129 CAPITULO XLI V. DE COMO COMENZARON EN SEVILLA A PRENOER I QUEMAR Y RECONCILIAR LOS HEREGES JUDAICOS, E DE LA (IRAN PESTILENCIA DEL ANO DE OCHENTA Y UNO. Habida la Bulla para la Inquisicion por sus Altezas del Papa Sixto concedida, estando por Asistente de Sevilla Diego de Merlo, que era un hon- Primeros Enquisidores rado christianIsimo caballero, muy discreto y ccan Sevilla. loso de la fe de Jesuchrtsto y de la justicia, vinie- alCome!lzaron priricipio ron los prirneros Inquisidores a- Sevilla dos frailes del año de 1481suofido Santo Domingo, un provincial e un vicario, ci co. uno liarnado fray Miguel, y ci mm fray Juan; e con ellos ci Dr. do Medina, clerigo de San Pedro, los cuales todos lies asI como uno, con gran diligencia comenzaron su Inquisicion en comienzo del aiio de niii cuatrocientos ochenta y uno. En muy pocos dias por diversos modos y rnaneras, supieron toda Empiezani la verdad de la heretica pravedad malvada, e comenzaron de prender hombres é mugeres de los blo de Sevilla, mas culpados, é rnetianlos en San Pablo; e pren- çde asisdieron luego aigunos de Jos rnás honrados e de los rnás ricos, veinticuatros y Jurados, e bachilleres Prenden die letrados é hombres de mucho favor; a estos pren- sonas, y puestos y Calidades, y dia el Asistente; é des que esto vieron fuyeron de quidn los Sevilla muchos hombres y mugeres; y viendo que prendia, con Jo cual muera menester dernandaron los Inquisidores ci Gas- chos huyeron. tillo de 1 nan; donde se pasaron, é pasaron los ToMo 1. 9 13o Piden ci presos' e alit ficieron su Audiencia; é tenian sn castillo de Triana, y alli Fiscal ) é Alguacil é Escribanos, e cuanto era ne forman Audiencia pala cesario, é facian proceso segun la culpa de cada las cansas. uno, é ilarnaban Letrados de la cuidad seglares, 6 a el Provisor al ver de los procesos e ordenar do las sentencias, porque viesen corno se hacia la justicia, 6 no otra cosa; 6 comenzaron de sentenciar para quemar en fuego; a sacaron a quernar la pri vez a Tablada seis hombres a mugeres quo Los primequemaron; 6 predicO Fr. Alonso de S. Pablo, celomaronso de la le de Jesuchristo ci que mas procuro en Sevilla esta Inquisicion; ê 61 no vido mas de esta Predica Fr. quema, que luego deride a pocos dias muriO de AIOflSO de . O1cda, y de pestilencia quo estonce en la ciudad comenzaha de 1iereeri andar. Y dende a pocos dias quemaron tres de los villa de pespnncipaies de Ia ciudad y ue los mas ricos, los cuatiienCia Qucm i-i .. les eran Diego de Susan, quo decian quo vain lo otosyqu.tn SU) o diez cuentos; y eran grail raW, y seguri pare66 muriO corno christiano; 6 ci otro era Manuel SaulI, 6 el otro Bartholomé de Torralba; 6 prendieron a Pedro Fernandez \T enedeva, que era niayordomo do la Iglesia, do los seflores Dean y Cahildo, que era de los was principales do ellos, 6 tonn en su casa arnias para armar den hombres; y a Juan Fernandez Albolasia, que habia sido muchos tiempos Aicalde do la Justicia, 6 era gran Letrado, 6 a otros muchos, 6 fllUy principales, 6 niuy ricos, A los cuales tambien quemaron, 6 nunca les valieron los favores, ni ]as riquezas; 6 con esto todos los confesos fueron muy espantados a habian muy gran miedo, 6 fuian do la ciudad a del Arzobispado; 6 pusieroriles en Sevilla pena pie no fuyesen so 13 pena de muerte, é pusieron guardas a las puertas daa de la ciudad; é prendieron tantos que no habiaSeJIY;nAC donde los tuviesen; C rnuchos huyeron a las tierras zobispado. de Los señores, C a Portugal, C a tierra de moros Este año de 1481, no fue propicio a natura humana en esta Andalucia, mas rnuy contrario C de gran cia. pestilencia C muy general, que en todas las ciudades villas, y lugares de esta Andalucia, murieron en dernasiada manera, que en Sevilla murieron mas Murieronen mas de quince mil personas; C otras tantas en COrdoba, 5,000 C en Xerez, C en Ezija mas de cada ocho 6 nueve rail personas, y ansi en todas las otras villas é lugares; C despues en ci Agosto alzose la pestilencia, y con todo eso por mas de ocho altos durO, que p0-. co O mucho acudia ora en una paNe, ora en otra do esta Andalucia, y el ao de 1488 murieron en COrdoba otra vez, gencralmente decian, que aun mas cantidad del alto de ochenta y uno ya dicho. Asj que tornando al propOsito, la Inquisicion comenzada en ci dicho aTh de ochenta y uno, como vieron que so encendia la pestilencia y huyan los christianos viejos Por causa delapestilende Sevilla, demandaron licencia al Asistente los con- cia los confeSOS piden Iifesos para se ir fuera de Sevilla por guarecer de Ia cencia para pestilencta, ci cual so la diO, con condicion que Ile- salir de Sevilla a! Asisvasen cCdulas para las guardas do las puertas, C quo tente y se la a. no Ilevasen las haciendas, salvo cosas livianas de que se sirviesen; y de esta manera salieron muchas gerites de la Ciudad de cllos, expecialmente de la tierra del Marques do Cadiz que era su enemigo desde las guerras del Duque. Vinieron mas de ocho mil almas a Mairena, y Marchena, y los Palacios, C Los mandO acoger 6 facer mucha honra, 6 a la tierra 132 Recojinseen del Duque de Medina é de otros Señores ansI por di erentes lu- semejante; y de estos fueron muchos a parar a gares, ymuchos se van tierra de Moros allende, e aquende, a ser Judios fuera del Reino como lo eran; é otros se fueron a Portugal, e otros a Roma; é muchos se tornaron a Sevilla a los PaRec6jense dres Inquisidores, diciendo e manifestando sus pe'en diferentes cados, é su heregla é demandando misericordia; a mucrorses,Yue UC los padres los recibierori, é se libraron bien é rese reconciliaron fucron conciliaronlos, ê hicieron pciblicas penitencias cierpenitenciados y en qué for- tos viérnes dicipiinandose por las calles de Sevilla en ma. procesion. E en aquel año de ochenta y uno desque los Inquisidores vieron que crecian las pestifencias en Sevilla, fueronse huyendo a Aracena, donde fallaAnVanse a cena los In- ron que hacer e prendieron e quemaron veinte y quisidores tres personas hombres y rnujeres, herejes mal anla Pest)For lencia, yQue- dames, e ficieron quernar muchos guesos de algumaion 23 y muchos hue- nos que fallaron clue habian rnorido en la heretica SOS de confesos. Mosaica, llamándose christianos, y eran judios, y ansI como judios habian morido. Y aquel año desque cesó la pestilencia volviéronse los Inquisidores I Sevilla e prosiguieron su Inquisicion fasta todo ci Vuelven j ai5o de ochenta y ocho que fueron ocho afios, queSevilla tuego que cesa 'ia maron mas de setecientas personas, y reconciliaron pestilencia. mas de cinco mll y echaron en cárceles perpétuas, que ovo tales y estuvieron en ellas cuatro O cinco Hastaelaño ailos O mas y sacaronles y echáronles cruces 6 unos de 1488 quemaron 700 San Benitillos colorados atrás, y adelante, y ansi anpersonas y duvieron mucho tiempo, 6 despues se los quitaron reconciliaron 5,000 Y Pu- por que no creciese el disfame en la tierra viendo sieron San Benito. aquello. Entre los quo he dicho quernaron en Scvilla en tomb de aquellos dichos ocho alios, quemaron a tres clOrigos do missa, 6 tres 6 cuatro 03 F'railes todos de este linaje de los confesos, é que- Otros Clue maron un Dotor frai!c de la Trinidad quc 1]arnaba1-1 qmtlm on en Savariego, que era un gran predicador, y gran fatY Cflu'3 sarlo, hereje en a añador que Ic conteciO venir ci \T ier- "0" panes cstaban, y t:nes Santo a predicar la Pasion y bartarse de came; tuas de los Quernaron infinitos guesos de los Corrales de Ia huidos. Trinidad y San Agustin é San Bernardo, de los confesos que alil se habian enten-ado cada uno so bre si al uso judaico, é apregonaron é quernaron en estãtua a muchos que hallaron dafiados de Los judios huidos. Hácese el Aquellos primeros Inquisidores ficieron facerqueniadero aquel quemadero en Tablada, con aquellos cuatro en Tablada. Profetas de yeso, en que los quernaban y fasta que haya beregia los quemaran. Muy hazañosa cosa fué el reconciliar de esta gente, por donde se supo por SUS confesiones, corno todos eran judios; y süpose en Sevilla de los judios de COrdoba, Toledo, BUrgos, Valencia y Segovia, y toda Espafia; corno todos eran judios, y estaban so aquella esperanza que el pueblo de Israel estuvo en Egipto; que aunque habian de los Egiptianos muchos majamientos esperaban que Dios los habia de sacar de entre ellos como despues los sacO, con mano fuerte, e brazo estendido; y asI ellos tenian que los christianos eran los egipcianos, O peores, é creian que Dios milagrosamente los sostenia e los defendia; é tenian que por mano de Dios habian de ser acaudillados, visitados, a sacados de emit los christianos, y lievados en la santa tierra de promision: sO estas locis esperanzas estaban y vivian cntrc los christianos, como por cilos fue manifestado e confesado, 134 de manera que todo ci image quedó infamado é tocado de esta enfermedad. Ovo reconciliacion en Procesion Sevilla que salian en la procesion de éstas disciplide Peniten- nas de los viérnes más de quinientas personas, hornciados en Scvilla en que bres é mugeres, con las caras descubiertas por las salieron mas de Soo per- calles. son as Esta Santa Inquisicion ovo su cornienzo cii Sevilla, e despues fue en Cordoba, donde habia otra Dióse wina de malos christiaos ri como enn e s -tann grandinagog ioal Santo io de Ia Sevilla; e despues fueron puestos inquisidores por Innuisicion en Sevilla. toda Castilla, é Aragon, é son infinitos quernados, y condenados y reconciiiados, encarcelados en todos los Arzobispados a Obispados de Castilla e Aragon; é muchos de los reconciliados tornaron a judaizar, que son quernados por ci rnes.mo caso en Sevilla, y en ]as otras panes de Castilla. Agora no quiero escnibir mas de esto que 110 es posible poderse escribir las maldades de esta herética pravedad; salvo digo, que, pues el fuego está encendido, que quemará hasta que halle cabo al seco de la Icfla, que será necesario arder hasta que scan des- gastados y muertos todos los que judaizaron, que no quede ninguno; y aun sus hijos los que eran de veinte afios arriba menos que fueran tocados de la mesrna lepra. Fue este aflo de 1481 ai cornienzo desde NaviInundadon del Rio de Scviila afto de dad en adelante dc muy muchas aguas y avenidas, 148i,y perdida del Co- de manera que Guadalquivir, llevO a hechO A perPero Y otros der ci Copero, que hahn en él ochenta vecinos, y Lugares de la Rivera. otros muchos Lugares de su Rivera, é subiO la creciente por ci Airnenil de Sevilla e por la Barranca de Coda en Jo mas alto clue nunca subió, 6 es- 135 tuvo Ices dias que no decendiO; e estuvo Ia Ciudad en niucho ternor de se perder por agua. CAPJTULO XL V. bE COMO EL GRAN TuRco VINO SOBRE RODAS t LA TUVO CERCADA CON GRANDE 1-JUESTE E SOBRE ELLA ENIBISTIO E FUE DE5vAI1ATAD0; E DE COMO LOS TURCOS TOMARON A OTRANTO, t DE COMO EL DUQUE DE CALABRIA LA RECOBRO, E DE OTRAS MUCF1AS COSAS. En el aflo de 1480 Cfl el Verano, vinieron sobre Rodas una muy grande armada de turcos, enviada por el gran Turco Mahorneto Otomano quc enviO desde Constancinopla, e tuvieronla cercada dos meses, en ci cual tiempo la mayor pane de los muros la derribaron, con gran nUmero de lombardas que le asestarori, O pusicron a los christianos en niucho estrecho; é los christianos hicieron rnuy hondas cavas por de dentro de la Ciudad, las cuales Si fechas no fueran, la Ciudad se perdiera; y estando ian dia los de la ciudad un poco seguros, arremetieron los Turcos de las estacadas y dieron un gran cornbate, en que niuchos de ellos entrarori por dma de los muros derribados e pasaron las cabas, é entraron en la Ciudad; e no plugo a nuestro Seflor que la tomasen é los christianos que eran en la Ciudad se esforzaron mucho con su Maestre é Capitanes dando grandes voces diciendo Jesuchristo, y Santa Alto 1480.