Buenos Aires, 20 de octubre de 2008.- VISTO: Las actuaciones nros. 7833/07, 8016/07, 2292/08, 2758/08, 3215/08, 3809/08, 3866/08, 4142/08, 4558/08, 4693/08, 5033/08, 5049/08, 5395/08, 5427/08, 5573/08, 5691/08, 5704/08, 5788/08, 5872/08, 5892/08 y 5984/08, iniciadas por personas que se atienden en los Hospitales Generales de Agudos “Dr. Cosme Argerich” y “Dr. José María Ramos Mejía” quienes denuncian no poder acceder al tratamiento de su problema de salud debido a la escasez de insumos hospitalarios. Y CONSIDERANDO QUE: En las denuncias presentadas en esta Defensoría del Pueblo las/os vecinas/os manifiestan faltas y demoras en la entrega de medicación de vademécum hospitalario; dilación y suspensión de turnos de cirugía y estudios de diagnóstico por falta de insumos generales; retrasos en la tramitación de la compra de insumos especiales (medicación fuera de vademécum, prótesis, etc.). A continuación se realiza una reseña de cada una de las actuaciones y de las gestiones efectuadas por este organismo. I.- Actuaciones relacionadas con el Hospital General de Agudos “Dr. Cosme Argerich”: La actuación nº 5049/08 fue iniciada por la señora O.E., quien reclama ante la demora en la realización de la cirugía que le fuera indicada a su esposo, el señor J.O.D., quien tiene diagnóstico de atrapamiento de nervio cubital. La cirugía que requiere es ambulatoria y fue suspendida por falta de insumos generales del hospital. Desde el Servicio de Traumatología confirmaron lo manifestado por la denunciante. Con fecha 10 de septiembre de 2008 el Director del Hospital General de Agudos “Dr. Cosme Argerich” dirigió un memorando a todos los Jefes de Servicio, comunicando la suspensión de todas las cirugías programadas hasta nuevo aviso. La actuación nº 2292/08 iniciada por la señora S. C., quien manifiesta que en virtud de presentar osteonecrosis femoral y síndrome meniscal de rodilla izquierda, requiere material quirúrgico para la realización de la cirugía indicada desde el mes de noviembre de 2007. La solicitud de compra de 1 insumos por ayuda médica fue iniciada en tres oportunidades sin lograr que se efectivice la compra. Desde este organismo se remitieron oficios a la Dirección del hospital y a la Dirección General Adjunta de la Región Sanitaria I, a fin que se agilice el trámite de compra de insumos, de los cuales no se recibió respuesta. Posteriormente, el hospital derivó a la paciente al Ministerio de Desarrollo Social de la Nación para tramitar la compra del insumo, el que se encuentra disponible desde el día 20 de agosto de 2008 a la espera de que se fije fecha de cirugía. La actuación nº 2758/08 iniciada por el señor J. A. quien concurre a esta Defensoría del Pueblo el día 8 de mayo de 2008 y manifiesta que su padre se encuentra internado en la sala de neurocirugía a la espera de dos cirugías por padecer un neurinoma en la zona occipito-cervical. El mismo se encuentra incluido en una lista de espera de pacientes próximos a ser intervenidos quirúrgicamente, pero que debido a la falta de insumos y camas de terapia intensiva la operación del paciente iba a demorarse por tiempo indeterminado. Esta Defensoría del Pueblo remitió un oficio a la Dirección del hospital solicitando que se garantice el tratamiento quirúrgico indicado al paciente. Posteriormente, el presentante realizó una ampliación de la denuncia, adjuntando documentación que asevera que 47 pacientes del hospital, en su mayoría internados en las salas de neurocirugía, cardiología, ginecología y traumatología, se encontraban a la espera de intervenciones quirúrgicas y que en algunos casos las demoras superaban el mes de internación en espera. Por lo expuesto, se remitieron nuevos oficios al Director del hospital y a la Dirección General Adjunta de la Región Sanitaria I, con copia de la ampliación. Con fecha 14 de julio de 2008 se recibe respuesta del hospital, en la cual la Directora General de Servicios de Salud, doctora María Angela Toscano, remitió su descargo en el que expresa que la situación es difícil de resolver por la gran afluencia de pacientes que desbordan la disponibilidad del hospital. La Dirección del Hospital General de Agudos “Dr. Cosme Argerich” encara un programa que incluye la ampliación de la disponibilidad de camas, el aumento de la dotación de enfermeros, en especial los asignados al área de Terapia Intensiva, como también la creación de un sistema de derivación excepcional hacia otros efectores del subsector. Finalmente agrega que el paciente fue operado, sin hacer mención a la situación de los otros 47 pacientes que aguardaban cirugía. La actuación nº 3215/08 fue iniciada por la señora S. H. R., quien manifiesta que su hijo se encuentra internado desde el día 17 de abril de 2008 en plan quirúrgico para reemplazo valvular y plástica ventricular, por presentar insuficiencia tricúspide severa sintomática asociada a insuficiencia cardíaca en el contexto de enfermedad de Ebstein. La cirugía indicada se encuentra suspendida debido a que la misma requiere de válvula biológica e insumos específicos, que sólo parcialmente fueron adquiridos por el hospital. Con fecha 27 de junio de 2008 este organismo remitió oficios a la 2 Dirección del hospital y a la Dirección General Adjunta de la Región Sanitaria I, solicitando la agilización del trámite de compra de insumos. Vencidos los plazos dispuestos no se recibió en esta Defensoría del Pueblo respuesta alguna. La actuación nº 5033/08 fue iniciada por la señora A. B., quien manifiesta que su hijo desde el mes de julio de 2006 se encuentra a la espera de una cirugía artroscópica de hombro. Para la realización de la misma el día 9 de mayo de 2008 se elevó con carácter de urgente la correspondiente solicitud de insumos, sin resolución a la fecha. Esta Defensoría del Pueblo remitió oficios a la Dirección del hospital y a la Dirección General Adjunta de la Región Sanitaria I solicitando que se garantice el tratamiento quirúrgico indicado al paciente, sin que a la fecha se haya recibido respuesta alguna. La actuación nº 5573/08 fue iniciada por el señor J. C. G. M., quien manifiesta que el día 13 de marzo de 2008 fue sometido a una primera intervención quirúrgica por presentar una hernia inguinal derecha. Posteriormente, se presentaron complicaciones por lo que actualmente el paciente se encuentra en plan quirúrgico para hernioplastía inguinal derecha con malla. Personal del organismo se comunicó con la farmacia del hospital, donde informaron que dicha solicitud fue anulada por Administración. La actuación nº 5704/08 fue iniciada por la señora A. E., quien manifiesta que se encuentra internada desde el día 6 de septiembre de 2008 a la espera de una intervención quirúrgica (conización) por presentar precáncer de cuello de útero. Se le ha informado que la cirugía se encuentra suspendida por falta de insumos hospitalarios. El día 1º de octubre de 2008, la denunciante informó que ella junto a varios pacientes que se encontraban internados a la espera de cirugía fueron externados, sin ser resueltos sus problemas de salud, debido a que la falta de insumos impedía programar dichas intervenciones. La actuación nº 5788/08 iniciada por la señora L. K., quien manifiesta que se encuentra a la espera de una intervención quirúrgica, la que se encuentra suspendida por falta de insumos. Con fecha 10 de septiembre de 2008 se le indicó a la paciente un reemplazo total de cadera séptico izquierda con carácter de urgencia, estimando como fecha probable de cirugía el día 18 de septiembre de 2008. La señora tramitó por vía extrahospitalaria la provisión de la prótesis necesaria. Al momento de confirmar a los médicos tratantes la disponibilidad de dicha prótesis, se le informó la suspensión de la cirugía por falta de insumos básicos. La actuación nº 5872/08 iniciada por pacientes y familiares de personas internadas en el Servicio de Cirugía, quienes fueron informados por profesionales del servicio y autoridades del hospital que las cirugías se encontraban totalmente suspendidas por tiempo indeterminado a causa de la grave falta de 3 insumos, limitándose a la atención de pacientes de urgencia para los que la ausencia de procedimientos quirúrgicos implique poner en riesgo su vida. La actuación nº 5892/08 iniciada por la señora M. M., quien en representación de su madre manifiesta que la misma es paciente del Servicio de Traumatología y se encuentra a la espera de cirugía desde el día 12 de septiembre de 2008. La paciente, con indicación de reemplazo total de cadera izquierda, se realizó los estudios prequirúrgicos y posee la prótesis necesaria, la que adquirió a través de un crédito personal ante la falta de respuesta del hospital. Se le informa que la realización de la intervención dependerá del aprovisionamiento de insumos básicos que disponga el hospital. II.- Actuaciones relacionadas con el Hospital General de Agudos “Dr. José María Ramos Mejía”: La actuación nº 7833/07 fue iniciada por G. L. que se desempeña en el Hogar San Francisco de Asís (Cáritas) de la calle Guaraní 272, solicitando la provisión de medicación para el señor N. T. de 55 años de edad quien padece Mal de Parkinson y se atiende en el Servicio de Neurología del Hospital General de Agudos “Dr. José María Ramos Mejía”. El día 6 de noviembre de 2007 se solicitó la medicación indicada “Lebocar 250” y “Comtan”. El día 15 de noviembre de 2007 es aprobado el pedido por farmacia pero se informa que ninguna de las dos medicaciones se están entregando por falta de stock. En la Dirección se niega la apertura de trámite para la compra de la medicación por falta de presupuesto y dicen desconocer el plazo estimativo para poder realizar la compra. El día 11 de diciembre de 2007 se realiza gestión telefónica con el doctor Spina quien informa que aproximadamente en 15 días se compraría la medicación. Se tramita que mientras se realiza la compra se le entregue en el Ministerio de Desarrollo Social del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. El día 27 de diciembre de 2007 informa el doctor Spina que la compra de la medicación se retrasó porque no había proveedor, pidió que se le entregara una nueva indicación de la medicación. Se acuerda con la gente de Cáritas que abran expediente en el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación para la provisión de la medicación por las dilaciones experimentadas en el hospital. En el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación le informan que demora tres meses la provisión para un mes y requiere la negativa del hospital. Cabe señalar que el señor requiere la medicación de por vida. En el Hospital General de Agudos “Dr. José María Ramos Mejía” se niegan a entregar la negativa de provisión de medicación para poder tramitarla por otro lugar. Se plantea en la reunión mantenida con el Director del nosocomio el día 30 de mayo de 2008 quien se compromete a analizar todos los casos o en su defecto dar la negativa correspondiente. El día 11 de julio de 2008 se presenta una persona del Hogar San Francisco de Asís para solicitar la negativa en le Dirección del hospital donde le informan que no dan negativas. Se plantea el caso nuevamente en una reunión llevada a cabo el día 20 de julio de 2008 con el Director del hospital quien solicita que se le envíen los casos por fax para dar 4 respuesta a cada uno de ellos. El día 24 de julio de 2008 se le envía a la Dirección un fax resumiendo cada una de las actuaciones relacionadas al Hospital General de Agudos “Dr. José María Ramos Mejía” (fs. 12/13) y el día 2 de agosto de 2008 responden a todos los planteos relacionados con relación a las cirugías retrasadas por falta de insumos pero omiten responder sobre la compra de medicamentos (fs. 15). La actuación nº 8016/07 iniciada por el señor J. D., quien requiere la entrega de la medicación Interferon Inyectable para tratar su problema de salud. Se realizó el correspondiente traslado de la queja a través de un oficio dirigido a la Dirección del hospital. Ante la falta de resolución del problema planteado, en el mes de julio de 2008 se mantuvo una entrevista con el Director del hospital, doctor Héctor Pascuccelli, quien manifestó que las dificultades en la gestión de compra de medicamentos por “Ayuda Médica” se deben a la falta de presupuesto. Las actuaciones nros. 3809/08 y 3866/08 fueron iniciadas con carácter de RESERVADAS por pacientes que se atienden en el Servicio de Inmunocomprometidos del Hospital General de Agudos “Dr. José María Ramos Mejía” quienes refieren que trasladaron a dos profesionales al nivel central sin reemplazarlos con otros profesionales afectando la atención de los pacientes por la falta de turnos y poniendo en riesgo la continuidad de sus tratamientos. La actuación nº 4142/08 fue iniciada de oficio por esta Defensoría del Pueblo, con la finalidad de investigar la falta de insumos. En reunión con el Director del Hospital General de Agudos “Dr. José María Ramos Mejía” se informa sobre la situación del nosocomio, realizándose un informe con los datos e impresiones obtenidos en esa oportunidad. La actuación nº 4558/08 fue iniciada por la señora O. C., quien manifiesta la imposibilidad de realizarse las radiografías que le fueron indicadas en el Hospital General de Agudos “Dr. José María Ramos Mejía”, luego de sufrir una caída, debido a la falta de placas radiográficas. Personal de esta Defensoría del Pueblo se comunicó con la Dirección del hospital en donde informaron que la situación de escasez de insumos es muy grave y que en ese momento faltaban placas radiográficas para los pacientes ambulatorios. Con posterioridad, desde el hospital refirieron que habían recibido algunas placas pero que no se había solucionado el problema de falta de insumos; se le sugirió a la vecina que concurriera. Sin embargo, la paciente luego informó que las placas recibidas estaban siendo utilizadas prioritariamente para la guardia y el Servicio de Pediatría, y que por lo tanto no se le realizó el estudio. 5 Finalmente, la señora concurrió a otro hospital sin ser derivada, donde se resolvió su demanda. La actuación nº 4693/08 fue iniciada por la señora N. R. W., quien solicita la entrega de la medicación que necesita para el tratamiento de su problema de salud. La señora padece panhipopituitarismo por silla turca vacía congénita por lo que presenta insuficiencia gonadal, tiroidea, suprarrenal secundaria y osteoporosis secundaria a su patología de base, y por su cuadro tiene indicado: Hidrocortisona, Levotiroxina, Estradiol, Carbonato de Calcio, Noretisterona (Primolut Nor), Raquiferol BC y Omeprazol. Mensualmente la medicación es tramitada por Ayuda Médica en el Hospital General de Agudos “Dr. José María Ramos Mejía”, sin embargo desde el mes de julio de 2008 que no la está recibiendo, debido a las demoras provocadas por las modificaciones en el sistema de compras de insumos médicos. La paciente recibió en el hospital solamente hidrocortisona y, ante la imposibilidad de entregársele la medicación restante, se la asesoró para que le fuera entregada en el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. Con posterioridad, se le indicó a la paciente un tratamiento con hormona de crecimiento, medicación que el hospital tampoco estaba en condiciones de suministrar, por lo que el trámite para su provisión fue iniciado en el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. Allí se le solicitó que adjuntara una negativa formal firmada por el Director del hospital donde se atiende, sin embargo la misma fue negada. En consecuencia, personal de este organismo se comunicó en reiteradas oportunidades con la Dirección del Hospital General de Agudos “Dr. José María Ramos Mejía” así como con la Dirección General Adjunta de la Región Sanitaria I. Finalmente la negativa fue entregada a un familiar de la denunciante. Con relación a este caso en particular, y siendo habitual que en los hospitales del subsector público de salud de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se rechace otorgar la negativa por escrito -necesaria a los efectos de que se pueda garantizar el tratamiento indicado-, si en el hospital o centro de salud interviniente no es posible entregar el medicamento o brindar el tratamiento indicado, el rechazo conformado resulta una herramienta para que el mismo pueda ser entregado en otro organismo, ya sea local o nacional. La actuación nº 5395/08 fue iniciada por la señora R. G., quien reclama por la falta de entrega de insulina. La denunciante, paciente de 61 años de edad, desde el año 2003 padece DBT2 insulino requirente siendo tratada con insulina glargina de 100 6 Ul/ml (Lantus) por labilidad con NPH. La paciente recibía mensualmente la insulina, gestionada por Ayuda Médica en el hospital, pero a partir del mes de agosto de 2008 las entregas fueron suspendidas. Por lo expuesto, personal del organismo se comunicó telefónicamente con la Dirección del hospital, desde donde se nos informó que las ayudas médicas estaban demoradas. Debido a que la señora estaba en condiciones de ser beneficiaria del Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (PAMI), desde este organismo se la asesoró a fin que cuente con dicha cobertura a la brevedad. La actuación nº 5427/08 fue iniciada por el señor P. A., quien manifiesta excesivas demoras en la tramitación de la prótesis que necesita para ser sometido a una cirugía, a consecuencia de haber sufrido un accidente. El paciente presenta fractura de húmero y requiere para la cirugía clavo endomedular acerrojado a proximal y distal para fractura de húmero izquierdo y set de colocación e instrumental a préstamo. Dicha solicitud de insumos fue iniciada hace más de tres semanas por el doctor Miller con carácter de urgente y a la fecha no ha tenido resolución. Atento lo expuesto se solicitó la intervención de la Dirección del Hospital General de Agudos “Dr. José María Ramos Mejía” y de la Dirección General Adjunta de la Región Sanitaria I por vía telefónica y mediante el envío de oficios, sin que a la fecha esta Defensoría del Pueblo haya recibido respuesta alguna. La actuación nº 5691/08 iniciada por el señor S. A., quien solicita la provisión de la prótesis indicada al señor M. S., para ser intervenido quirúrgicamente del brazo. Dicha cirugía debería realizarse a la brevedad, ya que el paciente está perdiendo movilidad en su brazo. El trámite para la compra del material fue iniciado en el hospital con carácter de urgente. En el hospital se les informa que carecen de insumos por lo que la operación no tiene fecha estimada prevista. La actuación nº 5984/08 iniciada por la señora D. R. quien informa que su hijo, de 21 años de edad se fracturó el tobillo en un accidente hace más de tres meses, motivo por el cual se le indica una prótesis para cirugía. Desde ese momento se solicita la prótesis en la Dirección del hospital pero hasta la fecha no hay novedades. Por otra parte el paciente está enyesado y cada 15 días debe renovarlo; como el hospital no tiene vendas le piden que lleve las vendas que en total son 3 ó 4 cuyo valor aproximado es de $20.- cada una, haciendo un gran esfuerzo para juntar ese dinero. Cabe mencionar que el paciente está cursando la secundaria y por la demora de la intervención probablemente pierda el año lectivo. Se remitieron oficios a la Dirección del hospital y a la Dirección General Adjunta de la Región Sanitaria I. Los reclamos expresados a través de gran parte de las actuaciones detalladas precedentemente, motivaron que personal de este organismo mantuviera una reunión con el Director del 7 Hospital General de Agudos “Dr. José María Ramos Mejía”, doctor Héctor Pascuccelli, el día 22 de julio de 2008. En la misma se plantearon los siguientes temas: falta de insumos básicos, la problemática del Servicio de Infectología, trámites de compra por Ayuda Médica sin resolución y entrega de negativas para el uso de recursos alternativos. Con relación a la falta de insumos, el doctor Héctor Pascuccelli informó que se han visto suspendidas cirugías de distinto tipo por la falta de insumos como suturas, cánulas, etc. También es una constante la falta de prótesis o el rechazo a comprarlas por falta de fondos en el hospital para este tipo de adquisición. El Director del hospital comentó que después de muchas marchas y contramarchas se habrían dejado sólo 800 insumos para compras centralizadas que se proveerían a través de canastas que va distribuyendo el Ministerio de Salud del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires en los distintos hospitales o la compra directa de insumos faltantes, por lo tanto hasta que se normalice la situación en compras y se manejen los distintos recursos habrá faltantes temporarios de algunos insumos. Por otra parte, las autoridades del hospital solicitaron precisiones acerca de las negativas que debían otorgar para el caso de las ayudas médicas sin resolver y falta de medicación de vademécum. También se abordó el tema del Servicio de Infectología, el que se vio vaciado de profesionales, sin la correspondiente designación de reemplazos. Los cargos fueron solicitados, pero a la fecha no se han formalizado las designaciones pendientes. Asimismo, el Director del nosocomio refirió que existen seis quirófanos en funcionamiento y un séptimo sólo tiene problemas de aire acondicionado, no generando problemas para la concreción de cirugías. Por último, quedaron planteadas las vías de gestión directa de algunas de las actuaciones generales que tramita el Area de Derecho a la Salud e Integración Social de esta Defensoría del Pueblo relacionadas con el Hospital General de Agudos “Dr. José María Ramos Mejía” y otra parte será enviada vía fax para que sea informada por personal del hospital caso por caso. Por todo lo hasta aquí reseñado puede inferirse que la falta de respuesta oportuna del sistema de salud frente a los requerimientos de atención de la población que recurre a los hospitales públicos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, resultó una constante a partir del mes de abril de 2008. Esta situación, lejos de resolverse, se fue complejizando en el transcurso del año, llegando al mes de septiembre de 2008 con cirugías programadas suspendidas por falta de insumos básicos y de complejidad, pacientes con tratamientos farmacológicos interrumpidos por falta de medicamentos, falta de insumos básicos como alcohol, gasas, guantes, etc. en las 8 guardias de los hospitales, aparatología rota sin reposición ni mantenimiento, bastando como ejemplo la disponibilidad de sólo dos tomógrafos para todo el sistema, además de los inconvenientes derivados de la insuficiente dotación de personal tanto profesional como técnico y administrativo. No se puede admitir que quien sufre una dolencia, con la carga de dolor y angustia que ello conlleva en muchos casos, deba soportar el peso de trámites burocráticos, idas y venidas constantes, interminables esperas -muchas veces inútiles- para lograr la efectiva atención de su salud. El acabado cumplimiento de las obligaciones propias de los funcionarios públicos, personal administrativo y profesional del hospital, la contención y la atención eficiente y humanista resultan también requisitos que en toda institución de acceso al público deben reunirse, más aún tratándose de un establecimiento de salud. Lo expuesto no resultan exigencias desmedidas, caprichosas o fuera de la realidad. Todo lo contrario, son imperativos éticos y legales con base en el derecho positivo local, nacional y supranacional. Sin embargo, las gestiones telefónicas realizadas desde este organismo ante la Dirección General Adjunta de la Región Sanitaria I, con el objeto de solicitar la intervención de su titular, doctor Néstor Pérez Baliño, resultaron ineficaces a la hora de evaluar la resolución de los casos planteados. Los interlocutores, quienes se presentaron como asesores del Director General Adjunto, se limitaban a informar respecto de la evolución de trámites administrativos hasta el momento en que los mismos salían de esa Dirección General Adjunta. Finalmente en el mes de septiembre de 2008, el licenciado Roa informó que el desabastecimiento de insumos se debía a que el presupuesto se había agotado. Ninguno de los casos presentados, que hasta el momento no obtuvieron una resolución favorable en el efector al que pertenecen fueron derivados a otro hospital, lo cual evidencia no sólo que las dificultades alcanzan -si no a todos- a la mayoría de los hospitales, sino que además expone la inacción del nivel central, así como las deficiencias del sistema para trabajar en red. Se observa con preocupación, que incluso en casos de gravedad con indicaciones médicas con carácter de urgente se postergan intervenciones, con el consiguiente deterioro en la salud de los pacientes, debido a las excesivas demoras en trámites administrativo-financieros, los que resultan prioritarios por sobre los criterios médicos. De lo expuesto, se advierte una burocracia excesiva, demoras inaceptables, anomalías en cuanto a la falta de 9 contestación a este organismo, en síntesis, una situación de desidia que se trasunta en desprotección para los pacientes que requieren del urgente servicio del hospital público. Los pacientes permanecen meses aguardando la concreción de una intervención quirúrgica necesaria para el reestablecimiento de su salud, y las autoridades responsables no contestan los requerimientos de esta Defensoría del Pueblo, en abierta violación a las Leyes nros. 3 y 104 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Se debe señalar, por otra parte, que los presentes casos enmarcan un conflicto vinculado claramente con el derecho a la salud, garantizado por la Constitución Nacional y los pactos internacionales de derechos humanos contenidos en ella. Cabe dejar sentado que actualmente la salud es considerada, sin ningún margen de duda, como un derecho humano básico inherente a toda persona. Se entiende por salud, según los organismos especializados en la materia, “un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones y enfermedades”. Bajo tal concepción, el derecho a la salud integral de las personas ha sido generosamente reconocido en todos los instrumentos internacionales de derechos humanos, como un derecho ligado a la vida y a la integridad física. Al respecto, la primera norma internacional que consagra expresamente el derecho a la salud es la Constitución de la Organización Mundial de la Salud, sancionada en 1946, que refiere como uno de los derechos fundamentales “El disfrute del más alto nivel posible de salud...”1. Por otra parte, la Declaración Universal de Derechos Humanos, en su art. 25º establece que “1. Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure... la salud y el bienestar, y en especial la alimentación, el vestido, la vivienda, la asistencia médica...”. Así también, el art. 12º del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales establece que los Estados Partes “...reconocen el derecho de toda persona al disfrute del más alto nivel posible de salud física y mental. 2. Entre las medidas que deberán adoptar los Estados Partes en el Pacto a fin de asegurar la plena efectividad de este derecho, figurarán las necesarias para: ... d) La creación de condiciones que aseguren a todos asistencia médica y servicios médicos en caso de enfermedad”. Resta destacar que el “Pacto” posee jerarquía constitucional conforme lo dispone el art. 75º inc. 22º de la Constitución Nacional. Asimismo, el Protocolo Adicional a la Convención Americana sobre Derechos Humanos en materia de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, denominado “Protocolo de San Salvador”, firmado por la República Argentina, establece en su art. 10º inc. 1º el derecho a la salud, en los siguientes términos: “Toda persona tiene derecho a la salud, entendida como el disfrute del más 1 Constitución de la O.M.S. 10 alto nivel de bienestar físico, mental y social”. En el art. 10º inc. 2º señala “Con el fin de hacer efectivo el derecho a la salud los Estados partes se comprometen a reconocer la salud como un bien público y particularmente a adoptar las siguientes medidas para garantizar este derecho: a) la atención primaria de la salud, entendiendo como tal la de asistencia sanitaria esencial puesta al alcance de todos los individuos y familiares de la comunidad; b) la extensión de los beneficios de los servicios de salud a todos los individuos sujetos a la jurisdicción del Estado; c) la total inmunización contra las principales enfermedades infecciosas; d) la prevención y el tratamiento de las enfermedades endémicas...”. El derecho a la vida y a la integridad física de la persona se consagra en el art. 3º de la Declaración Universal de Derechos Humanos, en el art. 6º inc. 1º del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, en el art. I de la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre y en los arts. 4º y 5º de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. En el ámbito americano la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre, en su art. XI proclama que “Toda persona tiene derecho a que su salud sea preservada por medidas sanitarias y sociales, relativas a la alimentación, el vestido, la vivienda y la asistencia médica, correspondientes al nivel que permitan los recursos públicos y los de la comunidad”. Así, tres aspectos del derecho a la salud se han plasmado en los instrumentos internacionales de derechos humanos: “La declaración del derecho a la salud en cuanto derecho básico; la sanción de normas con miras a subvenir las necesidades de salud de grupos de personas concretos y la prescripción de vías y medios para dar efecto al derecho a la salud”2. El concepto de salud en tanto derecho humano pone el énfasis en los aspectos sociales y éticos de la atención de salud del Estado y revela que su negación, al igual que a la de cualquier otro derecho se puede impugnar legítimamente. Cabe agregar que el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, la Convención Americana sobre Derechos Humanos, la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre y la Declaración Universal de Derechos Humanos, poseen desde la reforma constitucional operada en el año 1994 jerarquía constitucional por imperio del art. 75º inc. 22º de la Carta Magna. Ello significa que comparte con la Constitución su supremacía y que, por lo tanto, se sitúa en el vértice de nuestro ordenamiento jurídico. Ello implica, asimismo, que leyes, decretos y reglamentos del Poder Ejecutivo, resoluciones administrativas, actos 2 Theo Van Boven “The right to health as a Human Right”, Workshop, 1979; p. 54-55. 11 administrativos de alcance individuales y sentencias deben aplicarlas en un doble sentido, no sólo no contradiciéndolas con las normas de las Convenciones sino también en un sentido positivo, adecuándose a lo prescripto por el tratado de modo que el tratado se desarrolle a través de esos dispositivos. En este sentido, se ha señalado que “...a los tratados internacionales -mucho más cuando, como es el caso del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, tienen jerarquía constitucional- hay que adjudicarles lo que se da en denominar “fuerza normativa”...” (Bidart Campos, ob. cit.). Es decir, normas jurídicas con aplicabilidad directa. La Constitución de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires que regula el derecho a la salud, garantiza en su art. 20º “...el derecho a la salud integral que está directamente vinculada con la satisfacción de necesidades de alimentación, vivienda, trabajo, educación, vestido, cultura y ambiente...”. Dice a continuación que “...El gasto público en salud es una inversión social prioritaria. Se aseguran a través del área estatal de salud, las acciones colectivas e individuales de promoción, protección, prevención, atención y rehabilitación, gratuitas, con criterio de accesibilidad, equidad, integralidad, solidaridad, universalidad y oportunidad...”. Por otra parte, la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires sancionó el día 16 de febrero de 1999, la Ley Básica de Salud de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Ley nº 153, en concordancia con los principios establecidos por la Constitución de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (art. 21º C.C.A.B.A.). Así, el art. 1º de la Ley nº 153 señala: “Objeto. La presente ley tiene por objeto garantizar el derecho a la salud integral, mediante la regulación y ordenamiento de todas las acciones conducentes a tal fin”. La Ley nº 3 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, de creación de esta Defensoría del Pueblo, dispone en el art. 2º: “Es misión de la Defensoría la defensa, protección y promoción de los derechos humanos y demás derechos y garantías e intereses individuales, colectivos y difusos tutelados en la Constitución Nacional, la Constitución de la Ciudad y las leyes, frente a los actos, hechos u omisiones de la administración, de prestadores de servicios públicos y de las fuerzas que ejerzan funciones de policía de seguridad local...”, y lo establecido en el art. 137º de la Constitución de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, al disponerse que “...Es su misión la defensa, protección y promoción de los derechos humanos y demás derechos e intereses individuales, colectivos y difusos tutelados en la Constitución Nacional, las leyes y esta Constitución, frente a los actos, hechos u omisiones de la administración o de prestadores de servicios públicos...”. Y finalmente en los arts. 32º y 33º de la Ley nº 3: “Todos los organismos, los entes y sus agentes contemplados en el artículo 2, y los particulares, están obligados a prestar colaboración, con carácter preferente, a la Defensoría del Pueblo en sus 12 investigaciones e inspecciones...” y “El incumplimiento de lo prescrito en el artículo anterior por parte de un empleado o funcionario público, es causal de mal desempeño y falta grave, quedando habilitado el Defensor o Defensora del Pueblo para propiciar la sanción administrativa pertinente, sin perjuicio de las acciones penales que puedan corresponder”, respectivamente. Atento lo expuesto, corresponde emitir un firme pronunciamiento sobre el particular. POR TODO ELLO: LA DEFENSORIA DEL PUEBLO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES RESUELVE: 1) Recomendar a los señores Directores de los Hospitales Generales de Agudos “Dr. Cosme Argerich” y “Dr. José María Ramos Mejía”: a) garantizar la atención médica oportuna, adecuada y respetuosa a todos las personas que concurren al hospital requiriendo asistencia; b) garantizar a todos los pacientes el acceso al tratamiento indicado, ya sea a través de la provisión de insumos prescriptos así como sin grandes demoras en los turnos quirúrgicos y de consultorios externos; c) se dé respuesta a los oficios remitidos por esta Defensoría del Pueblo conforme lo dispuesto por los arts. 31º, 32º y 33º de la Ley nº 3. 2) Recomendar al señor Director General Adjunto de la Región Sanitaria I, doctor Néstor Pérez Baliño, su intervención a los efectos de: a) garantizar el cumplimiento de lo precedentemente expuesto; b) resolver la problemática de las demoras en las cirugías y de falta de insumos; c) se dé respuesta a los oficios remitidos por esta Defensoría del Pueblo conforme lo dispuesto por los arts. 31º, 32º y 33º de la Ley nº 3; d) se dé cumplimiento a las recomendaciones detalladas en la Resolución nº 3095/08 de esta Defensoría del Pueblo. 13 3) Poner en conocimiento de la presente Resolución a la señora Directora General de Servicios de Salud, doctora María Angela Toscano y al señor Ministro de Salud del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, doctor Jorge Daniel Lemus, con el propósito de hacer efectivo el cumplimiento de lo antes expuesto. 4) Comunicar la presente Resolución al señor Jefe de Gabinete de Ministros del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, licenciado Horacio Antonio Rodríguez Larreta. 5) Comunicar la presente, en todos los casos, con copia fiel de la Resolución nº 3095/08. 6) Fijar en 10 días el plazo previsto en el art. 36º de la Ley nº 3 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.3 7) Notificar con copia de la Resolución nº 3095/08, reservar en el Area para su seguimiento, registrar, y oportunamente, archivar. Código 443 ang./aa./SAL/Nic. gv/D/LDS RESOLUCION Nº 4236/08 3 Ley nº 3, art. 36º: Con motivo de sus investigaciones, el Defensor o Defensora del Pueblo puede formular advertencias, recomendaciones, recordatorios de los deberes de los funcionarios, y propuestas para la adopción de nuevas medidas. Las recomendaciones no son vinculantes, pero si dentro del plazo fijado la autoridad administrativa afectada no produce una medida adecuada, o no informa de las razones que estime para no adoptarla, el Defensor o Defensora del Pueblo puede poner en conocimiento del ministro o secretario del área, o de la máxima autoridad de la entidad involucrada, los antecedentes del asunto y las recomendaciones propuestas. Si tampoco así obtiene una justificación adecuada, debe incluir tal asunto en su informe anual o especial a la Legislatura, con mención de los nombres de las autoridades o funcionarios que hayan adoptado tal actitud. 14