Àmbit geogràfic: Espanya Secció: Espectáculos Periodicitat: Diari 24/04/2004 Pàg: 38 Un bosque de voces Javier Pérez Senz Nervios, ilusión y algo de miedo. Un coro de más de 300 niños y niñas, vestidos de blanco, ocupan varias gradas en el escenario del Teatre Lliure mientras afinan sus voces. Actúan en la ópera infantil El hose de Farucàrun, con música de Óscar Peñarroya y libreto de Maria Carmen Mateu, y el público de su bautismo escénico lo forman ni más ni menos que sus propios compañeros de clase. El estreno, el pasado jueves en el Teatre Lliure, en el marco de la programación infantil del Liceo, volvió a demostrar que la ópera puede ser una estimulante aventura pedagógica. Tras dos jornadas con cuatro funciones para escolares, El bosque de Farucàrun se representa hoy y mañana en el Lliure para público familiar en doble sesión matinal, a las 10.30 y 12.30 horas. Para la mayoría de los 1.300 alumnos de más de 20 centros educativos catalanes que participan en el proyecto educativo del Liceo Ópera a Secundària, El bosque de Farucàrun supone dar un gran salto pasando de ser público pasivo a activos intérpretes de una ópera. "Ese es el sentido de este proyecto,. despertar el interés y la vocación artistica de niños y adolescentes que descubren el mundo de la ópera desde dentro", afirma Manuel Valdivieso, director musical del montaje, del que Jordi Fondevila se ha responsabilizado de la dirección de escena. No hay nada experimental en El bosque de Farucàrun, una coproducción del.Liceo, el Teatre Lliure y el Instituto Municipal de Educación de Barcelona. Más cerca del musical que de la ópera, la partitura cumple su función pedagógica, con una escritura coral sencilla, fácil de cantar, pero muy floja en ideas musicales y en el tratamiento orquestal, que la Jove Orquestra Nacional de Catalunya defiende con convicción. La obra narra una historia de solidaridad y cooperación en un ambiente mítico de magos, elfos y espíritus fantásticos inspirado en la célebre obra de J. R.Tolkien El señor de los anillos. Anna Alas y Anna Puche, que se alternan en el papel protagonista del elfo Krugui, y Toni Marsol, en el personaje del malvado rey Korostav, encabezan el reparto de solistas que interviene en las funciones. La sencillez escénica preside el montaje, cuyo presupuesto para decorados y vestuario, a pesar de la abultada nómina de participantes, no supera los 9.000 euros. Cada vez que cae el telón --el único acto de la ópera se divide en cinco escenas-- el público escolar hace notar su presencia con rotundidad. Aplausos, gritos, silbidos y muchas risas. "La obra no .está mal. Me ha gustado la aparición del malo (Korostav) y ver a la orquesta", dice Sergi, de 13 años, alumno de un instituto de Ripollet. Su compañero de butaca, Joel se anima a apuntarse para la próxima ópera. "Puede ser divertido y así veo como funciona por dentro", asegura. Una de las intérpretes de la ópera infantil El bosc de Farucàrun. EL PAÍS Diputació de Barcelona. Institut del Teatre. Centre de Documentació i Museu de les Arts Escèniques