Empecemos desde abajo - Construyendo Mi Casa

Anuncio
Paso
a pas
Empe o
ce
d
esde mos
a
b
L
a
j
o
para excava
aci :
los
cimie ón
ntos
Esta
es
proce una parte
so
fu
una c de const ndamenta
ruc
as
l en
el
excav a o de un ción, ya
s
ación
e
s
a
o
lo c
de
d
dura
much ependerá uarto. De
si
o
l
un pe s años o s nuestra o a
is
ligro p
b
ara nu e convier ra
te
estra
famili en
a.
5
Una vez que has preparado y trazado
tu terreno, lo que sigue es excavar
las zanjas (algunos les llaman
“cepas”) para poner los cimientos.
Esta excavación la vamos a realizar
guiándonos por las marcas de cal
con las que trazamos el ancho de las
zanjas. La profundidad dependerá
de las características del terreno, es
decir, su resistencia.
Existen 3 diferentes tipos de terreno:
1. Terreno Blando
Está compuesto por arcillas blandas.
Al momento de hacer la excavación la
pala va a entrar de forma lenta y fácil,
sin necesidad de usar el zapapico.
Cómo conocer la
resistencia de mi terreno.
El terreno sobre el que vamos a
construir está compuesto de varios
materiales y formas distintas. Estas
características dependen de la zona y
clima en donde vivamos.
Entonces lo primero que debemos
hacer es quitar la tierra vegetal o
natural (la que está mezclada con
hojas, pasto y ramas) y rellenos
superficiales, ya que es la menos
resistente y su espesor es variable. Te
recomendamos que para conocer la
dureza y tipo de terreno realices una
excavación de 50 a 60 centímetros de
profundidad.
Herramienta Necesaria:
Pala, zapapico, carretilla
y bote alcoholero como
elementos de transporte
de la tierra.
2. Terreno Intermedio
En este tipo de terreno el suelo está
formado por arcillas con dureza
mediana. Para poder escarbar vas
a necesitar usar el zapapico, ya que
con únicamente la pala es difícil de
hacerlo.
3. Terreno Duro
Este tipo de terreno está formado por
tepetate, arcillas muy compactas o
suelo pedregoso en donde el zapapico
penetra con dificultad.
TERRENO MALO O DUDOSO
6
Conocer la resistencia
del terreno en
construcciones vecinas
Investigación por comparación.
Para saber cuál es la resistencia
de tu terreno, te recomendamos
que observes el comportamiento
del terreno de las construcciones
vecinas.
Fíjate bien en el estado en que se
encuentran
las
construcciones
vecinas, el sistema de construcción
que utilizaron (tipo y medidas de
cimentación, muros, columnas,
etc.), así te darás una idea sobre qué
tipo de materiales a usar para tener
mejores resultados en las medidas
de la cimentación.
Busca grietas en los muros de las
casas de tus vecinos, ya que esto es
indicativo de que la resistencia del
terreno es mala o dudosa.
Fíjate si en los muros
de las casas de tus
vecinos hay grietas si
están pandeados, ya
que esto significa que la
resistencia del terreno es
mala o dudosa.
TERRENO BUENO O RESISTENTE
Manos a la obra
Una vez que hayas determinado el
tipo de suelo sabrás cómo vas a hacer
tu cimentación (ancho, armado y
altura).
Al momento de ir escarbando, asegúrate de echar la tierra a los lados, ya que
después te va a servir para rellenar. Durante este procedimiento, debes cuidar que
la tierra no cubra las estacas que te van a servir de guías.
Cuando comiences a escarbar las
zanjas, deberás guiarte por las líneas
marcadas con cal, las cuales deben
indicar el ancho de la zanja.
Un aspecto importante que debes considerar en la excavación, es que si por algún
motivo el corte del terreno en las zanjas sea mayor a 1 metro, y si el terreno es
blando, deberás asegurar la zanja con cimbras de madera, como si fuera el túnel
de una mina. Para ello deberás colocar unos tablones o tarimas de madera a lo
largo de la zanja, las cuales van a ir apuntaladas con polines a cada metro.
Tierra
Cuña de madera
Duelas o tablas de madera
Puntal de madera
Poste de madera con polin de 4 x 4 pulgadas
Si al momento de estar escarbando
te encuentras con escombros
enterrados, entonces deberás hacer
la excavación más profunda, hasta
que encuentres el terreno resistente.
Estaca de madera de 2 x 4 pulgadas
Nivelando las zanjas, el nivel de manguera.
Una vez que hayas obtenido la profundidad de la zanja en la que encontraste la
resistencia óptima, deberás de emparejar la profundidad utilizando un nivel de
manguera. Las mediciones las deberás hacer en cada esquina de la excavación y
en cada cruce de zanja.
Compactación o apisonamiento de las zanjas
Sin embargo puede ser que los
escombros enterrados sean muchos
y estén a una profundidad mayor a
medio metro. En ese caso deberás
sacar todo ese escombro y rellenar
los hoyos resultantes con la tierra
buena de la excavación. Recuerda
que el relleno lo debes hacer en
capas no mayores de 20 centímetros,
agregando algo de agua para poder
apisonar la tierra hasta que rebote
el pisón de madera o de metal que
utilices para aplanarla. Ojo, si no
rebota el pisón es porque la tierra
todavía está suelta y esto puede
ocasionar hundimientos.
La compactación de las zanjas es muy importante, ya que así te aseguras de que
el terreno en el cual vas a construir esté firme. Consiste en aplastar perfectamente
la tierra suelta del fondo de la zanja hasta obtener un suelo parejo y del mismo
aspecto. Debemos eliminar los espacios de tierra floja que puedan provocar
hundimientos. Para hacerlo, vamos a necesitar un pisón de madera o metal con
el que golpearemos el suelo. En caso de tener las posibilidades de conseguir
un equipo electromecánico, un compactador mecánico (bailarina) nos facilitará
mucho el trabajo.
7
Descargar