecha (no ocurrió lo propio ni en Francia ni en Alemania), y ya van transcurridos unos cuantos meses de 1932, no por eso la oportunidad ha pasado ni decaído el interés que el hecho histórico merece; antes al contrario, podríamos decir que nos hallamos aún en pleno centenario del descubrimiento del triclorometano. ya que si bien l5e llevó a efecto en el año 1831 por los ilustres químicos que hemos indicado. también es cierto que hasta 1834. en que Dumas lo analizó con exactitud. no se llegó a establecer su composición. determinándose sus propiedades químicas. y 6jándo15e este insigne químico en que bajo la acción de una disolución alcc>hólica de potasa producía cloruro y formiato potásico. propuso darle el nombre de cloroformo. por habérsele considerado compuesto del radical formilo. CH y del cloro. nombre con el que sigue de$ignándosele en la actualidad. Tampoco data de los años a que venimos refiriéndonos la épocl\ en que se iniciara su empleo en Medicina como poderoso anestésico; antes al contrario. hay que esperar al año 1847, en lR EL DESCUBRIMIENTO DEL CLOROFORMO Y SU PRIMER CENTENARIO que el médico inglés Simpson lo emplea por primera vez, con el más lisonjero éxito. Se ve, por lo expuesto. que juegan principal papel en este asunto las tres fechas distintas de 1831. 1834 y 1847. por 10 cual. si ya pasó el año 1931, no es tarde aún para que recordemos el descubrimiento de este cuerpo. así como a las personas que en él intervinieron. determinaron su composición y lo introdujeron en la terapéutica, hechos y nombres que conviene no olvidar. por el señaladísimo servicio que prestaron a la Humanidad. la cual. como en otros muchos casos, debe guardar eterno agradecimiento a los innumerables hombres de ciencia que. mediante esforzado estudio y trabajo. han contribuído a alcanzar el bienestar material de que en lo posible la sociedad disfruta. Entre esta pléyade de nombres ilustres se encuentran no pocos farmacéuticos. y en este caso concreto podemos citar el nombre de Soubeiran; pero si quisiéramos ampliar el tema, lo cual no es propio de esta ocasión. podríamos citar muchos más. cuyo conocimiento interesa al público en general. para que pueda darse cabal cuenta de que el farmacéutico, en todas las épocas y en todos los pueblos. no es el vulgar comerciante. como aún algunos creen, al que por unas monedas. siempre escasas. se le paga el producto que entrega. y con ello queda saldada la cuenta. Nada de eso; en el farmacéutico debiera ver siempre la sociedad al hombre de ciencia. al paciente obrero de laboratorio. que en la mayor parte de las ocasiones. sin más estímulo que su conciencia. pone todo .!u esfuerzo en ser útil a SUB semejantes y en proporcionarles. en la medida de BUS fuerzas. el bienestar material que todos ansiamos alcanzar en nuestro paso por la vida. obteniendo a cambio de todo esto. las más de las veces en desigual e injusta recompensa. la befa y el ~scarnio. máe que por nada. por incultura social. a cuyo remedio debe en todo momento acudir el farmacéutico para ilustrarles y sacarlas de su error. Este es el único objetivo que pen5i~ue el que hoy tiene el honor de dirigiros la palabra desde esta gloriosa tribuna. *** Cra. en efecto. el año de 1831 cuando el alemán Justo van Liebig descubría el dor()formo en su laboratorio de Giesscn, haC'iendo reaccionar el cloral con la potasa y obteniendo 'un lí- ANAl..i.S DE. L\ ACADEMIA NAC IONAL DE FARMACIA 19 quicIo incoloro, poco denso. de olor agradable. que poco después había de llamarse cloruro de formilo, y más tarde tricloro metano. No llegó Liebig a comprender por aquel entonces la composición del nuevo producto que había obtenido. creyendo se trataba de un cloruro de carbono; pero se apresuró a comunicar estos hechos al gran Gay-Lussac. exponiéndole el resultado de sus experiencias en una carta. que se publicaba en los Anales de F;sica y Qu;m;ca, de París. de fecha de octubre de 1831. Liebig no era farmacéutico ciertamente; pero es indudable que su gran abción a la Química se inició en una farmacia. en la cual prestó sus servicios en su juventud. caso que vemos repetirse en otros muchos químicos. que alcanzaron justo renombre en esta ciencia. y cuyo aprendizaje se inició en el laboratorio de modestas farmacias . Nacido en Darmstad el 8 de mayo de 1803, · empezaba su labor. siendo casi un niño. en un pequeño laboratorio que poseía su padre en una droguería de su propiedad. y en donde se preparaban barnices y colores, con lo cual el joven Liebig empezó a tomar abción a esta clase de operacionee. No muy aplicado en la época en que estudiaba el Bachillerato. y a raíz de un incendio que provocó un día en clase con fulminato de mercurio. tuvo su padre que sacado de allí, en 1818, es decir. cuando sólo contaba quince años de edad. y llevarlo a una farmacia de Heppenheim para que continuaBe allí estudiando y con el propóBito de que siguiera esta profesión; pero. a pesar de estos deseo5. abandonó poco más tarde aquella farmacia, y en 1819 se traeladaba a Bonn, la célebre Universidad. junto a Colonia. y poco detlpuée a Erlangen. en donde continuaba BUS estudioe. En 1822 pasó a París. trabajando con Thenard. y entrando después en el laboratorio de Gay-Lussac por recomendación de Alejandro Humboldt. realizó numerosas investigaciones del más alto interés. En 1824 fué nombrado profesor extraordinario, y en 1826 profesor numerario. de Química. en la Universidad de Gieesen. en la cual fundó el primer laboratorio químico. dedicado ala enseñanza experimental. desempeñando aquella cátedra durante veinticuatro años con tal brillantez. que por ella desblaron los más ilustres químicos a1emane~ de aquella época, llegándose a formar verdadera escuela. 2() EL DESCUBRIMIENTO DEL CLOROFORMO Y SU PRIMER CENTENARIO En su laboratorio de Giessen llevó a cabo multitud de trabajos y descubrimientos del más alto interés científico, y allí fué. como ya hemos dicho, en donde tuvo lugar el descubrimiento del cloroformo del modo que hemos relatado. Por sus méritos extraordinarios le fué concedido en 1845 el título de Barón del Gran Ducado de Hessen, y algunos años más tarde, en 1852, era llamado a Munich, si bien allí no se dedicó a la enseñanza. y sí sólo a sus investigaciones personales, principalmente en el terreno de la Química fisiológica. Liebig fué nombrado en 1860 Presidente de la Academia de Ciencias y Conservador de los Museos cientílicos del Estado en Munich; fué también Presidente del Capítulo de la Orden de Maximiliano para el Cultivo de las Ciencias; escribió varias obras e infinidad de memorias y monografías, pudiéndose calificar de asombrosa su actividad literaria, la cual se halla en gran número de tevistas, y principalmente en los Anales de Farmacin. editados por él desde 1832. y que en 1848 cambiaron su denominación parla de Anales de QU1mica y Farmacia. pues no hay que olvidar que sus principales trabajos y descubrimientos son realmente de química farmacéu:tica. Justo Liebig falleció en Munich el 18 de abril de 1873, en cuya ciudad se erigió en su honor un monumento en mármol en 1883; en Darmstadt. su pueblo natal, hay un busto en bronce, desde 1877, y. por último, en Giessen se le erigió una estatua, en 1890. • • 111 Paralelamente Q Liebig, y C981 al mismo tiempo. el ilustre farmacéutico francés Eu¡;(enio Soubeiran deecubría también el cloTOforrno: pero éste 10 obtuvo por la acción del alcoho'l etílico eobre el clorohipoclorito cálcico y destilando la mezcla. reacción que aún hoy no se halla perfectamente explicada en sus difer e ntes faa e s, creyéndose. ein embargo, que al reaccionar amboa cuerpos se forma primeramente cloruro cálcico, agua y aldehído: des tlué s, este aldehído. reaccionando con nueva cantidad de dorohipoclorito cálcico. forma hidrato cálcico más cloral. loe cuale •. reaccionando entre sí, se transforman en formiato cálcico y cloroformo. que ee reco¡;(e por destilación. El re sultado de estas experiencias movieron Q Soubeiran 8 escribil' una memoria. que. bajo el título de lnvestigac;ones so- ANAllS Df. LA ACADEMIA NACIONAL D _E_ f_ARMA _ _C__ l" _ _ _ _ _ _ __21 bre algunas combinaciones del cloro, se publicaba también en el número de octubre de 1831 de los Anales de Física y Qu.lm;ca, de París; es decir. en la misma revista en que se publicaba la carta de Liebig a Gay-Lussac. de que ya hemos hecho mención. Tampoco Soubeiran llegó a conocer entonces la composición del nuevo cuerpo que había obtenido, tomándolo solamente por un compuesto de cloro y de hidrógeno carbonado, y es digno de hacerse notar la similitud de circunstancias en que tanto éste como Liebig se encontraban ante el descubrimiento del cloroformo. que. si bien por distintos caminos. habían producido el mismo resultado y en la misma fecha. Eugenio Soubeiran. nacido en París el 24 de mayo de 1797. pertenecía a una antigua familia de protestantes. y recibió durante su juventud una educación accidentada como consecuencia de la quiebra que tuvo su padre. el cual era agente de Cambio en París. Arruinado. por tanto, el padre de Soubeiran. montó, para poder hacer frente a 1as necesidades de su familia, una pequeña industria de hilado y blanqueo en los arrabales de París. y a esta circunstancia. al parecer adversa. se debe que el joven Eugenio se interesase grandemente por las operaciones del blanqueo. dedicándose al estudio de la Química y ge la Farmacia en Montpellier en 1813, en donde fué herido durante un motín en el año 1815; pero vuelto a París para continuar eus estudioe. era nombrado en 1819 alumno interno de los hospitales de dicha capital. en donde estuvo tree años. pasando de allí a la Farmacia Central como alumno químico y graduándoee de farmacéutico el 24 de mayo de 1824. A partir de esta época desempeñó el cargo de farmacéutico jefe del Hospital de la Piedad, de París; en 1832 sucedió a Henry como director de la Farmacia Central de los hospitales; en 1833 fué nombrado profesor adjunto de Farmacia en la Escuela de Farmacia de París. y en 1834. profeeor titular de Fieles en la misma Escuela. Habiéndose graduado Soubeiran de doctor en Medicina en Estrasburgo el 19 de agosto de 1853, sucedía en aquel mismo año a n·uestro insigne compatriota Orfila en la cátedra de Farmacología de la Facultad de Medicina de la Sorbona. y siendo nombrado. en 1825, miembro adjunto de la Academia de Medicina de París. pasaba a miembro titular en 1835, habiendo ocu- ANAU.S DE LA ACADEMIA NACIONAl. DE FARMACIA :!3 continuar sus estudios. ingresando en la farmacia de Le Royer. de dicha ciudad, en donde bien pronto habia de dar muestras de su talento. pues allí hizo estudios fecundos sobre la Botánica. la Farmacognosia y la Química, que enseñaba a sus mismos compañeros en el propio laboratorio de la farmacia en donde prestaba sus serV1ClOS. Trasladado a París en 1821. su carrera fué rápida y gloriosa. pues fué profesor de Química en el Ateneo. en la Escuela de Artes, en la Politécnica. en la Facultad de Medicina y en la de Ciencias de la Sorbona; Académico de la de Medicina y de la de Ciencias, de París; Miembro del Consejo de Instrucción pública. Diputado bonapartista. Senador, e incluso Ministro de Agricultura y Comercio. Amantísimo de la Farmacia. defendió a ésta en cuantas ocasiones se le presentaron. lo mismo en Academias que en el Parlamento. y sus discursos, sus elogios necrológicos a farmacéuticos y sus publicaciones están repletos de alabanzas a la Farmacia. que dicen mucho en pro de la nobleza de sus sentimientos; y es que Juan Bautista Dumas no podía olvidar. en modo alguno. lo que él debía a la profesión farmacéutica. ya que su formación espiritual y cultural se había llevado a cabo en el modesto [aboratorio de nuestras oficinas. Y si ligado estaba a la Farmacia. por estos vínculos del agradecimiento. no hay que olvidar que también lo estaba por los -lazos del amor y de la familia. pues Dumas casó en 1825 con una hija de Alejandro Brongniart. el ilustre mineralogista francés. ingeniero de Minas y director que fué de la manufactura de Sevres. al cual debemos recordar también como ilustre farmacéutico. cuyo título supo honrar en el tiempo que con tal carácter perteneció al ejército de los Pirineos occidentales, durante los años 1793 y 94. * !ji !Ir i Liebig , Soubeiran, Dumas! Gloria a estos insign e s varones. químicos eminentes. bienhechores de la Humanidad. ANAllS DE LA ACADE.MIA NACIONAJ.. DE FARMACIA continuar sus estudios. ingresando en la farmacia de Le Royer. de dicha ciudad. en donde bien pronto había de dar mUestras de su talento. pues allí hizo estudios fecundos sobre la Botánica. la Farmacognosia y la Química. que enseñaba a sus mismos compañeros en el propio laboratorio de la farmacia en donde prestaba sus serVlClOS. Trasladado a París en 1821, su carrera fué rápida y gloriosa, pues fué profesor de Química en el Ateneo. en la Escuela de Artes. en la Politécnica. en la Facultad de Medicina y en la de Ciencias de la Sorbona; Académico de la de Medicina y de la de Ciencias. de París; Miembro del Consejo de Instrucción pública. Diputado bonapartista. Senador. e incluso Ministro de Agricultura y Comercio. AmantÍsimo de la Farmacia. defendió a ésta en cu:mtas ocasiones se le presentaron. lo mismo en Academias que en el Parlatnento. y SUIS discursos. sus elogios necrológicos a farmact!uticos y sus publicaciones están repletos de alabanzas a la Farmacia. que dicen mucho en pro de la nobleza de sus sentimientos; y es que Juan Bautista Dumas no podía olvidar. en modo alguno. lo que él debía a la profesión farmacéutica. ya que su formación espiritual y culturallSe había llevado a cabo en el modesto Jaboratorio de nuestras ob.cinas. Y si ligado estaba a la Farmacia. por estos vínculos del agradecimiento. no hay que olvidar que también lo estaba por los 'lazos del amor y de la familia. pues Dumas casó en 1825 con una hija de Alejandro Brongniart. el ilustre mineralogista francélS. ingeniero de Mina.!! y director que fué de la manufactura de Sevres. al cual debemos recordar también como ilustre farmacéutico. cuyo título supo honrar en el tiempo que con tal carácter perteneció al ejército de los Pirineos occidentales. durante los años 1793 y 94 . . '" '" i r,'eb;g. Soube;ran. Dumas! Gloria a estos insignes varones, químicos eminentes. bienhechores de la Humanidad.