Un Nacimiento de 58 años prolonga tradición del pesebre en

Un Nacimiento de 58 años prolonga tradición del
pesebre en Barquisimeto
Barquisimeto, 24 Dic. AVN .- Un Nacimiento con objetos animados, que este año cumple 58 de
historia navideña, prolonga en Barquisimeto, estado Lara, la tradición de hacer pesebres en los
hogares venezolanos.
Se trata de un prestigioso pesebre, de cuatro metros de largo y tres y medio de ancho, realizado por
la familia Gómez Soteldo, que reside en una casa del barrio Pueblo Nuevo, localizado en el oeste de
esta capital.
Juan Gómez Soteldo inició el acervo
Este pesebre incorpora movimientos a las figuras inanimadas y agrega cada año nuevos elementos,
que lo hace uno de los más atractivos de la ciudad.
Ana Gómez contó que la tradición navideña de realizar este Nacimiento la inició su papá Juan Gómez
Soteldo en 1952, cuando vivían en la calle Uruguay, al final de la avenida Vargas de Barquisimeto.
El papá de Ana, como lo indica la tradición, invitaba a la casa a sus familiares, a sus vecinos y a sus
amigos a ver el Nacimiento, brindaba alguna bebida de esta época como chicha, ponche crema o
algún vino para los adultos, así como caramelos, refrescos y dulces para los niños y las niñas.
Los habitantes del sector acudían a su casa para esperar las 12:00 de la medianoche, hora del
alumbramiento del Niño Jesús, llegada que era recibida con rezos, cantos y fuegos artificiales.
Un pesebre que cobró vida propia
Contó Ana, acompañada de otro hermano, José Gregorio, que en 1974 se mudaron de la Uruguay, a
las inmediaciones del área histórica de Barquisimeto, a Pueblo Nuevo, un sector popular del oeste de
la ciudad.
En este sector, al igual que en la Uruguay, el papá de Ana y de José Gregorio no solamente continuó
con la tradición de hacer el pesebre, la dimensión del Nacimiento creció e incorporó el movimiento
en objetos inanimados.
Habilitaron un espacio de cuatro metros de ancho por cuatro metros de largo entre la sala y la
cocina de la casa para construir el pesebre.
El señor Juan, su esposa y sus hijos comenzaron a recolectar materiales de desecho, entre los que se
encontraban pedazos de juguetes eléctricos.
Construyeron figuras tradicionales del nacimiento a las que le incorporaron movimientos, como la
mujer que lava ropa en el río, otra mujer que prepara un pernil y el hombre que se mece en una
hamaca.
También destacan la mujer que saca agua de un pozo, el hombre que pica leña y las ovejas que
caminan en los alrededores del Nacimiento: de San José, la virgen María, la mula y el buey, a la
espera del nacimiento del Niño Jesús junto con la estrella de Belén.
José Gregorio relató que con los años se han incorporado otros elementos como las caídas de agua,
diseñadas por él y sus hermanos, entre los que destacan el mayor de la familia: José Francisco.
“Todo este dispositivo para crear el nacimiento se prepara con anticipación desde el mes de agosto
de cada año”, recordó José Gregorio.
Señaló que su papá murió en enero de 2006 a los 89 años de edad y desde entonces los hijos de
Juan Gómez Soteldo mantienen la tradición de realizar el pesebre.
Una casa abierta a la tradición navideña
Los hijos de Juan Gómez Soteldo mantienen intacto el legado de su padre: uno de los Nacimientos
más célebres de Barquisimeto.
No solamente cada año hacen un pesebre con nuevo elementos, también abren sus puertas a todo
aquel que desee verlo, como ha sucedido con visitantes de diversas regiones del país.
Los grupos de aguinaldos de las iglesias cercanas a Pueblo Nuevo vienen en las noches a cantarle al
pesebre.
En estas ocasiones la familia obsequia caramelos y refrescos a los niños y niñas que vienen a ver el
Nacimiento, así como bebidas tradicionales navideñas a los adultos: chicha, ponche crema o vino.
A las 12:00 de la medianoche del 24 de diciembre, antes de que nazca el niño Jesús, la familia
Gómez Alvarado, vecinos y amigos recorren la casa con sahumerios y realizan rezos en honor al
nacimiento de Jesucristo.
Compran fuegos artificiales que estallan durante toda la noche del 24, especialmente en el momento
que se acerca del nacimiento del niño.
Contaron los hermanos Gómez que el pesebre se mantiene en la casa hasta la Semana Santa,
cuando la virgen Divina Pastora, la patrona espiritual de los larenses, regresa a su santuario, Santa
Rosa, luego de hacer su recorrido por diversas iglesias de Barquisimeto.
Posterior al regreso de la virgen Divina Pastora la familia Gómez Alvarado quita el pesebre y cierran
ese espacio santo de la casa hasta agosto de cada año, cuando la familia vuelve a reunirse para
planificar el nuevo nacimiento.
En el barrio Pueblo Nuevo de Barquisimeto este pesebre gigante y de mucho movimiento mantiene
viva una de las tradiciones navideña más importantes de Venezuela.
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