Entrada: Éste es el día Éste es el día que hizo el Señor. Cantemos todos con santo fervor Cielos y tierra muy juntos están Porque el Señor ha estado aquí. Pascua sagrada, oh pascua redentora, Jesús es él cordero, que por todos se inmoló. Jesús es él cordero que por todos se inmoló. Pascua sagrada, oh canto de alabanza, su nombre alabemos porque eterno es el Señor. Su nombre alabemos porque eterno es el Señor. Cantan las flores se alegran Los campos, bosques y prados Alaban a Dios, así nosotros cantamos Alegres en este día que hizo el Señor. Comunión: Si Cristo Resucitó Si Cristo resucitó que se note en ti, en tu rostro. Si Cristo vive en ti que se note su amor entre nosotros. 2X Que sea bendito, bendito sea aquel, Aquel que viene en el nombre de Dios. Que las guitarras resuenen por Él, Y cada nota sea un canto de amor. Es hora de dar perdón, es hora de dar amor, Como Cristo lo enseño Ofertorio: Jesús Nuestra Pascua Jesús, nuestra pascua, por todos murió. Cantemos alegres, que resucitó. Cantemos alegres, que resucitó. Pascua sagrada, oh fuente de alegría, despierta tu que duermes que el Señor resucitó. Despierta tu que duermes que El Señor resucitó. Pascua sagrada, oh fuente siempre nueva Dejad al hombre viejo, revestíos del Señor. Dejad al hombre viejo, revestíos del Señor. Por el enfermo hay que orar, al preso hay que visitar, Como Cristo lo enseñó. Al hambriento dale pan, al probre hay que consolar, como Cristo lo enseñó. Al desnudo hay que vestir, tenemos que compartir, como Cristo lo enseñó. Salida: Salmo 22 //En el salmo 22 allí en la biblia lo dice:// Que el habita en la alabanza, en la alabanza el habita. 2x Y si le alabas te gozas. 3x y si le alabas. 2x Pascua sagrada, Dios se hizo igual al hombre, nos habla por su hijo que es maestro y salvador. Nos habla por su hijo que es maestro y salvador. El día de pentecostés en un aposento alto. 2x se reunieron los discípulos, pidiendo Espíritu Santo. 2x Pascua sagrada, oh fiesta del bautismo, renacidos por el agua somos hijos del Señor. Renacidos por el agua somos hijos del Señor. Pascua sagrada, oh pascua salvadora, al pueblo prisionero el Señor, ya rescató. Al pueblo prisionero el Señor ya rescató. Y la madre de Jesús estaba entre los santos. 2x todos allí recibieron, poder y Espíritu Santo. 2x Marta le dijo a Jesús mi hermano ya se murió. 2x Y Jesús le contesto yo soy la resurrección. 2x Marta quita tú la piedra yo soy la resurrección. 2x yo te digo que si crees, veras la gloria de Dios. 2x OFICINA: Horario de oficina: 9:00 – 1:30 Joanne Kleisley, Secretaria Dolores Mary Brien, Registraduría Teléfono: 585585-254254-7170 Padre Anthony Mugavero Diáconos: Nemesio Martínez Vellón Salvador Otero Misas: Sábados a las 4:00 PM (Inglés) Domingo a las 9:30 AM (Inglés) Domingo a las 11:30 AM (Español) Tienda de Ropa: Septiembre - Junio Miércoles 9:30-12:00 Sábados 9:30-12:00 Centro Urbano: 458-6918 Ministerio Latino: Bruni Martínez Formación de fe: Hmna. Jennifer Lang Casa de Jóvenes: Liz Burke 458-6319 Primera Lectura Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles (5, 12-16) En aquellos días, los apóstoles realizaban muchas señales milagrosas y prodigios en medio del pueblo. Todos los creyentes solían reunirse, por común acuerdo, en el pórtico de Salomón. Los demás no se atrevían a juntárseles, aunque la gente los tenía en gran estima. El número de hombres y mujeres que creían en el Señor iba creciendo de día en día, hasta el punto de que tenían que sacar en literas y camillas a los enfermos y ponerlos en las plazas, para que, cuando Pedro pasara, al menos su sombra cayera sobre alguno de ellos. Mucha gente de los alrededores acudía a Jerusalén y llevaba a los enfermos y a los atormentados por espíritus malignos, y todos quedaban curados. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor. Salmo Responsorial: Den gracial al Señor porque es bueno porque es eterna su misericordia. Lectura del libro del Apocalipsis del apóstol san Juan (1, 9-11. 12-13. 17-19) Yo, Juan, hermano y compañero de ustedes en la tribulación, en el Reino y san en laMarcos perseverancia en Jesús, estaba desterrado en la isla (7, por 1-8.haber 14-15. 21-23)la palabra de Dios y haber dado de Patmos, predicado testimonio de Jesús. Un domingo caí en éxtasis y oí a mis espaldas una voz potente, como de trompeta, que decía: “Escribe en un libro lo que veas y envíalo a las siete comunidades cristianas de Asia”. Me volví para ver quién me hablaba, y al volverme, vi siete lámparas de oro, y en medio de ellas, un hombre vestido de larga túnica, ceñida a la altura del pecho, con una franja de oro. Al contemplarlo, caí a sus pies como muerto; pero él, poniendo sobre mí la mano derecha, me dijo: “No temas. Yo soy el primero y el último; yo soy el que vive. Estuve muerto y ahora, como ves, estoy vivo por los siglos de los siglos. Yo tengo las llaves de la muerte y del más allá. Escribe lo que has visto, tanto sobre las cosas que están sucediendo, como sobre las que sucederán después”. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor. Aleluya, aleluya. Tomás, tú crees, porque me has visto. Dichosos los que creen sin haberme visto, dice el Señor. Aleluya. † Lectura del santo Evangelio según san Juan (20, 19-31) Al anochecer del día de la resurrección, estando cerradas las puertas de la casa donde se hallaban los discípulos, por miedo a los judíos, se presentó Jesús en medio de ellos y les dijo: “La paz esté con ustedes”. Dicho esto, les mostró las manos y el costado. Cuando los discípulos vieron al Señor, se llenaron de alegría. De nuevo les dijo Jesús: “La paz esté con ustedes. Como el Padre me ha enviado, así también los envío yo”. Después de decir esto, sopló sobre ellos y les dijo: “Reciban al Espíritu Santo. A los que les perdonen los pecados, les quedarán perdonados; y a los que no se los perdonen, les quedarán sin perdonar”. Tomás, uno de los Doce, a quien llamaban el Gemelo, no estaba con ellos cuando vino Jesús, y los otros discípulos le decían: “Hemos visto al Señor”. Pero él les contestó: “Si no veo en sus manos la señal de los clavos y si no meto mi dedo en los agujeros de los clavos y no meto mi mano en su costado,no creeré”. Ocho días después, estaban reunidos los discípulos a puerta cerrada y Tomás estaba con ellos. Jesús se presentó de nuevo en medio de ellos y les dijo: “La paz esté con ustedes”. Luego le dijo a Tomás: “Aquí están mis manos; acerca tu dedo. Trae acá tu mano, métela en mi costado y no sigas dudando, sino cree”. Tomás le respondió: “¡Señor mío y Dios mío!” Jesús añadió: “Tú crees porque me has visto; dichosos los que creen sin haber visto”. Otras muchas señales milagrosas hizo Jesús en presencia de sus discípulos, pero no están escritas en este libro. Se escribieron éstas para que ustedes crean que Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios, y para que, creyendo, tengan vida en su nombre. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús. Domingo de Divina Misericordia – Aleluya! Aleluya! Aleluya! ¡Jesús ha resucitado de entre los muertos! ¡Aleluya! Nosotros tendremos muchas oportunidades para celebrar y refleccionar en el bello y el podereroso amor de Jesús durante nuestra época de Pascua. Hoy, en una manera especial, celebramos el Domingo de la Divina Misericordia que cae en el Domingo que precede al Domingo de Pascua.. Está dedicado a la devoción de la Divina Misericordia promovido por Santa Faustina y es basado en una entrada en el diario de Santa Faustina. De acuerdo a las notas de Santa Faustina, Jesús hizo las siguientes citas sobre este día: “En ese dia lo mas profundo de mi tierna misericordia estará abierto. Yo derramaré todo un océano de gracias sobre aquellas almas que se acerquen a la fuente de mi misericordia. El alma que valla a confesión y reciva la santa comunión obtendrá la total absolución de sus pecados y castigos. En ese día se abrirán todos los portones divinos a través de las cuales fluye la gracia. “Que ningun alma tema el acercarse a mi, aún cuando sus pecados sean oscuros.” Mi misericordia es tan grande que ni hombre ni ángel sera capaz de penetrar a travéz de toda la eternidad. (diario de Santa Faustina, 699) Misericordia, en su definición más simple, significa tener compasión por los demás. Jesús es el más preciado regalo de misericordia que nuestro Padre nos ha dado. Jesús vivió éste regalo de misericordia a través de su vida y en todo el perdón que dió y las curaciones que fueron echas. Este preciado regalo de misericordia continua siendo dado a través de la Cruz y la Resurrección de Jesús. Cuando nuestro Señor estaba muriendo en la Cruz, El nunca paró de dar su misericordioso amor amor a aquellos a su alrededor. El oró por sus perseguidores: Señor perdónalos, porque no saben lo que hacen (Lucas,23:34). El dió el regalo de paz al ladrón crucificado a su lado: En verdad te digo que hoy mismo estaras en el paraiso (Lucas 23:43). El atendió a su madre desde la Cruz, y nos la dió como nuestra madre bendita: ¡“Mujer, ahí tienes a tu hijo….hijo, ahí tienes a tu madre”! (Juan 19:2627) La Resurrección nos ha enseñado no tan solo que el amor de Cristo era mas poderoso que el pecado y la muerte, pero más poderoso que nuestros pecados y nuestra propia muerte. Su resurrección fue por nosotros, no tan solo por si mismo. El resusitó a la vida eterna para poder estar con nosotros por siempre y debemos responder al amor de Dios reconociendo nuestra continua necesidad de la misericordia de Dios y extendiendo esa misericordia a los demás como mejor podamos. ¿Como vivimos la misericordia de Dios como seguidores de Jesús? Recibimos los sacramentos regularmente, oramos diariamente, leemos y aprendemos de las escrituras, tratamos de extender la misericordia a los demás y aprendemos de los demás. Jesús es el máximo ejemplo de misericordia. Los apóstoles, sus fieles seguidores, también pueden inspirarnos. Nuestra jornada espiritual a través de la época de Pascua nos lleva a Pentecostés cuando los discipulos y nuestra bendita Madre se reunieron en en el cuarto alto y les fué dado el regalo del Espíritu Santo. A través de las próximas semanas aprenderemos más sobre estos seguidores especiales de Jesús en la esperanza de que nosotros también podamos ser instrumentos del amor y la misericordia de Dios….¡Aleluya! -PadreTony Avisos Misa en la capilla todos los martes a las 7:00 pm Círculo de Oración Todos los miércoles a las 7:00 pm En el Centro Urbano Hora Santa Todos los viernes a las 6:30 pm en la capilla