NOTA BIOGRAFICA Mijaíl Gorbachov Carta de aceptación Versión traducida (Mijaíl Serguéievich Gorbachov; Privolnoje, Stavropol, 1931) Último dirigente de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas. Procedente de una familia campesina rusa de la región norteña del Cáucaso, estudió Derecho en la Universidad de Moscú (1950-1955). Allí se casó con Raisha Maxímovna Titorenko y se afilió al Partido Comunista. De regreso a su región de origen, realizó una rápida carrera política, ascendiendo a cargos de responsabilidad regional a las juventudes comunistas y en el partido. Completó su formación con estudios de Agronomía en los años sesenta, lo cual le permitió obtener su primero gran éxito político al afrontar la catastrófica sequía de 1968. Fue entonces cuando saltó a la política nacional, resultando elegido miembro del Sóviet Supremo (1970), del Comité Central del Partido (1971; secretario de Agricultura a 1978) y del Politburó (1980). Esta rápida ascensión culminó con su elección como secretario general del Partido Comunista de la URSS después de la muerte de Txernenko (1985), por un estrecho margen de votos; obtenía así el máximo poder de la declinando potencia soviética, que se completaría con su nombramiento como presidente del Sóviet Supremo y ninguno del Estado (1988). La llegada de Gorbachov al poder suponía no sólo una renovación generacional, sino también una esperanza de renovación política: Gorbachov encarnaba el corriente reformista que proponía una apertura liberalizadora para sacar a la URSS del estancamiento económico, político y cultural en qué había quedado sumida desde la época de Brezhnev. Gorbachov no defraudó estas expectativas, puesto que desde 1990 puso en marcha un programa político extremadamente audaz que no sólo acabaría con la dictadura comunista a la URSS, sino con la propia existencia de aquel Estado, transformando así profundamente el escenario internacional. Este programa, pero, era obra de un comunista convencido, deseoso de reforzar y perfeccionar el régimen socialista mediante la transparencia (glasnost) y la reestructuración (perestroika). La glasnost se produjo primero y con más facilidad: Gorbachov implantó una mayor transparencia informativa, acabó con la represión hacia los disidentes, desmontó el Estado policial y la censura de prensa, restauró cierta libertad de expresión y reconoció públicamente los crímenes y los errores cometidos en el pasado por el partido y por el Estado soviético. Con todo esto se ganó el apoyo de los gobiernos y de la opinión pública occidental. Esta acogida no es de extrañar, dado que Gorbachov practicó una política exterior pacifista, trayendo de hecho a la URSS a renunciar a su papel de gran potencia mundial, para reducir así los pelmazos gastadas militares que apenas podía soportar la debilitada economía del país (tratado de desarme pactado con los Estados Unidos de Reagan en 1987; retirada de la Afganistán el 1989). La retirada del ejército soviético condujo a procesos más o menos revolucionarios que acabaron con los regímenes comunistas en Europa central y oriental, abriendo el camino para la reunificación de Alemania (1990). La reconstrucción económica, pero, sería uno de los principales fracasos de Gorbachov: la perestroika suponía sacar a la economía soviética del caos y el anquilosamiento en que estaba sumida, introduciendo mayor libertad de empresa y dejando actuar al mercado para corregir los defectos de la planificación. Sin embargo, estas reformas no tuvieron resultados positivos inmediatos, pues desorganizar todavía más el sistema productivo existente y profundizaron el empobrecimiento de la mayor parte de la población. Todo esto creó tensiones sociales, agravadas por los intereses político-económicos que se veían afectados. En el aspecto político, se inició una apertura que tenía que conducir gradualmente a una democracia pluripartidista; pero los adelantos en este camino, considerados excesivos por la «vieja guardia» comunista, fueron considerados demasiado lentos por la creciente oposición ajena al partido: Gorbachov y su equipo avanzaban despacio por las resistencias existentes dentro del régimen y por el temor a perder el control del proceso. El efecto principal de la apertura fue la eclosión de los sentimientos nacionalistas, que cuajaron en movimientos independentistas en las diversas repúblicas que formaban la URSS. El 1991 se produjo un intento de golpe de Sido militar de tendencia involucionista, que fue detenido por la fuerza del movimiento democrático radical, encabezado por Boris Ieltsin; este se hizo amo del poder en Rusia, apartando Gorbachov y pactando con los dirigentes de las otras repúblicas el desmantelamiento de la URSS. Gorbachov se retiró de la política en aquel mismo año; aunque se presentó a las elecciones presidenciales de Rusia el 1996, obtuvo un resultado pésimo, reflejo de la impopularidad que se ganó en su propio país. Volver a la pàgina principal