EL ROMANTICISMO En contexto social e histórico: “un movimiento de protesta apasionada y contradictoria en contra del mundo burgués capitalista, el mundo de las ‘ilusiones perdidas’ contra la dura prosa de los negocios y de la ganancia… A cada vuelta de los acontecimientos, el romanticismo se ha ido dividiendo en corrientes progresistas y reaccionarias… Lo que todos los románticos tenían en común era la antipatía por el capitalismo (unos lo ven desde un punto de vista aristocrático, otros bajo una perspectiva plebeya), una creencia faustiana o byroniana en la naturaleza insaciables del individuo y la aceptación de la ‘pasión como fin en sí misma’ (Stendhal). Ernst Fischer (“La Nécessité de l’art”) Orígenes Respuesta a la transformación más lenta y más profunda –de orden económico y socialque es el advenimiento del capitalismo, transformación que se inicia mucho antes de la revolución Crítica a la modernidad, es decir, de la civilización capitalista moderna, en nombre de valores e ideales del pasado (precapitalista, premoderno) Crítica a la “reificación” o “cosificación”: la deshumanización del humano, la transformación de los vínculos humanos en vínculos entre cosas, objetos inertes Convicción dolorosa y melancólica de que al presente le faltan ciertos valores humanos esenciales que fueron alienados Se desea ardientemente recuperar el hogar, regresar a la patria, al sentido espiritual (la nostalgia, en el corazón de la actividad romántica) Referencia a pasado preciso: la Edad Media; “esa época del caballero, del amor y del cuento, de donde derivan el fenómeno y la palabra misma” (Schlegel) Huir de la sociedad burguesa Abandonando la ciudad por el campo Abandonando los países modernos por los “exóticos” Exotismo: búsqueda del pasado en el presente Crítica romántica de la modernidad 1.- desencanto del mundo Regreso a las tradiciones religiosas Magia, artes esotéricas, hechicería, alquimia, astrología Descubrimiento de mitos paganos o cristianos Leyendas, cuentos de hadas, relatos “góticos” Fascinación por la noche: lugar de sortilegio, misterio y magia; opuesta a la luz, emblema clásico del racionalismo Reencuentro con la naturaleza 2.- cuantificación del mundo Rechazo a la religión del dios dinero (Carlyle, “mammonismo”) Declinación de todos los valores cualitativos (sociales, religiosos, ect) Disolución de los lazos humanos cualitativos Muerte de la imaginación Aburridora uniformización de la vida Vínculo puramente “utilitario” de los seres humanos entre ellos y con la naturaleza 3.- mecanización del mundo Profunda hostilidad por lo mecánico, lo artificial y lo construido En el nombre de lo viviente, lo natural, lo orgpanico, lo “dinámico” Nostalgia por la armonía perdida entre el hombre y la naturaleza Melancolía y desolación ante los progresos del maquinismo, la industrialización y la conquista mecanizada del medio ambiente Fábrica capitalista: un lugar infernal 4.- la abstracción racionalista Lucha contra la abstracción Regreso a lo concreto Oposición a derechos naturales abstractos Exaltación de tradiciones nacionales y locales En vez de reglas o principios generales, aspectos concretos particulares, específicos de la realidad Redescubrimiento y rehabilitación de la historia, frente a una razón qe se pretende intemporal y abstracta 5.- disolución de lazos sociales Experimentan dolorosamente la alienación de los vínculos humanos La destrucción de las antiguas formas “orgánicas” comunitarias de la vida social El aislamiento del individuo en su yo egoísta Es difícil definir qué sea el romanticismo. Su carácter revolucionario es incuestionable. Supone una ruptura con una tradición, con un orden anterior y con una jerarquía de valores culturales y sociales, en nombre de una libertad auténtica. (ataque al racionalismo y a la Ilustración) Una crítica al racionalismo excesivo en que se basó la Ilustración Lo sublime: lo “exaltado”, lo “que inspira temor reverencial”. Rousseau y Kant, padres del “hijo problemático” de la Ilustración Amor a la Edad Media y sus valores: ruralización, feudalismo y por lo general, todo aquello que rechazaba el racionalismo ilustrado. Hay una vivencia profunda de la religión. Se impone el gusto por lo exótico. Se valora lo distinto, de ahí que la mirada se fije profundamente en mundos orientales. Lo Estético El arte deja de regirse por la doctrina del Clasicismo. (abandona la inspiración en la Grecia y Roma clásicas) El objetivo principal del arte no es la belleza, sino la expresión y sentimientos que pueden abrir horizontes mucho más amplios Clasicistas: la belleza depende de las cualidades materiales de los objetos (unidad, variedad, regularidad, orden, proporción, etc.) más que de la sensación que producen en quien los contempla. La belleza, en consecuencia, ha de proporcionar un estado de placer sereno, fruto del orden y la proporción, como ocurre con el arte griego Se proyecta en todas las artes y constituye la esencia de la modernidad Triunfa lo espontáneo. tendencia al subjetivismo, que estará latente en la cultura contemporánea. Prima la subjetividad en detrimento de lo objetivo. Por medio del arte se intenta expresar el mundo interior del artista, aunque para ello haya que recurrir a mundos oscuros, penumbras o sueños. El verdadero tema de la literatura o el arte romántico no suele ser el tema externo, sino la vida psicológica íntima. El espacio psíquico se hace cada vez más profundo y abismal. Cobra importancia el tema de la magnitud. Se siente el mundo como algo inabarcable a lo que el hombre es incapaz de llegar. Esto genera un sentimiento de inferioridad y una angustia ante las fuerzas incontrolables de la Naturaleza (vb. gr. la rusticidad romántica de Los Alpes: “No hay precipicio, ni torrente ni acantilado que no esté impregnado de religión y poesía”, Walpole, viaje a través de Los Alpes, 1739-1741) Límites cronológicos del Romanticismo Su fin puede coincidir con las revoluciones del 48 y el fracaso de las utopías románticas, produciéndose el cambio de una mentalidad romántica a una mentalidad positivista Rousseau Socava la noción de que la Ilustración era despiadadamente racionalista Le dio al pensamiento del s. xviii un sesgo emocional y visionario (muchos lo vieron como un romántico prototípico) Fue un solitario, cuyo individualismo llegaba al extremo de la paranoia Cruzó Los Alpes solo y a pie y registró sus impresiones románticas en sus autobiográficas Confesiones (1781-1788) “Necesito torrentes, rocas, pinos, oscuros bosques, montañas, caminos empinados, para ascender o descender, abismos a mi lado que me den miedo...” La razón era la “voz interior” que le indicaba al individuo que actuara, asegurando la libertad de elección; pero eran los sentimientos generados por la condición compartida de la existencia los que daban indicaciones a la razón Anticipó la obsesión romántica por la subjetividad individual Enfoque individual y subjetivo de la moral (alentó a Kant) Comunión extática y visionaria con el mundo natural (desarrollada por el movimiento Sturm und Drang) Kant Su idealismo, inconscientemente, impulsó la revolución romántica en epistemología Kant lo reflejó muy bien: "El aspecto de una cadena de montañas cuyos picos nevados se pierden entre las nubes, la descripción de una tormenta o la que hace Milton del reino infernal, nos producen un placer mezclado con terror. El espectáculo de los prados poblados de flores y los valles surcados por arroyuelos, y donde pacen los rebaños, nos producen también un sentimiento agradable, pero plenamente gozoso y amable... La noche es sublime, el día es bello. Los que poseen el sentimiento de lo sublime están inclinados hacia los sentimientos elevados de la amistad, la eternidad, el desprecio del mundo, el silencio de las noches de verano tachonadas por la temblorosa luz de las estrellas y la solitaria luna en el horizonte. Lo sublime emociona, lo bello encanta. Lo sublime terrible, cuando se produce fuera de lo natural, se convierte en fantástico." Crítica de la Razón Pura (1787): hay categorías (conceptos como espacio, tiempo, causa, efecto) inherentes a la mente humana que determinan a priori cómo entendemos el mundo El idealismo tiene un rol crucial en la transición de la visión clásica del mundo a la romántica (creencia de que los objetos de nuestras percepciones son “ideas” relacionadas con los contenidos de nuestra mente, que lo real es esencialmente psíquico. La idea es, así, nuestra base para el conocimiento, en directo). (Deriva últimamente de la teoría de Platón de las “formas ideales” que están más allá de la realidad visible. Concebía un mundo ideal de cosas incognoscibles “como son en sí mismas” (noumena), distinto del mundo material de cosas cognoscibles “como aparecen” a nuestros sentidos (phenomena) Lo anterior fija un límite a la posibilidad de conocimiento (nunca podemos conocer el mundo noumenal) Este idealismo crítico promovió una revolución que socavó siglos de pensamiento. Burke “Una investigación filosófica sobre el origen de las ideas de lo sublime y lo bello” (1757) contrasta lo bello (en lo cual la armonía y la proporción le dan al espectador la sensación de un todo ordenado) con lo sublime (en lo cual la propia falta de esa sensación causaba un terror productivo y agradable) oscuridad, vastedad, irregularidad, sea en paisajes montañosos, arquitectura gótica, literatura “romántica” o estructuras nuevas de la industrialización, le daban al individuo una sensación “sublime” de su propia capacidad limitada, y por ende de su propia mortalidad, y al mismo tiempo un escalofrío indirecto de deleite al observar la fuente de peligro desde una distancia segura. Si en la Ilustración brillaba la luz, en el Romanticismo nos abruman las tinieblas El movimiento romántico alemán estrechamente vinculado a la búsqueda de la identidad nacional los alemanes, todavía disgregados, no contaban con ninguna tradición artística contemporánea que pudiesen compartir, ni tampoco con un centro cultural que les sirviera de inspiración tendencia intelectual al lamento de su condición de subordinados a los modelos franceses de neoclasicismo y la ilustración invasión napoleónica, 1806, se agrega la subordinación política futuros nacionalistas: sólo mirar hacia la Edad Media y el Renacimiento, con el Sacro Imperio Romano, culturalmente rico única evidencia de unidad, el idioma común fragmentación, clave de la experiencia alemana toda pretensión de lenguaje universal a través de la razón separada de la nacionalidad enfrentaba el escepticismo y la hostilidad por ello se desarrolla el irracionalismo y el interés en las características particulares y locales de la experiencia, nociones claves del romanticismo. Johann Gottfried von Herder (1744-1803) piensa no sólo en la evolución histórica de las culturas, sino también en el problema de una cultura específicamente alemana discípulo de Kant, pero contra los principios universalizadores de su maestro investigó el lenguaje, como elemento inseparable del pensamiento y, por ello, central para la experiencia de las culturas individuales “el lenguaje es esencial para el pensamiento. La reflexión no es algo que se pueda realizar separadamente del instrumento que es el lenguaje cada idioma era la expresión de una cultura única, que sólo podía entenderse en los términos de ese idioma inició el interés por la filología, el estudio de la cultura a través de los textos. Desarrollo histórico: sometido a los procesos naturales de nacimiento, crecimiento y deterioro. No era parte de un progreso lineal continuo, el concepto de la historia preferido por la Ilustración. “la humanidad se desarrolla mediante una serie de nacionalismos culturales expresados en el Volkgeist o “espíritu del pueblo” se debía valorar el pasado germánico por sus cualidades “góticas” tribales y folclóricas. La arquitectura gótica medieval era el símbolo de ese “pasado sagrado”, una arquitectura “orgánica” que corporizaba formas naturales. Se dedicó a coleccionar canciones nativas (volkslieder) como evidencia de cultura indígena. Sturm und Drang Uno de los primeros movimientos del romanticismo Tomó su nombre de una obra de teatro de 1775 de Friedrich Klinger, Wirrwarr oder Sturm und Drang (“Confusión, o tormenta y tensión”) Fue un ensayo general del movimiento romántico pleno de fines de siglo Estaba marcado por el nacionalismo de Herder, el idealismo y la fe rousseaunianos en la naturaleza, el desprecio por la convención artística, la idea de la experiencia individual como central para la creación de arte y la confianza en el poder del genio. Se conoció esta época como Geniezeit (época del genio) o Goethezeit (época de Gohete) Goethe “Las tribulaciones del joven Werther” (1774) Goethe crea un prototipo del héroe romántico en conflicto con su mundo y condenado a autodestruirse por su naturaleza apasionada y obsesiva. Werther sufre de Weltschmerz (incomodidad con el mundo) y Ichschmerz (incomodidad consigo mismo). Enorme difusión; jóvenes, abrigos azules y calzones amarillos en honor a la vestimenta del héroe; Napoleón leyó 7 veces la novela. 1775, Goethe de Frankfurt a Weimar, fin al período protorromántico (viaje a Italia de 1786, determinante) “el clasicismo es salud, el romanticismo enfermedad”. En Weimar presidió el momento culminante de la literatura alemana, el “clasicismo de Weimar”, de la década de 1780 y ppios de 1790 Johann Christoph Friedrich von Schiller (1759-1805) Inicia su carrera con un enorme éxito: Die Räuber (Los Bandidos, 1781) Karl Moor, líder de una banda de ladrones, se rebela contra la autoridad patriarcal y produce el caos por la causa de la libertad La alegría era la fuerza que podía unir a hombres y mujeres; era generosidad de espíritu emocional con los demás Fue una idea influyente de la era romántica, como se expresa en la Novena sinfonía de Beethoven Primeros románticos ingleses Nacimiento del romanticismo inglés: Lyrical Ballads (1798), William Wordsworth y Samuel Taylor Coleridge Balada: forma que establecía vínculos con las tradiciones “folk” de la cultura popular Wordsworth veía al hombre moderno como alienado de su ser “natural” y de sus prójimos, por la vida urbana industrializada Wordsworth, el “sacerdote de la naturaleza”, un “hombre solemne, asexuado” (Byron) Coleridge: produjo poemas visionarios atormentados y muy personales de lo sublime “demoníaco”, a menudo con la ayuda de drogas (“Kubla Khan”, 1816, ejemplo central) James Macpherson (1736-1796) (Ossian, bardo gaélico ficticio): “Fingal” y “Temora”, “epopeyas folk”, causaron sensación en Escocia, Ossian famoso en toda Europa. Thomas Percy, Reliques of Ancient English Poetry, 1765coleeción de baladas, despertó gran interés en el pasado caballeresco medieval. Inspiró poesía de Ronert Burns y los cuentos medievales populares de sir Walter Scott. Thomas Chatterton: elabora manuscritos medievales con el nombre de Thomas Rowley, un ficticio poeta de Bristol del siglo xv. Los escribió a los 12 años, engañando a escritores de la talla de Walpole Pero su obra no fue un éxito y se suicidó a los 17 años Su muerte solitaria, por inanición en una choza, se convirtió en la imagen emblemática del sufrido artista romántico Cien años después todavía se debatía sobre su obra Wordsworth lo llamó “el muchacho maravilloso, el alma insomne que pereció en su orgullo” Coleridge escribió una “Monodia” sobre su muerte; Keats le dedicó “Endymion”; Alfred de Vigny, obra de teatro “Chatterton” (1835) (“mártir poeta”, aplastado por el prosaico materialismo) E. Burke adapta este concepto al siglo XVIII: la belleza produce placer, y los objetos que la producen carecen de fuerza y poder de producir terror o emociones fuertes porque son pequeños y delicados. En cambio, lo asociado al instinto de conservación (muerte, oscuridad, poder, energía, etc.) es lo sublime, que produce terror, pero también deleite si, convertido en objeto artístico inofensivo, no nos amenaza (por ejemplo, en una representación teatral o en un poema). Significación del romanticismo. El hombre romántico Es un hombre atento a lo singular, a lo específico. En el hombre clásico predominaba la razón, el sentido común. Para el romántico la razón es común a todos los hombres y la sensibilidad es individual entiende que en el interior del hombre actúan distintas fuerzas, y que la esencia de lo humano rebasa la esfera de lo inconsciente y de lo racional. El romántico, además de su rebeldía contra el orden del mundo heredado, se opone a la separación entre razón y sentimiento, entre lo real y lo irreal. El hombre clásico vive en un mundo que no le gusta, pero que quiere reformar; el hombre romántico vive en un mundo que no le gusta pero que no quiere cambiar. Es imaginativo, sensible, egocéntrico, original. Triste, melancólico. La extracción social de los artistas será un aspecto importante. Las grandes figuras del XVIII pertenecían a la aristocracia, pero el Romanticismo se nutrirá en las clases medias. Una consecuencia de su postura determinadamente individualista fue que el universo podía reflejarse dentro de un sujeto individual. Existe poco apego a la vida (muerte prematura, suicidio) El yo de cada individuo es el punto de partida del hombre romántico Los románticos convirtieron al sujeto individual en el punto de vista desde el que había de considerarse el mundo el ejemplo central de los arquetipos románticos es el solitario, el hombre alienado de todos y de él mismo por una conciencia de sí excesiva Las ideas son traspasadas por el sentimiento La idea de Dios, de la naturaleza, de amor y de la Patria se convierten en verdaderos sentimientos. Sentimiento de la patria. Aparece una nueva noción de nación. Se jura fidelidad a un espíritu del pueblo (reivindicación del espíritu nacional “Volkgeist”) que se manifiesta en la comunidad histórica, en la cultura, en la tradición La búsqueda de una identidad nacional se hace coincidir con la necesidad de impulsar una cultura propia. Herder defiende la existencia de un espíritu nacional ligado al idioma cuyo desarrollo es la historia de cada país. Afirma el nacionalismo y el populismo que Schiller practicaría en su teatro. Sentimiento de la Naturaleza. Pasa por ser una creación del Romanticismo, pero ya había aparecido en el Renacimiento Es una evasión del individuo ante un mundo que no le gusta Huye de la realidad y se refugia en el paisaje los paisajes melancólicos, las ruinas, las tierras exóticas son descubiertos por el artista romántico El sentimiento religioso Se sustenta en un sentimiento interior y en una intuición esencial de lo divino que conduce a una unión mística con Dios. Se asocia a Dios la propia existencia Se considera un Dios difuso en la Naturaleza y en el mismo hombre. El sentimiento del Amor. elemento predominante dentro de los componentes del hombre romántico fruto del dominio del sentimiento sobre la razón el amor atrae al romántico como vía de conocimiento, como sentimiento puro, fe en la vida y cima del arte y la belleza. Pero el amor acrecienta su sed de infinito en la muerte, el alma romántica encuentra la liberación de la finitud. El Alma el alma romántica no es dada desde fuera al individuo éste la crea cuando tiene conciencia de sus sentimientos convierte al individuo en singular y universal el Universo sólo es posible concebirlo partiendo del conocimiento de sí mismo el hombre es la imagen del Macrocosmos. La Libertad el reino de la libertad absoluta es el ideal romántico, el principio de toda ética romántica necesidad del individuo para explorarse y explorar el mundo exterior, y para lograr la comunicación del Uno con el Todo, en una marcha progresiva hacia la infinitud. el romántico se concibe como un ser libre no puede aceptar leyes ni sumisión a ninguna autoridad muchos románticos heredaron la crisis de la conciencia europea que la Ilustración provocó al cuestionar, en nombre de la razón, los dogmas religiosos. La herencia romántica Las actitudes románticas se siguen manifestando en literatura, música, pintura, etc. El advenimiento de la modernidad está contenido en el Romanticismo, (supuso una regeneración o una reconstrucción frente a la decadencia estética del Neoclasicismo) no sólo supuso la irrupción de la modernidad a principios del siglo XIX, sino la creación de la esencia de lo moderno incluso tal como se entiende hoy día, legitimó la libertad de la forma artística concibió al hombre como una unidad en el seno de una unidad superior le hizo aspirar al infinito mediante la reconciliación de su mundo interior con el mundo exterior. Todo el arte actual deriva en cierto modo de la revolución que supuso el Romanticismo. Pero toda esta liberación tiene un precio, que suele ser un hondo sentimiento de soledad y vacío. Romper con un orden, con una seguridad, con una obediencia lleva consigo ese doloroso desgarramiento en que el individuo se encuentra de pronto consigo mismo, sin nadie más. Aquí radica sin duda el pesimismo, la angustia, la melancolía, el "mal del siglo" con su insatisfacción imposible de colmar, que tan admirablemente expresaron los románticos y tras ellos sigue expresando la cultura occidental moderna. Schlegel: "El sujeto de la ironía romántica es el hombre aislado, alienado, que se ha convertido en el objeto de su propia reflexión y cuya conciencia de sí le ha privado de su capacidad de actuar. Aspira nostálgicamente a la unidad y a la infinidad: el mundo se le presenta como dividido y finito... En un acto de reflexión crecientemente expansivo trata de establecer un punto de vista más allá de sí mismo y de resolver en el ámbito de la ficción la tensión que se da entre él mismo y el mundo. No puede superar la negatividad de su situación mediante un acto en el que se produzca la reconciliación del logro finito con la aspiración infinita". El verdadero romántico no era un soñador hipersensible sino una figura heroica que encaraba las realidades dolorosas de su época: una figura de genio Mosse Para los románticos, la naturaleza humana se describía mejor a través del “alma”, que contenía las emociones y potenciaba la imaginación. Todo lo demás era “intelectualización” abstracta, típica de gente que carecía de verdadera emoción y en consecuencia de verdadera alma la acción lo era todo en la antigüedad y el personaje no jugaba el mismo papel que en los tiempos modernos”. La grandeza de los románticos procedía de que elevaban el personaje por encima de la acción. El impulso de afirmación del sentimiento individual, del alma individual, pudo eludir así, a través de esta visión histórica, la sociedad industrial y de masas que iba imponiéndose en Europa. La novela histórica empezó a estar en boga y a hacerse popular. Pero en 1812 empezaron a infundir a sus cuentos un claro propósito nacionalista. Los hermanos Grimm vieron entonces en estos cuentos sencillos una continuación de la antigua y gloriosa epopeya alemana, especialmente la Niebelungenlied. Su obra empezó a simbolizar la continuidad de la historia alemana y se convirtió en recordatorio de un pasado más glorioso que la ocupación napoleónica del período. Blancanieves y los siete enanitos, un viejo cuento popular hessiano, simbolizaba para los hermanos Grimm la diosa Snaefried, ante cuyo ataúd había montado guardia Haraldur. El cazador que aparecía en varios de los cuentos de hadas no era más que una reencarnación del antiguo héroe alemán Sigfrido. El significado más profundo de su interpretación estriba en el hecho de que los hermanos Grimm consideraron el simbolismo que ellos habían creado como prueba de que aquellos cuentos populares constituían una tradición auténtica y espontánea que era exclusivamente alemana. Sólo faltaba dar un paso para sostener que tales recuerdos populares eran lo más característico, ya que eran una corriente ininterrumpida del genio nacional, y que aquellos que no los compartían eran extranjeros a los que había que excluir. Fue Friedrich von Schlegel (1772-1829) quien dio clara expresión a las implicaciones nacionalistas de esas ideas. Él afirmo que los recuerdos nacionales, que equiparaba al espíritu o a la poesía de un pueblo, eran la clave de la supervivencia histórica. Sólo los pueblos que tenían “grandes recuerdos nacionales” habían sobrevivido en la historia. “Historia es la autoconciencia de una nación”. La autoconciencia se definía en Alemania como el espíritu popular, como los recuerdos nacionales compartidos y como la poesía. Johann Gottlieb Fichte (1762-1814)… Su famoso Discursos a la nación alemana de 18071808 daba esa redefinición al mismo tiempo que Berlín, donde él escribía, se hallaba bajo el dominio francés. Fichte afirmaba que la unidad de pensamiento y de acción sólo podía alcanzarse dentro de una nación que fuese una comunidad histórica válida, definida según el movimiento literario analizado. Dentro de la unidad de esta comunidad podía hallarse la libertad individual más elevada, no la libertad individualizada de sentimiento y emoción, sino la libertad que se alcanzaba a través de la integración de grupo. Este grupo se definía como el Volk. Los individuos tenían que integrarse con los recuerdos nacionales y la poesía del Volk. Ninguna clase de la población podría mantenerse al margen de este proceso de integración. Fichte rechazó por entero la idea de una estructura de clase e incluso alabó el sencillo sistema económico medieval. Esa insistencia de Fichte en la integración de todas las clases estaba reforzada por la preocupación que le causaba la clase media alemana.