1 ¿Qué es el cambio climático? Una introducción para los jóvenes Europe Direct es un servicio que le ayudará a encontrar respuestas a sus preguntas sobre la Unión Europea Número de teléfono gratuito (*) : 00 800 6 7 8 9 10 11 (*) Algunos operadores de telefonía móvil no autorizan el acceso a los números 00 800 o cobran por ello. Más información sobre la Unión Europea, en el servidor Europa de Internet (http://europa.eu). Al final de la obra figura una ficha bibliográfica. Luxemburgo: Oficina de Publicaciones de la Unión Europea, 2009 ISBN 978-92-79-09545-0 doi 10.2779/62566 © Comunidades Europeas, 2009 Reproducción autorizada, con indicación de la fuente bibliográfica Printed in Belgium IMPRESO EN PAPEL RECICLADO QUE HA RECIBIDO LA ETIQUETA EUROPEA PARA EL PAPEL GRÁFICO (www.ecolabel.eu) ÍNDICE ¿Qué es el cambio climático ? 4 Las causas del cambio climático 4 El efecto invernadero 4 ¿Cómo trabajan los climatólogos? 5 Los gases de efecto invernadero que producimos 6 El clima está cambiando 7 El cambio climático y sus efectos 8 ¿Cómo frenar el cambio climático? 12 Cómo están colaborando los gobiernos El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de las Naciones Unidas La Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático El Protocolo de Kioto 12 ¿Y yo qué puedo hacer? 12 13 13 14 La necesidad de un nuevo acuerdo mundial sobre el clima La lucha de la UE contra el cambio climático Avances de la UE 16 17 18 El régimen comunitario de comercio de derechos de emisión 18 Reducir las emisiones es bueno para la economía Tenemos que adaptarnos al cambio climático 20 21 4 ¿Qué es el cambio climático ? El cambio climático ya es un hecho y su impacto sobre todos nosotros va en aumento. ¿Has notado en tu país o has visto en la televisión que el clima se ha vuelto más extremo? ¿Te da la impresión de que hace más calor en invierno y nieva menos, pero llueve más? ¿Te parece que la primavera se adelanta un poco más cada año, y que las flores y los pájaros aparecen antes? Todos estos son síntomas de la aceleración del cambio climático o, como también se denomina, del calentamiento global. Si no tomamos medidas para frenarlo, es casi seguro que durante este siglo el calentamiento global cambiará de forma radical nuestro mundo y alterará nuestra forma de vida. La existencia de millones de personas puede estar en peligro. Las causas del cambio climático El clima cambia a causa del modo en que vivimos hoy en día, especialmente en los países más ricos y económicamente desarrollados —entre los que se incluye la Unión Europea—. Las centrales que producen energía para que tengamos electricidad y podamos calentar nuestros hogares, los coches y aviones con los que viajamos, las fábricas que crean los productos que compramos y las granjas que producen nuestros alimentos contribuyen al cambio climático al desprender lo que se conoce como «gases de efecto invernadero». El efecto invernadero Nuestra atmósfera funciona como una capa transparente y protectora que envuelve la Tierra, permite el paso de los rayos de sol y retiene el calor. Si no existiera la atmósfera, el calor del sol rebotaría inmediatamente de la superficie de la Tierra hacia el espacio. Si esto sucediera, en la Tierra habría una temperatura 30 ° C inferior a la actual, de manera que todo se congelaría. Por tanto, la atmósfera funciona como las paredes de cristal de un invernadero: de ahí que se hable del «efecto invernadero». Los gases de efecto invernadero que hay en la atmósfera y que atrapan el calor son los responsables de este efecto. 5 Concentraciones atmosféricas de dióxido de carbono (CO2). Curva de Mauna Loa o curva de Keeling CO2 atmosférico Concentración (ppm) ¿Cómo trabajan los climatólogos? La climatología moderna supone el estudio del pasado, la observación e interpretación del presente y el uso de esta información puede ayudar a predecir lo que sucederá en el futuro. Los científicos emplean una variedad de fuentes sorprendentes para averiguar las condiciones climatológicas del pasado. Por ejemplo, realizan perforaciones en la parte superior de los casquetes polares hasta el lecho rocoso y extraen cilindros de hielo denominados «testigos de hielo». En la Antártida, un equipo de investigadores europeos extrajo testigos de hielo desde una profundidad de más de 3 km que no habían tenido contacto con la luz ni el aire durante ¡más de 900 000 años! La propiedades físicas del hielo y el aire contenido en pequeñas burbujas indican a los investigadores cómo eran el clima y la atmósfera en esa época. Otras fuentes que nos dan más pistas sobre el pasado son los anillos de los árboles y los corales de épocas remotas, las estalagmitas, y el polen, semillas y hojas de tiempos pretéritos. Basándonos en estos estudios, sabemos que las glaciaciones se han alternado con períodos más cálidos y que las temperaturas medias en la Tierra han variado entre los 9 ° C y los 22 ° C aproximadamente (la media actual de la temperatura mundial está en 15 ° C). Estas fluctuaciones se deben a causas naturales, como variaciones del eje y de la órbita de la Tierra en torno al sol, cambios en la actividad solar y erupciones volcánicas (que pueden impulsar polvo hacia la atmósfera, impidiendo temporalmente la llegada de parte del calor solar). Durante los últimos 8 000 años, el clima se ha mantenido bastante estable, con pequeñas variaciones de menos de 1 ° C por siglo. Estas condiciones tan estables han permitido que la sociedad y los ecosistemas que conocemos hoy se desarrollen. Sin embargo, Fuente: NOAA Earth System Research Laboratory, 2007. actualmente se registra un rápido aumento de las temperaturas, en un fenómeno de calentamiento sin precedentes al menos en los últimos 1 000 años (según algunos estudios, 2 000 años), que no se debe solo a causas naturales. De hecho, las concentraciones actuales de CO2 y metano en la atmósfera son las más elevadas de los últimos 650 000 años, como mínimo. Gran parte de la información descubierta por los científicos se usa para predecir las condiciones climatológicas futuras y los efectos del cambio climático. Esto se realiza a través de modelización y simulación por ordenador. Pero no hablamos de ordenadores normales: los ordenadores que se emplean para prever el futuro dentro de 100, 200 o 300 años son complejos sistemas que pueden procesar gran cantidad de variables. Los científicos todavía no saben hasta qué punto exactamente es sensible nuestro clima al aumento de las concentraciones de gases de efecto invernadero, es decir, qué concentraciones son las que desencadenan un cambio de temperatura. Esto también depende de otros factores como la contaminación atmosférica y la formación de nubes. Por esta razón, los científicos llevan a cabo simulaciones basadas en distintos supuestos, en relación, por ejemplo, con la cantidad de combustible fósil que consumiremos en el futuro, la evolución de la cifra de población mundial y el desarrollo de las economías. Por esta razón, todas las previsiones para el futuro desarrollo del clima ofrecen un intervalo de valores. 6 El efecto invernadero Parte de la energía es reflejada y vuelve a salir al espacio La energía procedente del sol atraviesa la atmósfera La superficie de la Tierra se calienta con el sol e irradia calor hacia el espacio Los gases de efecto invernadero de la atmósfera atrapan parte del calor Los gases de efecto invernadero que producimos El principal gas de efecto invernadero producido por las actividades del ser humano es el dióxido de carbono (CO2), que supone un 82 % de todas las emisiones de gases de efecto invernadero de los 27 Estados miembros de la Unión Europea. El dióxido de carbono se emite cuando se queman combustibles fósiles: carbón, petróleo y gas natural. Los combustibles fósiles siguen siendo la fuente de energía más habitual: se utilizan para producir electricidad y calor, y para propulsar nuestros automóviles, barcos y aviones. Fuente: Gobierno de Canadá: Climate Change Website El Fuente: Imagen: V. Novikov (tomada en el verano de 2006); datos facilitados por la Agencia de Hidrometeorología de Tayikistán La mayoría de los gases de efecto invernadero se producen de forma natural. Sin embargo, desde la Revolución Industrial del siglo XVIII, la humanidad también ha estado generando gases de efecto invernadero en cantidades cada vez mayores. Como consecuencia, la concentración de gases en la atmósfera es la mayor observada en los últimos 650 000 años. Por este motivo, el efecto invernadero se intensifica, con lo que aumentan las temperaturas en la Tierra y se provoca un cambio en el clima. La mayoría ya conocemos el dióxido de carbono por los refrescos —las burbujas de las bebidas carbonatadas y de la cerveza son en realidad burbujas de CO2—. También es fundamental para el proceso de la respiración: los seres humanos absorbemos oxígeno y producimos dióxido de carbono, mientras que los árboles y las plantas absorben CO2 para producir oxígeno. Por esta razón, los bosques del planeta son muy importantes, ya que ayudan a absorber parte del exceso de CO2 que generamos. Aun así, la deforestación (la tala y explotación ilegal de la madera y la quema de los bosques) se practica en gran parte del mundo, por lo que los bosques tropicales están desapareciendo mucho más rápidamente que otros tipos de bosques, a un ritmo istán) (Tayik r i m de 10 millones de hectáreas al el Pa ra d año. e l l i d cor n la e o nk he c ed glaciar Fedchenko rF a i c a gl el d so del flujo Dirección glaciar ce o tr re 7 Cu Cuando ua see ttalan o queman bosques, estos liberan CO2 a la atmósfera. Se estima que la d deforestación e provoca alrededor del 20 % del total de emisiones de gases de efecto invernadero. Por lo tanto, frenar el proceso es una prioridad importante. inv Otros de los gases de efecto invernadero generados por las actividades del ser humano son el metano y el óxido nitroso, que son parte de los gases invisibles producidos por los vertederos, las explotaciones ganaderas, el cultivo del arroz y determinados métodos agrícolas de fertilización. También fabricamos artificialmente algunos gases como los llamados gases fluorados, que se usan en sistemas de refrigeración, aire acondicionado e incluso en el calzado deportivo. Los gases fluorados consiguen llegar hasta la atmósfera a través de escapes en los aparatos o cuando estos reciben un tratamiento inadecuado una vez desechados. El clima está cambiando El cambio climático ya ha comenzado. Desde 1850, la temperatura media mundial ha aumentado en 0,76 ° C. La temperatura media en Europa ha subido aún más, casi 1 ° C, registrándose los aumentos más rápidos durante los últimos 30 años. En todo el mundo, 12 de los últimos 14 años han sido los más calurosos «de la historia» (es decir, desde 1850, cuando se fabricaron los primeros instrumentos capaces de medir las temperaturas con un índice aceptable de fiabilidad). Por orden descendente, los tres años más calurosos han sido 1998, 2005 y 2003. 8 Observaciones por satélite de los casquetes polares Hielo marino observado en septiembre de 1979 La tendencia al calentamiento se debe al aumento de las cantidades de gases de efecto invernadero producidas por las actividades del ser humano, y está acelerándose: el ritmo del incremento de las temperaturas ha pasado de 0,1 ° C por década durante los últimos 100 años a 0,2 ° C durante el último decenio. Los expertos en el clima prevén que la temperatura media mundial probablemente continuará aumentando entre 1,8 ° C y 4 ° C adicionales a lo largo de este siglo, aunque se podría llegar a 6,4 ° C en el peor de los casos. Y esto no son más que estimaciones prudentes. Un aumento de la temperatura de esta magnitud podría parecer insignificante si no tenemos en cuenta que durante la última glaciación, que acabó hace 11 500 años, la temperatura media mundial era solo 5 ° C más baja de lo que lo es hoy y, aún así, el hielo polar cubría gran parte de Europa. ¡Unos pocos grados suponen una enorme diferencia para nuestro clima! Hielo marino observado en septiembre de 2003 El cambio climático ya está teniendo repercusiones en Europa y en el resto del mundo. A menos que consigamos controlarlo, podría desencadenar sucesos catastróficos, como la subida del nivel del mar y la carestía de alimentos y agua en algunas zonas del planeta. El cambio climático afectará a todos los países, si bien los países en vías de desarrollo son los más vulnerables, ya que a menudo dependen de actividades muy sensibles al clima, como la agricultura, y no cuentan con los medios económicos para adaptarse a las consecuencias del cambio climático. Afortunadamente, sin embargo, todavía estamos a tiempo de poner el freno al cambio climático si actuamos con rapidez. Además, cada día sabemos mejor cómo cada uno de nosotros puede contribuir a ese objetivo. Fuente: Evaluación del impacto climático en el Ártico (ACIA), 2004. «Impacts of a Warming Arctic». El cambio climático y sus efectos Gráficos vitales del Ártico Población y patrimonio mundial en nuestras últimas costas vírgenes • Los casquetes polares se están derritiendo. La zona marina cubierta por el hielo del Ártico en el Polo Norte ha disminuido en un 10 % en las últimas décadas y el grosor del hielo que flota sobre el agua se ha reducido en aproximadamente un 40 %. Al otro lado del planeta, la capa de hielo que cubre el continente antártico se ha vuelto inestable. • Los glaciares están desapareciendo en todo el mundo. Desde 1850, los glaciares de los Alpes han perdido dos tercios de su volumen, y el ritmo de estas pérdidas se ha acelerado visiblemente desde los años 80. Los administradores de la estación de esquí suiza de Andermatt han tapado el glaciar de Gurschen, una famosa zona de esquí, con una enorme capa de plástico aislante durante el verano, a fin de evitar que se derrita y se deslice ladera abajo. 9 e) emisferio nort os 1 000 años (h m 0 años ti 10 úl s os lo e im nt dura e los próx nt ra du to is Temperaturas ev pr la temperatura y aumento de (° C) respecto la temperatura Desviaciones en a la media de 1961 a 1990 a, 2000bal media previst Temperatura glo acuerdo con diversas de tos) y 2100, calculada pun de as C (líne hipótesis del IPC resultados (gris). gama total de nstruidas. Temperaturas reco anillos de de Datos extraídos coral y testigos de s cife arre , árboles os suavizados de hielo (azul), datde error (gris). (negro) y margen por Datos registrados o). termómetros (roj Años Ambiente ropea de Medio Eu Fuente: Agencia • A la vez que se derriten los casquetes polares, el nivel del aagua del mar se eleva al doble de velocidad que hace 50 aaños. En 2003, los científicos descubrieron que el nivel del mar estaba aumentando 31 centímetros por siglo d y que este ritmo podría doblarse de nuevo a lo largo de los próximos 100 años, con lo que el nivel global d del mar aumentaría hasta en 88 centímetros en el año d 22100. De esta manera, se inundarían las islas y zonas ccosteras de baja altitud, como las Maldivas, el delta del Nilo en Egipto y Bangladesh. En Europa, el aumento N p podría ser de un 50 % adicional, lo que pondría en peliggro de inundación hasta a 1,6 millones de habitantes de las zonas costeras en el año 2080. Alrededor de un 20 % de los humedales costeros podría desaparecer por la misma época y se acentuaría la erosión de la costa atlántica, que ya está retrocediendo a un ritmo cercano a 1 metro al año. Lejos de la costa, el agua del mar penetraría, contaminando el suelo agrícola y el abastecimiento de agua dulce. G • La inmensa capa de hielo de Groenlandia ha comenzado a derretirse: está perdiendo al menos 100 000 millones de toneladas de hielo al año y esto está provocando la subida del nivel del mar. Si la capa de hielo se derritiese por completo, cosa que probablemente tardará muchos siglos en suceder, el nivel del mar podría crecer hasta 7 metros. • Se espera que el cambio climático aumente la intensidad y/o frecuencia de las rachas de clima extremo, como los temporales, inundaciones, sequías y olas de calor. Alrededor del 90 % de todos los desastres naturales registrados en Europa desde 1980 han sido provocados directa o indirectamente por el tiempo y el clima. La media anual de desastres de este tipo en Europa aumentó alrededor de un 65 % entre 1998 y 2007 con respecto a los años 80. Estos desastres no solo provocan grandes daños, sino que además encarecen los costes del seguro de las viviendas y de otros tipos de propiedad. • Desde 1990, Europa ha sufrido casi 260 inundaciones fluviales importantes, incluidas las catastróficas crecidas de los ríos Danubio y Elba en el verano de 2002. Desde 1998, las inundaciones han costado la vida a más de 700 personas en el continente, han obligado a desplazarse a otro medio millón y han costado al menos 25 000 millones de euros. Aunque todavía no hay pruebas de que hayan sido provocadas directamente por el cambio climático, conforme avanza el calentamiento global se prevé que la frecuencia e intensidad de las inundaciones aumente en gran parte del continente. 10 Anteriormente: • Conferencia de Estocolmo sobre el medio humano, 1972 • Primera Conferencia Mundial sobre el Clima. Ginebra, 1979 Se crea el IPCC El Protocolo de Kioto, fechas clave e historia Glosario de acrónimos GEI: Gases de efecto invernadero CMNUCC: Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático IPCC: Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático COP: Conferencia de las Partes (= países que han ratificado un convenio) CMP: Reunión de las partes que han ratificado el Protocolo de Kioto Conferencia de Toronto sobre el Cambio Atmosférico El análisis de estas pruebas apunta humana discernible sobre el sistem El planeta parece estar calentándose Las actividades del ser humano parecen ser las responsables Se necesita más tiempo para confirmar estas dos suposiciones La Asamblea General de la ONU declara el cambio climático «preocupación común de la humanidad» Primer informe del IPCC Cumbre de la Tierra, Río de Janeiro La CMNUCC queda abierta a la firma Segundo informe del IPPC CMNUCC COP 1 Berlín Protocolo Objetivo g de gases d Principio de gases d Conferencia de Kioto (COP3) La CMNUCC entra en vigor Negociaciones intensivas • El agua ya escasea en muchas regiones del mundo. Casi una quinta parte de la población mundial, 1 200 millones de personas, no tiene acceso a agua potable. Si las temperaturas mundiales aumentan 2,5 ° C por encima de los niveles preindustriales (es decir, alrededor de 1,7 ° C por encima de los niveles actuales), probablemente otros 2 400-3 100 millones de personas en todo el mundo sufrirán las consecuencias de la escasez de agua. • Se prevé que el calentamiento global hará aumentar la producción mundial de alimentos mientras se mantenga en la franja entre 1,5-3,5° C por encima de la temperatura preindustrial (0,7 ° C-2,7 ° C sobre la temperatura media mundial actual); rebasado ese límite, la producción de alimentos disminuirá. A pesar de que el período vegetativo se ha alargado en el norte de Europa, el hecho de que algunos cultivos y plantas florezcan y maduren antes aumenta el riesgo de daños a causa de heladas primaverales tardías. En cambio, en algunas zonas del sur de Europa, el período vegetativo se está acortando. • Es posible que se propaguen enfermedades tropicales como la malaria y el dengue debido a la expansión de las zonas en las que las condiciones climáticas son más propicias para los mosquitos, las garrapatas y los tábanos que las portan. El mosquito tigre, que puede transmitir diversas enfermedades, ha extendido considerablemente su área de acción en Europa durante los últimos 15 años y actualmente está presente en 12 países. Un estudio ha estimado que entre 5 000 y 6 000 millones de personas podrían correr el riesgo de contraer el dengue en el año 2080 a causa del cambio climático y del crecimiento de la población. • Una ola de calor ocurrida en varias zonas de Europa en el verano de 2003 contriue prematura de más de 70 000 personas, causó incendios forestales buyó a la muerte n el su a gran escala en sur del continente y provocó pérdidas en los sectores agrícola y restta por un n vvalor de 10 000 millones de euros. A partir de 2070 aproximadaforestal entee, Europaa p mente, podría experimentar olas de calor similares cada dos años. CM En B par a a una «influencia ma climático del planeta» o de Kioto: general de reducción de las emisiones CMNUCC COP 7, Marrakech de efecto invernadero: -5 % para 2012 Se aprueban las reglas de Kioto del comercio de derechos de emisión de efecto invernadero Pruebas científicas del calentamiento global NUCC COP 4, Buenos Aires. Buenos Aires se lanza un plan de acción ra desarrollar las reglas de Kioto Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible, Johannesburgo Tercer informe del IPPC Cuarto informe del IPCC: • El calentamiento global es un hecho inequívoco y sus efectos comienzan a percibirse • Si no se toman medidas, la temperatura mundial podría aumentar en hasta 6,4 ° C para el 2100 • Reducir drásticamente las emisiones mundiales es factible y asequible El protocolo de Kioto entra en vigor CMNUCC COP 11/ Kioto CMP 1, Montreal: se inician las conversaciones sobre el plan de acción internacional posterior a 2012 11 CMNUCC COP 13/ Kioto CMP 3, Bali: iniciadas las negociaciones formales para concluir a finales de 2009 los acuerdos sobre el clima posteriores a 2012. Las instituciones de la UE aprueban un paquete de ambiciosas medidas sobre el cambio climático y la energía • El cambio climático está empezando a reducir el atractivo de muchos de los principales destinos turísticos del Mediterráneo, y a la vez mejorando el de otras regiones. Las previsiones indican que el Mediterráneo será menos adecuado para el turismo en verano, lo que motivará un desplazamiento del turismo veraniego hacia otras zonas de Europa. • A medida que Europa se calienta, los pájaros, los insectos, los animales y las plantas se desplazan hacia el norte y a terrenos más altos. Pero sigue existiendo un alto riesgo de que muchas especies no resistan el ritmo del cambio climático o que las carreteras, poblaciones y otros tipos de construcciones realizadas por el ser humano y que dividen los espacios naturales les impidan el avance. Otro estudio ha llegado a la alarmante conclusión de que el cambio climático podría llevar a la extinción de un tercio de las especies de la Tierra para el año 2050. Los mamíferos y las aves de las zonas polares, como los osos polares, las focas, las morsas y los pingüinos, son especialmente vulnerables. • A largo plazo, la generalización del cambio climático podría desatar conflictos regionales, hambrunas y movimientos de refugiados cuando las fuentes de alimentos, agua y energía escaseen. En todo el mundo, hasta 1 000 millones de «refugiados del cambio climático» podrían verse obligados a abandonar sus hogares y necesitarán ayuda, especialmente por parte de los países más ricos. • Otra de las hipótesis más pesimistas apunta a que los cambios en las temperaturas oceánicas causarán el bloqueo de la Corriente del Golfo que arrastra torrentes de aguas cálidas hacia el norte, en dirección al Atlántico. Si bien es improbable que esto suceda durante el siglo XXI, los científicos están de acuerdo en que en el norte de Europa se invertiría la tendencia al calentamiento y el clima se volvería mucho más frío (1). (1) Muchos de estos datos se han tomado de dos informes principales: el Cuarto Informe de Evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos en el Cambio Climático (IPCC), disponible en: http://www.ipcc.ch/ipccreports/ ar4-syr.htm y el informe «Impacts of Europe’s changing climate-2008 indicator-based assessment» producido conjuntamente por la Agencia Europea de Medio Ambiente, el Centro Común de Investigación de la Comisión Europea y la Oficina Regional en Europa de la Organización Mundial de la Salud, disponible en: http://reports.eea.europa.eu/eea_report_2008_4/en 12 ¿Cómo frenar el cambio climático? En pocas palabras: tenemos que reducir las emisiones de gases de efecto invernadero que lanzamos a la atmósfera. Algunos gases tienen larga vida, lo que significa que permanecen en la atmósfera durante décadas o incluso más tiempo. Aun tomando medidas enérgicas a partir de ahora, las temperaturas continuarán incrementándose durante un tiempo. Sin embargo, si no actuamos en este momento, las temperaturas aumentarán aún más y, en un futuro, la evolución del clima podría escapar a nuestro control. Para reducir nuestras emisiones de gases de efecto invernadero harán falta inversiones y cambios en los métodos que empleamos para producir y utilizar la energía. Sin embargo, algunos estudios recientes han descubierto que el precio de quedarse cruzados de brazos sería mucho mayor debido a los daños y al sufrimiento que provocaría un cambio climático descontrolado. El cambio climático no desaparecerá inmediatamente, pero cuanto antes nos concienciemos todos y tomemos medidas, mejor podremos controlar nuestro destino, vivir cómodamente y proteger toda la belleza y diversidad de nuestro planeta para la posteridad. Cómo están colaborando los gobiernos En los años 80, los signos del cambio climático eran cada vez más evidentes, al tiempo que una serie de conferencias internacionales intensificaba la sensibilización internacional en torno a la cuestión. Los gobiernos se dieron cuenta de la gran amenaza que suponía el cambio climático y de que debían hacer algo al respecto. También comprendieron que tenían que colaborar para tener alguna posibilidad de éxito: el cambio climático es una cuestión de interés mundial porque afectará a todos los países y porque todos contribuyen, en diferente medida, a las emisiones de gases de efecto invernadero. Así que ningún país puede resolver el problema por su cuenta. El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de las Naciones Unidas En 1988, las Naciones Unidas crearon el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), que reúne a miles de científicos de todo el mundo. Su misión es evaluar las investigaciones y los conocimientos existentes acerca del cambio climático y sus efectos, además de proporcionar informes exhaustivos periódicamente. Son necesarios varios años para la preparación de cada uno de estos informes. El más reciente, publicado en 2007 y conocido como el Cuarto Informe de Evaluación, llegó a la firme conclusión de que las 13 concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera han aumentado principalmente como consecuencia de las actividades del ser humano, y lanzó una seria advertencia sobre las consecuencias si no se toman medidas. El IPCC, junto con el ex vicepresidente de Estados Unidos Al Gore, ganaron el premio Nobel de la Paz en 2007 por su labor de difusión pública de los conocimientos acerca del cambio climático. La concesión del premio de la Paz señala cómo el cambio climático está empezando a percibirse como una amenaza para la seguridad de la raza humana. La Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático En 1992, los gobiernos acordaron la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC). Este acuerdo internacional ha sido suscrito por 191 países además de la Unión Europea —casi todos los países del mundo—. El objetivo de la Convención es estabilizar las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera en un nivel en el que se impidan interferencias peligrosas con el sistema climático provocadas por el hombre. De acuerdo con la Convención, los gobiernos realizan un seguimiento e informan acerca de los gases de efecto invernadero que producen, desarrollan estrategias contra el cambio climático y ayudan a los países más pobres a hacer frente al cambio climático. Se reúnen una vez al año para examinar los progresos y decidir cuáles serán las siguientes acciones. La Convención fue concebida como marco general que brinda la posibilidad de acordar nuevas acciones en el futuro. El Protocolo de Kioto En 1997, en la ciudad japonesa de Kioto, los gobiernos dieron un paso más y acordaron el significativo Protocolo de Kioto. Mediante dicho tratado, los países industrializados se comprometen a reducir o limitar sus emisiones de gases de efecto invernadero y a alcanzar determinados objetivos de reducción de las emisiones para el año 2012. El Protocolo de Kioto se centra en los países industrializados por ser los responsables de la mayoría de las emisiones de gases de efecto invernadero en el pasado y en la actualidad, y por poseer los conocimientos y recursos económicos necesarios para reducirlas. Por ejemplo, la cantidad de gases de efecto invernadero producidos en la UE es de unas 11 toneladas por habitante al año, mientras que los países en vías de desarrollo producen únicamente alrededor de 1 tonelada por habitante al año. 14 ¿Y yo qué puedo hacer? Aunque el cambio climático es un problema mundial, cada uno de nosotros puede contribuir a los objetivos fijados. Pequeños cambios en nuestro comportamiento pueden servir para economizar energía y recursos y ayudar a prevenir la emisión de gases de efecto invernadero sin afectar a nuestra calidad de vida. De hecho, hasta podemos ahorrar dinero. con las potentes lámparas halógenas de pie que dirigen la luz hacia el techo, ya que consumen mucha energía. Los hogares son los responsables del 30 % del consumo eléctrico en la UE, así que la situación cambiará bastante si todos ahorramos electricidad. • Recicla. Reciclar una lata de aluminio y fabricar otra con el material recuperado requiere una décima parte de la energía necesaria para fabricar una lata con materia prima no reciclada. Las fábricas de papel usan mucha menos energía para crear papel a partir de periódicos usados que utilizando pasta de madera. • Cuando tengas que cambiar una bombilla, compra una de bajo consumo: aunque sean más caras, duran mucho más tiempo y consumen aproximadamente cinco veces menos electricidad que las bombillas convencionales, de manera que al final te permiten ahorrar mucho dinero. • Evita alimentos que necesiten gran cantidad de agua y energía para ser producidos o transportados, como las carnes y comidas procesadas. • Usa agua embotellada con moderación. En primer lugar, es miles de veces más cara que el agua del grifo. Por otra parte, en Europa el agua del grifo reúne todas las garantías sanitarias y, además, se puede filtrar para purificarla más aún si se desea. La producción y comercialización de agua embotellada consume energía y, en algunos países, muchas botellas de plástico acaban desechadas como basura que no se recicla. • Cuando te prepares una bebida caliente, hierve solo la cantidad de agua que necesites. ¡No llenes el recipiente hasta el borde si no es necesario! • Ahorra agua caliente dándote una ducha en vez de un baño —así usas cuatro veces menos energía—. • No olvides apagar las luces cuando no las necesites. Esto es especialmente importante • No dejes la televisión, el equipo de música o el ordenador en espera (la posición en la que se queda encendida una lucecita). Como norma general, un aparato de televisión consume un 45 % de energía cuando está en espera. Si todos los europeos evitasen dejar sus aparatos en espera, se ahorraría la electricidad suficiente para abastecer de energía a un país del tamaño de Bélgica. • Tampoco te dejes el cargador del móvil enchufado a la corriente una vez que hayas terminado de cargar el teléfono, ¡porque sigue consumiendo electricidad aunque el teléfono no esté conectado! • Ahora existen muchas empresas que proveen electricidad a partir de energía renovable u otras fuentes «verdes». Pide a tus padres que se cambien a un proveedor de energía ecológica si todavía no lo han hecho. Y si vives en un clima soleado, pídeles que instalen paneles solares. • Si tus padres o tú compráis un nuevo electrodoméstico, por ejemplo un frigorífico o una lavadora, asegúrate de que tiene la etiqueta europea de eficiencia energética «A» 15 (o «A++» para los frigoríficos), obligatoria para todos los electrodomésticos. Estas etiquetas significan que el aparato utiliza energía de manera muy eficiente. • Si la ropa no está muy sucia, usa el ciclo económico de la lavadora. Y cuando haga calor y el tiempo sea seco, tiende la ropa al aire libre en lugar de usar una secadora eléctrica. • Aproximadamente un tercio del agua que usamos en casa acaba literalmente tirada por el retrete. Así que intenta tirar de la cadena con menos frecuencia y usa el botón para la descarga más breve cuando sea posible, o reduce la capacidad de la cisterna de tu inodoro. • Recoge el agua de la lluvia para regar las plantas del jardín o lavar el coche. Con esto puedes ahorrar hasta el 50 % del agua que consumes en casa. • No dejes correr el grifo mientras te lavas los dientes o friegas los platos y usa grifos con difusor para ahorrar el 80 % de agua. • Comprueba que tus grifos y tuberías no goteen ni tengan pérdidas y repáralos si es necesario. • Busca productos con la etiqueta ecológica europea, simbolizada con una pequeña flor, en las tiendas y supermercados. La etiqueta significa que esos productos cumplen normas medioambientales estrictas. • No pongas la calefacción demasiado alta en tu casa. Reduciendo la temperatura solo 1 ° C puedes ahorrar hasta un 7 % de las facturas de la luz de tu familia. • Cuando ventiles tu habitación, deja la ventana bien abierta durante unos pocos minutos y luego vuelve a cerrarla, en vez de dejar que se escape el calor durante mucho tiempo. • Los coches particulares son los responsables del 12 % de las emisiones de CO2 en la UE. Usar el transporte público, la bicicleta y caminar son alternativas más baratas y sanas. • Si tus padres están a punto de comprar un coche nuevo, ¡pídeles que compren un modelo pequeño y que consuma combustible de forma eficiente! Pueden ver cuánto CO2 emite cada coche en la información que les proporcionarán en el concesionario. • Para viajes de pocos cientos de kilómetros o incluso menos, coge el autobús o el tren en vez de ir en avión. ¡El transporte aéreo es una de las fuentes mundiales de emisiones de CO2 que más rápidamente está creciendo! • ¡Planta un árbol en tu escuela o en el jardín de tu casa o de tu barrio! Cinco árboles podrán absorber cerca de 1 tonelada de CO2 a lo largo de su vida. • Si vives en un país en el que no llueve mucho, busca plantas de jardín adecuadas al clima y que necesiten menos riego. • Escoge hoteles y lugares de vacaciones que apliquen medidas de protección medioambiental, por ejemplo, limitando el consumo de agua y energía y reduciendo la generación de desechos. Reutiliza las toallas y las sábanas para ahorrar en lavados innecesarios. 16 El Protocolo de Kioto entró en vigor en 2005. A día de hoy, 183 gobiernos, además de la Comunidad Europea, lo han suscrito oficialmente. El Protocolo fija los objetivos de reducción de las emisiones para 37 países industrializados: la mayoría de estos objetivos están encaminados a la reducción en un 5-8 % de las emisiones de gases de efecto invernadero respecto a los niveles de 1990 para el año 2012. Entre los países industrializados, solo Estados Unidos ha decidido no participar en el Protocolo de Kioto. El Protocolo introdujo además varios mecanismos económicos para la cooperación de los diferentes países en la reducción de las emisiones, gracias a los cuales disminuirá el coste necesario para alcanzar los objetivos fijados. El mecanismo para un desarrollo limpio permite a los países industrializados conseguir parte de sus objetivos de reducción invirtiendo en proyectos de ahorro de emisiones en países en vías de desarrollo. A cambio, estos proyectos contribuyen a la transferencia de las nuevas tecnologías a los países más pobres, dando a estos la posibilidad de desarrollarse de una manera menos contaminante. Se trata de la primera inversión medioambiental mundial y del primer sistema de créditos de este tipo. Un mecanismo paralelo, conocido como aplicación conjunta, permite a los países industrializados invertir en este tipo de proyectos en el territorio de otros países industrializados. La necesidad de un nuevo acuerdo mundial sobre el clima El Protocolo de Kioto es un primer paso fundamental en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero. Sin embargo, dadas las previsiones de los científicos que dicen que el calentamiento global continuará acelerándose durante este siglo a menos que se tomen otras medidas, será necesario poner en práctica actuaciones mucho más ambiciosas a partir de 2012, cuando los objetivos de Kioto deberán haberse alcanzado. En diciembre de 2007, tras dos años de conversaciones informales, todos los países signatarios de la CMNUCC decidieron abrir negociaciones oficiales para alcanzar un acuerdo internacional sobre el cambio climático para el período posterior a 2012. En vista de la urgencia del problema, se decidió que el acuerdo debería ultimarse a finales de 2009 en la Conferencia sobre el Cambio climático de las Naciones Unidas en Copenhague, lo que debería dar a los gobiernos el tiempo necesario para aplicar el acuerdo en 2013. Para la Unión Europea es fundamental que el nuevo acuerdo implique la participación de todos los principales países emisores, incluido Estados Unidos, pero también gigantes en desarrollo como China e India. Para el año 2020, se prevé que las emisiones de gases de efecto invernadero de los países en vías de desarrollo en su conjunto superarán a las de los países industrializados. 17 Emisiones de gases de efecto invernadero en la UE Otros 4% Agricultura 10 % Usuarios particulares y pequeñas PYME 17 % Sector energético 28 % Industria 20 % Transporte 21 % Europa también está decidida a garantizar que el acuerdo consiga mantener el calentamiento global en menos de 2 ° C por encima del nivel preindustrial (es decir, alrededor de 1,2 ° C por encima de la temperatura actual). Un aumento mayor conllevaría un riesgo mucho más acentuado de desastres medioambientales y disminución del abastecimiento de alimentos y agua. Para prevenir unos niveles de cambio climático tan peligrosos, será necesario reducir para el año 2050 las emisiones mundiales a menos de la mitad de los niveles registrados en 1990. A pesar de que será un gran reto, la tecnologías necesarias para conseguirlo ya están disponibles o lo estarán en breve, y los costes son asequibles; de hecho, resultan mucho menores de lo que supondría reparar los daños que provocará el cambio climático si no hacemos nada por detenerlo. Fuente: Agencia Europea de Medio Ambiente. La lucha de la UE contra el cambio climático La Unión Europea está a la vanguardia de la lucha mundial contra el cambio climático. Como una de las principales potencias económicas, la UE tiene el deber de predicar con el ejemplo, a pesar de que solo es responsable del 14 % de las emisiones mundiales. La UE está convencida de que podemos reducir nuestra producción de gases de efecto invernadero y al mismo tiempo seguir mejorando el nivel y la calidad de vida de la población. Si bien ambas prioridades no son incompatibles, requerirán cambios en nuestro estilo de vida y en la manera en que producimos y usamos la energía. Considerando lo anterior, en marzo de 2007 los líderes europeos acordaron una estrategia amplia y ambiciosa en relación con la energía y el cambio climático. La estrategia comprende objetivos estrictos: • Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero de la UE en al menos un 20 % para 2020, y en un 30 % si otros países industrializados también colaboran conforme al acuerdo internacional sobre el cambio climático que se está negociando actualmente. • Aumentar el uso de la energía renovable, como la energía eólica y solar (2), hasta que constituya el 20 % del uso energético total en 2020, es decir, más del doble de los niveles actuales. • Ahorrar un 20 % del consumo de energía para 2020 mejorando la eficiencia energética de gran variedad de aparatos y máquinas, como coches, televisores y aparatos de aire acondicionado. (2) Otras formas de energía renovable son la energía hidroeléctrica (electricidad generada por el agua que fluye a través de presas hidráulicas), la quema de biomasa (materia orgánica como madera, residuos de almazara, plantas, excrementos de animales, etc.) y biocombustibles (combustibles creados a partir de plantas o cultivos), la energía geotérmica (calor procedente de manantiales de agua caliente o volcanes), la energía de las mareas y la energía de las olas. 18 En 2008 se acordaron medidas concretas para conseguir estos objetivos, situando a Europa en el camino para convertirse en una economía respetuosa del clima y «baja en carbono». Ahorrar energía y usar más las energías renovables no solo ayudará a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero de la UE, sino que además hará más seguro el suministro europeo de energía y permitirá ahorrar costes gracias a la reducción de la necesidad de importar petróleo y gas de otros países. Avances de la UE A De acuerdo con el Protocolo de Kioto, los 15 países que componían la UE cuando dicho Protocolo fue negociado en 1997 (señalados en color amarillo en el siguiente cuadro) asumieron un objetivo particularmente ambicioso: reducir sus emisiones colectivas de gases de efecto invernadero en 2012 hasta un 8 % por debajo de los niveles que habían alcanzado en un año de base escogido (1990 en la mayoría de los casos). A continuación, acordaron cuánto debería contribuir cada uno al objetivo común, teniendo en cuenta la situación económica y la estructura industrial de cada país. Se decidió que la mayoría tiene que reducir sus emisiones, pero que a algunos se les permite aumentarlas hasta un límite determinado, mientras que otros deben mantener sus emisiones al nivel de 1990. Diez de los doce países que se incorporaron a la UE en 2004 y 2007 (señalados en verde oscuro) poseen objetivos particulares conforme al Protocolo que les obligan a reducir sus emisiones nacionales en un 6 u 8 % dentro de los mismos plazos. Tan solo Chipre y Malta no cuentan con objetivos del Protocolo de Kioto. El régimen comunitario de comercio de derechos de emisión La medida sin duda más importante adoptada en el marco del Programa Europeo del Cambio Climático (PECC) es el régimen comunitario de comercio de derechos de emisión (RCCDE), puesto en marcha a principios de 2005. Siendo el primer régimen internacional de comercio de emisiones de CO2 del mundo, el RCCDE constituye la piedra angular de la estrategia comunitaria para la reducción rentable de las emisiones en sus 27 Estados miembros. Desde el comienzo de 2008, también se incluyen en el RCCDE Islandia, Liechtenstein y Noruega. Actualmente, el régimen se aplica a cerca de 11 000 centrales eléctricas y fábricas que utilizan gran cantidad de energía, equivalente a casi la mitad de las emisiones de CO2 de la Unión. Así funciona el RCCDE: los gobiernos de la UE conceden a cada fábrica o central eléctrica derechos para emitir una cantidad determinada de CO2 al año; los que emitan menos pueden vender las cuotas que no hayan usado a otras fábricas que no hayan tenido tan buenos resultados. De esta forma, se les proporciona un incentivo económico para que reduzcan sus emisiones. Las empresas que excedan sus límites de emisiones y no los cubran comprando derechos de emisión a otras empresas tienen que pagar fuertes multas. El régimen de comercio de derechos de emisión hace disminuir el coste global del recorte de las emisiones garantizando que las reducciones se realizan donde resultan más baratas. Desde 2012, el régimen se ampliará para abarcar las emisiones de los vuelos comerciales que lleguen o salgan de aeropuertos de la UE, y desde 2013 serán efectivos una serie de cambios importantes en el RCCDE para fortalecerlo y hacerlo más efectivo. En 2015, la Unión Europea desea ver una relación entre el RCCDE y otros regímenes similares de comercio de derechos de emisión implantados en otros países desarrollados. 19 Los objetivos de Kioto de los Estados miembros de la UE Países de la UE que comparten el objetivo de reducción del 8 % conforme al Protocolo de Kioto Austria –13 % Bélgica –7,5 % Dinamarca –21 % Finlandia Francia 0% 0% Alemania –21 % Grecia +25 % Irlanda +13 % Italia –6,5 % Luxemburgo –28 % Países Bajos –6 % Portugal +27 % España +15 % Suecia Reino Unido +4 % –12,5 % Países de la UE con objetivos particulares conforme al Protocolo de Kioto A través del PECC, la UE trabaja con los representantes República Checa –8 % de la industria, las asociaChipre ciones de defensa del medio Estonia –8 % ambiente y otros grupos interesados con el objetivo Hungría –6 % de determinar las medidas Letonia –8 % para reducir las emisiones de Lituania –8 % gases de efecto invernadero Malta de manera más rentable. Entre las decenas de medidas Polonia –6 % desarrolladas se incluyen, por Eslovaquia –8 % ejemplo, la mejora de la efiEslovenia –8 % ciencia energética de los ediBulgaria –8 % ficios (un mejor aislamiento puede reducir los costes de Rumanía –8 % la calefacción en un 90 %), la restricción de las fugas de calor y del uso de algunos gases industriales fluora uorados y la limitación de las emisiones producidas por aviones. L medidas did para reducir d i llas emisiones ii tá ttomando los países miembros de Las que están la UE y a escala europea están contribuyendo al progreso hacia la consecución de los objetivos de Kioto. En 2006, las emisiones de los 15 países que componían la UE hasta 2004 se mantuvieron un 2,7 % por debajo de las del año de base elegido (1990 en la mayoría de los casos) y las previsiones de futuras emisiones mostraron que estos países iban por el buen camino para alcanzar el objetivo de la reducción del 8 %. Para los actuales 27 países miembros, la reducción de emisiones alcanzó el 10,8 % en 2006. 20 Reducir las emisiones es bueno para la economía Las iniciativas para combatir el cambio climático ahorrarán dinero a largo plazo, aunque tengamos que hacer inversiones ahora. No podemos quedarnos de brazos cruzados. Un informe de gran repercusión redactado por el economista británico Lord Stern advierte que el cambio climático pasará una factura cada vez mayor a la economía mundial si no conseguimos frenarlo. Según las estimaciones de Stern, el cambio climático costará al menos el 5 % de la producción económica mundial —o producto interior bruto (PIB)— de cada año, y la cifra podría aumentar hasta incluso el 20 % o más a largo plazo. El impacto económico sería similar al de una guerra mundial o al de la crisis económica mundial durante la Gran Depresión de los años 30. Por otra parte, Lord Stern calcula que las medidas necesarias para mantener el cambio climático bajo control costarán aproximadamente solo el 1 % del PIB. Muchas de las tecnologías respetuosas del clima, como las fuentes de energía renovable, ya existen, y otras podrán utilizarse dentro de poco. Por ejemplo, una tecnología muy prometedora permite capturar gran parte del carbono procedente de los combustibles fósiles y enterrarlo en antiguas minas o yacimientos de petróleo para que no llegue a la atmósfera. Esta tecnología se conoce como «captura y almacenamiento del carbono». Otra tecnología también prometedora que, sin embargo, necesita aún una labor de investigación considerable, es la producción de hidrógeno a partir de energías renovables y su uso en «pilas de combustible». La pila de combustible convierte el hidrógeno mezclado con oxígeno en agua y en el proceso produce electricidad. La única sustancia emitida es vapor de agua. Además, el desarrollo de tecnologías respetuosas del clima crea empleo y abre nuevos mercados. Gracias a los regímenes de apoyo a la energía eólica existentes en varios países de la UE, las empresas europeas poseen actualmente el 90 % del pujante mercado mundial de equipos de energía eólica. En Alemania, la introducción de la energía eólica ha creado trabajo para 40 000 personas. El mercado europeo tiene un volumen de negocios de 30 000 millones de euros, empleando en la actualidad a unos 350 000 trabajadores. Elevando en 2020 la cuota de energías renovables hasta el 20 %, como es intención de la UE, se espera que el número de puestos de trabajo aumente en casi 1 millón. El cambio a la economía «baja en carbono» ofrece tremendas oportunidades para la innovación y el crecimiento económico, que son objetivos esenciales de la Unión Europea. Si las empresas europeas se dan prisa en desarrollar nuevas tecnologías respetuosas del clima, obtendrán una ventaja competitiva conforme vaya creciendo la demanda mundial de estas tecnologías. 21 Tenemos que adaptarnos al cambio climático Incluso si tomamos medidas hoy para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y empezamos a decelerar el cambio climático, no podemos impedir muchos de los cambios que ya se están produciendo. Por lo tanto, todos los países necesitan aprender a vivir con el cambio climático y adaptarse a él. La adaptación significa anticiparse a los efectos del cambio climático y tomar medidas para minimizarlos. Si actuamos ahora, nos podremos ahorrar dinero y esfuerzos más adelante. • Conforme aumenten los temporales y suba el nivel del mar, una parte creciente de la población verá sus hogares amenazados por las inundaciones. La nueva normativa comunitaria obliga a los países miembros a evaluar y gestionar el riesgo de inundación. • En los países más cálidos, se pueden desarrollar cultivos que necesiten menos agua o que puedan resistir la sequía. • Construir edificios y ciudades de manera que se ahorre energía y que puedan resistir a temporales, inundaciones y un clima más cálido salvará vidas a largo plazo. El hecho de tener en cuenta el cambio climático a estos efectos se suele conocer como planificación «a prueba de clima». • La industria debe planificar con antelación para adaptarse a las nuevas condiciones. Es necesario tener preparados los servicios médicos y sociales esenciales para las olas de calor y otras situaciones climáticas excepcionales. • El cambio climático pondrá en peligro los recursos de agua dulce. Se calcula que en Europa podríamos reducir la cantidad de agua que usamos en alrededor de un 40 % mediante la innovación tecnológica y evitando el derroche. • A través de su red Natura 2000 para la conservación de los espacios naturales protegidos, la UE tiene intención de contribuir a la adaptación de las especies naturales de Europa a los cambios ambientales. En pocas palabras, los planificadores deben tener en cuenta el probable impacto futuro del cambio climático a la hora de tomar todas sus decisiones y realizar inversiones. Se deberá trabajar en gran medida a escala local debido a las condiciones específicas existentes. La Unión Europea también puede apoyar la adaptación al cambio climático ajustando sus políticas y su ayuda financiera, concretamente pa para los países en vías de desarrollo. 22 Páginas de interés sobre el cambio climático: Comisión Europea, Dirección General de Medio Ambiente http://ec.europa.eu/environment/climat/home_en.htm Comisión Europea: Campaña contra el cambio climático http://ec.europa.eu/environment/climat/campaign/index_es.htm Comisión Europea: En acción por el clima http://ec.europa.eu/climateaction/index_es.htm Agencia Europea de Medio Ambiente http://www.eea.europa.eu/es/themes/climate/intro Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático y Protocolo de Kioto http://unfccc.int/portal_espanol/items/3093.php Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático www.ipcc.ch/ Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente http://www.unep.org/climatechange/ World Wildlife Fund (WWF) http://www.worldwildlife.org/climate/ Greenpeace http://www.greenpeace.org/espana/campaigns/energ-a Comisión Europea ¿Qué es el cambio climático? Una introducción para los jóvenes Luxemburgo: Oficina de Publicaciones de la Unión Europea 2009 — 22 pp. — 21 x 21cm ISBN 978-92-79-09545-0 doi 10.2779/62566 Cómo obtener las publicaciones de la Unión Europea Publicaciones destinadas a la venta • A través de EU Bookshop (http://bookshop.europa.eu/). • En una librería, facilitando el título, el editor y el número ISBN. • Poniéndose directamente en contacto con uno de nuestros agentes de ventas. Puede obtener sus datos de contacto en el sitio web http://bookshop.europa.eu/ o mandando un fax al +352 2929-42758. Publicaciones gratuitas • A través de EU Bookshop (http://bookshop.europa.eu/). • En las representaciones o delegaciones de la Comisión Europea. Puede obtener sus datos de contacto en el sitio web http://ec.europa.eu/ o mandando un fax al +352 2929-42758. Fotografías: pp. 5, 6, 8: Hugo Ahlenius, UNEP/GRID-Arendal p. 6: Gobierno de Canadá p. 7: WWF p. 10-11: Philippe Rekacewicz, UNEP/GRID-Arendal pp. 9, 12, 13, 17: EC pp. 14, 15, 16, 19, 20, 21: iStockphoto p. 22: gettyimages KH-81-08-360-ES-C ISBN 978-92-79-09545-0