iglesia cristiana mega zoe estudio biblico # 440

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IGLESIA CRISTIANA MEGA ZOE
ESTUDIO BIBLICO # 440-IGLESIAS EN LAS CASAS
PASTORA EDITH CRUZ
MARTES 18 @ 24 DE ABRIL DE 2006
Tema: “Lucharé Y Resistiré Para Mi Propia Paz” Santiago 3: 18 - 4:1
No hay nada mejor que vivir en paz. Cuando tenemos todo ordenado podemos levantarnos en paz. Por
lo tanto, al saber que tenemos que disciplinarnos entramos a ordenar las cosas en nuestras vidas y eso nos
brindará reposo, nos traerá paz. Es hora de que todo creyente comience a ordenar su vida. Mientras no nos
ordenemos nunca vamos a estar en paz sino en desespero y tensión. No se puede estar en paz cuando no hay
orden, porque no se ha buscado la sabiduría y se ha dejado que la pereza nos tome. La Biblia dice en Santiago
que la razón por la cual no estamos en paz, sino en guerra y pleitos es por los propios anhelos, las pasiones que
combaten en nuestros miembros, pasiones fuertes por querer superar a los demás. El problema de hoy día en la
vida diaria y hasta en las iglesias es el luchar por superar a los demás, por quien es más grande. El querer
superar a los demás, ostentar ser más que el otro es horrible, porque se convierte en un afán. Y todo lo que es
afán quita la paz que Cristo nos ha dado. Mateo 6: 27
Las guerras y los pleitos vienen de adentro de uno cuando no se ha podido ser sabio para vivir en paz.
Santiago 1: 5 No hay nada mejor que vivir, dormir, comer y hablar en paz. Lo que va a llegar para cada uno
de nosotros llegará, pero lo que no es para nosotros no lo es, entonces tenemos que vivir en paz. A cada cual
Dios lo creo como Él quiso. Busquemos mejor ser sabios entendiendo a Dios y sus designios y veremos lo que
es propio para nosotros y respetar lo que corresponde a los demás. El día que nos dediquemos a amar y a
escudriñar las Escrituras conoceremos la esencia de la Palabra y ésta nos formará de cabeza a pies. Ella, que es
la mente de Dios, nos hace y nadie nos puede confundir. Debe estar en nosotros lo que es este mover.
Debemos aprender a resistir, ejerciendo nuestro dominio propio porque amamos la paz. El que puede tener
paz es el que ha tenido guerra y ha vencido; se lucha porque se tiene que luchar, la paz la ha propiciado Dios
para el que le sigue.
Todo lo que son los placeres, los juegos, el dinero, el deseo de tener lo que no es para nosotros y vivir
pretendiendo que lo tenemos, todas esas son las peleas, las guerras que vienen por las intensas pasiones del
hombre. Por eso tenemos que resistir. A veces anhelamos lo que Dios no quiere para nosotros. Él nos quiere
enseñar su voluntad y su camino para nosotros andarlo.
Resistir es una fuerza que se opone a otra fuerza, es la oposición a la acción. Cuando una fuerza de
algo negativo viene sobre nosotros la resistimos y nos mantenemos firmes. Nos resistimos con más fuerza
frente a aquello que nos quiere sacar de nuestro caminar. Pero para eso tenemos que saber que nos tenemos
que esforzar hasta el gastar para ser un pueblo en verdad sano. Tenemos que combatir en nuestro cuerpo las
pasiones. 1 Corintios 9: 27 El que ama la paz sabe que hay que luchar de esa manera, pero el que tiene las
pasiones activas piensa que no es así. Lo mejor de la vida es estar en paz. Las pasiones están todo el tiempo
peleando dentro del hombre para ser satisfechas. Es que vivir satisfechos es bien complicado. Por eso debemos
conocernos. Gocémonos con lo que Jehová nos ha dado. Hebreos 13: 5 “Sean vuestras costumbres sin
avaricia, contentos con lo que tenéis ahora; porque él dijo: No te desampararé, ni te dejaré.” La esencia
misma del ser humano se va encontrando según va pasando el tiempo. Cuando no se puede dormir en paz, se
sabe que es porque se está buscando algo que inquieta mucho, cómo lo es el acumular las posesiones materiales.
Gocémonos con lo que Dios nos ha dado en nuestra casa, no permitamos que la carne se apodere de nosotros,
vivamos satisfechos. El problema es que siempre se quiere más y más. No tomemos terreno que no nos
corresponde. Tengamos lo que nos toca no tratemos de superar a otros porque no vamos a poder vivir ni comer
en paz. Dios nos ha dado amor, perdón y vida abundante, promesas de vida eterna y mucho más. Gocemos
nuestra nueva vida en Cristo y seamos sabios, prudentes.
Debemos morir a tanto exceso de reclamar dignidad y pongamos nuestra humilde dignidad a los pies de
Jesús. Por eso muchos viven tan molestos con todo el mundo. Viven pisoteando a aquellos que parecen
estorbar el avance que llevan. Pero, entendamos que cada cual tiene su propia gloria, la que Dios quiso.
Provoquemos paz en nuestra vida, mantengamos lo interno sano y tengamos paz. Con ira, celos, y
crueldad se mata a los demás, por la crueldad se puede descubrir lo que hay dentro del hombre que vive en
pleitos y en guerras. Se convierte todo esto en homicidio. 1 Juan 3: 15 Tenemos que cuidarnos de no codiciar
lo que no podemos tener jamás. Bueno es poder abrazar al hermano. No deseemos lo que no es nuestro, ni
pidamos lo que no nos toca porque por eso no recibimos. Pidamos sabiduría que Dios nos la va a dar. A veces
no estamos capacitados para administrar cosas que llegarán cuando maduremos, seamos hombres de paz y
amemos. Tengamos cuidado con el egoísmo porque esto nos destruye.
La amistad con el mundo es enemistad con Dios. Santiago 4: 4,5 El Espíritu Santo nos anhela, nos
ama celosamente por eso nos cuida. Dios quiere que lo amemos primero que a nadie. Ser amigo del mundo es
vivir como viven los demás. Lo que viene de Dios no hay que esforzarlo porque llega. Muchas cosas nos
llevan a codiciar. Vivamos en paz entendamos que del Espíritu Santo no vienen la envidia y los celos que
provocan la lucha. Resistamos todo mal que está a nuestro alrededor y que viene a tentarnos.
Seamos conocedores de las Escrituras en todo nuestro ser. La naturaleza de la iglesia debe ser la de
hombres y mujeres santos. Él da mayor gracia, no viene de nosotros. Santiago 4: 6 Resistamos y conozcamos
lo que Dios quiere para nosotros. Dios tiene mucho para dar al humilde. El que resiste a la soberbia se hará
humilde. Un verdadero arrepentimiento es lo que distingue al hombre. Cuando la Palabra nos ha transformado
entonces sabemos cómo actuar, nos sometemos a Dios y somos capaces de resistir al diablo. Vs 7 Si
purificamos nuestro corazón y abandonamos el pecado externo e interno entonces hay un profundo dolor, se
llora el mal. Vs. 8 Cuando nos afligimos y lamentamos es mejor así para luego tener el verdadero gozo. Vs. 9
Mientas vivamos en la verdad y seamos humildes Él entonces nos honrará y nos exaltará.
Resiste las fuerzas que quieren robarte la paz, resiste al diablo y huirá de ti, sé humilde y Dios te
exaltará. En Cristo podemos vivir en paz, vivir triunfantes y gozarnos en la esperanza que nos ha dado. Amén.
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