dame tu gracia, señor

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DAME TU GRACIA, SEÑOR
Orar con eficacia
Padre Felipe Santos
Campaña SDB
“En verdad, en verdad os
digo: el que cree en mi
hará también las obras que
yo hago, y más grandes,
porque me voy al
Padre”(Juan 14,12)
Esta declaración de Jesús
desconcierta. Interpela, hasta
molesta. Te obliga a examinar
tus obras, a que te revises.
Te prohíbe el inmovilismo y
anima a progresar con el fin
de llegar a ser semejante a él
en las obras que ha hecho.
Examina por ejemplo tu vida
de oración a la luz de la de
Jesús.
Marta, la hermana de Lázaro
hace una declaración
significativa: su hermano
había muerto desde hacía 4
días y reprocha a Jesús su
ausencia: "Si hubieras estado
aquí, mi hermano no hubiera
muerto". Sin embargo añade:
"Pero ahora sé que lo que
pidas al Padre, te lo
concederá." (Juan 11,22).
¡Amigos míos! ¡Qué
declaración! " Sé que todo lo
que pidas a Dios, te lo
concederá."
¿Qué hay de ti? Tus vecinos
vienen a interpelarte diciendo
: "rezad por mí pues sé que
todo lo que pidáis a Dios os lo
concederá."
No te contentes con una vida
de oración en la que nada
pasa. No te refugies detrás de
la soberanía de Dios para
excusar tu ineficacia en la
oración.
Reconoce que estás habituado
a rezar sin grandes resultados.
Es como si cada mañana
entraras en tu coche sabiendo
que no arrancará y debes ir a
pie. ¿Lo harías la segunda vez
o continuamente? Non. ¿Por
qué?
Porque es evidente que el
coche no cumple su función.
Está averiado.
¿Qué haces en ese caso?
Buscas la causa de la avería y
la reparas.
¿Cuántos están en avería al
nivel de la oración? Nada pasa
y sin embargo no se cuestión.
Se continúa, se persevera. La
perseverancia es una virtud
pero en ciertos casos, equivale
a cabezonería, testarudez que
excluye todo cuestión.
Desde hoy, tú que estás
averiado en la oración, busca
en Dios la solución como lo
haces en el garaje con tu
coche. La línea entre tú y el
cielo se restablecerá, tus
oraciones escuchadas y tu
vida revolucionada.
UNA ORACIÓN PARA HOY
Señor, concédeme la gracia de
hacer las obras que has hecho
en mi vida de oración.
Señor, nos has dado
Señor, nos has dado una morada, una ciudad que
construir con las personas con las que vivo.
Ábrenos los ojos a los demás, haznos humildes para
ayudar y consolar, para que un poco de tu amor se
transparente en esta ciudad por ti, amado Señor.
Señor, enséñame a escuchar
Cuando los ruidos de lo ordinario invadan mis oídos y
tenga dificultad en hacerte un sitio en mi vida, enséñame ,
Señor a escucharte.
Cuando alguien venga a verme con sus problemas e
inquietudes, haz que reaccione sin egoísmos siguiendo tu
llamada.
Señor, enséñame a escucharte
Cuando yo mismo me pierda en palabras y en frases ya
hechas que no me hacen vivir,
Señor, enséñame a escucharte.
Dame un corazón abierto a tu Palabra, a tu presencia,
oídos atentos a tus llamadas ojos vivos a tus signos.
ESTA ES MI ORACIÓN, SEÑOR
Esta es mi oración, Señor, golpea la raíz de mis defectos
que hay en mi corazón.
Dame la fuerza de llevar ligeramente alegrías y tristezas.
Dame la fuerza para hacer mi amor fecundo.
Dame la fuerza para atender al pobre, no inclinar mis
rodillas ante la fuerza insolente.
Dame la fuerza para elevar mi espíritu por encima de
futilidades diarias.
Y dame la fuerza de someterla a tu voluntad, con amor.
Concédeme, Señor
la sabiduría de los cielos, para que pueda aprender, por
encima de todo, a buscarte y encontrarte; por encima de
todo agradarte, amarte y pensar en todas las demás cosas
como reflejo de tu Sabiduría.
Thomas a Kempis
Oración universal
Dios bueno, Dios justo, Dios todopoderoso, Conciencia
del universo, te doy gracias por lo que me has dado hasta
ahora. Te suplico que me concedas nuevas que respondan
a mis necesidades de evolucionar en tu perfección.
En el nombre del Hijo Jesús, nuestro Maestro y Modelo, te
pido sobre todo, Señor, el favor de mejorarme en todo y
para todo.
Hazme comprender, oh Padre, tu ley divina, ayúdame a
ver la admirable lección de la Vida todas las enseñanzas
que comporta.
Dirígeme y mantenme en la vía del progreso eterno.
Dame el amor ardiente de la Verdad y del Trabajo. Deja
que descienda a mi alma una parcela de tu soberana
bondad y de tu admirable indulgencia, para que lleve a
cabo con mis semejantes el dulce mandamiento de Jesús:
Amaos los unos a los otros
Cura mi espíritu y mi cuerpo de los males que sufren.
Aleja de ellos las influencias nefastas, hazlos permeables
a las corrientes que emanan de tu infinita Providencia y a
la influencia bienhechoras, Entidades que nos asisten en
tu Nombre.
Amén
Jules Sperber
Para que Dios venga pronto en nuestro auxilio
Dios de todas las virtudes, oh Tú que eres mi Señor y Rey,
no me abandones, no te apartes de mi cuando necesite de
tu auxilio. Te suplico que te apresures en socorrerme.
Eres mi protector y apoyo seguro. que tu poderosa
intervención no tarde. Sólo tú eres grande, sólo tú el autor
de las maravillas que me rodean, tú solo eres Dios.
Dígnate darme tu apoyo, sé mi Salvador. Pero sé, Señor,
que mi oración ardiente será escuchada pronto puesto que
has escuchado mi voz que invoca tu nombre.
Jules Sperber
PARA UN BUEN EXAMEN DE CONCIENCIA.
Dios, autor de toda luz, conoces las cosas de mi corazón
y mis pecados están escritos ante ti
Ilumíname para que las conozca también y pueda ser
severo en mi conducta pasada.
Quiero penetrar en lo más profundo de mi interior, y no
omitir ninguna de mis faltas, para deplorarlas todas sin
excepción, con todo el dolor del que soy capaz.
Dame tu gracia como guía en el juicio de mí mismo. Y que
tu Espíritu Santo, cuya asistencia me has prometido por
boca de tu Hijo, desciende sobre mí y extienda tu claridad
en mi alma para que conozca la cantidad y la gravedad de
las ofensas que he cometido de pensamiento, palabra y
acción contigo, mi prójimo y yo mismo.
Eckartshausen
LA ETERNIDAD SE ESCRIBE DIARIAMENTE.
Señor, día tras día, instante tras instante, acción tras
acción, escribo para la eternidad la novela de mi vida.
Dame vivir al máximo cada instante en plenitud.
Este instante que me ofreces nunca se me dará. Haz que
no lo viva con angustia y estrés y que no pierda ningún
momento de mi vida.
Cada instante es una gota con tu unción. No vivo para
ayer ni para mañana. Vivo este instante.
Pero cada momento escribe mi eternidad.
André Sève
DELANTE DE TI, SEÑOR
Estar ante ti, Señor, es todo, cierra los ojos de mi cuerpo,
cierra mi alma, y quédate inmóvil, silencioso, exponerme
a ti que estás delante de mi
Estar presente ante ti, Infinito presente.
Acepto no sentir nada, Señor, no ver nada, no entender
nada, vacío de toda idea, imagen, en la noche, heme aquí
para hallarte sin dificultad.
En el silencio de la fe, ante ti, Señor.
Pero Señor, no estoy solo pues los hombres me habitan.
Los he encontrado.
Michel Quoist
OH ADMIRABLE SABIDURÍA
Oh admirable sabiduría, que abrazas toda la eternidad,
que recibes en ti la inmensidad y atraes a ti todo lo
infinito, fuente inagotable de la luz, extiende algunos
rayos en mi alma para que pueda amar cada vez más
todo lo que sirva para tu honor y tu gloria.
Blaise Palma
DIOS ES PODEROSO
Concédeme la gracia de serte fiel en la acción y que no
me preocupe del éxito.
Mi única preocupación es hacer tu voluntad, perderme en
ti cuando esté comprometido en mi deber. Da a mis
esfuerzos débiles tales frutos que los veas apropiados, si
ese es tu deseo.
Fénélon
DIOS MÍO
Oh Dios mío, que nunca me incline para escuchar el grito
de los animales, el ruido del follaje de los árboles, el
murmullo del agua, la salmodia de los pájaros, jamás me
incline a la invitación amorosa de la sombra, al silbido
del viento o del terremoto, sin que ellos den testimonio de
tu unicidad.
¡SALVE, OH ESPLENDOR INEFABLE!
oh luz sin parecido,
oh esplendor infinito
te ofrecemos todo lo que somos y tenemos.
En cambio, concédenos renacer en ti. ¡Salve, oh esplendor
inefable!
De todo corazón y confianza, nos prosternamos ante ti.
Bouddhisme chinois
ME DESPERTARÉ EN LA LUZ
Oh, Dios mío
Si te amo, nada me cuesta. Si te poseo, nada me falta.
Si estás conmigo, no estoy en soledad.
Si no me separo de ti, no estoy en el exilio.
Si no me rechazas de mi tu rostro, no me faltará la
esperanza.
Sino separas de mi tu Espíritu, siempre amaré.
Si inclinas tu rostro, no conoceré la angustia.
Si me alimentas de tu carne, no conoceré la muerte.
Si te revelas a mi, me despertaré en la luz.
Si tu mano toca mi alma, gozaré de la vida eterna.
Ch.Daniélou
PRESÉRVAME, SEÑOR
De los que hablan mucho, pero no hacen nada,
De los que emprenden mucho y no terminan nada,
De los que prometen siempre, y no perseveran nunca,
De los que no hacen nada, pero critican sin cesar...
De los que sólo piensan en recibir y nunca en dar,
De los que sólo saben pedir y nunca dan las gracias,
De los que no se equivocan nunca, o al menos no lo
reconocen.
Amén.
SI PUEDO
Si puedo hacer hoy algún bien,
Si puedo servir a lo largo de mi vida,
Si puedo decir algo útil,
Señor, muéstrame cómo.
Si puedo enderezar una injusticia humana,
Si puedo ayudar a alguien a hacerse fuerte,
Si puedo reconfortar con una sonrisa o un canto,
Señor, muéstrame cómo.
Si puedo ayudar a alguien en la angustia,
Si puedo hacer un fardo pesado menos pesado,
Si puedo extender más la felicidad,
Señor, muéstrame cómo.
Si puedo hacer un acto de acogida,
Si puedo ayudar a alguien en su necesidad,
Si puedo sembrar un grano útil,
Señor, muéstrame cómo.
Si puedo alimentar un corazón hambriento,
Si puedo cumplir un papel más noble,
Señor, muéstrame cómo.
Grenville Kleiser
UN CORAZÓN QUE NO SABOREA LAS TRISTEZAS
Santa María, Madre de Dios, mira mi corazón de niño,
puro y transparente como una fuente.
Obtenme un corazón sencillo que no saboree las tristezas,
un corazón magnífico en darse, tierno en la compasión, un
corazón fiel y generoso que no olvide ningún bien y no
tenga rencor.
Haz de mi un corazón dulce y humilde, gustoso en dar
gratis, gozoso en llevar a tu Hijo otros corazones
destrozados y llenos de ingratitud, indiferentes y cansados
y que sólo vean la gloria de Jesucristo, herido y muerto
por nuestra salvación.
L.de Grandmaison
OH DIOS
Oh Dios, ¿dónde he errado en buscarte? Oh infinita
Belleza, te buscaba fuera de mi corazón y tú estabas
dentro.
San Agustín
ORACIÓN A LA VIRGEN MARÍA
Oh María, Oh Santa y buena Madre, dame y da a todos
comprender el gran valor del silencio en el que se escucha
a Dios.
Enséñame a callarme para escuchar la Sabiduría eterna,
enséñame a sacar del silencio lo que tiene de grandeza, de
sobrenatural y divino.
Ayúdame a hacer una oración perfecta, vibrante, viva y
capaz de glorificar a Dios y salvar a las almas.
Mi vida valdrá lo que valga mi oración.
Marthe Robin
CUANDO YA NO PUEDO
Al filo de los días, la fatiga se acumula y se añade al peso
de todo lo que he querido dejar detrás de mí llevándolos.
Cuestiones en suspenso, problemas, conflictos no
resueltos. Hoy, me siento desilusionado, la ruta es
demasiado larga para mí.
Sin embargo quiero continuar, ir hasta el fin. Ir hasta el
final, que me acerque un poco a ti, Señor.
Entonces, en la monotonía y el silencio del camino, dame ,
si te place, un corazón apacible y vigilante. Permíteme
también acoger las buenas y las menos buenas sorpresas
de la ruta.
Ayúdame en fin a discernir tu voluntad, para que este
tiempo de marcha te lo ofrezca sinceramente.
Maja Siemek
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