Para vencer los malos pensamientos

Para vencer los malos pensamientos
Escritores Actuales / Loring Jorge
Por: Jorge Loring | Fuente: Para Salvarte
2. Para vencer los malos pensamientos que importunan, lo mejor es despreciarlos y distraerse con otra cosa.
La mejor arma contra un mal pensamiento es otro pensamiento, que sea bueno. Ponte a silbar o a cantar. Lee un libro.
Coge un liz y ponte a hacer una multiplicaci de muchas cifras. Si no tienes liz, procura hacerla mentalmente. Piensa en algo concreto
totalmente distinto. Aunque sea un absurdo; por ejemplo, en formar un equipo de ftbol con los once hombres m gordos que conozcas.
Piensa que les arbitras el partido, o que eres el bitro de un partido internacional, o que est practicando un deporte que te entusiasma.
Algo que te absorba el entendimiento, por ejemplo, recordar los nombres de las provincias de Espa, imaginarte las diez catedrales m
bonitas que conozcas, llamar por telono a un amigo, etc.
Incluso podrs pensar: y si me muriera ahora mismo?.
Entra dentro de lo posible.
El caso es ocupar la mente en algo concreto.
Y si puedes emprender una ocupaci que te absorba toda la atenci, todav mejor.
Quiz pueda ayudarte el que salgas a dar una vuelta para distraerte.
En fin, t bscate alguna triquiela para borrar de tu imaginaci ese pensamiento que te estmolestando.
Pero lo primero, acudir brevemente a Dios o a la Virgen pididoles la gracia de triunfar, por ejemplo, con una jaculatoria. Inmediatamente
despu desprecia esos pensamientos y distrte.
Es necesario adquirir la costumbre de reaccionar ridamente contra las tentaciones: lo mismo que te sacudes automicamente una chispa
del cigarro que te cae en tu chaqueta nueva.
3.Muchas veces circunstancias exteriores, como las malas conversaciones, las lecturas peligrosas, las diversiones y espectulos
deshonestos y la televisi, suscitan imaginaciones, pensamientos o deseos de cosas impuras.
En estos casos el primer recurso es huir de aquellas circunstancias. Quien voluntariamente se pone, sin causa justa, en circunstancias
que constituyen grave peligro y ocasi prima de consentir en pensamientos o deseos malos, comete pecado grave84 .
4. Contra este mandamiento son pecado grave los malos pensamientos y deseos si se han consentido complacidose en ellos
voluntariamente.
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84 CATECISMO: Texto Nacional. Tercer Grado. Lecci 33