cadenas de montañas que irradiando de aquel punto, forman las

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cadenas de montañas que irradiando de aquel punto, forman las cordilleras litoral é interior de la comarca.
No sólo se deduce esta figura de un examen atento del conjunto, si
que también d é l a que en general afectan los golfos (1), cuyo carácter en
otro tiempo tuvo nuestra reyión vallesana.
Dirigido el eje de la curva de NE. á SO., pasa próximamente por San
Celoni, Cardedeu, Granollers y Sabadell, terminando frente á Martorell en
el histórico Puente del Diablo. En otra línea sensiblemente paralela al expresado eje, pero algo más hacia al Norte, hállanse La Garriga, Caldas
de Montbuy, Tarrasa y Olesa que, con las anteriores, son las poblaciones
de más importancia que encierra la comarca.
La rama litoral formada por la serie de montañas que separan el Valles
de las playas mediterráneas, parte del referido lugar de Gualba pasando
por Fuirosos, Montnegre, Collsacreu, montes de Nuestra Señora del Corredó y San Cristóbal; sigue paralelamente al Mogent por entre los partidos judiciales de Granollers y Mataró hasta los montes de Sellechs, continuándose por los de la Mata, Montalegre y San Jerónimo de la Murtra,
hasta Moneada.
Corta en este punto el cauce del Besos y se prolonga hacia Collserola y
Tibidabo por. entre los partidos judiciales de Sabadell y Barcelona, avanzando por la misma cadena de montañas, entre los de San Felío de Llobregat, Sabadell y Tarrasa, hasta el pueblo de Papiol, para terminar en
la confluencia del Llobregat y Biera de Bubí, á corta distancia del e x p r e sado pueblo.
Encuéntranse en esta cordillera los desfiladeros ó collados de Collsacreu, Parpes, Font de Será, Conrería, Moneada y Collserola, por donde
pasan los antiguos caminos del Valles á Arenys de Mar, Mataró, Alella,
Tiana, Barcelona y Gracia.
Determina la rama superior otra línea que partiendo del propio lugar
de Gualba, pasa por los montes de Víabrea, San Martín de Biells y cumbres de Montseny (Santa Elena, Plá Prados, Bocas de Corps, Turó del
Home, Catiu d' Or), Matagalls y Mulá, y atravesando el Plá de la Calma,
se continúa hasta el Congost, por Tagamanent y Vallcárcara. Cortado el
cauce del río, sigue por Puiggraciós y Serrat de Leucata, Montañas de
Bertí, San Miguel del Fay, San Saturnino de Ososmort, Farell y Solanes,
San Llorens del Munt y Montcau, avanzando por los montes de Pas ó
(1) Como natural consecuencia de la acción erosiva de las aguas.
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