Ceas, Cepco, Mesa de Concertación Para la Lucha Contra la Pobreza de San Martín ELEMENTOS PARA EL EJERCICIO DE LA VIGILANCIA SOCIAL MATERIAL DE TRABAJO Contenidos: Rosell Laberiano Agüero Aporte metodológico: Deisi Luna Indice Introducción PARTE I. El enfoque 1. ¿Por qué ahora hablamos tanto de vigilancia social? 2. Formas de vigilancia social 3. Campos de vigilancia social 4. Vigilancia… ¿y que más? 5. La vigilancia en procesos de concertación 6. Elementos a tomar en cuenta para la vigilancia social 7. Hacia la vigilancia social sustantiva PARTE II. ¿Cómo nos organizamos? 1. Pasos básicos de la vigilancia social 2. La organización de la vigilancia Conclusiones Bibliografía Introducción La vigilancia social es un mecanismo de participación que aporta en la construcción de una democracia más participativa. El proceso de democratización de nuestra sociedad supone la institucionalización de mecanismos que faciliten y promuevan la libertad de las personas para elegir y controlar a sus representantes y participar en las decisiones claves de la vida del país. La vigilancia social es un reclamo de los ciudadanos(as) y las organizaciones sociales muy acentuado en los últimos años. Las situaciones de corrupción y crisis del sistema democrático representativo son algunas de las condiciones que ponen en la agenda social y política la urgencia por la vigilancia social. Esta demanda está presente no solamente en el discurso sino también en las exigencias prácticas por profundizar las experiencias ya existentes 1. La vigilancia que ya conocemos es aquella que las propias instituciones del Estado han generado para controlar a sus instituciones. Asimismo la propia sociedad genera sus propios mecanismos de control para regular el comportamiento de sus instituciones. La vigilancia nos coloca en la misma acción problemática; antes, durante y después de ocurrida; estamos colocados en la misma orilla, nos involucramos en la situación 1 También está presente en el discurso de la Iglesia católica: “La Iglesia aprecia el sistema de la democracia, en la medida en que se asegura la participación de los ciudadanos en las opciones políticas y garantiza a los gobernados la posibilidad de elegir y controlar a sus propios gobernantes, o bien la de sustituirlos oportunamente de manera pacífica” (Juan Pablo II, Centesimun Annus 46). (subrayado nuestro) misma, no se promueve ciudadanos pasivos. Otras formas de participación como la cogestión y la autodeterminación social, están asociadas a la vigilancia. La parte activa del control la asume indudablemente la sociedad y sus ciudadanos, la vigilancia es una acción centrada en la sociedad. El Estado colabora con ella mediante la difusión de información; promoviendo la normatividad; recibiendo y sancionando las demandas en materia de transparencia y neutralidad, promoviendo en el aparato del estado la cultura por la transparencia y la neutralidad en la función pública Las distintas experiencias de vigilancia social nos dan luces de elementos básicos a considerar para su mejor ejercicio; además del voluntariado, se necesitan dosis de especialización (personas con mucha capacidad y dedicación); flexibilidad en la organización del proceso, pues las diversas problemáticas nos orientan a trabajar en núcleos y redes de vigilancia. Asimismo la transparencia en el uso de la información es fundamental para un trabajo sostenido y legítimo; la vigilancia tiene que generar formas reconocimiento y de sanción, sean éstas administrativas, civiles, penales o sociales. Todo este proceso va acompañado de la formación cívica por una sana participación social y el responsable desempeño del sector público estatal y no estatal en la gestión pública. Proponemos la idea de la vigilancia social sustantiva como el mecanismo que permite el sano encuentro entre la sociedad y el estado, para proteger el bien común y el derecho de las personas. PARTE I: El enfoque La participación social es el involucramiento de la población y las organizaciones en los espacios de decisión, de gestión y de vigilancia de los espacios públicos estatales y no estatales. La participación se ejerce mediante el diálogo, el debate, la protesta, la propuesta, la concertación, la incidencia, la negociación. Para la democracia elitista la participación se cierra en los procesos electorales. Desde la perspectiva de una democracia más participativa, hay muchas formas de participación social -algunas de ellas inscritas en el actual marco legal2. En la historia reciente el discurso de la participación social ha pasado por tres grandes etapas: la participación en las decisiones de gobierno, la participación en la cogestión de los recursos y la participación en la vigilancia social. La primera alude al nivel mayor de la participación de la población, ser parte de las decisiones profundas de la vida humana y el bien común. La segunda comprende la participación en la producción, distribución y uso de los bienes y servicios. La tercera comprende la participación en la vigilancia de las decisiones y acciones públicas. El ejercicio de la vigilancia social no significa dejar de lado los otros niveles de participación social. Es necesario recuperar la promesa por la participación social en los niveles de la cogestión, de las decisiones de gobierno y la vigilancia social. Estamos haciendo vigilancia social al momento de participar en la supervisión electoral, en el seguimiento y monitoreo de la calidad nutricional de la alimentación en los comedores populares, en el comportamiento de los profesores y directores de los colegios, en el desempeño de las autoridades municipales y regionales, en el cuidado del medio ambiente. Tenemos conocimiento de la existencia de muchas formas e instancias de vigilancia social. Los comedores populares han generado un sistema de vigilancia nutricional, pues, tienen una matriz de vigilancia que les permite evaluar la calidad del aporte 2 Más de diez mecanismos de participación se encuentran reconocidos en el marco legal peruano como la participación en los procesos electorales, las iniciativas legislativas, las iniciativas de reforma constitucional, el referéndum, el derecho a la información, los cabildos abiertos, los planes de desarrollo concertado, el presupuesto participativo, los concejos de coordinación regional, entre otros. nutricional de los alimentos que reciben del Pronaa3 y elaboran informes periódicos. Distintas poblaciones afectadas por la contaminación de las empresas mineras también hacen monitoreo de la calidad del aire y del agua y sus efectos en la salud de las personas, animales y plantas. Así como estos dos casos, podemos hacer una larga lista de iniciativas de vigilancia sectorial y territorial que hay en el país y el mundo4. Esta labor cotidiana la realizamos porque queremos que la gestión de la vida pública y el uso del bien común, sea buena. Nuestro mejor deseo es que las elecciones sean transparentes para que gane quien realmente ha sido designado por las mayorías y que la nutrición de los niños en los programas sociales sea de calidad. Queremos que el nivel de la enseñanza y el desempeño de las autoridades en la escuela de nuestros hijos sea bueno y que el alcalde y los regidores rindan cuentas de sus gestiones. Todo esto lo hacemos porque queremos: más democracia, más desarrollo y se respeten nuestros derechos. 1. ¿Por qué ahora hablamos tanto de vigilancia social? Dos situaciones (entre otras) han dado lugar a la puesta en la agenda social y política el tema de la vigilancia social: la corrupción y las precariedad de las instituciones de la democracia representativa. Sabemos que la corrupción siempre ha estado presente en nuestra historia y las sociedades se han encargado de crear las normas que han buscado regularlas. En los últimos 15 años, el país vivió un contexto de alta corrupción, que aún no ha sido superado. Esta es una realidad también presente en varios países del mundo5. Frente a dicha situación tenemos un cierto despertar ciudadano, “ya no queremos ser engañados ni burlados” es una afirmación que se escucha cada vez mas en nuestro país. La participación activa de los ciudadanos en los espacios de decisión 3 Pronaa: Programa Nacional de Apoyo Alimentario. Las experiencias son diversas: “Social Watch” que después de la cumbre de Copehague en 1995 hace vigilancia social de los compromisos en materia de políticas de lucha contra la pobreza; el Grupo Impulsor Nacional mujeres por la igualdad real en el Perú viene haciendo vigilancia social de la Plataforma de Acción de la IV Conferencia Mundial de la Mujer realizada en Beijing – China, en relación a los compromisos asumidos en materia de los derechos de la mujer; vigilancia social de los derechos de los trabajadores realizadas por el Centro de Asesoría Laboral del Perú -CEDAL quienes han elaborado una guía de indicadores para la vigilancia social en temas laborales, etc. 5 Puede revisarse los informes de Transparencia Internacional sobre la Corrupción. 4 política y haciendo vigilancia social frente al desempeño de los funcionarios públicos y el uso de los recursos públicos, son acciones importantes como freno a la corrupción. Los ciudadanos(as) reconocemos que nuestra responsabilidad no se cierra en las ánforas durante los procesos electorales. La realidad concreta nos muestra que las personas que hemos designado para que nos representen en los espacios de decisión, ejercen un mandato libre6. Asumen compromisos que difícilmente las cumplen y es escasa la transparencia en la gestión pública. La debilidad 7 y la pérdida de credibilidad de las instituciones de control de las instituciones del Estado, hace que la población afirme que sus demandas por la transparencia y neutralidad no serán atendidas adecuadamente. Por tanto, la vigilancia social se constituye en un mecanismo de consolidación de las estructuras de control y de promoción de una cultura de transparencia en la gestión pública. 2. Formas de vigilancia social En el ámbito de los países la vigilancia puede tener dos direcciones: la horizontal y la vertical. En el primer caso, las instituciones del Estado y la Sociedad generan sus propios mecanismos de control, y en el otro caso la sociedad hace vigilancia de las políticas, las instituciones y los funcionarios del Estado. Diversas instituciones como la Defensoría del Pueblo, el Congreso de la República, la Contraloría General de la República8, el Consejo Municipal, el Consejo Regional, pertenecen al Estado y tienen la función de controlar y fiscalizar a las instituciones públicas estatales. Pero además de ellas, existen otros espacios de fiscalización generados al interior de cada institución (órganos de control o central de quejas y demandas). Por otro lado la Sociedad también tiene mecanismo de control hacia ella misma, realiza vigilancia de instituciones sociales y políticas como los medios de A este ejercicio de libre mandato O´Donnell ha denominado Democracia Delegativa. O´Donnell, Guillermo; ¿Democracia delegativa? En Romeo Grompone (ed) Instituciones Políticas y Sociedad, lecturas introductorias. IEP. Lima. 1995. pag 228 7 Basta citar el titular de un periódico “Contraloría no está en condiciones de fiscalizar todo el país”. El Comercio 1 de Setiembre del 2002. Lima. 8 La Contraloría General de la República es el órgano rector del Sistema Nacional de Control. Tiene autonomía técnica, funcional, administrativa y financiera. Las instituciones que controlan son del nivel central, regional y local (Gobierno central, gobiernos regionales, Municipalidades provinciales y distritales, Empresas Públicas, Organismos desconcentrados, otros) Para mas detalles puede revisarse el Decreto Ley No 26162 del Sistema Nacional de Control. 6 comunicación, las empresas privadas nacionales o transnacionales instaladas en los países, las organizaciones sociales (gremios, frentes, coordinadoras, etc), los partidos políticos y los espacios de concertación entre otras. Una tarea pendiente es generar nuevos mecanismos de control social para los procesos que se dan al interior de la misma sociedad. Finalmente, la vigilancia vertical la ejerce la sociedad con relación a las instituciones y funcionarios del Estado. Esta vigilancia se hace a los representantes elegidos por voto popular pero también a toda la burocracia estatal 9. No podemos limitarnos con el control de nuestras autoridades elegidas, pues también son sujetos de control todos los funcionarios y servidores públicos de la burocracia estatal. Si hemos elegido al alcalde y sus regidores, al presidente regional, a los congresistas y al presidente de la república, entonces tenemos todo el derecho de vigilarlos porque les hemos conferido la autoridad de gobernarnos y también tenemos el derecho de vigilar a toda la burocracia estatal Nuestro enfoque de la vigilancia social reconoce la acción realizada por la sociedad a las instituciones y funcionarios del Estado (vigilancia social vertical) y la implementada en el propio nivel de la sociedad (vigilancia social horizontal). La vigilancia de la sociedad a las instituciones y funcionarios del Estado, es un mecanismo de participación propia de la sociedad. Los ciudadanos y las organizaciones sociales hacen la vigilancia de manera autónoma. Los instrumentos y estrategias son diseñados e implementados por la sociedad. El Estado debe dejarse vigilar y aportar al proceso, esto implica difundir información pública, resolver las demandas presentadas, facilitar el marco normativo y promover en el aparato del estado la cultura por la transparencia de la función pública. Loureiro, María Rita; “O controle da burocracia no presidencialismo” en Jobim, Belmiro Valverde; Burocracia e Reforma do Estado. Cuadernos Adenauer II. Sao Paolo 2001. 9 Vigilancia Social horizontal y vertical Categorías Sociedad Sociedad Estado Sociedad - Sociedad Sociedad - Estado Vigilancia horizontal: Vigilancia vertical: Vigilancia ambiental de empresas Vigilancia nutricional del apoyo privadas, veeduría frente a los alimentario; medios de comunicación, otras. Vigilancia de programas de empleo temporal, Vigilancia de los procesos electorales, otras 3. Los campos de la vigilancia El proceso de la vigilancia se ejerce desde el inicio de una acción pública. La elección de los representantes en el gobierno ya implica la acción de control; la población y sus organizaciones deben participar cuando se diseñan, se implementan y se evalúan las políticas públicas. Generalmente se piensa que la vigilancia social se hace después de ocurrida una irregularidad, sin embargo es fundamental que se participe de manera activa en todo el proceso. Consideramos tres grandes campos para la vigilancia de la sociedad al Estado 1. En el campo de las relaciones que se establecen entre los actores estatales del gobierno nacional con los actores internacionales (acuerdos con organismos multinacionales como el FMI, Banco Mundial, BID; el tratamiento de la deuda externa; las estrategias de integración regional), y las relaciones que se establecen con la sociedad que van mas allá del período de un gobierno, como el Acuerdo Nacional; 2. En el campo de las relaciones que establece un gobierno con la población; como los compromisos asumidos en diversas áreas del escenario internacional (Beijing, Río, Copenhague, etc) y nacional (metas en políticas sociales, anticorrupción, etc); el diseño de las Políticas Públicas (focalización, descentralización); los acuerdos establecidos entre los Gobiernos Regionales y la población (Planes de Inversión, Presupuestos Participativos); entre otros, 3. En el campo de la gestión de las instituciones públicas estatales como la implementación de programas y proyectos sociales en los tres niveles de gobierno (nacional, regional y municipal). Además se considera el desempeño de los funcionarios y servidores públicos (están los elementos de ética, probidad, transparencia, neutralidad en la gestión pública). Este es el campo más desarrollado por las experiencias de vigilancia social dada su cercanía con la población. 4. Vigilancia… ¿y que más? La vigilancia social es un mecanismo de participación social; tenemos otros mecanismos de participación como el sufragio, el referéndum, la demanda de rendición de cuentas, entre otros. En los últimos años hay un amplio reclamo por fortalecer la democracia mediante la consolidación de espacios de participación, inclusión y control social10. El marco normativo existente señala que los gobiernos regionales y locales, además de ser fiscalizados por sus consejos, “Son fiscalizados también por los ciudadanos de su jurisdicción, conforme a la ley”11. Otros mecanismos de participación y control social formal 12: Sufragio Revocatoria y remoción Referéndum Demanda de rendición de cuentas Iniciativa de reforma constitucional Iniciativa legislativa No planteamos restringir el rol de los ciudadanos a la vigilancia entendida en su dimensión pasiva. Consideramos que no solamente debemos vigilar la manera cómo se distribuyen los ingresos del país y la manera cómo se organizan las decisiones, es fundamental que la sociedad civil tenga un mayor nivel de participación. 10 La vigilancia también es un mecanismo que genera procesos de inclusión social. Si las políticas sociales son regresivas y no llegan a los más pobres entonces tenemos que hacer una demanda. De la misma manera, tenemos que estar vigilantes que las mujeres, las poblaciones nativas, los minusválidos, los ancianos y los niños (as) estén incluidos en los procesos de desarrollo. 11 Ley No 27783 (Ley de bases de la descentralización). Art. 21. 12 Para mayores detalles puede revisarse la Ley de los Derechos de Participación y Control Ciudadanos (ley No 26300). Nuestra preocupación está en mantener participación en la vigilancia, en la las tres dimensiones articuladas: cogestión y en las decisiones públicas. Esta visión integral y articulada de la vigilancia nos permite promover ciudadanos activos y la mayor consolidación de la democracia en el país. 5. Vigilancia en procesos de concertación Desde hace varios años se han constituido en el Perú espacios de concertación 13 como el Acuerdo Nacional, la Mesa de diálogo promovido por la OEA, la Mesa de Concertación para la Lucha contra la pobreza (nacional, departamental, provincial y distrital), las Mesas de Diálogo departamental, los Comités de Desarrollo Local, entre otros. Los espacios de concertación socio-estatales como espacios de deliberación, coordinación y consulta, acuerdan visiones, políticas, estratégicas y otros mecanismos de manera consensuada. Las dimensiones de dichos mecanismos dependen en su diseño e implementación de la envergadura de los problemas enfrentados por los espacios de concertación. Estos espacios hacen seguimiento y no vigilancia social. Esta última es una tarea centrada en la sociedad. Una de las tareas de los espacios de concertación socio-estatales es hacer seguimiento de los acuerdos tomados. Por ejemplo si se define como acuerdo reducir en un porcentaje determinado el nivel de analfabetismo en una zona considerada, se hará el registro periódico del avance de los programas y proyectos que se establecieron para enfrentarla. En este mismo caso, si la población encuentra muchas irregularidades en el desempeño de los alfabetizadores, entonces tendrá que presentar una o más denuncias para que se establezcan los correctivos respectivos. Puede encontrar que estos alfabetizadores aprovecha su contacto con la población para hacer proselitismo político durante el proceso electoral. Lo que hace el espacio de concertación es el seguimiento de los compromisos asumidos, las metas trazadas y la evolución del proceso. Se establecen los mecanismos institucionales para procesar la manera cómo se hará el seguimiento y el destino final de los resultados. El rol de la sociedad civil y de todos los ciudadanos es hacer vigilancia social de los compromisos y del desempeño de los actores involucrados en la implementación de 13 La Mesa de Concertación para la lucha contra la pobreza es uno de estos espacios de concertación socio estatal cuyos objetivos son concertar las políticas sociales, lograr eficiencia en la ejecución de las mismas con énfasis en la lucha contra la pobreza, las políticas públicas locales, regionales y nacionales, además hacer la vigilancia del uso de los recursos públicos utilizados durante la ejecución de los programas y proyectos. Por tanto hacemos una distinción entre el seguimiento y la vigilancia social. El seguimiento es un mecanismo horizontal que le compete a la propia institucionalidad del espacio de concertación. De esta manera se hace un control interno de los procesos y las metas. Pero es muy distinto el rol de la sociedad civil cuando hace vigilancia social vertical a los compromisos y el desempeño de los funcionarios públicos y del uso de los recursos involucrados. Algunas responsabilidades de los espacios de concertación en materia de vigilancia social Para el adecuado ejercicio de la vigilancia social es pertinente el rol promotor de los espacios de concertación. Uno de los roles del espacio de concertación es procesar y difundir información de los temas que le competen. Además recoge las demandas y propuestas de la sociedad civil en materia de vigilancia social para canalizarlas a las instancias correspondientes o generar mecanismos propios para procesar las denuncias y propuestas presentadas. Al ser un espacio que reúne a los diversos actores sociales, políticos y estatales puede generar mecanismos de resolución de las demandas y propuestas de la vigilancia social. Otro rol que pueden desempeñar los espacios de concertación son generar mecanismos de rendición de informes de los funcionarios públicos para promover la transparencia en la gestión pública. Procesamiento y difusión de la Información: Estos espacios socioestatales de concertación reciben y procesan información del sector público y las difunden a la sociedad. También canalizan información especializada y generan la suya propia para un adecuado seguimiento de sus planes concertados. Pueden usarse diversos medios para difundir esta Información: Pagina web, radio, TV, prensa escrita, murales, etc. Recojo de demandas y propuestas de la sociedad civil en materia de vigilancia social. Pueden recoger informes de vigilancia de la sociedad civil, promover su presentación en foros públicos y canalizarlas a los respectivos órganos de control del Estado para que se evalúe y realicen los institucionalizar la participación ciudadana y lograr transparencia e integridad programas de lucha contra la pobreza. en los correctivos necesarios para mejorar la gestión pública y el desempeño de los funcionarios. Estos informes no solamente presentan denuncias, también hacen propuestas que sirvan para mejorar la eficiencia de la gestión pública. Es importante señalar que la sociedad civil es autónoma en la elaboración de sus demandas y propuestas. 6. Elementos a tomar en cuenta para la vigilancia social Recordemos que la vigilancia social se realiza no solamente durante la implementación de una acción pública, sino también durante su diseño, ejecución y evaluación. A continuación algunos elementos básicos de la vigilancia social. a. Información: transparencia y acceso La fragmentación de la sociedad y la debilidad del Estado son limitaciones en la era de la abundancia comunicativa14. Los avances de las instituciones públicas estatales en materia de transparencia informativa son importantes 15. Se está avanzando hacia la equidad en el acceso a la información y las asimetrías de información son menos distantes. De esta manera los ciudadanos y sus autoridades tienen escasa maniobra para la manipulación de la gestión pública. La transparencia de la información pasa a ser un componente fundamental en la relación entre los ciudadanos y sus representantes, y para garantizar la gobernabilidad democrática en los países. La corrupción tiene como uno de sus soportes el secreto de la información. En el Perú varias instituciones públicas han diseñado páginas web, donde están difundiendo la información de su sector. Sabemos que mucha de esta información no está totalmente procesada para su fácil lectura por la población. Además no toda la población tiene acceso a Internet. Estas limitaciones pueden ser superadas. Mucha de la información especializada debería ser difundida en consultas ciudadanas y en los medios de comunicación de mayor acceso a la población. 14 Estamos pasando de la era de la escasez comunicacional hacia otra de abundancia comunicativa, ver Keane John; “Lo público la era de la abundancia comunicativa, en Ciudadanos en la Sociedad de la Información”. En Miguel Guisti/María Isabel Merino (ed), Ciudadanos en la Sociedad de la Información; Instituto de Estudios Europeos – PUCP, 2001. Lima Perú. 15 Puede revisarse la Ley No 27806 (Ley de Transparencia y acceso a la información pública) y su modificatoria. Cabe resaltar algunos aspectos de los artículos 3 y 4: La información que posea el Estado se presume pública, el Estado tiene la obligación de entregar la información Además de las instituciones del Estado, la sociedad también tiene un rol trascendental en la difusión y procesamiento de la información. Consideramos importante que se debe enfatizar y exigir que esta información sea objetiva, de calidad y de fácil acceso a todos los ciudadanos, de manera tal que la forma de ofrecer la información no sea una limitación en el proceso de transparencia de la gestión pública. La búsqueda de información tampoco nos puede llevar a la paranoia total, donde todos los ciudadanos sean vigilantes de todos (no pretendemos llegar a la vigilancia total) La vigilancia social y la cultura por la transparencia de la información significan respetar el derecho a la intimidad de las personas, se sustenta en la confianza de construir juntos una sociedad más democrática. Proponemos la sana participación de los ciudadanos y organizaciones en el proceso de la vigilancia: la vigilancia sana. b. Sanción social y sanción legal Las instituciones del Estado que hacen control de las instituciones públicas son varias, podemos mencionar: la Contraloría General de la República 16; el Congreso de la República (tiene como funciones la elaboración y aprobación de leyes y la fiscalización del aparato estatal); la Defensoría del Pueblo (se encarga de velar por los derechos de las personas y vigilar el desempeño de los agentes públicos estatales). Se cuenta con un marco normativo17 que regula el ejercicio de control social horizontal desde el Estado. Estas normas tienen que ser respetadas y conocidas por que soliciten las personas y los funcionarios o servidores públicos que incumplieran con las disposiciones serán sancionados por la comisión de una falta grave. 16 Puede encontrar información sobre las instituciones de control horizontal en el Estado en sus respectivas páginas web. 17 Puede revisarse el Decreto Ley No 26162 del Sistema Nacional de Control. En él podemos distinguir entre una responsabilidad administrativa cuando se desarrollan una gestión deficiente o negligente; responsabilidad civil si se ocasiona un daño económico a su entidad o al Estado y responsabilidad penal cuando se ha efectuado un acto u omisión tipificado como delito o falta. Asimismo puede revisarse la Ley de Código de Ética de la función pública No 27815. Es importante resaltar que este Código de Ética considera como servidor público a los funcionarios, servidores y empleados nombrados, contratados, designados, de confianza o electos que desempeñen actividad o funciones en nombre o al servicio del Estado. Cumplen una función pública, por tanto involucra toda actividad temporal o permanente, remunerada u honoraria. Deben demostrar neutralidad (imparcialidad e independencia), transparencia en el uso de la información (fidedigna, completa y oportuna), discrecionalidad, ejercicio adecuado del cargo, uso adecuado de los bienes del Estado y responsabilidad. los ciudadanos para que conozcan los mecanismos formales de control y para exigir su respeto. Además de estas tres instituciones, encontramos órganos de control al interior de las instituciones públicas18. Por ejemplo el MIMDES y FONCODES, tienen su central de transparencia donde reciben quejas y demandas. La sociedad también genera sus mecanismos de sanción. Una de estas formas es generar impacto sobre los medios de comunicación social y desde ahí provocar prevenciones, rectificaciones o sanciones, estos mecanismos son utilizados ante la debilidad de las instituciones formales de sanción legal, civil y administrativa. En el marco de los mecanismos de participación y control ciudadanos, están abiertas varias estrategias de control social como la remoción y revocatoria de autoridades y funcionarios municipales y regionales, pedido de rendición de cuentas, consultas vecinales y otras. c. Vigilamos y nos dejamos vigilar Las autoridades y funciones de las instituciones públicas estatales deben tener apertura hacia la vigilancia social. Este gesto es una muestra de transparencia y acercamiento con la sociedad. No basta que esta apertura sea resultado de una exigencia normativa formal o de presiones internacionales. Es importante de se inserte en la cultura de la burocracia estatal y en la sociedad, la apertura hacia la vigilancia. Asimismo la sociedad ejerce la vigilancia social como una estrategia para consolidar la institucionalidad democrática del país y por el respeto de los derechos de las personas. En ese sentido, la participación social busca el sano encuentro y la confianza entre los diversos actores públicos. La vigilancia social se desenvuelve mejor en una cultura de confianza. Esta es generada por la apertura del Estado y la sana disposición de la sociedad por la vigilancia social. d. Institucionalidad Los incentivos y sanciones son aplicados por los órganos de la Alta Dirección de la entidades públicas. Ver Ley de Código de Etica de la Función Pública. 18 Es fundamental que la sociedad y el estado reconozcan las iniciativas de la vigilancia social. Ambas formas de reconocimiento permitirán que la vigilancia social sea un ejercicio transparente y sustantivo. El reconocimiento formal no debería ser una traba para el amplio ejercicio de la vigilancia social. Asimismo es importante que las estrategias de vigilancia social tengan amplios niveles de representatividad19. Si por ejemplo la decisión es hacer vigilancia de los programas de salud es importante que los diversos sectores implicados estén representados en los organismos de vigilancia. Las experiencias temáticas de vigilancia social son muy extendidas. No podemos organizar un aparato cerrado que articule estas experiencias. Es mejor respetar la especialización de cada una de ellas. Pueden articularse en redes sociales para potenciar las iniciativas individuales. Es preferible que la participación de los ciudadanos y las organizaciones sociales se articulen en estas redes de vigilancia social. El nivel de representación debe ser bastante amplio. Este es un elemento que otorgará legitimidad al proceso. e. Especialización y flexibilidad La vigilancia social no puede quedarse en la voluntad de los ciudadanos. Es importante que a esa voluntad se añada dosis importantes de especialización. Si por ejemplo hacemos la vigilancia de los programas alimentarios, tenemos que saber cuáles son las recomendaciones nutricionales en grasas, proteínas, carbohidratos y vitaminas. En el caso de la vigilancia en temas ambientales necesitamos conocer cuáles son los componentes químicos que contaminan el agua, el suelo, los animales, las plantas y el ser humano. La especialización no es tarea única de los técnicos, el proceso educativo que va acompañado a la vigilancia social permite que los líderes sociales logren desarrollar muchas de estas capacidades. Junto con esta dosis de especialización es importante contar con un equipo de personas y recursos que hagan oportuna la acción que realicemos . Por la variedad de problemáticas que asume la acción de la vigilancia social y la necesidad de 19 Para mas detalle puede verse Cunill, Nuria Grau; "Responsabilización por el control social", en La responsabilización en la nueva gestión pública latinoamericana. Clad, Bid, Eudeba, 2000. Argentina ampliar las bases de representación, es importante que la organización de la vigilancia social sea suficientemente flexible, eficiente, ética y debidamente organizada. La sociedad civil mantiene, consolida y genera instancias de vigilancia social de acuerdo a sectores definidos . Crea sinérgias mediante articulaciones en redes sociales sectoriales y territoriales. Desde estos espacios procesan información para el monitoreo de los programas sociales y el desempeño de los funcionarios públicos. Los informes generados se constituyen en instrumentos para presentar denuncias, propuestas y reconocer los méritos. 7. Hacia la vigilancia social sustantiva Por los resultados que se logren, la vigilancia puede tener varios alcances. En los casos donde la apertura del Estado es favorable para la vigilancia y la participación social es pasiva, tenemos formas organizativas de la vigilancia que no dan lugar a resultados significativos. Si una institución cualquiera del Estado genera mecanismos internos para que la sociedad vigile los programas y proyectos, pero no encuentra respuestas, entonces la vigilancia será insignificante. Podemos encontrar situaciones inversas, donde la apertura del Estado es limitada pero la sociedad genera mecanismos activos de vigilancia social. Cuando no se atiende a esta exigencia social, se producen tensiones y mayores demandas de la sociedad. Un caso típico de esta situación es la vigilancia medioambiental en países como el Perú, donde la protección real de las instituciones públicas estatales es aún limitada. Como ya lo hemos señalado anteriormente, las condiciones mas adecuadas para hacer vigilancia social son la alta apertura del Estado y la activa participación de la sociedad. Si hay apertura del Estado (“me dejo vigilar”) y alta disposición de la sociedad para vigilar (en un contexto de confianza), entonces tenemos una forma de vigilancia que llamamos vigilancia sustantiva20 La acción social generada por la vigilancia sustantiva implica el establecimiento de un relación estable entre Estado y Sociedad. Desaparece la figura del vigilante y del vigilado, para pasar a una relación institucional estable. Se genera una cultura de la transparencia en la gestión pública, en el uso del bien común 21. La vigilancia social sustantiva es el mecanismo que permite el sano encuentro entre la sociedad y el estado, para proteger el bien común y el derecho de las personas. Es la responsabilidad de estos diversos actores para cuidar el agua, el aire y todos los bienes públicos, para gozar de un ambiente que promueva el desarrollo de las capacidades humanas. Es también la responsabilidad por garantizar el derecho que tienen las personas por una vida digna, por la acción colectiva, por la diversidad cultural, por la salud, la educación, el trabajo. 20 VELASQUEZ, Fabio; “La veeduría ciudadana en Colombia: en busca de nuevas relaciones entre el Estado y la sociedad civil” en Bresser Pereira, Luiz y Nuria Cunill Grau (ed) Lo público no estatal en la reforma del Estado; Paidos, Clad. 1998. Argentina 21 Las experiencias de vigilancia social sustantiva en el Perú son escasas, destacamos hasta el momento la experiencia del Consejo Comunal y Vecinal (CCV) del Distrito de Limatambo en el Cusco. La comunidad y sus autoridades tienen un acuerdo explicito y se establecen las relaciones de confianza para que unos controlen y otros se dejen vigilar. Asimismo el mecanismo de la vigilancia hace parte de otros mecanismos de participación de los ciudadanos en la toma de decisiones y la participación en la gestión. CCP y FDCC, Experiencias de democracia participativa en Cusco, II Encuentro Nacional de Municipios Rurales. Mimeo 28 Noviembre de 2000. PARTE II: ¿CÓMO NOS ORGANIZAMOS PARA HACER LA VIGILANCIA? Cada experiencia de vigilancia social genera sus propios mecanismos de acción. No tenemos reglas precisas para cada caso. Después de haber compartido nuestro enfoque de la vigilancia sociales (qué entendemos por vigilancia social y para qué ), consideramos tomar en cuenta algunos procesos importantes para el ejercicio de la vigilancia social (PIOP: problemática, instrumentos, opinión pública, premios y sanciones). La capacitación y el seguimiento son variables permanentes en todo el proceso de la vigilancia. P: Definición de la problemática Un adecuado procedimiento para hacer vigilancia social pasa por la claridad en la definición de la problemática que se está asumiendo. Si hacemos vigilancia electoral sabemos que nuestra preocupación está en garantizar un proceso electoral transparente y que se frenen todos los factores que vulneran la neutralidad de los funcionarios y servidores públicos en el proceso de las elecciones. Por tanto tenemos que tener muy bien definido el tema o problemática de la vigilancia social. La definición de la problemática permitirá organizar el vigilancia en sus fases ex ante, durante y ex post. Luego se definen el objetivo de la vigilancia y los actores involucrados en el proceso. Para definir el problema podemos seguir varios procedimientos. No existe un solo camino porque los campos de la vigilancia son diversos. A continuación sugerimos algunos procedimientos: En el campo de las irregularidades institucionales, cuando la situación ya se ha producido y es muy evidente, tenemos el problema frente a nosotros. Por ejemplo si se verifica que las paredes del colegio se están rajando por todas partes, entonces el problema está claramente planteado y tenemos que actuar de inmediato: el peligro por la vida de los niños dado el deterioro físico del centro educativo, causado por su inadecuada construcción. Pero también podemos tener problemas tenemos que están frente a nosotros pero no idea de las causas del problema, esto implica realizar un diagnóstico. Por ejemplo si vemos que muchos de los niños de la comunidad empiezan a toser y adelgazar, entonces tenemos que hacer un diagnóstico de la salud de los niños desde los servicios de salud. En estos casos nuestro diagnóstico debe considerar cuál es el problema, cuáles son sus causas y cuáles sus consecuencias. Podemos decir que el problema es el 50% de los niños de la comunidad que tiene tuberculosis producido por las malas condiciones de salud y nutrición. En el campo de las decisiones de gobierno, el problema o tema de la vigilancia puede esta ubicado en los compromisos asumidos en diversas materias. Por ejemplo si el Presidente de la República se compromete en reducir la pobreza extrema del 25% al 15% en el lapso de cinco años; el tema de la vigilancia es el cumplimiento del compromiso asumido (la meta). Otro ejemplo, si el Presidente Regional o el Alcalde Municipal hace participativo el presupuesto, el tema de la vigilancia es si realmente cumple con este mandato. Finalmente en el campo de las decisiones de Estado, la vigilancia se hace a las relaciones que establece el Estado con los organismos internacionales (como los negocios de la deuda externa, las cartas de intención), y con la sociedad (como el Acuerdo Nacional). Por ejemplo se puede vigilar si las cartas de intención consideran los elementos de equidad, desarrollo humano, descentralización, etc; en el caso del Acuerdo Nacional se hace la vigilancia de las políticas y metas establecidas. Cuando tenemos definido el problema, elaboramos los objetivos y planteamos con mucha claridad quiénes son los actores involucrados en la vigilancia social. I: Definición de los instrumentos Después de tener muy clara la problemática que queremos enfrentar durante la vigilancia procedemos a elaborar nuestra matriz de indicadores que dará sustento a cualquier denuncia o propuesta. Posiblemente ésta sea una de las tareas más difíciles de procesar. Se necesita de una matriz muy clara de indicadores para tener precisión de aquellos elementos que se quieren vigilar. Los indicadores Tienen que ser verificables objetivamente. Esto quiere decir que si Pedro utiliza los mismos instrumentos de recojo de información que Luis y José, entonces todos deben llegar al mismo dato o información. Los indicadores no pueden repetirse para varios problemas. Cada una responde a un problema o tema específico. Los indicadores tienen que ser debidamente sustentados evitando que sean subjetivos. Los indicadores deben considerar que la información solicitada sea fácil de conseguir El siguiente paso es diseñar la estrategia de recojo de información. Esto es, qué información necesitamos, de dónde la obtenemos y cómo la conseguimos. Los instrumentos existentes son diversos y podemos usarlas de acuerdo a los objetivos trazados. La información que necesitamos para responder a los indicadores planteados de los problemas respectivos, se pueden conseguir desde fuentes indirectas como la información registrada en el INEI y otras instituciones y fuentes directas que son las que nosotros mismos construimos. Para pasar a la segunda fuente tenemos que dar por agotadas las primeras. Fuentes indirectas: información del INEI, Ministerios, Municipalidades, Direcciones Regionales, etc. Fuentes directas: elaborar una encuesta, entrevistas, etc. Para obtener información tenemos que verificar la fuente de donde podemos obtener la información; saber si la fuente es fiable; disponer de los medios para conseguir la información que no está disponible y registrar la información periódicamente O: Estrategia frente a opinión pública Después de haber alimentado la matriz de indicadores se elabora un informe donde se registran las bondades y limitaciones del asunto materia de la vigilancia social. El informe de los comités de vigilancia ambiental dará lugar a un balance de la contaminación ambiental, lo mismo ocurre con el o los informes de la vigilancia electoral. Estos informes son presentados en foros públicos, en medios de comunicación, directamente a los funcionarios públicos, a los respectivos órganos de control interno de las instituciones públicas o a la fiscalía y el Poder Judicial. El informe puede tener varios caminos para su incidencia. Se puede dirigir a la alta dirección, los órganos de control interno horizontal o comités de ética y transparencia de la institución vigilada. Asimismo se puede recurrir a los órganos de supervisión o control externo horizontal como la Contraloría General de la República, la Defensoría del Pueblo, el Congreso de la República. También se puede dirigir a la Policía Nacional, a la Fiscalía, al Poder Judicial. Otros espacios importantes son los Medios de Comunicación Social, Foros Públicos, entre otros. En cada uno de los casos se esperan las sanciones respectivas. P: Premios y Sanciones El informe será presentado en un foro público, en los medios de comunicación social y en las distintas instituciones de control horizontal. La vigilancia social da lugar al uso de mecanismos formales de control como la remoción y revocatoria de autoridades, pedido de rendición de cuentas, consultas ciudadanas, entre otras. Las irregularidades tendrán que ser corregidas y los buenos desempeños reconocidos. Debemos enfatizar que la vigilancia no termina con el informe presentado, tiene que darse un lugar importante a la evaluación del proceso y al seguimiento del informe, de los preventivos sugeridos, los correctivos y las sanciones. Problemática, instrumentos, opinión pública, premios y sanciones Seguimiento Premios y Sanciones Evaluación Definición del Problema Organización Opinión Pública Capacitación Aplicación de Instrumentos La organización de la vigilancia Una manera interesante de organizar la vigilancia social es constituirse en núcleos y articularse en redes de vigilancia. La red cuenta con promotores de la vigilancia a modo de voluntariado. Pero además cuenta con un equipo técnico. Estos recogen la información, la procesan, elaboran los informes y canalizan propuestas y denuncias. Recomendamos que los núcleos y la red tengan áreas de trabajo con capacidad para manejarse en uno o los diversos campos que hemos propuesto en el capítulo anterior. Que su diagnóstico organizacional les permita definir con claridad hasta donde pueden ir. Posiblemente se especialicen en el tercer campo que es el más próximo a la percepción de la población y en el mejor de los casos avanzar hacia la vigilancia en los campos de las relaciones de poder. Es importante señalar que para realizar una adecuada vigilancia social, se debe contar con una central de base de datos, instrumentos de recojo de información, elaboración de informes, una central de recojo y canalización de demandas y mecanismos de seguimiento. Los diseños organizacionales pueden ser diversos, usualmente se organizan por los resultados buscados. Estos pueden estar orientados hacia el reconocimiento y la sanción en la opinión pública, y el reconocimiento y sanción en el sistema legal. Nuestra propuesta es combinar ambas formas. a. Basada en el impacto a la opinión pública Se presenta el informe en un FORO PUBLICO y/o a una COMISION ETICA En el foro participan los ciudadanos y agentes públicos La comisión ética está integrada por gente honorable El informe se basa en la opinión de los ciudadanos y en fuentes indirectas b. Basada en el premio y la sanción Se presenta la denuncia a la entidad correspondiente (órgano de justicia y control municipal, regional, nacional) La entidad correspondiente sanciona la falta C. Basada en el impacto en opinión pública, premio y en la sanción Se presenta el informe en un FORO PUBLICO y/o a una COMISION ETICA En el foro participan los ciudadanos y agentes públicos El informe se basa en la opinión de los ciudadanos y en fuentes indirectas Se presenta la denuncia a la entidad correspondiente (órgano de justicia y control municipal, regional, nacional) Se sanciona la falta y premia desempeños Conclusiones La vigilancia es un mecanismo de participación social que ha emergido en el discurso político y social y en la vida concreta en el Perú, después de más de una década de alta corrupción y frente a los vacíos de la democracia representativa. La forma tradicional de organizar el control social al interior de las Instituciones públicas estatales no ha logrado frenar la corrupción y la falta de transparencia en el manejo del Estado. El protagonismo del Estado ha pasado al campo de los ciudadanos y las instituciones sociales. Ahora la pelota está en la cancha de la sociedad. Esto no quiere decir que las instituciones del Estado se pongan a un lado en su responsabilidad por la transparencia de la gestión pública, y además debemos precisar cuáles son los roles de la sociedad civil, la sociedad política y el Estado en materia de vigilancia social. Las múltiples organizaciones sociales tampoco han estado al margen de actos de corrupción e irresponsabilidad en el manejo institucional. La exigencia por una mayor transparencia y honestidad no se dirige solamente a las instituciones públicas estatales, también es una tarea importante velar por la responsabilidad de las instituciones sociales y políticas. Además de la vigilancia social que hace la sociedad al Estado nuestra propuesta es hacia la vigilancia de las instituciones públicas no estatales. Es preciso enfatizar que esta tarea corresponde de manera exclusiva a la sociedad. La función del Estado es facilitarla promoviendo una cultura de responsabilidad en el aparato del Estado, hacia la legitimación del control social y hacia transparencia en el uso de la información. El acto de la vigilancia está asociado a otras formas de participación como la gestión social y la autodeterminación. En ese sentido no pretendemos restringir el enfoque de la vigilancia en la función pasiva de cuidar los recursos públicos tangibles. La población tiene todo el derecho de participar durante los procesos de toma de decisiones públicas y en la gestión de ellas. Como ya hemos señalado es necesario recuperar la promesa por la participación social en los niveles de la cogestión, las decisiones de gobierno y la vigilancia social. Se espera que las acciones de vigilancia sean bastante representativas y se articulen en redes. No se puede hacer vigilancia de todas las situaciones y problemáticas al mismo tiempo, algunas iniciativas tendrán mayor especialización que otras, por tanto es importante crear relaciones sinérgicas entre ellas. Así como no podemos exigir la participación total de la población, tampoco podemos pretender llegar a la vigilancia total. La paranoia de sentirnos seguidos y fiscalizados nada tiene que ver con nuestra propuesta. Proponemos una forma de vigilancia social sana. Los diseños organizacionales para la vigilancia social pueden ser diversas, dependen de los temas abordados y principalmente de los resultados esperados. Proponemos un diseño organizacional basado en núcleos y redes de vigilancia social orientados hacia el reconocimiento y la sanción social y legal. Proponemos que la vigilancia social sea un proceso de diálogo y formación cívica que promueva la responsabilidad del Estado y la sana participación de la sociedad. Es fundamental la consolidación, legitimación e institucionalización de esta manera de hacer vigilancia social. A esta confluencia de sana participación de los actores de los espacios públicos estatales y no estatales, llamamos vigilancia sustantiva. Bibliografía O´Donnell, Guillermo; ¿Democracia delegativa? En Romeo Grompone (ed); Instituciones Políticas y Sociedad, lecturas introductorias. IEP. Lima. 1995. Loureiro, María Rita; “O controle da burocracia no presidencialismo” en Jobim, Belmiro Valverde; Burocracia e Reforma do Estado. Cuadernos Adenauer II. Sao Paolo 2001. Keane John; “Lo público la era de la abundancia comunicativa”. En Miguel Guisti/María Isabel Merino (ed), Ciudadanos en la Sociedad de la Información; Instituto de Estudios Europeos – PUCP, 2001. Lima Perú. Cunill, Nuria Grau; "Responsabilización por el control social", en La responsabilización en la nueva gestión pública latinoamericana. Clad, Bid, Eudeba, 2000. Argentina Velásquez, Fabio; “La veeduría ciudadana en Colombia: en busca de nuevas relaciones entre el Estado y la sociedad civil” en Bresser Pereira, Luiz y Nuria Cunill Grau (ed) Lo público no estatal en la reforma del Estado; Paidos, Clad. 1998. Argentina