Revista Pedagogía Universitaria Vol. XIII No. 3 2008 LA COMPETENCIA PEDAGÓGICA BÁSICA EN EL ADIESTRADO UNIVERSITARIO, UNA FORMA DE COADYUVAR A SU FORMACIÓN DOCENTE. THE BASIC PEDAGOGIC COMPETENCE IN THE BEGINNING UNIVERSITY PROFESSOR, A WAY OF CONTRIBUTING TO ITS INSERTION IN THE EDUCATIONAL COMMUNITY. Lic Elianet Ponce Paneca Dr. C. Alfredo Morales González Universidad Central “Marta Abreu” de las Villas. [email protected] Palabras claves: competencias básicas, profesor universitario, formación pedagógica, superación, adiestrado. Key words: competences, basic, university professor, pedagogical, formation, upgrading, trainee. Resumen Los acelerados avances en la ciencia, la técnica y la economía global que se suscitan en pleno siglo XXI exigen de todos los ciudadanos una constante actualización de sus conocimientos En la actualidad, al referirnos al paradigma centrado en el aprendizaje, la educación de todos los ciudadanos a lo largo de toda la vida y el papel del docente como guía y conductor del proceso se hace imprescindible una preparación pedagógica superior que le permita elevar la calidad del proceso de enseñanza – aprendizaje y faciliten el desarrollo de una universidad adaptada a las nuevas demandas de la sociedad. La educación superior contemporánea adopta nuevas reformas curriculares encaminadas a desarrollar como nunca antes la autonomía en el aprendizaje, haciendo cada vez más inminente la necesidad de redimensionar las funciones del profesorado universitario sobre todo desde los primeros años, cuando se encuentra en el período denominado de adiestramiento laboral, en el que el joven egresado ha de ejercer roles docentes en una institución. La educación posgraduada cubana ha coadyuvado históricamente a la formación pedagógica del claustro universitario, sobre todo desde su etapa inicial. En la actualidad, implementa nuevas acciones de formación basadas en el desarrollo de competencias pedagógicas que coadyuvan al perfeccionamiento docente. Este trabajo recoge algunas experiencias relacionadas con la superación pedagógica en la etapa de adiestramiento laboral en la Universidad Central Marta Abreu de las Villas. Abstract: The new curricular reformations that are being made in the higher education claim more of the cognitive independence or autonomy in the students’ learning. That is why there is a need in improving the university professor’s functions mainly from the first years of insertion, in a period known as work training, in which the young professional is involved 72 Revista Pedagogía Universitaria Vol. XIII No. 3 2008 in the teaching and learning process. During this stage the trainee often experiences a rehearsal – error learning putting more emphasis on the practical knowledge. Historically the postgraduate education has cooperated to the pedagogic formation of the university professor, mainly from its initial stage. At present, when referring to the role of the professor as a guide of the teaching – learning process it is becoming more evident the requirement of the pedagogical upgrading mainly based on the competence formation that will improve the quality of teaching and at the same time adapting the university professor to the new demands of the society and to the community where he is inserted. This article focuses on some experiences related to the pedagogical upgrading of trainee professors which are carried out in the Central University “ Marta Abreu ”de las Villas INTRODUCCIÓN: La actual sociedad, caracterizada por el uso generalizado de las Tecnologías de la Información y la Comunicación en todas las actividades humanas y con una fuerte tendencia a la globalización económica exige de todos los ciudadanos nuevas competencias personales, sociales y profesionales para poder afrontar los continuos desafíos que imponen los rápidos avances de la ciencia y la nueva economía global. Ante la cambiante sociedad actual, las necesidades de formación de los ciudadanos se prolongan más allá de los primeros estudios y se extienden a lo largo de toda la vida. La formación continua resulta cada vez más imprescindible, tanto por las exigencias derivadas del entorno personal como profesional. Según plantea González Morales (2006). "La tendencia de la educación superior contemporánea debe estar encaminada a ofrecer cada vez más una formación general, entendida en términos de competencias, que permitan una preparación más universal y amplia a los estudiantes.” Los profesionales de este siglo han de nutrirse de una formación holística, en su ciencia como de otras afines que lo capaciten para asumir diversos retos, que le permitan insertarse en disímiles campos de acción dentro de su profesión, es decir formar profesionales con un perfil más amplio. La educación en competencias surge como respuesta a las exigencias de lograr la fusión y dualidad profesional que se aspira alcanzar en todo proceso de formación en la que el profesional sea conocedor de su disciplina académica, pero además poseedor de competencias básicas y profesionales que le permitan actuar eficientemente en cualquier campo de acción que lo demande su profesión. La educación en competencias proporciona una educación de calidad, acorde a las exigencias de la sociedad actual, en la que los ciudadanos están obligados a actualizar sus conocimientos por la increíble celeridad con que estos se suscitan. En el entorno educacional el término competencia es aquel que se refiere a la adquisición de conocimientos, desarrollo de habilidades, destrezas y valores que se integran al proceso de enseñanza - aprendizaje. Es la conjunción entre aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a vivir con los demás y aprender a ser. La formación profesional por competencias profesionales ha cobrado gran auge en países de América Latina y Europa, proporcionando líneas y guías comunes que influyen 73 Revista Pedagogía Universitaria Vol. XIII No. 3 2008 exitosamente en los diseños curriculares, tanto de la formación inicial como de la educación continua. Sin embargo, si partimos de tomar las competencias como el conjunto de conocimientos y habilidades que todos los sujetos necesitamos para ejercer alguna actividad, en el caso de la docencia pensamos en las capacidades y habilidades disciplinares que los docentes han de poseer para ejercer en sus diferentes niveles, así como también aquellas referidas al comportamiento profesional y social, a las actitudes y a la capacidad de innovar. Varios autores nacionales e internacionales han incursionado en el estudio de las competencias pedagógicas imprescindibles en el desempeño docente, entre ellos se destaca la desaparecida educadora argentina Cecilia Braslavsky (1999), quien identificó un grupo de competencias básicas dirigidas a perfeccionar la práctica docente las que denominó pedagógico – didácticas y que intrínsecamente dan lugar a otras competencias como la competencia productiva, institucional, especificadora, interactiva e investigadora que al desarrollarse armónicamente contribuyen a profesionalizar la práctica docente. La referida autora aseveraba la importancia de transformar la visión que tradicionalmente ha prevalecido sobre el desempeño docente, al respecto, afirmaba : “Los profesores que trabajen actualmente y que deseen persistir en roles vinculados a la mediación de los conocimientos en proceso de proliferación deberán tener competencias vinculadas con la resolución de los problemas o desafíos más coyunturales, ha de facilitar procesos de aprendizaje autónomos; los docentes deben saber conocer, seleccionar, utilizar, evaluar, perfeccionar y crear estrategias de intervención didáctica efectivas que posibiliten conducir un proceso docente – educativo acorde a las exigencias del mundo contemporáneo, lo que equivale a desarrollar competencias pedagógico – didácticas". DESARROLLO La formación docente del profesorado universitario constituye tema recurrente de las políticas educativas en todos los sistemas educacionales. Por ello La UNESCO, en su Declaración Mundial sobre la Educación Superior en el siglo XXI: visión y acción, generada de la Conferencia Mundial de Octubre de 1998, reflejó su interés en la formación pedagógica del profesorado cuando declaraba en el articulo 10: “un elemento esencial para las instituciones de enseñanza superior es una enérgica política de formación del personal.” “deberían tomarse medidas adecuadas... de mejora y actualización de las competencias pedagógicas mediante programas adecuados de formación del personal, que estimulen la innovación permanente de los planes de estudio y los métodos de enseñanza y aprendizaje”. Estas medidas para actualizar, perfeccionar y superar la labor pedagógica del profesorado son materializadas en innumerables programas de formación existentes a nivel internacional. En su gran mayoría con una fuerte tendencia en la formación y desarrollo de competencias docentes, estas experiencias educativas han trascendido desde la formación inicial hasta el postgrado. En las experiencias internacionales se presta especial atención a la problemática que afronta el egresado universitario, sobre todo al desempeñar la labor docente. En ese sentido se señalan la imitación acrítica de conductas observadas, el aislamiento, la dificultad en la transferencia del conocimiento adquirido en la etapa de formación y el desarrollo de una concepción técnica de la enseñanza. El recién graduado universitario dispone de ciertos conocimientos sobre la materia, pero no ha recibido la formación didáctica necesaria sobre 74 Revista Pedagogía Universitaria Vol. XIII No. 3 2008 cómo enseñarla. Gibbs y Habeshaw caracterizan de esta manera al profesor novel: “los profesores noveles universitarios…a menudo encuentran que enseñar en la universidad es un reto, a veces un reto demasiado grande. Han tenido experiencias con profesores aburridos cuando eran estudiantes y no quieren terminar como ellos. Están dispuestos a hacer lo que haga falta para ser buenos docentes, pero cuando se encuentran con las presiones, frecuentemente se preguntan si podrán asumirlo.” Tomando en cuenta las necesidades de formación del egresado universitario resulta de vital importancia satisfacer aquellas carencias de tipo ocupacional e individual que normalmente acontecen en la etapa en la que el joven egresado comienza a recibir la formación que le permitirá formar parte de la institución que lo emplea. Por ello resulta valioso durante el periodo de adiestramiento fomentar el desarrollo de competencias básicas que faciliten su crecimiento individual y profesional. Lo anteriormente expuesto nos conduce a pensar en la creciente necesidad de implementar programas de formación o superación pedagógica que contribuyan a aminorar las dificultades propias de los primeros años en la praxis pedagógica de los profesionales universitarios en los que implícitamente este proyectada desde la realidad contextual del sujeto objeto de esta formación. La Educación Posgraduada en nuestro país tiene entre sus mayores prioridades el perfeccionamiento de la labor pedagógica del claustro universitario. Las que son materializadas en cada institución universitaria, por los Centros de Estudio de Educación, supervisados por el Vice rectorado Académico e implementados a través de diversas propuestas que oscilan desde cursos hasta diplomados en Formación Pedagógica. Todos ellos instrumentados especialmente durante los primeros años de inserción laboral del recién graduado, con un carácter teórico-práctico. Recientemente, con la universalización de la educación superior se pone mayor énfasis en las actuales tendencias del proceso de enseñanza- aprendizaje donde el docente ha de actuar como dinamizador de los conocimientos y estilos de aprendizaje de los estudiantes, reclamando de la labor del docente una formación pedagógica superior a la que tradicionalmente se lleva a cabo en las universidades. En el caso de la Universidad Central Marta Abreu de las Villas la variante que más se ha instrumentado ha sido el Diplomado en Formación Pedagógica compuesto por cinco asignaturas, cuya finalidad es desarrollar las competencias básicas, sobre todo aquellas facilitadoras del proceso pedagógico, denominadas competencias didáctico-pedagógicas. Este diplomado consta de espacios dedicados a las tutorías dirigidas a preparar a los profesores de mayor experiencia pedagógica en su labor de orientación del nuevo docente, específicamente en la preparación metodológica de la asignatura que impartirá. Sin embargo, los adiestrados en su mayoría manifiestan no sentirse totalmente preparados para asumir el proceso de enseñanza- aprendizaje. Un diagnóstico realizado a un grupo de adiestrados universitarios con dos años de experiencia en la docencia demostró que la mayor parte de los problemas docentes que reflejan en su praxis cotidiana se deben esencialmente a tres factores, entre los que se destacan la insatisfacción de las necesidades formativas de superación por el sistema de superación implementado por la institución y las escasas oportunidades que ofrecen los programas de formación existente de vincular la teoría con la práctica . Otra deficiencia de las propuestas de formación radica en la escasa correspondencia entre las necesidades de formación que poseen los adiestrados y los contenidos, métodos y 75 Revista Pedagogía Universitaria Vol. XIII No. 3 2008 medios empleados para potenciar esta formación. Estos docentes afirman que se ha de profundizar la vinculación de la teoría y la práctica, en aquellas asignaturas que potencien el perfeccionamiento docente, entre estas asignaturas se encuentran: Didáctica de la Educación Superior y Psicopedagogía. Otro aspecto a señalar es la necesidad de incorporar otras instancias organizativas de las facultades a las que ellos pertenecen y de las que forman parte indisoluble los departamentos docentes como máximos responsables de desarrollar el trabajo metodológico que desarrollan los docentes. No obstante, una de las mayores dificultades que presentan los adiestrados constituye la desestimación de sus necesidades de formación pedagógica a nivel departamental, lo que podría ser atenuado con acciones concretas implementadas a través del trabajo metodológico. Dada las circunstancias actuales en las que se trata de potenciar el aprendizaje autónomo en el individuo, constituye un requisito inesquivable de los programas de formación desarrollar determinadas competencias profesionales que den respuesta a las necesidades formativas de los recién graduados sobre todo, de aquellas necesidades que puedan entorpecer el desenvolvimiento profesional del individuo. Las propuestas de superación pedagógica que promuevan las instituciones universitarias han de estar en consonancia con las tendencias de formación pedagógica más actualizadas, en las que se propicien espacios de socialización en los que participe no solo el adiestrado sino también la figura del tutor como artífice principal de la formación, se han de estimular en los departamentos actividades metodológicas en los que el adiestrado no sea visto como un receptor de influencias externas , sino como protagonista fundamental del accionar metodológico para estimular su aprendizaje sobre todo desde el saber hacer , aspecto medular en la profesión docente. CONCLUSIONES A modo de conclusión consideramos necesario sistematizar la superación pedagógica lo largo de la profesión del docente universitario, pero sobre desde los primeros años de ejercicio docente. Sin embargo, creemos que los programas instaurados en la actualidad en nuestras universidades han de implementar propuestas más actualizadas y menos tradicionales para alcanzar una formación docente más eficiente. Los docentes en adiestramiento laboral precisan desarrollar competencias pedagógicas básicas que tributen a un mejor desempeño docente. Finalmente, podemos aseverar que las acciones implementadas para preparar pedagógicamente al claustro universitario ratifican la importancia de contribuir a la formación humanista del egresado, quien independientemente de su formación inicial, ha de ser capaz de diseñar en su disciplina un proceso de enseñanza – aprendizaje acorde con las exigencias de la sociedad actual. BIBLIOGRAFÍA: Morales González, A. (2006). Tendencias y retos de la Educación Superior Contemporánea. Universidad Nacional San Agustín de Arequipa. Perú. Pág. 14. 76 Revista Pedagogía Universitaria Vol. XIII No. 3 2008 Cecilia Braslavsky ( 1999 ) Bases, orientaciones y criterios para el diseño de programas de formación de profesores. Revista Iberoamericana de Educación. Vol. V, No 19. Pág. 12. UNESCO (1998): “Declaración Mundial sobre la educación superior en el siglo XXI: visión y acción”. Ginebra, Suiza. Gibbs, G,. Habeshaw, A( 1989:15): Preparing to teach : An Introduction to effective teaching in higher education . Bristol Technical and Educational Services. Pages 32-33. 77